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Espectรกculo Invisible
Editorial Así de simple
Texto: Ismael Fernández Fotografía: J. R. Esparza
Todos tenemos demasiadas cosas en los armarios, en los cajones y en la cabeza. Coleccionamos recuerdos, ideas y puntos de vista, a los 40 empezamos a estar cansados y a partir de ahí o rompemos con todo o seguimos adelante porque es difícil saber qué nos mueve, la inercia de la carga o la fuerza motriz de nuestra propia ceguera. Está claro que exceso y desnudez son dos estaciones que se suceden y se relevan continuamente en el paisaje, ajeno a cualquier otra estación, de nuestra vida urbana, tecnificada y consumista. Moda, diseño, decoración, arte, literatura, música… van pasando del barroco al minimalismo, de la extrema riqueza a la extrema pobreza, como en el resto del mundo.
Pero la simplicidad siempre ha estado y siempre estará ahí como la alternativa mas saludable y sabia a cualquier problema, lo sabemos todos, como sabemos perfectamente que la complejidad con la que se nos presenta la realidad, política, social o económica no es mas que el resultado indeseable de la suma de muchos
intereses. Poise, Posture and Patience, dicen los ingleses, que viene a ser algo así como Porte, Actitud y Paciencia. Vale para todo y es uno de los principios mas simples y eficaces para enfrentarse a cualquier situación.
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André Bonnaure, en la revista gastronómica digital 7 Caníbales hace un análisis muy simple de la simplicidad, aplicada en su caso a la cocina que es la madre de todas las culturas. Utilizar un número mínimo de ingredientes eliminando lo superfluo, elegir productos excepcionales y aplicar técnicas perfectas de cocción. Creo que estos mismos principios llevados a otros terrenos deben de producir el mismo resultado, lo sublime. El downshifting, el decrecimiento, el movimiento slow… son una vuelta mas de tuerca a lo que filósofos, pensadores, artistas, jardineros y amantes de la buena cocina llevan siglos pregonando, mas no es mejor. Para nosotros, la simplicidad es la forma en que intentamos ser nosotros mismos, curiosamente, la mas compleja de definir, porque consiste simplemente en dejarse ser.
Para nosotros, la simplicidad es la forma en que intentamos ser nosotros mismos, curiosamente, la mas compleja de definir, porque consiste simplemente en dejarse ser. www.7canibales.com
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No somos nada
Fotografías: Oscar Ruano Texto: Raúl Ruano
El mundo parece desvanecerse en las fotografías de Oscar Ruano. Unas figuras humanas –que nos recuerdan a las esculturas de Giacometti– se diluyen en el paisaje y recrean una atmósfera cercana a las historias apocalípticas de cienciaficción. Se dibuja en ellas un mundo que desaparece. Un mundo que ha tensado en exceso las relaciones con la naturaleza. Un mundo que ha pecado de soberbia tecnológica y productivista. La crisis que padecemos no es sólo la crisis económica. El mundo que captura y recrea Oscar Ruano apunta a una crisis más grave aún, a una crisis ambiental global.
Pero la simplicidad siempre ha estado y siempre estará ahí como la alternativa mas saludable y sabia a cualquier problema, lo sabemos todos, como sabemos perfectamente que la complejidad con la que se nos presenta la realidad, política, social o económica no es mas que el resultado indeseable de la suma de muchos 3
Una crisis que pone en peligro al conjunto de seres vivos y tambiĂŠn la propia existencia humana. Los homo sapiens que aparecen en esta serie de fotografĂas, a modo de guerreros que ya no tienen enemigos a los que enfrentarse, parecen vagar sin rumbo de forma aislada.
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Seres incomunicados que difĂcilmente pueden verse entre sĂ y conversar. Sus gritos apenas son audibles. Sin embargo, algunas de esas voces parecen interpelarnos a cambiar de direcciĂłn, a forjar otra mirada y otro imaginario que nos ayude a escapar de la barbarie. 5
“No somos nada” es el duro título de esta serie de instantáneas. No somos nada mientras sigamos sin conversar, sin juntarnos para trazar nuevas rutas, sin apostar de lleno por un cambio radical de modelo de vida y desarrollo, por un mundo más sostenible.
