Pasión cofrade 2016 by Manuel Centeno

Pasi贸n Cofrade

Edición

Número 12. 2ª Época. Semana Santa 2016

Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo Iglesia del Real Monasterio de San Quirce y Santa Julita Oficinas: C/ Isidro Polo nº 2 - 47003 Valladolid Tlf.: 983 38 04 43 http://www.sagradapasion.com sagradapasion@sagradapasion.com www.twitter.com/sagradapasion www.facebook.com/sagradapasion

Dirección y Redacción José Ángel Carreño Pérez Manuel Ángel Centeno Morillo Diego Pérez Bermejo Luis José Lázaro Giménez

Maquetación y Diseño Manuel Ángel Centeno Morillo

Fotografías Portada: Rubén Olmedo Tomillo (Procesión de Oración y Sacrificio, Jueves Santo, 2 de abril de 2015) Contraportada: Manuel Ángel Centeno Morillo (Medallas dispuestas para su bendición antes de la imposición a los nuevos hermanos cofrades, Quinario al Stmo. Cristo del Perdón, 14 de marzo de 2015) Interior: Varios autores

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Gráficas VALOP, S. L. C/ Cobalto nº 8, nave 11 (Polígono de San Cristóbal) Depósito Legal: VA-383/98

La Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo no tiene por qué necesariamente compartir las opiniones vertidas en las colaboraciones

Índice Editorial ........................................................................................................................................................................................................... pág. 4

Carta del Alcalde

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Pregón de Pasión 2015............................................................................................................................................................. pág. 6

Las asociaciones en la Baja Edad Media, el origen de las cofradías .................................................................................................................................................... pág. 12

El relicario de San Juan Bautista ........................................................................................................................... pág. 18

La caridad en la vida de la cofradía.................................................................................................................... pág. 22

Una tarde de oración con las Carmelitas Descalzas

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús

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Nuestra penitencial con la Hermandad de Pasión sevillana

Noticias 2015

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IV Jornadas “Spei Mater”

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Entrevista a D. Manuel Fernández Narros, Delegado Arzobispal de Religiosidad Popular ............................................................................... pág. 57 Parroquia de San Nicolás de Bari, historia y arte ...................................................................... pág. 60

Editorial

Vivimos en un mundo con grandes avances científicos y técnicos, que no siempre se utilizan en beneficio del hombre. Nuestra sociedad occidental sufre, como otras civilizaciones, los efectos de la fragilidad humana, es decir, de nuestros propios pecados. Hay una percepción de que el hombre actual, a veces tan pagado de sí mismo, no necesita a Dios. Parece haber una prisa incomprensible por borrarlo de la vida de las personas que Él ha creado. Con tal perspectiva, al olvidarse de su creador y redentor, única fuente de la paz y del amor, la humanidad queda reducida a un plano en el que se prescinde de todo lo trascendente, de cuanto supera los límites del propio individuo o de unas normas que la sociedad se da a sí misma, basadas en el “mejor” de los casos en el deseo de una mayoría, expresado de una manera -real o en ocasiones supuestamente- democrática. Privado de la referencia a un Dios exigente pero misericordioso, el ser humano acaba viéndose a sí mismo como una auténtica divinidad que, con demasiada frecuencia, ni siquiera busca el bien de los semejantes. El materialismo y el egoísmo más burdos, el tener más, el afán de poder o de placer hacen olvidar la necesidad de ser mejor y el mandamiento que todo lo resume: amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a uno mismo, hasta el extremo de dar la vida por los demás como nos enseñó a hacer nuestro Señor, según vemos y podemos recordar cada vez que contemplamos imágenes como la del Santísimo Cristo del Perdón. Nada de extraño tiene, pues, que ese egoísmo lleve a una cultura de la muerte y del desprecio. Pueden llegar a estorbar los niños concebidos y no nacidos, los ancianos -no importa que durante gran parte de su vida hayan dado todo por otros-, los enfermos, la fidelidad de los esposos, la familia, la palabra empeñada y tantos ideales que, para muchos, parecen obsoletos. Molestan, en suma, las palabras valerosas de una Iglesia que algunos quieren ver extinta.

No hemos de sorprendernos de que esta sociedad vea incluso con cierto desinterés la sangrienta persecución que siguen sufriendo miles de cristianos en distintos países. Tampoco parece que preocupe otra persecución que desde hace décadas azota al mundo occidental, constituyendo un auténtico ataque a un derecho humano fundamental, la libertad religiosa, que incluye la manifestación pública de la fe profesada. Sin duda estamos acostumbrados a leer o a oír que la fe y las cuestiones religiosas han de permanecer en el interior de cada conciencia -acaso sea ese el primer peldaño que conduzca al aniquilamiento de dicha fe, de todo sentido religioso-. Curiosamente y de manera ilógica cualquier otro tipo de ideas o sentimientos sí tendría cabida en el ámbito público ¿Se deberá a que los creyentes son de segunda categoría? Si esa fe no vivifica a las personas, como prueba una y mil veces la realidad histórica, acaban triunfando la soberbia y el odio y, en consecuencia, el mundo se convierte en algo inhumano.

¿Seremos capaces los católicos, los cofrades, de hablar de la verdad y de vivir de modo consecuente con nuestro credo? Somos responsables de orar y de ayudar a todos los necesitados, de velar por el derecho y la libertad de tantos cristianos perseguidos… hasta la muerte o hasta ese desprecio con el que hoy se mira en nuestras latitudes la religión, especialmente la católica. No podemos permitir que la hipocresía imperante lleve, como se pretende, a la visión deformada de la religión como algo retrógrado y reñido con el verdadero progreso, cuando la fe y la fidelidad a Dios y a los hombres son la única y verdadera tabla de salvación para este mundo que se resquebraja impotente.

EL CABILDO DE GOBIERNO

Carta del Alcalde Ha pasado un año desde que nos comunicamos a través de nuestra revista. Ha sido un año repleto de acontecimientos importantes para la vida de la Iglesia, tanto en nuestra diócesis como en todo el mundo. Todos estos acontecimientos han sido sendas llamadas de atención para nosotros, los católicos, ya sea como individuos ya como una institución, una cofradía, que ha de mantenerse fiel a la doctrina y a la moral que defiende nuestra santa madre la Iglesia.

Han sido unos meses en los que se ha vivido y clausurado el V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús, un ejemplo muy conocido y querido de entrega a Dios. Nuestra cofradía ha deseado, en tal ocasión, estrechar los lazos fraternos que desde hace años la unen con las carmelitas descalzas de la ciudad. Concretamente, en el transcurso del Ejercicio Público de las Cinco Llagas, hicimos una ofrenda floral en una de las estaciones habituales, el monasterio de la Concepción del Carmen, IV fundación de la Santa. Más adelante, en el mes de septiembre, las religiosas de dicha comunidad nos acogieron para compartir con ellas el rezo de vísperas. Fue sin duda una tarde emotiva y llena de sentido católico, universal, al poder rezar la liturgia de las horas, liturgia oficial de la Iglesia, en compañía de otras personas con las más diversas vocaciones en el seno de la única Iglesia. ¿Nos han servido estos actos para recordar la responsabilidad que tenemos como personas llamadas a cumplir nuestras obligaciones de católicos, aprovechando las oportunidades que nos brinda la pertenencia a la cofradía? Estamos celebrando desde hace meses el Año Jubilar de la Misericordia, convocado por el Romano Pontífice. La paticipación en el calendario de actos preparados por la archidiócesis vallisoletana nos servirá, indudablemente, para vivir en consonancia con las directrices de nuestros pastores, pero no hemos de quedarnos sólo con esas actividades.

¿Seremos capaces de recordar en nuestra vida cotidiana las palabras del Señor: “bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia”? ¿Practicamos esta virtud con el hermano en nuestro día a día? ¿Seguimos los pasos de nuestro Dios misericordioso? Nuestra diócesis ha organizado un Congreso Eucarístico. Una vez más se requiere la presencia de los feligreses y, en este caso, de las cofradías para profundizar en la riqueza que para cada uno ha de suponer este incomparable sacramento. ¿Tomamos en serio la necesidad de tratar y recibir a Jesús Sacramentado con las debidas disposiciones? ¿Somos conscientes de que Él es el verdadero alimento del alma, nuestro redentor que desea guiarnos en el camino al cielo? Vivir estos y otros amables retos “extraordinarios” que nos propone la Iglesia puede ser más fácil en la cofradía, con sus medios habituales, con nuestro espíritu de fe, caridad, penitencia y oración, manifestado en el culto litúrgico, la ayuda espiritual y material a los más indefensos y necesitados, comenzando por quienes aún están en el seno materno, el apoyo práctico a tantos católicos perseguidos, incluso martirizados, en distintos lugares, las procesiones, la formacón como católicos… ¿Nos planteamos seriamente cuál es nuestro papel en la sociedad, al servicio de la cofradía y, por este medio, al servicio de la Iglesia y del prójimo? ¿Aprovechamos los medios que nos brinda la hermandad para ser cada día mejores personas, capaces de transformar una sociedad enferma y desorientada, mejores y más fieles hijos de un Dios que no se cansa de esperarnos? ¿Reflexionamos sobre el sentido de nuestra presencia en la cofradía?

Luis José Lázaro Giménez

ALCALDE DE LA COFRADÍA

Pregón de Pasión 2015

Perdón, ¡Oh, Dios mío! Perdón e indulgencia Perdón y clemencia Perdón y piedad

Aprendí esta letra de niño, de tanto escuchársela cantar a mi madre. Me llamaba la atención por la cantidad de veces que aparecía la palabra perdón. Tanto, que solo ahora, de mayor, cuando tengo que pronunciarla, obligado por las circunstancias adversas por mí provocadas, alcanzo a ver la grandeza de su significado. Tal vez por eso, o tal vez porque lo que uno escucha cantar de niño a su madre se conserva en la memoria toda la vida, en cuanto tuve conocimiento de la existencia del Cristo del Perdón, me apresuré a conocerlo. Fue en el tránsito de mi infancia a la adolescencia, en la Iglesia de la Magdalena. Y me cautivó en ese primer encuentro. Como a miles y miles de vallisoletanos. Miles y miles por generación. Y seguro que a todos nos pasa lo mismo cuando estamos ante él: es imposible no dirigir los ojos a lo alto, hacia donde él mira. He tenido el privilegio, como miles de vallisoletanos, miles por generación, de contemplar tan inconmensurable talla en incontables escenarios de la ciudad. Como cuando se detenía ante la antigua Residencia Sanitaria, o ante el Hospital Clínico, o frente a edificios singulares a los que la sola presencia del Cristo del Perdón los eleva a la categoría de inigualables. Pero donde adquiere toda su trascendente dimensión la grandeza de esta bellísima talla es aquí, en el interior de la Iglesia del Convento de San Quirce y Santa Julita, de la regla cisterciense. Yo no sé de quién fue la idea de abrir este templo también los lunes, coincidiendo con las Caminatas de San Nicolás, pero a quien se le ocurriera merece ser permanentemente felicitado. Gracias a ello, los vallisoletanos tenemos la oportunidad cada semana de disponer de un es-

pacio de introspección en el ambiente de silencio y paz que genera y transmite este convento. Ello es posible porque se encuentra en su interior esta inigualable talla, salida de la gubia de Bernardo del Rincón. Nieto de Francisco del Rincón y ahijado de Gregorio Fernández, no es de extrañar que la belleza sea la marca de presentación de esta sagrada imagen. Parece un Cristo peregrino. No hace falta que les recuerde a ustedes que de la calle de la Pasión, cuando fue clausurada su iglesia titular en 1926, pasó a la de San Felipe Neri; de allí, al Santuario Nacional; de este, a la Magdalena y de allí, aquí, a este más que recoleto convento de la Plaza de la Trinidad, una plaza que es epicentro emocional, artístico y espiritual en el pórtico de la Semana Santa vallisoletana. La Plaza de la Trinidad, la Cofradía Penitencial de la Pasión, las tallas que alumbra y venera y este convento componen un conjunto sin parangón que sirve de antesala el Sábado de Pasión a la entrada de Jesús en Jerusalén. ¿Qué mejor manera de afrontar un cristiano la Semana Santa que meditando sobre las llagas del Cuerpo del Redentor? Decía Francisco de Cossío, quien fuera director del Museo Nacional de Escultura Policromada y director de El Norte de Castilla que el Viernes Santo “es el día más silencioso del año y que si fuera bien aprovechado, sería como un baño purificador de los espíritus (…)”. No seré yo quien lleve la contraria a don Francisco de Cossío, pero sí me atrevo a añadir a ese silencio del Viernes Santo el no menos silencioso atardecer del Sábado de Pasión, en el que Valladolid enmudece al paso del Santo Cristo de las Cinco Llagas que portáis vosotros a hombros. Dos decenios se cumplen del Ejercicio Público de las Cinco Llagas. Guardo en mi memoria el sonido de los primeros años, cuando portabais la sagrada imagen con aquel peculiar estilo en el que el silencio del crepúsculo, del paso de la luz a la oscuridad, del día a la noche, era cruzado por el arrastrar de los pies de los portadores. Nada es igual en el casco histórico de Valladolid desde que sale a sus calles en la noche del Sábado de Pasión el Cristo de las

SANTÍSIMO CRISTO DEL PERDÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Pregón de Pasión 2015 Cinco Llagas. Nada es igual, afortunadamente para Valladolid y los vallisoletanos. La estampa de este Cristo en la calle Santo Domingo de Guzmán es de las que permanecen en el pensamiento para todo el año. Esa visita a los cinco conventos (este de San Quirce, el de Santa Teresa, el de las Concepcionistas, el de Santa Isabel y el recuerdo ante la Iglesia de San Nicolás en cuyo solar se asentaba el quinto convento) para meditar sobre cada una de las cinco llagas del cuerpo del Señor es estremecedora… He de confesar que observo esa procesión con un orgullo especial: el de ser paisano, y quinto y amigo de uno de ellos, de los tres artesanos que confeccionaron las andas sobre la que lo portáis y la cruz en la que está clavado el Cristo de las Cinco Llagas, los hermanos Martínez, ebanistas de Villavicencio de los Caballeros, que llevan en los genes el esmero en el trabajo con la madera. A mí me parece que ellos eran el complemento perfecto al inigualable imaginero Manuel Álvarez, quien moldeara la madera a mediados del siglo XVI hasta conseguir tan impresionante talla. Acepté la propuesta de pronunciar este pregón, formulada por don Luis José Lázaro Giménez, alcalde de la Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo, porque no me cabe la menor duda del honor que confiere el estar en este estrado en tan solemne acto. Es por ello, querido alcalde de la Cofradía, que manifiesto en su persona mi agradecimiento más sincero y mi consideración más distinguida a todos y cada uno de los miembros que componen esta hermandad. Su constancia en multitud de ámbitos de la ciudad, dentro y fuera de la Semana Santa, es suficiente atractivo como para estar pendiente todo el año, más cuando llegan estas fechas, de una cofradía que ha hecho por la vuelta a las raíces, tanto espirituales como litúrgicas, tanto solidarias como humanísticas, una de las causas del ser, del estar, del aparecer y del actuar todos y cada uno de los días del año. Tal vez sea porque los de La Pasión sois dignos herederos de aquellos que desde los albo-

res del siglo XVI se encargaban de acompañar a los condenados a muerte, garantizarles una sepultura y prestar el necesario cuidado a sus familiares. Tal vez porque sois dignos herederos de aquellos que desde el desaparecido Humilladero del Cristo de la Pasión, al otro lado del Puente Mayor, hasta este templo del Convento de San Quirce y Santa Julita, en la Plaza de la Trinidad, epicentro emocional, artístico y espiritual en el pórtico de la Semana Santa vallisoletana, han mantenido a lo largo de los siglos un empeño especial por ensanchar el patrimonio artístico y conservarlo en perfecto estado hasta nuestros días.

CARTELES DE NUESTRAS PROCESIONES Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Tal vez porque sois dignos herederos de aquellos que decidieron un buen día asistir a los más desvalidos, a los más necesitados, a los que nunca tuvieron nada y, por medio de las obras de caridad y misericordia, consolidaron una labor social que ha llegado a nuestros días en forma de una muy necesaria ayuda al más cercano por me-

Pregón de Pasión 2015 dio de programas permanentes de cooperación con Cáritas, el Banco de Alimentos, Manos Unidas, La Misión en Tanzania del Padre Ángel Iglesias, las misiones en Filipinas de las Esclavas del Sagrado Corazón, la ONG África Arcoiris, las Hermanitas de la Cruz, el Centro Albor, la Red Madre o las Misiones Pontificias. ¡Qué tarea tan necesaria! ¡Qué trabajo tan aleccionador! ¡Qué ejemplo, callado, sin artificios, sin alharacas, sin que la mano derecha sepa lo que hace la izquierda, que es como Dios manda hacer estas cosas, qué ejemplo, decía, dais los cofrades de la Sagrada Pasión de Cristo! ¡Ay si cundiera vuestro actuar cofradía a cofradía, parroquia a parroquia, cofrade a cofrade! Si así fuese, hace tiempo que las estadísticas habrían dejado de mostrar asuntos tan estremecedores como el de que en Valladolid hay un importante porcentaje de niños que van al colegio sin desayunar, por poner solo uno de los más terribles ejemplos de cómo nos sigue golpeando esta crisis económica que parece no tiene fin. Os hablaba del inmenso honor de estar en este estrado. Si algo he aprendido de mis maestros en el arte de la información es que cuando uno llega a lugares tan solemnes como este no debe cometer el fallo de actuar como si fuese a vendimiar y llevase uvas de postre. Puedo haberme formado, además, un perfil como informador que a veces traspasa las líneas más atrevidas de la tarea de llevar las noticias a los lectores, pero que se mantiene a larga distancia de la frontera del descaro. Y descaro sería que yo tratase de hablaros aquí de vuestra historia, por ejemplo. O de la tarea que ejercéis desde hace siglos en torno al riquísimo patrimonio artístico de la Semana Santa, por citar otro ejemplo. Un descarado sería si me adentrase por zonas que desconozco o en las que soy de todo menos ejemplo. Máxime después de que me hayan precedido en este estrado expertos y conocedores de la Semana Santa, del arte, de la fe y de la cofradía. Por eso, dejando que el corazón se explaye, quiero hablar sobre la labor que mantenéis

cada instante de vuestro quehacer y que por estar en primer término, puede aparecer como el árbol que no deja ver el bosque. Hablo de vuestro trabajo como comunicadores. Sí, sí, habéis oído bien, comunicadores. En un sinfín de ámbitos, como vais a poder comprobar.

EL SR. FOCES PROMULGANDO SU PREGÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Porque, ¿qué, sino comunicar, es vuestra tarea en pro de la conservación del patrimonio histórico artístico? ¿Qué qué comunicáis? Estáis comunicando que cuando se quiere, se puede. Estáis comunicando que es posible, con esfuerzo, claro, con tesón, por supuesto, que un tesoro tan maravilloso como el que habéis heredado de vuestros ancestros no solo debe ser conservado, sino que debe ser transmitido a las siguientes generaciones en perfectas condiciones. Es la única manera de hacerlo. ¡Y vaya lección de comunicación nos dais a los de fuera de la cofradía!

