"Otros territorios: información y análisis sobre derechos y justicia"

año 1 número 10 4 de junio de 2011

INFORMACIÓN Y ANÁLISIS SOBRE DERECHOS Y JUSTICIA Un suplemento de

Periodismo y compromiso Lo que dice y lo que no se dice.

Debates profundos para los trabajadores de la comunicación. ¿Existe la objetividad periodística?

Páginas 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 y 9

ENTREVISTA A HORACIO GONZÁLEZ

ARIAS

Páginas 10 Y 11

editorial /

DE MANUEL BELGRANO Y MARIANO MORENO A RODOLFO WALSH

El compromiso como utopía COLECTIVO EDITORIAL OTROS TERRITORIOS Es

curioso

(tal

Económico e Historiográfico, también cuenta que eligió ser

El ejemplo más acabado de

fundado y dirigido por Francisco periodista para “dar voz a los que la necesidad de difundir un vez Antonio Cabello y Mesa y que no tienen voz”.

sintomático) que periodistas que contaba entre sus cronistas a

contenido por el medio que fuera

Belgrano, Moreno, más tarde es la Agencia de Noticias

no aceptan que este trabajo es Manuel Belgrano. El primer Walsh, y otros, y otras, se Clandestina (ANCLA) y la profundamente subjetivo, no número salió el primero de abril valieron de diarios y de cualquier Cadena suelan cuestionar que el día del de 1801. periodista se celebre el 7 de junio

Informativa,

otro medio a mano para difundir estrategia

que

una sigue

Belgrano, Moreno y otros lo que consideraban que debía repitiéndose: ¿quién no ha leído

en memoria de aquel día de grandes que vinieron después, y ser conocido. En 1810 Moreno se aquella recomendación/pedido?

1810, cuando se editó el primer tuvieron también muertes valió de La Gaceta para difundir “Reproduzca esta información, número de La Gaceta, diario jóvenes, como Rodolfo Walsh, nada menos que El contrato hágala circular por los medios a que, con los parámetros de la son los ejemplos más felices que social, de Jean acques Rousseau. su alcance: a mano, a máquina, actualidad, sería rápidamente tiene la fauna periodística. “Si los pueblos no se ilustran, si a mimeógrafo, oralmente.

Aunque algunos insistan en no se vulgarizan sus derechos, si Mande copias a sus amigos:

calificado como oficialista.

Es posible (solo posible) que resistirlos, sobre todo ahora que cada hombre no conoce lo que nueve de cada diez las estarán esa aceptación, aún en algunos la fatuidad convoca a calificar vale lo que puede y lo que se le esperando. Millones quieren ser y algunas muy quisquillosos a la como militante todo ejercicio debe,

nuevas

ilusiones informados. El terror se basa en

hora de aproximarse a lo que periodístico que reconozca los sucederán a las antiguas, y la incomunicación. Rompa el tenga olor a estatal, sea un límites del oficio, nadie puede después de vacilar algún tiempo aislamiento. Vuelva a sentir la síntoma de cierta colonización negar el brillo de su obra. Y su entre mil incertidumbres, será satisfacción moral de un acto de mental, que también abunda en valentía. el periodismo. La fecha tal vez

tal vez nuestra suerte mudar de libertad. Derrote el terror. Haga

A diferencia de la escuela tiranos sin destruir la tiranía”, circular esta información”.

debiera revisarse, no porque el estadounidense, que convenció decía en el prólogo a la

Belgrano, Moreno y Walsh

periodismo que ejercía Mariano del sofisma de un periodismo publicación de El contrato ejercían el periodismo para Moreno fuera malo, sino porque “objetivo”, en el que resulta más social.En su tesis doctoral cambiar algo. En ese sentido la se presta a confusión. No es importante la forma que el Disertación jurídica sobre el calificación de militantes les cierto que La Gaceta fuera el contenido, ellos tenían algo para servicio personal de los indios sienta bien. primer diario hecho en el país. decir y buscaron los medios para (otro medio utilizado), denunció En rigor, el primer ejemplar hacerlo. Los medios no hacen al la “malicia” de la persecución periodístico que se imprimió y periodismo, el periodismo contra los pueblos originarios, distribuyó en el país, por encuentra los medios para que “no tuvieron otro delito que entonces

todavía

en expresarse. Ryszard Kapuscinski haber nacido en unas tierras que

constitución, fue El Telégrafo dice que para ser buen periodista la naturaleza enriqueció con Mercantil, Rural, Político, hay que ser buena persona, opulencia”.

otros territorios información y análisis sobre derechos y justicia Suplemento de Nuevo Diario

4 de junio de 2011 año 1 • número 10

/otros territorios otros territorios@yahoo.com.ar

Producción: Colectivo editorial Otrosterritorios / Colaboradores: Laura Urbano, Luján González, Elena Corvalán, Florencia Lance, Santiago Kalinsky, Marita Couto, Eloy López, Germán Banek / Arte de tapa: Roly Arias / Ilustraciones: Andrea Fernández / Fotografías: Hugo Tapia, Rolando Díaz Comercialización: Norberto Barbieri (0387 154194417 / 0387 154138884 2 / otrosterritorios

derechos humanos hoy / periodismo y compromiso

PENSAR, BUSCAR Y DIFUNDIR COMO NOS DICTE NUESTRA CONCIENCIA

Vientos de cambio

Los trabajadores de los medios de comunicación en un debate profundo y complejo. En tiempos difíciles, con capitales fuertes y ajenos, en búsqueda de la libertad para pensar.

Cuatro años atrás, en mayo de 2007 firmé, junto a colegas de distintas partes del mundo la Declaración de Cochabamba que, en dos de sus párrafos dice: “En la transición desde las resistencias frente al neoliberalismo a las ofensivas contra ese modelo, el papel de los medios es trascendental. Por ello, hoy más que nunca nos manifestamos contra el poder sin control, no democrático e impune de los grandes medios de comunicación que intentan imponer su visión de la realidad y sus valores. Estos oligopolios sirven a intereses económicos y políticos de accionistas, financieros y anunciantes”(...). “Los estados tienen el deber de garantizar el derecho a la información y la democratización de los medios y el acceso a todos los sectores sociales. Esa garantía se logra mediante el uso público del espacio radioeléctrico y la propiedad social de los medios”.

Pensar en ese momento en el derecho a la información y la comunicación como un derecho básico en Argentina era poco más que una utopía.

Sin embargo, poco tiempo después comenzó a perfilarse una posibilidad por la cual desde muchos sectores veníamos batallando, militando desde, por lo menos, 1999 (es el caso de la Asociación de Radios de Universidades Nacionales Argentinas, ARUNA).