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“No somos nada” Oscar Ruano
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África se expone
Texto: Ismael Fernández Fotogragía: Belén Imaz “Mujeres Turkanas”
La galerista AINA NOWACK reúne a 6 artistas para exponer una realidad que se nos escapa siempre, a pesar de que siempre intentemos aprehenderla con ayuda de todo un catálogo de tópicos. Ferdinando Brachetti Peretti, Alexis de Vilar, Alvaro Chávarri, Fernando Manso, Bélen Imaz, e Inma G. Prats, seis fotógrafos que muestran cada uno su forma de entender la inconmensurable realidad africana. Lo esencial de esta exposición es su compromiso con el proyecto que la Fundación Emalaikat desarrolla en el desierto de Turkana, Kenia. Allí donde el agua es realmente bendita, esta Fundación ha ido consiguiendo, gota a gota, retener el máximo de las escasísimas
que hacen crecer huertos que a su vez alimentan familias que envían a sus hijos a las escuelas. La Missionary Community of Saint Paul the Apostle y Emalaikat han generado este círculo tan virtuoso como el del agua.
Visitar esta exposición, conocer algo mas de una realidad lejana y no por ello menos real, vale mucho mas que la pena. www.ainanowack.com
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Espectáculo Invisible
Fotografías: Jean-Luc Lefebvre Texto: Aelf Nández
Jean-LucLefebvre (Lille, Francia, 1953), es un fotógrafo excepcional por su capacidad para ver aquello que parece invisible, y para ir más allá, creando un lenguaje visual que nos cuenta grandes historias a partir de lo mas ínfimo. Sus fotos están basadas en la observación minuciosa de los detalles más insignificantes, en aceras, paredes, asfalto… un trabajo de precisión milimétrica, de creación paciente. En la obra de Jean-Luc Lefebvre hay mucho de tránsito, de camino, de observación, algo así como un perpetuo vagabundeo por la calle siempre al acecho del detalle que sólo al ser mirado con una luz determinada y con los ojos de quien no tiene ideas pre-concebidas, desvela una belleza inaudita.
Las fotos de Jean-Luc apenas tienen trabajo en estudio, su perfección, la emoción que destilan en su extrema simplicidad, son el resultado del arte fotográfico : descubrir, mirar y entregarse al objeto.
www.jean-luc-lefebvre.com 10
Hago fotos de calle, que sólo pretenden mostrar la belleza, allí donde a priori no pensaríamos encontrarla. El reto está en encontrar la belleza en la cotidianeidad de lo urbano, allí donde no se espera, en aquello que no se mira. Mirar requiere un esfuerzo, una atención especial… Mirar nos lleva a ver otra cosa, a interpretar. Por eso me siento satisfecho cuando consigo extraer de la aparente fealdad que invade las ciudades, algo bello, fruto de un descuido fortuito de la mano del hombre. Me gusta el color sin brillos, los tonos monocromos sin monotonía, los detalles de la ciudad y los encuadres cerrados. Tiendo a la abstracción y tengo alma de coleccionista. Jean-Luc Lefebvre
Mi sitio en el mundo
Fotografías: Hotel Caro Texto: Jaime Rocall
No hay mejor máquina del tiempo que los sustratos que el tiempo deja. Agatha Christie y su marido el arqueólogo Max Mallowan habrían sido los huéspedes perfectos en este hotel que es un auténtico sitio arqueológico y que sería una fuente de inspiración inagotable. El palacio decimonónico del Marqués de Caro fue, antes de que el arquitecto Francesc Rifé lo devolviera a la vida, el refugio del último miembro de la familia que se acostaba y se levantaba sobre 2.000 años de historia. Construido en el siglo XIX sobre la base de un palacio dieciochesco del que se conserva una maravillosa azulejería, que a su vez reposaba sobre restos visigodos y sobre un tramo de la antigua
muralla islámica, la cual cobijaba un mosaico romano fechado en el siglo II a.C… Francesc Rifé ha conseguido algo memorable, encontrar la esencia del confort y utilizar el diseño para dejar que hable la historia. www.carohotel.com 17
Cada rincón del hotel, desde las suites al espectacular espacio del restaurante cuentan una historia de la historia. Fuera, la historia sigue siendo interminable, porque el Hotel está en pleno casco histórico de Valencia, el mas grande de Europa, difícil no sufrir el síndrome de Stendhal. Si el romanticismo es sobre todo el poder creativo de la nostalgia, el Hotel Caro es fundamentalmente romántico. También porque el conjunto recreado es silencioso, no hay estridencias, se impone la calma, necesaria para escuchar todo lo que estas paredes y estos suelos tienen que contarnos. El lujo de hoy es la presencia callada del pasado.
