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Bibliografía comentada

Biografías

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Taulichusco, don Gonzalo (?-1562?). Curaca y distribuidor de aguas del valle de Lima durante cinco lustros por lo menos. Donó a los franciscanos las tierras y solares de la iglesia de la Magdalena, donde fue sepultado. Gracias a dos probanzas que practicó en 1555 y 1559 se han conservado datos inapreciables para la historia de Lima prehispánica. Aunque por su jerarquía ocupaba una situación de relieve, sin embargo era y a n a (criado) de Mama Vilca, una de las concubinas del Inca Huayna Cápac. Unanue y Pavón, Hipólito (Arica, 1855-Lima, 1833). Colaborador del M ercurio Peruan o, de cuya sociedad editora fue secretario. Fundador del Anfiteatro Anatómico y del Colegio de Medicina y Cirugía de San Fernando (1811), y uno de los más activos gestores de la creación del cementerio. Escribió

O bservaciones sobre el clim a de L im a y su s influencias en los seres organ izad os, en especial el hombre (Lima, 1806), tratado en el que analiza las variaciones del clima limeño en temperatura, humedad y presión barométrica y sus efectos sobre el ser humano, los animales y las plantas, recomendando la terapeútica más apropiada para combatir las enfermedades propias de cada época del año. Despertó la conciencia de una patología regional, fundada en las observaciones de la Naturaleza.

BIBLIOGRAFÍA CO M EN TA D A

Por extraño que parezca, habida cuenta de la importancia de Lima como sede virreinal durante tres centurias y como capital de la república desde hace siglo y medio, lo cierto es que todavía carecemos de un historial, de una crónica, de unos anales, en fin, de una exposición cronológica que reseñe satisfactoriamente, con la deseable amplitud y a base de una información depurada, la trayectoria de la ciudad a lo largo de su existencia, realzando su papel fundamental como eje del acontecer nacional, cubriendo en lo posible el abanico de aspectos de la vida urbana y recogiendo amorosamente los fastos locales. Tampoco existe una bibliografía específica que, en vía de inventario razonado, configure el hilo conductor que asista al deseoso de noticias más detalladas acerca de alguna particularidad lugareña, bien entendido que no faltan las obras que, en guisa de apéndice, traen listas de libros, artículos de revista y de documentos publicados o de material inédito concerniente al texto, pero que por presentarse en función del mismo, sólo enfocan perspectivas fragmentarias. En tal virtud, téngase apenas como un directorio básico el registro de obras que a continuación se anuncia, en el que por razones de espacio únicamente se ha dado cabida a aquellas de veras primordiales, a fin de no recargarlo con referencias secundarias. Por lo demás, aprovecharemos de esta introducción para remitir a repertorios generales, como el M a n u a l de estudios p eru an istas del padre Rubén Vargas Ugarte, S. J. (Lima, 19391, 19452, 19523 y 19594); Fuentes h istóricas p eru an as, de Raúl Porras Barrenechea (Lima, 19551 y 19632), capítulo XIV, «Lima»; B ib lio grafía region al p eru an a, de Carlos Moreira y Paz Soldán (Lima, 19671 y 19762), ca

pítulo «Lima», e Introducción a la s bases docum entales p a r a la h istoria de la R epúb lic a..., de Jorge Basadre (Lima, 1971), I, pp. 121-124. En la cohorte de los que pagaron su deuda de amor a la ciudad, abre el desfile el jesuita padre Bernabé Cobo (Lopera, Jaén, 1580-Lima, 1657), con su

H isto ria de la fu n d ació n de L im a (Lima, 18821 y 19352, en M o n o grafías H istóricas,

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L im a

in fra). Hacia 1630, recogió de boca de algunos descendientes de los conquistadores y antiguos vecinos noticias de primera mano sobre el periodo inicial de la ciudad, que luego documentó en rebuscas en el archivo municipal y de otras instituciones locales con el fin de reconstruir la evolución urbana. Complemento indispensable de esta fuente es la obra del franciscano fray Buenaventura de Salinas y Córdoba (Lima, 1592-Cuernavaca, México, 1653), M em orial

de las h istorias del N u evo M un do. P irú : M éritos y excelencias de la ciu d ad de L im a ... (Lima, 16301 y 19572, Colección Clásicos Peruanos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos). Vehemente enamorado de su ciudad natal, entonces en pleno florecimiento, le consagra por entero el «Discurso (o Parte) Segundo» —dedicado precisamente a ensalzar los méritos y excelencias de la urbe—, que consume más de la mitad del volumen, sin escatimar los más encendidos elogios a su patria. Es sobremanera valiosa su información muy original sobre aspectos industriales y económicos de la ciudad, consignando datos estadísticos y del mayor interés sobre comidas y bebidas, establecimientos comerciales, oficios y detalles recopilados con criterio muy de las actuales corrientes historio- gráficas. Para el mismo periodo, las actas capitulares publicadas suministran igualmente noticias peregrinas. Cubren desde las diligencias previas al traslado de la población establecida en Jauja, pasando por la fundación, hasta 1639 (Concejo