Varios años después nuestro sueño de una nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual se hizo realidad a través de un mecanismo de participación ciudadana como no se había visto nunca antes.

ANDREA FERNÁNDEZ

MARITA COUTO

Hasta la promulgación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual la hegemonía del “periodismo independiente” era total. Las voces de los invisibilizados, nuestros hermanos y hermanas de las radios comunitarias, nosotras y nosotros, en la producción y en la radiodifusión de contenidos universitarios sólo podíamos acceder a “hablar…pero bajito” en esas frecuencias despreciadas por los grandes y poderosos y con bajas potencias.

Quien escribe no milita en el kirchnerismo –más aún, es crítica de muchos aspectos de la gestión– pero, sin embargo, es capaz de intentar superar la falsa dicotomía entre 678/TN “periodismo independiente” y aceptar desde su modesto lugar de trabajadora en relación de dependencia (que no otra cosa somos los y las periodistas) que el debate es mucho más profundo que ese, que los tiempos son difíciles y que los capitales y sus medios de comunicación son muchos

y ajenos, que nos merecemos la libertad de pensar, buscar y difundir la información como nuestra conciencia nos dicte.

Los vientos de cambio que en la materia soplan en Argentina y en nuestra América morena son los que nos permitieron conocer, por ejemplo a través de Telesur, lo que pasaba en Honduras, en la Flotilla de la Libertad, en Guantánamo pero también disfrutar de una televisión de calidad con Encuentro y Paka Paka, conocer otras noticias “desde el pie” con FARCO (Foro Argentino de Radios Comunitarias) y las redes de comunicación indígena.

Pensar la comunicación y la información desde el punto de vista de las ciudadanas y los ciudadanos implica un esfuerzo por desopacar ideas y afirmaciones que, a fuerza de repetidas, se han convertido en “sentido común”, en dogmas.

El próximo 7 de junio se celebra nuestro día y es una buena ocasión para repensar el lugar social desde el cual expresarnos.

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derechos humanos hoy / periodismo y compromiso

ESCRIBIR POR RAZONES ÉTICAS

Intencional Dar voz a los que no tienen voz. El periodismo como difusor de valores democráticos.

Los riesgos de la información defectuosa, y de los monopolios.

ELENA CORVALÁN

Unas precisiones: hay acuerdo (por lo menos hasta ahora) en que la democracia es el mejor sistema de gobierno posible. La filósofa Adela Cortina define la democracia como “un ámbito de participación, a través de la cual se expresa nuestra pertenencia a una comunidad moral de hombres y mujeres libres”.

Cortina dice que “la democracia es una vía de convivencia (es la expresión política de civismo entre seres humanos)”, lo que nos lleva a concluir que “construir civismo es al mismo tiempo, conseguir más democracia”.

Esto es así, porque desde un punto de vista ético “el civismo es una actitud básica de la solidaridad humana que conlleva acciones de: no pasar de los otros, participar implicándose, ejercer la ciudadanía activa”.

Se sabe que el periodismo ayuda a construir democracia, y a alimentar el civismo. El 4 / otrosterritorios

periodismo, como tal vez ningún otro oficio o profesión hoy en día, puede realizar grandes aportes en este aspecto.

Porque puede ayudar a la formación de una opinión pública orientada al bien común.

Cada vez más es necesario saber qué ocurre en el mundo, cada vez está más claro que la información es un bien social y es necesario conocerla para formar una opinión, pública común, superadora.

Pero hay que estar atentos, porque, como señala el pensador alemán Jürgen Habermas, puede haber una opinión no pública.

Habermas dice que esto suele ocurrir cuando la información es manipulada, distorsionada. La opinión que se genera así es la contraria de la opinión pública porque el requisito para que ésta se realice es que los interlocutores tienen que participar en igualdad de condiciones y en relación de simetría.

Queda claro entonces, siempre en la visión de Habermas, que si, como se ve que ocurre a diario en la provincia, y en todo el país, un buen sector del periodismo deforma los hechos y no ayuda a la conformación de una opinión pública, sino todo lo contrario.

A veces el periodismo ayuda a conformar una opinión no pública no para beneficiarse personalmente, sino porque quiere conformar a la opinión pública.

Eso ocurre cuando se está pensando siempre en lo que “la gente quiere”, lo que “la gente pide”.

El periodista, escritor y ensayista italiano Furio Colombo, advierte que esta tendencia puede resultar peligrosa para la democracia.

Y es que hay que tener presente que hay ocasiones en que la opinión pública sobre determinada cuestión no apunta al bien común. Ocurre, por caso, cuando la gente pide mano dura o pena de muerte como solución para la inseguridad.

Colombo dice que “el periodismo está en su mejor momento cuando es un asesor independiente del público, no cuando se inclina ante sus humores”.

• La relación entre democracia y periodismo es directa.

En la sociedad moderna el periodismo, y los medios de comunicación, se han convertido en un foro de discusión en el que se va construyendo esta opinión con

la participación de los distintos sectores. Se va construyendo la idea de país que se quiere.

La filósofa Adela Cortina, sostiene que la opinión pública se construye en el diálogo entre los sectores sociales.

Y señala que este diálogo solo puede darse si media información veraz.

• Cortina dice que “La democracia política participativa (…) se perfila como un factor del desarrollo”, y los derechos civiles, incluyendo la libertad de expresión y discusión, constituyen “un lugar privilegiado para interpretar las necesidades económicas de las gentes e inducir respuestas adecuadas”.

Esta “ciudadanía activa” se construye no solo a través de la participación política, sino también “en las empresas y en los hospitales, en las familias, las escuelas y las universidades, en las iglesias, los sindicatos y en los medios de comunicación.

En esos lugares que tienen capacidad de generar, no sólo riqueza material, sino también social y moral: no sólo capital físico, sino también capital social y capital ético, sin los que no prosperan las naciones, mucho menos la república de la humanidad.”

derechos humanos hoy / periodismo y compromiso Pero, ¿es esto lo único que está pasando en nuestra ciudad o pueblo? ¿Estamos actuando con independencia al dejarnos guiar por una agenda impuesta desde fuera de nuestro medio o de nosotros mismos?

El periodismo es ejercicio de la memoria Sobre este aspecto, el periodismo tiene que seguir siendo nada más que eso, periodismo, y, como tal, cada periodista debe cumplir con su deber que es, como dijo el maestro Rodolfo Walsh, el de “dar testimonio en los momentos difíciles”.

Kapuscinski habla de dos niveles de periodismo, el artesanal, que es, dice, como lo practica el noventa por ciento de los periodistas, y el creativo: “aquel en que, en el trabajo, ponemos un poco de nuestra individualidad y de nuestras ambiciones. Y esto requiere verdaderamente toda nuestra alma, nuestra dedicación, nuestro tiempo”.

