Question 85

Page 1

/Mayo de 2011

85

INMORALIDAD DE LA RIQUEZA MAL HABIDA

AÑO 8- NÚMERO 85- MAYO DE 2011/ PUBLICACIÓN MENSUAL EDITADA POR ALIA2 Y COMUNICAN

ENTRE LA RAZÓN DE ESTADO Y LOS PRINCIPIOS

¿PUNTO DE INFLEXIÓN?

El caso Pérez Becerra y la criminalización de la comunicación popular Sociología de la dereecha/ Che, por la revolución mundial/ El debate ideológico sobre el orden económico/ Mentiras graves sobre los bancos centrales/ La buena y la mala izquierda en AL/ El control de Centroamérica/ Migración centraomericana y México/ Persistencia histórica del patriarcado/ Energía nuclear en debate/ Las venas abiertas de Colombia


/Mayo de 2011

¿UN PUNTO DE

Entre la razón de Estado y los principios: El caso Pérez Becerra y

T

odos sabemos que Joaquín Pérez Becerra, director de la agencia de prensa alternativa Anncol, es un sobreviviente del fatídico Baile Rojo con el cual la oligarquía colombiana asesinó a la casi totalidad de los alcaldes y políticos comunistas de la Unión Patriótica Colombiana. Fue concejal por la UP, sabiendo el riesgo que eso conllevaba. Le mataron a la esposa y a 5.000 compañeros. Estos montajes no son nuevos en la guerra sucia en Colombia. Allí, el DAS, organismo de “inteligencia”, chantaje, tortura y persecusión, ha sido denunciado naciomal e internacionalmente por llevar adelante miles de acusaciones infundadas, en un país donde los jueces y abogados viven la crónica de una muerte anunciada, como lo reflejara Gabriel García Márquez. Nunca más En América Latina los luchadores por la violación de derechos humanos

85

MAYO DE 2011

QUESTIONDIGITAL.COM

DIRECTOR FUNDADOR:

ARAM AHARONIAN DIRECTOR GERENTE:

RICARDO FONT CARVALLO DIRECCIÓN EDITORIAL:

FILINTO DURÁN, RICARDO FONT, ARAM AHARONIAN ASESOR EDITORIAL:

ROBERTO HERNÁNDEZ MONTOYA QUESTION DIGITAL:

MARCOS SALGADO (COORDINADOR) MARCA REGISTRADA: ALIA2, CA DEPÓSITO LEGAL: PP 200201CS526 ISSN: 1690-0952 QUESTION ES UNA PUBLICACIÓN DE LA AGENCIA LATINOAMERICANA DE INFORMACIÓN Y ANÁLISIS-2 (ALIADOS) Y LA ASOCIACIÓN LATINOAMERICANA PARA LA COMUNICACIÓN SOCIAL (COMUNICAN)/

impulsaron la consigna “nunca mas” a estos hechos contra los derechos jumanos y masacres de lesa humanidad. Aunque algunos se sientan molestos, defender la vida y lo derechos del periodista Joaquín Pérez Becerra, es defender el derecho a la justicia, a las normas procesales internacionales que no pueden ser acuerdos particulares de gobiernos. Es defender la vida y la seguridad de cientos de luchadores sociales y revolucionarios que debieron salir de sus países, perseguidos por dictaduras y gobiernos represivos, para buscar cobijo en otros. Muchos son los latinoamericanos que encontraron en Venezuela un lugar para proseguir sus luchas y sumarse en la contsrucción de un nuevo modelo de justicia social, inclusión y equidad. Pareciera que hoy nadie les garantiza su seguridad. Es cierto: no debemos caer en la trampa de la derecha colombiana, sus objetivos nada tienen que ver con el humanismo, el socialismo o cualquier modelo de justicia social, solo reflejan el poder y los intereses de la oligarquía, sus aparatos y su socio principal, el gobierno de EEUU. Pero tampoco podemos callar, bajo el argumento de que ello debilita al gobierno bolivariano. Ernesto Villegas, director del

diario Ciudad Ccs, señala que en el avión que trajo al director de Anncol desde Frankfurt venían, sembrados como pasajeros, agentes de la policía colombiana bajo el paraguas de Interpol, quienes tenían bajo la mira a su objetivo. Santos llamó al presidente Hugo Chávez cuando apenas faltaban dos horas para el aterrizaje. Le dio incluso el número de asiento que ocupaba un “pajarito” a punto de recalar en Maiquetía. Sin dudas, pudo haberle avisado con mayor antelación, pero no quiso darle tiempo para pensar ni reaccionar. Lo quería con la papa caliente entre las manos. Una vez practicada la detención en Maiquetía, el ministro de la Defensa de Colombia telefoneó al ministro del Interior venezolano, Tareck El Aissami, para decirle “lo tienen”. En Caracas no se sabía quién era el pasajero ni a qué venía. El comunicado del Gobierno venezolano no menciona a Pérez Becerra por su nombre y sólo alude a los delitos que Colombia le atribuye. Fue José Obdulio Gaviria, primo del capo Pablo Escobar y asesor de Álvaro Uribe, quien dio luces por twitter acerca de la identidad del detenido y de su función en Anncol. La Interpol no detuvo a Pérez Becerra en Suecia por su nacionalidad


INFLEXIÓN?

la criminalización de la comunicación popular

sueca. Pudo hacerlo en Frankfurt, Alemania, pero la jugada era para involucrar a Chávez, señala Villegas, quien afirma que la solicitud de captura a Interpol supuestamente se hizo desde el 20 de abril. Pero una búsqueda particular en la página de Interpol en internet, realizada a principios de semana, resultó infructuosa. Interpol, no hay que olvidarlo, fue el órgano utilizado para una “certificación” del computador de Raúl Reyes, sombrero de mago del cual salen las “pruebas” contra Pérez Becerra y quién sabe cuánta gente más. Es la misma Interpol que sacó de su lista de “buscados” a los banqueros prófugos venezolanos. La operación pretendía, y lo logró, colocar a Chávez en la disyuntiva de entregar o no al “pajarito”. Según un dirigente del PSUV citado por Villegas, “Caímos en una trampa y no podíamos echar para atrás. Una trampa que ayudan a montar las FARC y sus amigos, quienes están infiltrados hasta los tuétanos, con sus imprudencias. Ellos no se eligen. Nosotros sí. Ellos no tienen legalidad que respetar. Nosotros sí, somos gobierno”. Ética, principios Franklin Ledesma, periodista y

escritor panameño, señala que entregar al gobierno de Colombia a este periodista, no sólo va contra la ética revolucionaria, no sólo rompe las normas mínimas del ideal bolivariano y el internacionalismo socialista, sino que además constituye un gravísimo error político y estratégico. El compañero Hugo Chávez y el proceso que él encabeza quedan enormemente debilitados. El enemigo sabe que ahora puede ir por más. Si se dobló la mano, ahora pueden quebrar el codo Las palabras de Chávez no aclararon mucho: “Nosotros llamamos incluso al avión y, en efecto, supimos hasta el asiento donde venía el señor. Se bajó en Maiquetía y lo capturamos. Así como entregamos a Chávez Abarca a Cuba, entregamos a este señor a Colombia. La responsabilidad es de este señor. ¿A qué venía sabiendo que lo estaban solicitando? ¿Quién lo invitó para acá? ¿Quién lo montó en una trampa? Lo estaban cazando. Todo el mundo sabía que venía, hasta la CIA. Son movimientos infiltrados”, aseveró. Para el “deportado”, el objetivo de “esta vaina es criminalizar los medios alternativos, cerrar una voz que está en contra del gobierno colombiano y obligar a la gente a que no hablen mal de un gobierno terrorista. Esa es la finalidad” Precisamente, la Asociación

/Mayo de 2011

ARAM AHARONIAN

Nacional de Medios Comunitarios Libres y Alternativos de Venezuela, dice que con la deportación “generan una fisura en la confianza de los millones que construimos desde abajo, colectivo a colectivo, consejo comunal a consejo comunal, movimiento a movimiento, el socialismo y la patria bonita”. Otra cosa es el actitud del “representante político” que Pérez Becerra cree fue el ministro de Comunicación, Andrés Izarra. Ningún representante de la migración o del gobierno venezolano preguntó por la ciudadanía de Joaquín Pérez. Parece que ni siquiera estaban interesados de saberlo, dice el propio Pérez en la entrevista desde la cárcel, pese a que tenía el pasaporte y la cédula suecos en mano. Izarra –quien luego censuraba la información solidaria para con Joaquín en los medios públicos- ya tenía su versión escrita y la publicó en su “twitter” solo una hora después de la detención en el aeropuerto de Maiquetía, diciendo que Pérez era de nacionalidad colombiana. Joaco, el “sueco” Lo cierto es que “el sueco” Pérez Becerra había visitado Venezuela en varias ocasiones. Carlos Casanueva, Secretario General del Movimiento Continental Bolivariano, explicó que Pérez Becerra había visitado el país en diciembre de 2009, en el marco de la fundación del MCB, evento que contó con más de 1.300 delegados internacionales. Y luego en diciembre de 2010 cuando se constituyó la Asociación Bolivariana de Comunicadores (ABC). Para quienes han tratado de explicar que Chávez no tenía otra alternativa, la trampa estaba montada, aunque no queda muy claro por quién y qué cómplices tenía en Venezuela. Para ellos, desde ahora, la izquierda debe saber que Joaquín será un mártir necesario para la supervivencia del proceso bolivariano.


/Mayo de 2011

Como dijo Martín Guédez, ser un mártir, para salvar nuestra revolución es un privilegio y un honor para todo luchador revolucionario. Dice Iván Maiza, en una nota publicada en el portal de Telesur, que el movimiento de izquierda posiblemente infiltrado por “algunos camaradas” o algunos “partidos revolucionarios” han aventurado planes para sabotear las estrategias planteadas por el Comandante. ¿Incluso montando trampas a compañeros de lucha?, camaradas que no aceptan que el Comandante haya tomado la decisión de acercarse a Santos y están dispuestos a hacer cualquier cosa que “quiebre la confianza” entre Chávez y su pueblo, entre Chávez y los pueblos del continente”. Razón de Estado El historiador y antropólogo marxista Mario Sanoja destaca la estrategia conjunta de los gobiernos neocoloniales de México, Colombia, Perú y Chile para crear un área de integración comercial del Pacifico, fundamentada en la política neoliberal promovida por EEUU para imponer el libre mercado y los TLC y derrotar la política integracionista promovída por Venezuela, Brasil y Argentina. Osea, crear un bloque económico antagónico a Mercosur y a la ALBA para favorecer la recuperación de la economía de EEUU. “Para darle una posibilidad de éxito real a dicha iniciativa del TLC del Área del Pacifico, a la cual se unirán seguramente Panamá, Salvador, Honduras y Guatemala, era necesario sabotear la reunión (de cancilleres) de Caracas donde se firmaría el acta de nacimiento de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, sin la presencia de Estados Unidos y Canadá, hecho que constituye una derrota política para la hegemonía imperial”, dice. Y se pregunta: ¿Qué significaba la presencia de Joaquín Pérez Becerra en Caracas para la misma fecha de la reunión? ¿Quien o quienes lo invitaron, quienes le pusieron ese peine? El análisis señala que Venezuela está negociando con el gobierno de Santos la extradición del narcotraficante Walid Makled, quien ha sido convertido en un héroe de la oposición venezolana

y una supuesta víctima de Chávez. “¿Que mejor oportunidad para el presidente Santos de torpedear o descarrilar esta negociación, esperando que el Presidente Chávez se negase a extraditarlo a Colombia y se levantase el aquelarre mundial de medios imperiales para ponerlo en la picota, acusándolo de cómplice del terrorismo?” Sanoja especula que al haber fracasado la jugada, Pérez Becerra ya no tiene quizás ninguna relevancia para el gobierno de la oligarquía colombiana. Primero que todo, se trata de un súbdito sueco, protegido por las leyes suecas y protegido también por la Comunidad Europea con la cual el Presidente Santos no tendrá interés en enfrentarse. Posiblemente una vez en Colombia, perdida ya su importancia para sabotear la reunión de Caracas y derrotar la propuesta integracionista, Pérez Becerra será puesto en libertad y entregado a las autoridades suecas para que regrese a su país adoptivo y a su residencia familiar en Estocolmo. Sanoja sostiene que el Presidente Chávez sopesó muy bien los pros y los contras de la situación, los riesgos y las ventajas que implicaba esa decisión política, y tomó serenamente la decisión correcta para Venezuela, para América Latina y para El Caribe: la creación oficial de la CELAC, que tendrá lugar en Caracas el próximo 5 de Julio. ¡De esa madera es que están hechos los verdaderos líderes revolucionarios! Makled y el narcotráfico Indira Carpio Olivo indica que “Todo hiede a Walid Makled, pero que no cunda el pánico. El ministro de Interior y de Justicia de Colombia,

Germán Vargas, anunció que sólo falta que Venezuela garantice los “derechos humanos” al narcotraficante para que se efectúe el trámite; por la salud de Pérez Becerra nadie se preocupa. ¡Chantaje! Hace más de un año tienen a Makled y todavía esperan instrucciones de Estados Unidos para -por fin- enviarlo de vuelta a Venezuela”. Hay quienes especulan -en ambas màrgenes del Arauca vibrador- sobre las eventuales inculpaciones del narcotraficante contra funcionarios y militares venezolanos en su red, pero (a falta de pruebas) no pasa de eso, de especulaciones mediáticas, Criminalización de la protesta Hindu Anderi, periodista y militante bolivariana, habla sobre la criminalización de la protesta y señala que así como no todos dentro del gobierno están de acuerdo con la entrega de Pérez Becerra, seguramente ocurre igual dentro de los movimientos que participan en las diferentes manifestaciones, con acciones como la quema de los rostros de Nicolás Maduro y Andrés Izarra, ministros de Relaciones Exteriores e Información y Comunicación, respectivamente. Todavía está fresco el recuerdo del secuestro del “canciller de las FARC”, Rodrigo Granda, frente a la clínica Razetti, en Caracas, el 13 de diciembre de 2005, con complicidad de “infiltrados” colombianos en el movimiento bolivariano. Esta vez las repercusiones internas son mayores y desde ya atenta contra la formación del tan promocionado Polo Patriótico, tarea harto difícil para el encargado de consolidarla, el presidente


/Mayo de 2011

VÍCTOR PÉREZ GALDOS /RADIO REBELDE

de la Asamblea Nacional, Fernando Soto Rojas. Quizá sea hora de ver quién en el propio gobierno trabaja para el enemigo “Pero reconocer que estamos unidos en la diversidad y que somos capaces de trascender nuestras diferencias para lograr el objetivo común, es lo realmente importante y nos reivindica como revolucionarios.(…) La trampa fue pisada, ahora no nos pisemos nosotros. Salir de ella es responsabilidad nuestra con nosotros y con quienes han sido utilizados de anzuelo”, concluye. Cuidar la Revolución Luego que la Red de Intelectuales y Artistas En Defensa de la Humanidad solicitara en carta pública al “Comandante Chávez, compañero, amigo, que no entregue a Joaquín Pérez Becerra a la tortura y la muerte” y señalaba que “Está en sus manos torcer la historia y renovar la esperanza”, los Intelectuales y artistas venezolanos de la misma se dirigieron a “los revolucionarios del mundo” para pedirles que “ayuden a cuidar la Revolución Bolivariana. “Cuiden a esta Revolución que es de todos. Pongan en tensión su ánimo para comprenderla. No la utilicen de manera poco solidaria. No la sometan a riesgos innecesarios”, pedían. Quién iba pensar que una entrega tan alejada de todo derecho iba a ser posible en el país con el mayor número de emisoras comunitarias de Latinoamérica, que ha albergado y promovido encuentros, foros, congresos y articulaciones sobre el papel de los medios de comunicación en la construcción de Nuestramérica; donde hay un proceso revolucionario que dice ser socialista; el orgulloso país del premio Rodolfo Walsh a la comunicación popular. Quizá sea lo mismo que los latinoamericanos –que están convencidos que Venezuela es tierra liberada, donde los luchadores sociales y revolucionarios no son perseguidos ni espiados, y ahora sì tienen su ánimo en tensión-, le piden a los dirigentes y funcionarios de la Revolución Bolivariana: cuídenla, no minen su credibilidad, porque de su avance depende en mucho el futuro de Nuestramérica..n

E

El Che y los errores

l Che como dirigente revolucionario estuvo consciente que en el desarrollo de la construcción de una nueva sociedad podían cometerse errores, pero que lo más importante no era ocultarlos o eludirlos sino propiciar el análisis correspondiente para evitar que dichos errores volviesen a repetirse. Y atendiendo a ello afirmó que había que trabajar por el perfeccionamiento interno como una obsesión casi, como una impulsión constante e instó cada día a analizar honestamente que se había hecho, para corregir los errores. El Che planteó que esto no debía hacerse en forma aislada o circunstancial, sino que resultaba necesario que fuese el resultado de una tarea constante en la que estuviese presente el autoanálisis, y al respecto señaló: “…por eso se debe emplear tanto la autocrítica porque es una disciplina de mejoramiento y de mejoramiento colectivo que se va estableciendo, a medida que cada uno se acostumbra a sacar a la luz todos sus defectos, todos sus errores y discutirlos para que se corrijan”. Ernesto Guevara aprovechó sus múltiples contactos con los trabajadores y dirigentes del Ministerio de Industrias para reflexionar en torno a temas tan candentes y significativos como el señalado. El 31 de enero de 1962 al hablar en un acto de entrega de premios a los trabajadores ganadores de la emulación de círculos de estudios del Ministerio de Industrias manifestó que no constituía un pecado cometer errores, que el pecado era volver a cometerlos, ocultarlos y no analizarlos. Y agregó: “Nosotros tenemos que ir sobre nuestros errores, machacar sobre ellos, analizarlos y que no se repitan”. Ya con antelación a esta intervención, el Che había hecho otras reflexiones sobre la cuestión de los errores y el análisis que a escala individual y de la sociedad en su conjunto debía hacerse para sacar las lecciones pertinentes. Por ejemplo en una Reunión Nacional de Producción, celebrada en La Habana, en agosto de 1961, él enfatizó: “Tenemos que hacer hincapié en los errores, descubrirlos y mostrarlos a la luz pública, para corregirlos lo más rápidamente posible. Y naturalmente, hay errores y hay debilidades grandes en la producción; puede ser que algunos sean justificados, pero lo importante no es justificar el error, sino impedir que el error se repita.” Añadió en esa ocasión al hacer alusión al tema de los errores que la única forma de solucionarlos es descubrirlos, hacerlos públicos y precisó al respecto: “…y entonces el error se soluciona; y la única forma revolucionaria es discutir públicamente los errores, los errores que nosotros tenemos, los errores que tienen otros organismos…” El Che señaló en esa intervención que no todo era belleza, que no todo era efectividad y que había dificultades y errores y que lo único que “nos salva es nuestra decisión, de que cada vez que se detecta un error, exista la voluntad de resolverlo, de nunca tapar los errores, de nunca estar escudándonos detrás de este o aquel error de algún que otro funcionario, sino reconocerlo y tratar de que no se produzca más, para cumplir las metas fundamentales de nuestra Revolución, que es la dignificación del hombre, que es lograr que el ciudadano tenga todas las ventajas de la cultura, de la asistencia social de todo tipo, y todos los bienes materiales necesarios para una vida feliz…”n


/Mayo de 2011

Sociología de la

En otros lugares he comentado la curiosidad venezolana de una derecha

que tiene vergüenza de su condición. En Europa la derecha se asume derecha sin ningún rollo. Entre nosotros la derecha rehuye esa identidad como si se tratara de un insulto. Este pareciera un asunto anecdótico que sólo interesa a las páginas sociales de la prensa dominical; pero tiene un trasfondo sospechoso que conviene explorar. Veamos. El primer subterfugio con el que se suele torear este asunto es con el cuento de que “derecha” e “izquierda” ya no existen. Los aludidos ponen cara de sobrados y lanzan las típicas letanías de la ignorancia ilustrada: “son términos del pasado”, “eso está superado” (este es el momento en el que usted mira discretamente el cuadro de la “Mona Lisa” y le susurra algo así: “o sea… superado como la noción de pintura… o sea”) Claro que hay unas derechas y unas izquierdas, independientemente de los criterios cambiantes y relativos con los que cada quien se maneja para hacer estas caracterizaciones. Las derechas están allí. Más visibles en el terreno político-ideológico, más brumosas en el campo estético o astronómico. El segmento más retrógrado del conservadurismo vernáculo está representado por la derecha histérica: síndrome deplorable de ignorancia enciclopédica, odio biliar, arrebatos

derecha

convulsivos y nulidad radical sobre cualquier noción de la política. Este fenómeno no es tanto una fracción del conservadurismo reinante sino una enfermedad (eso que se ha llamado por allí con el término de “disociación psicótica”) Semejante perturbación se produce sobre manera en algunos sectores medios bastante precarios en su densidad ético-intelectual, que nunca se interesaron por el espacio público y que de repente se encuentran en el torbellino de la política sin entender en absoluto de qué se trata (salvo el potente resorte psicológico del odio y el desprecio) La fracción ilustrada de la derecha que se interesa por la acción política es muy exigua en Venezuela. Los operadores visibles que hacen vida en aparatos diversos son una calamidad. Los niveles del discurso político que se propaga desde estos tendederos son una espantosa mezcla de anacronismos, cursilerías y acomodos rupestres del sentido común dominante. Cuesta mucho entresacar de estos tremedales aquellas vocerías que estén dotadas de cualidades y competencias de carácter éticas e intelectuales que inspiren algún respeto y consideración. La derecha europea, por ejemplo, ha contado desde siempre con referentes intelectuales de primer orden (no hablo desde luego de especímenes tan grises y contrahechos como Sarkozi, Berlusconi

RIGOBERTO LANZ

o Rajoy) Ello tiene una clara incidencia en el nivel del discurso político, en una cierta densidad del debate público, en la calidad del diálogo democrático entre gente diferente. ¿Por qué en Venezuela es tan elemental el discurso de la derecha? No estamos pretendiendo que al señor Enrique Mendoza se le compare con André Malraux, ni que el filósofo Manuel Rosales sea lo mismo que Raymond Aron o que María Corina Machado sea un clon de Simone de Bovoir. No nos pongamos tan exquisitos. La devaluación del discurso político tiene bastante parecido con la degradación de la figura del artista. Esa patética perversión que se ha establecido entre reinas de belleza y estrellas de la actuación es sólo posible en una subcultura de la banalidad que ha rebasado todo los límites. Va parejo con esa otra perversión del espacio público en la que el protagonismo no tiene nada que ver con virtudes éticas, capacidades intelectuales o talentos para la conducción de procesos colectivos. Tal vez la derecha reniega de su identidad porque no se reconoce en las grandes tradiciones del pensamiento liberal, es decir, porque ni siquiera está enterada de su existencia. Sabemos que ya la Ilustración pasó. Vivimos tiempos posmodernos, ¿podrían enterarse, al menos?n