Silencio, silencio...
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Campo adentro Agro-cultura
Fotografías: Campo Adentro Texto: Tim Fuller
Parece una exhortación, y me recuerda aquel artículo de El País en el que se relataba la enésima aventura de éxodo de la ciudad al campo. No en vano el antiguo director de la Tate Modern, nada menos, Vicente Todolí, lo ha llevado al extremo y se ha convertido en una especie de ermitaño en medio de un vergel, en su pueblo de la provincia de Alicante. Últimamente, al mito del buen salvaje de Rousseau, del hombre aislado en la naturaleza de Thoreau o del sabio retirado al estilo de Montaigne, hay que añadir el mito del artista en busca de su esencia en lo mas profundo de la tierra.
Apelando al espíritu bucólico de Virgilio, me temo que muchos urbanitas de éxito, o mejor de ex- sin más, corren en busca de una idea del campo, la suya. Después lo pasarán mejor o peor hasta que esa idea se amolda a la realidad.
www.campoadentro.es 19
Susana Velasco Viejas cabañas Almonaster la Real
La mayor parte de los proyectos, repartidos por diversas poblaciones españolas y en entornos muy distintos, están relacionados con una experiencia habitual. No se trata de trasladar un proyecto artístico al campo sino de que el campo se convierta en el proyecto. Campo Adentro es un proyecto de ida y vuelta, se trata de intervenir en espacios rurales partiendo de lo que son. Artistas diversos se vuelven “residentes” en zonas rurales para convertir en arte una experiencia de lo cotidiano.
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¿Para probar qué? Nada, sólo ese arte universal que transita por los campos, los pueblos, las aldeas, y que nos conecta con lo mas ancestral de nuestra identidad, con lo que siempre ha estado en el germen de todos los movimientos, corrientes y tendencias, la tierra. De paso, Campo Adentro, nos enseña que además de crear con lo que nos rodea, podemos rodearnos de lo que nos cura. Balzac, en su novela El Médico Rural, dice “ La sociedad no vive sólo por las ideas morales, para subsistir necesita acciones en harmonía con esas ideas “
Colectivo NOPHOTO Vegaviana
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La Marca de España
Fotografías: Manuel Pielfort Texto: Tim Fuller
Cuando vine a España por primera vez, en la parte de atrás de un Vauxhall que tiraba como podía de una caravana y de una familia de la working class inglesa, atravesando aquellas llanuras de la Mancha camino del Mar Menor, la aparición de un toro negro reinando en lo alto de una colina, como el estandarte del antiguo imperio que tanta risa nos daba a los ingleses, me dejó marcado. Aquella imagen fue para mí, durante toda mi adolescencia, la del verano, la fiesta y la promesa mas o menos incumplida de sexo a voluntad. Descubrí la misma imagen en unos vaqueros. Lois, que llevé durante años, y mas tarde en camisetas, banderas, llaveros… es probablemente lo mas parecido a la Marca España que yo he conocido. Un toro ne-
gro desafiante, que mostraba de vez en cuando alguna herida inoportuna : restos de carteles, desconchones, óxido, abollones. Casi lo olvidé hasta que volví a recordarlo en la película de Bigas Luna, Jamón Jamón, pero me gustó muy poco el papel
al que había quedado relegado. El toro majestuoso de mi adolescencia se había convertido en un buey de chatarra que daba cobijo a las hazañas sexuales de un machito ibérico con bastante menos apostura que el propio astado.
