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Jorge Ramírez en la NAD después de
Jorge Ramírez en la NAD después de 25 años en la Pacific Union Conference
Después de servir en la Pacific Union Conference durante más de 25 años, Jorge Ramírez, recientemente secretario ejecutivo/ director ministerial de la Arizona Conference, se despide del oeste una vez más mientras se dirige al este al aceptar el cargo de subsecretario de la División Norteamericana (NAD).
«Mi corazón está lleno de gratitud a los administradores de la Southeastern California Conference, de la Arizona Conference y de la Pacific Union Conference por su apoyo a mis 25 años de ministerio, tanto como pastor como administrador», ha dicho Ramírez. «He sido bendecido con amables mentores durante esos años y, a medida que hago la transición a la División Norteamericana, quiero agradecer a esos líderes por dar forma e influir en mi ministerio de tantas maneras positivas».
Ramírez tiene una licenciatura en ministerio pastoral de Loma Linda University y una maestría en divinidad de Andrews University. Comenzó su ministerio pastoral en 1985 en la Southeastern California Conference, donde sirvió como pastor de jóvenes, pastor asociado y pastor de grandes congregaciones durante 22 años. En octubre de 2007, se mudó a la Potomac Conference para servir como vicepresidente de administración. En mayo de 2014, completó su doctorado en ministerio de Andrews University en liderazgo y crecimiento de iglesia. En enero de 2019, recibió una invitación de la Arizona Conference para servir como secretario ejecutivo y director ministerial.
Ramírez y su esposa, Bexy Castellón, quien trabaja como terapeuta de la respiración, son los orgullosos padres de tres jóvenes: Reuben, Ryan y Reiss. Cuando no está trabajando, a Ramírez le gusta trotar, viajar y tocar la guitarra. Su mayor pasión es servir al Dios quien tiene el poder de restaurar las relaciones quebrantadas. «Considero que la restauración de las relaciones quebrantadas es el milagro más grande en la vida», ha indicado Ramírez. Nacido y criado en un hogar católico muy conservador, Ramírez escuchó por primera vez el mensaje adventista cuando era adolescente en una serie evangelística patrocinada por la iglesia hispana de La Sierra en Riverside, California, y fue bautizado en 1979. Sus dos primeros pastores como nuevo creyente fueron inspiradores para él y fueron bastante influyentes en su decisión no solo de aprender más sobre la Biblia y unirse a la iglesia adventista, sino también de elegir el ministerio como el trabajo de su vida.
«Me enamoré de la forma como hacían su ministerio y de lo mucho que amaban a la gente, incluyéndome a mí», ha reflexionado Ramírez. «Se interesaron especialmente en mí y me invitaron a servir a la iglesia, incluso cuando era adolescente. Así es como me enamoré de Dios y de su iglesia».
Al principio de su ministerio pastoral, Ramírez experimentó un «bautismo de fuego» que, por desafiante que fuese, sirvió para fortalecer y solidificar su compromiso de servir a Dios. Algunos miembros de una de las iglesias donde pastoreaba estaban lidiando con la posesión demoníaca. Al lidiar con esa situación como pastor, Ramírez se dio cuenta de cuán real es la batalla entre el bien y el mal. «Hice un compromiso de por vida con Dios para servirle y a su misión», ha dicho Ramírez.
Ha estado a la altura de ese compromiso durante más de 25 años y espera continuar haciéndolo en la NAD. Después de haber vivido en el este durante 13 años en puestos anteriores, Ramírez extrañará a sus muchos amigos y conexiones hechas en el sureste de California y Arizona, pero también espera volver a
conectarse con sus amigos y mentores en Maryland. La Pacific Union Conference siempre ocupará un lugar especial en su corazón y en su camino pastoral, porque aquí es donde todo comenzó.
«Fue aquí donde Dios me llamó al ministerio. Fue aquí donde Dios colocó a hombres y mujeres piadosos en mi camino para guiarme», recuerda. «Fui ordenado como ministro en la Pacific Union. Mi primer sermón y bautismo tuvo lugar en la Pacific Union».
«Jorge es un gran tipo. He disfrutado trabajando con él», indica Ed Keyes, presidente de la Arizona Conference donde Ramírez sirvió durante tres años. «Es un súper organizador y un planificador estratégico. Está más orientado a los detalles y yo más sobre el panorama general, así que nos complementamos bien en ese sentido. Es un sólido adventista del séptimo día en cuanto a su enseñanza, es ético y es lo suficientemente humilde como para liderar desde la segunda silla».
A través de su trabajo en el ministerio, el camino personal de Ramírez con Dios también se ha fortalecido, lo que cual permite aprender y crecer personal y profesionalmente. Espera llevar toda su experiencia y pasión por el servicio a su nuevo puesto.
«He crecido como cristiano y como líder con cada oportunidad que Dios me ha dado», ha dicho. «Como pastor, aprendí a amar a las personas y a ver su potencial para la misión. Como administrador, he aprendido a entender lo que es la misión y la visión y a aplicar esas habilidades de liderazgo en mi ministerio como oficial de conferencias. También he aprendido a vivir según los valores de integridad, excelencia, servicio y crecimiento espiritual. Espero continuar sirviendo a la misión de la iglesia junto con mis compañeros administradores en la División Norteamericana».
___________________________________________ Por Cynthia Mendoza
¿Visiones y revisiones POR RONALD D. GRAYBILL ¿Ha pensado alguna vez en la forma como se escribieron los libros de Ellen White? ¿Ha considerado alguna vez la enorme cantidad de material que escribió?
Elena de White reclutó a más de 20 asistentes literarios para convertir sus manuscritos en prosa adecuada y pulida. Después, tanto antes como después de su muerte, sus escritos publicados fueron corregidos, combinados, eliminados, ampliados, revisados, modernizados, adaptados, simplificados, traducidos, reimpresos y reformateados. Este libro es la historia de cómo sus visiones pasaron por esas revisiones. Explica los procesos editoriales que comenzaron cuando sumergió por primera vez su pluma en tinta y lo puso en papel. Incluso describe esa pluma y ese papel —Ellen White nunca usó pluma de ganso para escribir—. Un siglo después de su muerte, los escritos de Ellen White continúan generando interés y fascinación, y la gente continúa preguntándose cómo pudo producir tantos libros y artículos en su vida. En su último libro,
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White, sino uno que intenta comprender el intrincado proceso que entró en la publicación de sus libros y artículos. Este es un estudio que debería haberse realizado hace mucho tiempo y que generará más investigación y una mejor comprensión de las publicaciones de la señora White. —Denis Fortin, profesor de teología histórica,
Andrews University