Pregón de Pasión 2015 ¿Y qué, sino comunicar, es vuestra tarea de ayuda a los desfavorecidos de la sociedad, a los que más necesitan de nuestro apoyo económico? Estáis comunicando que cuando hace falta, se debe actuar y, además, de la manera más sencilla como es la de recaudar lo que cada uno puede dar para, con muchos pocos, hacer un poco mucho, que sumado a los pocos muchos que hacen los demás, permite verdaderamente mostrar que la solidaridad para que exista debe no solo predicarse, sino ejercerse. Solidaridad, ayuda, colaboración, respaldo… Auxilio, en definitiva, a quienes necesitan ser auxiliados. ¿Qué, sino comunicar es vuestra forma de manifestar la fe en Dios Nuestro Señor? En la calle, en las procesiones, claro; pero también en vuestro día a día, cada uno en su medio habitual de trabajo, de presencia social, de, en definitiva, estar, ser y parecer. Y hacerlo, además, insisto, predicando con el ejemplo. Qué tarea de comunicación la vuestra, cofrades de la Sagrada Pasión de Cristo. Qué tarea más necesaria y maravillosa: comunicar que estáis aquí para algo más que transitar por esta vida de la manera más llevadera posible. Todo lo contrario: estáis aquí para que el tránsito por esta vida sea el menor valle de lágrimas imaginado. Estáis aquí, cofrades de la Sagrada Pasión de Cristo, para pensar en el prójimo. Estáis aquí para llevar el consuelo a quienes lo necesitan; para llevar el cobijo necesario a quienes carecen de él; estáis aquí para dar de comer al hambriento y de beber al sediento; estáis aquí para… Poned vosotros mismos la función que consideréis, corporal o espiritual, y habréis alcanzado el principal objetivo que un ser humano, máxime si es cofrade, debe llevar a cabo: pasar por esta vida haciendo el bien. De forma callada, claro; sin que una mano sepa lo que hace la otra; evidentemente; como, nunca mejor dicho, Dios manda. He ahí, queridos cofrades de la Sagrada Pasión de Cristo, la grandeza de vuestra misión: ser, estar y comunicar la fe en Dios, con el ejem-

plo cotidiano, desde la Semana Santa al resto del año. Lo que ha sido, es y será la Semana Santa, en general, y la Cofradía de la Sagrada Pasión de Cristo, en particular, lo demostráis vosotros a la perfección. Ser, estar y comunicar. He ahí, queridos cofrades de la Sagrada Pasión de Cristo, la grandeza de vuestra misión. Comunicar es también labor inherente al pregonero. Por tanto, ya es hora de que la comience: “Reverendas Madres Cistercienses, alcalde y cabildo de Gobierno de la Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo, presidente de la Junta de Cofradías de Valladolid (permítame que le exprese mi deseo de éxito en su nuevo cometido), Presidentes y Hermanos Mayores de las Cofradías vallisoletanas, autoridades, cofrades, señoras y señores y todos aquellos que nos escuchan a través de Radio Valladolid Cofrade. Sepan todos que esta Iglesia de San Quirce y Santa Julita albergará el próximo domingo, 1 de marzo, la Eucaristía en honor al Cristo de las Cinco Llagas y al día siguiente, el solemne besapié a la sagrada imagen. Que el domingo 8 de marzo, la Eucaristía será oficiada en honor al Santo Cristo del Calvario, cuya imagen será dada a besar a los devotos al día siguiente en este templo. Que ese mismo domingo, el teatro del Colegio de la Salle albergará el decimosexto Concierto Benéfico a favor de Manos Unidas, con la participación de las bandas de la Sagrada Cena, del Santísimo Cristo del Perdón de Tordesillas y de nuestra Penitencial y de la Agrupación Musical La Torre del Reloj de Peñafiel. Que del 10 al 14 de marzo, se celebrará el Solemne Quinario en honor al Santísimo Cristo del Perdón, en el que ocupará la sagrada cátedra de este templo el vicario general de la Diócesis, don Luis Argüello. El último día del quinario se rán impuestas las medallas a los nuevos herma-

Pregón de Pasión 2015 nos y hermanas cofrades y el lunes 16, los cofrades y devotos podrán besar la imagen del Cristo del Perdón. Y que el 22 de marzo, Domingo de Lázaro, se celebrará la Santa Misa de Comunión general para todos los hermanos y hermanas de la cofradía. El padre misionero claretiano Eugenio Oterino oficiará las eucaristías dominicales. Las procesiones en las que participará la Cofradía se celebrarán el Sábado de Pasión, en el Ejercicio Público de las Cinco Llagas; el domingo de Ramos, para las palmas; el Jueves Santo, en el desfile procesional de Oración y Sacrificio; el Viernes Santo, en el Sermón de las Siete Palabras y la Procesión General de la Sagrada Pasión del Redentor, y el Domingo de Resurrección, en el Encuentro de Jesús Resucitado con la Virgen de la Alegría, Lo que hago público para general conocimiento y efecto”. La Guía de la Semana Santa de 1940 incluía el orden de la Procesión del Santo Entierro, que comenzaba a las seis y media de la tarde. En el puesto número doce de la planta del desfile procesional aparecía el Santo Cristo del Perdón, o sea, y cito literalmente, “el Señor ofreciendo al Eterno Padre su propio sacrificio antes de tenderle en la Cruz; devotísima efigie (añadía el autor de aquella guía, que ha llegado a nuestros días gracias a la labor intensa en esfuerzo y extensa en trabajo del historiador Javier Burrieza), devotísima efigie procedente de la Iglesia de la Pasión, alumbrada por los comisarios y hermanos de su antigua sede. “El Señor ofreciendo al Eterno padre su propio sacrificio…”. El Cristo del Perdón en actitud de implorar misericordia… Encontraríamos en la literatura de la Semana Santa decenas de definiciones sobre el porqué de la postura de esta bellísima imagen. Después de conocer a fondo el trabajo que ejecutáis cada uno de vosotros en esta cofradía, he llegado a una conclusión sobre esa actitud que

talló la gubia de Bernardo del Rincón: creo que el Santísimo Cristo del Perdón mira al cielo con las manos extendidas, arrodillado, para dar gracias a Dios por todos sus cofrades, por la abnegada labor que tan volunta-ria como calladamente hacéis; da gracias al Padre por todo el sacrificio que lleváis a cabo a lo largo del año para ayudar al prójimo más necesitado y da gracias a Dios porque fomentáis la devoción hacia Él. Perdón, ¡Oh, Dios mío!

Perdón e indulgencia Perdón y clemencia Perdón y piedad

Va a ser verdad. Lo que uno escucha de niño cantar a su madre se conserva en la memoria toda la vida. Y en el corazón. Gracias por su paciencia y atención. Queden ustedes con Dios.

José Ignacio Foces Gil

SUBDIRECTOR DEL PERIÓDICO “EL NORTE DE CASTILLA”

EL SR. FOCES FIRMANDO EN EL LIBRO DE HONOR DE LA COFRADÍA Foto: Rubén Olmedo Tomillo

Las asociaciones en la Baja Edad Media,, el origen de las cofradías La Edad Media se caracteriza por la devoción a los santos, y es aquí donde hay que cifrar el origen de las cofradías, en la promoción del culto a los santos, comenzando por la Virgen María. Un precedente de cofradía mariana se registra en 1048 en Neopatria (Grecia): Consistía en el culto a una imagen de la Virgen que se llevaba de casa en casa, por parte de los miembros de un grupo de personas que se habían asociado para tal fin. En el mundo latino cabe destacar la de Santa María Novella de Florencia, fundada por el dominico San Pedro de Verona en 1244. A un grupo de este estilo pertenecían los siete fundadores de la Orden de los Servitas, donde aparece claro el ejemplo de una orden religiosa que surge de una simple asociación de fieles. Las cofradías marianas cobran gran auge a partir de la práctica del Rosario, iniciada por Santo Domingo de Guzmán, según una tradición de Alain de Roche que data de finales del siglo XV. Asimismo fueron numerosas las asociaciones que se ocuparon de las obras de caridad hacia los demás: construcción y mantenimiento de hospitales, asistencia de enfermos, cofradías para enterrar muertos, para atender peregrinos… Prácticamente hubo cofradías que cubrieron la mayor parte de las necesidades que hoy en día cubren los diferentes servicios sociales. En consonancia con el papel de la Iglesia medieval en orden a la conservación y restauración de la paz, surgen asociaciones con la finalidad de conseguir la paz y la tregua de Dios. Del mismo modo se dan asociaciones y cofradías que luchan contra la herejía y por la pureza de la fe, de modo incluso militante, como lo demuestran la Cofradía Blanca de Toulouse que participa en la toma de Lavaur en 1211 y la Militia Christi fundada en 1233 que tendrá imitadores y que serán puestas por Gregorio IX en 1234 bajo la dirección de los dominicos. No conocemos los estatutos de ninguna asociación anterior al año 1000, sal-

vo los Iudicia civitatis Londoniae, redactados entre el año 895 y el 940, y que se refieren a una asociación de seguro contra el robo.

1. Las cofradías penitenciales.

En la historia de la espiritualidad medieval tienen importancia las cofradías penitenciales. Sus miembros participaban del misterio de la Pasión de Cristo y de los dolores de María mediante la práctica de actos penitenciales. Es un movimiento que, como veremos, se inicia en Italia con la aparición de penitentes y flagelantes. Casi surge simultáneamente en España.

Los penitentes.

Los penitentes aparecen como un grupo o una categoría de fieles cristianos que de un modo particular se dedican a la penitencia. Antes que una institución religiosa habría que entenderlo como una categoría de personas sensibles a los propios pecados y que se obliga a prácticas religiosas más austeras. Su mayor florecimiento se da en el Medievo y eventualmente pueden llegar a formar parte de alguna Orden religiosa. El inicio del movimiento penitencial medieval se encuentra en la composición de la primera fraternidad laical iniciada por San Bonifacio (+ 755), el movimiento de Hirsau, cuyos monjes indujeron a un grupo de laicos, hombres y mujeres, a practicar la vida penitente sin entrar en el monasterio, permaneciendo célibes o separándose del cónyuge para vivir religiosamente bajo la guía de un monje o de un sacerdote. Se trata de una forma de penitencia que se practicaba ya en la Iglesia antigua. A finales del siglo XI este estado de penitentes adquiere nuevas características, tomando un carácter más amplio y que acabará dando vida a verdaderas órdenes religiosas. A diferencia de los penitentes voluntarios anteriores, los medievales no se limitan, buscan-

SANTO CRISTO DE LAS CINCO LLAGAS Foto: Rubén Olmedo Tomillo

Las asociaciones en la Baja Edad Media, el origen de las cofradías do su perfección, a renunciar a un tenor de vida lícito e incluso a estar bajo una cierta sospecha (la de los antiguos penitentes). No se encuentran aislados individual o comunitariamente, sino que permaneciendo cada uno en su propia casa son reconocibles como grupo por la forma de vida abrazada. Estos penitentes casi siempre casados se dividían en proprietari y comunitari. La penitencia de los primeros consistía principalmente en la restitución de lo ganado ilícitamente, en hacer limosna, en renunciar al lujo y a la vida mundana, vestir hábito penitencial, hacer ayuno y abstinencia particular y a recitar las horas canónicas, sin renunciar a la vida matrimonial. Los penitentes comunitari están más cercanos a la penitencia antigua y practican una renuncia total. En los siglos XII-XIII encontramos las más diversas categorías de penitentes: aislados y societarios; propietarios y comunitarios; rurales y urbanos; libres y oblatos (de un monasterio); solitarios, domésticos y conventuales; célibes y casados; hospederos, apostólicos y enseñantes (según la actividad a que se dedicasen), grises o blancos (según el hábito que llevasen) y otras denominaciones en relación con la dirección religiosa aceptada (franciscanos, dominicos, etc.). No gozaban de la exención del obispo y pronuncian una especie de voto. El Ordinario del lugar hacía que se respetasen sus privilegios y exenciones. En el siglo XII eran considerados adheridos a un estado canónico de penitencia y en 1221 Honorio III aprueba una regla o Memoriale propositi fratrum et sororum de poenitenica in domibus propii viventium. Este modo de vida fue proporcionado, que no fundado, por San Francisco de Asís y Santo Domingo de Guzmán y sus seguidores, así como por las tres órdenes mendicantes, de tal modo que podían asociarse a ellas en un orden de penitencia (Tercera Orden), institución nueva de la Iglesia, aunque en su modo de vida no fuese una absoluta novedad.

Los flagelantes.

Conocidos también como disciplinantes, es un movimiento iniciado por Raniero Fasani. Probablemente era hermano de la Penitencia y su vida se desarrolla, en su mayor parte en la segunda mitad del siglo XIII, muriendo en fecha indeterminada. Fue un personaje especialmente relevante en la ciudad de Perugia. En las décadas de 1250-60 tiene un cierto número de prosélitos que dan lugar a una generalis devotio que tienen el propósito de establecer un locus en el cual construir un oratorio para manifestaciones litúrgicas y espirituales, a pesar del contenido contrario de un acuerdo firmado con los canónigos de San Lorenzo en Perugia. A este propósito contribuyen las clarisas de Santa María de Monteluce y de modo más importante un privilegio de Clemente IV en virtud del cual se les garantiza un área de retiro. La zona operativa fundamental de este movimiento se extiende desde Perugia a la localidad de Monterone, una zona caracterizada por eremitas y emparedadas. Tiene un desarrollo por toda Italia, especialmente en la parte central y septentrional, donde la estructura político-social de ciudades-estado tenía un ambiente más dispuesto a acogerlo. A pesar de lo que se afirmó tradicionalmente Fasani no había pensado en fundar una confraternidad pero el vigor del movimiento y el temor a perder su espíritu tras la época itinerante hizo que se diera una tendencia en las diferentes ciudades y países de dar un impulso a la oración y a la mortificación mediante el establecimiento de una regla. De hecho el día 15 de Febrero de 1261 el papa Alejandro IV expide un breve de indulgencia a los disciplinantes boloñeses que se reunían en el convento de San Giacomo de Sávena a favor de “nonnulli fideles civitatis et diocesis bononiensis zelo fidei et

Las asociaciones en la Baja Edad Media, el origen de las cofradías devotionis accensi… in suorum detestationem criminum et ad iudicis superni misericordiam implorandam nudi publice se fustigare ceperunt”. De cualquier modo es bastante limitado el número de cofradías de disciplinantes existentes en la segunda mitad del siglo XIII. Mayor impulso reciben en la centuria siguiente y a un ritmo casi análogo en el siglo XV, al recibir un empujón importante por la predicación de San Bernardino de Siena, Santiago de la Marca, Roberto de Lecce y San Vicente Ferrer. Hay que destacar el mantenimiento del carácter de agrupación laica, dotada siempre de un asistente eclesiástico y, en la mayoría de los casos, sujeta a la autoridad episcopal. Generalmente era preceptiva la erección canónica por el obispo o por el cabildo catedral y colegial, aunque de modo extraordinario hay cofradías disciplinantes que tienen su origen no en un reconocimiento jurídico de la autoridad eclesiástica, sino en instituciones civiles, por lo general municipales. El carácter laico de las cofradías de disciplinantes se ha conservado a través de los siglos, en mayor o menor medida, según el clima político-social dominante y según la mayor o menor preeminencia de la autoridad eclesiástica. A veces, incluso, se ha manifestado un abierto conflicto entre alguna cofradía y la autoridad eclesiástica, bien para afirmar la laicidad de la hermandad o para la salvaguarda de intereses particulares. La difusión del movimiento de los flagelantes, canalizado en las cofradías, fue muy rápido en la Italia central y septentrional, pero la estructura de la población y el vigor existente en el movimiento hace que pase los Alpes y que se desarrolle, con mayor o menor intensidad, en Austria, Hungría, Alemania, Polonia, Francia, los Países Bajos, Inglaterra y España.

En España el desarrollo se produce a principios del siglo XV, estando documenta do que tras la predicación de San Vicente Ferrer en Medina del Campo en 1409 se produce la procesión de penitencia más antigua de España, con lo que surgen las cofradías de Semana Santa propiamente dichas; aunque como ya se ha señalado la práctica penitencial en lugar cerrado haya que llevarla hasta el siglo XIII. A lo largo del siglo XV se crean las cofradías penitenciales, amparadas en cofradías devocionales anteriores y en las Terceras Órdenes, especialmente la franciscana a cuyo amparo se fundan las cofradías de la Vera Cruz. 2. Cofradías profesionales o gremiales. Constituyen otro bloque importante, a veces son exclusivamente laicas en sus fines y otras veces tienen un carácter mixto, religioso y profano: las cofradías gremiales eclesiásticas. Este movimiento, que se inicia en el siglo XI, se intensifica en el XII, y en el XIII la mayoría de los profesionales realizan su labor perteneciendo a ellas. Generalmente se ponen bajo la advocación de la Virgen o del santo o santos patrones del oficio. Su objetivo suele ser la protección y ayuda a aquellos miembros del gremio o de sus familiares que por diversas razones (enfermedad, vejez o muerte) se ven en dificultad. Paralelamente tienen cultos propios que suelen celebrarse en la capilla o altar que la cofradía tiene en una iglesia u oratorio. También participan en las procesiones o manifestaciones cívicas que se celebran en la ciudad. Sin embargo, ya en 1462 las Cortes de Castilla, reunidas en Toledo, para evitar las banderías propias del reinado de Enrique IV, prohibieron las agrupaciones de personas en cofradías, bajo advocaciones de santas o santos, no con fines piadosos, sino al objeto de hacer daño a sus vecinos o “por executar la malquerencia que contra

Las asociaciones en la Baja Edad Media, el origen de las cofradías algunos tienen”. Recomendaban una estricta vigilancia, incluso para conocer si bajo apariencia moderada de unos estatutos piadosos se ocultaban intenciones secretas, por lo que se revocaron todas las cofradías y cabildos aparecidas desde 1464, salvo las que “se hubieren hecho solamente para causas pías y espirituales, y precediendo nuestra licencia y autoridad del Perlado…” Superados aquellos períodos conflictivos y para evitar falsas interpretaciones de carácter social y económico, Carlos I promulgó la pragmática expedida en Madrid en 1552, ordenando que se disolviesen todas las cofradías de oficiales, incluidas las que tuviesen el refrendo real y prohibiendo su constitución en lo sucesivo para “que a título de los tales oficios no se puedan ayuntar, ni hacer cabildo ni ayuntamiento, so pena de cada diez mil maravedís y destierro de un año del Reyno”.

do de los enfermos fue otra de las constantes del ejercicio asociado de la caridad. Durante los primeros siglos medievales, las “casas de hospicio” de las que hablan las actas del Concilio de Valladolid, debían de estar anexionadas a las residencias episcopales de la ciudad y a los monasterios. Con el desarrollo de las ciudades se construyen hospitales en ellas, así como en los caminos y en los centros de peregrinación. Un buen número de tales fundaciones estuvieron a cargo de cofradías, que también velaban por su mantenimiento. En muchas ocasiones las cofradías de caridad tenían también un aspecto penitencial y viceversa; también se da el caso, como ya se ha dicho antes de que las cofradía gremiales tuviesen actividad caritativa para con sus miembros y familiares.