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Cuando vine a España por primera vez, en la parte de atrás de un Vauxhall que tiraba como podía de una caravana y de una familia de la working class inglesa, atravesando aquellas llanuras de la Mancha camino del Mar Menor, la aparición de un toro negro reinando en lo alto de una colina, como el estandarte del antiguo imperio que tanta risa nos daba a los ingleses, me dejó marcado. Aquella imagen fue para mí, durante toda mi adolescencia, la del verano, la fiesta y la promesa mas o menos incumplida de sexo a voluntad. Descubrí la misma imagen en unos vaqueros. Lois, que llevé durante años, y mas tarde en camisetas, banderas, llaveros… es probablemente lo mas parecido a la Marca España que yo he conocido. Un toro negro, solitario,
No sé porqué he vuelto a pensar en esas imágenes y he buscado alguna metáfora que les dé sentido. En la efigie de un toro negro, que fue imagen de Osborne y que el diseñador y grafista Manolo Prieto creó en los años cincuenta por encargo de una agencia catalana, me parecía a mi que se concentraba todo lo que España alimentaba en mi imaginación, semanas luminosas y cálidas lejos de la bruma de Birmingham, días de vino y música al aire libre… una imagen tan sobria, tan llena de fuerza y que sólo conseguía evocar en mi las dos semanas de fiesta en la costa Murciana. He tenido que vivir algo mas en España para saber que el toro de Osborne es un icono injustamente tratado , nada de la sublime campaña de comunicación de la que fue imagen, nada de la humildad y la grandeza de su actitud, nada de la amargura que el negro esconde , de la que tanto saben artistas, escritores, músicos, nada del esfuerzo callado de generaciones que pusieron encima de la primera, todas las piedras restantes. Y es que el toro de Osborne dejó de ser una estrella mediática y cuando se calló y se encerró en su luto perpetuo, empezó a contar otras cosas aunque millones de turistas como yo sólo escucharan pasodobles y sevillanas. Pero es lo que tienen las marcas, sólo cuentan la verdad cuando se las deja solas, desnudas y calladas.
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Esta silueta, mucho mas popular y democrática que la del famoso ciprés de Silos, bien se hubiera merecido los versos de Gerardo Diego. Enhiesto surtidor de sombra y sueño…
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He tenido que vivir algo mas en España para saber que el toro de Osborne es un icono injustamente tratado , nada de la sublime campaña de comunicación de la que fue imagen, nada de la humildad y la grandeza de su actitud, nada de la amargura que el negro esconde , de la que tanto saben artistas, escritores, músicos,
Me alegro de todo lo que ese toro enamorado de la luna tuviera que decirme y ahora me dice otras muchas cosas, supongo que en eso consiste dejar de ser un turista para convertirse en viajero. 26
Dolfie a volar
Fotografías: Dolfie Texto: Mari-Luz Baffe
Cuando una amiga me envió un link a la página web de Dolfie, pensé que había encontrado los zapatos ideales para irme en una Wolkswagen Westfalia a dar la vuelta a Europa con algún novio surfero a la vez que contaba mi experiencia en un blog. Pero mas allá de los tópicos, del indieromántico y del boho-hippie cultivado, me gustó encontrar una marca que tiene una filosofía y hace con ella algo mas que editar contenidos, la aplica. Integrar una creación original, una manufactura excelente y un modelo de negocio consecuente con lo que se predica, es la esencia del lujo del futuro, el de lo auténtico, lo bello y lo amable.
Imagine peace www.dolfie.net
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Así que no me sentí extraña cuando pensé que unos zapatos podían realmente hacerte recordar la letra de “Imagine” o provocar un deseo irrefrenable de salir a comprar unos prismáticos y convertirme en birdwatcher , o mejor aún, sugerirme que uno puede sentirse especial sintiéndose especial, sin mas, sin necesidad de devorar manuales de estilo y sin atragantarse con vídeos de funcionarias metidas a estilistas, o de niñas disfrazadas de Anna Piaggi. Para sentirse especial hay que actuar de manera especial. Dolfie crea sus zapatos bajo pedido y no resulta fácil encontrarlos, lo que convierte, ¡por fin!, la experiencia de comprarlos en algo interesante y divertido. No hay que buscar algún Made in China oculto, Dolfie sólo mira al Este para ver salir el sol.
