Antología de citas Stoichita, Victor. Breve historia de la sombra. Madrid: Ediciones Siruela, 2006. “El artista interviene sólo en un segundo momento. Representación de una representación (imagen de sombra), la primera pintura es sólo copia de una copia. En el texto de Plinio el platonismo queda implícito” (p.16) “Los motivos que llevaron a la joven a calcar la imagen del amante, la razón que impulsó al padre a darle el volumen de que carecía y a colocar finalmente el “simulacro” en el templo se silencian. (…) La significación de este pasaje es importante: se trata, en efecto, de una metafísica de la imagen cuyo origen debe buscarse en la interrupción de la relación erótica, a raíz de la separación, del alejamiento y, en definitiva, de la ausencia del modelo. De ahí el carácter de “sustituto” que adopta la representación” (p.19) “La verdadera sombra, siempre cambiante, acompañará al amado en su viaje, la imagen de la sombra dibujada en la pared es una reliquia que se opone al movimiento del viaje, adquiriendo así un valor expropiatorio y propiciatorio” (p.19) “Una lectura atenta del texto nos revela que la hija de Butades, en la víspera de la partida, “fija”, por decirlo de algún modo, la imagen de su amante en una verticalidad que se quiere perpetua, para exorcizar al peligro de muerte y conservar una imagen conservatoria del ausente eternamente “vivo”, “en pie”” (p.20) “La sombra que proyecta el modelo sobra la pared reduce al ser a una apariencia. Esta sombra no es “el cuerpo”, aunque es, doblemente, el otro del cuerpo (como “espectro” y como “cabeza”)” (p.21) “(Puesto que el amado muere) el padre crea un simulacro (similitudo ex arguilla) que tiene la función de doble del desaparecido. Este doble está provisto de “alma” (bajo la forma de la sombra) y de “cuerpo” (bajo la forma de receptáculo de esta alma)” (p.22) “Existe una relación intercambiable entre las dos variantes de la sombra: mientras el hombre vive se exterioriza en su sombra negra, que desaparece en el instante de la muerte” (p.23)