De migraciones y tierras...

Page 1


Revista de viajes y costumbres. Número 3. Julio de 2015. Edita: Publicaciones Imprecisas S.L. Fotografía: © Perec ( http://www.flickr.com/photos/xaman-ek ) Barcelona (España).

Prohibida la reproducción total o parcial. Es propiedad del autor.

Portada: Conjunto arqueológico de Les Termes, espacio histórico de la villa de Sant Boi de Llobregat (Barcelona). ( http://www.museusantboi.cat/es/ ) Contraportada: Salmón a la plancha con guarnición de verduras, gentileza de C3 Bar, Barcelona. ( http://www.tourmixproductions.com/cas/CEbarSomos.html )


DESDE LA EDITORIAL

Toda puesta en escena requiere de una reflexión. Tras unos primeros compases hemos considerado que siempre hay que adaptarse en relación a la transmisión del mensaje, pues "nada es, todo cambia", que dijo el griego Heraclito. Este soporte evidencia un ejemplo más de esa evolución, consustancial con el medio que nos ocupa.

Convenimos que lo obsoleto de la forma pasa de moda de inmediato. No así el contenido, quizás efímero, como cualquier transitabilidad personal que se precie, como cualquier sueño que nos engrandece sin saber cómo, aunque enrriquecedor para el individuo. Sin duda, el mundo está cargado con un sinfin de experiencias, de las cuales sólo percibimos sus esencias del modo más inesperado, sutil, sin florituras, conservándose en la memoria a través de los tiempos.

El viaje forma parte del nosotros, de nuestros inconscientes colectivos. Está en las raíces culturales inmediatas de todo territorio en sus actos fundacionales. Camina con (por) nuestras estructuras y percepciones de ese espacio que nos rodea. Las nuevas generaciones, como las antiguas, buscarán siempre lo nuevo, lo desconocido, lo no trillado, porque de este modo se encuentran a sí mismos, afirman sus identidades y se realizan como personas: el ansia de viajar, como metáfora del conocimiento, desaparecerá con los seres humanos.


"Todos tenemos océanos que volar..., siempre que tengamos el valor de hacerlo. ¿Es importante? Quizás, pero, ¿qué saben los sueños sobre límites?" Amelia Earhart, (1897-1937), aviadora estadounidense.


Sumario:

"Delta: la fragilidad de un espacio". Final de río (Cataluña). Foto. Mujer de la étnia serer. Aldea rural de la región de Fatick (Senegal-África occidental). "Iceland". ¿Tierra de hielo? Islandia (Norte de Europa).


Delta: la fragilidad de un espacio.

de sedimentos y nutrientes que un río envía en su desembocadura al mar. Ello configura unas características especiales en el territorio, determinando el modo de vida de todos los seres vivos que lo habitan, sean nómadas o sedentarios.

Final de río.

Geográficamente hablando, un delta es un accidente costero. Asimismo, es el resultado de la combinación entre la baja pendiente del relieve terrestre y el traslado

El humedal más importante del Mediterráneo occidental está capitaneado por el río Ebro. Uno de los cauces de agua dulce más notables en este espacio acuático del globo, con 930 kilómetros de longitud, “sufre” esta situación desde los siglos XIV-XV.


por el contrario, las precipitaciones más bajas, considerando así a la península Ibérica como la más árida del continente europeo.

La gran deforestación en esta época fue creando un paisaje exclusivo, creciendo hasta su forma definitiva en la pasada centuría. Actualmente, la incisiva acción del cambio climático amenaza un lugar donde, aparte de la riqueza animal y vegetal de singularidad y ejemplaridad notables, multitud de personas, familias y pueblos tienen una vida con un futuro incierto que se resisten a abandonar. A ello también se unen varias cuestiones científicas ya comprobadas: la tasa de evapotranspiración más elevada y,

El denominado Plan Hidrológico Nacional del año 2001 (posteriormente 2005) fue la gota que colmó el vaso, y nunca mejor dicho. Unas políticas que deseaban un trasvase de sus aguas hacia otras comunidades lejanas, sin tener en cuenta cuestiones de índole social, cultural y ecológico.


La negativa por parte de implicados y expertos no se hizo esperar, siendo la respuesta de una trascendencia lógica, reflejándose en todos los medios y la prensa del país.

Hay un concepto que se debe tener en cuenta a la hora de valorar todas estas circunstancias: la denominada "impermanencia”, término al que hace referencia el título de este comentario.

En su tramo final, un río siempre lucha contra todos los elementos que lo perjudican en su afán por abrirse paso hacia el mar: mareas, vientos, etc.

Es todo un proceso geodinámico de progresiónregresión, que crea unos equilibrios de polaridad máxima en todos los niveles de habitabilidad biológica y natural.