José Andrés Cabrerizo Manchado

3. Cofradías de caridad.

La hospitalidad con los pobres y peregrinos, así como la atención y cuida-

DEÁN DE LA S. I. C. M. DE VALLADOLID VICARIO JUDICIAL DIOCESANO DE VALLADOLID

รง

El relicario de S. Juan Bautista Cuando la Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo se trasladó a su nueva sede canónica, en la iglesia de San Quirce y Santa Julita, se identificaron y recuperaron algunas imágenes y objetos que las Madres Cistercienses habían venido custodiando en su convento, desde que se desalojara la antigua iglesia de la Pasión y su contenido fuera repartido entre diversos lugares e instituciones. Entre estas imágenes se encuentran las tallas de la cabeza de San Juan Bautista, obra ya recogida en el Catálogo Monumental 1 (asignándose a Pedro de la Cuadra y sin relacionar con la Cofradía de la Pasión), y el torso del mismo santo, escultura desconocida hasta entonces2. Ambas tallas formaron parte del paso procesional de La Degollación de San Juan Bautista, que nuestra cofradía había encargado al imaginero Andrés de Rada en 15793, para la fiesta y procesión de gloria que celebraba todos los años en torno al 29 de agosto. San Juan Bautista, en la advocación de Degollado, tradicionalmente se instituye en protector de las personas condenadas a muerte y como patrono de las instituciones piadosas entre cuyos fines se establece la asistencia a los sentenciados a la pena capital y el posterior entierro del cuerpo de los ajusticiados. Entre las asociaciones dedicadas a estos menesteres destaca la Venerable Archiconfraternità di S. Giovanni Decollato detta della Misericordia, della nazione Fiorentina in Roma, institución a la que fue agregada nuestra cofradía en 15764. Como vemos, el encargo del grupo procesional se realiza poco después de la agregación a la institución romana; posiblemente, además de la condición de San Juan Degollado como patrón de nuestra penitencial, el encargo de este conjunto escultórico estuviera determinado para 1. MARTÍN GONZÁLEZ, Juan José, DE LA PLAZA SANTIAGO, Francisco Javier: Catálogo Monumental de la provincia de Valladolid, XIV-2. Valladolid, 1987, p. 193. 2. LUNA MORENO, Luis: “El grupo de la degollación de San Juan Bautista” Boletín de la Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo, Valladolid, 1994, p. 9. 3. MARTÍ Y MONSÓ, José: Estudios Histórico-artísticos, Valladolid, 1901, p. 498.

mostrar visiblemente a la ciudad de Valladolid, de una forma plástica, la prestigiosa vinculación con la Archiconfraternità, fuente de privilegios e indulgencias. Ciertamente no es habitual un paso con esta iconografía en España, por lo que, además del conjunto escultórico de la cofradía vallisoletana, merece la pena recordar que la hermandad del Santísimo Cristo de la Sangre, San Juan Bautista y María Santísima de la Candelaria de Sevilla portaba un grupo de este tema en la procesión de Semana Santa5; no se conoce cuál era la composición de este conjunto, ni cuantas figuras lo formaban. Fuera de la península, sin embargo, se conservan otros pasos con este tema, en la zona norte de Italia, de cronología muy posterior al grupo encargado por nuestra cofradía, y presentan una espectacular escena barroca. Merece la pena recordar el paso realizado por Marco Antonio Poggio, en el siglo XVII, encargado por la cofradía de S. Juan Bautista de Sestro Ponente (depositado en el oratorio de la Muerte y la Oración, de Génova); el conjunto tallado por Antón María Maragliano (s. XVIII) para la corporación de igual título, de Génova, y guardado en el oratorio del Bautista de Ovada, o el grupo procesional conservado en Bonifacio (Córcega) que procesiona en Semana Santa y el 29 de agosto. Todas estas obras italianas representan el momento previo a la degollación: el Bautista, arrodillado, ora mientras espera el martirio. Completan la escena el verdugo con la espada, Salomé y otros personajes. Sin embargo, el grupo vallisoletano representa el momento posterior a la decapitación y debería contar, al menos, también con las figuras del verdugo y de Salomé. 4. CANESI ACEVEDO, Manuel: Historia de Valladolid. Edición de1996, II, p. 29, con la trascripción del documento de agregación. 5. BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas de Sevilla, Sevilla, 1882, p.421.

ALTAR DE SAN JUAN BAUTISTA DEGOLLADO ERIGIDO EN LA FESTIVIDAD DEL CORPUS CHRISTI Foto: Rubén Olmedo Tomillo

El relicario de San Juan Bautista El cuerpo del santo aparece aún en posición de orar, sin caerse; esta postura, que puede parecer extraña, tiene algunos antecedentes iconográficos, como en la tabla del Maestro de Miraflores (conservada en el Museo del Pardo), donde la figura de San Juan parece estar cayendo, o en el grupo realizado por Felipe Bigarny para el retablo de la Capilla Real de Granada. Posiblemente, el grupo procesional encargado por la Cofradía de la Pasión se inspirara, con evidentes diferencias, en el grabado de igual tema realizado por Alberto Durero, donde el cuerpo del santo queda apoyado en el tajo; no sabemos si la figura de Salomé del paso vallisoletano llevaría en sus manos la bandeja con la cabeza del Bautista, como se representa frecuentemente; posiblemente, esta cabeza sería también objeto de culto individualizado: además de la larga tradición escultórica de este tema iconográfico, debemos recordar que esta representación era el emblema de la Archicofradía romana y que la Pasión de Valladolid la colocó, tallada en piedra, en el exterior de la sacristía de su templo penitencial.

Precisamente, esta función de culto viene avalada por la existencia, en la parte superior de esta talla de la cabeza cortada de San Juan, de un relicario, que, por su forma y modo de colocación, parece posterior a la realización de la imagen. El relicario, de forma rectangular, está formado por un sencillo marco de plata que, protegido por un cristal, custodia las reliquias; estas se sitúan, pegadas, en una superficie, también rectangular (lisa en su origen), forrada por un raso rojo. Un pergamino recortado en tiras semicirculares establece espacios separados para las distintas reliquias y permite la rotulación para la identificación de estas. Así, en los cuatro ángulos podemos leer:

DEL CENACULO DE LA COLUNA DEL CALVARIO DEL PESEBRE

En los lados menores del rectángulo, los rótulos señalan: DO NACIO S IAN DEL SEPULCRO N SOR

Y en los lados mayores:

DEL LUGAR DONDE XO ORO DEL SEPULCRO DE N SEÑOR

En el centro hay lugar para dos reliquias, rotuladas como:

S IOAN B DEL IORDAN

Enmarcando todo el conjunto, se puede leer, con alguna dificultad:

RELICARIO DE S. JUAN BAUTISTA DEGOLLADO Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

IOANNES EST NO....... ET MULTI IN NATIVITA TE MULTI GAUDEBUNT S S IOANES ORA P NOBIS

El relicario de San Juan Bautista

dra o arena del río) establece una conexión entre ambos grupos, pues se relaciona con el Bautismo de Cristo por San Juan. Es interesante remarcar que junto a las reliquias del Bautista, vinculadas al patronazgo del santo sobre nuestra cofradía, el carácter penitencial y de Semana Santa de la misma aparece reflejado en los restos sacros de la Pasión de Cristo.

RELICARIO DE S. JUAN BAUTISTA (Detalle) Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Este texto, pese a las zonas ilegibles y un error (sustitución de eius por multi), se puede identificar con la antífona de las vísperas de la festividad del nacimiento de San Juan Bautista, formada por dos fragmentos del evangelio de San Lucas, capítulo 1, versículos 14 y 63. El texto original es: Ioannes est nomen eius (...) et multi in nativitate eius gaudebunt, esto es Juan es su nombre y en su nacimiento muchos se alegrarán. Se completa con la habitual invocación San Juan, ruega por nosotros. Por otra parte, como se puede ver, las reliquias se pueden agrupar en dos conjuntos. Uno corresponde al santo precursor: un fragmento óseo, posiblemente del cráneo conservado en San Silvestre de Roma, y un trozo del lugar donde nació, que se custodia en el templo dedicado a este santo en Ain Karem. El grupo más numeroso se refiere a Jesucristo: fragmentos del pesebre, del cenáculo (hay que suponer del salón del edificio, conservado en Jerusalén e identificado desde antiguo; otra posibilidad sería de la mesa de la última cena, custodiada en San Juan de Letrán), del huerto de los olivos (donde Cristo oró), de la columna de la flagelación, del Calvario y dos del santo sepulcro (santos lugares custodiados en la basílica del Santo Sepulcro). La reliquia del Jordán (presumiblemente un fragmento de la pie-

RELICARIO DE S. JUAN BAUTISTA (Detalle) Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

El origen inmediato de este conjunto de reliquias debió de ser Roma; no solo porque en esta ciudad se conservan algunas de ellas, como la columna de la flagelación, en Santa Práxedes, y el pesebre, en Santa María la Mayor, sino porque en esta ciudad se custodiaban fragmentos de todas las demás y allí estaban establecidas las instituciones oficiales encargadas de la autentificación de los restos sacros. Pese a que los rótulos identificadores de las reliquias están escritos en castellano, es más que probable que el relicario llegara a Valladolid ya montado desde Roma, acompañado de la correspondiente autentica (documento de autentificación de las reliquias), desgraciadamente no localizada en los archivos de nuestra cofradía.

Luis Luna Moreno

EXDIRECTOR DEL MUSEO NACIONAL DE ESCULTURA DE VALLADOLID Y HERMANO COFRADE DE HONOR

La caridad en la vida de la cofradía La cofradía sigue procurando vivir, día a día, con fidelidad a su espíritu, buscando una y otra vez fundamentar sus actuaciones en la oración, la penitencia y la caridad. Sin esos tres pilares el discurrir de nuestra hermandad por este mundo sería un fracaso y, en definitiva, podría alejarnos de la senda que conduce al Padre. Concretamente la caridad es uno de esos aspectos que siempre, pero más si cabe en tiempos de penuria y crisis como los presentes, caracteriza el comportamiento de un católico, de un cofrade, de una cofradía. De ahí que el año 2015 nos haya servido de nuevo para buscar a Cristo en los más necesitados, conscientes de que las necesidades del prójimo son con frecuencia materiales, pero también espirituales. Últimamente se ha hecho imprescindible, por desgracia, orar y cooperar con la Iglesia en la ayuda -también económica- a tantos cristianos que, en diversos países, están convirtiéndose en mártires contemporáneos, que dan la vida por su fe. La penitencial de la Sagrada Pasión no puede olvidar esta cita. Han sido unos meses en los que el funcionamiento de la bolsa de caridad ha permitido además que la cofradía mantuviera la colaboración con Cáritas parroquial, mediante donativos en metálico y alimentos y productos de higiene que permiten atender a familias menesterosas. Además, la recaudación del concierto benéfico que organizamos anualmente en Cuaresma se ha destinado a los programas de Manos Unidas. Asimismo hicimos un donativo para la ONG PROYDE de los Hermanos de La Salle, que -año tras año- ceden generosamente el teatro de su colegio para ese concierto. No había de faltar el vínculo con la Fundación RedMadre Valladolid, que ayuda a mujeres gestantes enfrentadas a una presión que las invita a abortar y también las apoya a la hora de atender a sus hijos. Para ello, continuamos recogiendo pañales, ropa y juguetes de bebé, menaje de recién nacido, alimentación específica…

Una vez más han contado con la cofradía las Hermanas Oblatas, que en su Centro Albor atienden a mujeres en riesgo de exclusión social. La ayuda a la ONG Amanece en África se ha concretado en esta ocasión en la donación de un lote con abundante material médico-sanitario. Según se indicaba en el número anterior de nuestra revista, la hermandad recaudó durante 2014 la cantidad necesaria para que cirujanos españoles pudieran desplazarse a Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), a lo largo de 2015, a fin de realizar intervenciones quirúrgicas a personas que de otra forma no podrían sufragarse el costo de una intervención, como fruto de un proyecto de cooperación de la Sociedad Castellano Leonesa de Urología con la Fundación Hombres Nuevos. En dicho número reprodujimos una carta remitida por el presidente de la fundación, D. Nicolás Castellanos Franco. En esta ocasión es uno de los cirujanos, el Dr. D. Emilio Gutiérrez Mínguez, quien ha tenido la amabilidad de dirigirnos unas letras que adjuntamos. EL CABILDO DE GOBIERNO

EQUIPO DE PROFESIONALES ANTE LAS PUERTAS DEL QUIRÓFANO Foto cedida por el Dr. Emilio Gutiérrez Mínguez

Estimados Sres.

Hace ya muchos años que me dedico a esta apasionante profesión que es la medicina, e indudablemente, siempre decimos que nos viene de vocación pero en mi caso fue toda una realidad. Tras completar mi carrera en 1979 y después la residencia en 1984, he dedicado toda mi vida a esta mi querida profesión. Desde hace muchos años colaboro con varias ONG’s centro-americanas y he tenido la inestimable ocasión de participar en Nicaragua, Honduras, Guatemala, Bolivia en lo que allí llaman “brigadas quirúrgicas”, teniendo así la oportunidad de realizar intervenciones a personas que no hubieran tenido esa posibilidad de ninguna otra manera... Pero tal vez, de todas ellas, mi mejor experiencia ha sido la colaboración con la Fundación Hombres Nuevos del Padre Nicolás Castellanos, Obispo Emérito de Palencia y premio Príncipe de Asturias de colaboración. Hace ya 10 años que tuve la increíble suerte de acudir a su Fundación, en la Clínica La Milagrosa dentro del barrio del Plan 3000, un enorme y pobre barrio en Santa Cruz de la SierraBolivia donde pude intervenir quirúrgicamente a una gran cantidad de pacientes sin ningún tipo de acceso a nada parecido a nuestra conocida sanidad pública… Desde aquella experiencia, al volver a España siempre deseé desarrollar un proyecto que me permitiese volver y ayudar dentro de mis posibilidades a aquella gente necesitada.

Quiero dar las gracias a la inestimable colaboración de su Cofradía, La Pasión de Valladolid por creer en nuestro proyecto y ayudarnos en su desarrollo, así como al Laboratorio Farmacéutico que desde el primer momento se enamoró del mismo. Acudimos a la citada Clínica La Milagrosa de Bolivia cuatro urólogos de la Comunidad, los doctores Ortiz de Palencia, los hermanos Campanario urólogos de León, la Dra. Bogust, una fantástica anestesista polaca y yo mismo. La Hermana Juana, Directora del Centro, persona a la que ya había tenido oportunidad de conocer en años anteriores en otras campañas quirúrgicas, nos organizó todo para que no se escapase ningún detalle. Durante 10 días en cirugía de mañana y tarde intervenimos a más de 70 personas aquejadas de cánceres, heridas de bala, traumatismos, incontinencias, fístulas…. en fin un sinfín de patologías que hoy casi no vemos en nuestro primer mundo… Y puedo decirles que ha sido una de las mejores experiencias de nuestras vidas. La forma en que los pacientes te miran agradeciéndote en silencio, es el mayor reconocimiento que nadie puede tener. Burgos, a 29 de Enero de 2016 Dr. Emilio Gutiérrez Mínguez URÓLOGO

Y cosas de la vida, hace cuatro años fui designado por mis compañeros de la Comunidad Presidente de la Asociación Castellano Leonesa de Urología y desde un primer momento pensé en formar nuestro propio apartado de colaboración internacional. Me puse en contacto con varias entidades para ayudarnos a financiar la expedición, ya que aunque mis compañeros utilizaron sus días de vacaciones, intentamos sufragar por lo menos los carísimos billetes de avión, material y ayuda. Por ello, llamé a muchas puertas, que desgraciadamente nunca se abrieron… Y es ahí cuando tuve la suerte de contactar con dos Organizaciones que, gracias a su ayuda, nos han permitido desarrollar esta actividad en la primavera de 2015.

EL DR. GUTIÉRREZ MÍNGUEZ JUNTO A SUS COMPAÑEROS A LA ENTRADA DEL HOSPITAL VIRGEN MILAGROSA Foto cedida por el Dr. Emilio Gutiérrez Mínguez

Una tarde de oración con las Carmelitas Descalzas Como se recuerda en otros lugares de esta misma publicación, nuestra cofradía quiso participar activamente en los actos conmemorativos del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús (15 de octubre de 2014 a 15 de octubre de 2015), uniéndose así a las inquietudes de la Iglesia universal, que nos proporcionaba ese año de gracia.

de Pasión, 28 de marzo, coincidía con la fecha de su natalicio allá en el lejano 1515. En el transcurso de nuestra estación ante esta IV fundación teresiana la cofradía hizo una ofrenda floral a esa comunidad, que -como las demás religiosas de clausura y la parroquia y feligreses de San Nicolás- nos acogen con afecto y elevan sus plegarias al Altísimo por nuestra hermandad. En un año tan especial queríamos fortalecer aun más esos lazos de fraternidad humana y cristiana que nos unen a las religiosas desde hace décadas. Para ello acordamos con la comunidad de descalzas, siempre entusiasta y generosa con nosotros, realizar otra actividad conjunta antes de la conclusión del centenario. Así, en el mes de septiembre, en la tarde del viernes día 18, acudimos al templo de las religiosas, una pequeña y bella iglesia que, más allá de su considerable valor histórico-artístico, guarda la huella y el recuerdo de una santa universal, además de ofrecer un recogimiento que invita a hablar con Dios. Allí compartimos con ellas el rezo de vísperas.

SANTA TERESA DE JESÚS (Iglesia del Monasterio de la Concepción del Carmen) Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Una manera de hacerlo era aprovechar nuestro encuentro anual, el Sábado de Pasión durante el Ejercicio Público de las Cinco Llagas, con las hijas de la Santa, la comunidad de carmelitas descalzas del monasterio de la Concepción del Carmen, popularmente conocido en Valladolid como “SantaTeresa” y designado como templo jubilar para la celebración de la efeméride. Concretamente, en tal ocasión había un motivo más para recordar a la santa abulense: ese Sábado

DETALLE DEL ALTAR (Iglesia del Monasterio de la Concepción del Carmen) Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

No olvidemos que la liturgia de las horas, de la que participamos en esa tarde, es oración oficial de la Iglesia, es parte de la liturgia de la Esposa de Cristo, de la que queremos ser buenos hijos.