El maestro polaco sostiene que, ante todo, para ser buen periodista hay que ser buenos seres humanos. “Las malas

personas no pueden ser buenos periodistas. Si se es buena persona se puede intentar comprender a los demás, sus intenciones, su fe, sus intereses, sus dificultades, sus tragedias”.

Kapuscinski habla también de la ética. En Los cínicos no sirven para este oficio cuenta las motivaciones por las que empezó a hacer reportajes sobre los países del Tercer Mundo: “Escribía, por otro lado, también por alguna razones éticas: sobre todo porque los pobres suelen ser silenciosos.

La pobreza no llora, la pobreza

no tiene voz. La pobreza sufre, pero sufre en silencio. La pobreza no se rebela”. “(Esta gente) necesita que alguien hable por ellos. Esta es una de las obligaciones morales que tenemos cuando escribimos sobre esta parte infeliz de la familia humana.

Porque todos ellos son nuestros hermanos y hermanas pobres. Que no tienen voz”.

Kapuscinki sostenía que el periodismo verdadero es intencional: se fija un objetivo e intenta provocar algún tipo de cambio. “No hay otro periodismo posible”, afirmaba.

ANDREA FERNÁNDEZ

Para que el periodismo pueda realizarse en plenitud, necesita estar libre de monopolios políticos o empresariales. Los ciudadanos tienen que tener acceso a información contrastada, para formarse su propio juicio.

El maestro Ryszard Kapuscinski, ya fallecido, venía advirtiendo sobre la creciente manipulación en los medios de comunicación porque “se trata de un arma fundamental en la construcción de la opinión pública. Si no hablamos de un acontecimiento, este, simplemente no existe”.

Por eso la concentración de medios afecta la libertad de expresión y el derecho a la información.

Kapuscinki señalaba que los medios de comunicación son “tan grandes, influyentes e importantes que han comenzado a construir un mundo propio. Un mundo que tiene poco que ver con la realidad”. Y no están interesados en contar lo que ocurre en el mundo, sino en competir con los otros medios, o en defender otros intereses, agrego yo. “Así, todos acaban observando no la vida real, sino a la competencia”.

Kapuscinski decía que los medios de comunicación, los periodistas, nos movemos hoy en día como manadas: donde ocurre un hecho, ahí vamos todos, y olvidamos todo lo demás importante y sustancioso que está ocurriendo en otras partes.

En cada país, provincia, ciudad, pequeña localidad ocurre lo mismo. Los periodistas nos movemos en grupo, vamos todos a las mismas actividades.

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derechos humanos hoy / periodismo y compromiso

CUANDO LO MÁS IMPORTANTE ES LO QUE NO SE DICE

El arte de ocultar LAURA URBANO

ANDREA FERNÁNDEZ

“El periodismo ya no es importante por lo que dice, sino por lo que oculta”. Las palabras del periodista Darío Aranda, en una columna de Página 12, parecen ser las acertadas para describir la crisis por la que atraviesa la profesión, no porque haya ahora más intereses que guíen las líneas editoriales, sino porque estos se han mostrado crudamente en los medios de difusión.

Pocas veces sucede que lo que se ocultó, sirve a esos intereses. Es entonces cuando las viejas noticias explotan en las empresas periodísticas

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que convierten la información en materia prima de operaciones, más que en un servicio a la sociedad. Pero los intereses de antes siguen cruzando las líneas editoriales y las verdades se dicen a medias en una parcialidad cínica, que nada tiene de ingenua o inocente.

El caso del que aquí se habla es del hoy famoso Tolloche, nombre con el que se conoce al ex lote fiscal 37 de Anta, parcelado y vendido entre 2006 y 2007. Ya en 2004, comodatarios que habían sido beneficiados en 1987 por el ex gobernador Roberto Romero con el otorgamiento de parcelas para realizar trabajos como pequeños p r o d u c t o r e s , denunciaban que el ex mandatario Juan C a r l o s

Romero (hijo de quien los había beneficiado), se aprestaba a vender las tierras.

No se cansaron de hacer las denuncias que fueron publicadas en los medios, y elevadas formalmente a los tres poderes salteños. El manto de silencio que en ese momento se tendió en el diario El Tribuno fue acompañado por referentes del Ejecutivo, Judicial, y Legislativo. La foto del presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Godoy, al lado de Romero en la entrega de las escrituras de parcelas de Tolloche en una publicación del 10 de agosto de 2007 de El Tribuno parece decirlo todo.

Allí todos hablaban del cumplimiento del “feliz sueño de la posesión de las tierras por parte de indígenas y pastajeros”. Lo otro no existía, y si existía, entre ellos lo ocultaban.

De lo que no se habla Siete años después, y con un contexto desarmonizado por una lucha política feroz, Tolloche explotó en los titulares de El Tribuno. El Tolloche actual se construye desde la acusación contra el presidente de la Cámara de Diputados, el mismo Santiago Godoy; el diputado por Anta, Pedro Sández, y el intendente de El Quebrachal, Leonardo García. Se los acusa de haber apadrinado a ocho personas, sus presuntos testaferros, a quienes se les entregaron parcelas de unas cuatrocientas hectáreas en 2007 a un precio promocional y con hipoteca.

Los adjudicatarios revendieron las parcelas entre cinco meses y dos años después, a tres veces su valor. La irregularidad está en que esos terrenos no se podían vender por diez años.

Al hablar de ese aspecto, se menciona poco y nada la raíz de la denuncia: fue iniciada por pastajeros de Tolloche que afrontan un desalojo por parte de Argenorte, una de las cuatro grandes empresas a las que el gobierno romerista le vendió las tierras fiscales, a sabiendas de que había gente adentro. De hecho, en la misma denuncia que publica El Tribuno, una parte del escrito, que no fue publicada, dice que “al vender, la provincia dejó constancia, en los pliegos licitatorios, que el inmueble adquirido por Argenorte SA –más de diez

derechos humanos hoy / periodismo y compromiso

En esta maraña que roza con la hipocresía, qué le queda a la sociedad si hay que esperar mil hectáreas–, estaba parcialmente ocupado por campesinos”.

Otro aspecto silenciado es que el decreto por el cual se otorgaron las tierras fue firmado por Romero, el ex secretario de la Gobernación y concejal actual, Raúl Medina, y el ex ministro de la Producción, Sergio Camacho.

Se omitió también indicar que para los dos primeros se solicitó una declaración informativa, y al tercero directamente se le promovió acción penal. Por el contrario, con el titular “La venta irregular de tierras en Tolloche ocurrió entre 2008 y 2010”, publicado por El Tribuno, se trata de eludir responsabilidad del gobierno anterior.

