En el
Camino
8
Ejemplar gratuito
Los cambios climáticos que produce El Niño aumentan el riesgo de contagio de enfermedades tropicales PÁG. 5
México, DF, lunes 4 de abril de 2016 | Número 32
En la ciudad de Apizaco, en el estado de Tlaxcala, los albergues reportan abusos a migrantes por policías y migración PÁG. 7
FM4: REEDUCAR A LA COMUNIDAD El comedor FM4 en Guadalajara, un oasis de descanso para los migrantes en camino hacia Tijuana, realiza actividades de convivencia con los vecinos para concientizar a la comunidad sobre la situación y los derechos de las personas en tránsito.
CONSEJO PRÁCTICO
UNA CARAVANA DE ACTIVISTAS RECORRIÓ CINCO PAÍSES PARA EXIGIR UN CAMBIO DE LA POLÍTICA ANTIDROGAS QUE HA DEJADO MUERTE Y MISERIA EN LA REGIÓN PÁG. 2
¿CÓMO VIAJAR?
Se espera que Abril sea un mes muy humedo con fuertes lluvias y tormentas en el sur del país, recuerda que si viajas en el tren la superficie está muy resbalosa en los días lluviosos. Tampoco intentes subir al tren si transita a gran velocidad. La velocidad crea un campo que atrae los cuerpos hacia abajo del tren y te puede succionar.
En el Camino es un proyecto de Periodistas de a Pie con el apoyo de Open Society Fundation. Se imprimen 3,000 ejemplares. Editores: Alberto Nájar y Daniela Pastrana. Diseño: Jazmín Estrada. Fotografías: Ximena Natera, Mónica González, Héctor Guerrero, Karlo Reyes. Redacción: Ximena Natera.
Foto: Ximena Natera
Fotos: Héctor Guerrero
8 mil kilómetros por la paz
3
2 DE AYUDA ALBERGUES La 72 Tenosique, Tabasco Col. Estación Nueva Tel. 52 (932) 34 21111 la72.direccion@gmail.com
Albergue Jesús El Buen Pastor. Tapachula, Chiapas Carretera a Raymundo Enríquez sin número. Cel. 962-1532-995 alberguejesuselbuenpastor@yahoo.com.mx
Casa del Migrante Hogar de la Misericordia. Arriaga, Chiapas. 5ª Sur No. 1420, colonia Playa Fina.
Tel. 966 665 8904 044-966-1010973 044-966-10500029 carbartsol@hotmail.com
Albergue Hermanos en el Camino, Ixtepec, Oaxaca. Av. Ferrocarril Poniente No. 60, Barrio La Soledad
Tel. 971-7132264 solalinde@hermanosenelcamino.org
Albergue Casa Nicolás Emiliano Zapata, Guadalupe Victoria, 67180 Guadalupe, Monterey, Nuevo León casanicolasnl@gmail.com casanicolas.incidencia@ gmail.com
Albergue Belén, Posada del Migrante. Saltillo, Coahuila Juan Erbaez No. 2406, esquina con Prolongación Salazar, colonia Landín.
Tel. 844-4148317 y 844-4891804 Casa del Migrante. Irapuato, Guanajuato. Calle Río Silao No. 1897, Frac. La Pradera
Tel. 462 135 3654
EDITORIAL
DESPUÉS DE 18 AÑOS, LA ASAMBLEA GENERAL DE LA ONU VOLVERÁ A DISCUTIR POLÍTICAS DE DROGAS
72 MIGRANTES
La caravana antiguerra
E
La militarización es uno de los efectos de la guerra contra el narco en la región Por: PERIODISTAS DE A PIE Mirna Lazcano una mujer originaria de Puebla ha ganado una batalla inicial contra el sistema migratorio de Estados Unidos. Mirna, como muchos mexicanos, migró a Estados Unidos en los 90 ante la crisis económica del país. Allá se casó y tuvo dos hijas, pero en el 2014 decidió regresar a México porque quería un mejor espacio para vivir con las niñas de 8 y 14 años. La inseguridad y la violencia que ha provocado la “Guerra contra el narco”, declarada por el ex presidente Felipe Calderón en 2008, la llevó a mandar a sus hijas de vuelta a Estados Unidos, con su padre, pero ella se quedó atrás por ser indocumentada.Poco después siguió a sus hijas y entró ilegalmente a Arizona, donde fue detenida por una patrulla fronteriza. Como castigo, le prohibieron volver a cruzar la frontera por 10 años. Desde entonces la mujer ha mantenido una lucha complicada, en la cual la acompaña el obispo Juan Carlos Ruiz, para poder recuperar a sus hijas. La mujer que viaja con la caravana Por la Paz, la Vida y la Justicia se entregó a las autoridades migratorias para pedir asilo por la inseguridad en México y reunirse con sus hijas definitivamente. La caravana antiguerra fue conformada por casi 70 activistas, defensores de derechos humanos y miembros de organizaciones de
Foto: Mónica González
TELÉFONOS