Una tarde de oración con las Carmelitas Descalzas Junto a la comunidad y a los cofrades había otras personas que, de manera habitual, acompañan a las monjas en tales ratos de oración. El sacerdote ofciante era un gran amigo, en todo momento dispuesto a ayudar desinteresadamente a la cofradía, a su cofradía, el Rvdo. P. Mario Alonso Aguado, O. de M.

que pertenecemos gracias a nuestros padres y a tantas otras personas, una Iglesia que nos pide compromiso y fidelidad en unos tiempos hostiles a nuestra religión.

UN MOMENTO DE LA TARDE DE ORACIÓN CON LAS CARMELITAS DESCALZAS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo EL RVDO. P. MARIO ALONSO, DURANTE EL ACTO DE ORACIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

El compartir esa oración con personas que viven -que vivimos- una variedad de vocaciones (religiosas de clausura, un religioso de una orden redentora, laicos…) fue una oportunidad inolvidable de sentir y de percibir también intelectualmente la grandeza de esa Iglesia a la

Desde estas líneas volvemos a agradecer a la comunidad de carmelitas descalzas del monasterio de la Concepción del Carmen su generosa y amable acogida y sus continuas oraciones por los cofrades de la penitencial de la Sagrada Pasión.

José Ángel Carreño Pérez

OFICIAL DEL CABILDO DE GOBIERNO

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NUESTRO PADRE JESÚS FLAGELADO Foto: Rubén Olmedo Tomillo

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús

PROEMIO:

Santa Teresa de Jesús vive durante gran parte del siglo XVI, de 1515 a 1562. Se trata de un tiempo en el que la Iglesia va a ver quebrantada su unidad. La Santa, en la madurez de su vida, va a vivir los avatares del Concilio de Trento y las guerras de religión de su siglo con una posición profundamente contemplativa; con realismo y entrega generosa se puso en primera línea cuando de amar a la Iglesia se trataba. Veremos cómo la historia de Santa Teresa es historia de salvación en la que el obrar de Dios y el de ella van unidos. Tendremos la ocasión de comprobar cómo actúa, siguiendo el modelo de los santos, que no se quedan en críticas estériles sino que aventuran su vida entera en secundar la acción de Dios. La Santa sufre ante el Cuerpo de Cristo roto, ante la Iglesia dividida, y ella quiere curarla. Cuando Santa Teresa empeña su vida en ésta empresa, ha contemplado la hermosura de Cristo que da su vida en la cruz. Otra constante en la relación que tiene con la Iglesia es la obediencia: presenta su verdad humildemente, somete el carisma recibido al juicio de la jerarquía, obedece, sirve y ama a la Iglesia, y colabora con su vida al incremento de la santidad en la misma, con mirada de fe, sin encerrarse en su propio criterio (único y rico), sino viviendo y muriendo con agradecimiento en el seno de la Iglesia, de la que había captado el profundo misterio. Los límites de esta lección no son suficientes para decirlo todo sobre Santa Teresa y la Iglesia; nos centraremos en la vida eclesial de la Santa, sin agotarla.

También veremos cómo vive Santa Teresa dentro de la Iglesia y en la sociedad española del siglo XVI.

1.- SANTA TERESA DE JESÚS Y SU SIGLO: PRELUDIO HISTÓRICO

Para entender de una manera adecuada la doctrina teresiana, debemos tener en cuenta el tiempo y el espacio en el que la Santa se mueve, y para nuestro propósito, pondremos especial interés en los acontecimientos eclesiales. La Santa mantiene relación jurídica con los Papas de su tiempo por medio de los Nuncios Apostólicos y permanecía enterada de los sucesos eclesiales. La Iglesia de cristiandad que ella conoce no podía pensar en la ruptura de la unidad. Los representantes de la Iglesia eran garantes de la unidad y capaces de cortar muchos de los abusos del Humanismo y del Renacimiento. Los decretos del Concilio de Trento habían logrado algunos cambios positivos, pero aún quedaba mucho por hacer. En España la situación era peculiar; se caracterizaba por la unidad entre el trono y el altar, consolidada por “nuestro Rey Felipe”. No se trata de una Iglesia de carácter nacional, pero sí con características propias. La fe católica era el vínculo y la garantía de la unidad tanto en España como en América. El Rey ostentaba oficios de competencia religiosa (con ciertas tensiones con la Jerarquía de Roma), como el nombramiento de obispos, la revisión de los documentos emanados de la Sede Romana, la reforma de la Iglesia en sus instituciones patrias y la vigilancia de la vida civil y religiosa.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús

El historiador J. Lynch nos ilustra sobre lo que venimos tratando para hacemos una idea del estado de la situación: “El poder de la Corona había ido creciendo…,

por los intereses de la reforma. El Rey era el protector de sus súbditos, incluso del clero, y todos tenían el derecho de apelar a él, mientras que Roma quedaba muy lejos. La Corona controlaba los tribunales eclesiásticos... El papado consideraba este proceder contrario a los decretos del Concilio de Trento y se quejaba de ello...”1 Santa Teresa sabe que la Iglesia es santa, por ser obra de Dios y a la vez pecadora, por estar compuesta de hombres que pueden pecar y que de hecho pecan. No se escandaliza de los problemas de la Iglesia, sino que, empeña su vida en la reforma del Cuerpo místico de Cristo. Nos habla de la Iglesia “en grandes tempestades”, “en gran necesidad” “quieren poner su Iglesia por el suelo”2. Vive en la Iglesia de España, con sus características concretas y hará la Reforma de su Orden, amparada por el Monarca Felipe II. Se siente “hija de la Iglesia”, y por eso quiere vivir en la verdad y que sean los letrados de la Iglesia los que examinen su espíritu y su vida mística. Cumple y acoge las directrices de la Iglesia: en lo referente a las ceremonias, dando gran importancia a los sacramentos, siendo devota de los sacramentales e introduciendo en su vida las normas emanadas del Santo Concilio de Trento. La Santa, al morir, se siente agradecida por hacerlo dentro de la Iglesia, manifestando su amor a la obra creada por Cristo. Se sintió hija de la Iglesia porque sintió con la Iglesia.3 1. J. Lynch, España bajo los Austrias, I: Imperio y absolutismo (15161599), Barcelona, Península, 1982, pp. 347-364 2. V. 13,21; 40,15. C. 1,5. 3. D. de Pablo Maroto, Teresa en oración, Madrid, EDE, 2004, pp. 89-91. Más adelante profundizaremos en este aspecto de la vida de Santa Teresa.

Sirvan las afirmaciones referidas como ejemplo de lo que fue una constante en la vida de nuestra Santa. También es necesario destacar que la obediencia amorosa y el respeto leal a la Iglesia en general y a sus prelados en particular, no la impedirían realizar su laboriosa obra fundacional y escrituraria. Más adelante tendremos ocasión de constatar lo expresado con algunos de los múltiples escritos teresianos que encontramos. Por ahora, veamos lo que dice Santa Teresa de sí misma: “Jamás hizo cosa por lo que entendía en la ora-

ción; antes cuando le decían sus confesores que hiciese lo contrario, lo hacía sin ninguna pesadumbre, y siempre les daba parte en todo”.4 Santa Teresa de Jesús sufre en la Iglesia, por la Iglesia y para la Iglesia; era consciente de su pertenencia a la Iglesia y de vivir de y para la Iglesia y de la verdad de la misma. Por todo esto y por querer vivir en la verdad de la Iglesia expone fielmente y custodia santamente, no la abandonó a su suerte (como harían otros), sino que se metió en su corazón para ayudarla a caminar en santidad. Se dedicó a dar testimonio de la vida evangélica por medio del amor contemplativo, vivido en la entraña del sublime y fecundo misterio que encierra, regalando a la Iglesia la Reforma del Carmelo, en la que sus miembros habrían de dedicarse a amar orando, según ella misma indica en el Camino de Perfección. Y todo esto vivido con realismo, encarnando el espíritu recibido, concretando la entrega sin arredrarse ante 4. C.C. 53,15. También en V. 33, 5-6, escribe de modo similar.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús

las incomprensiones ni enorgullecerse ante las alabanzas. La Santa vive en una Iglesia que sufre el desgarro de la herejía, necesitada de santidad de vida. Ella se siente atraída por lo humano de la Iglesia y lo encamina hacia Dios humanizándolo en plenitud como afirma un egregio teresianista:

“El amor de Cristo y de su Iglesia la había

llenado el corazón humano a través de lo humano de la Iglesia, letrados, personas de todo género, descalzos... era un desfile de de valores humanos, a través de los cuales su existencia humana había cobrado sentido cabal”. 5

Las obras de la Santa dejan entrever una Iglesia militante6 que lucha por defenderse de las agresiones que le vienen de fuera y del pecado y la mediocridad en su seno. Todo esto le hace sufrir y desconfiar en la fuerza de las armas para paliar los daños. Sí confía en la apostolicidad de una vida plenamente evangélica.7 La Santa sabe lo que significa la Iglesia de cristiandad y es consciente de la existencia de los judíos y de los islamistas. Sabe que existe un amplio mundo recién descubierto que debe ser cristianizado y sufre ante la herejía protestante originada en el seno de la Iglesia.8

2. - OBEDIENCIA Y REFORMA

La Santa amó de manera entrañable a la Iglesia, sometiéndose siempre a ella. Ella tiene la noción de la Iglesia jerárquica, cuya cabeza es el Papa.

En uno de sus escritos podemos leer:

“Qué gran cosa es todo lo ordenado por la Iglesia.”9

5. E. de la Madre de Dios Santa Teresa por dentro, Madrid, EDE, 1973, p. 358. 6. C. 6, 2-9; 38,2. 7. D. de Pablo Maroto, en A. Barrientos (dir.) Introducción a la lectura de Santa Teresa, Madrid, EDE, 2000, pp.437-442. 8. V. 7, 4. C. 1, 1-2; 34,2 y 11. 9. V. 31, 4.

En su doctrina se ve ve claro su amor a los sacerdotes; ella se da cuenta de los peligros que les acechan, por eso les convertirá en especiales beneficiados de la vida contemplativa de sus monasterios. Tiene clara idea de la misión y de las funciones de los sacerdotes en la Iglesia, estableciendo una espiritualidad sacerdotal propia.10 Nos parece muy necesario señalar que Santa Teresa conoce las disposiciones del Concilio de Trento por medio, principalmente, de algunos de los teólogos dominicos que habían intervenido en el mismo. También por medio de letrados y espirituales reconocidos, como por ejemplo: Pedro Ibáñez, Baltasar Álvarez, San Pedro de Alcántara, San Juan de Ávila y San Francisco de Borja. Ni las dos primeras fases del Concilio ni el último período de sesiones fueron conocidas directamente por ella, sin embargo, ya había incluido en su vida y en su Reforma orientaciones que haría el Concilio posteriormente. Sirva de ejemplo que la Santa no conocía los escritos emanados de Trento sobre las revelaciones privadas o sobre la gracia. Tampoco conocía las leyes conciliares sobre la clausura de las monjas, pues ella introduce la vida contemplativa en clausura en San José de Ávila en el año 1562 por carisma personal, mientras que el decreto “de Regularibus et monialibus” que habría de corroborar tal decisión teresiana, sería publicado en 1563 como fruto de la sesión XXV del Concilio. La Santa, después de la visión del infierno11, se da cuenta de que el mayor sufrimiento es perder la comunión con Dios, por eso crea un espacio de libertad para cultivar esa comunión.

10. T. Álvarez, Santa Teresa y la Iglesia, Burgos, Monte Carmelo, 1980, pp. 34-37. 11. V. 32.

SANTO CRISTO DEL CALVARIO Foto: Rubén Olmedo Tomillo

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús Después de la experiencia vivida en el monasterio de La Encarnación de Ávila, quiere una vida más recogida y crea un ambiente que favorezca el encuentro con Dios. Da solución a un problema interior de cariz teologal, por eso organiza un espacio de clausura al servicio de lo teologal. Organiza el convento de San José de Ávila con el fin de salvaguardarlo de influencias externas que puedan ser perniciosas para el cultivo de la vida interior. Estos hechos nos hacen pensar que es el Espíritu Santo el que guía a la Iglesia, que el Espíritu va delante, abriendo camino, buscando la verdad y dando vida; después viene la letra, las leyes, los cánones, con el fin de salvaguardar el camino, la verdad y la vida que contiene el Espíritu. Vemos que primero aparece lo carismático y luego viene lo canónico. Tampoco obedece a los dictados de Trento la orientación eclesial, antiprotestante y de propia Reforma Católica del Camino de Perfección y, sin embargo ,coinciden con el espíritu y la letra de los cánones del Concilio: “No contienen referencia alguna al Concilio: ...su ardiente amor a Ia Misa y comunión, a los ritos litúrgicos, su fe en la presencia real, su postura decididamente positiva respecto a las imágenes, su convicción de la eficacia de los sacramentos, su modo de ver la justificación y las realidades interiores, hasta su especial valoración del agua bendita y de las indulgencias…” 12

Los primeros escritos de la Santa, no fueron elaborados bajo el prisma de un concilio: el Libro de la Vida, algunas Relaciones y algunas Cartas. Se trata de los escritos realizados entre los años 1560 y 1568. Las Constituciones, aunque son muy tardías, tampoco reflejan perspecti12. T. Álvarez, Op. Cit. p. 39.

va conciliar alguna. Con respecto al Camino de Perfección, en un primer momento, ni la Santa ni el censor tuvieron en cuenta las perspectivas conciliares, más tarde, será el Padre García de Toledo el encargado de revisar dicha obra en su segunda redacción, teniendo en cuenta el magisterio del Concilio de Trento. Queda aquí de manifiesto que el Espíritu Santo va suscitando en la Iglesia los santos necesarios y convenientes en cada momento histórico.13 La Santa, había iniciado su obra al margen de los superiores de la Orden, y en cierta medida en contra del Padre Provincial.14 En un primer momento, recibe todas las bendiciones del Padre Rubeo, General de la Orden del Carmen que posteriormente se volverá contra ella. Ella se vio metida, sin pretenderlo, dentro del movimiento de Reforma propugnado por el Concilio de Trento. La Santa se muestra obediente siempre a las indicaciones de los superiores, sabiendo por la fe, que por medio de la obediencia cumple la voluntad de Dios. Veamos un ejemplo en el que queda patente la humildad de Santa Teresa y su rendimiento de juicio. Estando la Santa en San José de Medina de Campo en el año 1571, recibe un mandato con graves censuras. Lo envía el Padre Provincial de parte del Padre General, con el fin de que la Madre Teresa salga urgentemente del Carmelo de Medina, haciéndose cargo del priorato del mismo Doña Teresa de Quesada, monja carmelita del monasterio de la Encarnación de Ávila. 13. Señalamos aquí algunas citas en las que Santa Teresa, en sus escritos, refleja lo tratado hasta ahora por nosotros en el punto “Obediencia y Reforma” de nuestro estudio: V. 6,6; 7,2; 7,17; 9,4. 6; 14,5. 6; 19,5; 22,4; 31,4; 33,5; 39,22; C. 20,3; 26,9; 34,7ss. M. 2,11; 5,2,5. 14. V. 36,3

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús En la primera biografía que el Padre Ribera, S.I. escribió sobre Santa Teresa, encontramos la solución del conflicto y nos ilustra sobre su modo constante de proceder cuando de obedecer se trataba:

La Santa se encuentra con el drama de la Iglesia dividida a causa de la escisión protestante.

“Obedecieron con humildad y aquella misma noche salieron para Alba”.15

bezas y bocas, Lutero, a vomitar blasfemias por tocas ellas, cuando ya, Teresa, antídoto de tanta peste, tenía dos años de edad”.18

3.- SIGNIFICADO DE LA IGLESIA EN SANTA TERESA DE JESÚS

En Santa Teresa, el sentido pleno de lo que la Iglesia significa, se realiza al producirse su madurez espiritual, se trata más de un fruto de su profunda vida interior que de una reflexión alambicada. Con las primeras gracias místicas, aparece en ella el misterio escatológico del Reino realizado plenamente en el cielo, y también el misterio de la Iglesia que milita en la tierra. La tensión escatológica entre el ya del Reino y el todavía no, se palpa en el Libro de la Vida en un tono creciente.16 Realidades muy concretas serán las que determinen el ser y el actuar de la Santa Madre Teresa durante los últimos veinticinco años de su vida. Lo que sucederá en la Iglesia tendrá un profundo calado en la Santa:

Ella había nacido en 1515, y en 1517 fue cuando comenzó “aquella bestia de infinitas ca-

No es fácil constatar cómo se informaba la Santa de los sucesos de la Iglesia. Fue después de la fundación de San José cuando se produjo un cambio de perspectiva en su vida espiritual a causa de la realidad histórica de la Iglesia. Es en Camino de Perfección, donde palpamos éste cambio. Nos encontramos entre los años de 1560 y 1565. Se trata de un momento en el que las guerras de religión están en pleno apogeo y el rey Felipe II pide oraciones en conventos y monasterios. Dichas peticiones llegaron, sin duda, al Monasterio de La Encarnación de Ávila y también al Carmelo recién fundado de San José de Ávila. En distintos lugares del libro Camino de Perfección santa Teresa se lamenta por lo que está sucediendo en la Iglesia.19 Por un lado, está enterada de lo que pasa en Europa, y por otro, por parte del P. Maldonado, sabe de los esfuerzos que realizan los misioneros para llevar el Evangelio al Nuevo Mundo.

“La tendrá absorta , y determinará en su

Ella sufre los males de la Iglesia y ve que la pasión del Señor que ella ha contemplado tanto, se sigue prolongando en el Cuerpo Místico de Cristo.

15. F. de Ribera, La vida de la Madre Teresa, Fundadora de las Descalzas y Descalzos Carmelitas. Edibesa, Madrid, 2004, p. 307-311. Nos servimos de dicha edición para constatar la realidad del hecho al que hemos aludido: “Ellos estaban también ofendidos de que la Madre hubiese sacado a Inés de Jesús de Medina para la fundación de Alba sin su licencia, siendo priora del monasterio, y ella no había reparado en eso, porque como tenía licencia para fundar y no había de ir sola, escogía las compañeras que más a cuento la venían para lo que iba a hacer.” 16. En V 20,13 se puede constatar un ejemplo de dicha tensión escatológica.

18. F. de Santa María, Reforma de los Descalzos de Nuestra Señora del Carmen de la Primitiva Observancia, I. libro V, cap. 28, n.10, pp. 848-849. 19. C. 1, 1.5; 3,1.8; 35,3. Son algunos ejemplos para indicar el conocimiento que la Santa tenía de los acontecimientos de la Iglesia y de la sociedad de su tiempo.

vida mística el tránsito de la neta orientación escatológica a un plano de acción apostólica a favor de la Iglesia de la tierra”.17

17. T. Álvarez, Op. Cit. p. 81.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús La compasión hacia Cristo, se vuelve ahora en la Santa hacia la Iglesia sufriente. Su deseo misionero y su dolor por la Iglesia provocarán una entrega más completa y encarnada en una forma de vida evangélica suscitada por el Espíritu Santo, que obra en beneficio de la Iglesia:

“Ser tales... que pueden más ellos a solas que con muchos…”20

La Santa experimenta un profundo dolor ante las profanaciones de la Santísima Eucaristía y, a la vez, contempla la entrega total que el Padre hace del Hijo en manos de los hombres.21 Se trata del silencio de Dios que embarga a la Santa.