/Mayo de 2011

Universidades:

ALEX FERGUSSON/RIGOBERTO LANZ

Cambiar de verdad E

stee artículo (con el mismo título) fue escrito hace ya diez años, con motivo de la “crisis de los Tomistas”. Su vigencia pone de relieve la escasa voluntad de cambio de nuestra institución y, en general, de la universidad venezolana. Diez años y seguimos en lo mismo. Veamos: 1. La crisis actual de la Universidad es parte inherente de los atascos de una institución inviable como modelo de organización. Ello ha sido diagnosticado una y otra vez, pero su capacidad de respuesta es obviamente insuficiente. Lo que se hace más patente es la incapacidad del modelo de gobierno universitario para ser una mediación efectiva entre actores de una comunidad cada vez más compleja y matizada. 2. La situación actual se caracteriza por una extrema fragilidad de los tejidos institucionales para canalizar intereses, proyectos y sensibilidades. El resultado inmediato es una alta propensión al accionalismo, a las operaciones espectaculares, a la lógica de las trincheras. En ese contexto, la tendencia a radicalizar las acciones cierra las puertas a cualquier forma de entendimiento. 3. El asunto clave de este momento es lograr un espacio de interacción gobernable, un clima de interpelación donde el conflicto y las diferencias no anulen el proceso mismo. Nada es más vital que desmontar la “lógica de guerra” que marca la acción de cada grupo. Se trata de fijar un mínimo de reglas claras para todos que abra el curso del procesamiento democrático de las tesis en disputa. 4. En ese camino hay que derrotar un doble simplismo: uno, confundir como puro “bochinche” el reclamo de una acción transformadora de amplísimos sectores de la universidad; otro, resignarse a una postura puramente defensiva que apela a la autoridad o las leyes. 5. Es preciso abrir un camino constructivo que ponga su mirada en la

calidad del proceso de transformación. En la universidad todo está en discusión, incluido el anacronismo de un modelo de gobierno que es estructuralmente incapaz de gobernar a nadie. Hay que evitar todo desgaste inútil que distraiga al movimiento transformador de lo que es central: cambiar de verdad el modelo académico y organizacional de toda la universidad. 6. Ese movimiento transformador no puede ser apropiado por ningún grupo predestinado, ni por ningún líder mesiánico. Hay gente en todos lados que aspira legítimamente a formar parte del proceso de cambio. Sería ingenuo esperar que una transformación de esta envergadura provenga de la rutina burocrática de los organismos instituidos. Pero también es verdad que hay gente en todos los niveles sinceramente ganados para cambiar las cosas. Es necesario nuclear el movimiento de ideas y de propuestas que atraviesa todo los sectores de la comunidad universitaria. De ese modo se logrará el piso de legitimidad indispensable para rehacer la legalidad de un nuevo modelo de gestión universitaria. 7.La salida inmediata para el conflicto planteado es el compromiso con una agenda de transformación de la

universidad que devuelva la confianza en las reglas de convivencia, que interprete el anhelo de cambio que está a la vista, que asegure una transición sin traumas a un nuevo tipo de universidad. Ese es un camino por naturaleza conflictivo. No se trata de “pacificar” a la comunidad creyendo que el cambio es un asunto técnico que se encomienda a los burócratas. De lo que se trata es de habilitar una verdadera dirección del proceso, es decir, poner en movimiento las ideas para el cambio y garantizar democráticamente la participación de todos. Hay muchísimas ideas e iniciativas en todos lados que evidencian una voluntad seria de cambiar la universidad. Los enfrentamientos intolerantes cierran la posibilidad de una construcción colectiva. El debate universitario está cargado de propuestas y visiones muy enriquecedoras. El reto es lograr los mecanismos que hagan viable la discusión de esas propuestas: sin oportunismo, sin la pretensión hegemónica de imponer un criterio, sin el simulacro de hacer “como si” todo marcha muy bien. Hay que destrancar el juego para que fluya el movimiento. Hay que abrir todos los cauces para que se expresen todos los actores. Eso es posible.n


/Mayo de 2011

Los instrumentos de la dominación imperialista en el escenario mundial G

racias a su diversificado sistema propagandístico, Estados Unidos ha conseguido imponerle su visión, estilo de vida e intereses particulares al resto del mundo, en un contexto internacional donde sus grandes corporaciones transnacionales contarán siempre con el despliegue inmediato de sus fuerzas armadas en cualquier zona geográfica, aún las más distantes, sin que le asista a ninguno de los países agredidos el derecho natural de defenderse, con todo lo que ello implica y representa para la continuidad y el respeto de su correspondiente soberanía nacional. Del mismo deriva la anuencia sutilmente forzada en torno a situaciones álgidas con gobiernos que -de una u otra manera- buscan una vía independiente del curso de la historia marcado por las elites dominantes de Washington desde el momento mismo que cesara la Segunda Guerra Mundial, cosa que devino en golpes de Estado, bloqueos económicos, sabotajes, invasiones, acusaciones sin base de violaciones a los derechos humanos, de totalitarismo, de comunismo, de narcotráfico y de terrorismo, asesinatos selectivos de dirigentes políticos y sociales, amenazas constantes de agresión y manipulación de los organismos multilaterales, entre éstos la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización de Estados Americanos (OEA) que tienen como soporte principal las mentiras vertidas por dicho sistema. De este modo, Estados Unidos ha justificado su injerencia imperialista en Guatemala, Cuba, República Dominicana, Vietnam, Grenada, Líbano, Panamá, Afganistán e Irak, sin olvidar lo mismo mediante el derrocamiento de los gobiernos de Chile, Haití, Venezuela y, en el tiempo reciente, de Honduras. Esta forma de doctrina fue acompañada por la constitución de la USAID bajo el gobierno de Harry S. Truman en 1946, del Banco de Importaciones y Exportaciones (Eximbank), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Fondo Monetario Internacional (FMI), el

Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento o Banco Mundial (BM), la Organización para el Fomento de Inversiones en América Latina (ADELA) y sus otros apéndices financieros, los cuales han tenido -fundamentalmenteun papel relevante en la promoción y mantenimiento de la dependencia económica de los países de Nuestra América respecto al Tío Sam. Todo ello, conformando una vasta estrategia hegemónica diseñada al cabo de la Segunda Guerra Mundial y enunciada por el ideólogo y fundador de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos, Allen W. Dulles, en el libro titulado “El arte de la inteligencia”, para contrarrestar, derrotar y, finalmente, eliminar a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), su enemigo ideológico y militar, de modo que la hegemonía estadounidense se impusiera sin rivales a nivel mundial, aplicándose luego en cada una de las zonas geográficas del planeta donde la autodeterminación de los pueblos personificaba una amenaza para la hegemonía imperialista, siendo el comunismo internacional la excusa perfecta para legitimar la intervención abierta o encubierta de Washington, como se evidenció desde entonces en Nuestra América, el sudeste asiático y África. Según Dulles, “solo unos pocos acertarán a sospechar e, incluso, a comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos,

HOMAR GARCÉS

encontrando la manera de calumniarle, desacreditarle y señalarle como desecho de la sociedad” y, dependiendo del grado potencial de amenaza que representara, matándola. Tal estrategia fue perfeccionándose con el tiempo a través de equipos multidisciplinarios, teniendo en la industria cinematográfica de Hollywood, sin duda alguna, uno de sus mejores medios de propaganda, al crear una serie de iconos -tipo Superman o Rambo- que resaltan la supremacía racial, cultural, militar e ideológica de Estados Unidos. A lo interno de Estados Unidos, esta misma industria le ha inculcado a la población estadounidense ignorancia, odio y miedo respecto a los demás pueblos del mundo, de tal suerte que los indígenas, los mexicanos, los vietnamitas, los soviéticos, los alemanes, los árabes y los latinos en general, son presentados como salvajes, carentes de alguna moralidad e incultos, a quienes es preciso dominar, sin importar el precio que se pague. Para lograr su cometido, el imperio ha conformado un frente mediático con canales de televisión, radios y prensa encargados de desinformar a los ciudadanos que acuden a ellos en búsqueda de información y de una opinión equilibrada que les permita conocer qué está aconteciendo. De ahí que éstos busquen influir en la mente de la gente a través de contenidos triviales o que resalten todo lo negativo y morboso que ocurra, como escándalos, accidentes trágicos, asesinatos y/o violaciones. Todo esto tiene que ser desmontado y deslegitimado por los movimientos revolucionarios mediante acciones concretas que les muestren a nuestros pueblos todo el entramado de desinformación y de alienación aplicado por el consorcio gobernante de Estados Unidos, de manera que exista una posibilidad real de emancipación, arraigada en el carácter nacional de cada uno, derrotando la imposición de un pensamiento único como parte de los mecanismos de dominación imperialista en el mundo.n


/Mayo de 2011

Qué (no) hacer

JAVIER BIARDEAU R.

C

onsideramos que el estancamiento, bloqueo histórico y reflujo político de la revolución bolivariana presenta causas y condiciones distintas a la unilateral atribución a un factor de “hegemonía pequeño-burguesa” en la dirección ideológica y política del proceso. Aunque hay ciertamente graves errores de derecha en el seno de la revolución, no escapan de la mira sus conexiones ocultas con las “mascaradas de izquierda” (el sectarismo y el dogmatismo). Lo paradójico de la situación es que los actores más representativos de las prácticas de derecha (de la burocracia, del capitalismo de estado, de la acumulación delictiva de capital, del estalinismo, del cogollo bolivariano) se disfrazan de retórica ultra-izquierdista. ¡Algo huele mal en Dinamarca! ¿Es posible defender pudriciones éticas en nombre del Che? ¡Aunque usted no lo crea! No es cuestión exclusiva de una “ideología incorrecta”, sino de la confluencia de determinaciones y mediaciones históricas que afectan la praxis transformadora en las condiciones particulares del siglo XXI. Usted puede recitar de memoria a Lenin, a Fidel Castro, al Che, a Mao, pero estimados el asunto es su hacer efectivo, su modo de existencia material, sus triquiñuelas cotidianas, su modo de gestionar las relaciones de poder, de asumir la transformación de una institucionalidad de cabo a rabo capitalista, de concebir su estatus y roles de “dirigente” del “partido mas democrático de nuestra historia”. Sencillamente lo que usted dice entra en cortocircuito con lo que usted hace, dispone y ejecuta cotidianamente. Esa es la impostura que cualquier mortal reconoce tras tanta verborrea de revoluciones “bonitas” y “rojo-rojitas”. Así mismo, desde el año 2007 se viene imponiendo subrepticiamente un doctrinarismo ideológico típico de una izquierda despótica que insiste en “calcar y copiar” modelos de socialismo indeseables para grandes segmentos de la población. Pareciera que una fracción económico-política dominante

nacida desde el seno de la revolución ha encontrado a los “capataces” perfectos para ejercer el “comisariato político”, el control, disciplina y vigilancia de la crítica radical, la administración desde arriba del movimiento popular y de los movimientos sociales: los cultores del estalinismo tropical, nuestros “aparatchiki”, tanto de ahora como de otrora. Capataces bien pagados pretenden darle rienda suelta a su doble condición de opresores/oprimidos, usar su látigo ideológico y las presiones más ruines para apagar cualquier barullo crítico del movimiento popular. Escúchese bien, desde el viejo socialismo burocrático no habrá revolución democrática y socialista alguna, tampoco podrán abordarse las cuestiones más novedosas de las coordenadas del tiempo histórico presente: ni la cuestión ecológica podrá abordarse desde el productivismo y el consumismo que caracterizaron al canon de la teoría revolucionaria bajo el dogma de la neutralidad de las fuerzas productivas, ni la cuestión transmoderna y la descolonización, producto de una crítica radical a la visión euro-céntrica y

colonial del “marxismo burocrático”, ni la cuestión del “género”, el movimiento de mujeres, ni las diversidades sexuales, ni los movimientos anti-institucionales ni anti-burocráticos. En todos estos terrenos, aplicar la “teoría revolucionaria heredada” conduce sin más a un catálogo de “prácticas despóticas”. La evaluación histórica y teóricocrítica de las experiencias del socialismo real, plantea la incompetencia evidente en materia de alternativas democráticas radicales que se produjeron desde el seno de las codificaciones del “marxismo soviético”: culto a la personalidad, partido-único/Estado, burocratismo y sectarismo, comisariato político, moralina coactiva y compulsiva, han sido elementos que entrabaron sobremanera los proyectos históricos de emancipación radical, no solo en el terreno de la liberación política y social, sino en el propio terreno de los espacios singulares de libertad y de la vida cotidiana. Cuando la libertad no es sólo un privilegio económico sino un privilegio político de la “nueva clase” no hay realización efectiva de un proyecto de emancipación. n


/Mayo de 2011

¿La venezolanización de Cuba y la cubanización de Venezuela?

NICMER N. EVANS

E

l informe Central al VI Congreso del Partido Comunista Cubano leído por Raúl Castro el 16 de abril reciente, ha generado una importante conmoción no sólo en Cuba sino en nuestro país por los cambios propuestos en éste, abatiendo viejos dogmas socialistas. Es importante aclarar, aunque sea una perogrullada que Cuba no es Venezuela y Venezuela no es Cuba, sin embargo, la integración desarrollada en los últimos doce años en el marco de la afinidad antiimperialista y del socialismo ha hecho que cada país vea en el otro, cosas que emular. A continuación tomaré las ideas centrales del informe y me permitiré comentar la vinculación de estas conclusiones con el desarrollo de la revolución venezolana. El informe describe muy bien los logros fundamentales del socialismo cubano como marco sobre el cual se desarrollan una serie de decisiones trascendentes para la vida de la hermana República de Cuba, así expresa: “Es objetivo del socialismo continuar garantizando el orden público y la seguridad ciudadana que distinguen a Cuba por ser uno de los países más seguros y tranquilos del mundo, sin narcotráfico ni crimen organizado, sin niños o adultos mendigos, sin trabajo infantil, sin cargas de caballería contra los trabajadores, estudiantes u otros sectores de la población, sin ejecuciones extrajudiciales, cárceles clandestinas ni torturas, a pesar de las campañas que sin prueba alguna constantemente se orquestan contra Cuba, ignorando con marcada intención que todas esas realidades son, en primer lugar, derechos humanos fundamentales, a los que ni siquiera se puede aspirar por la mayoría de los habitantes del planeta.” Sin duda, reconocer que Cuba es referencia en el mundo en cuanto al orden, seguridad, acceso a las condiciones básicas para la vida digna, salud, educación, implica además reconocer que el socialismo cubano como modelo en desarrollo ha logrado lo que ningún país capitalista ha logrado aún, logros como estos son objeto aún

de búsqueda de emulación de todo el pueblo venezolano, indiferentemente de la posición política que se tenga. Es en este marco que Cuba ha decidido generar un cambio estructural de su accionar político, económico y social en aras de la modernización de sus estructuras, que permita profundizar aún más el socialismo, en reconocimiento de que teniendo bondades, el sistema implementado ha tenido también sus graves fallas. Veamos cuales son y cuales se aplican o no a Venezuela y en que términos. En lo económico Siendo lo económico uno de los objetivos centrales del documento, es importante resaltar que el mismo fue desarrollado como consecuencia de la discusión durante cinco meses de todo el pueblo cubano y llama la atención que en su discusión, en el seno del PCC hubo 45 proposiciones que abogaban por permitir la concentración de la propiedad, que fueron rechazadas por considerar que atentan contra los principio socialistas. Un punto focal de las conclusiones fue el vinculado a la libreta de abastecimiento, subsidio del gobierno cubano que mensualmente garantizaba el acceso a la cesta básica de alimentos a todos sus habitantes, en este sentido podemos resumir los siguientes resultados: La libreta de abastecimiento aunque necesaria en un momento tenía un nocivo carácter igualitarista.

La libreta de abastecimiento contradice el principio de la distribución del socialismo “De cada cual según su capacidad, a cada cual según su trabajo”. La transformación del modelo Económico es en aras de estabilizar los niveles de producción y oferta de los productos y servicios básicos a precios no subsidiados y a la vez accesibilidad a todos los ciudadanos. El objetivo final será mantener sólo el apoyo a personas sin otro sostén. Otro aspecto resaltante es el incremento de la participación no estatal en la economía, en ese sentido el informe afirma que el incremento del sector no estatal de la economía, lejos de privatizar la propiedad social, será un factor facilitador de la eficiencia del Estado que deberá concentrarse en los medios fundamentales de producción y desprenderse de la administración de actividades no estratégicas para el país. En el caso venezolano, la concentración de propiedades sólo está limitada en las restricciones al monopolio. En cuento al acceso a la alimentación, a pesar de las afirmaciones de la oposición, el gobierno venezolano no se ha planteado nunca el racionamiento de los alimentos y por el contrario, tal como ahora se orienta Cuba, busca suministrar los mismos a aquellos que no tienen otro sostén, pero además asume democratizar el acceso a los alimentos a través de políticas que buscan garantizar la distribución equitativa y luchar contra la especulación de los precios, permitiendo su acceso a precios justos.


/Mayo de 2011

provecho productivo, combatiendo el latifundio, estimulando permanentemente a la micro, pequeña y mediana empresa con acceso regular a créditos a tasas preferenciales. Sobre el pueblo y lo comunicativo

En cuanto a la participación no estatal en la economía, el 70% del PIB en Venezuela proviene del sector privado, y aunque se ha buscado un reacomodo en cuanto a una mayor participación del Estado y del Poder Popular en el control de medios de producción estratégicos se ha confundido lo estratégico con lo reivindicativo, satisfaciendo la demanda de reclamos laborales o deformaciones en el proceso productivo que se han solucionado expropiando en lugar de transferir directamente o de manera paulatina pero planificada al control obrero. Sin duda existe en Venezuela un apoyo a la micro, pequeña y mediana empresa, pero poco planificada, basándose aún en la abundancia de recursos que genera la renta petrolera. Sobre la centralización y la descentralización económica Cuba es un país económicamente centralizado, sin embargo en la actualidad se plantea, producto de las conclusiones del VI Congreso ir “del exceso de centralismo a una descentralización planificada tomando en cuenta las tendencias actuales del mercado, permitiendo la permanente actualización del plan.” Para los cubanos la descentralización tendrá como objetivo profundizar la responsabilidad de los cuadros administrativos y gerenciales pretendiendo “desatar los nudos que atenazan el desarrollo de las fuerzas productivas”. Venezuela por el contrario, es un país descentralizado en cuanto a las prácticas económicas del Estado y en las responsabilidades administrativas y gerenciales, en búsqueda de un proceso de transferencia de competencias al Poder Comunal, tratando así de superar los vicios de la descentralización política

mal habida, que ha generado serias distorsiones en la administración de los recursos nacionales, procurando a través de Las Comunas generar Unidades Socioproductivas alineadas a las necesidades y prioridades establecidas en el Primer Plan Socialista 20072013 y supervisadas a través de la fiscalización estatal y la Contraloría Social, encontrándose en la actualidad en un nivel de ensayo y error. Sobre las relaciones contractuales En Cuba, el predominio del Estado Central y las directrices del Partido no permitía “el uso adecuado del contrato” como figura para el establecimiento de acuerdos, sin embargo en la actualidad, producto de las conclusiones del VI Congreso se busca superar el “reunionismo” y la burocratización de los procesos, dando paso al derecho al reclamo contractual. Esto tiene como objetivo permitir que las relaciones económicas sean más activas a través de la compraventa de viviendas, automóviles, adjudicación de tierras y otorgamiento de créditos a trabajadores por cuenta propia. En Venezuela, ha sido política del gobierno de Hugo Chávez Frías mantener y desarrollar las condiciones legales que permiten el establecimiento de contratos donde las partes son las únicas responsables de sus acuerdos y el Estado sólo interviene en el caso de una demanda por incumplimiento, enmienda o afectación social. Las relaciones económicas venezolanas se basan en el intercambio por la vía compraventa de todas las propiedades y el gobierno bolivariano lucha permanentemente por la justa adjudicación de tierras para su

De manera autocrítica, entre las conclusiones del VI Congreso se afirma que debe haber mayor interrelación con la masa, para dar respuesta eficaz a sus preocupaciones e insatisfacciones, determinando así los cambios necesarios. Por otra parte, el PCC afirma que debe hacerse frente al triunfalismo, la estridencia y el formalismo sobre la actualidad nacional, permitiendo un mayor acceso a la información y generando documentos y programas de radio y TV menos aburridos y con mayor veracidad. En Venezuela, a pesar de las 3R anunciadas por el Presidente y ratificadas con las 3R², el burocratismo no ha permitido profundizar aún más la interacción con la masa y se ve permanentemente afectada por la ineficacia en las respuestas a sus preocupaciones, sin embargo se reconoce el error y existe la intención de corregirlo, aunque aún pareciera no avanzar la solución. En cuanto al triunfalismo en Venezuela en el activismo político, éste ha sido un problema permanente que se refleja en sus medios informativos y vocerías oficiales, estableciéndose metas políticas y electorales inviables que han afectado la moral de los militantes y la eficacia del PSUV (recordemos los 10 millones por el buche, los 2/3 de la Asamblea Nacional), sin embargo en los últimos meses se ha observado un leve cambio en las líneas informativas, permitiendo más la crítica en sus espacios. Sobre el Partido Según las conclusiones del informe leído por Raúl Castro el PCC debe liberarse de actividades no propias de él, eso significa librarse de funciones administrativas, para profundizar la diferencia entre el Partido y el Estado. Además afirma Raúl en un ejercicio de diagnóstico autocrítico que:


/Mayo de 2011

La falta de formación rigurosa de los cuadros generó desaciertos producto del clientelismo partidista. La militancia no debe significar una condición vinculante al desempeño de puestos de Gobierno o del Estado, sino la preparación y la disposición de reconocer la política del Partido como suyo. El mérito debe ser el origen de la dirigencia, no el amiguismo favorecedor. La selección de jóvenes a cargos principales no siempre fue acertada, la reserva de sustitutos debe ser por ser preparados, con base en la experiencia la madurez paulatina. En Venezuela, en el marco del proceso revolucionario el PSUV recientemente hizo un esfuerzo por separar los cargos del partido de la función pública en su Dirección Nacional, pero en las regiones aún persiste este problema por lo que muchas veces los roles del partido y el Estado siguen confundiéndose, como pasó en lo primeros años del proceso. Por otra parte en nuestro país: La falta de formación rigurosa de los cuadros, a pesar de esfuerzos como la escuela de cuadros del PSUV o experiencias como la Fundación Escuela Venezolana de Planificación a nivel del Estado cuando Haiman El Troudi fue ministro, ha generado desaciertos producto del clientelismo partidista. La militancia, la aparente incondicionalidad o la lealtad sin crítica aún significa una condición vinculante al desempeño de puestos de Gobierno o del Estado, pesando muy poco de manera frecuenta la preparación para el mismo. El amiguismo es generalmente la condición para la “dirigencia” teniéndose en la cultura política venezolana muy poco en cuenta el mérito para tal fin. La selección de los jóvenes a cargos en función pública generalmente es desacertada ya que no hay una preocupación por la formación, desarrollo de experiencia y generación de madurez para tales funciones. Sobre el Estado y el Gobierno En las conclusiones del informe analizado se afirma que la revolución cubana, más consolidada hoy a pesar de las constantes amenazas y agresiones, permite concluir que es recomendable

y formalismos en el trabajo político ideológico, se utilizan muchas veces métodos y términos anticuados en la formación, heredados de cuadros de otras organizaciones políticas antecesoras al PSUV y se abusa permanentemente de convocatorias a actividades conmemorativas formales con discursos caducos, además de organizar trabajos voluntarios inocuos en los días de descanso, generando disgusto y apatía en la población. Ideas centrales

limitar a un máximo de dos períodos consecutivos de cinco años el desempeño de los cargos políticos estatales fundamentales. Por otra parte afirma que los viejos hábitos como la superficialidad y el formalismo del trabajo político ideológico, la utilización de métodos y términos anticuados en la formación, las reuniones excesivamente extensas dentro de las jornadas de trabajo con agendas inflexibles, las frecuentes convocatorias a actividades conmemorativas formales con discursos formales y el trabajo voluntario en los días de descanso sin contenido real genera gastos, disgustos y apatías innecesarias. En Venezuela actualmente, los ataques permanentes de intereses trasnacionales y las amenazas y agresiones internas de manera constantes por destruir el proceso revolucionario y socialista ha planteado como necesidad la permanencia del líder del proceso el tiempo que sea determinado por el pueblo soberano ante los procesos electorales que se desarrollan regularmente en el país, con la posibilidad de ser reelegido sin restricción como consecuencia de una enmienda constitucional ganada en referéndum popular, sin embargo existe descontento ante los cuadros medios y sus pretensiones de reelección o de designación en cargos de alto nivel en enroques que poco evalúan su eficiencia en cargos anteriores, basándose sólo en la lealtad incondicional al líder. Por otra parte, existen viejos hábitos en el desarrollo de superficialidades

Por otra parte, podemos encontrar tres ideas centrales en el informe del VI Congreso del Partido Comunista Cubano que creo importante resaltar: “Cada cierto tiempo, en la medida que se modifique el escenario, el país debe confeccionarse un traje a su medida”. Lo único que puede hacer fracasar la revolución cubana y el socialismo es la incapacidad para superar los errores cometidos y para ello hay que reconocerlos concientemente. La premisa es “Cambiar todo lo que debe ser cambiado”. Y estoy seguro que estarán de acuerdo conmigo que son totalmente aplicables en nuestro país. ¿Cubanización, venezolanización o ninguna? Cuba vive profundos cambios, influenciada entre otras cosas por la cercanía e integración con el pueblo venezolano, y Venezuela ha intentado emular cosas positivas del socialismo cubano, sin pretender copiar ningún modelo. Nos parecemos pero somos profundamente distintos a la vez, aunque creo que puede existir un punto medio de coincidencia de las cosas buenas entre los dos caminos que actualmente recorren estas naciones hermanas. Ojalá los resultados de la discusión de las Cinco Líneas Estratégicas que desarrolla en la actualidad el PSUV no sólo sirva para hacer un buen diagnóstico, sino proponer y ejecutar verdaderos acuerdos consensuados y no macollados, como lo hizo el PCC, que logren superar los dilemas que toda revolución inédita debe vivir para lograr su objetivo final, la transformación de la cultura política, económica y social hacia un mejor vivir. n


/Mayo de 2011

RAFAEL CUEVAS MOLINA*

La “buena” y la “mala” en América Latina

izquierda

I

ndependientemente del nivel de radicalidad que tengan los cambios que se están llevando a cabo en cada uno de los países latinoamericanos, existen percepciones comunes que los han llevado a adelantar iniciativas históricas, que deben asociarse con la desiderata de encontrar caminos inéditos para construir sociedades más justas. Ollanta Humala está a un paso de ganar las elecciones en Perú. Algo similar le sucedió hace cinco años cuando, enfrentado en una segunda ronda con el candidato del APRA, Allan García, mordió el polvo de la derrota porque, según analistas con criterio, no supo deslindarse de la sombra que proyectaba sobre él el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Esta vez, precavido, desde el principio de su campaña bajó el tono de su discurso, cambió de ropas e hizo que sus propuestas programáticas se parecieran a las que impulsó Lula. A Chávez le mandó un recado público haciéndole saber que se mantuviera alejado y, para rematar, se hizo rodear de asesores del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil. Retrocediendo un poco en el tiempo, recordemos lo que sucedió en El Salvador. Centroamérica empezaba a mirar con buenos ojos al ALBA: Nicaragua formaba parte de él; Honduras se deslizaba rápidamente hacían ese espacio del espectro político con “Mel” Zelaya a la cabeza del gobierno; Costa Rica y Guatemala solicitaban el ingreso a Petrocaribe y en El Salvador los municipios en los que gobernaba el FMLN había proyectos energéticos con Venezuela y ese mismo partido amenazaba con ganar las elecciones. Hubo que arremangarse y poner manos a la obra: el golpe de estado en Honduras revirtió la tendencia y atemperó los posible ánimos revolucionarios en El Salvador. *PRESIDENTE AUNA-COSTA RICA. FILÓSOFO, ESCRITOR, INVESTIGADOR GUATEMALTECO-COSTARRICENSE.DIRECTOR DE LA MAESTRÍA DE ESTUDIOS LATINOAMERICANOS EN LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE COSTA RICA.

El candidato que salió electo, Mauricio Funes, propuesto por el FMLN, también se hizo rodear de asesores “lulistas”, es decir, moderados, aceptables a los ojos de aquellos que temen cambios más asociados a lo que la izquierda tradicional buscaba. Analistas norteamericanos dicen que, en América Latina, tenemos hoy dos tendencias en el marco de los gobiernos que buscan deslindarse de las políticas neoliberales que prevalecieron durante más de 15 años: la de la izquierda “correcta” o buena (the right left) y la de la izquierda “equivocada” o mala (the wrong left). Cualquiera mínimamente enterado de lo que sucede en nuestro continente, no necesitará muchos datos para deducir que, los que caen bajo la incidencia de los malos equivocados son Chávez, Evo, Correa y Ortega, mientras que los aceptables, correctos y buenos son los procesos que se desarrollan en Chile, Argentina, Uruguay y Brasil. La certificación fáctica de esta percepción del hermano mayor norteamericano nos lo dio el reciente periplo de Barak Obama por América Latina: Chile, Brasil y El Salvador fueron los países visitados. En Centroamérica, Costa Rica se sintió ofendida por no haber sido la elegida para ser hollada por los pies del presidente norteamericano. Pero, siendo como es, sempiterna

aliada de los Estados Unidos, convenía más hacerse presente en donde la mesura era vista como un logro no necesariamente “natural”, como sí lo es en Costa Rica. Viniendo de donde viene, los Estados Unidos de América, tal visión debe ser tomada con pinzas, es decir, con cuidado. Independientemente del nivel de radicalidad que tengan los cambios que se están llevando a cabo en cada uno de los países latinoamericanos mencionados, existen percepciones comunes que los han llevado a adelantar iniciativas históricas, que deben asociarse con la desiderata de encontrar caminos inéditos para construir sociedades más justas. Se ha podido avanzar, además, en la conformación de organismos que buscan respaldar el trabajo unido, partiendo de análisis que no tienen el entorpecimiento de la distorsionante presencia norteamericana. Ante esta situación, la derecha continental, con los Estados Unidos de América vanguardizándola, busca encontrar los resquicios que le permitan romper y revertir esa tendencia latinoamericanista, con el fin de hacer prevalecer nuevamente las posiciones panamericanistas que tan de capa caída se encuentran. Véase, si no, la situación de la OEA. La división entre izquierdas buenas e izquierdas malas es uno de sus argumentos más llevados y traídos. No hay que dejarse engatusar.n


/Mayo de 2011

Honduras, Panamá y el control de

Centroamérica

ANDRÉS MORA RAMÍREZ

N

o es casual que dos regímenes abiertamente neoliberales y antipopulares, como los de Honduras y Panamá, sean utilizados por Estados Unidos como eje de sus operaciones militares y antidrogas. En medio de un clima de opinión pública marcado por el temor a la violencia social (consecuencia de la violencia material y simbólica del sistema económico) y saturado por el discurso de la guerra contra el narcotráfico, que casi todos los gobiernos de la región asumen como programa político, dos anuncios recientes han confirmado la vital importancia que mantienen Honduras y Panamá en el posicionamiento y proyección de los llamados intereses norteamericanos en Centroamérica y el Caribe. En Honduras, durante una visita del jefe del Comando Sur de los Estados Unidos, se informó de la inminente instalación de una tercera base militar norteamericana en las Islas de la Bahía (Caribe hondureño), que se sumaría a la histórica base de Palmerola y a la de Taracasta, en la frontera con Nicaragua (Departamento de Gracias a Dios), establecida hace un año (www.alterinfos.org, 18-04-2011). Si ya el lanzamiento del Plan Centroamérica –hermano del Plan Colombia y la Iniciativa Mérida- en Tegucigalpa, el pasado mes de febrero, enviaba un poderso mensaje sobre el rol que le asignaba Washington al régimen hondureño posgolpista de Porfirio Lobo, este nuevo emplazamiento militar despeja cualquier duda sobre la cuasi ocupación a la que está siendo sometido el país. Y ocurre, además, en momentos en que las denuncias sobre represión política y violaciones a los Derechos Humanos son ya inocultables. Dos miembros de la Comisión de la Verdad para Honduras, Nora Cortiñas, fundadora de Madres de Plaza de Mayo, y Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel *MIEMBRO DE LA ASOCIACIÓN POR LA UNIDAD DE NUESTRA AMÉRICA-COSTA RICA

de la Paz, en una entrevista publicada por el diario argentino Página/12, relatan el delicado estado de situación que vive la sociedad hondureña: “La represión al pueblo hondureño sigue porque el gobierno de Lobo, un gobierno constitucional entre comillas, está reprimiendo a los maestros, a los sindicatos fuertes y a los periodistas. Tiene un blanco claro: cuanto más combativo es un grupo, más lo reprime”, explica Cortiñas. Y Pérez Esquivel agrega: “Desaparecidos, asesinados, torturados en cárceles. Hay periodistas golpeados, perseguidos, intimidados. Es una avanzada sobre la democracia en América Latina para imponer las democracias entre comillas, restringidas y proclives a los centros de poder” (www.pagina12.com.ar, 17-042011). Por su parte, la inauguración en Panamá, el 18 de abril, del Centro Operativo de Seguridad Regional, presentado como un proyecto del Sistema de Integración Centroamericano (SICA) para articular las tareas de inteligencia de policías y ejércitos en la guerra contra el narcotráfico, ha terminado por revelarse como un eslabón más de la estrategia militar norteamericana: está

ubicado en la antigua base naval de Rodman y se mantendrá conectado “a la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial del Comando Sur de los Estados Unidos con sede en Cayo Hueso (Florida)” (www.diariocolatino.com , 19-042011). Como ocurre en Honduras, el gobierno panameño de Ricardo Martinelli, confeso opositor de los “populismos latinoamericanos” (según la malintencionada expresión divulgada por la derecha latinoamericana), exhibe una cuestionada reputación en diversos ámbitos: intromisión en los distintos poderes de la República, violación de Derechos Humanos (10 muertos y 700 heridos en la represión de trabajadores en Bocas del Toro), corrupción en la administración pública, destrucción de la naturaleza por la vía del desarrollo extractivo minero y la amenaza permanente a los territorios y culturas indígenas (www.rebelion.org , 20-042011). El sociólogo Marco A. Gandásegui describe la situación en una contundente frase: Panamá es el escenario de una guerra de los ricos contra los pobres. No es casual que dos regímenes abiertamente neoliberales y


/Mayo de 2011

RAFAEL CUEVAS

antipopulares (en el sentido de que van en contra de los intereses de los pueblos), sean utilizados como eje de operaciones militares y antidrogas. Por el contrario, es la afirmación de una constante histórica de la presencia de Estados Unidos en Centroamérica. Precisamente, es en la débil legitimidad social y en la erosionada imagen a nivel nacional e internacional de estos gobiernos, donde radica su potencial como socios estratégicos, dóciles y maleables, del poder hegemónico estadounidense. Es cierto que la nuestra es una región vulnerable, expuesta a la acción de grupos criminales organizados y eso tiene un indudable impacto social y cultural; pero también lo es el hecho de que Estados Unidos aprovecha la actual coyuntura en beneficio propio. De manera sistemática, los informes del Departamento de Estado vienen presentando a Costa Rica, Honduras, Nicaragua, Panamá y Guatemala como países “traficantes principales” en el negocio internacional de las drogas (www.elfaro.net , 0403-2011); el Comando Sur califica a Guatemala, El Salvador y Honduras como “la zona más letal del mundo fuera de las zonas de guerras activas”, y el Comando Norte, por su parte, le “recomienda” al gobierno mexicano que considere a Centroamérica como un nuevo frente en su guerra antinarco (www.jornada.unam.mx , 06-04-2011). La suma de estos factores y construcciones políticas y discursivas, es lo que justifica, desde la perspectiva norteamericana y de un sector de las elites gobernantes de la región, unos niveles cada vez mayores de “cooperación en seguridad”, que abren las puertas, irremediablemente, al injerencismo descarnado. En la Centroamérica del siglo XXI, atravesada por contradicciones y esperanzas frustradas, las tendencias que empujan hacia la militarización y la adopción de políticas de “seguridad regional” fabricadas por fuerzas extranjeras, expresan dos dimensiones de un mismo proceso: la profundización del control y la dominación de los Estados Unidos sobre un territorio estratégico en el diseño de su política exterior para América Latina..C

Para superar las taras del neoliberalismo, más neoliberalismo

E

l mundo con capitalismo sin contrapeso, que resultó a partir del derrumbe del socialismo “real” a inicios de la década del 90 del siglo pasado, se imaginó a sí mismo avanzando por todos los rincones de la tierra y transformando todo no en oro, como el mito griego de Midas, sino en pedestre mercancía. Durante diez años, abatidos, ese parecía ser el destino que nos deparaba la historia. En América Latina, las reformas neoliberales avanzaron devorando las conquistas que los trabajadores de la ciudad y del campo habían logrado luchando a brazo partido por más de 50 años. En países que la estructura mundial capitalista ha condenado a tener a la industria extractivista como corazón de su aparato productivo, ésta se privatizó, al igual que servicios básicos como el suministro eléctrico y de agua. Fueron años de debacle, de protestas sociales de los sectores medios y bajos de la población que, de pronto, se vieron acorralados contra la pared haciendo más ominosa las condiciones de vida ya de por sí precarias de amplios sectores de la población latinoamericana. Como es ampliamente conocido, las reformas neoliberales, desbocadas, profundizaron la brecha social no solo al interior de cada uno de los países sino, también, entre los distintos países. La concentración de la riqueza alcanzó límites inimaginables, así como amplios espacios del planeta se vieron confinados a la más absoluta miseria. En el 2008, sin embargo, el modelo neoliberal pareció tocar techo. Una crisis financiera sin precedentes resquebrajó algunos de sus pivotes centrales y, a contrapelo de sus postulados medulares, se llamó al Estado para que, cual caballería al rescate de película del lejano Oeste, acudiera en auxilio de los que se encontraban en inminente peligro de muerte. Luego fueron los estados mismos los que se vieron al borde del abismo: Grecia, Irlanda, Portugal y, tal vez, España y algunos otros que se encuentran en la cuerda floja. Al igual que la política que protagonizaron los estados con las grandes corporaciones bancarias, es decir, utilizando fondos públicos para salvar intereses privados de la bancarrota, en esta oportunidad también el peso de la crisis cayó sobre los hombros de “lo público”. Los españoles, por ejemplo, después de años de bonanza subsidiada por la Unión Europea, sufren ahora la resaca con niveles de paro sin precedentes en los últimos años, y reduciendo beneficios sociales a los sectores más débiles y desprotegidos. Se trata, según dicen, de la segunda generación de reformas. Las consecuencias que desatan se dejan sentir no solo en los países que las llevan adelante sino en todo el mundo. Siguiendo con el ejemplo que hemos traído a colación, en España miles de inmigrantes latinoamericanos (colombianos, ecuatorianos, etc.), han tenido que regresar a sus países de origen ante la desolación laboral que impera en la península. Grandes corporaciones internacionales, aprovechándose de la coyuntura, se reestructuran y despiden a miles de trabajadores a lo largo de todo el mundo. La Panasonic, por ejemplo, anunció el 29 de abril que despedirá a más de 30,000 de sus trabajadores. En otros lugares, en donde priman formas de producción “deslocalizadas” de las grandes transnacionales, se agudizan las formas de explotación, ya de por sí muy cercanas algunas a la misma esclavitud, con la amenaza de que, de no ser competitivas las usinas abiertas en el lugar en cuestión, deberán trasladare a otros sitios en donde las “ventajas comparativas” les sean más favorables. Estamos ante una brutal arremetida del capital que busca incrementar sus tasas de ganancia a costas de una cada vez mayor explotación de la fuerza de trabajo. No les basta con incrementar la productividad del trabajo introduciendo los avances que pone a su disposición la revolución tecnológica de nuestro tiempo, sino que buscan que todos los factores de la producción sean exprimidos al máximo. Según el mito antiguo, Midas pereció víctima de su propia codicia: al tocar la comida que le mantendría con vida, ésta se transformaba en oro y no podía alimentarse. La codicia capitalista tampoco conoce límites. Sáquense las conclusiones pertinentes.C


/Mayo de 2011

La persistencia histórica del

BOAVENTURA DE SOUSA SANTOS

patriarcado *

N

o hay naturaleza humana asexuada; hay hombres y mujeres y, para algunos, otros sexos. Hablar de naturaleza humana sin hablar de la diferencia sexual es ocultar que la “mitad” de la humanidad integrada por las mujeres vale menos que la de los hombres. Bajo formas cambiantes según tiempo y lugar, las mujeres han sido consideradas seres cuya humanidad es problemática (más peligrosa o menos capaz) en comparación con la de los hombres. A la dominación sexual que este prejuicio genera la llamamos patriarcado y al sentido común que lo alimenta y reproduce, cultura patriarcal. La persistencia histórica de esta cultura es tan fuerte que, incluso en las regiones del mundo en las que ha sido oficialmente superada por la consagración constitucional de la igualdad sexual, las prácticas cotidianas de las instituciones y las relaciones sociales continúan reproduciendo el prejuicio y la desigualdad. Ser feminista hoy significa reconocer que esta discriminación existe y que es injusta, y desear activamente que sea erradicada. En las actuales condiciones históricas, hablar de naturaleza humana como si fuese sexualmente indiferente, sea en el plano filosófico o en el político, es pactar con el patriarcado. La cultura patriarcal viene de lejos y atraviesa tanto a la cultura occidental como a las culturas africanas, indígenas e islámicas. Para Aristóteles, la mujer es un hombre mutilado y, para Santo Tomás de Aquino, siendo el hombre el elemento activo de la procreación, el nacimiento de una mujer es una señal de debilidad del procreador. A veces anclada en textos sagrados (la Biblia y el Corán), esta cultura ha estado siempre al servicio de la economía política dominante que, en los tiempos modernos, han sido el capitalismo y el colonialismo. En Tres Guineas (1938), en respuesta a un pedido de apoyo financiero para la guerra, Virginia Woolf se niega y, recordando la marginación

de las mujeres en la nación, afirma provocativamente: “Como mujer, no tengo país. Como mujer, no quiero tener país. Como mujer, mi país es el mundo entero”. Durante la dictadura en Portugal, las Nuevas cartas portuguesas, publicadas en 1972 por Maria Isabel Barreno, Maria Teresa Horta y Maria Velho da Costa, denunciaban al patriarcado como parte de la estructura fascista que sostenía la guerra colonial en Africa. “Angola es nuestra” era el correlato de “las mujeres son nuestras” (de nosotros, los hombres), y con el sexo de ellas se defendía la honra de ellos. El libro fue incautado de inmediato porque justamente fue percibido como un libelo contra la guerra colonial, y sus autoras no fueron juzgadas sólo porque entretanto estalló la Revolución de los Claveles, el 25 de abril de 1974. La violencia que la opresión sexual implica se produce bajo dos formas,

hardcore y softcore. La versión hardcore es el catálogo de la vergüenza y el horror del mundo. En Portugal, en 2010 murieron 43 mujeres víctimas de la violencia doméstica. En Ciudad Juárez (México), en los últimos años fueron asesinadas 427 mujeres, todas jóvenes y pobres, trabajadoras de las fábricas del capitalismo salvaje, las maquiladoras, un crimen organizado conocido como femicidio. En varios países de Africa se sigue practicando la mutilación genital. En Arabia Saudita, hasta hace poco las mujeres ni siquiera tenían partida de nacimiento. En Irán, la vida de una mujer vale la mitad que la de un hombre en un accidente de tránsito; en un tribunal judicial, el testimonio de un hombre vale tanto como el de dos mujeres; en caso de adulterio la mujer puede ser lapidada hasta morir, una práctica que, por otro lado, está prohibida en la mayoría de los países de


/Mayo de 2011

Europa se cierra en banda Juan Carlos Escudier/Público*

A

cultura islámica. La versión softcore es insidiosa y silenciosa, se produce en el seno de las familias, las instituciones y las comunidades, no porque las mujeres sean inferiores sino, por el contrario, porque son consideradas superiores en su espíritu de abnegación y en su disponibilidad para ayudar en tiempos difíciles. Como es una disposición natural, no hace falta siquiera preguntarles si aceptan los encargos ni bajo qué condiciones. En Portugal, por ejemplo, los actuales recortes del gasto social del Estado victimizan en particular a las mujeres. Las mujeres son las principales proveedoras de cuidado a las personas dependientes (niños, ancianos, enfermos, personas con discapacidad). Si con la clausura de hospitales psiquiátricos y la ausencia de soluciones alternativas los enfermos mentales son devueltos a sus familias, el cuidado queda a cargo de las mujeres. La imposibilidad de conciliar el trabajo remunerado con el trabajo doméstico hace que Portugal tenga una de las tasas de fertilidad más bajas del mundo. Cuidar de los vivos se torna incompatible con desear más personas vivas. Y esto es apenas una expresión extrema de algo que está pasando un poco por todas partes. Pero la cultura patriarcal tiene, en ciertos contextos, otra dimensión particularmente perversa: la de crear en la opinión pública la idea de que las mujeres son oprimidas y, como tales, víctimas indefensas y silenciosas.