Provincial de Lima, L ib ro s de C ab ildos de L im a , 1935-1964, 23 volúmenes). Aunque en razón de su carácter oficial sólo reflejan un aspecto de la vida de la colectividad, con todo a través de esa panorámica pueden seguirse los pasos del desarrollo de la población, sus problemas de abastecimiento y la actividad edilicia. Lamentablemente las notas que debían haber ilustrado el escueto texto de las actas quedaron inéditas. Los responsables de la transcripción fueron, hasta el volumen noveno, el norteamericano Bertram T. Lee y, a partir del décimo, Juan Bromley Seminario. Hay un índice, no muy cómodo para su manejo por la distribución interna, que abarca el periodo 1534-1601, por Sophy E.

Schofield (Lima, 1946). Para el arco temporal que corre desde 1629 hasta 1694 contamos con dos dietarios, realmente invalorables en su género, en los que sus respectivos autores, con la prolijidad del suceso cotidiano, dan cuenta circunstanciada de los acontecimientos urbanos. El decenio 1629-1639 fue objeto de la minuciosa re

seña del clérigo Juan Antonio Suardo (,D iario de L im a ... p ub licado con introducción y notas p o r Rubén V argas U garte, Lima, 1936, dos volúmenes, con 302 y 201 páginas, respectivamente). Suardo escribió por encargo del virrey conde de Chinchón, de suerte que su información, con sesgo oficial, es absolutamente fidedigna, pero a ello añade la crónica de fiestas locales, de incidentes personales y aun de los hechos más triviales que llegaban a ser tema de conversación o de la curiosidad popular.

Bibliografía comentada

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Desde 1640 hasta su muerte en 1686 (prosiguiendo las anotaciones un hijo suyo, hasta 1694), el capitán José de Mugaburu y Honton fue consignando en un cuaderno de carácter doméstico cuantas novedades de relieve ocurrían en la ciudad y llegaban a sus oídos. Con ingenuidad y frescura, la vida ordinaria de la colectividad pasó a las páginas de esta miscelánea, en las que el lector hallará

deliciosas estampas de aquellos tiempos (Colección de L ib ro s y D ocum entos referentes a la H isto ria del Perú, Lima, MCMXVII y MCMXVIII, volúmenes VII y VIII). Para completar la información directa de la Lima del siglo xvn es imprescindible recurrir a L a estrella de L im a convertida en so l (Amberes, 1688), del capitán Francisco de Echave y Assu, que trazó la más cabal imagen del esplendor de la capital del Virreinato antes del desolador terremoto de 1687, pues a vueltas de referir los regocijos con que Lima celebró la noticia de la beatificación del arzobispo Toribio Alfonso de Mogrovejo, se esmeró en dejarnos una «Descripción sacro-política de las grandezas de Lima». Información de primera mano acerca del siglo xviii se encuentra en el

poema L im a F u n d ad a, o conquista del P erú ... [Lima, 17321, y Odriozola, D ocum entos L iterario s del Perú (Lima, 1863), I]. El poema, por su falta de invención y deficiente versificación, resulta más bien una crónica rimada, pero las notas marginales aclaratorias del conceptismo de las octavas revisten subido valor noticioso. El libro de María Pilar Pérez Cantó L im a en el siglo x v iii. E stu d io socioeconóm ico (Ediciones de la Universidad Autónoma de Madrid-Instituto de C ooperación Iberoamericana, Madrid, 1985) aporta una copiosa bibliografía, que a su vez sustenta un novedoso planteamiento de la dinámica abordada en las páginas de tal monografía. En este concierto de madrigales no podía faltar el tono disonante del más enconado de los detractores de Lima: Esteban de Terralla y Landa, que bajo el seudónimo de Simón Ayanque dio a luz su obra en verso L im a p o r dentro y