Tiene profundamente marcado lo que la Eucaristía encierra; el tesoro dejado por Cristo hasta el final de los tiempos; Cristo mismo realmente presente hasta el fin del mundo, fundamento de la Iglesia. Porque es consciente de este misterio, siente gran dolor al ver que es profanado.

En Santa Teresa, las dificultades de la Iglesia dejan de ser meros hechos históricos para convertirse en razones de vida. Sufre por la herejía, por la pérdida de la fe, por la salvación de las almas, por la relajación de los monasterios y por la vida mediocre de los ministros de la Iglesia.22

El Padre Tomás de la Cruz, insigne teresianista, nos dice:

“La Santa, no desconoce lo concreto,

pero no se exaspera ante ello. En el Libro de la

Vida, estigmatizará con palabras enérgicas la relajación de los monasterios, camino del infierno para quienes quizá se salvarían en el mundo. Volverá sobre el tema con expresiones duras en Camino. Años más tarde, con ocasión de su peregrinación a través de la meseta castellana y de las provincias andaluzas, conocerá algo del desenfreno de ciertos sectores eclesiásticos. Le dolerá…”23 Ante lo que está sucediendo en la Iglesia, Santa Teresa se pone manos a la obra con el fin de contribuir, con la santidad de su vida, al incremento de la santidad. Lo hará de manera concreta cuando de dar la vida a Cristo y a la Iglesia se trata. Hace lo que está en su mano montando una guardia ante el Santísimo Sacramento para evitar que sea profanado, promoviendo lo que desprecian erasmistas y luteranos, cuidando todo lo referente a las misas, haciendo procesiones, teniendo devoción a las imágenes, confeccionando ornamentos, haciendo nuevas iglesias…

Ella misma nos dice:

“Es particular consuelo para mi ver una

Iglesia más, cuando me acuerdo de las muchas que quitan los luteranos. No se qué trabajos, por grandes que fuesen se habrían de temer a trueque de tan gran bien para la cristiandad que aunque muchos no lo advertimos, estar Jesucristo, verdadero Dios y verdadero Hombre, como está en el Santísimo Sacramento en muchas partes, gran consuelo nos habría de ser”.24

20. Ib. 1, 3.4.5; 3,1. 21. CE. 62, 3.4; 58,2. 22. R. 1, 19-20; V. 7,5; CC. 1,2; 12,24; Cta. 45,6.

23. T. Álvarez. Op. Cit. p.8. 24. F. 18,5.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús Ante los males con los que se encuentra busca dar una respuesta verdadera desde sus posibilidades.

El ideal se convierte en realidad en la vida de la Santa, para reconstruir la Iglesia por medio de la oración, orar por la Iglesia y contemplar para la Iglesia está en la base de la vida mística de Santa Teresa de Jesús. El amor a la Iglesia sería “la causa que me movió a hacer con tanta estrechez este monasterio”, nos dice la Santa.26 La Santa pide una entrega total para llegar a Cristo por medio de la caridad, el desasimiento y la humildad, claves que, vividas desde Cristo y en bien de la Iglesia, adquieren sentido pleno, y son exigidas por ella para quien pretenda llevar vida de oración:

EL P. MIGUEL ÁNGEL EN UN MOMENTO DE SU CONFERENCIA Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Por un lado descarta la fuerza de las armas y por otro ve que, como mujer contemplativa, no es llamada a defender a la Iglesia con sus predicaciones. Ante esta situación, nuestra Santa ofrece una solución concreta, no se queda encerrada en estériles lamentos, sino que, en el silencio del amor verdadero, en el callado amor, hace su ofrecimiento: “Como me vi mujer y ruin...y toda mi ansia era y aun es que pues tiene tantos enemigos y tan pocos amigos, que esos fuesen buenos, determiné a hacer eso poquito que había en mi”.25

Nos encontramos ante el ideal de vida dado por el Espíritu a la Iglesia. La Santa nos ofrece el amplio horizonte del ideal de la oración eficaz hecho realidad. Nos encontramos ante la verdadera mística, ante una cuestión personal que se hace comunitaria en beneficio de la Iglesia de Jesucristo.

“Cuanto a la primera que es amarnos mucho unas a otras… el desasimiento... en esto está el todo si va con perfección …otras cosas que importan harto...perder cuidado de nosotros mismos…”27 Para la realización de ideal de vida querido por la Santa, se trata de:

“Qué tales habremos de ser.”28

“Ser tales que valgan nuestras oracio-

nes.”29

“Guardar cumplidamente nuestra Regla... orar sin cesar.... menester trabajar mucho, y ayuda mucho tener altos pensamientos para que nos esforcemos a que lo sean las obras. Pues con que podamos guardar cumplidamente nuestra Regla y Constituciones con gran cuidado, espero que el Señor admitirá nuestros ruegos. Que no os pido cosa nueva, has mías, sino que guardemos nuestra profesión, pues es nuestro llamamiento y a lo que estamos obligadas…”30 26. C. 1,3. 27. C. 4-15. A lo largo de todos estos capítulos, Santa Teresa profundiza en la riqueza espiritualice las tres consignas indicadas encierran. Da claves concretas para vivir los tres consejos que enuncia, y pone ejemplos que dan vida al texto y patentizan la espiritualidad encarnada que la Santa vive. 28. C. 3,2. 5. 29. C. 4,1. 30. C. 4, 1-2.

25. C. 1,2.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús Se trata de vivir personalmente la radicalidad del Evangelio en beneficio de la Iglesia para aumentar en ella la santidad. Es cuestión de coherencia de vida lo que el equilibrado mensaje teresiano nos ofrece, porque no puede haber oración auténtica sin coherencia de vida, se trata de vivir a fondo la propia vocación y de hacer presente a Cristo pobre, casto y obediente. Esto es trabajar por la Iglesia eficazmente, y donde adquiere sentido verdadero la ascésis cristiana que la Santa vive como exigencia del amor de Dios en ella, de la vida interior, de la respuesta de amor con el mayor fervor del corazón.31

Todo ello viviendo en comunidad y procurando el apoyo fraterno para animarse a practicar la virtud y a ser fieles a la llamada del Señor. Santa Teresa enseña a buscar la santidad pedida por Jesucristo en el Evangelio y, por consiguiente, cuestión de ayer, de hoy y de siempre, recordada tenazmente por el Concilio Vaticano II.33

Se podía pretender la reforma de la jerarquía, o la de las estructuras (como pedía Lutero); sin embargo, el camino de los santos va más al fondo, va al núcleo, a lo esencial de la vida cristiana, a la primera necesidad de la Iglesia. En Santa Teresa, la eficacia de la oración requiere coherencia de vida. Se trata de disponerse a que la oración sea verdadera. Es una cuestión de amor que se entrega en lo real, es perfección de caridad que se hace vida en lo concreto, es Espíritu de Dios que se hace carne, es la vida de Cristo vivida por ella con la exigencia que requiere el amor verdadero manifestado con obras.32 Resulta muy actual la intuición de la Santa, que se centra en la vida personal como resorte para la evangelización. Este hecho se nos presenta hoy de plena vigencia, en un mundo necesitado más de testigos de Dios que encarnen el Evangelio y amen a la Iglesia al estilo teresiano que de concepciones abstractas y sin vida. 31. Se trata de un elogio realizado por San Juan Pablo II en la Universidad Pontifica de Salamanca, en su visita a España en el año 1982 para conmemorar el IV centenario de la muerte de Santa Teresa. Dijo el Papa: “Entre todas las mujeres santas de la Iglesia, santa Teresa de Jesús es la que ha amado al Señor con el mayor fervor del corazón.” 32. Durante los 19 primeros capítulos del Camino de Perfección, la Santa va matizando lo que nosotros hemos condensado aquí. Omitimos, en su mayor parte, las citas pormenorizadas, ya que la lectura de dichos capítulos en su integridad, se hace obligada para quien quiera tener una visión de conjunto del significado de la Iglesia en santa Teresa de Jesús.

EL P. MIGUEL ÁNGEL EN UN MOMENTO DE SU CONFERENCIA Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Ella vive primero personalmente la propia llamada y, después, busca a quienes traten de lo mismo. Santa Teresa cae en la cuenta de que parece atrevimiento alcanzar esto.34

Pero ella no quiere ser atrevida, por eso, ni se apoya en su propio carisma, ni pretende ser presuntuosa, sino que se enraíza en los méritos de Cristo, quedando bien claro que el valor de la oración procede de los méritos de Cristo, que vivió, murió y resucitó por nosotros.

33. Constitución Apostólica Lumen Gentium, sobre la Iglesia en el mundo actual: c.5. 34. C.3, 7.9. En el trasfondo de este texto encontramos la polémica acontecida en el siglo XVI sobre la oración en la Iglesia. Santa Teresa ofreció una solución definitiva a dicho conflicto. Lo hizo por medio de su experiencia y de su doctrina de mujer orante en la Iglesia de su siglo.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús Santa Teresa es un modelo de verdadero equilibrio entre lo que Dios hace por gratitud y el esfuerzo necesario del alma, entre la gracia otorgada por Dios y la cooperación del hombre con la gracia. Ella utiliza palabras de mucho peso en beneficio de la Iglesia: esforzarse, trabajar mucho, tener altos pensamientos, son algunos ejemplos de la magnanimidad de nuestra Santa, que responde a la llamada de Dios en bien de la Iglesia en clave de alianza entre Dios y ella vivida en el equilibrio auténtico de la espiritualidad católica. Que el valor de las acciones procede de la Pasión de Cristo es una verdad teológica fundada en la Santa con todo rigor, con pensamiento preciso en el que no nos podemos detener por no ser el objeto principal de nuestro estudio.35 La Santa, lejos de caer en el intimismo o en otras desviaciones en las que cayeron algunos contemporáneos suyos, pone la oración al servicio de la labor apostólica que la Iglesia realiza. En la Iglesia desgarrada ve la belleza del rostro de Cristo, por eso su amor hacia el cuerpo místico de Cristo irá en crecimiento constante a lo largo de su vida. La vida del Carmelo será una obra de Cristo en bien de la Iglesia, paraíso de su deleite, descanso aún para lo de acá, cielo en la tierra.36 La comunidad que vive el espíritu de Santa Teresa, tiene su razón de ser en la medida en que viva centrada en Cristo y testimonie la vida del Reino. Dicha comunidad está llamada a ser

ciudad que hace muy bien fortalecer (el Señor), en la cual el Señor se recoge y desde allí dar en los contrarios. 37 35. Respecto a lo afirmado en este párrafo, es interesante repasar la teología emanada por el Concilio de Trento en el Decreto sobre la justificación del 13 de enero de 1547. La lectura de este decreto nos hace afirmar que la teología de la Santa está en plena consonancia con el mismo. 36. V. 32, 11; 33, 14.15; 35, 12.14; 36,24. Son algunos elogios que santa Teresa hace de la vida del Carmelo donde habita Cristo y la carmelita vive centrada en Él. 37. C. 3,1.

La Santa está dispuesta a todo con tal de ayudar en algo al Señor, incluso a morir por la Iglesia de forma martirial. Al final, muere hija de la Iglesia, agradecida porque la Iglesia le ofrece la sangre de Cristo y el perdón de los pecados. Cuando la Santa muera, se producirá en ella una explosión de conciencia eclesial, de sen-

tido filial, de hacer el tránsito a la rivera de la eternidad desde la tierra firme de la Iglesia. Fue el último maravilloso mensaje de la Santa mística del Carmelo.38

EL ALCALDE DE LA COFRADÍA ENTREGA AL P. MIGUEL ÁNGEL UN CUADRO DE Nª Sª DE LA PASIÓN COMO RECUERDO AGRADECIDO POR SU INTERESANTE CONFERENCIA Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

CONCLUSIÓN

Tenemos que dar fin a nuestro sencillo estudio, conscientes de haber dejado puntos sin tratar, a causa de las necesarias dimensiones de nuestro trabajo. Hemos dado una visión panorámica sobre el profundo significado que la Iglesia tiene en Santa Teresa de Jesús. 38. T. Álvarez, o. c. final de la obra.

Hijos de la Iglesia con Santa Teresa de Jesús Queremos resaltar la actualidad que posee. La Santa, es hoy ejemplo para nuestra vida, para entrar más adentro en la contemplación del misterio de la Iglesia, poniendo la vida en juego para aumentar la santidad en ella. Ella tiene la santa osadía de creer que con su vida entregada del todo puede hacer grandes obras, y lo consigue, y la vemos orando por el aumento de la Iglesia, por los sacerdotes, letrados, predicadores, cautivos, pecadores, por las grandes calamidades humanas, por las guerras, por Francia, Flandes, Alemania, Inglaterra, por los indios de América. Todo lo que le preocupa a Dios y a la Iglesia, le preocupa a ella, todo tiene lugar en su corazón, por eso puede ser madre de muchas almas, por eso su magisterio es imperecedero y por eso su doctrina se nos presenta de plena actualidad en el hoy de nuestra Iglesia.

La Santa, no se pierde ni en abstracciones desencarnadas ni en vagas generalidades; quiere que sus monjas carmelitas descalzas, vivan en el centro de la Iglesia, orando por las necesidades concretas de la Iglesia que peregrina en el tiempo. Esta es la mística del Carmelo, la de Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, la que han vivido, a ejemplo suyo Santa Teresita del Niño Jesús, la Beata Isabel de la Trinidad, Santa Teresa Benedicto de la Cruz, Santa Maravillas de Jesús y tantos otros amigos fuertes de Dios; la mística de lo cotidiano que desciende a los detalles de la vida diaria con la constancia que exige la caridad. Esta es la mística verdadera que Santa Teresa de Jesús nos invita a vivir hoy. L. D. Vque. M.

P. Miguel Ángel de la Madre de Dios O. C. D.

NUESTRO PADRE JESÚS CON LA CRUZ A CUESTAS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Nuestra penitencial con la Hermandad de Pasión sevillana

La Archicofradía Sacramental de Pasión, de la ciudad de Sevilla, y nuestra Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión se hallan unidas por siglos de historia, por una advocación compartida, por devociones comunes, por dos nazarenos tallados en fechas casi idénticas, obras de dos grandes del arte, Martínez Montañés y Gregorio Fernández, … y por una común dedicación al servicio de la santa madre Iglesia.

No es este el momento de escribir sobre el genial escultor alcalaíno, del que tantas y tan importantes investigaciones se han realizado. Tampoco es el lugar para mencionar las citas que de Nuestro Padre Jesús de la Pasión han hecho distintos cronistas a lo largo de la historia, ni las hermosas leyendas que sobre Él afloraron a lo largo del tiempo. Con todo, no puedo por menos de recordar el célebre y elogioso comentario del a la sazón arzobispo de Sevilla, Mons. Antonio Despuig y Dameto -que ocupó dicha sede episcopal entre 1795 y 1799-, para quien la portentosa imagen tenía un defecto: “le falta respirar”. Atendiendo la gentil invitación de los hermanos hispalenses para participar en las actividades conmemorativas acudió a orillas del Guadalquivir una representación de nuestra cofradía, encabezada por el alcalde, D. Luis José Lázaro Giménez, y completada por D. Ángel Duque Rodríguez, vicealcalde segundo, y por el oficial del Cabildo de Gobierno que firma estas líneas. Allí disfrutamos en todo momento de la amable y generosa hospitalidad de los anfitriones, que además nos permitió compartir unos momentos llenos de emotividad y, ante todo, de profunda espiritualidad con representantes de otras hermandades sevillanas igualmente invitadas, así como del Consejo General de Hermandades y Cofradías de la ciudad.

MEDALLA CONMEMORATIVA DEL IV CENTENARIO DE LA HECHURA DE JESÚS DE LA PASIÓN Foto: Archicofradía Sacramental de Pasión

El día 11 de octubre de 2015 se clausuraban los actos que, con gran brillantez, había organizado la hermandad sevillana para celebrar las cuatro centurias de su venerada imagen de Jesús de la Pasión, un nazareno debido, como ya se ha indicado, al imaginero Juan Martínez Montañés, el “Lisipo andaluz”.

JUNTA DE GOBIERNO DE LA ARCHICOFRADÍA DE PASIÓN Y REPRESENTANTES DE OTRAS COFRADÍAS ANTE EL SEÑOR DE PASIÓN Foto: Archicofradía Sacramental de Pasión

Nuestra penitencial con la Hermandad de Pasión sevillana La esplendorosa ceremonia litúrgica, cuidada con todo detalle, celebrada en la iglesia colegial del Divino Salvador, sede canónica de nuestra cofradía hermana, fue oficiada por el Rvdo. Sr. D. Marcelino Manzano Vilches, delegado diocesano de hermandades y cofradías. Acabada la santa misa, visitamos el tesoro de la Archicofradía de Pasión y, como no podía ser de otro modo, nos despedimos con la esperanza de poder recibir en nuestra sede a los hermanos sevillanos. Antes, claro es, hubo ocasión para intercambiar obsequios, como un modo de facilitarnos recíprocamente el recuerdo de dos cofradías tan alejadas aparentemente en el espa-

cio, pero tan cercanas por un sinfín de motivos, tan fraternalmente vinculadas. Allí quedó el perfil del Santísimo Cristo del Perdón y el de María Santísima de la Pasión, ante quienes tantos devotos han rezado durante siglos. Aquí trajimos, entre otros recuerdos, el rostro de Jesús de la Pasión, una imagen que, igualmente por siglos, ha conmovido a los sevillanos y a cuantos han tenido y tienen la fortuna de contemplarla.

José Ángel Carreño Pérez

OFICIAL DEL CABILDO DE GOBIERNO DELEGADO DE ARCHIVO

NUESTRO ALCALDE HACE ENTREGA A D. JOSÉ LUIS CABELLO FLORES, HERMANO MAYOR DE LA ARCHICOFRADÍA SACRAMENTAL DE PASIÓN, DE UN CUADRO CON LAS FOTOS DE NUESTROS SAGRADOS TITULARES Foto: Archicofradía Sacramental de Pasión

RELIQUIA DE SAN RAFAEL ARNAIZ BARÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Noticias 2015 A lo largo del pasado año, la cofradía ha mantenido su palpitar diario esforzándose por cimentar sus actividades sobre los pilares de la penitencia, el compromiso con la caridad y, sobre todo, con la vivencia interna y con la profesión pública de la fe. A continuación exponemos un resumen de lo acontecido en nuestra vida corporativa durante el pasado 2015. El año, cronológicamente hablando, comenzó con un trofeo de fútbol 7 benéfico que, como ya hiciera el año pasado, organizó la Cofradía del Santo Sepulcro y el Santísimo Cristo del Consuelo el domingo 4 de enero cuyo objetivo era recoger alimentos no perecederos con destino al Banco de Alimentos de Valladolid. Hasta los campos de fútbol situados en el vallisoletano barrio de la Rondilla se desplazaron un grupo de nuestros hermanos que participaron en este torneo representando a nuestra cofradía. En lo futbolístico nuestro equipo llegó a cuartos de final, pero eso es lo menos importante, lo verdaderamente importante es que se pudo colaborar con una buena causa y que, además, los que allí estuvieron disfrutaron de una mañana llena de deporte, diversión y hermanamiento.