Este estereotipo hace posible ignorar o desvalorizar las luchas de resistencia y la capacidad de innovación política de las mujeres. Es así como se ignora el papel fundamental de las mujeres en la revolución de Egipto o en la lucha contra el saqueo de tierras en la India; la acción política de las mujeres que lideran municipios en tantas pequeñas ciudades africanas y su lucha contra el machismo de los líderes partidarios que bloquean el acceso femenino al poder político nacional; la lucha incesante y plena de riesgos por la punición de los criminales llevada a cabo por las madres de las jóvenes asesinadas en Ciudad Juárez; las conquistas de las mujeres indígenas e islámicas en su lucha por la igualdad y el respeto de la diferencia, transformando desde adentro las culturas a las que pertenecen; las prácticas innovadoras en defensa de la agricultura familiar y las semillas tradicionales de las mujeres de Kenia y de tantos otros países de Africa; la presencia de mujeres en los movimientos antimineros (recordemos la muerte de Betty Cariño Trujillo en Oaxaca) y en todos los que pelean por el reconocimiento de la naturaleza como “bienes comunes”, tal como ocurre en estos días en la Argentina; la palabra de las mujeres palestinas que, cuando son interrogadas por autoconvencidas feministas europeas sobre el uso de anticonceptivos, responden: “En Palestina, tener hijos es luchar contra la limpieza étnica que Israel impone a nuestro pueblo”.C

diferencia de los capitales, cuyos movimientos son vertiginosos, especialmente los de Google, que, como ya se ha contado, viajan en primera de Irlanda a Holanda y de allí a las Bermudas para desaparecer, los seres humanos tienen más difícil eso de los desplazamientos, sobre todo si vienen del norte de África y sin una muda limpia. Sarkozy y Berlusconi aprecian mucho la libertad de movimientos, pero sólo en las discotecas, y eso explica que hayan propuesto reformar el tratado de Schengen para que los inmigrantes se queden quietos y reposen su desesperación antes de que se les expida el billete de vuelta. La sensibilidad de Francia e Italia en temas de inmigración es similar a la de una piedra pómez, pero no es menor a la del resto de la UE. Basta recordar la reacción española ante las oleadas de cayucos a Canarias y la exigencia de que la agencia europea dedicada al control de fronteras actuara de forma preventiva impidiendo su llegada, lo cual era pasarse por el forro tanto la Convención de Ginebra sobre los refugiados como la del Derecho del Mar de la ONU, que no contempla que un barco pueda inspeccionar a otro en alta mar. La alarma ha sido causada por los 25.000 tunecinos que alcanzaron la isla de Lampedusa, a los que el madelman italiano quiso dar el pasaporte, en forma de visado temporal, para que se dispersaran por Europa, toda vez que sus socios comunitarios rechazaron compartir la carga que representaban. Caídos algunos dictadores que ejercían de cancerberos a sueldo de Occidente, las revoluciones del mundo árabe son un dolor de cabeza para nuestras estas democracias nuestras, siempre generosas y comprensivas con las tragedias ajenas. El caso de Túnez es especialmente sangrante porque acoge en su territorio a decenas de miles de refugiados libios, de los más de 600.000 que desde el inicio de los combates se han repartido por Egipto, Argelia, Chad o Mali. Todos estos países han mantenido abiertas sus fronteras. Su humanidad y su decencia es directamente proporcional a nuestra bien alimentada hipocresía.n


/Mayo de 2011

El Mensaje a los pueblos del mundo a través de la Tricontinental del Che

Por la revolución mundial

NÉSTOR KOHAN

M

ensaje a los pueblos del mundo a través de la Tricontinental” es el texto más “maduro” de Ernesto Guevara, considerado uno de sus últimos mensajes políticos. Históricamente, ha sido algo así como su “testamento político”. El Che no lo pensó en esos términos: no pensaba morir, no fue a Bolivia a caer como un mártir ni un suicida, como dicen algunos biógrafos apresurados y malintencionados...; pero, de algún modo, su último mensaje resume una apuesta política a favor de la revolución mundial, contra el imperialismo, por el socialismo. Este mensaje conserva vigencia en sus trazos esenciales y estratégicos. No en aquello que se fue con la historia o que pertenece al pasado, a lo pretérito, sino en aquello que define una perspectiva revolucionaria integral, universal: “globalizada”, para utilizar un término muy en boga en nuestra época. Con el máximo de los respetos, creo que el internacionalismo no nació en Seattle. Su “Mensaje a los pueblos del mundo…” fue publicado por primera vez hace 35 años, el 16 de abril de 1967, en el suplemento especial de una revista que sigue saliendo hoy: Tricontinental. ¿De dónde salió el nombre de la revista? Cuando el texto se publicó, Ernesto Guevara estaba en Bolivia y aún no se sabía públicamente. El nombre de Tricontinental provino de una conferencia mundial que se hizo en enero de 1966 en La Habana. Se llamó la Conferencia Tricontinental de los Pueblos. Agrupó a los tres continentes que en aquel momento estaban desarrollando la lucha antimperialista y que se presentan en el texto del Che: América Latina, Asia y África. En la Conferencia Tricontinental participaron —el Che hace referencias, unas veces abiertas, otras implícitas— los dos grandes “colosos” que en aquella época encabezaban lo que se suponía era la alternativa al capitalismo: la Unión Soviética y China. Hubo una delegación argentina muy importante: plural y heterogénea, con representantes

marxistas, peronistas de izquierda, socialistas, comunistas, etcétera. Allíseconstituyeron,informalmente, tres bloques políticos. La Conferencia Tricontinental —el mensaje del Che no se entiende al margen de ese momento histórico— se dividió en tres grandes “grupos de opinión”, para llamarlos de algún modo: a la hora de votar, a la hora de discutir qué era el imperialismo, cuáles eran los métodos para enfrentarlo, cuál era el eje de la lucha... Por un lado, el bloque encabezado por la Unión Soviética, acompañado por la mayoría —no todos— de los partidos comunistas latinoamericanos. Por otro, el bloque de China, acompañado por Indonesia, algunos países africanos y unos pocos partidos comunistas latinoamericanos. Y el tercer bloque estaba encabezado por Cuba, acompañado por Vietnam ?que llevó una importante delegación tanto del Norte, como del Frente de Liberación de Vietnam del Sur (Vietcong): en esa época estaban divididos por el imperialismo en dos países. El tema de Vietnam es muy importante en el pensamiento político y estratégico del Che. Este tercer bloque también estaba acompañado por el Partido Comunista de Venezuela, encabezado por Douglas

Bravo, que seguía la línea del Che Guevara y Fidel Castro, en “oposición” a la soviética. También lo conformaban muchos otros países africanos, junto con partidos y movimientos revolucionarios latinoamericanos. Era una Conferencia que agrupaba a estados, pero también a partidos y movimientos: algo similar —aunque muy lejano— a lo que es y fue durante la última década el Foro de San Pablo o el Foro Social Mundial de Porto Alegre; pero, en esa época, las Organizaciones No Gubernamentales no existían, entonces iban los Estados no-capitalistas y partidos, movimientos, frentes, grupos guerrilleros del continente. La Conferencia tenía, obviamente, un componente mucho más radicalizado que el Foro Social. Se discutían los “cómo”, pero nadie discutía que la perspectiva era el socialismo. Ese era el suelo común: bien distinto al del Foro Social Mundial, donde conviven corrientes muy heterogéneas. El bloque de Cuba y Vietnam levantaba a la lucha armada como método fundamental de lucha contra el imperialismo. Paradójicamente, a esta vía se opusieron allí tanto la delegación china, como la soviética. Era una época de pleno conflicto chino-soviético, como aparece en el texto del Che: a


/Mayo de 2011

comienzos de los años 60, la República Popular China ?que logra el triunfo de su Revolución en el año 1949? se distancia del que había sido su principal aliado, la Unión Soviética, y empieza una confrontación muy fuerte entre ambos, incluso con ejércitos paralelos en las fronteras y con riesgos de guerra. La división se generalizó en todo el mundo. Los partidos comunistas empezaron a dividirse en “prosoviéticos” y “prochinos”. Ese conflicto está presente en el pensamiento del Che: amargamente, porque él señala muchas veces la “guerra de zancadillas” que estaban haciendo las dos superpotencias socialistas, dejando solo a Vietnam... La década de la Tricontinental En Argentina gobernaba entonces el general Onganía, después del golpe de Estado de junio de 1966. También podemos decir, como bosquejo, que esa década en la que el Che escribe este texto, fue de rebeldías políticas y culturales al mismo tiempo. Se independizó Argelia, luego de una guerra donde el ejército francés —el hoy famoso Le Pen era un torturador en Argelia— implementó la tortura sistemática y luego se las enseñó a nuestros generales en la Escuela de Guerra argentina; varios países africanos se descolonizaron; en los países capitalistas desarrollados hubo una ola de grandes huelgas fabriles: en Italia, por ejemplo; y una gran efervescencia estudiantil durante toda la década. En el 68, un año después del asesinato del Che, florece el “mayo francés”, como también ocurre en EE.UU., Alemania, Japón y en México, entre otros países. En el plano cultural, podemos recordar brevemente, como parte del contexto, que fue una década en la que afloró un conjunto de teorías y de corrientes críticas, contestatarias, con pretensiones revolucionarias, en el terreno de las ciencias sociales y de la política. La rebeldía contra el sistema no solo atravesó a la práctica y la militancia políticas: también “cortó en dos” la vida científica y la vida cultural. Por ejemplo, la Teoría de la Dependencia, que surgió entre algunos intelectuales latinoamericanos como crítica de la economía política “oficial” de aquellos años: una crítica contra el pensamiento que sostenía en

aquella época la Comisión Económica Para América Latina. La CEPAL era una institución ligada a las Naciones Unidas que proponía que los países latinoamericanos, para salir de la pobreza y el subdesarrollo, se tenían que “modernizar”. Modernizar implicaba, para ellos, introducir el capitalismo en la agricultura, desarrollar grandes vías de comunicación, etcétera. La Teoría de la Dependencia cuestionó eso: planteó el sinsentido de creer que los países latinoamericanos, si adelantamos un poquito, vamos a ser como EE.UU.; sostuvo que el capitalismo es un sistema mundial, en el que América Latina es parte de la periferia y el imperialismo es parte de las metrópolis. El “subdesarrollo”, entonces, es la consecuencia necesaria del sistema mundial capitalista, no un hecho accidental o accesorio de segundo orden. Es también la década en que surge la Teología de la Liberación, aunque todavía no con ese nombre. Probablemente, el nombre se lo proporcionara en 1974 un teólogo peruano: Gustavo Gutiérrez; pero la práctica sí estaba en aquel momento. Camilo Torres es uno de los principales exponentes de esta corriente. El Che hace referencia a él en su mensaje. En el plano de la Estética, fue una década de modernización cultural en la que la vanguardia se entrecruzó con la política. En Buenos Aires, el célebre Instituto Di Tella se fractura y se generan expresiones militantes como el caso de “Tucumán Arde”. Mientras, para EE.UU. y para las metrópolis imperialistas, también

constituyó una década de fermento, de crítica y de “indisciplina social”. Fue la década del “hippismo”: se puede discutir si era o no revolucionario, pero sí constituyó un cuestionamiento a la sociedad de consumo y a sus normas de vida. Hasta en el plano de la literatura, resultó una década muy revulsiva en EE.UU.: el tiempo de la “generación beat”, con escritores “malditos” como Burroughs o Kerouak, que elogiaban el hacer grandes viajes con la mochila al hombro y no trabajar mansamente en una oficina o en una fábrica. En el plano de la Sociología, fue una década en la que se cuestionó como disciplina misma, incluso en EE.UU. Un gran pensador, Charles Wright Mills, rivalizó con toda la Sociología norteamericana por ser cómplice en las guerras de rapiña de EE.UU. Los sociólogos yanquis, decía Wright Mills, investigan cómo dominar mejor, cómo hacer mejor la guerra. Un discípulo suyo, Alvin Gouldner, señalaba que los sociólogos académicos norteamericanos estudiaban cómo ganar la guerra de Vietnam, cómo neutralizar la protesta de los negros, de los afroamericanos en su país. Los sociólogos “científicos” —el estructural-funcionalismo, por ejemplo— son cómplices del sistema, decían Wright Mills y Alvin Gouldner. Asimismo, fue una década en la que se produjo un debate mundial sobre el tema del humanismo y el marxismo, acerca de si eran o no compatibles. El Che Guevara tomó posición; pero no fue el único: hubo una literatura muy importante, en esa década, que refirió al tema del “joven Marx”, el problema de la alienación —una categoría


/Mayo de 2011

que se incorporó al lenguaje de la vida cotidiana, pero que es de origen filosófico. El terreno de esas discusiones fue la década de los 60. En medio de estas rupturas y emergencias, el mensaje del Che no está escrito “en el aire”: es el producto, el punto de llegada de una década que en todo el mundo ?desde Asia, América Latina y África, hasta las metrópolis norteamericana, alemana e inglesa? estaba fermentada por la indisciplina y la búsqueda de nuevos horizontes. Se podría pensar, por ejemplo, que la disciplina social que el capital le había impuesto a la fuerza de trabajo a nivel global, a través de dos guerras mundiales, se empezó a resquebrajar en la década de los 60. Fue un decenio de gran rebelión contra el capital y le siguió, en los años 70, una contrarrevolución que hoy se conoce popularmente como “neoliberalismo”. Aparecen entonces Pinochet ?uno de sus iniciadores a nivel mundial?, Margaret Thatcher, Ronald Reagan, todo el conservadurismo... Sin embargo, la década de los 60 es justo el interregno entre el fin de la disciplina de la fuerza de trabajo ?que se implementa, sobre todo, en Europa Occidental a partir de la Segunda Guerra Mundial? y la contrarrevolución neoliberal. Los mensajes del Che Volviendo al mensaje del Che, es importante señalar algunos puntos. Primero: el Che empieza hablando sobre aquella década del “optimismo” porque, supuestamente, hay paz. Dice: “Hay un clima de aparente optimismo en muchos sectores de los dispares campos en que el mundo se divide”. Más adelante, Guevara se pregunta si la paz que genera el optimismo es real. ¿A qué hace referencia con el optimismo y la paz? Fundamentalmente, a la política oficial que en aquella época tenía la Unión Soviética: conocida en el lenguaje de sus dirigentes como la “coexistencia pacífica”; en otras palabras, la posibilidad de competir con el imperialismo en el terreno económico y en el ideológico, pero no en el terreno político-militar. Recordemos que después de la Segunda Guerra Mundial hubo un reparto del mundo, un

reparto de “zonas de influencia”, en el famoso acuerdo de Yalta. Allí, la Unión Soviética se comprometía a “no generar disturbios”, a no apoyar activamente a movimientos revolucionarios en la zona de influencia norteamericana. Efectivamente, fue así: gran parte de las rebeliones y revoluciones, desde la juvenil del Mayo Francés de 1968 hasta la Revolución Cubana de 1959 o las guerrillas africanas, no tuvieron apoyo soviético, a pesar de que este país tenía una cantidad de armas impresionante e, incluso, un gran arsenal nuclear. La vieja idea, según la cual “sin el apoyo ruso no había Revolución Cubana”, es un poquito ?para decirlo elegantemente? unilateral, porque la Revolución triunfó en 1959 sin armas soviéticas, sin asesores soviéticos, sin tropas soviéticas, sin dinero soviético. El vínculo entre Cuba y la URSS es posterior a esa fecha. El Che Guevara polemiza con esa tradición de la coexistencia pacífica cuando habla, al comienzo de su mensaje, del “desmedido optimismo” que reina como si viviéramos en paz solo porque no hay guerra mundial. Y se pregunta entonces si esa paz es verdadera. Está discutiendo con la posición soviética. ¿Dónde se puede encontrar esta idea? Además de las opiniones que todos podemos tener, hay documentos: por ejemplo, hay registros de una conferencia mundial varios años anterior a la Tricontinental ?recordemos que la Internacional Comunista, fundada por Lenin, había sido disuelta por Stalin en 1943? en la que se sancionó la “coexistencia pacífica” y la estrategia de

“tránsito pacífico”. En su declaración, se planteaba que “la clase obrera y su vanguardia, el partido marxistaleninista, tienden a hacer la revolución por vía pacífica [...] En varios países capitalistas, la clase obrera, encabezada por su destacamento de vanguardia, puede conquistar el poder estatal sin guerra civil” (Declaración de la Conferencia de Representantes de los Partidos Comunistas y Obreros, Anteo, 1960). Esta Conferencia agrupó ?así decía la liturgia de la época? a todos los partidos comunistas y obreros del mundo: los que estaban enrolados en la línea pro-soviética. Allí se sostiene, explícitamente, que el camino hacia el socialismo tiene que ser un camino pacífico, es decir, que tiene que haber una “vía pacífica al socialismo”. Algo que después, de manera trágica y con toda la honestidad revolucionaria ?al punto que entregó su vida en este proyecto?, intentó llevar a cabo Salvador Allende en Chile: la transformación del capitalismo al socialismo por vía pacífica y, fundamentalmente, por la parlamentaria e institucional. Muchas veces, cuando se recuerda y se machaca con “el fracaso” del Che en Bolivia, no se dice una sola palabra del supuesto triunfo, de la supuesta viabilidad, del supuesto realismo que habría acompañado al camino alternativo frente a la propuesta del Che: es decir, al camino emprendido por Salvador Allende junto con sus compañeros y compañeras. Esto lo afirmo ?de más está decirlo? con todo el respeto y la admiración personal por Salvador Allende, por su integridad ética y política, por su entrega a los valores


/Mayo de 2011

más nobles de la humanidad; pero, al mismo tiempo, me pregunto: ¿no vamos a extraer ninguna consecuencia política de 1973, ninguna conclusión teórica del supuesto “triunfo de la vía pacífica al socialismo” que nos proponen ?todavía hoy? como alternativa viable y realista frente al fracaso del Che Guevara? Años después, esa misma doctrina de la vía pacífica preconizada por los soviéticos desde fines de los años 50 y ensayada por Salvador Allende y la Unidad Popular en Chile hasta 1973, la adoptó como estrategia oficial el “eurocomunismo”. Es decir, los partidos comunistas de Francia, Italia y España, a mediados de la década de los 70, antes de convertirse oficialmente en socialdemócratas ?como en el caso italiano. Gran parte de los teóricos académicos europeos actuales o de los últimos años que promueven la peregrina idea de que no hay que luchar por el poder, de que “la idea de revolución es vieja y anticuada”, de que el marxismo constituye apenas una ideología economicista “que no entiende de política y aplasta a los movimientos sociales”, son hijos directos del eurocomunismo. Conformaron sus bases teóricas y filosóficas en el interregno europeo que abre con la derrota de 1968 y cierra con el auge del eurocomunismo y la “vía pacífica”. Conviene no olvidarlo a la hora de discutir el problema del poder. Pero en la década de los 60, esa era la posición oficial de la Unión Soviética. Exactamente contra esa posición discute el Che Guevara en su mensaje a través de la Tricontinental, cuando comienza problematizando la noción de “paz”. ¿A qué llamamos “paz”? ¿Cómo vamos a construir una paz mundial real, que no presuponga guerras de masacre permanente? El Che plantea luego otro tema para discutir: formula la idea y la noción del imperialismo entendido como sistema mundial. En esa época no estaba de moda pensar así. Hoy día, hasta cualquier periódico burgués nos habla de “sistema mundial”, de “la globalización”, de “orden mundial”. Hasta La Nación o Ámbito Financiero, diarios argentinos de extrema derecha y sumamente conservadores, hablan de “globalización”. Años después, un académico

norteamericano, Immanuel Wallerstein, publicó varios tomos a partir de 1974 para entender la historia del capitalismo como un sistema mundial. La idea consiste en no estudiarlo país por país ?separados y aislados?, sino en forma inversa: desde sus inicios, desde la transición entre feudalismo y capitalismo, entendiéndolo como un sistema mundial. Luego se puso de moda en la Academia. El último libro que discute sobre esta idea es un texto de Toni Negri: Imperio, que ha tenido una repercusión enorme en el campo progresista y con cuya visión discrepo profundamente. Negri plantea al capitalismo como una sociedad mundial. Sin embargo, pareciera que cuando Negri dice que “los viejos internacionalistas proletarios”, “los viejos revolucionarios” no tenían una visión mundial, sino una visión de país por país, está planteando las cosas de manera completamente unilateral y forzada. Basta leer el mensaje del Che para corroborar que su perspectiva no tiene nada que ver con lo que plantea Negri. ¿No será que cuando Negri habla, polémicamente, sobre “los viejos internacionalistas”, “los viejos revolucionarios” que no llegaban a mirar al mundo como una unidad, está pensando en sí mismo? Sería mejor si hablara en primera persona, en lugar de atribuir al conjunto de la izquierda mundial sus propias debilidades de los años 60 ?por ejemplo su limitación eurocéntrica, su provincianismo político reducido a Italia y a Europa Occidental.