Mirna Lazcano, acompañada de sus hijas, se entrega ante las autoridades migratorias de E.U. Honduras, Salvador, Guatemala, México y Estados Unidos. Recorrieron 8 mil kilómetros y cinco países para abrir el díalogo sobre la guerra contra las drogas que los gobienos han desatado en los países del triangulo norte. El padre Ruiz cree firmemente que fue justo la presión de la caravana la que obligó a las autoridades migratorias de E.U otorgar a Mirna la libertad condicional mientras se lleva a cabo su juicio de asilo, un proceso que puede mantener al solicitante detenido por meses. El caso Mirna podría sentar un precedente para las personas a quienes ha sido negada indefinidamente la entrada después de una deportación. Así fue como Mirna y sus dos hijas siguieron con el largo caminar por América de la caravana que llegó a Nueva York el 18 de abril, en la víspera del arranque de la Sesión Especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas (UNGASS) -que después de 18 años vuelve a discutir sobre la
política de drogas- busca abrir un diálogo entre la sociedad civil de Honduras, Salvador, Guatemala, México y EU sobre la política de guerra contra las drogas, que ha dejado en la región centenares de miles de muertos, desplazados, detenidos, desaparecidos. Ted Lewis, de la organización Global Exchange que organizó, confía en que la caravana sea una oportunidad para revisar y reorientar las políticas de drogas nacionales e internacionales en un momento en el que Estados Unidos tiene un fuerte debate sobre la justicia criminal y el consumo de las drogas. La caravana coincide también con el inicio de las primarias demócratas que decidirán que candidato se postulará a la presidencia del país en las siguientes elecciones. En Honduras, el arranque de la Caravana coincidió con el aniversario del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh), uno de los grupos más fuertes de lucha y re-
sistencia de este golpeado país. En La Esperanza, la caravana se reunió con los miembros del Copinh a un mes del asesinato de Berta Cáceres, líder indígena y ambientalista y fundadora de Copinh, que por su trabajo fue asesinada en su casa. En El Salvador se reunieron con activistas y miembros de la iglesia que buscan una alternativa a la marea de sangre que baña al pequeño país, que en los últimos meses ha alcanzado una taza de 23 homicidios diarios, pues en el discurso oficial, la violencia es producto de pleitos de pandilleros. Las pandillas, en cambio, acusan una cacería del gobierno mientras que los políticos pelean el botín electoral que representan las bases sociales de 80 mil maras. Los conflictos en ambos países han propiciado un éxodo masivo de jóvenes que huyen de la violencia. El principal destino es Estados Unidos aunque el peligro y la dificultad del viaje han provocado que muchos de ellos trunquen su viaje en México, que sólo en marzo de este año marcó un record con el número de solicitudes de asilo político al país.
l tema de los niños migrantes vuelve a ser noticia en México. Y de nuevo, una muy mala. La organización internacional Human Rights Watch publicó un informe reciente donde advierte que las autoridades mexicanas niegan sistemáticamente el asilo a prácticamente todos los menores de edad que lo solicitan en las fronteras. Todos ellos son deportados a sus países, sin importar las razones por las cuales huyeron de su entorno. El gobierno mexicano no parece creer que en Centroamérica, de donde proviene la mayoría de estas personas, enfrentan un peligro real de morir a manos de las pandillas de la Mara o de los paramilitares que dominan la región. Otros son condenados a una vida de persecución y violencia. Repatriarlos de nada sirve: casi todos regresan de inmediato a México donde enfrentan el riesgo de sufrir abusos, robos, secuestros o la muerte. El Instituto Nacional de Migración (INM) se ha convertido en el verdugo de estos niños y adolescentes. Asume una actitud por lo menos insensible ante la tragedia humanitaria que representan los migrantes en camino al norte. Un gobierno que condena de esta manera a miles de personas no tiene calidad moral para exigir nada, ni a sus ciudadanos, ni en foros internacionales. Nuestro país, México, no tiene cara para decirse que es una nación que respeta a las personas.