Para sentirse especial hay que actuar de manera especial
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Mercados ocultos dictadores perfectos Fotografías: Roberto Molero Texto: Victor Berros
Desde los albores de la Humanidad, la política nos da cuenta de cómo una minoría domina a la mayoría. En esos procesos de dominación, los de abajo periódicamente generaban movimientos de resistencia más o menos desesperados, mayormente sin éxito. Estas reacciones violentas se dirigían contra el tirano, el dueño, el señor y su castillo y más recientemente costaron la vida de Luis XVI y de Nicolás II. En estos momentos, el dominio opresivo de la minoría ha alcanzado su mayor perfección. Gobiernos elegidos democráticamente introducen sin debate medidas que nos devuelven al s.XIX, al parecer obligados por el gran amo: los mercados. Los mercados han decidido que nuestros sueldos
están sobrevalorados en un 30%, que nuestras pensiones son un lujo insostenible. Los mercados deciden subirnos los impuestos y deciden que ellos no pagarán ninguno. No satisfechos con expropiarnos económicamente han decidido apoderarse de nuestra vida espiritual. 29
La particularidad de esta nueva esclavitud es que no vemos el rostro de nuestro amo. El esclavo en Roma, el siervo medieval tenían identificado a su opresor. Nosotros no. Nuestros políticos se quejan de recibir un odio injusto. Para evitarlo les invito a que descorran el velo. Queremos ver los rostros de los mercados: sus nombres, donde viven, su nacionalidad, su sexo, su edad. Estos nuevos tiranos mueven cada día miles de millones de euros en cantidades superiores al PIB de algunos países.
Ahora determinan el contenido de la educación de nuestros jóvenes, lo que debe ser enseñado o silenciado en las Universidades. Dentro de poco ya nadie se manifestará en contra de esta situación, querremos lo que ellos quieren, nuestros anhelos y nuestros sueños serán los que convengan a los mercados. 30
Esta gente y sus secuaces mediáticos utilizan los argumentos de Adam Smith o David Ricardo que escribían en los inicios de la Revolución Industrial. Los padres del liberalismo probablemente quedarían horrorizados al comprobar cómo grupos sin control someten a su interés a la sociedad civil y a Estados soberanos. En 2012 echamos de menos a Alfonso X. Cuando este rey otorgaba a pequeñas villas sus Cartas Pueblas fijaba un día para el mercado. El domingo aquí, el martes 30 km más allá. Hoy en día, Alfonso X tendría que cambiar la Carta Puebla cada 72 horas en función de la prima de riesgo. ¡Ah, cómo echamos de menos al Rey Sabio! ¡Cómo echamos de menos aquellos años! Se iba al mercado el día que el Rey nos fijaba y allí podíamos ver, oler y tocar las verduras, la fruta, la carne, las especias que venían del Lejano Oriente…
Quizás están consiguiendo que echemos de menos la Edad Media, allí sufrías, pero tenías la última satisfacción de incendiar el castillo del opresor o podías acudir a la Justicia del Rey. Hoy al pueblo no lo queda esa posibilidad. El Rey se ha doblegado a la nueva aristocracia levantisca del dinero. Una aristocracia sin rostro, incorpórea y vaporosa. La única posibilidad de liberación es descubrir quienes son los mercados. Tocarlos, verlos y olerlos. Para tener la posibilidad de poner fin a la tiranía debemos identificar al tirano. Identificar a nuestro Hipias, encontrar a nuestro nuevo Pericles. No queremos tiranos ni oligarcas. Queremos la democracia que se nos prometió y que ha sido raptada y violada. Raptada y violada. Esta es la única realidad. Esta es la urgencia.
La única posibilidad de liberación es descubrir quienes son los mercados. 31
Re-cita Sutura
Poema y recitado: Sofía Castañón Fotografía: Rebeca Yanke
Nos cerraron nuestra luz insoportable. www.sofiacastañón. 32
Propaganda FotografĂas: Alejandro Mazuelas Kamiruaga Texto: Aelf NĂĄndez
ver PortFolio de Alejandro Mazuelas Kamiruaga
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El diseñador Alejandro Mazuelas Kamiruaga inició su proyecto cerámico como quien planea una invasión, con volumen, color y textura. Todo en estas piezas es excesivo a pesar de esas formas tan depuradas. Las bocas son grandes, la piel brillante y suave, el color luminoso y el corazón caliente de la tierra y el horno. Gres o terracota insultantes de brillo, provocadores en sus formas. Propaganda e insolencia.
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El papel soñado En Grand Central Station me senté y lloré Texto: Beatriz Sanjuán Fotogragía: Roberto Molero
“¿Necesitáis alegría, necesitáis amor? ¿Sois hojas empapadas en algún patio olvidado? ¿Sufrís frío, hambre, soledad, parálisis, ceguera? Tengo lo que queráis, a puñados, a brazadas, para todos.”