Otro tema para discutir, a partir del mensaje guevariano, sería: ¿cuál es el campo privilegiado de la lucha en el planteo del Che? El Che Guevara prioriza, como lo hacía la Conferencia Tricontinental: Asia, África y América Latina. Es el eje principal ?no el único? de la confrontación con el imperialismo. Tampoco esto era común: durante mucho tiempo, en la tradición revolucionaria existió ?y sigue existiendo? un fuerte eurocentrismo. ¿Qué quiere decir esto? Significa: hasta que no se libere la clase obrera inglesa o alemana, nosotros, los de América Latina, Asia y África, no tenemos nada que hacer; mejor, cruzarnos de brazos. Esta visión, supuestamente “marxista”, todavía se repite en el campo académico y entre muchos marxistas europeos que se sienten genuinamente revolucionarios. Algunos los escriben; otros, simplemente, lo piensan y no lo dicen, aunque sus estrategias políticas se asienten implícitamente en esta visión. El Che discute en torno a este fenómeno, de manera ácida, dura, mordaz, polémica. Otro punto en debate es el papel de la OEA y de las Naciones Unidas, arista que sigue siendo polémica. En 2002 apareció un artículo muy polémico del periodista argentino Horacio Verbitsky, en el que cita informes de la OEA y de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, según los cuales los revolucionarios colombianos son “terroristas, violadores, torturadores, asesinos...”. Es un tema que tenemos que seguir


/Mayo de 2011

discutiendo: si para nosotros es confiable lo que dicen las Naciones Unidas, que han avalado todas las guerras, situados siempre ?en nombre del “derecho”? del lado de los poderosos. El Che tenía una opinión muy fuerte al respecto. Dice explícitamente: “las Naciones Unidas y la OEA son máscaras del imperialismo”; por lo tanto, jamás las vamos a aceptar como una fuente fidedigna. Bajo la bandera “neutral” y “equidistante” de las Naciones Unidas se han masacrado y bombardeado pueblos enteros. Era la época del Che; en la nuestra, no ha cambiado mucho la cosa: quizá haya empeorado.... Por otra parte, Guevara sostiene que “Vietnam, esa nación que representa las aspiraciones, las esperanzas de victoria de todo un mundo preterido, está trágicamente solo”. ¿Por qué “solo”?: porque Vietnam está aislado en su enfrentamiento con EE.UU. El Che critica aquí a las dos superpotencias, China y la URSS: “[...] Pero también son culpables los que en el momento de definición vacilaron en hacer de Vietnam parte inviolable del territorio socialista, corriente, sí, los riesgos de una guerra de alcance mundial, pero también obligando a una decisión a los imperialistas norteamericanos. Y son culpables los que mantienen una guerra de denuestos y zancadillas, comenzada hace ya buen tiempo por los representantes de las dos grandes potencias del campo socialista”. De esta forma, el Che le cuestiona al Pacto de Varsovia ?un pacto de asistencia recíproca en el plano político-militar, entre la Unión Soviética y los países del Este? la exclusión de Vietnam dentro de su territorio inviolable. Si las potencias imperialistas invadían Polonia, había guerra mundial; si invadían Rumania, había guerra mundial; si invadían o bombardeaban la Unión Soviética, había guerra mundial. ¿Por qué, entonces, si invadían o bombardeaban Vietnam, no había guerra mundial? ¿Qué razones geopolíticas llevaban a dejar solo a un pueblo del Tercer Mundo y no tomarlo como un territorio propio para que impunemente lo desangrasen? Por último, el Che plantea las tareas continentales de América Latina. Este tema sigue pendiente hoy en la izquierda argentina y latinoamericana. El Che es muy terminante; tiene una formulación

muy famosa, casi idéntica a la que en 1928 hiciera José Carlos Mariátegui: “o revolución socialista o caricatura de revolución”. En ningún momento acepta Guevara que en América Latina las tareas consistan en construir una “revolución nacional”, “democrática”, “progresista”, que deje al socialismo para el día de mañana. De una manera muy tajante y polémica, asegura que si la revolución no se planea socialista, será solo “una caricatura de revolución”; un intento que, a la larga, terminará en fracaso o en tragedia como ocurrió tantas veces. Aborda también el tema de la burguesía. No la denomina “nacional”, sino “autóctona”. Es un asunto que ha vuelto, en los últimos años, en propuestas y debates de economistas e historiadores nacional-populistas o de centroizquierda, quienes certifican la existencia de una burguesía nacional latinoamericana como un aliado nuestro, con quien hemos que hacer alianzas contra el imperialismo. Lo anterior implica también toda una serie de políticas de alianzas en el terreno ideológico, cultural, etcétera. El Che plantea que las burguesías autóctonas son parte del imperialismo, que no tienen autonomía propia: “han perdido toda su capacidad de oposición al imperialismo ?si alguna vez la tuvieron? y solo forman su furgón de cola”. Guevara formula esta idea casi una década antes del plan de Martínez de Hoz [Ministro de Economía de la dictadura militar argentina de 1976]. No habría que esperar a este año para, recién allí, empezar a pensar que la burguesía nacional no puede dirigir. ¡No! Casi una década antes de la supuesta desindustrialización, ya el Che descree de la capacidad emancipadora de la

burguesía autóctona latinoamericana ?“nacional” para sus defensores. Por último, Guevara plantea el tema de la confrontación armada y señala los límites muy fuertes de la lucha callejera. “Y los combates no serán meras luchas callejeras de piedras contra gases lacrimógenos, ni de huelgas generales pacíficas; ni será la lucha de un pueblo enfurecido que destruya en dos o tres días el andamiaje represivo de las oligarquías gobernantes; será una lucha larga, cruenta”, dice el Che, poniendo un límite muy fuerte para poder realmente hacer una revolución. Guevara había afirmado en El socialismo y el hombre en Cuba (1965): “Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor. Es imposible pensar en un revolucionario auténtico sin esta cualidad”. Y en el mensaje, plantea una dialéctica muy difícil de aprehender desde los valores inculcados en nosotros por las clases dominantes, porque convengamos en que nos han educado ?más allá de credos y religiones? en la cultura del “poner la otra mejilla”. En un célebre poema, decía Bertolt Brecht: “Me gustaría ser sabio también / Los viejos libros explican la sabiduría: / apartarse de las luchas del mundo / y transcurrir sin inquietudes nuestro breve tiempo. / Librarse de la violencia, / dar bien por mal, / no satisfacer los deseos y hasta olvidarlos: tal es la sabiduría”. En esa cultura nos han educado desde pequeños. Si nos hacen el mal, dar la otra mejilla o, como dice Brecht, devolver con bien el mal que nos han hecho ?por supuesto, Brecht termina su poema diciendo: “Pero yo no puedo hacer nada de esto: / verdaderamente, vivo en tiempos sombríos”. En esa cultura del agachar la cabeza, resignarse y nunca responder las agresiones, nos han educado. Es la base subjetiva de la internacionalización de la dominación burguesa. Y el Che Guevara se rebela frente a esos valores: como Brecht, en su época. Entonces ?pensando en Vietnam, en las luchas revolucionarias latinoamericanas, en el colonialismo racista europeo en África, en los miles de torturados y torturadas de Argentina y América Latina (ya en los 60...), en


/Mayo de 2011

las mujeres indefensas violadas por las tropas de ejércitos entrenados por EE.UU., en “las bestias hitleristas”?, Ernesto Guevara sostiene que “un pueblo sin odio no puede triunfar sobre un enemigo brutal”. Esta formulación no puede separarse del objetivo central de los revolucionarios: la lucha tiene la finalidad de acabar con la explotación y la enajenación de nuestros pueblos; la lucha tiene como valor fundante el amor: “Es imposible pensar en un revolucionario auténtico sin esta cualidad”, nos había dicho poco antes. No se pueden separar ni escindir ambas formulaciones. El pensamiento burgués las separa; siempre, invariablemente, cae en antinomias: odio o amor, paz o guerra. El pensamiento burgués, sus categorías analíticas, sus valores fetichizados y fragmentados, no pueden escapar a las dicotomías. O amamos y ponemos la otra mejilla, o nos decidimos por la lucha y entonces odiamos. El pensamiento burgués no comprende que quien se enfrenta a la barbarie capitalista, a la barbarie imperialista, a la barbarie nazi, ama al pueblo, ama al compañero y a la compañera, ama a todo aquel que lucha por la libertad, ama a todo aquel que no se queda solo en palabras, sino que también materializa la solidaridad y el compromiso en su vida cotidiana; pero, al mismo tiempo y en el mismo movimiento, odia al explotador, odia al opresor, odia al torturador, odia al racista, odia al violador, odia al verdugo, odia al nazi, odia al esclavista, odia al apropiador de los hijos de sus compañeros, odia al secuestrador y al genocida. ¿O tenemos que poner la otra mejilla? ¿O tenemos que amar a Videla, a Pinochet, a Franco, a Mussolini y a Hitler? ¿Podría haber triunfado el pueblo vietnamita amando al invasor yanqui, al que quemaba sus campos, al que tiraba compañeros del Vietcong desde los aviones y helicópteros, al que prostituía a sus hijas y hermanas, al que quemaba vivos con Napalm, al que destruía el honor de su pueblo? ¿Podrían haber triunfado los guerrilleros comunistas ?que en la retaguardia de las tropas nazis no los dejaban descansar un minuto? cuando Hitler invadió la Unión

Soviética, si hubieran amado al invasor, perdonándole sus crímenes, reconciliándose con los genocidas de pueblos enteros? Pensemos en todas las polémicas que se arman sobre las declaraciones de las Madres de Plaza de Mayo: cuando ellas no perdonan, no ponen la otra mejilla, no se abrazan con los secuestradores de sus hijos e hijas, no quieren reconciliarse con los opresores y verdugos. El Che es muy fuerte, muy polémico, no tiene nada que ver con este “chico bueno de pelo largo” que nos quiere presentar el sistema de propaganda en la voz del poder. Guevara es muy duro cuando plantea que un pueblo sin odio a sus explotadores, a sus enemigos, no puede vencer. Y ese pensamiento no está disociado de su marxismo humanista. El Che plantea y conjuga ambas dimensiones: por eso es tan polémico. El último tema que menciona es la unidad: el gran tema de la unidad de las fuerzas revolucionarias. El Che plantea que a pesar de no tener esperanzas de unir a estas dos grandes potencias, apuesta a la unidad como eje. Dice: “Es la hora de atemperar nuestras discrepancias y ponerlo todo al servicio de la lucha”. El Che no es Dimitrov (dirigente de la Internacional Comunista durante la década del 30) quien, en el VII Congreso de la Internacional de 1935, planteó la doctrina del “Frente Popular”: la unidad de la clase obrera con la burguesía “no fascista” y “democrática”. ¡No, ese no es el camino del Che! No se puede hacer la unidad con la burguesía. O revolución socialista o caricatura de revolución. Esto vale también para la cultura.

No se puede conjugar al marxismo revolucionario con el liberalismo burgués y “democrático”. Son términos antagónicos. Pero el Che sí quería la unidad: la unidad de los revolucionarios, la unidad contra el sistema, la unidad de la militancia antiimperialista, la unidad de los trabajadores en todas sus fracciones clasistas y antiburocráticas, la unidad de los que se enfrentan al poder. Esa unidad es válida. No conviene confundirla con la Unidad de Dimitrov. Por esa unidad, reclamaba el Che: “Y si todos fuéramos capaces de unirnos, para que nuestros golpes fueran más sólidos y certeros, para que la ayuda de todo tipo a los pueblos en lucha fuera aún más efectiva, ¡qué grande sería el futuro y qué cercano!”. Si hablamos de “ayuda a los pueblos en lucha”, terminemos entonces con la ética revolucionaria del Che. Esa ética que no pueden entender los pusilánimes que lo acusan ?desde sus cómodos sillones? de mil y un pecados. Esa ética que recorre como un hilo rojo todos sus escritos y toda su práctica. Esa ética que Guevara, sin ser un Dios, sin ser un santo, siendo simplemente un ser humano como cualquiera de nosotros, convirtió en norma de vida. Creemos que esa ética, presente en toda su obra, está resumida en una corta y apretada sentencia del “Mensaje a los pueblos del mundo…”, que deberíamos hacer nuestra hoy día: “No se trata de desear éxitos al agredido, sino de correr su misma suerte; acompañarlo a la muerte o a la victoria”. Estaba pensando en Vietnam; pero también en América Latina, en Bolivia, en Cuba, en Argentina.n * Fragmentos de una Clase pública impartida el 10 de mayo de 2002 en la Cátedra Libre Ernesto Che Guevara en Argentina.


/Mayo de 2011

ANA MARÍA ARAGONÉS

Migración centroamericana y México L

as tragedias que en estos últimos años han vivido los migrantes centroamericanos en su tránsito por México amerita un breve análisis desde la perspectiva histórica para comprender cuál ha sido el papel que han jugado tanto Estados Unidos como México en el fenómeno migratorio de los centroamericanos. Los principales países expulsores en Centroamérica son Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Honduras y prácticamente todos ellos, aunque Honduras presentaría rasgos distintos, fueron desde 1960, con algunas diferencias temporales, escenario de diversos movimientos insurgentes que buscaron derrocar a las dictaduras militares y a los gobiernos autocráticos. Gobiernos a los que por cierto Estados Unidos apoyaba pues la región era, para variar, estratégicamente importante para sus intereses. Ante la posibilidad de que los grupos insurgentes lograran su cometido, también apoyó de muy diversas maneras las bestiales represiones que los gobiernos pusieron en marcha, tales como campañas de tierra arrasada en Guatemala, los “contras” en Nicaragua, la “guerra sucia” en El Salvador, pero Honduras jugó otro papel y sirvió de base a los contras. La gran justificación de Estados Unidos para intervenir no se llamaba terrorismo sino comunismo. A partir de la última década del siglo pasado, las guerrillas firmaron diversos acuerdos de paz, pero prácticamente no resolvieron ninguno de los problemas por los que habían luchado. Con la caída del Muro de Berlín, Estados Unidos podía cambiar de estrategia pues la justificación del comunismo dejó de tener vigencia y ahora podían entrar al quite los organismos internacionales, Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, etcétera. Organismos que obligaron a los países a adoptar la política neoliberal y con ella poner en práctica los terribles “ajustes estructurales”, o de lo contrario se exponían a no recibir apoyos monetarios. Los efectos han sido devastadores, situación que se extendería, por cierto, a prácticamente todos los

países de la región. Todo ello daría lugar a un importante éxodo básicamente hacia Estados Unidos, Canadá y México. Lo interesante a destacar es que México empezaría a recibir fondos del Congreso de Estados Unidos como rembolso por las deportaciones de centroamericanos que se llevaban a cabo a partir de 1990, alcanzando cerca de 130 mil personas al año (Casillas). Es decir que desde entonces, se fue dibujando el papel que México jugaría en la frontera. Podía ser un buen negocio para el gobierno, pero el costo era hacer el trabajo sucio para el vecino del norte. Esta forma de colaboración siguió, si bien bajo otros nombres y con diversos disfraces. Uno de estos proyectos fue el llamado Plan Sur lanzado por la administración de Vicente Fox en 2001, cuyo eje era utilizar todos los recursos represivos en la frontera empezando con los recursos militares, y el encargado de ponerlos en marcha fue justamente el Instituto Nacional de Migración. (R. Casillas). Otro proyecto fue el llamado Plan Puebla Panamá, también apoyado por Fox, y si bien no se reconocería implícitamente, se trataba de una nueva estrategia para intentar “sellar la frontera”. Muchos problemas presentaba ese proyecto y el principal era que México y los países centroamericanos se subordinaban a Estados Unidos, con nula posibilidad para alcanzar el desarrollo en la medida que uno de sus ejes era extender la industria maquiladora, aprovechando la mano de obra barata de la región.Parecería que el programa

se encontraba detenido, seguramente por las dificultades de realizar las inversiones millonarias que requería y que ante una crisis que se veía como inminente se convertía en casi imposible. Algunos autores señalan que en realidad el PPP se convirtió, a partir del 2008 en el Proyecto Mesoamérica durante la Décima Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla en la ciudad de Villahermosa, Tabasco, y cuyo objetivo es “mejorar la calidad de vida de sus habitantes”. La realidad es que se trata de un proyecto que se sostiene en casi los mismos supuestos aunque a partir de 2009 pero ahora se añade el tema de la seguridad que incluye la Iniciativa Mérida. Todos estos proyectos están lejos de ser los adecuados para superar la pobreza que se ha enseñoreado de nuestros países, con una generación de empleos de mala calidad y bajos salarios, todo lo cual es un obstáculo para superar los niveles de sobrevivencia de la mayoría de los trabajadores y una de las razones por la que el fenómeno migratorio se sigue manteniendo. México debe reorientar su política con Centroamérica que ha hecho del país el estratega de Estados Unidos tratando de detener la migración de los centroamericanos que pretenden ir hacia el norte. La única actitud decente que le queda es que los diputados ante la Ley Migratoria que se encuentra en sus manos enmienden los artículos que criminalizan a los migrantes y se establezca con toda claridad que migrar es un derecho humano.n ---


/Mayo de 2011

CARLOS NORIEGA/PÁGINA 12

PERÚ: El “milagro” que no se reparte P

oco más de un tercio de los peruanos vive en la pobreza y más del diez por ciento, en la pobreza extrema. Las utilidades de las empresas se multiplicaron, pero los salarios están congelados y el empleo se precarizó. Con un crecimiento económico por encima del 8 por ciento, el gobierno de Alan García y los sectores empresariales hablan del “milagro peruano”. Pero los beneficios de ese “milagro” no llegan a las mayorías. La economía crece, pero no hay distribución y los beneficios de ese crecimiento se quedan en una minoría. Ese es el principal problema que debe enfrentar el próximo presidente. Perú está entre los países de la región con las mejores cifras de crecimiento económico –el año 2010 creció 8,9 por ciento–, pero está entre los últimos en desarrollo humano. Poco más de un tercio de los peruanos vive en la pobreza y más del 10 por ciento, en la pobreza extrema. Y en las zonas rurales, la pobreza supera al 50 por ciento de la población. Las utilidades de las empresas se han multiplicado, pero los salarios permanecen congelados hace varios años, el empleo se ha precarizado, los derechos laborales de los trabajadores formales se han reducido y cerca del 80 por de los trabajadores labora en la informalidad sin ningún derecho ni seguro social. Perú es de los países que más crece en la región, pero es uno de los que menos invierte en temas como educación y salud. El crecimiento tiene su base en la exportación de materias primas y los altos precios internacionales de los minerales, pero no se ha dado un desarrollo importante de la industria nacional. Que la economía siga creciendo, pero con distribución de los beneficios de ese crecimiento, es el reto del próximo gobierno que se instale el 28 de julio. “Las cifras macroeconómicas están bien. Hay crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI), del bajo déficit fiscal, de las altas reservas internacionales, un incremento de las inversiones, una inflación baja, aunque este año va a subir un poco por factores externos y debe estar en 3 por ciento. El

crecimiento económico es importante, pero no es determinante para resolver una serie de indicadores de carácter social, como la reducción de la pobreza y la distribución de ingresos”, le señaló a Página/12 el economista Humberto Campodónico, decano de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional de San Marcos. “Las utilidades han crecido en promedio cerca al 20 por ciento anual y las transnacionales mineras crecieron entre 35 y 40 por ciento, pero los salarios están estancados al mismo nivel de 1994. Perú está creciendo en buena medida por la exportación de materias primas, pero el aparato productivo no genera el empleo que se necesita”, precisa Campodónico. Y sobre lo que le toca hacer al próximo gobierno agrega: “Uno de los retos principales es la distribución de ingresos. El desafío es cómo conservar la estabilidad macroeconómica y al mismo tiempo orientar al país hacia una diversificación mayor del aparato productivo para no depender tanto de la exportación de materias primas. Perú es uno de los países de América latina donde el péndulo está muy al lado del mercado. Debe haber un mayor equilibrio en las relaciones entre Estado y mercado. Esa

es otra tarea del próximo gobierno.” Sobre lo que podría hacer Ollanta Humala, el candidato ganador de la elección de ayer, aunque todavía debe ir a una segunda vuelta, Campodónico señala que “el mayor problema que él va a tener que enfrentar es político: Humala tiene que hacer un esfuerzo para lograr consensos sin dejar de lado sus planteamientos fundamentales. Sería muy importante que tenga una política parecida a la que tuvo Lula en 2002, cuando inició su gobierno y también era muy resistido por el empresariado, y enfrentó una guerra financiera”. Y sobre las primeras medidas económicas que Humala podría tomar si confirma su triunfo en el ballottage, Humberto Campodónico precisa: “Debería centrarse en dos o tres reformas grandes, como el impuesto a las ganancias extraordinarias de las empresas mineras, que no va a ser fácil sacar adelante, pero es algo que debe salir de todas maneras; aumentar el sueldo mínimo (equivalente a unos 215 dólares) teniendo en cuenta la productividad y la inflación; sacar adelante su propuesta de Pensión 65 para darles pensión a los mayores de 65 años que ahora no la reciben; que el gas que ahora se exporta quede para el consumo interno”.n


/Mayo de 2011

JULIO C. GAMBINA*

El debate ideológico sobre el orden económico R

esulta interesante considerar como se hace visible el debate de ideas sobre el orden económico mundial en crisis. A los efectos didácticos, digamos que tres son las posiciones puestas en discusión, que como tales constituyen corrientes intelectuales y políticas que actúa en la conformación de la realidad. I Volver al programa liberalizador Una proviene de la ortodoxia neoliberal, que fue afectada en su credibilidad con la explosión de la crisis mundial desde la debacle del 2007/8, y especialmente por la respuesta del salvataje de las grandes empresas con dificultades, que devolvió el intervencionismo estatal a la consideración pública. Cuatro décadas de prédica liberalizadora se estrellaron contra la realidad. Si hasta el titular del FMI pontifica que el Consenso de Washington ha finalizado. Pese a ello, los herederos de Friedrich Von Hayek (18891992 y Nobel de Economía en 1974) y el programa de máxima del gran capital retornan con su discurso por la liberalización desde el encuentro que funciona en estos días en Buenos Aires (17 al 20 de abril) y auspiciado por la Sociedad de Mont Pellerín (funciona desde 1947 con su primer encuentro en Suiza y reúne al pensamiento liberal reaccionario contra el socialismo y el keynesianismo). Se proponen discutir en Argentina “El desafío populista para la libertad en América Latina” y será clausurado por Mario Vargas Llosa, que tendrá dos momentos estelares en la semana para enarbolar su propuesta, en este encuentro y en la inauguración de la anual Feria del Libro. El diagnóstico intelectual de esta corriente político ideológica sugiere la necesidad de retomar el rumbo hegemónico de los 80´ y los 90´, con aperturas, flexibilizaciones, privatizaciones y un clima favorable al libre movimiento de mercancías, servicios y capitales. Entre nosotros serán de la partida varios economistas y pensadores asociados a las demandas de las clases dominantes locales, coincidentes con el arco político de la derecha, y no en vano el anfitrión es el Jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Esas ideas son sostenidas en estos días en una columna periodística del inefable Domingo Cavallo, que a 20 años del comienzo de la convertibilidad, se animó a sustentar las políticas económicas que lo tuvo como protagonista importante en los años de la reestructuración regresiva del capitalismo local, en gobiernos dictatoriales como bajo administraciones peronistas y radicales. *DOCTOR EN CIENCIAS SOCIALES DE LA UBA. PROFESOR TITULAR DE ECONOMÍA POLÍTICA EN LA FACULTAD DE DERECHO DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO. PRESIDENTE DE LA FUNDACIÓN DE INVESTIGACIONES SOCIALES Y POLÍTICAS, FISYP. INTEGRANTE DEL COMITÉ DIRECTIVO DEL CONSEJO LATINOAMERICANOS DE CIENCIAS SOCIALES, CLACSO.

Hay que sumar a varios argentinos en esta cruzada de reinstalación del pensamiento hegemónico de las últimas décadas del Siglo XX, los cuales serán expositores en el cónclave del Hotel Sheraton, entre ellos al ex Ministro López Murphy, de breve paso por la función ante el rechazo de la movilización popular a su estrategia de ajuste y privatización educativa. II Regular para salvar al capitalismo Una segunda posición con incidencia en la aplicación de las políticas económicas anti crisis asume la necesidad de regular el capitalismo en crisis. Es la corriente que se ha impuesto en estos años de crisis, como modo de salvataje del capitalismo. Es el discurso mayoritario en el G20 y en los cónclaves mundiales que analizan el qué hacer para superar la crisis sin abandonar el rumbo capitalista.