5
4 LA HISTORIA
El fenómeno del Niño aumenta los peligros en la ruta
Los que llegan de África Para llegar a su destino, Estados Unidos, abandonan un continente y cruzan otro Por: XIMENA NATERA Lo más difícil para Fahrid no fue despedirse de Guinea, su país natal, sino caminar durante varios días por la selva de Colombia. El y su compañero de viaje, Bryce, tenían varias semanas de camino. Salieron de África en un avión que les llevó a Brasil, y de allí emprendieron camino por autobús hacia Perú, luego Ecuador y después “el bosque colombiano”, como llama a la jungla el joven de 25 años. A veces temieron que iban a perderse, un miedo que se avivó con su desconfianza a los guías. Al final abordaron un nuevo autobús que los llevó a Panamá, y después el camino se detuvo en Tapachula, al principio de la última etapa de su viaje a Estados Unidos… Y también el más peligroso. ¿Hacia dónde van a seguir?- les han preguntado en el hotel donde se hospedan –No sabemos, no conocemos a dónde podemos ir. Todavía no decidimos. La incertidumbre de los jóvenes de Guinea es la misma de cientos de africanos que todos los días están llegando a la frontera sur de México. No se sabe a cuánto asciende el flujo de afri-
canos en el país. Aunque es claro que el fenómeno va en aumento. En 2013 el INM detuvo a 545 migrantes de origen africano. Dos años después el número se cuadruplicó: hasta diciembre de 2015, los asegurados fueron 2,045. Provienen de distintas regiones de ese continente: Angola, Benín, Burkina Faso, Camerún, Chad, Congo, Egipto, Eritrea, Gambia, Malaui, Liberia, Sarahaui… Prácticamente todos usan uno de los nuevos caminos favoritos de los traficantes de personas: volar de África, Asia o Medio Oriente hacia Sudamérica, y de allí seguir por tierra hasta Centroamérica, México y Estados Unidos. Es “una ruta muy publicitada”, explica Claudette Walls, representante de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) en Tapachula, Chiapas. Las bandas aprovechan que algunos países, como Ecuador, no piden visa a países africanos, y por lo tanto la nación se convierte en una especie de trampolín para viajar al norte. También aprovechan vacíos legales en México como es el alto costo de repatriación de estos migrantes. En estos casos el INM suele adoptar decisiones prácticas y les entrega un documento para salir del país. Para la OIM y otros especialistas, el origen diverso de la diáspora africana en México tiene varias explicaciones: que no necesariamente se trata de personas que abandonan su país por conflictos bélicos, como sucede con los que provienen de Siria, Irak o Irán. Por otro lado, muy pocos pueden hacer el viaje sin el respaldo de organizaciones
internacionales de tráfico de personas. Al igual que otros grupos migratorios, como los Salvadoreños y los mexicanos, los africanos cuentan con una red familiar o de amigos que les sostiene el viaje. Estas mismas redes facilitan cruzar por México. Aunque en algunos casos están expuestos a los mismos riesgos de secuestro, asalto y abuso sexual que otros migrantes, muchos africanos utilizan aviones o autobuses para moverse por el territorio. Es una diáspora silenciosa que ahora se detecta porque aumentó el flujo. Antes, dice la representante de OIM, encontraban de forma esporádica “uno o dos casos”. Ya no más. “Nos damos cuenta que hay una fuerte migración extra continental de África pasando por acá”, reconoce. “A la mayoría se les ubica en los alrededores de la estación migratoria”, llamada Siglo XXI. Hay razones para eso. A diferencia de otros migrantes los africanos buscan entregarse al INM, con la idea de conseguir un oficio de salida. Ellos le dicen “salvoconducto”, pero en realidad se trata de un emplazamiento para abandonar el país antes de 30 días. El documento permite moverse por el país hasta un punto de salida, que puede ser un aeropuerto o ciudad fronteriza. Lo más importante es que evita una eventual captura por agentes migratorios y así enfrentar una deportación. Un elemento distinto en la diáspora, pues no muchos migrantes saben de esta posibilidad legal lo que permite muchos abusos.