No se pretende aquí, para evitar interpretaciones maliciosas, defender a Godoy, Sández o García, ni atacar a los gobernantes anteriores, sino tratar de contar Tolloche desde sus distintos ángulos. En estos siete años hay notas en Nuevo Diario que apuntan a Godoy como quien rompió tranqueras buscando el lote de su cuñado.

En 2010 Sández ya era acusado públicamente de haber engañado a las familias que poseían tierras compradas por Argenorte, para que renunciaran a sus derechos. En 2008 también se denunciaba públicamente al ex titular de Tierras Fiscales de la provincia, Ernesto Saravia, de haber dado tierras a sus parientes en

Tolloche, en una práctica similar de la que se acusa a Sández y Godoy.

En 2006, el diputado con mandato vencido, Armando Leguizamón reclamaba que se reviera la venta de Tolloche.

Ningún legislador acompañó el reclamo. Y se siguió adelante con la entrega de las tierras fiscales.

Resulta al menos curioso ver también cómo recién ahora (tres años después de haber sido nombrado funcionario), el diario se entera que el actual titular de Tierra y Hábitat, Sergio Usandivaras, es “apoderado” de la firma Quebracho Colorado. Esta es otra de las grandes empresas que compró tierras con gente adentro en Tolloche y también inició violentas acciones en pos de lograr desalojos. “El pliego de la licitación advertía a los compradores que dentro de ese predio existían pastajeros y puesteros con muchos años de residencia en esas tierras, con los cuales debían, luego de adquirir la finca, entablar negociaciones para acordar su forma de retiro y una adecuada compensación por ello”, se adelanta a decir El Tribuno dejando fuera posibilidad alguna de criticar que los administradores del Estado de aquel momento, o sea Romero, haya vendido tierras fiscales sin importar si había o no gente dentro de los lotes.

Se decidió omitir además que Usandivaras fue

una pelea entre los grupos de poder y sus voceros para que parte de las cosas se resuelvan. referente de Initium Afero, una de las empresas que compró tierras fiscales en remate en Pizarro, o que Quebracho Colorado es una de las empresas que quería desmontar grandes superficies en la finca El Alámo, en el norte provincial, lo cual se tomó como uno de los casos testigos para que la Corte Suprema de Justicia de la Nación suspendiera los desmontes. Será porque hablar de ello se contrapone a una política editorial crítica a la resolución de la Corte, y todo lo que involucre la “paralización del progreso”, que para ciertos medios significa la explotación de las tierras por parte de grandes empresas.

Quizás las palabras de Patricio Moyano, el primero que denunció la irregularidad de la reventa de los lotes de los que tanto se habla ahora, den más claridad a lo que aquí se dice. “Fui tres veces al diario El Tribuno en 2004, en el 2006, cuando nos rechaza la Corte (de Justicia la suspensión de la venta de las tierras). Nunca sabían quién era el que debía atenderme, me peloteaban, entonces me terminé yendo y no volví”.

Qué queda para el resto Como si fuera una tragicomedia, en estos días se acusan mensajes mafiosos entre los que antes juntaban sus manos en un apretón y hoy muestran sus puños en señal de ataque. Los legisladores dicen estar preocupados por Tolloche. La Justicia (que antes mandó las denuncias de los pastajeros a archivo), comenzó a actuar. El Ejecutivo desadjudicó lotes. “Para que veas cuando las denuncias tienen trascendencia”, dijo un colega de El Tribuno, al mofarse de la ¿justiciera? publicación. En esta maraña de viejas novedades y acciones que rozan con la hipocresía, resta reflexionar qué le queda a la sociedad si hay que esperar que haya una pelea entre los grupos de Poder y sus voceros para que parte de las cosas se resuelvan.

Mientras, los pastajeros que pusieron su firma en la denuncia contra Godoy y Sández, habían sufrido el miércoles pasado un robo en sus casas, lo cual, se sospecha, es parte de un operativo de grandes empresas para presionarlos a desalojar las tierras. Pero eso parece no importar. otrosterritorios / 7

derechos humanos hoy / periodismo y compromiso ¿Existe o es posible la objetividad en el ejercicio del periodismo? ¿Cuál es el rol social del periodista? Las respuestas a esas dos preguntas, planteadas por Otros Territorios, indican que el periodismo está en debate en este momento. Y que hay opiniones para todos los gustos. Pasen y vean.

Josefina Adrover/ Capital 1. Por supuesto que no. La objetividad es otra idealización de un oficio a veces noble y otras, peligroso como el nuestro. Es un concepto instalado por el discurso hegemónico. Desde el periodismo siempre se favorece o se habla en nombre de determinados intereses. El periodista que defiende, difunde o habla en nombre de los intereses concentrados, empresariales o corporativos de la economía o la política es un “subjetivo informante” con ciertas técnicas para proyectarse “correcto”, que oscilan entre la maximización, minimización, omisión o manipulación. El periodista que defiende, difunde o habla en nombre de los intereses populares sin faltar a la verdad, es un subjetivo comunicador popular. Antes de periodistas, somos humanos.

2. El rol social del periodista está brillantemente expuesto en el espíritu de la nueva Ley de Comunicación Audiovisual. La ley de medios no fue una pelea entre periodistas y políticos, sino un paso de calidad en la tarea de comunicar. Porque si hablamos de medios o rol social de los medios, estamos hablando de periodistas, ya que las máquinas por sí solas no funcionan. Hablamos de intenciones entonces. El rol social de comunicador, por la tanto, es transmitir datos, nociones, ideas que sirvan para el desarrollo del cuerpo social. Visibiliza la idea de que la política en democracia participativa es la mejor herramienta para transformar la sociedad. Hasta hace poco, lo contrario a eso, eran las empresas mediáticas que pretendían marcar

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la agenda del Estado Nacional, fomentando la apatía política y el miedo. El rol social del periodista en su toma de conciencia es esclarecer y coadyuvar a la organización de los diferentes núcleos sociales como son la educación, la salud, o los derechos humanos. Cumplir un verdadero rol social desde periodismo significa dar una gran batalla cultural. Con nosotros mismos primero, que tenemos que desaprender tanto. Y hacia los obturadores después, que son los que no pretenden un crecimiento igualitario del pueblo.

Marta César/ Capital 1.Fuera del esquema binario subjetividad u objetividad en el periodismo, sea porque lo primero condiciona la información desde la parcialidad y el interés personal o porque no se puede desconocer la influencia del observador sobre lo observado, aún cuando se pretenda tomar una distancia impersonal al construir y relatar la información, el ejercicio saludable del periodismo debe tender a la búsqueda de la verdad que describa ampliamente la realidad que se pretende referir y a la mayor libertad para narrar todos los aspectos posibles de esta realidad. Con la honestidad de explicitar el lugar desde donde se construye y se relata esta verdad.