/Mayo de 2011

Eso explica la presencia de Josepf Stiglitz (nacido en 1943 y Nobel de Economía 2001) en el asesoramiento a la reunión de Naciones Unidas que en Junio del 2010 consideró las políticas para resolver la crisis. Aquella reunión pretendía ser alternativa al antidemocrático G20, en funcionamiento desde fines del 2008 y producto de la crisis mundial. Se trataba del G129 versus el G20, y que mejor que formar una comisión técnica para formular propuestas alternativas, liderada por el Nobel de economía crítico del orden hegemónico hacia la crisis del 2001 y de las ideas dominantes de los 80´ y 90´. Puede ser curioso, pero a comienzos del año y de la presidencia Sarkozy del G20, se encomendó a Stiglitz, asociado al neo keynesiano francés Jean-Paul Fitoussi, la coordinación de una reflexión intelectual sobre el qué hacer ante la crisis. Para ello se convocó a pensadores de diferentes regiones y procedencias ideológicas que sugirieron un conjunto de necesarias regulaciones, en muchos casos con el objeto de resolver la crisis dentro del sistema capitalista. La política del ajuste implementada por Europa era contrarrestada con opiniones tendientes a sostener en el tiempo la política de intervención y regulación estatal para el salvataje del capitalismo. Estas ideas están permeando el clima ideológico en la reunión de primavera del FMI-BM en desarrollo en Washington y que cuentan con la presencia del Ministro de Economía de la Argentina y la Presidenta del Banco Central de la República Argentina. Desde el fin del Consenso de Washington proclamado por el titular del FMI, Dominique Strauss Kahn, socialista francés con aspiraciones de disputar el gobierno de su país, a la preocupación del titular del BM por el posible incremento de 10 millones de pobres si continúa en la coyuntura el alza de los precios internacionales de los alimentos. La pobreza se incrementó en tiempos de crisis en 44 millones de pobres por la suba de precios de comodities, especialmente alimentos, y de continuar esta situación el Presidente del BM Robert Zoellick destaca que el registro subiría a los 54 millones de personas. Son opiniones que encarnan en propuestas de regulación estatal de la economía para evitar una recidiva de la recesión del 2009. Claro que son recetas simultáneas con ajustes del gasto social en aquellos países que ello sea posible, inclusive en EEUU, tal como fue anunciado por Obama en estos días para intentar morigerar el gigantesco déficit fiscal estadounidense, equivalente al 10% de su PBI. III Políticas alternativas y anticapitalistas Una tercera posición ideológica, con menor visibilidad propone ir más a fondo que con el salvataje del capitalismo, y pensar en las formas de superar la crisis en simultáneo con la crítica al capitalismo y la sustitución de esa forma del desarrollo y organización económica de la sociedad por otra sustentada en la satisfacción de las necesidades. Algo de ello es lo que ocurre en el Congreso del PC de Cuba a propósito de la discusión sobre el modelo económico de Cuba y la construcción del socialismo. La revolución cubana intenta renovarse y reinventar el socialismo bajo

extendida hegemonía capitalista mundial Algunos pasos relativos a esta posición se asocian a la experiencia de la región nuestramericana en los años recientes de este comienzo del Siglo XXI, especialmente en Venezuela, Bolivia y Ecuador, que en sus reformas constitucionales recientes incorporan, especialmente las dos últimas, categorías que recuperan pensamiento ancestral, tal como el “buen vivir” en las condiciones de la contemporaneidad. Es una recreación de pensamiento con cultura de pueblos originarios que incide en la innovación de categorías como el socialismo sugerido desde las tierras de Bolívar. En Argentina pasó por estos días un cónclave de pensamiento crítico en el Parlamento, en torno al debate sobre “los derechos humanos y la crisis global de la economía”. La reunión fue animada por parlamentarios de la región junto a redes y movimientos de todo el mundo que denuncian las políticas hegemónicas y especialmente el papel dependiente ejercido por el endeudamiento público para los países del sur del mundo. La búsqueda se orientó en la articulación de propuestas más allá de la crítica al neoliberalismo, para constituir una opinión y subjetividad popular para las transformaciones profundas, de carácter anticapitalista. IV La polémica constituye tres espacios De este modo, la discusión que atraviesa el rumbo necesario en nuestramérica está condicionada por estas tres variantes, opiniones o corrientes de pensamiento. De un lado la vuelta al programa explícito de la liberalización sustentado en los 80´ y 90´; de otro la crítica a esas políticas, con el impulso de reformas y regulaciones estatales para el salvataje del sistema capitalista, apuntado como el límite de lo posible de sectores radicalizados en tiempos recientes. Finalmente, emerge desde posiciones minoritarias una visión que intenta romper con el posibilismo y cuestiona a la crisis y las políticas anti crisis en curso para indagar y proponer un rumbo anticapitalista, incluso por el socialismo.n


/Mayo de 2011

RIGOBERTO LANZ

Proletarios del mundo... “La animación de la escena histórica por los actores de la sociedad industrial parece liquidada, la escena está vacía…” Alain Touraine, Mouvements sociaux d´au-jourd´hui

¿Q

ué es de la vida del “proletariado”? Pregunta inocente que remite de inmediato a una tragedia: así como la “muerte de Dios” es una noticia que todavía no ha llegado a miles de millones de cándidos feligreses, tampoco el “Adiós al Proletariado” de André Gorz ha caído en manos de una “clase obrera” mitológica que sólo deambula en las cabezas de unos cuantos camaradas trasnochados. Por ello la idea de revolución asociada a la noción de trabajo explotado se vino a pique. La explotación no se ha extinguido como pregonan los fanáticos de Fukuyama, pero está lejos de ser el principio fundador de un proyecto creíble de emancipación. La “clase obrera” es una categoría sociológica de segunda que sólo entretiene a un sindicalismo decadente que también está lejísimo de utopías revolucionarias. Es por eso que lo que hagan o dejen de hacer los trabajadores está marcado por el síndrome de lo secundario, es decir, se agotan en los predios de las lógicas corporativas, en las transacciones menores de patronos y sindicatos, en fin, en la dinámica residual de la economía de overoles y mineros del carbón que-aunque usted no lo crea--todavía existen. Esa clase obrera no moviliza a nadie (salvo a los “afiliados” que hacen huelgas crematísticas) porque hace rato ya que se esfumó el sueño de una encarnación libertaria de un “sujeto histórico” predestinado. Es por ello que en Venezuela la revolución bolivariana funciona con una ficción de “clase obrera” que es en verdad un subproducto de utilería que va y viene sin la menor trascendencia. El festín del Primero de Mayo es una modesta verbena que pone en escena la memoria de luchas históricas

que fueron verdaderos acontecimientos o un pretexto político-electoral para alimentar la disputa de partidos y grupos por cuotas de poder. Pero hasta allí. Toda la retórica de este obrerismo decimonónico pertenece a los residuos del atraso ideológico, a la flojera de pensar un poco el tema del trabajo (su radical transfiguración) y al manejo difuso de esta transición donde todavía tenemos obreros, trabajo y explotación como en el siglo XIX. Esto último complica especialmente las cosas porque transmite la falsa sensación de que la fulana “clase obrera” es un ente universal que está allí esperando el gran amanecer de su rendición. Lo que ocurre es que no se puede confundir un momento de transición epocal donde obviamente conviven prácticas y discursos de una civilización moribunda y otra que nace, con la emergencia de los nuevos componentes socio-culturales del mundo posmoderno. Allí todo se mezcla con todo generando una gran perturbación en la manera de interpretar cada fenómeno. Es lo que ocurre con el ámbito del trabajo donde coexisten tendencias radicalmente enfrentadas: una irreversible pulverización de los viejos modos de producir y la pervivencia de prácticas y aparatos que pertenecen a la factoría del capitalismo del XIX.

De esa ambigüedad se alimenta toda esta superposición ideológicopolítica donde van y vienen conceptos comodines como “el pueblo”, “los más desfavorecidos”, “los sectores más vulnerables”, “los marginales”, “los trabajadores”, “el proletariado”. Allí no hay que buscar mayor coherencia porque la realidad no da para tanto. No se trata de una debilidad teórica de los operadores políticos (que también existe) sino principalmente una ambivalencia típica de esta transición epocal donde nada puede ser pensado nítidamente. Ello quiere decir que veremos pancartas y bambalinas cada Primero de Mayo por mucho tiempo todavía (una estrella que ya murió hace millones de años todavía brilla para el modesto ojo de un terráqueo cualquiera) Injusticia, desigualdad, violencia y exclusión son moneda corriente en la flamante “sociedad del conocimiento”. Podría ser que estos desfiles del “Día del Obrero” sirvan de calentamiento para las verdaderas luchas que apenas se insinúan en el horizonte. “La explotación del hombre por el hombre” parece que no termina con sólo ruegos al Señor. Bob Marley lo dice mejor cantando: “Defiéndanse, defiéndete, no dejes tu lucha”. n


/Mayo de 2011

GUILLERMO CASTRO HERRERA *

--

El papel de la cultura en el debate sobre la sostenibilidad del desarrollo S

omos herederos de una cultura de la Ilustración liberal que, después de transitar por las opciones contrapuestas de civilización o barbarie entre 1750 y 1850, y de progreso o atraso entre 1850 y 1950, vino a desembocar en la disyuntiva entre desarrollo y subdesarrollo aún vigente, así sea porque no se ha encontrado con qué sustituirla. Para el ambientalismo latinoamericano, tan vinculado en su desarrollo a la relación entre deterioro social y degradación ambiental característica de nuestra región, la manera más efectiva de fomentar la riqueza natural consiste en fomentar la de las relaciones sociales de cooperación solidaria. La utilidad de este principio abstracto, sin embargo, depende de nuestra capacidad para ejercerlo en acuerdo con la circunstancia histórica que genera la crisis ambiental que nos aqueja. Esa crisis tiene una de sus expresiones más visibles en un proceso de intensificación de la variabilidad climática natural, que a su vez estimula el cambio de los patrones de organización del clima en cuyo marco se ha desarrollado la civilización que conocemos. Esas alteraciones, y sus tendencias previsibles, han generado ya diversas iniciativas globales encaminadas a mitigar el impacto del cambio climático y a propiciar la adaptación humana a los nuevos patrones de clima que emergen de ese proceso. Dentro de esas iniciativas destacan, por ejemplo, las que promueven alternativas de producción y consumo de energía que contribuyan a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero asociados a un incremento en la incidencia de eventos naturales potencialmente desastrosos, como los huracanes. Aun así, el vínculo entre estos factores excede a menudo nuestra *SOCIÓLOGO, ENSAYISTA, PROFESOR E INVESTIGADOR PANAMEÑO

capacidad para percibirlo y actuar en consecuencia. Parte de esa dificultad se debe, sin duda, a que somos herederos de una cultura de la Ilustración liberal que, después de transitar por las opciones contrapuestas de civilización o barbarie entre 1750 y 1850, y de progreso o atraso entre 1850 y 1950, vino a desembocar en la disyuntiva entre desarrollo y subdesarrollo aún vigente, así sea porque no se ha encontrado con qué sustituirla. En ese marco, el problema de la energía tiende inevitablemente a ser considerado en relación con la aspiración a un crecimiento y una acumulación sostenidos e incesantes, propia de la cultura del desarrollo. Esta visión debe ser criticada a partir de sus consecuencias prácticas. En materia de energía, por ejemplo, el problema a debatir no es tanto el de su origen – fósil, solar, hidráulico, eólico o biológico - cuanto el de los propósitos de su producción y consumo. Aquí, lo que realmente está en cuestión es el lugar de la energía en el paso de una relación viciosa a una virtuosa en las interacciones entre nuestra especie y su entorno natural. Por lo mismo, esto nos plantea un desafío de orden político y cultural, antes que tecnológico. Ese desafío, sin embargo, sólo podrá ser encarado en la medida en que lleguemos a ser capaces de asumir

a la cultura de la Ilustración como un momento formativo necesario en el desarrollo de una cultura superior: la de la sostenibilidad del desarrollo de nuestra especie. Esta tarea no es sencilla, ni puede operar simplemente a través del rechazo mecánico de la Ilustración y sus valores, incluido el del progreso. Aquí, como nos advirtiera Antonio Gramsci, conviene recordar que: “En el análisis de los problemas histórico–críticos es preciso no concebir la discusión científica como un proceso judicial en el cual hay un imputado y un procurador que, por obligación de oficio, debe demostrar que aquél es culpable y digno de ser quitado de la circulación. En la discusión científica, dado que se supone que el interés sea la búsqueda de la verdad y el progreso de la ciencia, se muestra más “avanzado” quien se coloca en el punto de vista de que el adversario puede expresar una exigencia que debe ser incorporada, quizás como un momento subordinado, en la propia construcción” (El Materialismo Histórico y la Filosofía de Benedetto Croce. Ediciones Nueva Visión, Buenos Aires, 2003, p. 26. [cursiva: GCH]). Para superar críticamente la ignorante arrogancia de quienes confunden el proceso general de desarrollo de nuestra especie con la forma histórica particular de ese proceso que ahora ha entrado en crisis, es necesario superar toda arrogancia que limite la posibilidad de incorporar a una visión nueva de nuestro lugar y nuestra responsabilidad en el mundo todas las conquistas y todos los sueños del pasado que hoy nos corresponde superar. Desde allí, podremos contribuir a la construcción de la cultura que llegue a ser capaz de expresar el interés general de los humanos en establecer los fundamentos de una sociedad capaz de sobrevivir al desastre ambiental creado por la nuestra, y convertir de posible en probable la transición a un mundo nuevo.c


/Mayo de 2011

Mentiras graves sobre los bancos centrales

Un banco central independiente, centrado exclusivamente en la estabilidad de los precios, ha llegado

a ser un aspecto fundamental de la cantinela de la “reforma económica”. Como tantas otras máximas políticas, se ha repetido lo suficiente para que llegara a creerse. Pero las afirmaciones atrevidas, aun cuando las hagan los presidentes de los bancos centrales, no sirven para sustituir las investigaciones y el análisis. Las investigaciones indican que, si los bancos centrales se centran en la inflación, cumplen mejor con su tarea de controlarla. Pero el de controlar la inflación no es un fin en sí mismo: es un simple medio para lograr un crecimiento más rápido y más estable y con menor desempleo. Esas son las variables reales que importan y existen pocos testimonios de que los bancos centrales independientes que se centran exclusivamente en la estabilidad de los precios obtengan mejores resultados en cuanto a esos aspectos decisivos. George Akerlof, que compartió el Premio Nobel conmigo en 2001, y sus colegas han sostenido convincentemente que existe una tasa óptima de inflación, superior a cero. De modo que la búsqueda a toda costa de la estabilidad de precios menoscaba, en realidad, el crecimiento económico y el bienestar. Investigaciones recientes ponen en entredicho incluso que fijar como objetivo la estabilidad de los precios reduzca el equilibrio entre inflación y desempleo. Centrarse en la inflación puede tener sentido para países con largas historias de inflación, pero no para otros, como el

JOSEPH STIGLITZ

Japón. La tarea encomendada a la Reserva Federal, el banco central de los Estados Unidos, es no sólo la de garantizar la estabilidad de los precios, sino también la de fomentar el crecimiento y el pleno empleo. En los Estados Unidos existe un amplio consenso contrario a que se le encomiende una tarea limitada, como en el caso del Banco Central Europeo. En la Europa actual el crecimiento languidece, porque, al estar el Banco Central Europeo centrado exclusivamente en la inflación, no fomenta la recuperación económica. Los tecnócratas y los agentes que intervienen en los mercados financieros y se benefician de ese acuerdo institucional han actuado con una eficacia impresionante para convencer a muchos países de sus virtudes y de la necesidad de considerar la política monetaria un asunto técnico que debe estar por encima de la política. Así podría ser, si lo que hicieran todos los presidentes de bancos centrales fuera –pongamos por caso– elegir los programas informáticos para la compensación de pagos. Pero los bancos centrales adoptan decisiones que afectan a todos los aspectos de la sociedad, incluidas las tasas de crecimiento económico y desempleo. Como hay compensaciones recíprocas, sólo se pueden adoptar dichas decisiones como parte de un proceso político. Hay quienes sostienen que a largo plazo no hay compensaciones recíprocas. Pero, como dijo Keynes, a largo plazo todos muertos. Aun cuando fuera imposible reducir el desempleo por debajo de determinado nivel decisivo


/Mayo de 2011

sin avivar la inflación, no existe certeza sobre cuál debe ser ese nivel. En consecuencia, el riesgo es inevitable: una política monetaria demasiado permisiva corre el riesgo de aumentar la inflación; si es demasiado rígida, puede causar innecesariamente un aumento del desempleo, con todo el sufrimiento que éste entraña. Durante el período de auge en el crecimiento de los Estados Unidos en el decenio de 1990, el gobierno de Clinton consideró que valía la pena correr el riesgo que entrañaba la reducción de la tasa de desempleo, sobre todo si a los beneficios económicos directos se sumaban los beneficios sociales: reducción del número de personas dependientes de la asistencia social y también de la violencia. En cambio, el FMI instaba a aplicar una política monetaria más rígida, porque atribuía menos importancia al costo del desempleo, ninguna importancia, al parecer, a los beneficios sociales consiguientes a su reducción y mucha mayor importancia a los costos de un posible aumento de la inflación. El análisis económico del Consejo de Asesores Económicos de Clinton resultó estar en lo cierto: los modelos del FMI (y de la Reserva Federal) eran erróneos. Los Estados Unidos consiguieron reducir en gran medida el desempleo sin aumentar la inflación... y el desempleo llegó a ser inferior al 4 por ciento. Pero eso no es lo que importa: lo que importa es que nadie podía estar seguro. Siempre es inevitable un riesgo calculado. Según las diferentes políticas, variarán los perjudicados y ésa es una decisión que no se puede –o al menos no se debería– dejar al arbitrio de los tecnócratas de los bancos centrales. Si bien es legítimo el debate sobre el grado de independencia concedido a los bancos centrales y otros órganos encargados de adoptar decisiones en una democracia, en ese proceso deben estar representadas las perspectivas de aquellos cuyo bienestar resulta afectado por las decisiones adoptadas. Por ejemplo, los trabajadores, quienes tienen mucho que perder si el banco central aplica una política excesivamente rígida, no se sientan a la mesa. Pero los mercados financieros –que no tienen mucho que perder con el desempleo, pero sí que se ven afectados por la inflación– suelen estar bien representados en ella. Y, sin embargo, los mercados financieros no tienen ni mucho menos el monopolio de la competencia técnica. De hecho, muchos de los miembros de la comunidad financiera no acaban de entender bien el complejo funcionamiento del sistema macroeconómico... como lo atestiguan sus frecuentes errores a la hora de gestionarlo. Por ejemplo, la mayoría de las recesiones de los Estados Unidos desde 1945 fueron causadas por frenazos exagerados aplicados por la Reserva Federal. Asimismo, los bancos centrales adoptaron el monetarismo con fervor al final del decenio de 1970 y a comienzos del de 1980, justo cuando los testimonios empíricos estaban desacreditando las teorías en que se basaba. Sean cuales fueren los méritos de una moneda única, quienes en Europa deliberan sobre la adopción del euro deben pensárselo bien antes de vincular su suerte a un acuerdo institucional cuyos fallos resultan cada vez más patentes. Asimismo, los países en desarrollo deben tener en cuenta no sólo la independencia del banco central, sino también su mandato y representatividad.

Deben equilibrar el interés por la eficiencia económica y el relativo a la responsabilidad democrática. En muchas nuevas democracias, los ciudadanos están perplejos. Primero se alaban las virtudes del nuevo régimen, pero después se les dice que las decisiones relativas a la política macroeconómica –las que más les importan– son demasiado trascendentales para confiarlas a los procesos democráticos. Se advierte a los ciudadanos contra los riesgos del populismo (¿entendiendo por tal la voluntad de los ciudadanos?). No hay respuestas fáciles. Pero en demasiados países tampoco hay un debate democrático sobre las diversas opciones..n * Artículo publicado en el 2003. Joseph Stiglitz es profesor de Economía y Finanzas en la Universidad de Columbia y en 2001 fue galardonado con el Premio Nobel. Antes había sido presidente del Consejo de Asesores Económicos del presidente Clinton y economista jefe y vicepresidente más antiguo del Banco Mundial.