La humanización, por tanto, se hizo muy difícil en según qué periodos históricos y el actual es de extrema controversia dado el interés medioambiental y socioeconómico de la zona, pues sus habitantes siguen en el lugar que les vio nacer, aportando trabajo y expectativas para años venideros, conscientes de la importancia de esta porción de tierra, aparentemente arenosa y yerma, pero gustosa y amable. El genio Picasso anduvo muy cerca.



su influencia contra personas y objetos, sacudiendo con toda su fuerza cuando se encapricha.

ICELAND

¿Tierra de hielo?

El vehículo se zarandeaba apreciablemente. No temía por mi integridad, habituado a las ventadas del norte catalán. En aquella ubicación del sur de Europa, la tramontana ejerce toda

Cobijarse es el verbo común, objetivo primordial en esas circunstancias mientras sucede el fenómeno. Pero a esta latitud, toda la crudeza del agente atmosférico se manifestaba con extrema definición. Percibes lo agresivo que puede llegar a ser un Lötun enfadado, ese ser mitológico que, sin ser maligno, devora todo lo establecido, esa figura que deja sentado quién es el amo en esta naturaleza, que tú no eres nadie en su espacio. El lenguaje en el protocolo de bienvenida, aquí, es diferente.


En aquellas primeras horas, cuando la tenue luz de la mañana comenzaba a dibujar los contornos de esta severa geografía y el objeto fotográfico es lo suficientemente atractivo como para dejar constancia con unas instantáneas, se hacía difícil salir del vehículo y avanzar, situarse para la secuencia, preparar la escena y presionar el disparador. El intenso frío atenazaba a cualquiera. La paciencia no es una cualidad que discuta con las bajas temperaturas. Por lo menos, en este caso. Más allá del ya claro horizonte, hacia el grandioso norte, Groenlandia...

A medida que la luz emerge, la mirada no alcanza a ver un final. Hoy, la bruma, manto que viste con vehemencia esta isla, deja entrever horizontes muy, muy lejanos. La ruptura de esta linealidad la proporcionan majestuosas elevaciones cortadas a pico, algunas todavía nevadas, tronos imponentes, dicen las leyendas, de gigantes. Thor nos concede sus bendiciones por esta vez... Como inabarcable podríamos definir todo ese espacio que rodea al neófito en su intento de controlar, de algún modo, un territorio invadido por vez primera. Por que esa es la principal visión: la infinitud de esta porción de tierra yerma, hirsuta y áspera que te sobrecoge por su extensión y surrealismo marciano. Si el viaje, dicen, es una búsqueda del conocimiento, del otro, de abstraerse con/en el paisaje, ¿cómo será el encuentro? Soledad con uno mismo, con ese tuyo desconocido que se manifiesta todavía más en un no-lugar, que dijo el emérito Marc Augè, como éste. A poco que transites, un universo pétreo, retorcido y caprichoso, forma una naturaleza sosegada, pero viva. Oteas cada palmo, kilómetro, para descubrir diferencias, colores, formas, que absorban un punto de vista y rompan con una agradable y diversa monotonía.


La península de Reikjanes se ofrece con un esplendor pausado, sabiendo que la orografía y composición de su terreno es un valor, desde hace siglos, inalterable. Intemporal. Lo habitan los mal llamados trolls, personajes caóticos en constante lucha y que tanta fama dan a la mitología local. ¿Qué encanterio espera tras el recodo?

poco a poco, discretas demarcaciones, creando un urbanismo disperso. Lo duro del territorio no amedrentó a unos viajeros empedernidos que, asentando sus reales en una tierra de dudosa rentabilidad, se empecinaron en demostrar sus benignas condiciones, explotándolas a su favor. Porque ese es el hecho diferencial.

Un genovés tuvo la culpa. Y un bretón, ambos inspiradores de nuestro imaginario y sed aventurera. ¿Por qué escogieron este rincón? Experiencia, romanticismo...; quién sabe. Dos épocas diferenciadas, ambas motivantes en lo científico. Pero hay que ser realista: la emigración nórdica del siglo IX hizo que la habitabilidad fuera nutriendo,

Una geografía que nutre, que suministra energías limpias, las cuales son canalizadas por toda su extensión, complementando otros recursos, racionalizados y con criterios claramente sostenibles.


Testimonio de aquellos primeros asentamientos se recrean en Njarovik, con su excepcional recinto y centro de interpretación respecto a la vida de aquellos individuos que la historia, siempre escrita de modo parcial, denominó vikingos.

Pero hay que perderse un poco y hacer unos largos más. Krisuvik, donde el planeta expresa esa geotermia candente, sitúa inmediatamente bajo tus pies toda su fuerza, brotando hacia la superficie y demostrando la viveza que caracteriza esa distinguida personalidad a través de pozos de lava que borbotean y columnas de vapor. La mineralización existente colorea un recorrido señalizado y cuidado al detalle para una mejor apreciación cromática. Sin embargo, tu pituitaria se ofende; el azufre emitido al ambiente deja un mal sabor.