2. El ejercicio del periodismo debe ser, ante todo, un servicio público, objetivo desdibujado hoy, por la multiplicidad de intereses de los medios concentrados de comunicación.

Medios cuyo relato convertido en discurso dominante, se

Discusión intentar es ser lo más imparcial posible, sincerando que es nuestra interpretación de los hechos y no la única. La visión de la objetividad en el periodismo fue instrumental al neoliberalismo queintentó hacernos perder la política, las ideologías, la militancia y, obviamente, las subjetividades.

2. Un periodista tiene la posibilidad de acceder a información a la que otra gente no accede. Su rol es el de nexo entre los hechos, sucesos o el entrevistado y la audiencia. En ese sentido, todos somos constructores de nuestra propia realidad. El periodista (y volviendo al punto anterior) construye una, pero la hace pública, elige ciertos temas y otros no, los aborda de una manera subjetiva y, por lo tanto, forma opinión en cuanto a la construcción del mundo (es una institución más, como las que planteaba Gramsci). El rol social del periodista siempre tiene que ser primero reconocer esa limitación de no ser omnipresente ni poseer la Nicolás Hirtz/ Capital 1. Yo me pregunto: ¿qué es la verdad absoluta para, desde allí, objetividad? Y luego, cuando intentar incluir el más amplio manejo el concepto, analizo la abanico de voces y experiencias. producción periodística cotidiana de la prensa, la mía y Vanesa Sánchez/ Tartagal las demás. Allí claramente me 1. Cada vez son más las voces que respondo: no existe la dicen que la objetividad en el objetividad, cada uno de periodismo no existe. Sin nosotros lleva una historia embargo, a mi entender la previa que nos construyó en la objetividad en el periodismo se subjetividad y, por lo tanto, no logra consultando todas las responderemos nunca ante un fuentes involucradas en un hecho de la misma manera. Es hecho, y con investigación. Creo cierto que las líneas editoriales que es un compromiso por parte intentan homogeneizar el del periodista, que puede tener discurso en un medio; pero, su postura y su ideología, pero incluso esas líneas, las han ella no tiene que nublar su escrito personas de carne y trabajo. hueso que representan 2. El periodista, a través de su posiciones ideológicas. Lo que trabajo, se inserta en lugares y desde el periodismo se puede problemáticas que suelen verse construye a partir de visiones parciales, sesgadas y clara orientación sexista, capitalista y patriarcal, que asigna o retacea derechos y ciudadanía a distintos sectores de la sociedad.

Aún en medio de estas perversas limitaciones, el/ la periodista no debe perder de vista que el diálogo periodístico se entabla con fines al bien común.

Concientes de que se forma parte de un proceso de producción dentro de los Medios de Comunicación donde se da por sentado el acceso universal a la información en igualdad de oportunidades. Que aún cuando con responsabilidad y compromiso se asuma el rol integrador que la posibilidad de recolectar, procesar y publicar información representa, no se trata de integrar según los paradigmas del discurso dominante, sino atendiendo las necesidades en la construcción de una democracia real, pluralista y verdaderamente participativa.

derechos humanos hoy / periodismo y compromiso

abierta marginadas y olvidadas. Su rol social es tratar de acercar las soluciones que requiere para sus necesidades Samuel Huerga/ Orán 1. No existe ningún tipo de posibilidad de que un periodista sea objetivo y se jacte de la tarea bien concebida, ya que es imposible realizar una tarea social observando los hechos como elementos disociados de la realidad y su entorno, o sea, como un objeto; inevitablemente para el periodista, por las fuerzas que lo impulsan, económicas, sociales, políticas, éticas o morales, hacen que la vida y sus hechos sean vistas desde la conciencia del sujeto y desde allí para luego ser subjetivas. La objetividad responde a diversos intereses externos, la subjetividad a los trazos de la conciencia humana. Por lo tanto la objetividad consiste en ser lo más subjetivo posible.

2. Transformar la sociedad en donde vive. Mostrar lo mejor y lo peor de su comunidad.

Inquietar y estimular. Ser molesto, tener pocos amigos y muchos, pero muchos, enemigos. Poco dinero y mucha salud. No fumar para luego escribir sino escribir para al final fumar. Ser el primer escriba de la historia, con la responsabilidad que ello implica. Y fundamentalmente ser el pívot crítico-sarcástico de toda medida gubernamental u empresarial del capitalismo. En América Latina un periodista deber ser anti imperialista, socialista, militante político y soltero (por los tiempos que debe dedicar a su trabajo) aunque esté casado. Y sobre todo el periodista debe ser un organizador, pedagógico para impulsar las salidas a los

problemas sociales. También un periodista puede elegir ser una planta, tipo potus, y ganar mucho dinero. Eso también es ser un buen periodista.

Andrés Gauffín/ Capital 1. No es posible. No podemos acercarnos a la realidad sin nuestras ideas, intereses, prejuicios, preferencias, incluso temores. Lo que más se le parece es la voluntad de estar atento a todos los datos, informaciones, incluso las que chocan con nuestras ideas e intereses. Creo que se le llama veracidad.

2. La honestidad con uno mismo es un gran bien social. No me gusta la palabra ”roles”, suena a que el periodista tiene que cumplir un papel dentro de una maquinaria. En todo caso: responsabilidad. Y la primera es la de brindar información de calidad. Una sociedad en la que circula esa información es a la vez un gran bien personal.

Daniel Nieli/ Santa Victoria Este 1. Evidentemente el periodismo fue cambiando a lo largo de los años hasta convertirse en el cuarto poder. Entonces, partiendo de la posibilidad del periodismo de modificar o crear opinión sobre algunos temas, no podemos vincular al ejercicio del periodismo con la objetividad.

Entiendo a la política como la manera que intervengo en esta realidad. Si lo hago a través del uso de un medio de comunicación, no puedo de ninguna manera ser objetivo.

Dentro del periodismo, a la objetividad se la invoca cuando en realidad se quiere justificar la falta de compromiso con situaciones que por lo menos requieren la denuncia.

2. La denuncia de cualquier tipo de atropello o de violaciones a

cualquier derecho. Hoy más que nunca los periodistas tenemos que ser los encargados de mostrar las atrocidades que produce este modelo extractivo.

El rol de creador de conciencia a través de lo visual, oral o escrito es decisivo a la hora de multiplicar los luchadores.