/Mayo de 2011

Perú: oro sangriento

HILDEGARD WILLER

M

aría Tintaya y René Santos se quieren casar pronto. Por lo menos no se deben preocupar por sus anillos de boda. La joven enfermera y el electricista trabajan en una tienda de compra de oro en Puerto Maldonado, capital del departamento de Madre de Dios, fronterizo con Brasil. Es un domingo por la mañana y Tintaya atiende a tres jóvenes mineros. Dos de ellos escuchan música con su MP3, llevan zapatillas último modelo con los cordones abiertos para parecer “cool”. El mayor de ellos, de unos 25 años, saca un papel arrugado de su bolsillo donde tiene envuelto un grano de color plateado. Tintaya lo coloca en un recipiente de arcilla y lo quema con un mechero fuerte. Poco a poco el mercurio, altamente tóxico, se evapora en el aire y queda la cosecha de trabajo de los tres jóvenes: un grano de oro de 15 gramos. Tintaya les paga unos US$600 en efectivo y no pide ningún certificado de origen. Son $200 para cada uno por el trabajo de una semana, que en el Perú equivalen al sueldo mínimo mensual. Como tantos otros, los tres jóvenes abandonaron sus estudios en la ciudad andina de Cusco para hacer caso al llamado del oro que emana desde la selva amazónica de Madre de Dios. Ellos, como mineros jornaleros, constituyen el último eslabón de una cadena de minería que oscila entre formal e informal, entre artesanal y grande. “Como máximo, el 5% de los mineros acá están formalizados y con sus estudios de impacto ambiental en regla”, estima Humberto Cordero, el representante del Ministerio del Ambiente en Madre de Dios. Alrededor del 60% se supone que son invasores ilegales o “invitados” por los concesionarios, otro 30% se encuentran en vía de formalización. Mineros grandes y pequeños Los mineros de Madre de Dios pueden ser adinerados inversionistas

peruanos, brasileños, hasta rusos y chinos, que revuelven el fondo y las riberas de los ríos con grandes dragas, excavadoras y volquetes importados de último modelo, o jornaleros que trabajan de manera casi artesanal, con una pequeña chupadera a motor diesel para succionar la arena fluvial rica en polvo de oro. Todos ellos —se calcula que son unas 40,000 personas que viven de la minería en Madre de Dios— tienen en común que depredan la selva: para sacar oro talan árboles indiscriminadamente, revuelven los sedimentos de los ríos y contaminan agua y tierra con mercurio y aceite de motores. Algunos lechos de ríos ya no existen; los mineros los han convertido en un desierto de barro. Ni el Ministerio de Energía y Minas en Lima, ni las autoridades regionales encargadas de fiscalizar la minería artesanal y pequeña han logrado ordenar la minería en Madre de Dios y mitigar sus daños ambientales. Con el precio del oro por las nubes y la llegada constante de nuevos mineros, los intentos de poner orden a través de la formalización han fracasado. Por ello, el ministro del Ambiente, Antonio Brack, mediante un decreto de urgencia declaró el 18 de febrero del 2010 como prioridad nacional el

ordenamiento de la minería aurífera en Madre de Dios. Pero paralizar las concesiones mineras y dividir la región en zonas de minería y zonas excluidas de minería sólo parece tener un efecto placebo. “Ya tenemos el problema que mineros informales están invadiendo la nueva zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambopata”, cuenta Cordero. Brack decidió recurrir a un último recurso: el pasado 19 de febrero la Marina de Guerra del Perú, encargada de resguardar las vías fluviales de la Amazonia, destruyó 14 dragas que se encontraban en los ríos y prohibió su uso. Desde entonces los mineros de Madre de Dios se encuentran en pie de guerra contra el Ministerio del Ambiente y dos personas resultaron muertas durante los bloqueos de carreteras. Pero el problema no se resuelve en Madre de Dios. El oro producido en la selva de manera ilegal, o de manera legal pero no fiscalizada, ingresa al circuito comercial de oro para la exportación a través de varios intermediarios. Y este oro, según las estadísticas de exportación, se va mayormente a Suiza, Canadá y EEUU para ser fundido y comercializado como


/Mayo de 2011

Recursos naturales y geopolítica de la integración sudamericana L

insumo para algunas industrias o como depósitos de valor en los bancos. “Cuándo será que la prensa hará una campaña al estilo de los diamantes de sangre [en África] para que se deje de comprar oro que ha sido producido destruyendo la selva ? ”, exclamó Brack en conferencia de prensa el 10 de marzo. Oro verde Tal vez el ministro desconoce que ya existen intentos de producir oro a pequeña escala y de manera social y ecológicamente sostenible. Cinco días antes de que el gobierno peruano interviniera militarmente en Madre de Dios, en Londres tuvo lugar el lanzamiento del primer sello de comercio justo para el oro. Para obtener este sello, los mineros artesanales deben cumplir con estándares ambientales, sociales y laborales. Los primeros envíos de oro “ético” certificado provinieron de dos minas en Bolivia y Colombia. “También en el Perú hay asociaciones mineras que están en el proceso de certificación ética”, comenta Olinda Orozco, de la organización no gubernamental Red Social que se dedica al tema de la minería artesanal. Hasta ahora es oro proveniente de unas minas ubicadas en el desierto de los departamentos de Arequipa y Ayacucho, al sur del Perú, donde el costo ambiental de la producción aurífera es menor. Mientras en Londres los diarios especulan si en la boda real del 29 de abril el príncipe Guillermo entregará un anillo de oro ético a su novia, muchas parejas como Santos y Tintaya continuarán casándose con sortijas de oro producido a costa de la destrucción de la selva amazónica. .n

MONICA BRUCKMANN

a disputa global por los recursos naturales es uno de los elementos más marcantes de la dinámica del capitalismo contemporáneo y de su lógica de acumulación. América del Sur es un espacio importante de esta disputa, por la dimensión de las reservas de recursos estratégicos que posee y por su condición histórica de ser una región exportadora de materias primas. El alto grado de vulnerabilidad y dependencia de importaciones que Estados Unidos tiene en relación a un gran número de minerales que América Latina produce, y la creciente demanda china de estos recursos, muestran que la región tiene enormes condiciones de negociación y una oportunidad histórica para asumir soberanamente la gestión económica y científica de los recursos minerales que posee. Por la envergadura de estos objetivos y por la dimensión de los intereses en disputa, éste proyecto solo podrá avanzar si es asumido como una estrategia regional. América del Sur vive importantes procesos de integración regional que buscan superar el ámbito del intercambio comercial y la regulación tarifaria para promover una integración de largo plazo de carácter económico, político, cultural, educacional, de infraestructura, etc. En este contexto, se retoma el debate sobre el desarrollo, no solo en el ámbito nacional sino como proyecto regional. La discusión sobre temas claves como soberanía, recursos naturales e hidro-energéticos, preservación de la biodiversidad y los recursos bio-genéticos, la Amazonía como área de preservación y de disputa, se colocan en el centro del debate político en la compleja coyuntura latinoamericana contemporánea. Por su condición de país continental y amazónico, por la importancia relativa de su PIB y por su dimensión poblacional, Brasil desempeña un rol fundamental en el desarrollo de los procesos de integración en América del Sur. La consolidación de un liderazgo regional coloca a Brasil en una posición clave respecto a los intereses hegemónicos de Estados Unidos en el continente, creando un espacio complejo de intereses geopolíticos que se desdoblan en múltiples implicaciones económicas, políticas y sociales. La disputa global por los recursos naturales y su gestión económica y científica, abre un amplio campo de intereses en conflicto en la región evidenciando, por lo menos, dos proyectos en choque: la afirmación de la soberanía como base para el desarrollo nacional e integración regional y la reorganización de los intereses hegemónicos de Estados Unidos en el continente que encuentra en los tratados bilaterales de libre comercio uno de sus principales instrumentos para debilitar los primeros. La presente investigación (ver texto completo en: http://alainet.org/active/ 45772<=es) se propone contribuir a la construcción de una visión estratégica de los recursos naturales, específicamente de los minerales no combustibles, en la geopolítica de la integración latinoamericana y sudamericana, incorporando en el análisis los intereses en disputa en el continente. Estudiamos la problemática regional a partir de una visión global del capitalismo contemporáneo como construcción social y económica pero también como acumulación histórica. Este enfoque se articula a los esfuerzos de construir un paradigma de análisis político desde una perspectiva histórica de larga duración, al mismo tiempo que busca ofrecer subsidios para la elaboración de política públicas y la construcción de escenarios prospectivos. *DOCTORA EN CIENCIA POLÍTICA, INVESTIGADORA DE LA CÁTEDRA Y RED UNESCO/UNIVERSIDAD DE LAS NACIONES UNIDAS SOBRE ECONOMÍA GLOBAL Y DESARROLLO SUSTENTABLE-REGGEN.


/Mayo de 2011

Energía nuclear en debate

JOSÉ ELOSEGUI /NOTICIAS ALIADAS

E

l terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo en el oriente de Japón, con la consecuente crisis nuclear por las explosiones de los reactores de la central Fukushima I, en la ciudad de Okuma, han puesto en tela de juicio a nivel mundial la utilización de la energía atómica como alternativa a los combustibles fósiles. Aunque le pese al lobby empresarial nuclear a nivel internacional, el debate sobre la seguridad de la energía nuclear está instalado y las repercusiones políticas son incontables. América Latina, con sus seis centrales nucleares en Argentina, Brasil y México —a nivel mundial hay 442 en unos 30 países—, es un buen ejemplo de lo que está ocurriendo en diversas regiones del mundo. En Argentina las centrales nucleares generan el 6.2% del suministro eléctrico del país. Allí está en funcionamiento desde 1974 la planta nuclear Atucha I, en la ciudad de Lima, provincia de Buenos Aires. La segunda planta es la llamada Embalse, que funciona desde 1983 en la localidad Embalse Río Tercero, provincia de Córdoba, en el centro del país. Atucha II, que tuvo sus obras de construcción detenidas por más de 20 años y reiniciadas a mediados del 2007, empezaría a funcionar este año. Además, en diciembre del 2010 se confirmó la construcción de la cuarta central nuclear del país, Atucha III. Rubén Navarro, gerente de control de reactores de la Autoridad Regulatoria Nuclear argentina, dependiente del gobierno, dijo que las usinas de Atucha I y Embalse tienen “diferencias fundamentales” con las de Japón, tanto en su tecnología como en su localización, según información de varios medios argentinos. Para el especialista, la situación en el estado asiático no debería motivar medidas extraordinarias en las usinas de su país. Apuestan por energía nuclear En tanto, en Brasil, el presidente del Congreso José Sarney, del Partido del

Movimiento Democrático Brasileño, declaró a raíz de lo ocurrido en Japón con la central de Fukushima I que su país tiene que revisar su programa nuclear, analizar mejor el desarrollo de esa energía. En el país están operativas las centrales de Angra I (1985) y Angra II (2001), en el municipio de Angra dos Reis, en el oriental estado de Rio de Janeiro. Juntas proveen el 3.1% del suministro total de electricidad del país. Angra III empezó a ser construida el año pasado y el gobierno tiene prevista la instalación de otras tres plantas. La organización ecologista Greenpeace solicitó el 18 de marzo al gobierno de la presidenta Dilma Rousseff que suspenda su programa nuclear. La entidad manifestó su preocupación por la vida y la integridad física de los habitantes de Angra dos Reis y de todo Rio de Janeiro, y considera que la energía nuclear es una amenaza ambiental, social y económica muy grave. En contrapartida, demandó el uso de energías renovables. Informaciones periodísticas dieron cuenta que la

suspensión de la energía nuclear no estaba en los planes gubernamentales. A su turno, en México está la central nuclear Laguna Verde, ubicada en la localidad de Punta Limón, estado de Veracruz, en el sureste del país. Laguna Verde cuenta con dos generadores inaugurados en 1989 y 1995, y abastece el 4% del suministro eléctrico total del país. La planta es duramente cuestionada por organizaciones ambientalistas. El Grupo Antinuclear Madres Veracruzanas, por ejemplo, alegó que Laguna Verde es de las mismas características que Fukushima I y que su sistema de enfriamiento es similar al esa central japonesa. Lobbies en acción En Chile rige una Ley de Seguridad Nuclear, que permite el uso regulado de la energía atómica. En el país hay dos reactores nucleares experimentales o de investigación, en manos de la gubernamental Comisión Chilena de Energía Nuclear.


/Mayo de 2011

En los últimos seis meses la administración del presidente chileno Sebastián Piñera ha firmado acuerdos con los gobiernos de Francia y EEUU para cooperación en materia de energía nuclear. De hecho, fue uno de los temas más importantes de la agenda del presidente estadunidense Barack Obama en su visita a Chile el 21 de marzo. Diversas organizaciones sociales chilenas están preocupadas con el tema y se manifestaron varias veces en los últimos meses contra el uso de la energía nuclear en el país, por la amenaza ambiental y social que implica. Critican, además, el derrochador modelo energético nacional, basado en la importación de combustibles fósiles y en la hidráulica., porque no tiene en cuenta la sustentabilidad socioambiental y es decidido por las grandes corporaciones transnacionales. Eduardo Giesen, del Colectivo VientoSur de Chile, dijo a Noticias Aliadas que los acuerdos sobre energía nuclear firmados por su país con Francia y EEUU apuntan como fin último a la instalación de plantas nucleares en el territorio nacional. Esos convenios “están orientados a desarrollar esta energía dentro de la matriz energética, no tienen otros fines y nosotros lo denunciamos abiertamente”. Aunque fuentes gubernamentales afirman que no existe un programa nuclear y que no se planea instalar una planta de ese tipo, Giesen advirtió sobre el fuerte lobby nuclear existente en Chile a través de operadores ligados a grupos empresariales de EEUU, Francia y Rusia principalmente. En Uruguay está prohibida por ley la generación de energía nucleoeléctrica, pero actores políticos de diversos partidos están promoviendo su utilización, para lo cual se podría derogar la norma legal. Consultado por Noticias Aliadas, el activista Leonard Mattioli, de la organización ambientalista Red de Ecología Social-Amigos de la Tierra Uruguay, dijo que la “catástrofe de Fukushima I ha terminado por desmoronar las tres grandes mentiras de quienes apoyan la utilización de la energía nuclear: que es limpia, segura y barata”, más si se tiene en cuenta que el país asiático es el “paradigma de la alta

BRASIL

ARGENTINA

tecnología y la eficiencia”. El ambientalista destacó que la inseguridad de la energía atómica es evidente, llamó la atención por la amenaza de la radioactividad y manifestó su preocupación por los riesgos para la vida y la producción de alimentos que la industria nuclear tiene. Pero otros países de la región, como Perú y Venezuela, no tienen previsto por el momento el desarrollo de la energía nuclear. El presidente peruano Alan García planteó el 17 de marzo declarar a su país territorio libre de energía atómica.

Consideró que el Perú, además de ser un país sísmico, tiene suficientes recursos hidroenergéticos, gasíferos y petroleros como para comprometerse a no tener energía nuclear por los próximos 100 años por lo menos. Por su parte, el mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, ordenó el 15 de marzo el congelamiento de los planes preliminares de energía nuclear del país debido a la crisis ocurrida en Japón. Para Chávez, “no hay la menor duda de que esa situación altera fuertemente los planes de desarrollo de la energía nuclear en el mundo”. .n


/Mayo de 2011

DARÍO ARENAS

El 40% del territorio está pedido en concesión para minería

Las venas abiertas de Colombia D

urante el último periodo del gobierno de Uribe se otorgaron la mayor cantidad de títulos mineros en la historia de Colombia y se ahondaron los privilegios de la gran minería transnacional. Ahora, bajo el mandato de Santos –como seguramente ocurrirá con el resto del paquete neoliberal heredado- se pretende profundizar y llevar a sus más altas dimensiones. El 40% del territorio colombiano está pedido en concesión para proyectos mineros. De las 114 millones de hectáreas que conforman el total del suelo patrio, cerca de 45 millones están solicitadas para este fin, aproximadamente la superficie de los 4 departamentos más grandes del país (Amazonas, Vichada, Caquetá y Meta), más todo el Eje Cafetero, Cundinamarca y el Valle del Cauca juntos. Esto en un país, en el que gracias al maremágnum de reformas aperturistas iniciadas en los años 90, el agro y la industria sufrieron un rezago descomunal, y donde se estima que hay disponibles y no cultivadas apenas 4,97 millones de hectáreas para agricultura (1). Esta es la proporción de la política minera plasmada en el código de minas de 2001 ratificada en la reforma de 2010. Durante el último periodo del gobierno de Uribe se otorgaron la mayor cantidad de títulos mineros en la historia de Colombia y se ahondaron los privilegios de la gran minería transnacional. Ahora, bajo el mandato de Santos –como seguramente ocurrirá con el resto del paquete neoliberal heredado- se pretende profundizar y llevar a sus más altas dimensiones. La expansión de la actividad extractiva en Colombia responde, como la gran mayoría de las políticas de nuestros gobiernos, no a las autenticas necesidades del pueblo colombiano sino a intereses ajenos a ellos. Con la economía de las grandes potencias tremendamente debilitada gracias a las recurrentes crisis que el sistema capitalista provoca, con la necesidad de

buscar nuevamente riqueza sustentada en los metales preciosos y con precios del oro llegando a sus máximos registros históricos, superando los 1400 dólares la onza, son naturales las expediciones que nuevamente emprenden a países que como Colombia, poseen estos preciados recursos. El capital financiero internacional bajo esta lógica se ha fortalecido y ha asumido un rol preponderante, llegando a tener inversiones en la industria minera mundial del orden de los 84.327 millones de dólares entre 2000 y 2006, a través de proveedores de fondos tan poderosos como JP Morgan, Citigroup, HSBC Holdings, ING, entre otros grandes conglomerados financieros del mundo (2). Prueba de la desesperada sed de las potencias por los recursos mineroenergéticos, reflejada en las invasiones a Irak y Afganistán, es el aprovechamiento de circunstancias coyunturales como la de Libia. Bajo pretextos humanitarios, Estados Unidos retoma posiciones de mando y control sobre los recursos de una zona que ha sido esquiva a sus mandatos. Teniendo en cuenta que en los últimos años ha habido un abrumador ingreso de compañías mineras canadienses a Colombia y que estas

representan el 75% de la industria minera mundial, no es de extrañar el alborozo del actual ministro de hacienda Juan Carlos Echeverry, quien notablemente cómodo con el tipo de relaciones que Colombia posee con el mundo, expresara hace poco: “los españoles descubrieron América hace 500 años y los canadienses descubrieron Colombia hace 10. De lo que estamos muy contentos” (3). Muestras tangibles de la actitud de la alta clase dirigente de nuestro país frente a las grandes potencias y sus intereses. Cabría anotar que solo le restó manifestar al ministro en su arrebato de honestidad brutal, que hace más de un siglo y bajo condiciones similares también nos habían “descubierto” los gringos. Amagá, El Hoyo-Patía, Suarez, Marmato, La Jagua de Ibirico, Anaime, Quinchía, Tabaco, Pore, Taraira, Socha, Montelibano, Sardinata, Remedios, Buenos Aires, la serranía de San Lucas, Condoto, Cajamarca, son entre muchas otras poblaciones colombianas, el ejemplo del modelo minero que se intenta imponer en nuestro país. Han sido en unos casos, damnificados por las leoninas condiciones laborales fijadas por las transnacionales y testigos de primera mano del abandono estatal, del asfixiamiento y acoso a la minería


/Mayo de 2011

País en concesión E

tradicional local, y en otros, se pretende que sean víctimas de la destrucción de su medio ambiente, del desplazamiento de sus poblaciones, del despojo de su hábitat, del arrebatamiento de sus tradiciones y de la expropiación de sus trabajos, su vida y su historia. Todas estas comunidades tienen suficientes razones para sentirse desamparadas por el Estado y poseen el justo y legitimo derecho a rebelarse en contra de las políticas del acoso y el saqueo agenciadas por quienes en teoría deberían defender sus intereses. Esta es la verdadera cara de la locomotora minera de Santos. Vagones llenos de gabelas y privilegios para las compañías transnacionales, colmados de exenciones tributarias, descuentos y facilidades enormes para realizar negocios de acuerdo a su conveniencia con formidables márgenes de ganancia, todo ello contrastado con la persecución rastrera a los mineros pequeños y tradicionales de nuestro país. La profundización de la confianza inversionista intenta sumir a una enorme porción de nuestra población en una funesta lógica, inexpugnable según nuestros dirigentes, en la que la inserción en el mercado mundial de economías tan languidecidas y debilitadas como la colombiana debe darse a cualquier costo, sin importar las asimetrías que existan, el lugar rezagado que en él juguemos, y el deterioro que

este tipo de políticas generen en nuestra población. Asistimos a un escenario desolador y apabullante. El prurito por la reprimarizacion de nuestra economía no tiene parangón alguno, las políticas del despojo, expoliación y pillaje lejos de combatirse se han institucionalizado y se les ha brindado un cariz de progreso y bienestar, cuando en realidad anidan en su interior las mismas formulas que han perpetuado el atraso y el subdesarrollo en nuestro país. Las venas de Colombia siguen abiertas. Las cicatrices que aun conservamos en la piel de nuestra nación, como las de la lucha por nuestra independencia hace 200 años, nos demuestran que los pueblos cuando se resuelven pueden vencer las políticas entreguistas y los regímenes antipatrióticos, y pueden decidir por sí mismos su destino. La concientización, la organización y la movilización deberán marcar el camino para que, al igual que en el caso de la victoria en Santurbán, derrotemos la sumisa entrega de nuestros recursos y podamos descarrilar definitivamente la nefasta locomotora minera de Santos..n (1) Aurelio Suárez Montoya, Tribuna Roja Nº 111, enero 13 de 2011 (2) Financing Global Mining: The Complete Picture (ed. Rob Morrison), pfi market intelligence, Thomson’s 2007 (3) Calgary (Canadá), 27 Marzo (Agencia EFE)

n su discurso de toma de posesión el 7 de agosto pasado, el presidente Juan Manuel Santos fue enfático al asegurar que en su gobierno serían cinco las locomotoras que halarían a Colombia hacia el progreso: vivienda, infraestructura, minería, agricultura e innovación. En opinión de expertos ambientalistas, en el caso de la minería, el correr hacia el progreso está dejando debajo de los rieles la sostenibilidad ambiental y cultural del país. Colombia conserva las mayores reservas carboníferas de América Latina, además de poseer oro, plata, platino, esmeraldas, níquel, cobre, hierro, manganeso, plomo, zinc y titanio. “Esta riqueza, unida a las favorables leyes que rigen esta actividad, determina que en la actualidad el 40% del territorio colombiano está solicitado en concesión para hacer minería”, asegura Mario Valencia, de la Red Colombiana frente a la Gran Minería Transnacional (RECLAME). Las cifras oficiales confirman que la explotación de minerales es el gran negocio en Colombia. Autoridades de Comercio Exterior han revelado que más del 85% de la inversión extranjera en el país se encuentra en la extracción de minerales e hidrocarburos. Las estadísticas muestran que entre el 2002 y el 2009 la inversión en este rubro se elevó de US$466 millones a $3 millardos y las exportaciones crecieron de $2.8 millardos a $8.1 millardos. “Las leyes priorizan sólo lo económico”, asegura Juana Díaz, vocera de la Oficina de Territorios y Biodiversidad de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC). “En el 2001 se reformó el Código de Minas con la ley 685 que resultó muy exitosa para las grandes empresas. Se pierde entonces la primacía de la propiedad estatal sobre los territorios mineros y la inclusión de elementos de protección ambiental y el reconocimiento de zonas artesanales mineras. Asimismo, coloca unas exigencias que sólo pueden cumplir las empresas multinacionales en cuanto a infraestructura, a maquinaria y algo más grave aún, eliminó el requisito de licencia ambiental para la exploración”.