Otro diferente espera en el puerto de Grindavik, cuyas playas de oscura arena embriagan lo suficiente para desear una próxima degustación y que el ámbito culinario satisfaga los estómagos más exigentes. Ya es hora... Islandia puede parecer ese trozo de rocas olvidado que flota cerca de Círculo Polar Ártico. Dicho de este modo suena a indiferencia, pero cuando te adentras en sus confines, descubres un carácter afín a lo que las fuerzas telúricas han modelado en esta parte del globo terráqueo desde la noche de los tiempos, incluyendo sus gentes y modos de vida. Geológicamente, es una tierra joven, con un Índice de Desarrollo Humano notable y encantos a descubrir..., si el clima lo permite, pues la imprevisibilidad del mismo es la nota dominante en cada periplo. La corriente del Golfo la suaviza dada su latitud, pero no puedes obviar que estas situado en el norte del norte geográfico. La carretera 36 certifica lo que los antiguos guerreros galos temían siempre: que el cielo no caiga sobre nuestras cabezas. Dejamos el nivel del mar y aunque el mal tiempo desanimaría a mas de uno, el espectáculo visual asegura el atractivo.

Los juegos de nubes, mecidas por ese viento omnipresente, molesto, con el añadido de una fina lluvia horizontal, las grandes extensiones de un espacio sin fin, lagos de onduladas aguas, elevadas colinas que recrean una grandiosidad sin parangón, hacen distraída una juiciosa conducción. A lo largo del itinerario se solapan amplias granjas y adecuados pastos para una producción derivada por su lógica pretensión. Un verde panorama campestre, hoy agrisado por el ambiente desapacible, da paso a una vista de poblaciones algo dispersas entre sí, donde la neuralgia se condensa alrededor de ese surtidor de combustible y su correspondiente supermercado, eje vital en su urbana cotidianidad. Son lugares de intercambio, de búsqueda de información, de chismorreo, de sana curiosidad, por ejemplo, hacia el que suscribe... La corteza terrestre se muestra magnífica en el Parque Nacional de Pingvellir. Este paraje natural asentado sobre el lago Pingvallavattn, la extensión más grande de agua dulce de toda la isla, es el emblema islandés por excelencia. Desde 1944, fecha de su independencia respecto Dinamarca, es un lugar reverenciado, pues tiene la notoriedad de saberse como ubicación del primer parlamento europeo, el Althing, allá por el año 930 d. C.


placas tectónicas entre Europa y América, y por las que hoy pasean multitud de ávidos curiosos de muchas nacionalidades. Claro que el clima de agosto sería más benigno y soportable en aquellos tiempos. A estas horas, la lluvia se empeña en aguar la fiesta y lo encantador del paisaje.

Un agradable llano donde se reunían todos los componentes y sus representantes oficiales que habitaban. Familias, colectivos, dilucidaban afrentas, establecían acuerdos matrimoniales, solucionaban diferencias e impartían justicia, incluyendo las pruebas de valor. Había tiempo, asimismo, para el mercado, los juegos y el intercambio de servicios y ganados. Jornadas de índole festiva que cohesionaban multitudes y fomentaban el sentido grupal. Protegiendo esta planicie y como privilegiado balcón, ese corte rocoso que abre la denominada grieta Almannagja, una de las fisuras más representativas de esta herida geológica que separa las dos

Otra curiosidad se encuentra a unos pocos kilómetros más. Después de cruzar amplios terrenos de particular ruralismo, a lo lejos y en lo alto de una loma, protegida por una elevación mayor, observas como transpira la tierra. Vapores surgen desde las entrañas por doquier.


La tierra está caliente en un recinto guiado que invita a deambular sin prisa, disfrutar de un fenómeno que dura ya milenios, manteniendo su fogosidad y permanencia inquebrantables.

que brotan, con su protagonista solitario en este caso, regularmente, cada quince minutos desde épocas pretéritas. Las cámaras y filmadoras se apostan cercanas para reflejar el plástico momento y no perder detalle de su intensidad, aunque algún espectador despistado se olvide de la dirección del viento este día, y acabe mojado, pero sorprendido del ímpetu del elemento acuoso. Un Ford T, modelo del 27, todavía en uso y aparcado en la puerta, franquea la entrada del comedor de un distinguido hotel. Huele bien en su interior, en oposición al ambiente sulfatado que se respira fuera. El fiskibollur, una de las joyas de la cocina islandesa, espera.

Todo ello en un espacio donde el merchandising ha ganado sitio. Comida rápida de sabor local, hoteles y residencias de diversa categoría y souvenirs acaparan la atención del visitante en el núcleo urbano de Geysir, término éste que ha sido adoptado internacionalmente para designar esas surgencias de agua caliente



Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.