2. En mi caso, en Los Toldos, como periodista y como radio se cumple un rol social fuerte debido a que esta actividad es una pata importante en el desarrollo de la comunidad en todo ámbito: desde el cuidado del ambiente hasta la defensa de los derechos individuales.

Verónica Huber/ Capital 1. Entiendo que no hay actividad humana absolutamente objetiva. Toda actividad se tiñe con la subjetividad de quien la realiza. El periodismo no está exento de ella. Sería esperable que cada periodista pudiera explicitar desde dónde se habla y se escribe.

2. Informar y asegurar el acceso a información veraz. Difundir asuntos de interés público.

Garantizar el derecho a expresarse de los ciudadanos.

Guillermo Chaile/ Capital 1. Sí, cuando es independiente y el medio no está comprometido con el gobierno.

2. Pluralismo, realidad y, rol principal, cada día informar.

Alicia Olarte 1. No es posible la objetividad periodística por los condicionamientos económicos (por ejemplo, la publicidad) o por condicionamientos de los directivos. Se trata de un negocio empresarial, aunque sería ideal intentar se objetivo.

2. El rol social del periodista es Delfo Ramírez/ Los Toldos 1. Sí, existe la objetividad informar y esclarecer. siempre y cuando tengas asumido tu rol de lo que es un periodista independiente. En el caso de algunos que son sostenidos por un sector de la sociedad pueden llegar a perder objetividad.

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derechos humanos hoy / participación y discusión política

ENTREVISTA A HORACIO GONZÁLEZ

El debate que se viene “Argentina atraversará un gran debate sobre las condiciones políticas de sus instituciones democráticas”, es tal vez la síntesis de la conversación con un pensador de la actualidad.

GERMÁN BANEK

El presente de Horacio González ilustra el momento histórico que viven por estos días los intelectuales argentinos.

Acostumbrado a participar en los debates de la cultura argentina, el sociólogo se involucró de lleno en las discusiones políticas surgidas en los últimos años.

Desde su cargo al frente de la Biblioteca Nacional y como impulsor de Carta Abierta, González es una de las voces representativas de las polémicas que el fenómeno del kirchnerismo ofreció al mundo intelectual.

De visita en Salta para dictar el curso de Posgrado de la UnSa “Simulación, astucia y eufemismo en la cultura argentina”, González conversó con Otros Territorios sobre su libro “Kirchnerismo: una controversia cultural”, en el que analiza los discursos con los que importantes intelectuales explicaron la emergencia del nuevo escenario político: “Pongo sobre la mesa textos, favorables o desfavorables para el kirchnerismo, que participan de una polémica central: la relación entre política y cultura; el hecho de que la vida intelectual, que en el menemismo permanecía integrada a través de ciertas valoraciones comunes, se había escindido frente al kirchnerismo y que esa escisión tenía fundamento.”

¿Qué antecedentes tiene este debate?

–Hay una tradición ilustrada que ve con recelo al populismo en todas sus acepciones, incluso la de Laclau, que es muy refinada; y hay una tradición nacional-popular que, sin despreciar valores republicanos y sintiéndose dentro de las tradiciones democráticas, enfatiza estilos de liderazgo y ve con más vertiginosidad el campo político en las tomas de decisiones, que se amparan en el estilo decisionista de las jefaturas políticas, o como se las llame, porque las palabras están aquí en discusión. Además,

hace una tarea pública y que no toma a priori ningún mandato de designar como correcto todo lo que se hizo.

Habla la lengua de un profesor que

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el papel del estado interviniendo en los rumbos económicos y en la distribución de la renta, que siempre fue una discusión sometida a los vaivenes históricos. El libro no fue hecho con la lengua oficial. No es apologético: habla la lengua de un profesor que hace una tarea pública y que no toma a priori ningún mandato de designar como correcto todo lo que se hizo. Hago una historia de Kirchner, no me privo de analizar críticas que se hicieron por su historia en Santa Cruz, la acusación de que desarrolló en términos de impostura la opción por los derechos humanos, su vinculación con el mercado.

Pero lo hago de una manera que no es la del diario Perfil. ¿Por qué resurge el debate intelectual? ¿Cómo explica el fenómeno de Sarlo en 678?

–Esta época acepta con más benevolencia que hay una figura de la vida intelectual que no está obligada a usar lenguajes del

derechos humanos hoy / participación y discusión política sentido común y del mercado y que, en nombre de autonomías conceptuales, interviene con fuerte presencia. En el caso de Beatriz Sarlo, lo hizo de una manera muy interesante porque los que comenzaron la crítica a los artículos que escribía en La Nación tachándola de gorila tuvieron que aceptar que eran necesarios argumentos más competentes porque ella es dueña de un lenguaje de muchos matices. Además, proviene de una tradición de izquierda, que hoy se convirtió en una tradición liberal. Pero no de cualquier liberal, porque fue de izquierda, maoísta, crítica literaria, y al mismo tiempo presenta argumentos para la polémica. Obligó a las personas relacionadas intelectualmente al gobierno a refinar argumentos.

En el debate se presentó una tradición peronista, la de Guillermo Mariotto, y una posición vinculada al lenguaje de la crítica y el ensayo, que es la de Ricardo Forster, emparentada con la de Sarlo, aunque con posturas políticas diferentes.

Tuvo mayor importancia porque se hizo en el programa que defiende al gobierno con argumentos proclamativos, vinculados a la identidad gubernamental.

Que Sarlo vaya a ese programa es radicalmente importante, porque ella criticó que en TN había voces alternativas y en 678 reinaba una homogeneidad. Eso se rompió y por ello tuvo repercusión.

Sarlo ocupa un lugar difícil de definir en la tradición liberal republicana, porque su estilo polémico es de izquierda y el análisis que hace de la actual escena es el de una antropóloga interesada en la vida popular. De modo que este debate es un modelo de debate muy interesante para Argentina.

El mundo periodístico deberá recuperar niveles de objetividad porque hoy está fraccionado, producto de que triunfó la idea de que no no

hay neutralidad y de que cada sector social organiza su exposición de los hechos ¿Hay vínculos entre la reactualización del debate intelectual y el regreso a la militancia?

–Yo siempre intervine en la escena pública, con los matices del caso y los golpes de la fortuna. Por supuesto que el kirchnerismo fue un llamado para muchas personas que no tenían esperanzas de participación. Hay cierto horizonte de incorporación de jóvenes, con las características de esta época. Argentina atravesará un gran debate sobre las condiciones políticas de sus instituciones democráticas, sobre el uso del lenguaje político. Por lo tanto será un debate del uso de los medios. Todo el libro de Sarlo es un debate sobre medios. Más que al kirchnerismo, critica cierta capacidad de la televisión de vaciar los lenguajes políticos, de modo que es una crítica extensiva a todas las fuerzas políticas. Y del kirchnerismo Sarlo critica un uso vulgar del lenguaje. Eso no es muy aceptable para mí. Su idea es que la discusión política se hace dentro de una elite, que no me parece lo más afortunado.