GRUPO DE HERMANOS PARTICIPANTES EN EL TORNEO BENÉFICO DE FÚTBOL 7 Foto: Archivo de la cofradía

Ya en el mes de febrero, concretamente el lunes 2, acudimos al Triduo y Procesión con el que la Cofradía Penitencial de las Siete Palabras honraban a Nuestra Señora de la Salve.

El calendario litúrgico marcó el comienzo

de la Cuaresma para el año 2015 el día 18 de febrero. Como no podía ser de otra forma, nues tra cofradía celebró el Miércoles de Ceniza con una Sagrada Eucaristía oficiada por el Padre Mario Alonso Aguado (O. de M.), durante la cual se cumplió con el rito de la imposición de la ceniza a los fieles. Inmersos ya de lleno en el tiempo de Cuaresma, las cofradías y hermandades de nuestra ciudad empezamos con los cultos propios de estas fechas. Nuestros Oficiales del Cabildo de Gobierno, además de estar presentes en los actos y cultos que nuestra cofradía organizó, también acudieron representando a nuestra hermandad a los distintos actos y cultos promovidos por el resto de las hermandades y cofradías vallisoletanas. Así, el viernes 20 de febrero acompañaron a los hermanos de la Real y Venerable Cofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo en el Triduo en honor del Santo Cristo del Olvido; el sábado 21 de febrero acudieron al Solemne Triduo y Besapié al Santo Cristo Camino del Calvario, organizado por la Cofradía Penitencial del Santísimo Cristo Despojado, Cristo Camino del Calvario y Nuestra Señora de la Amargura; ese mismo día, también asistimos al Triduo al Santo Cristo del Humilladero, organizado por la Cofradía Penitencial de la Santa Vera-Cruz; el Jueves 26 de febrero estuvieron presentes en el Triduo al Ecce-Homo organizado por la Cofradía del Santo Cristo de los Artilleros; el sábado 28 de febrero, representaron a nuestra hermandad en el Pregón Nazareno organizado por la Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno; el miércoles 4 y el jueves 5 de marzo asistieron al Triduo a Jesús de Medinaceli, organizado por la Cofradía del Discípulo Amado y Jesús de Medinaceli; el viernes 6 de marzo representaron a nuestra cofradía en el Quinario organizado por la Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno a su imagen titular; el sábado 7 de marzo acompañamos a los hermanos de la Hermandad Penitencial de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, en el triduo organizado en honor del

Noticias 2015 Santo Cristo de la Humildad y a los hermanos de la Cofradía Penitencial de la Santa Vera-Cruz en la Misa Cuaresmal en honor de la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalen; el miércoles 18 de marzo estuvimos junto a los hermanos de la Cofradía de las Siete Palabras en el Solemne Quinario al Santísimo Cristo de las Mercedes; el viernes 20 de marzo se acompañó a los hermanos de la Real y Venerable Cofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesuscristo en el Quinario al Santo Cristo de la Preciosa Sangre, a los hermanos de la Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de la Piedad en el Quinario en honor a su imagen titular, estando también presentes en el Solemne Novenario a Nuestra Señora de las Angustias y en el Solemne Quinario al Santísimo Cristo de las Mercedes, organizado por la Cofradía de las Siete Palabras; el sábado 21 de marzo acudieron a la Novena en honor de Nuestra Madre la Virgen de los Dolores, organizada por la Cofradía Penitencial de la Santa Vera-Cruz, además también estuvieron presentes en la Eucaristía en honor del Santísimo Cristo Yacente organizada por la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda; el domingo 22 de marzo acudimos a los Terceros Ejercicios organizados por la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda, además de acompañar a los hermanos de la Cofradía Penitencial de la Santa Vera-Cruz en la Novena en honor de Nuestra Madre la Virgen de los Dolores, acompañamiento que se hizo extensivo también al martes 24; el miércoles 25 de marzo acudimos al Triduo en honor de la Santa Cruz, organizado por la cofradía de la OFS - La Santa Cruz Desnuda y al Solemne Quinario en honor de la Sagrada Pasión de Nuestro Señor Jesucristo y Nuestra Señora de los Dolores organizado por la Cofradía de la Exaltación de la Cruz y Ntra. Sra. de los Dolores; concluimos los cultos cuaresmales el jueves 26 de marzo en el Triduo en honor de la Santa Cruz, organizado por la cofradía de la OFS - La Santa Cruz Desnuda, acompañando a los hermanos de la Cofradía Penitencial y Sacramental de la Sagrada Cena en el Triduo que organizaron en honor a Jesús en su última cena y el Viernes de Dolores, 27 de mar-

zo acompañando a los hermanos de la Cofradía del Santo Cristo Despojado, Cristo Camino del Calvario y Nuestra Señora de la Amargura en el Solemne Triduo en honor a Cristo Despojado y Ntra. Sra de la Amargura, acudiendo al Solemne Triduo al Santísimo Cristo del Consuelo organizado por la Cofradía del Santo Sepulcro y Santísimo Cristo del Consuelo y representando a nuestra cofradía en el Triduo al Santísimo Cristo de la Luz organizado por la Hermandad Universitaria del Santísimo Cristo de la Luz. Además de todos estos cultos cuaresmales organizados por las distintas cofradías hermanas de nuestra ciudad, hemos de destacar la asistencia el sábado 21 de febrero por la mañana, a la Santa Misa en Acción de Gracias que, con motivo de su creación como Cardenal, ofició el Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Ricardo Blázquez Pérez, Arzobispo de nuestra diócesis en la S. I. Catedral Metropolitana. En lo que respecta a los cultos cuaresmales organizados por nuestra cofradía, el domingo 22 de febrero celebramos la Sagrada Eucaristía en honor de Nuestro Padre Jesús Flagelado, el 1 de marzo la Sagrada Eucaristía en honor del Santo Cristo de las Cinco Llagas, a cuya imagen le siguió un Solemne Besapié al día siguiente, lunes 2 de marzo; los días 8 y 9 de marzo celebramos la Sagrada Eucaristía y el Besapié en honor del Santo Cristo del Calvario y el siempre esperado Solemne Quinario al Santísimo Cristo del Perdón tuvo lugar entre los días 10 al 14 de marzo. Como es habirual, el lunes siguiente, 16 de marzo, celebramos el Solemne Besapié a nuestra imagen titular. Las Sagradas Eucaristías dominicales fueron oficiadas por el Rvdo. Padre Eugenio Jesús Oterino Blanco (Misionero Claretiano), que también concelebró la última misa del Solemne Quinario al Santísimo Cristo del Perdón, habiendo ocupado la sagrada cátedra durante el mismo el Ilmo. Sr. D. Luis Javier Argüello García, Vicario General del Arzobispado de Valladolid.

Noticias 2015 El colofón litúrgico a la Cuaresma ante la ya inminente Semana Santa tuvo lugar el Domingo de Lázaro, día 22 de marzo, con una Santa Misa de Comunión General.

EL P. EUGENIO OTERINO BLANCO, EN LA MISA DE COMUNIÓN GENERAL Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Por otra parte, cronológicamente dentro del tiempo cuaresmal pero en el lado más puramente cultural, hemos de señalar que el domingo 22 de febrero tuvo lugar el acto de “Música y Versos de la Pasión”, en el que como es tradicional se presentaron los carteles de nuestras procesiones del “Ejercicio Público de las Cinco Llagas” el Sábado de Pasión, y de “Oración y Sacrificio” el Jueves Santo, basados en fotografías de D. Rubén Olmedo Tomillo, como preámbulo del magnífico “Pregón de la Pasión” promulgado por D. José Ignacio Foces Gil, Subdirector del periódico “El Norte de Castilla”, y que tuvo como broche final la interpretación de diversas marchas procesionales por parte de la Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón”, de nuestra cofradía, en lo que ya es su tradicional puesta de largo de cara a la inminte Semana Santa. Así mismo, hemos de destacar que en este acto contamos con la presencia de las primeras autoridades de nuestra ciudad y provincia; así, tuvimos el honor de que nos acompañaran el Ilmo. Sr. D. Ramiro Ruiz Medrano, quien en esos momentos ocupaba el cargo de Delegado

del Gobierno en Castilla y León, el Ilmo. Sr. D. José Antonio Martínez Bermejo, quien ostentaba el cargo de Subdelegado del Gobierno en Valladolid, el Ilmo. Sr. D. Pablo Trillo Figueroa y Rodríguez Montes, Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León en Valladolid, el Ilmo. Sr. D. Jesús Julio Carnero, Presidente de la Diputación Provincial de Valladolid, D. Oscar Puente Santiago, entonces Presidente del Grupo Municipal Socialista y hoy en día Excmo. Sr. Alcalde del el Excmo. Ayuntamiento de Valladolid, D. Felipe Esteban Alonso, Presidente de la Junta de Cofradías de Semana Santa de Valladolid y representantes de otras cofradías vallisoletanas. Como en años anteriores, la Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo organizó un Concierto Benéfico en favor de Manos Unidas. El XVI Concierto Benéfico se celebró el Domingo 8 de marzo en el Teatro del Colegio “La Salle” y contó con las actuaciones de las siguientes bandas: - Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía Penitencial y Sacramental de la Sagrada Cena, de Valladolid. - Agrupación Musical “Torre del Reloj”, de Peñafiel (Valladolid). - Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón”, de Tordesillas (Valladolid). - Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón” de nuestra Cofradía. Ante un casi repleto aforo del teatro del Colegio La Salle, las distintas bandas nos ofrecieron una intensa tarde de música cofrade, hermandad y solidaridad. El concierto empezó con la actuación de la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía Penitencial y Sacramental de la Sagrada Cena, quienes rompieron el hielo e hicieron aflorar los primeros aplausos del respetable. A continua-

Noticias 2015 ción, le llegó el turno a la Agrupación Musical “Torre del Reloj”, del municipio vallisoletano de Peñafiel, antes de cuya actuación, se rezó un Padre Nuestro por una persona allegada a la banda y recientemente fallecida. Llegados al ecuador del certamen, una de las personas responsables de Manos Unidas en Valladolid subió al escenario para relatarnos los proyectos solidarios que realizan, poniendo un especial enfásis en el proyecto al que irá destinada la recaudación de este concierto. Tras esta breve alocución, fue la Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón”, de la localidad de Tordesillas, los encargados de devolver los sones musicales a la tarde. Finalmente, la Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón”, de nuestra Cofradía dio comienzo a la última de las actuaciones de la tarde.

FINAL DEL CONCIERTO CON LA PRESENCIA DE LOS GUIONES DE LAS BANDAS PARTICIPANTES Y LA INTERPRETACIÓN DE LA MARCHA REAL POR PARTE DE LA BANDA DE NUESTRA COFRADÍA Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Por último, la Bolsa de Caridad de la cofradía hizo un donativo a los hermanos del Colegio de la Salle, con destino a la ONG PROYDE, quienes en una gran muestra de generosidad, decidieron no recoger el donativo y que fuera incluído en la recaudación del concierto, esta recaudación ascendió a 1.000 euros y fue donada íntegramente a la ONGD Manos Unidas.

Ya que hablamos de nuestra banda, es

importante señalar que tuvieron el placer de poner las notas musicales al “Descenso de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno”, que la Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Valladolid celebró el Viernes de Dolores, 27 de marzo.

DOCUMENTO DE AGRADECIMIENTO DE LA COFRADÍA DE N. P. JESÚS NAZARENO A NUESTRA BANDA POR SU ACTUACIÓN Foto: Archivo de la cofradía

Precisamente ese mismo viernes 27 de marzo, la sección infantil de la cofradía hizo una visita guiada a la exposición organizada por la Junta de Cofradías en la Sala Municipal de Exposiciones del Teatro Calderón bajo el título de “Signa Christi”, entre cuyos objetos expuestos estaba un libro de actas de nuestra penitencial, en el que aparece un grabado de Ntra. Sra. la Virgen de la Pasión. Para esta visita pudimos disfrutar de un guía de lujo en la persona del Comisario de la misma, el Profesor de la UEMC, D. Alejandro Rebollo Matías, a quién siempre hay que agradecer su buena disposición para nuestra cofradía.

Noticias 2015 Y llegamos al punto álgido que para la mayoría de hermanos y hermanas cofrades supone la Semana de Pasión.

PARTICIPACIÓN DE LA SECCIÓN INFANTIL DE LA COFRADÍA EN LA PROCESIÓN DEL DOMINGO DE RAMOS Foto: Francisco Javier Puertas Martínez

EJERCICIO PÚBLICO DE LAS CINCO LLAGAS, EL SÁBADO DE PASIÓN Foto: Marcos Valdespino Salazar

Sin duda, podríamos calificar la Semana Santa del año 2015 casi de histórica. La meteorología fue por segundo año consecutivo espectacularmente benévola y eso posibilitó poder salir a la calle todas las procesiones de nuestra ciudad, así como poder celebrar los distintos cultos y actos con la debida solemnidad, percibiéndose un aumento en la participación de cofrades y de pueblo fiel. En lo que respecta a nuestra cofradía en particular, también pudimos desarrollar nuestras procesiones sin ningún tipo de contratiempo y con un aumento en la participación de hermanos y hermanas cofrades, especialmente jóvenes, a quienes animamos a que sigan viviendo la cofradía durante el resto del año con la intensidad con la que lo han hecho esta Semana Santa.

Como otros datos dignos de mención, hemos de señalar que el Jueves Santo, recibimos la visita del Excmo. Sr. Ministro del Interior D. Jorge Fernández Díaz y del Excmo. Sr. Alcalde de Valladolid, D. Francisco Javier León De la Riva, quienes acudieron para ver la salida de nuestra procesión de Oración y Sacrificio, además, el Santísimo Cristo del Perdón fue escoltado en la Procesión General del Viernes Santo por la Guardia Civil, como ya es tradicional y la Vigilia Pascual del Sábado Santo fue cooficiada por el Rvdo. Sr. D. Francisco José García García y por el Rvdo. P. Eugenio Jesús Oterino Blanco (Misionero Claretiano).

PROCESIÓN DE ORACIÓN Y SACRIFICIO Foto: Pedro Matesanz Alonso

Noticias 2015

NUESTRA BANDA EN LA PROCESIÓN DEL SANTO ROSARIO DEL DOLOR, ACOMPAÑAN DO A LA COFRADÍA DE LAS SIETE PALABRAS, EL LUNES SANTO Foto: Enrique Caro Quemada

Además, el Sábado Santo realizaron un Concierto en la Residencia de Personas Mayores “La Alborada”, de Laguna de Duero (Valladolid). Concluida la Semana Santa, el domingo 26 de abril celebramos la festividad de San Rafael Arnaiz Barón, popularmente conocido como el hermano Rafael, celebrando como ya es tradicional una Sagrada Eucaristía, que fue oficiada por el Rvdo. P. Eugenio Jesús Oterino Blanco y que concluyó con la veneración de una reliquia del santo por los fieles que habían acudido a la función eucarística.

PROCESIÓN DE ORACIÓN Y SACRIFICIO Foto: Andrea Aparicio Rodríguez

En cuanto a la banda de Cornetas y tambores de la cofradía, además de acompañar a nuestros sagrados titulares, participó el Domingo de Ramos en las Procesiones de las Palmas y del Traslado del Santísimo Cristo de los trabajos, invitados respectivamente por la Cofradía Penitencial de la Santa Vera-Cruz y por la Cofradía de las Siete Palabras; el Lunes Santo en la Procesión del Santísimo Rosario del Dolor, invitados por la Cofradía de las Siete Palabras; el Martes Santo en la Procesión de las Tinieblas, en Benavente (Zamora), invitados por la Junta Pro-Semana Santa de Benavente y el Viernes Santo en el Sermón de las Siete Palabras, invitados por la Cofradía de las Siete Palabras.

Concluimos el mes de abril con la amable invitación que nos fue cursada por D. José Miguel Travieso a la presentación de la segunda parte de su libro “Retablo Imaginario, Historias de Valladolid”, entre cuyas historias recogidas se encuentra un capítulo titulado “El insólito caso de Mariano Coronado”, que sirve de pretexto al autor para divulgar la antigua acción benéfica de la Cofradía de la Sagrada Pasión con los condenados a muerte, siendo esta la única cofradía a la que está dedicado un capítulo en dicho libro. Llegado el mes de mayo, como es tradicional, varios Oficiales del Cabildo de Gobierno representaron a nuestra cofradía en los cultos

Noticias 2015 y procesión con los que la Cofradía Penitencial de la Santa Vera-Cruz conmemora la festividad del “Lignum Crucis”, además, el domingo 10 de mayo dos Oficiales del Cabildo de Gobierno representaron a nuestra hermandad en la Sagrada Eucaristía y posterior procesión que celebró la Ilustre Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de las Angustias en honor de la Virgen de la Encarnación, así mismo los días 14 y 15 de mayo acudimos respectivamente al Triduo en honor de San Pascual Bailón, organizado por la Cofradía Penitencial de la Oración del Huerto y San Pascual Bailón y al triduo organizado por la Cofradía de El Descendimiento y Santo Cristo de la Buena Muerte en honor a Nuestra Señora de la Amargura, finalizando el mes de mayo acompañando a los hermanos de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Resucitado, María Santísima de la Alegría y las Lágrimas de San Pedro, en la Santa Misa y posterior procesión en honor de María Santísima de la Alegría. El domingo 7 de junio se celebró la festividad del Corpus Christi, a cuya Solemne Eucaristía y posterior procesión acudió nuestra cofradía de forma corporativa. Como es tradicional, para facilitar esta asistencia de nuestros cofrades, se suspendió la Santa Misa de la cofradía de este día.

Por otra parte, como viene siendo costumbre en los últimos años, erigimos un altar en la Calle de la Pasión, junto a la que fuera sede histórica de nuestra penitencial, presidido por la imagen de S. Juan Bautista Degollado y la reliquia de S. Rafael Arnaiz, patronos de la cofradía. El domingo 14 de junio acompañamos a los hermanos de la Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno en la festividad de la Octava del Corpus, Fiesta de Gloria de esa cofradía. Al término de la Solemne Procesión Sacramental realizada como conmemoración de la Octava del Corpus y en un emotivo acto celebrado en su Salón de Cabildos, la cofradía anfitriona hizo entrega a nuestro Alcalde de un diploma en el que se agradece públicamente la colaboración de la Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón” de nuestra cofradía con la hermandad nazarena. El domingo 28 de junio acompañamos a los hermanos de la Cofradía Penitencial y Sacramental de la Sagrada Cena en el triduo y procesión que esta hermandad celebró en honor a San Pedro Apóstol y a los hermanos de la Real y Venerable Cofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo en la Sagrada Eucaristía con la que celebraron su festividad de la Preciosa Sangre. Como es natural, durante el periodo estival el ritmo del día a día de nuestra hermandad se ralentiza, aun así, el sábado 4 de julio acudimos a la procesión extraordinaria con la que la Cofradía de la Antigua Devoción de Nuestra Señora del Carmen celebró el 175 aniversario de su fundación, incluyendo la participación activa de un grupo de hermanos cofrades, quienes tuvieron el honor de cargar las andas de la Santísima Virgen durante una parte del recorrido.