La promesa de la pasión es siempre un buen reclamo. Oferta de plenitud y milagro, de deseo cumplido... ¿quién se negaría? Desde luego no el lector empedernido, ese extraño espécimen que se entrega para ser habitado igual por una mente lúcida que por un corazón en carne viva. Aquí lo encuentra todo: Una voz que declama con sabiduría antigua de profeta; Una pluma que genera perfectas imágenes literarias a un ritmo sofocante; Un narrador - personaje cuya piel se adhiere a la nuestra con peligrosa intensidad. Hablamos de En Grand Central Station me senté y lloré, inclasificable obra de la norteamericana Elisabeth Smart, editada en España por Periférica: una narración tan marcada por el torrente de emociones que el argumento se diluye en su ritmo poético. En sus escasas 130 páginas la autora nos obliga a la pausa continua para digerir tan cruda brillantez; y acto seguido nos impone una terca relectura.
“Para recordarme las catástrofes, tengo el doloroso apareamiento de los gatos por los tejados que hay junto a mi ventana; el carillón que da los cuartos de hora sin llegar al final; el silbido de los radiadores, alegre y regular como los grillos en el campo. El ascensor, en cambio, martillea una promesa de acontecimiento jamás cumplida, y a veces las cañerías chillan remotamente como el mensaje de un cometa que cae.”
La experiencia destila un placer exquisito e hiriente; compromete nuestra cordura dejando al descubierto el frágil entramado nervioso que sostiene toda la contundencia del mundo que nos rodea. ¿Es una percepción enferma la que produce la amenaza o, por el contrario, es la dosis de clarividencia necesaria para sortear la mediocridad? La recomendamos con gesto clandestino; como una sustancia casi mítica, entre la droga y el veneno. Abrimos con ella una sección dedicada no a los libros sino a las lecturas, a la mirada que se sumerge en una realidad de papel y, soñándola, la cumple. Las fotografías que la acompañan son parte de esa mirada. Tienen también el poder para cerrar o abrir y ocultan tras su diminuta frontera fuerzas inabarcables. Como las palabras. Como la mano que las escribe y el solitario rincón de la mente donde se guardan. “Hiéreme, traicióname, pero dame una sola cosa, la certeza del amor, pues todo el día y toda la noche, lejos de él y con él, en todas partes y siempre, ésa es mi gravedad, y las manzanas que han madurado en mi jardín caen sólo en ésa dirección.”
“Amor mío, cariño, ¿me oyes, desde ahí donde duermes?”
Todos los textos entrecomillados pertenecen al libro citado. 36
Créditos PORTADA Fotografía: Jean-Luc Lefebvre EDITORIAL: Así de simple Texto: Ismael Fernández Fotografía: J. R. Esparza NO SOMOS NADA Fotografías: Oscar Ruano Texto: Raúl Ruano ÁFRICA SE EXPONE Texto: Ismael Fernández Fotogragía: Belén Imaz “Mujeres Turkanas” ESPECTÁCULO INVISIBLE Fotografías: Jean-Luc Lefebvre Texto: Aelf Nández
MI SITIO EN EL MUNDO Fotografías: Hotel Caro Texto: Jaime Rocall
RE-CITA: Sutura Poema y recitado: Sofía Castañón Fotografía: Rebeca Yanke
CAMPO ADENTRO: Agro-cultura Fotografías: Campo Adentro Texto: Tim Fuller
PROPAGANDA Fotografías: Alejandro Mazuelas Kamiruaga Texto: Aelf Nández
LA MARCA DE ESPAÑA Fotografías: Manuel Pielfort Texto: Tim Fuller
EL PAPEL SOÑADO: En Grand Central Station me senté y lloré Texto: Beatriz Sanjuán Fotogragía: Roberto Molero
DOLFIE A VOLAR Fotografías: Dolfie Texto: Mari-Luz Baffe MERCADOS OCULTOS, dictadores perfectos Fotografías: Roberto Molero Texto: Victor Berros
REDACCIÓN Ismael Fernández José A. Calero Roberto Molero Beatriz Sanjuán Victor Berros Jean-Luc Lefebvre
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Espectáculo Invisible Fotografías
Jean-Luc Lefebvre Exposición del 26 de Octubre al 30 de Noviembre de 2012 LA CASONA Fundación Carriegos Suero de Quiñones, 8 León www.fundacioncarriegos.com