Entre los días 15 y 17 de febrero visitamos Coatzacoalcos --donde vivía y trabajaba Gregorio-- y Xalapa --la capital de Veracruz--, con el fin de recabar la mayor información posible y, al mismo tiempo, expresar nuestra solidaridad a la familia de Gregorio y a sus colegas, todos ellos víctimas de este atentado con el que se pretendió cercenar la libertad de expresión y el derecho a la información.