Veo dos interpretaciones de la idea de elite. Una, para decir que hay una política hablada por letrados y que hay un mundo degradado, dirigido por intelectuales de la televisión, que nacen con su voz política en la TV y que bajan el nivel de inteligibilidad, suponiendo que así pueden gerenciar los colectivos sociales populares. Es contradictorio pensar que hay sólo una elite que discute y la idea de suponer que es un mito atribuirle a una elite la capacidad directiva. Eso pone en discusión la idea de elite: o estamos frente a una elite que finalmente son poderes de comunicación, o estamos frente a una clase intelectual minoritaria que no maneja una audibilidad social. Es un debate necesario porque se relaciona íntimamente con la ley de medios. No sólo debatimos si los medios emergen del Estado, la sociedad o las empresas privadas. La ley presenta una discusión que en sí mismo no resuelve: qué lenguajes políticos utilizaremos, qué lenguajes políticos se entenderán, qué hay que vulgarizar, qué hay que trazar como límite de comprensión en la sociedad por parte de los medios. Esas decisiones hacen a la vida democrática y las debemos dar en la universidad, en los medios, en el mundo intelectual. Y también en el mundo periodístico, que deberá recuperar niveles de objetividad porque hoy está fraccionado, producto de que triunfó la idea de que no hay neutralidad y de que cada sector social organiza su exposición de los hechos. Esa idea puede desgarrar la sociedad si se prolonga. Habrá que restaurar niveles de objetividad, para una profesión periodística que recorra todas las facciones que están en juego.

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derechos humanos hoy / discriminación

SOBRE LA INFORMACIÓN XENÓFOBA QUE SE ENVÍA POR CORREO ELECTRÓNICO

La cigarra y la hormiga

ANDREA FERNÁNDEZ

A los correos electrónicos llegan mensajes distorsivos, equivocados y hasta malintencionados.

Discriminaciones, insultos y agravios circulan con ingenuidad o complicidad de quien lo envía.

SANTIAGO KALINSKY GONZÁLEZ

Ya hace tiempo que llegan varios mensajes de tono similar que a algunas personas les gusta hacer circular como si fueran grandes verdades; o bien, lo hacen porque les parece que son divertidos. Hasta ahora siempre pude ver que se basan en generalizaciones distorsivas, equivocadas y discriminatorias; incluso algunos contienen insultos y agravios que no deberían darse ya que no están fundamentados, sino que son simples reacciones o arrebatos de bronca. No sé si quienes los hacen circular no analizan estos rasgos que invalidan el mensaje, y son cómplices ingenuos de estas acciones discriminatorias, o si realmente empatizan por resentimiento con los contenidos y no les

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importa verificar si tienen o no sentido. O si van más allá de lo que la dignidad y el respeto hacia las personas sugiere, y se convierten en cómplices intencionales de estos mensajes falaces.

El último mensaje que recibí agrupa en dos categorías, la cigarra y la hormiga, a toda la población argentina (aunque al final aparece la araña, para dar el toque xenófobo que cierra el círculo perfecto de este pensamiento obtuso).

Según la interpretación que creo tienen quienes concuerdan con este mensaje, las hormigas serían la “clase media” que trabaja y las cigarras serían los pobres, aquellos que ese discurso suele mencionar como negros de

algo más que viven del trabajo de “las hormigas”.

Esta misma gente, que simplifica falazmente a la diversidad humana en dos categorías ridículas e incompletas, se queja de que desde el gobierno “se polariza a la sociedad”. ¿Y por casa cómo andamos? Como siempre, es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio.

Sería bueno que quienes reenvían estas cosas de manera irreflexiva se pongan a mirar con un poco más de amplitud y profundidad cuál es la realidad social de la Argentina: cómo y por qué llegamos al punto en el que estamos, por qué hubo y hay tanta gente que no tiene posibilidades materiales de supervivencia, ni de recibir educación y salud

siquiera en el grado mínimo que exige la dignidad humana.

Pero claro, para qué pensar en el pasado, en el desastre económico y social que se provocó en el país, cómo mínimo desde el inicio de la dictadura militar (aunque en realidad esta triste historia tiene décadas y siglos de existencia), pasando por los gobiernos democráticos que los siguieron.

En todo ese tiempo, y desde antes también, se sometió al pueblo argentino a un saqueo de sus posibilidades de ponerse de pie, de bastarse a sí mismo.

Se entregaron las riquezas naturales de esta tierra y el producto del esfuerzo de su gente, a poderosos grupos económicos locales y extranjeros. Todo esto a cambio de una indigna retribución de los entreguistas que también se dicen argentinos (gobernantes varios y “empresarios” locales), que salvaron su pasar y el de varias generaciones de sus herederos, pero que cargarán en sus espaldas con el sufrimiento de millones de personas (de argentinos), de ayer, de hoy y de mañana; hasta que algún día finalmente se acepte que vivimos en la misma casa, que somos una gran familia; y que no puede pasar en un hogar, en una comunidad familiar, que algunos de sus hijos se sienten

derechos humanos hoy / discriminación

a la mesa a disfrutar el banquete, y que otros integrantes de la misma familia tengan que esperar que caiga algún hueso de la mesa para poder roerlo, o que ese banquete pase por el tracto digestivo de los privilegiados para ver si al ingerir ese excremento (cómo hacen los perros cuando tienen mucha hambre) se incorpora algún nutriente que permita seguir sobreviviendo indignamente.

Ni cigarras, ni hormigas, ni arañas: somos todos personas. ¿Será posible que algún día tengamos la sensibilidad y solidaridad suficiente para reconocer esto y actuar en consecuencia? El verdadero origen del problema, aunque muchos no lo quieran ver: la desigualdad.

¿¡Viva la patria!? ¿Feliz bicentenario más uno? La patria es, fundamentalmente, toda la gente que habita en este territorio, y para muchos de ellos no hay nada que festejar.

Así que, como dijo un amigo en ocasión del 21 de mayo que algunos anunciaban como el fin del mundo o el inicio del mismo: ¡Feliz fin del mundo! (Total, para una gran mayoría este fin del mundo viene ocurriendo desde que nació).

Sería bueno que quienes reenvían estas cosas de manera irreflexiva se pongan a

mirar con un poco más de amplitud y profundidad cuál es la realidad social de la Argentina.