ALGUNOS DE NUESTROS HERMANOS PORTARON EL PALIO DEL SANTÍSIMO Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

El viernes 29 de agosto conmemoramos la festividad de nuestro patrón, San Juan Bautista Degollado, con una Solemne Eucaristía concelebrada por el Rvdo. P. Eugenio Jesús Oterino

Noticias 2015 Blanco, Misionero Claretiano y por el Rvdo. Sr. D. Manuel Fernández Narros, Delegado Diocesano de Religiosidad Popular del Arzobispado de Valladolid y Párroco de San Martín y S. Benito El Viejo. Al concluir la ceremonia, fue bendecido un nuevo dogal para el Santísimo Cristo del Perdón, donado por una familia cofrade. Como es tradicional, esta celebración marcó la vuelta a la actividad litúrgica cotidiana de la cofradía, recuperando a partir de ese momento las Misas de Hermandad dominicales que tras su suspensión en el mes de agosto se reanudaron al día siguiente, domingo 30 de agosto.

El martes 15 de septiembre celebramos un año más una Solemne Eucaristía en honor de María Santísima de la Pasión, patrona de nuestra cofradía, que estuvo concelebrada por el Rvdo. P. Eugenio Jesús Oterino Blanco, Misionero Claretiano y por el Rvdo. Sr. D. Francisco José García García y tres días más tarde, con motivo de la celebración del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús, nuestra cofradía compartió un acto de oración con las carmelitas descalzas, cuyo convento visitamos cada Sábado de Pasión en el Ejercicio Público de las Cinco Llagas.

NUEVO DOGAL PARA EL SANTÍSIMO CRISTO DEL PERDÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

SANTA MISA EN HONOR DE NUESTRA MADRE MARÍA SANTÍSIMA DE LA PASIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Entre los días 31 de agosto y 8 de septiembre, se celebraron diversos actos y cultos en honor de Ntra. Sra. la Virgen de San Lorenzo, Patrona y Alcaldesa Perpetua de Valladolid. Como no podía ser de otra manera, nuestra cofradía participó en los mencionados actos, así, el lunes 31 de agosto participamos en la ofrenda floral realizada a Ntra. Sra. de San Lorenzo, el miércoles 2 de septiembre, estuvimos presentes en la misa celebrada ese día dentro del Solemne Novenario que su cofradía titular organiza a la Virgen de San Lorenzo y por último, el martes 8 de septiembre nuestra hermandad estuvo representada en la procesión y en la Solemne Eucaristía celebrada en la S.I.M. Catedral en honor de la Patrona de Valladolid.

Dentro del compromiso que nuestra cofradía siempre ha mantenido en defensa de la vida y la familia, y conjuntamente con las cofradías hermanas de la Santa Vera-Cruz, la Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda y la Hermandad Penitencial de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, durante el mes de septiembre se celebraron las IV Jornadas “Spei Mater” (Madre de Esperanza), de cuya celebración damos cuenta más pormenorizadamente en otro artículo de esta revista.

El mes de octubre nuestra cofradía lo dedica especialmente al culto a la Santísima Virgen, bajo la advocación de nuestra patrona, María Santísima de la Pasión. Durante este mes, son

Noticias 2015 varios los cultos y los actos de índole cultural y social que desarrollaremos. De esta forma, durante los días 2 y 3 de octubre a las 20:00 h. y el día 4 de octubre a las 10:30 h. tuvo lugar la celebración del Solemne Triduo en honor de Ntra. Sra. María Santísima de la Pasión, durante todos los días hubo santa misa con homilía y ejercicio del triduo, y santo rosario los días 2 y 3 de octubre, estando oficiadas las Sagradas Eucaristías por el Rvdo. Padre José El Busto Gómez de Segura, O.S.A.R, el primer día del triduo, por el Rvdo. Sr. D. Javier Carlos Gómez Gómez, Párroco de la Unidad Pastoral San Miguel y San Julián-San Nicolás, el segundo día del triduo y por el Rvdo. Padre Eugenio Jesús Oterino Blanco (Misionero Claretiano) el domingo. Desgraciadamente, las condiciones meteorológicas impidieron que al término de la Santa Misa del domingo Nuestra Señora de la Pasión partiera en procesión, lo que motivó que algunos actos que iban a tener lugar durante el desarrollo de la misma, se trasladaran al interior de nuestra sede de la iglesia del Real Monasterio de San Quirce y Santa Julita. Por este motivo, delegaciones de las cofradías de La Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda y de Nuestro Padre Jesús Nazareno, se desplazaron hasta nuestra sede con el fin de ofrendar a Nuestra Señora sendos centros florales, ante la imposibilidad de hacerlo en el cordial y fraterno recibimiento que tradicionalmente nos hacen durante la procesión al paso por sus respectivas sedes canónicas. Por último, a las 12 h., rezamos el Ángelus tal y como teníamos previsto haber hecho junto con los hermanos de la Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda al paso por su sede, a cuyo término se entonó el “Perdón, oh, Dios Mío” ante la imagen del Santísimo Cristo del Perdón. El sábado 17 de octubre los niños de la cofradía participaron en su consagración ante nuestra patrona, María Santísima de la Pasión. Se trató de un breve y distendido acto que estuvo dirigido por el Rvdo. Padre Eugenio Jesús Oterino Blanco (Misionero Claretiano) y en el que los

verdaderos protagonistas fueron nuestros hermanos más jóvenes, junto por supuesto, a Nuestra Madre y Señora María Santísima de la Pasión. Al finalizar el acto, los niños se hicieron una foto junto a la Virgen de la Pasión y recibieron un obsequio.

CONSAGRACIÓN DE LOS NIÑOS DE LA COFRADÍA A NTRA. SRA. MARÍA SANTÍSIMA DE LA PASIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

El Solemne Besamanos a nuestra patrona se celebró el lunes 26 de octubre. El día desapacible y la lluvia no consiguieron amedrentar a los fieles de Nuestra Señora, que un año más acudieron hasta nuestra sede canónica para rendir culto a María Santísima de la Pasión, en un besamanos que concluyó con un breve acto de oración y cuyo broche final fue el canto de la salve popular ante la imagen de María Santísima.

SOLEMNE BESAMANOS A NTRA. SRA. MARÍA SANTÍSIMA DE LA PASIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Noticias 2015 El sábado 31 de octubre, el Rvdo. P. Miguel Ángel de la Madre de Dios impartió una interesantísima conferencia con el título “La fe en Santa Teresa de Jesús”. Aunque obviamente es imposible condensar la vida de la santa abulense en la, aproximadamente, hora y media que duró la conferencia, el Padre Miguel Ángel disertó sobre la fe en Santa Teresa estructurando la conferencia en cuatro grandes grupos, la fe en Jesucristo, la fe en la Eucaristía, la fe en la Iglesia y la fe en la Virgen María.

y que se aplica en sufragio de los hermanos que nos han precedido en la fe desde 1531, con una mención especial a los que han fallecido en el último año. De esta manera, rezamos para que los hermanos que ya no están terrenalmente junto a nosotros, queden bajo el amparo de Nuestro Padre Jesús con la Cruz a cuestas.

En el mes de octubre, además de nuestros actos propios, la cofradía tambíen estuvo presente en otros actos, como el viernes 9 cuando acudimos a la Novena en honor de la Virgen del Pilar, organizada por su cofradía homónima. El domingo 11 de octubre, una representación al más alto nivel de nuestro Cabildo de Gobierno acudió a Sevilla en representación de nuestra cofradía para asistir a la Misa de Acción de Gracias con la que nuestros hermanos de la Archicofradía Sacramental de Pasión clausuraban los actos de celebración del IV Centenario de la hechura del Señor de Pasión, después de la Santa Misa, tuvo lugar un pequeño acto en el que nuestro Alcalde les entregó un cuadro con las imágenes del Santísimo Cristo del Perdón y de Nuestra Señora María Santísima de la Pasión, obsequiándonos a su vez nuestros hermanos sevillanos con la medalla conmemorativa de este IV Centenario. Entre los días 3 y 6 de noviembre, participamos en las III Jornadas de religiosidad popular, organizadas por el Arzobispado de Valladolid, también el viernes 6 acompañamos a los hermanos de la Cofradía Penitencial de nuestro Padre Jesús Nazareno en el triduo y besamanos dedicado a la Virgen de la Soledad y Sacro Monte Calvario. Los días 20 y 21, a las 20 h. y el 22 de noviembre a las 13 h., celebramos el Triduo en honor de Nuestro Padre Jesús con la Cruz a cuestas, oficiado por el Rvdo. Padre Eugenio Jesús Oterino Blanco (Misionero Claretiano)

TRIDUO A N. P. JESÚS CON LA CRUZ A CUESTAS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Además, el lunes 23 de noviembre, celebramos un Solemne Besapié en honor de Ntro. Padre Jesús con la Cruz a cuestas, en el que previamente a la finalización del mismo, se realizó una Exposición Menor del Santísimo Sacramento, en desagravio por la profanación del Sagrario de la parroquia de San Ignacio de Loyola de nuestra ciudad y la blasfemia ocurrida en una exposición “artística” en Pamplona, concluyendo a continuación el Besapié con un acto de oración y un responso por los hermanos cofrades difuntos.

BESAPIÉ A N. P. JESÚS CON LA CRUZ A CUESTAS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Noticias 2015 En la tarde de ese mismo domingo 22 de noviembre, nuestra Banda de Cornetas y Tambores “Santísimo Cristo del Perdón” participó en un certamen benéfico organizado por la Real y Venerable Cofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, con motivo de la festividad de Santa Cecilia, Patrona de los músicos y cuyo objeto era conseguir alimentos no perecederos para el Banco de Alimentos de Valladolid.

Precisamente en relación a este Año Jubilar, numerosos hermanos y hermanas cofrades participaron el domingo 13 de diciembre en una Sagrada Eucaristía oficiada por don Ricardo, Cardenal-Arzobispo de Valladolid.

Finalizamos el año con los cultos y actividades propios del Adviento y de la Navidad. Así, el sábado 12 de diciembre celebramos una jornada formativa sobre cómo vivir el Adviento, tiempo fundamental para preparar la Natividad del Señor. Esta jornada tuvo lugar en los salones parroquiales de San Nicolás y contó con la participación del Rvdo. Sr. D. Javier Carlos Gómez Gómez, párroco de la Unidad Pastoral San Miguel-San Nicolás y Delegado de Misiones de la Archidiócesis de Valladolid. En una charla marcada predominantemente por un tono distendido, D. Javier Carlos hizo una serie de reflexiones en torno a qué es el Adviento y cómo debemos afrontarlo desde nuestra moral cristiana, enmarcándolo a su vez en el Año Jubilar de la Misericordia, al que Su Santidad Francisco nos ha convocado a todos los cristianos a través de su Bula Misericordiae Vultus, y que comenzó el día 8 de diciembre.

NUESTROS HERMANOS EN LA SAGRADA EUCARISTÍA QUE INAUGURABA EL AÑO JUBILAR DE LA MISERICORDIA Foto: Archivo de la cofradía

Al término de la misma la sucedió una procesión por las calles de nuestra ciudad y que tuvo como destino la Basílica-Santuario de la Gran Promesa, designada en nuestra Archidiócesis templo jubilar.

NUESTROS HERMANOS EN LA PROCESIÓN HASTA LA BASÍLICA-SANTUARIO DE LA GRAN PROMESA, TEMPLO JUBILAR Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo JORNADA FORMATIVA SOBRE EL ADVIENTO Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Noticias 2015 Finalizado el tiempo de Adviento y en los albores de la Navidad, los miércoles 23 y 30 de diciembre los protagonistas principales fueron nuestros cofrades más jóvenes, pues como ya es tradicional, se celebraron sendas actividades lúdico-educativas, en las que además de disfrutar nuestros niños de una animada sesión de cine el primero de los días y de juegos que finalizaron con la degustación de un rico y reconfortante chocolate caliente el segundo de los días, sobre todo podemos destacar que primó el espíritu de hermandad entre todos ellos.

NUESTROS COFRADES MÁS JÓVENES DISFRUTANDO DE UNATARDE DE JUEGOS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Además celebramos la Solemnidad de la Natividad del Señor el día 25 de diciembre, la Solemnidad de Santa María, Madre de Dios el 1 de enero, la Epifanía del Señor el 6 de enero y la festividad del Bautismo del Señor el 10 de enero.

NUEVO “NIÑO JESÚS” DONADO POR UNA

Por supuesto, en estas celebraciones de la Natividad del Señor, montamos un belén que fue bendecido el domingo 20 de diciembre y que se pudo visitar desde el lunes 21 de diciembre al día 6 de enero, ambos inclusive.

BELÉN DE LA COFRADÍA (DETALLE) Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

FAMILIA DE COFRADES

Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

No podemos concluir este repaso a la vida de nuestra hermandad durante el año 2015 sin mencionar expresamente las labores de caridad que ha llevado a cabo nuestra cofradía. Muchas y variadas han sido las colaboraciones que la cofradía ha tenido con diversas ONGS a lo largo del pasado año, de este modo, además de alguna donación ya mencionada en estas líneas, se han hecho aportaciones a la parroquia de San Nicolás, al Centro Albor de las Hermanas Oblatas, ropa de bebé, menaje de recién nacido, alimentación específica y juguetes de bebé a la Fundación Red Madre de Valladolid, así como aportaciones en metálico a Cáritas Diocesana y Manos Unidas, así como una entrega a la ONG Amanece en África de un lote de material médico-sanitario por un valor estimado de 2.000 €.

IV Jornadas “ Spei Mater” Dentro del compromiso que nuestra cofradía siempre ha mantenido en defensa de la vida y la familia, juntamente con las cofradías hermanas de la Santa Vera-Cruz, la Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda y la Hermandad Penitencial de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, durante el mes de septiembre se celebraron las IV Jornadas “Spei Mater” (Madre de Esperanza).

Esperanza, director del Centro Diocesano de Espiritualidad de Valladolid y consiliario de la Hermandad Penitencial de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, que en sus reflexiones invitó a todos a defender la vida con confianza en Dios. Varios hermanos y hermanas de las cofradías organizadoras leyeron diversos pasajes bíblicos, con la activa participación de las numerosas personas asistentes.

Como en años anteriores, estas jornadas se distribuyeron en dos días en que se organizaron un acto de oración y una conferencia, respectivamente.

HERMANOS DE LAS DISTINTAS COFRADÍAS QUE LEYERON PASAJES BÍBLICOS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Asimismo se elevaron preces por la vida naciente, por los que defienden la vida, por las madres embarazadas, por los profesionales de la sanidad, por quienes dirigen las naciones, por todos los padres y las familias, por las cofradías de la ciudad…Como colofón, se procedió a la bendición de las madres gestantes y de los niños y niñas que así lo desearon ante la imagen de María Inmaculada y al canto de la salve.

CARTEL ANUNCIADOR DE LAS IV JORNADAS “SPEI MATER” (MADRE DE ESPERANZA)

La primera de las actividades celebradas consistió en una tarde de oración y tuvo lugar el sábado 19 de septiembre, a las 20’00 horas, en la capilla de la Congregación, sita en la calle de Alonso Pesquera (junto al Santuario Nacional de la Gran Promesa). Este acto estuvo presidido por el Rvdo. Sr. D. Julio Alberto de Pablos de la

BENDICIÓN DE MADRES Y NIÑOS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

IV Jornadas “Spei Mater” La segunda parte de las IV Jornadas Spei Mater nos concentró el viernes 25 de septiembre, a las 20’30 horas, en la iglesia penitencial de la Santa Vera-Cruz para escuchar una conferencia que, con el título “La defensa de la vida en la encíclica Laudato si’”, fue impartida por el Ilmo. Sr. D. Luis Javier Argüello García, vicario general del Arzobispado de Valladolid.

El Romano Pontífice, tal y como recordó el ponente, ha hablado y escrito sobre la importancia de conservar este mundo, esta casa común que Dios nos ha dado, en la que la vida humana -desde el momento de su concepción hasta su fin natural- es un bien que merece todo respeto y en el que se apoya la verdadera preocupación por la naturaleza que nos rodea. Al terminar cada uno de los actos los representantes de las cuatro hermandades hicieron entrega de un recuerdo a los dos sacerdotes colaboradores, como muestra de gratitud por su generosa disponibilidad y por su decidido compromiso con los valores que hemos de defender por ser personas de bien, por ser cofrades, por ser miembros de la Iglesia.

EL ILMO. SR. D. LUIS ARGÜELLO EN UN MOMENTO DE SU INTERVENCIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Acompañado por los alcaldes o presidentes de las cofradías impulsoras de estas jornadas, D. Luis repasó la encíclica Laudato si´, teniendo además como referente complementario el discurso que Su Santidad el Papa Francisco había pronunciado apenas unas horas antes en la Asamblea General de las Naciones Unidas.