fuera. E n consejos económ icos, saludables, p olíticos y m orales... Com o por su «grosería, insulsez, y total falta de arte, de pensamiento y de gusto...» (como fue calificada en la sesión del Cabildo del 1 de marzo de 1799) no se atrevió a entregarla a las prensas en la ciudad objeto de sus invenciones, apareció en letra de molde en Madrid (1798). El Consejo de Castilla ordenó recoger tan ruin explosión de un despechado, que plasmó la imagen negativa de la ciudad. N o obstante ese tono agresivo, tuvo los honores de reediciones en Lima (1829, 1834 y 1842), en Madrid (1836), con láminas dibujadas por el pintor peruano Ignacio Merino (París, 1854) y con preámbulo de L. A. Sánchez (París, 1924). Obra no suficientemente apreciada, pero merecedora de mayor atención, es L im a religiosa. 1 5 3 5 -1 8 2 4 (Lima, 1924), de Ismael Portal (1863-1934), profusamente ilustrada. Es una erudita reseña de la vida religiosa de la ciudad, basada en información veraz y en evocaciones personales sobre iglesias, conven-

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tos, monasterios, prelados y órdenes religiosas. Complemento inseparable de esa monografía es la de Jorge Bernales Ballesteros, L im a : la ciu d ad y su s m onum entos (Sevilla, 1972), en la cual la documentada información cernida con rigor técnico se interpreta con sensibilidad artística. La ebullición ideológica y las actividades subversivas desarrolladas para socavar el régimen virreinal en Perú durante los dos primeros decenios del siglo xix hallaron su más acucioso narrador en la prosa colorida del chileno Benjamín Vicuña Mackenna, que tuvo el interés de recoger de boca de los últimos sobrevivientes de aquellos turbulentos años recuerdos y remembranzas vertidos

en el opúsculo L a revolución de la independencia del Perú. 1 8 0 9 -1 8 1 9 (Lima, 18601 y 19242). Para el lapso inicial del periodo republicano es irreemplazable la E s

tad ística histórica, geográfica, in d u strial y com ercial... de L im a (Lima, 18391, 18442, y Odriozola3, Colección de D ocum entos L iterario s del Perú, Lima, 1877, XI, pp. 7- 257), de José M.a Córdoba y Urrutia (1806-1850). Según ya lo adelanta el detallado título, se ofrecen los antecedentes históricos y con plenitud de información un panorama geográfico y de la vida mercantil capitalina. La imagen más ajustada de la vida limeña entre 1841 y 1845, con observaciones llenas de agudeza y simpatía y con cuadros fieles de los usos y costumbres de aquellos años, se recoge en las páginas de la obra del marino francés Maximilien Radiguet (1816-1890), Souven irs de VAm érique espagnole... (París, 1856), traducida al español con el título de L im a y la sociedad p eru an a (Lima, 1971, ediciones de la Biblioteca Nacional del Perú). Fue este viajero el que acuñó la leyenda de la capital de Perú como «la perla del Pacífico» y el elogio de las limeñas como «las parisienses de la América del Sur». Pocos escritores como éste captaron tan finamente el alma de la ciudad. Las obras de Manuel Atanasio Fuentes (1820-1889) son, sin lugar a dudas, el venero más sustancioso para atisbar la Lima de mediados del siglo pasado.

Autor de una extensa bibliografía sobre muy variadas materias, interesa mencionar aquí únicamente aquellos trabajos concernientes a nuestro objetivo, y como el título de los mismos es suficientemente explícito, ello releva de desgranar su contenido. Nos referimos a la E stad ística gen eral de L im a (Lima, 18581, y París2, 1866), con planos y láminas litográficas de gran belleza y exactitud;

G u ía del viajero de L im a (Lima, 1860), en la que ofreció «ligeros apuntes históricos sobre monumentos, edificios y establecimientos [...], con ideas aunque

lijeras, de nuestras costumbres»; G u ía histórico-descriptiva, ad m in istrativ a, ju d ic ia l y de dom icilios de L im a (Lima, 18611 y 18632; versiones al inglés, Londres, 1866, y al francés, París, 1866), en la que al lado de informaciones de interés local se

leen cuadros de costumbres típicas; G u ía de dom icilios de L im a p a r a el añ o 1 8 6 4 (Lima, 1863), y su álbum más divulgado, L im a. A pu ntes históricos, estadísticos,

ad m in istrativo s, com erciales y de costum bres (París1, 1867, y Lima2, 1985), la más lujosa de sus publicaciones, ilustrada con retratos de personajes, damas distinguidas, tipos populares, vistas de monumentos y perspectivas urbanas.

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