Foto: Ximena Natera
Por: XIMENA NATERA El Niño es un fenómeno climático y meteorológico que se crea en las costas del Pacífico en América del Sur. Es errático, puede pasar de 3 a 8 años entre cada ciclo y consiste en un cambio en los patrones de movimiento de las corrientes marinas tropicales cálidas. Estas se expanden y acercan a las costas del continente, lo que calienta las heladas corrientes. Aunque es un fenómeno que aparece en el pacífico, entre Perú y México, puede desestabilizar el clima en todo el mundo y sus efectos duran hasta doce meses. El Niño cambia las condiciones normales del océano, como la temperatura y el nivel de oxígeno lo que causa que los peces migren. Esto altera las comunidades de aves y otros depredadores. A su vez afecta a la industria pesquera y de turismo. Con el niño llegan fuertes lluvias y tormentas fuera de temporada que causan inundaciones; la humedad en zonas costeras varía y esto en el caribe y el atlántico es asociado con intensas sequías. Aunque las consecuencias son globales, sus efectos afectan principalmente a la población más vulnerable. Según la NASA en E.U, el ciclo de El Niño que inició en 2015 y sigue vigente, será uno de los más poderosos de los últimos 100 años por tres razones: Los océanos están crecidos; la temperatura del planeta es muy alta debido al derretimiento de los polos y por último, debido a que El Niño no ha dado señales de retroceder. Sin embargo, los cambios climáticos que llegan con el fenómeno no son las únicas preocupaciones. Científicos revelaron en una investigación en la revista Nature Microbiology que El Niño está fuertemente relacionado con enfermedades que se pueden propagar por bacterias transportadas en los océanos. En las regiones donde la lluvia aumenta, se propaga el mosquito que lleva el virus del Dengue, Chikungunya y Zika. Otras enfermedades latentes son la malaria, rabia, peste, tétanos, etc. Para prevenir estas enfermedades se recomienda lavar todo tipo de alimentos, alejarse de los cuerpos de agua estancada y hervir el agua para consumo, además evitar la picadura de mosquitos mediante repelentes y ropa adecuada.
6
7
PASATIEMPO
Alerta en Apizaco
LABERINTO
Por: PERIODISTAS DE A PIE Apizaco, una pequeña ciudad en el estado de Tlaxcala, al este de la Ciudad de México, es una parada obligada en la ruta hacia Estados Unidos que en los últimos meses se han convertido en un foco rojo de violencia para los migrantes. La pastoral del migrante de la Diócesis de Tlaxcala, encargada del albergue de Apizaco, denunció una agresión por elementos de migración en contra de Adrián Pineda, un joven hondureño de 26 años. El ataque sucedió después de que los agentes de migración persiguieran a un grupo en un operativo de detención. Cuando el grupo de disolvió los policías acorralaron a Adrián y comenzaron a agredirlo física y verbalmente. Los cinco agentes de migración lo golpearon brutalmente antes de detenerlo y subirlo a la patrulla donde siguieron con el ataque físico hasta que lo dieron por muerto y lo botaron en un basurero donde quedó inconsciente en el piso bañado de sangre. Esta es una más de las muchas denuncias que los migrantes y el mismo albergue han hecho públicas en los últimos meses. Sólo en noviembre del año pasado, un grupo de jóvenes, también migrantes, fueron asaltados por supuestos policías privados que custodian la estación de trenes Ferromex de Apizaco, uno de ellos recibió un balazo en el pecho, del cual sigue en recuperación.
¿Tienes algo que contarnos?, envíalo al facebook /enelcamino
EL VIACRUCIS MIGRANTE
¿SABÍAS QUÉ?
Foto: Karlo Reyes
El viacrucis migrantes es ya una tradición. Los sacerdotes a cargo de los albergues para migrantes en las zonas más peligrosas de la ruta, convocan a aquellos que van de paso a unirse al caminar de la Semana Santa. Es una forma de reunir a las comunidades con los migrantes que interactúan con ella a diario, además de una protesta pública en contra de los abusos contra los migrantes. En Tenosique Fray Tomás Gonzáles denunció los ataques recientes de la policía estatal hacia los centroamericanos.
Con o sin documentos tienes derecho a recibir apoyo del grupo Beta. Son oficiales del INM, con uniformes color naranja, que deben brindar apoyo legal, asistencia humanitaria y atención médica. Sin embargo es conocido que grupo Beta y agentes de migración a veces trabajan juntos para detener personas en tránsito. Si eres víctima del Grupo Beta, denuncialos en los albergues.