D. LUIS, JUNTO A LOS PRESIDENTES DE LAS COFRADÍAS ORGANIZADORAS Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

LOS REPRESENTANTES DE LAS COFRADÍAS ENTREGAN A D. JULIO ALBERTO UN RECUERDO EN AGRADECIMIENTO POR SU COLABORACIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

DETALLE DE LA PLACA ENTREGADA A D. LUIS ARGÜELLO Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

NUESTRA SEÑORA MARÍA SANTÍSIMA PASIÓN NUESTRA SEÑORA MARÍA SANTÍSIMA DEDE LALA PASIÓN Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Entrevista a D. Manuel Fernández Narros, Delegado Arzobispal de Religiosidad Popular 1. A modo de presentación, ¿cuál ha sido la trayectoria personal de Manuel Fernández Narros? Mi primer nombramiento fue el de diácono al servicio de La Seca, allá por el año 1996, unos meses antes de que D. José me ordenara sacerdote. Después me quedé con los pueblos de Rodilana y Pozaldez, donde pusimos en marcha una cofradía, la del Cristo del Corroto. En el año 2003 D. Braulio me mandó al Hospital Clínico de capellán y allí estuve ocho años. Ya en el año 2011 D. Ricardo me dijo que me encargara de la parroquia de San Martín y San Benito el Viejo, donde llevo cuatro años. 2. ¿Cuáles son las funciones del delegado de Religiosidad Popular? La función del delegado de Religiosidad Popular es hacer presente al obispo en las diversas tareas a las que él no puede llegar, por eso “delega” en nosotros. En concreto, en la religiosidad popular, es representarle en las Juntas de Cofradías de la Semana Santa e ir alguna vez a algún acto al que él no puede asistir y pide que le represente. También, estar un poco en conexión con las cofradías, tanto penitenciales como las de gloria y todas las cofradías que haya en la diócesis de Valladolid. Asimismo, velar por que se cumplan los criterios que desde la diócesis y desde nuestro obispo se nos dan para que caminemos como todo fiel cristiano, tras las huellas de Cristo Resucitado. 3. ¿Qué valoración hace del estado de salud actual de la religiosidad popular en Valladolid, con especial atención al apartado de

las cofradías penitenciales? ¿Ha habido un impulso en los últimos años o se encuentra en período de retroceso? La salud de nuestra religiosidad popular siempre es mejorable, como en toda la vida de cada uno siempre hay aspectos que mejorar, pero no es mala la salud de nuestras cofradías, tanto las de penitencia como las de gloria. Desde hace tres años que llevo yo de delegado, noto una mayor implicación y unas ganas de hacer cosas y colaborar por parte de TODAS las cofradías. Mi deseo es que se viva de una vez por todas el espíritu de HERMANDAD, que debe reinar entre todas las cofradías de una misma diócesis, y se vaya recuperando, después de unos años de bajas, una subida de cofrades, deseosos de encontrar en su cofradía la vivencia de Cristo Resucitado. 4. En los últimos años y desde la diócesis parece que se ha dotado de un papel más importante a las cofradías ¿Considera que las cofradías deben tener mayor protagonismo? ¿Estamos preparados para asumirlo? Las cofradías deben tener el papel que les corresponde en la diócesis y sentirse llamadas SIEMPRE que desde la diócesis se hace un llamamiento a los fieles de Valladolid. No siempre hay que llamar en nombre propio, sino sentirse convocado como fiel de Valladolid a los actos que desde la diócesis se organizan para todos. Desde las cofradías deberían salir más personas dispuestas a colaborar con las parroquias o lugares donde se viva la fe, no sólo en Semana Santa, sino también el resto del año y sobre todo, como vemos en este curso, el domingo, día del Señor. 5. Desde un punto de vista más autocrítico: ¿estamos las cofradías demasiado centradas en los aspectos externos (enseres, acompañamiento musical, exorno floral…) y

Entrevista a D. Manuel Fernández Narros, Delegado Arzobispal de Religiosidad Popular descuidamos los puntos esenciales de la celebración de los diferentes misterios de nuestra fe? Los aspectos externos es verdad que hay que cuidarlos y los cuidáis bien. Eso no tiene que llevarnos a descuidar lo interno, la vivencia de la fe. Fijaos qué oportunidad tenemos de vivir, en la calle, lo que celebramos en los templos ¿Si no hemos acudido a la celebración de dentro, qué puedo compartir fuera? Por eso os invito a que vivamos el misterio de nuestra fe, que es Cristo, y después demos testimonio de Él siempre que acompañemos a nuestras imágenes devocionales, tan queridas para cada uno de nosotros.

necesitados en todos los campos: hospitales, enseñanza, enterramientos, etc. Por lo tanto, que volvamos a retomar esas bolsas de caridad y a compartir un poco con aquellos que tienen menos que nosotros me parece muy bien. Al igual que me parece bien que se organicen actos a favor de la vida. Yo creo que, en colaboración con Cáritas diocesana o Manos Unidas, se podría desde las cofradías asumir algún proyecto y llevarlo a cabo entre las recaudaciones y solidaridad de todas las cofradías vallisoletanas. Es una idea que os dejo ahí.

6. Aunque hay veinte cofradías, y cada una tiene sus determinadas peculiaridades, ¿se involucran lo suficiente las cofradías en los actos litúrgicos o de culto?

8. Es usted un fiel seguidor de nuestras procesiones y no sólo de las que tiene ocasión de presidir, sino que a menudo se le puede encontrar en la acera contemplando el discurrir de muchas de ellas ¿Considera necesario acometer reformas en el planteamiento o desarrollo de alguna de ellas? Pues sí, soy un “capillitas” y siempre que puedo me gusta hacerme presente en los actos externos que hay, y ser cofrade de acera, desde donde se ve otra perspectiva de las procesiones y de la vivencia de cada cofradía. Yo aquí insistiría en lo que ya me habéis oído muchas veces, vivir el ESPÍRITU DE HERMANDAD, no el de competitividad. No somos rivales, sino hermanos que vivimos la misma fe en el mismo Jesús, pero cada uno desde nuestra devoción particular. Por eso no dividamos, sino sumemos para que nuestra Semana Santa sea lo que en realidad es, LA MEJOR SEMANA SANTA DEL MUNDO ¿Si nosotros no nos lo creemos, como lo vamos a “vender” a los demás? Yo sí estoy convencido de que nuestra Semana Santa es la mejor.

Hay veinte cofradías de penitencia, pero hay también de gloria y cofradías y asociaciones sacramentales. A esta pregunta diré que gracias al esfuerzo y dedicación de las Juntas de Gobierno de cada cofradía, y a unos muy pocos cofrades, sale todo adelante. Os mentiría si dijera que toda la cofradía está implicada en los cultos y actos litúrgicos. Eso debería ser lo ideal, pero tenemos que trabajar más para que cada día sean más los cofrades que participen en las tareas de las cofradías y, si se está en una parroquia, también hay que participar en las tareas y cultos de la parroquia. 7. Parece que últimamente se ha recuperado el entusiasmo por la ayuda al necesitado en determinadas hermandades ¿Está satisfecho con el compromiso de las cofradías en su labor de caridad? ¿Podrían asumir más responsabilidades? Últimamente se está volviendo a los orígenes de las cofradías; no olvidemos que el fin primordial de una cofradía era la atención a los

9. Para finalizar, un guiño a nuestros lectores, en su mayoría cofrades y devotos ¿Qué imagen, qué momento o qué característica podría destacar de nuestra cofradía?

Entrevista a D. Manuel Fernández Narros, Delegado Arzobispal de Religiosidad Popular ¿Cómo se fraguó su relación personal con la cofradía? Mi relación personal con la cofradía ha ido surgiendo poco a poco, de ir por la iglesia a los actos que tenéis y veros, acudir con mi madre a los besapiés siempre que hemos podido y así, poco a poco, es como al vernos hemos ido haciendo fraternidad. Además he de deciros que me siento muy bien acogido y querido en la cofradía. La imagen para mí es la del Cristo de las Cinco Llagas por la calle de Santo Domingo el Sábado de Pasión. La he visto ahí muchos años, desde la acera, y espero poder algún día ver desde dentro esa procesión.

También, como ya os he dicho alguna vez, mi Virgen de la Pasión, a la que conocí sien do monaguillo del Santuario, nada más entrar en la Basílica. Ella estaba allí como buena madre cuidando de cada hijo que entraba, mientras en sus brazos tenía a su Hijo muerto por nuestros pecados. Es una devoción, para mí, muy querida. Seguid viviendo el espíritu de cofradía, de hermanos que caminan unidos y, con la guía y patrocinio de San Rafael Arnaiz, que el Señor os bendiga siempre.

Gracias por vuestro cariño y amistad.

Diego Pérez Bermejo

OFICIAL DEL CABILDO DE GOBIERNO

D. MANUEL FERNÁNDEZ NARROS, PRONUNCIANDO EL “PREGÓN DE LA PASIÓN” CORRESPONDIENTE A LA SEMANA SANTA DEL AÑO 2013 Foto: Manuel Ángel Centeno Morillo

Parroquia de San Nicolás de Bari, historia y arte La parroquia de San Nicolás de Bari tuvo su emplazamiento en origen en una iglesia cerca del puente mayor, actual plaza de San Nicolás, donde ha existido un almacén de maderas. La fundación de la parroquia data del siglo XII, de cuyo primer edificio apenas se conoce nada. Fue ya en el siglo XVI cuando se construye el segundo edificio en estilo renacentista y hacia el año 1593 se inaugura. En la actualidad todavía se conservan algunos muros de la misma y más o menos la planta, en lo que es una nave de almacén. El patronazgo de esta iglesia fue ejercido por doña María Sanz, cuya inscripción aún se conserva en un hueco de la pared oeste del almacén que fue construido en el 1903. En el año 1837, la parroquia traslada su sede desde el edificio situado al lado del puente mayor a la ubicación actual, templo situado en la plaza de la Trinidad, el cual lo tuvieron que abandonar los frailes trinitarios descalzos en 1835, por una ley de desamortización por parte del estado. Con respecto a la orden trinitaria en Valladolid, su fundación fue en la cuesta de la Maruquesa, al otro lado del puente mayor, en el año 1606. Es en el 1670 cuando vienen a ocupar este lugar, donde compran unas casas. Lo hacen con una gran oposición de la parroquia de San Nicolás, pero al final lograron establecerse legalmente. Comienzan a construir el nuevo convento, del que en la actualidad se conservan varias dependencias: dos naves con las ventanas y balconcillos donde estuvieron las celdas del convento; esta edificación está adosada al muro occidental de la iglesia; también cuartos con ventanas a la plaza de la Trinidad, y encima de la nave del evangelio se conserva un salón con un asiento todo alrededor, que sería la sala capitular. En la planta baja, la sacristía, donde hubo una artística cajonería, y una sala que da acceso a la escalera barroca, que comunica también con el presbiterio de la iglesia, todo ello restaurado recientemente.

ANTIGUA SACRISTÍA DE SAN NICOLÁS Foto cedida por D. Jesús Manuel Losa Hernández

Merece la pena hacer una visita y contemplar sobre todo el conjunto de estilo barroco de la escalera del convento que desemboca en una bóveda poligonal, con ocho ochavos, dinámica, teatral y de extraordinaria calidad. La caja de la escalera consta de ocho óvalos, tres de ellos con vidrieras recuperadas por las que entra luz natural y el resto cegados. Es uno de los conjuntos más bellos y más interesantes del barroco vallisoletano. El convento ocupaba un gran terreno que daba a tres calles: Puente Mayor, Plaza Conde de Benavente, hoy de la Trinidad, y Emperador; hoy esta calle está cerrada al público. Podemos dar algunos datos: llegó a tener hasta 60 frailes en 1752, descendió hasta 34 frailes en 1806. Los trinitarios estuvieron en este convento unos 100 años, y la parroquia lleva 175 años. La iglesia se inaugura en el año 1750; tardaron unos 50 años en construirla. Nos centramos ahora en la iglesia actual de San Nicolás. Como dije al principio, la parroquia vino en el 1837. La fachada principal sigue el modelo de Juan Gómez de la Mora, primer cuarto del siglo XVII, pero con un claro verticalismo. Se remarca la portada, que presenta un realce en las jambas y

Parroquia de San Nicolás de Bari, historia y arte el dintel, y se cierra con un frontón llevando anillo en el tímpano y bolas en los extremos. Todo construido en piedra de buena calidad, el resto del edificio es de ladrillo. Hay una hornacina situada encima de la cornisa, con una escultura en piedra de San Nicolás de Bari con sus insignias de Obispo, que probablemente vendría de la antigua iglesia situada al lado del puente mayor. En origen habría alguna imagen alusiva a los trinitarios. Al entrar en el templo vemos que es un edificio de gran altura, de planta de cruz latina, con una cúpula de media naranja en el crucero. Se cubre con bóvedas con arcos fajones y lunetos, propio del estilo barroco de la época. Las capillas de la nave de la epístola no existen, debido a que se realizaron unas obras en el 1972, cegando los arcos y construyendo un edificio moderno para salones parroquiales y actual sacristía. También se demolió una capilla continuación del crucero, que estaba dedicada a San Miguel de los Santos, dicen que para alinear la calle del Puente Mayor. Con respecto a obras de arte en la parroquia, se observa que es bastante pobre, ello es debido a que la iglesia sufrió dos incendios, uno de ellos la noche del 12 de julio de 1852, en la cual trasladaron todo lo que pudieron salvar a la iglesia del monasterio de San Quirce y Santa Julita: cuentan que lo sacaron por un agujero que tuvieron que hacer en el muro del lado de la calle Puente Mayor; lo primero que salvaron fue el sagrario con la Eucaristía, que es lo más valioso de una iglesia. El otro incendio fue el 15 de enero de 1893, que fue mucho más grande, destruyó por completo muchos de los retablos, el suelo entarimado, el coro y la puerta principal. También en la década de los años 70 en el siglo XX, debido a las obras en la nave del evangelio, desaparecieron retablos y obras de arte, algunas están en el Museo de la Catedral de Valladolid, y se hizo una reorganización de las imágenes.

Voy a ir haciendo un recorrido por los retablos que vemos actualmente:

-Retablo mayor-

Se reconstruyó después del incendio de 1893, aprovechando los trozos que quedaron de los retablos que había en las capillas. En el 1909 se acopló un retablo procedente del Seminario Diocesano antiguo (estaba donde actualmente está el Hospital Clínico), que fue cedido en depósito. En el 1914 se manda poner un tabernáculo-expositor, que costó hacerlo 400 pesetas; también se hacen unas manos nuevas a San Nicolás, porque las que tenía estaban muy deterioradas, y se compra un báculo nuevo de metal. Esta escultura de vestir del siglo XVII se encuentra actualmente en la sacristía, porque se sustituyó por otra escultura realizada por Miguel Ángel Tapia en 1998, que fue un encargo de la parroquia.

Parroquia de San Nicolás de Bari, historia y arte Existe en Valladolid gran devoción por las llamadas “Caminatas a San Nicolás de los lunes”, que según la tradición consisten en ir caminando desde donde uno vive hasta la iglesia de San Nicolás, durante tres lunes, y ante la imagen del Santo rezar una pequeña oración, pidiéndole la gracia que se desee alcanzar o lo que la persona necesite. Todos los lunes del año acude una media de unas 5.000 personas a esta práctica de religiosidad popular, y se desconoce el origen porque se pierde en el tiempo de los siglos. En la hornacina del segundo cuerpo está la imagen de Nuestra Señora de Prado, de autor anónimo, del siglo XIII. Proviene del monasterio del mismo nombre, que por estar dentro de la jurisdicción parroquial (abarcaba un territorio muy amplio, porque tenía todo lo que estaba al otro lado del río Pisuerga) pasó con otras pertenencias a propiedad de la parroquia de San Nicolás: todavía se conservan dos cálices de plata sobredorada y ropa para las celebraciones litúrgicas. Esta advocación tuvo una cofradía con gran número de fieles, su fiesta era el primer domingo de Pascua y desapareció en los años 70 del pasado siglo, al igual que las otras cofradías de gloria que hubo en la parroquia. En el año 1920 se colocan 5 lienzos, en depósito del Museo Provincial de Valladolid:

-La visión de San Francisco por San Juan Evangelista.

-Anunciación del Ángel a María.

-San Mateo Evangelista.

-San Francisco de Asís.

-El Bautismo de Jesús.

NUESTRA SEÑORA DE PRADO Foto cedida por D. Jesús Manuel Losa Hernández

En el ático del retablo hay un gran relieve, alusivo a la Trinidad.

-Retablo de San Miguel de los Santos- (Antes del Ecce Homo)

De estilo barroco, del siglo XVIII, en origen ocupó la hornacina central una escultura del “Ecce Homo” de Gregorio Fernández, actualmente en el Museo de la Catedral. Hoy podemos contemplar la escultura de vestir de San Miguel de los Santos, realizada en 1780, de autor anónimo. Este santo fue un fraile trinitario que

Parroquia de San Nicolás de Bari, historia y arte murió aquí en Valladolid y sus reliquias están actualmente en un cofre dentro de la mesa de altar del presbiterio; en origen estuvieron en la capilla dedicada a él y que despareció en 1972. Hasta hace pocos años las fiestas del barrio eran en torno al 5 de julio, día en que se celebra la festividad de San Miguel de los Santos. Hubo una cofradía-hermandad que se encargaba de organizar los cultos y una gran procesión por el barrio: hay constancia de que en los años 60 del pasado siglo todavía se celebraba, con asistencia de autoridades y acompañando los niños de Primera Comunión; salían otros pasos con otras imágenes de devoción.

-Nuestra Señora de la Salud Es una buena imagen de bastidor, del siglo XVII, de autor anónimo. Existió una cofradía con esta advocación, que nació a principios del siglo XVIII, y en ocasiones aparece unida a la del Rosario. Se hace referencia a esta cofradía en los libros de cuentas de la parroquia de San Nicolás de Bari durante todo el siglo XIX. Hasta la década de los años 1960, hay constancia de que tenía mucha devoción, saliendo en procesión varias veces al año. Tuvo su capilla en la nave de la epístola, actualmente desaparecida.

-Retablo del Cristo del Amparo-

Fue colocado en el 1895, reconstruido a partir de otros retablos. Colocaron la imagen del Cristo del Amparo, escultura datada en el siglo XVII, devoción de una cofradía con el nombre de Cristo del Amparo y Ánimas Pobres, que fue fundada en 1673 en la parroquia de San Nicolás y existió hasta la década de los años 1980, en que desapareció. Tuvo una gran labor caritativa con las personas necesitadas, durante los siglos XVIII y XIX, poseía diversos edificios para realizar dicho fin.

-Retablo de la Virgen del Carmen-

De estilo barroco, del siglo XVIII, también reconstruido después del incendio. Alberga una escultura de Nuestra Señora del Carmen de principios del siglo XX y de buena factura, de gran devoción en la actualidad, porque todos los lunes sus devotos le traen muchas flores. También tuvo su cofradía hoy desaparecida.

SAN MIGUEL DE LOS SANTOS Foto cedida por D. Jesús Manuel Losa Hernández

En la pequeña hornacina superior, una Virgen de la Piedad del siglo XVIII, de pequeño tamaño y de autor anónimo.

-Retablo de San José-

De estilo neoclásico, de mediados del siglo XIX. En la hornacina central, una buena escultura representando a San José, al que le ha

Parroquia de San Nicolás de Bari, historia y arte

desaparecido el Niño Jesús, datada hacia el año 1700, del círculo de Juan de Ávila. A derecha e izquierda, esculturas modernas de escayola del Corazón de Jesús y del Corazón de María. En la parte superior, un cuadro representando a la Santísima Trinidad, del siglo XVIII.

-Retablo de la Inmaculada-

De estilo rococó, del siglo XVIII. En la hornacina central, una imagen de escayola de la Inmaculada, que perteneció a la asociación de las “Hijas de María”. En la pequeña hornacina superior, una escultura de arte popular de San Roque, del siglo XVII, perteneciente a una ermita que hubo al lado del puente mayor.

Como vemos, por este recorrido por los retablos de la iglesia, esta parroquia tuvo durante siglos una gran actividad de religiosidad popular, por la gran cantidad de cofradías y hermandades, de las que en la actualidad no existe ninguna, solamente se conservan algunos de los cultos, como son las novenas en honor de San Nicolás de Bari y de San Miguel de los Santos. ___________ * Se han empleado como fuente los libros del archivo parroquial.

Jesús Manuel Losa Hernández

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