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derechos humanos hoy / aborto

UN TEMA PARA LA CONTROVERSIA

Posiciones antagónicas LUJÁN GONZÁLEZ

Las posturas favorables al aborto (la interrupción del embarazo como un derecho propio de la mujer) de a poco fueron instalando su discurso en la opinión pública, con el surgimiento de asociaciones que promueven la sexualidad responsable y la reproducción como derechos ínsitos de la mujer.

Sin embargo, existe otra mirada (la más generalizada en la provincia y que proviene de la Iglesia Católica y también de la Iglesia Evangelista -aunque dentro de estas organizaciones hay grupos que disienten con el discurso general, tal es el caso de la corriente “Católicas por el Derecho a Decidir”) que está en contra, y que ve al aborto como “la cultura de la muerte”. En diferentes oportunidades la máxima autoridad de la Iglesia Católica en Salta, el arzobispo Mario Cargnello, se manifestó en contra; y en reiteradas oportunidades en medios de comunicación instó a que “no se lleve a las mujeres a malas influencias, ni a tomar decisiones equivocadas “.

El debate ya instalado, llevó a Otros Territorios a consultar a estos sectores, en los cuales el discurso que se escucha recurre a frases como”apelar a la continuidad de la vida” o defender “los derechos del niño por nacer”.

Macarena Cañada, es una referente juvenil de la Pastoral Universitaria: “Particularmente yo estoy en contra del aborto. ¿Por qué sí a la vida? La vida es amor, oportunidad y esperanza. ¿Por qué no al aborto? Es mucho mejor educar y prevenir. Una mujer nunca se escapa de su realidad y la enfrenta, por nueve meses de paciencia se puede hacer feliz a una

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pareja que no puede tener hijo. Por más que no se conciba la idea de que un espermatozoide y un óvulo hacen un corazón, si una madre mata, no olvida, porque la mujer es amor y entrega... Y de ella depende que lo siga siendo”, argumenta la joven.

Macarena, en su convicción, junto a muchas jovencitas de la Pastoral Universitaria (pertenecientes en su mayoría a la Universidad Católica) son algunos de los organizadores de la denominada “marcha blanca” en contra del aborto. Y fue una activa participante de los cacerolazos en contra del matrimonio igualitario, destacándose como una de las oradoras en la Cámara de Diputados, el año pasado en la audiencia pública en la cual se expusieron los diferentes puntos sobre esta ley.

“Soy católica apostólica romana y me alejé de Dios en mi adolescencia. Volví a él y tengo la certeza de que todos estamos llamados a servirle aunque no creamos en su presencia”, afirma orgullosa.

Las homilías y rosarios en contra de posibles legislaciones para la descriminalización del aborto se hacen sentir en todo el país. Sin embargo, son estas situaciones las que exacerban las posiciones de ambos lados y que llevan a confrontar las diferentes percepciones de la realidad.

Sí al aborto para no morir A nivel nacional son diversas las campañas que ya buscan un “aborto, legal, gratuito y seguro”. Una de ellas, contó con la adhesión de organizaciones locales, y fue realizada días atrás en el centro de Salta Capital.

derechos humanos hoy / aborto

Mientras unos reconocen el derecho de la mujer a ser informada sin tabúes y a decidir sobre su cuerpo; otros lo rechazan asentados en creencias religiosas.

Una discusión que comprende derechos individuales y colectivos.

Entre tantas, una de las consignas esgrimidas fue “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir” o “aborto legal, una deuda de la democracia”.

Apoyan el tratamiento de una ley en el Congreso y un debate más abierto en los diferentes sectores de la sociedad.

Esta propuesta está hoy materializada en el proyecto de “Ley de interrupción voluntaria del embarazo”, presentado en marzo de 2010. Cuenta con la firma de cincuenta diputados nacionales, entre los cuales se destacan Cecilia Merchán (de Libres del Sur), Héctor Recalde (Frente para la Victoria), Martín Sabatella (Nuevo Encuentro), Roy Cortina (Partido Socialista), entre otros.

“Cuando realizamos manifestaciones solicitando más políticas para las mujeres, que se dé educación sexual en las escuelas, nos vienen a agredir. Nosotros no estamos en contra de ningún credo, solo solicitamos que nuestros niños no sean regidos por la religión, sino que tengan derecho a saber todas las posturas, sobre todo si estamos hablando de la educación pública”, manifiesta Gabriela Veleizán, presidenta de ALUDIS (Asociación en Lucha por la Diversidad Sexual).

No al aborto para no morir Las manifestaciones en contra del aborto siguen siendo mayoría en Salta. Al menos es lo que se percibía mientras se repartían folletos o consignas a favor de la descriminalización días atrás, en pleno centro.

Las voces se hicieron escuchar: “Yo estoy en contra por varias razones.

Básicamente el aborto es una pena de muerte encubierta, un bebé no tiene

derecho a elegir si vive o no. En cambio a tantos delincuentes sueltos (mayores de dieciocho años) le tienen máscontemplación que a un bebé, que no eligió ser concebido”, afirmó Isabel Galarza, quien se define a sí misma como una carismática.

“Estoy en contra del aborto, yo soy una mujer formada y si quedara embarazada, sería madre. Porque en el único caso que me quede embarazada sería porque tuve ganas, estoy en contra cuando existe el conocimiento previo de cómo evitar un embarazo”, añadió una joven.

La discusión se encuentra vigente, y está instalada en el país y en la provincia, las voces se hacen escuchar, y son diferentes las motivaciones que las mueven. La pregunta en cuestión es considerar cuál es la decisión correcta, la que implica el mayor respeto por los derechos, la que más humaniza. Está abierto el debate.

OLMEDIADAS Hoy por hoy el tema del aborto está en la agenda política local, y fue una de las cuestiones abordados por los candidatos a gobernadores en las elecciones del diez de abril pasadas. Cómo olvidar las remeras, y las gorras, amarillas del candidato Alfredo Olmedo que portaban las promotoras cuya consigna era “No al aborto, sí a la familia”. O las controvertidas declaraciones del gobernador Juan Manuel Urtubey, que instó a defender los principios católicos que representan a todos los salteños, en diciembre del año 2010, cuando premió a la senadora nacional Liliana Negre de Alonso, entre otros, por “defender a la familia”.

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Las cosas que quiero por Rodolfo Walsh Lilia mis hijas el trabajo oscuro que hago los compañeros el futuro los que no obedecen los que no se rinden los que piensan y forjan y planean los que actúan el análisis claro la revelación de lo escondido el método cotidiano la furia fría los títulos de mañana la alegría de todos la alegría general que ha de venir un día la gente abrazándose ANDREA FERNÁNDEZ

la pareja en su amor la esperanza insobornable la sumersión en los otros.

(de su diario del 14 de marzo de 1977)

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