Henry de Montherlant fue un escritor y dramaturgo francés. Puede ser considerado uno de los grandes escritores dramáticos franceses del siglo XX y compararse con un Proust o un Celine. Percy C. Acuña Vigil
Henry de Montherlant. (Francia: 1896-1972).
Henry de Montherlant, fue un novelista, ensayista, autor dramático y académico francés. Montherlant pertenecía a una familia aristocrática y se formó en un extremado individualismo elitista, influido por las lecturas de André Gide, Maurice Barrès y Friedrich Nietzsche. Ejemplos de ello son las novelas Las Olímpicas (1924) y Los bestiarios (1926). Fue un ardiente nacionalista, deportista y amante de los placeres que combinaba los valores del paganismo y la religión cristiana. Se hizo famoso por su dominio literario de las actitudes misóginas de la
aristocracia y por su desprecio hacia las debilidades de la democracia francesa. Su principal aporte a la literatura francesa fue un ciclo de cuatro novelas elegantemente escritas, donde se muestran unos análisis interiores, (1936-1939), como se pone de manifiesto en obras como En las fuentes del deseo (1927), Los solteros (1934) o Las jóvenes (1936-39). Su fama como dramaturgo se fundamenta en sus numerosos dramas históricos, entre los que destacan Malatesta (1946), El maestro de Santiago (1947) y Port-Royal (1954). En 1960 fue elegido miembro de la Academia Francesa.
Montherlant nunca buscó formar parte de ninguna vanguardia y entendió el oficio literario como una forma de cultivo del espíritu y de dominio de sí, que puede muy bien prescindir de la fama e, incluso, de los lectores. Su consigna existencial, llegar hasta el extremo de sí mismo, la forjó en la aleación de su voluntad y la perfección estilística, en la fusión de los espacios ajenos a su individualidad y su concepción agónica del arte. Desde su interior, Montherlant emprendió el trabajo de escritor como un destino y como una disciplina de la vida activa, no como elucubración erudita sino como algo que es, con plenitud, también la vida misma.
Mientras los surrealistas indagaban y experimentaban por caminos ignotos la expresión formal del lenguaje, Montherlant se resguarda en los clásicos, especialmente en el mundo romano y en las situaciones límite de los conflictos.
Montherlant, a pesar de ser un autor teatral prolífico que frecuentemente trataba con rigor pascaliano muchos de los conflictos de la fe, mantuvo incólume su posición nihilista, que se edifica a partir de la alternancia. Epígono francés de Nietzsche, heredero y admirador de Maurice Barrés y de Gabriel D’Annunzio, asume su propia existencia como un complejo donde coexisten sistemas de valores contradictorios. La obra donde el propio autor se presenta con mayor transparencia es la novela El caos y la noche, cuyo personaje central es un anarquista que, a su manera, logra conciliar su fervor religioso con la tradición cenecista de la España romana, a la que suma el desencanto anárquico por la modernidad.
La primera influencia literaria decisiva en su obra la proporciona una novela histórica basada en hechos de fe y en acciones incontenibles del imperio: Quo Vadis del premio Nobel Enrique Sinkwiewicz. Entrando apenas a la adolescencia, escribe su primera obra novelada, Pro una terra, texto en el que ya se trazan algunos rasgos que posteriormente encontraremos en el resto de sus obras: el mundo latino como telón de fondo. Todas las obras de teatro de Montherlant logran su más distinguido impacto por medio de la marcada serenidad de distanciamiento existente detrás de sus inmediatamente fuertes y violentas emociones. Son los productos de una aceptación de la vida que resulta de un hondo entendimiento de la vida. En este sentido de la palabra “madurez”, estas obras de teatro son el cuerpo más maduro de la obra literaria de Henry de Montherlant. Ofrecen una sabia, desprendida y confortante visión que transmite y acepta calmadamente las alternantes sístole y diástole de la vida humana individual y de toda la existencia. Textos: Las Olímpicas, Los bestiarios, Mi jefe es un asesino. “Desert Love”, “Guerre civile, La“, “La Reine morte”, “La Ville dont le prince est un enfant” “Le Maître de Santiago”,“Malatesta”, “Port Royal”, “The Bullfighters”, “The Girls: A Tetralogy of Novels”. Galardones: Gran Premio de Literatura de la Academia Francesa (1934)
https://www.britannica.com/biography/Henry-Montherlant http://www.nysun.com/arts/pitiless-universe-of-montherlant/58590/ http://www.academie-francaise.fr/discours-de-reception-de-henry-demontherlant