/Mayo de 2011

El declive de las democracias

C

omo explica el escritor Samuel Huntington en su libro The Third Wave, el mundo ha pasado por tres olas de desestabilización y democratización. Una ola de democratización es un conjunto de transiciones de un régimen no democrático a otro democrático, que ocurren en determinado período de tiempo y superan a las transiciones en dirección opuesta durante ese período y también implica la liberalización o la democratización parcial de sistemas políticos. En el mundo moderno se habrían producido tres olas de democratización y cada una de ellas ha afectado a un número escaso de países y durante su transcurso algunos regímenes de transición fueron en una dirección no democrática; pero no todas las transiciones hacia la democracia ocurren durante las olas democráticas. Tercera ola de democratización (1973- 1990) En su análisis de la “tercera ola” mundial de las transiciones a la democracia, (iniciada en 1974 con la Revolución de los Claveles en Portugal), Samuel Huntington observó que las posibilidades de democratización aumentaron cuando estos países salieron de la pobreza y alcanzaron un nivel intermedio de desarrollo socioeconómico, momento en el cual ingresaron en una “zona de transición política”. Las dos primeras olas de democratización fueron seguidas por una ola inversa, con países como Brasil; España, Portugal, Grecia, Granada, Brasil y Panamá que hicieron una posterior transición hacia la democracia y que fue completado en la Década de los 90 con la democratización de los países de la extinta URSS

GERMÁN GORRAIZ LÓPEZ /ALAI

y Sudáfrica. Lo más importante de esta ola es que fue un momento universal (en 15 años la ola se trasladó por Europa del Sur, saltó a Latinoamérica, se trasladó a Asia y diezmó las dictaduras del bloque soviético.) Así, en 1974, ocho de los 10 países sudamericanos tenias gobiernos no democráticos, en 1990, 9 tenían gobiernos democráticamente electos y según Freedom House, el 32% de la población mundial vivía en países libres y en 1990, cerca del 39%, disminuyendo por primera vez la cantidad absoluta de estados autoritarios. Nueva ola desestabilizadora mundial (2009-2019) Sin embargo, las últimas elecciones democráticas del último quinquenio han estado marcadas por acusaciones inequívocas de fraude electoral (Irán y Afganistán), aislamiento internacional de los gobiernos democráticamente elegidos (Bolivia, Venezuela, Ecuador, Nicaragua y Franja de Gaza); pseudo-elecciones para intentar edulcorar “golpes de mano blandos” (Honduras) y aceptación por la comunidad internacional de sistemas políticos devenidos en meros gobiernos autocráticos (Bielorrusia, Georgia y Rusia). De todo ello, se deduce que estaríamos en vísperas de la irrupción en el escenario geopolítico de la nueva ola desestabilizadora mundial originada por el ocaso de la economía global; la pérdida de credibilidad democrática de incontables gobiernos de países del Tercer Mundo; el declive de EEUU como primera potencia mundial y la irrupción de nuevos actores en el marco geopolítico mundial como China, Rusia, India y Brasil y que tendrían a Honduras, Paraguay, Grecia, Turquía,


/Mayo de 2011

Egipto y Paquistán como paradigmas de los llamados “golpes virtuales o postmodernos” que protagonizarán la próxima década en el nuevo escenario geopolítico mundial. Europa El mandato de la nueva Eurocámara de tinte claramente conservadora estará condicionado por el severo impacto de la crisis económica global, dibujándose un nuevo escenario a cinco años en el que podríamos asistir al inicio de la desmembración de la actual Unión Europea. En el supuesto de vencer Sarkozy en las próximas elecciones Presidenciales y legislativas del 2012 y de superar su evidente falta de empatía con Angela Merkel, podríamos asistir en el horizonte del 2.014 al inicio de la desmembración de la actual Unión Europea y su sustitución por una constelación de países satélites dentro de la órbita de la alianza franco-germana (la llamada Europa de los Doce), debido a las exigencias del BCE de cumplir con el límite marcado para el Déficit Público del 3% para el 2012, (empresa harto complicada para países como Portugal, Italia, Grecia, España e Irlanda con tasas muy superiores a la media de la eurozona (4%) y que superan con holgura el primitivo listón fijado por el BCE, (3%)), estando Grecia, Portugal, Irlanda y España en la situación más delicada al tener la mayor tasa de déficit público de la zona euro a lo largo de 2010, por lo que corren el riesgo de ser excluidos de la eurozona en el 2.014. En el caso de Grecia, asistiríamos a escenarios de devaluación de su moneda (dracma griego); alta inflación, galopante tasa de paro y deuda desbocada, radicalización de los otrora aburguesados y sumisos sindicatos de clase, (Confederación General Griega del Trabajo GSEE) la ruptura del diálogo social con la patronal, frecuentes estallidos de conflictividad laboral, el auge de partidos como el Partido Comunista Griego (KKE) y la aparición mediática de los grupos antiglobalización que utilizando tácticas de guerrilla urbana pondrán en jaque a las fuerzas de seguridad y ante esta situación y sin el paraguas protector de la UE, no sería descartable en el horizonte del 2015 la re edición del golpe de los Coroneles (1967), (que sería un episodio local dentro de un nuevo escenario de Guerra Fría entre EEUU y Rusia ) y que contaría con el apoyo encubierto de EEUU dentro de su objetivo de anular los esfuerzos de Rusia para fagocitar países europeos. Turquía La ilegalización por el Tribunal Constitucional de Turquía del pro kurdo Partido de la Sociedad Democrática (DTP), ha roto el clima de acercamiento propiciado por Ankara para poner fin al conflicto kurdo y podría ser el desencadenante de una nueva espiral de violencia, lo que aunado con un agravamiento de la crisis económica asistiríamos a escenarios de alta inflación, galopante tasa de paro y deuda desbocada y la radicalización y auge del TKP (Partido Comunista de Turquía). Ante esta situación y sin el paraguas protector de la UE (al posponer “sine die” su inclusión como Miembro de pleno de derecho ), y con los antecedentes del polémico

caso Ergenekon, en el que numerosas personas -incluyendo funcionarios y miembros del ejército- están acusados y siendo juzgados por planear varios asesinatos y atentados selectivos con el objetivo de instigar un golpe de estado contra el gobierno del AKP es previsible que el ejército protagonice un nuevo golpe “virtual” o “posmoderno”,que acabaría con el mandato del Primer Ministro Erdogan, (rememorando el ‘golpe blando’ de 1997, cuando los generales arrebataron el poder al Gobierno del presidente Necmettin Erbakanpor, quien lideraba una coalición Islamista) y surgiendo posteriormente un sistema político fracturado que producirá una serie de coaliciones de gobierno inestables en el parlamento turco. Rusia En Rusia se podría estar fraguando un “Golpe de mano” del oficialismo ruso contra Putin antes de las Presidenciales del 2.012: Las reformas para aligerar la Burocracia y sus fracasos en materia económica (los malos resultados agrícolas obligarían a la importación masiva de cereales lo que originaría una desbocada inflación que rondaría los dos dígitos) y podrían hacerlo impopular en el partido y en la Administración y podrían debilitar el otrora poder omnímodo de Putin y permitir que se fraguara una conspiración para apartarlo del poder (alentada por oligarcas defenestrados por Putin y obligados a exiliarse en el extranjero), siendo acusado de los mismos cargos con los que decapitó a la camarilla oligarca: abuso de poder, corrupción y delitos fiscales.

Caso de ser finiquitado políticamente Putin, asistiríamos a la reaparición de la Troika para evitar la acumulación de un poder autocrático y al regreso de la Doctrina Brézhnev (también llamada doctrina de la soberanía limitada), doctrina que instauró que Rusia tiene derecho a intervenir ( incluso militarmente) en asuntos internos de los países de su área de influencia, lo que originaría un movimiento centrípeto que podría reeditar el ahora olvidado mapa de la extinta URSS. Europa del Este El resto de países no integrados en dicha órbita (Países del Centro y Este de Europa, integrantes de la llamada Europa emergente), sufrirán con especial crudeza los efectos de la tormenta económica al no contar con el paraguas protector


/Mayo de 2011

del euro y se verán obligados a depreciar sucesivamente sus monedas, reducir masivamente su crecimiento, a aumentar espectacularmente su Deuda externa y padecerán alarmantes problemas de liquidez (con agujeros financieros estimados en 90.000 millones de euros para el 2009 y 50.000 millones para el 2010) y deberán retornar a economías autárquicas tras sufrir masivas migraciones interiores al descartar la CE la modificación de las reglas para la adopción del euro en la Unión Europea (UE) y así poder acelerar la adhesión de los Estados miembros del centro y este de Europa e igualmente, deberán proceder a la reapertura de abandonadas minas de carbón y obsoletas centrales nucleares para evitar depender energéticamente de una Rusia que conjugando hábilmente el chantaje energético, la amenaza nuclear disuasoria, la intervención militar quirúrgica y la desestabilización de gobiernos vecinos “non gratos” irá fagocitando a la mayoría de estos países (Letonia, Estonia, Lituania, Georgia, Bielorrusia, Moldavia, Armenia, Azerbaiyán y Ucrania) abandonados a su suerte por la Unión Europea en aras de asegurarse el abastecimiento energético de gas y petróleo rusos. Iberoamérica

EEUU se verá obligado a prestar una atención especial al tradicionalmente considerado “patio trasero” tras la firma por parte de Raúl Castro y Mendeiev del Pacto por la Amistad y Cooperación con Cuba aprovechando la miopía política de una Administración Bush obsesionada con el Eje del Mal, (reviviendo el pacto secreto firmado por Raúl Castro y Jruschov - Moscú, 1960). En caso de no llegarse a rápidos acuerdos sobre el levantamiento del embargo a Cuba, podríamos asistir a la firma de un tratado de colaboración militar de Cuba con Rusia que incluiría la instalación de una base de Radares en la abandonada base militar de Lourdes para escuchar cómodamente los susurros de Washington y la instalación de bases dotadas con misiles Iskander y con aviones estratégicos con armas nucleares (los temibles TU-160 conocidos en Occidente como BlackJak), complementado con la instalación de una megabase naval y logística en Venezuela. Por su parte, EEUU procedería a la gestación de la

Alianza Panamericana (rememorando la Alianza para el Progreso - Puerto Rico, 1961), liderada por México, Brasil y Argentina y que conjugaría la ayuda económica y la firma de acuerdos preferenciales con los países ideológicamente afines con los intentos de desestabilización de los Gobiernos de corte populista-progresista (Cuba, Nicaragua, Ecuador, Bolivia y Venezuela). Caso de producirse un estrangulamiento de la producción mundial del crudo en el horizonte del 2.015, asistiríamos a una psicosis de desabastecimiento y al incremento espectacular del precio del crudo que tendrá su reflejo en un salvaje encarecimiento de los fletes de transporte y de los fertilizantes agrícolas, lo que aunado con la aplicación de restricciones a la exportación de los principales productores mundiales para asegurar su autoabastecimiento terminaría por producir el desabastecimiento de los mercados mundiales, el incremento de los precios hasta niveles estratosféricos y la consecuente crisis alimentaria mundial, afectando especialmente a las Antillas, México, América Central, Bolivia, Paraguay, Colombia y Venezuela. Ello, unido a la agudización de la crisis económica dará lugar a frecuentes estallidos de conflictividad social y a la expansión de ideologías izquierdistas en todo Latinoamérica por lo que EEUU podría estrechar lazos comerciales y militares con el presidente dominicano, Leonel Fernández Reyna ante el peligro de contagio mimético de los ideales revolucionarios cubanos, (reviviendo el apoyo de Kennedy a Balaguer en 1.962 ante el temor de la irrupción de un brote castrista en la República Dominicana), siendo además probable una clara regresión de las libertades democráticas y un posible regreso a escenarios ya superados de guerrillas revolucionarias (Perú, Nicaragua, Colombia y Bolivia) y olvidadas dictaduras militares, (teniendo a Honduras y Paraguay como paradigmas de los llamados golpes virtuales o postmodernos) y en Panamá, no sería descartable una reafirmación del sentimiento soberanista panameño sobre el canal, por lo que podríamos asistir a la reedición de la Crisis de Panamá de 1.964 con el envío de tropas estadounidenses que asegurarían el control del canal, recuperando de paso la soberanía del mismo traspasada a Panamá en 1.979. Oriente Próximo La posible resolución del contencioso nuclear con Irán, plantea el problema de la pertinencia de las opciones estratégicas del grupo de los Estados árabes situados en la órbita estadounidense. Así, Egipto habría renunciado a la opción nuclear y entregado el control del espacio estratégico de Oriente Próximo a la aviación israelí a cambio de una ayuda anual de mil millones de dólares. En desequilibrio frente a la opinión pública, se ha autorizado a Egipto y Jordania para que a finales de año emprendan la producción nuclear para uso civil bajo control estadounidense, con lo que han acumulado un retraso tecnológico de cincuenta años con respecto a su vecino israelí que se vería compensado con el incremento de la ayuda económica de EEUU hasta alcanzar los 2.000 millones de $ anuales. Sin embargo, un nuevo e inquietante elemento aparece en el horizonte que podría desequilibrar el frágil equilibrio


/Mayo de 2011

geopolítico de la zona y sería el Riesgo de un “Golpe de mano” del oficialismo ruso contra Putin antes de las Presidenciales del 2.012. Caso de ser finiquitado políticamente Putin, asistiríamos a la reaparición de la Troika para evitar la acumulación de un poder autocrático y al regreso de la Doctrina Brézhnev (también llamada doctrina de la soberanía limitada), doctrina que instauró que Rusia tiene derecho a intervenir (incluso militarmente) en asuntos internos de los países de su área de influencia y en los escenarios árabes y africanos, su acción se orientará a la ayuda de los grupos islamistas y su apoyo a los regímenes nacionalistas en su lucha contra la presencia occidental en el continente africano, basada en el pathos anticolonial, en los proyectos de cooperación económica y en la creciente cooperación militar. Por otra parte, la carestía de productos agrícolas básicos para la alimentación (trigo, maíz, arroz, sorgo y mijo) y el incremento bestial de dichos productos en los mercados mundiales que tuvo su punta de iceberg en el 2.007 e irá presumiblemente “in crescendo” a lo largo de la próxima década hasta desembocar en una crisis alimentaria mundial que afectaría especialmente a Egipto en forma de desorbitante carestía y escasez de alimentos básicos, que en el caso egipcio vendría agravado por su desarrollo económico suicida al favorecer crecimientos desmesurados de macrourbes y megacomplejos turísticos y la consiguiente reducción de superficie dedicada al cultivo agrícola.

escudo protector completado con la culminación del Muro de Cisjordania (que incluiría aproximadamente el 10% del territorio de Cisjordania, incluida Jerusalén Este) y el control de los Altos del Golán, contando Israel con EEUU y su fuerza nuclear disuasoria como únicos aliados y quedando el pueblo palestino condenado a la Diáspora y al ostracismo político internacional. Irán Irán ha adquirido una dimensión de potencia regional gracias a la política errática de Estados Unidos en Iraq, (fruto de la miopía política de la Administración Bush obsesionada con el Eje del Mal) al eliminar a sus rivales ideológicos, los radicales talibanes suníes y a Sadam Husein con el subsiguiente vacío de poder en la zona. y ha reafirmado su derecho inalienable a la nuclearización. Tras las presiones diplomáticas del sexteto de mediadores internacionales (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia, Alemania y China), “podría alcanzarse un acuerdo para que Teherán enriquezca su uranio hasta el 20% en Rusia antes de que el Estado francés lo transforme en combustible para el reactor iraní, siempre bajo control de la OIEA”, acuerdo que permitiría un mejor control del stock de uranio enriquecido de Irán, (fuente de inquietud entre los occidentales e Israel, que temen que Teherán lo pueda emplear para fabricar armas atómicas, acusaciones que Irán ha desmentido siempre categóricamente) y lograría la resolución del contencioso nuclear de EEUU con Irán y el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, tras lograr que se reconozca su lugar en el concierto regional recuperando el papel de “gendarme del Golfo “ que los estadounidenses confiaron al Sha de Persia e incrementando la cooperación con EEUU relativa a la seguridad en Irak y Afganistán. Irak-Afganistán

Ello podría provocar violentos estallidos sociales y un posible golpe de estado (rememorando a Nasser (1.956) y posterior estrechamiento de relaciones ruso-egipcias que convertirían a Egipto en el portaaviones continental de Rusia y aunado con la extensión de su área de influencia al resto de países árabes que circundan a Israel (Siria, Líbano, Palestina y Jordania), gestaría la semilla de un nuevo movimiento panislamista que podría terminar por reeditar en la próxima década la Guerra de los Siete Días y caso de consumarse el enfrentamiento bélico y una nueva victoria militar israelí, asistiríamos a la anexión de la Franja de Gaza, del Sur del Líbano y del Sinaí, quedando Israel parapetado en un

Gradual retirada de tropas de Irak que deberá esperar al 2011 para su culminación e inicio de un posterior y complejo proceso de reparto de las áreas de influencia entre Turquía, Siria, Arabia Saudí e Irán hasta desembocar en un Gobierno de Coalición integrado por representantes kurdos, suníes y chiítas que derivará finalmente en la aparición de un radical movimiento panislamista que utilizará el arma del petróleo para estrangular las economías occidentales. Notable incremento de tropas de EEUU en Afganistán, debido a la ampliación del área de influencia talibán: El Pentágono baraja abandonar definitivamente Irak y trasladar los 50.000 soldados allí concentrados a Afganistán en la primavera del 2011, lo que augura la segura intensificación del conflicto afgano para el próximo verano. Según señala el último informe del Consejo Internacional de Seguridad y Desarrollo (ICOS), la insurgencia talibán habría conseguido una presencia permanente en el 72% del territorio de Afganistán, (lo que representa un aumento del 18% con respecto a noviembre de 2007) y se acercarían a la capital Kabul, habiendo establecido los talibanes una especie de gobierno «de facto» en algunas ciudades y pueblos afganos y la CIA contaría con informes confidenciales que confirmarían


/Mayo de 2011

el inicio de la ayuda militar rusa (asesores militares, logística e información de los satélites- espías) a las milicias talibanes de Afganistán en su lucha contra las fuerzas de la NATO allí desplegadas, con el objetivo de alargar el conflicto y aliado con la falta de liquidez monetaria de los aliados europeos lograr su gradual retirada de Afganistán y dejar en soledad a EEUU, lo que podría derivar en una peligrosa “vietnamización” del conflicto e implicaría crecientes dificultades para conseguir la aprobación de los Presupuestos en el Congreso. El actual presidente de Afganistán Hamid Karzai, sería acusado por EEUU de tibieza en la lucha contra los talibanes, existiendo informes de la CIA que podrían involucrarle en la gestación de un Gobierno de Coalición afgano entre los pastunes y talibanes y que implicarían la salida de las tropas de EEUU, por lo que no sería descartable la creación de un ambiente propicio al golpe de Estado y el posterior derrocamiento y asesinato de Karzai, reviviendo uno de los aspectos más oscuros de la política exterior de Kennedy (el derrocamiento y asesinato del presidente survietnamita Diem (1963)y el posterior incremento de su apoyo militar a Vietnam, acelerando la escalada que llevaría a los Estados Unidos a un callejón sin salida. Penúltimo Golpe de Estado en Pakistán A pesar de los intermitentes períodos democráticos, Pakistán posee una larga historia de dictaduras militares, siendo el general Musharraf el penúltimo representante (1999-2008). de esta endémica casta militar paquistaní siempre supeditada a los dictados de la Administración USA, siendo sustituido en las Elecciones Presidenciales del 2008 por Zardari, viudo de Benazir Nhuto. Sin embargo, las acusaciones de corrupción, chantaje e inducción al asesinato por lo que cumplió condena, le invalida para la campaña de la Administración USA de recuperación de la credibilidad democrática en países como Paquistán y Afganistán, lo que unido a las acusaciones de tibieza en la lucha contra Al Qaeda para lograr desbaratar “las redes terroristas en Pakistán y para degradar cualquier habilidad que tengan para planear y lanzar ataques terroristas internacionales” y el

escaso entusiasmo de Zardari por “fortalecer las capacidades de contrainsurgencia de Islamabad”, hacen predecir un incierto futuro para él, no siendo descartable un golpe de Estado auspiciado por la CIA aunado con el Incremento de la tensión en Cachemira, pues es previsible que el incremento del conflicto militar en Afganistán por parte de EEUU tenga repercusiones en la vecina Cachemira y tras la repetición de cruentos atentados terroristas como el de Bombay, la tensión entre India y Paquistán podría incrementarse y dar lugar a un nuevo enfrentamiento armado en Cachemira ( con el riesgo añadido de la posible utilización de misiles con carga nuclear). África En África, asistiremos a la Aparición de un movimiento panislamista que abarcará todos los países árabes de la fachada mediterránea y Cuerno de África y que utilizará el arma del petróleo y gas natural para estrangular las economías occidentales y financiar el acoso terrorista al infiel, logrando de paso la anexión de obsoletas plazas coloniales (Ceuta y Melilla) unido a la concatenación de desastres y hambrunas en el África Subsahariana, pues la inevitable contracción de la demanda de materias primas debido a la severa crisis económica global conllevará el estrangulamiento de sus exportaciones y la depreciación generalizada de sus monedas. Ésto, que unido al avance inexorable de los desiertos e inusuales desastres naturales originará éxodos masivos de población, alternándose repetidas hambrunas con virulentas epidemias que asolarán buena parte del África negra, y continuación de los enémicos conflictos tribales y rutinarios golpes de Estado, que favorecerán la actual política de esquilmación de los recursos naturales del subcontinente subsahariano por parte de EEUU, UE, Rusia y China (especialmente uranio, platino, cobalto, manganeso, oro y diamantes además del mediático coltán, especie de piedra filosofal para el desarrollo de las tecnologías del futuro como la telefonía móvil, ordenadores, videojuegos, armas inteligentes, implantes médicos, industria aeroespacial y levitación magnética.n


/Mayo de 2011

Esclavitud sexual invisible

SABINA ZACCARO

El escándalo sexual del primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, concentró la atención del público en un grupo de

jóvenes trabajadoras sexuales, pero son decenas de miles las víctimas de trata de personas en este país. Una jueza de Milán dictaminó que habrá un juicio contra el primer ministro por prostitución de menores. La fiscalía investigan a Berlusconi haberle pagado a Karima el Mahrug para mantener relaciones sexuales el año pasado, antes de que la adolescente marroquí cumpliera 18 años. Son 14 las jóvenes involucradas en el caso. Muchas de ellas son inmigrantes que viven en apartamentos a las afueras de Milán. Esas muchachas son la cara exterior de una forma de esclavitud invisible, la prostitución. Por lo menos 50.000 víctimas de trata de personas recibieron protección y asistencia entre 2000 y 2008, según un informe de 2010 del capítulo italiano de la organización Save the Children. Eran 4.466 los menores inmigrantes sin acompañante que venían de Afganistán, Bangladesh, Egipto y Rumania. La mayoría de las personas explotadas sexualmente son inmigrantes sin documentos nacionales en regla procedentes de diversos países que tienen entre 15 y 18 años. “Cuando comenzamos a trabajar en los años 90, la mayoría procedían de los países de Europa oriental, Albania, Rumania y Moldavia”, dijo la fundadora del Comité para los Derechos Civiles de las Prostitutas, Carla Corso, cuya organización trabaja con víctimas de esclavitud y explotación sexual en el noreste de Italia. “En la actualidad siguen viniendo de Rumania, pero también de Nigeria y Colombia. También hay cada vez más chinas en las calles de noche, pero es muy difícil ponerse en contacto con ellas porque pertenecen a un comunidad bastante inaccesible”, explicó. “Desde que Rumania se incorporó a la Unión Europea, la cantidad de rumanas explotadas sexualmente en los programas de protección disminuyó de forma drástica”, dijo la

investigadora Emiliana Baldoni. “Es difícil para las asistentes sociales entrar en contacto con las víctimas y ayudarlas a salir, Las organizaciones de derechos humanos estudian el asunto”. Pero algunas víctimas lograron reunir fuerzas para denunciar a los explotadores.“Las mujeres que colaboran con la policía pueden acceder a programas de protección social y obtener un permiso de residencia por un año. Es el punto de partida para una nueva vida”, dijo Corso. La trata de personas se volvió más sutil en los últimos años, indicó Baldoni.“Las estrategias de coerción son cada vez más sutiles y sofisticadas. Formas extremas de intimidación, secuestro, violencia física y violación son menos frecuentes que en el pasado. Ahora las víctimas son sometidas mediante un comportamiento engañoso, chantajeadas y manipuladas afectiva y psicológicamente, que ellas mismas no suelen identificar como tal”, explicó. El gobierno de Berlusconi endureció en 2008 la ley contra la prostitución, que ahora prevé penas y cárcel tanto para prostitutas callejeras y clientes. Las organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres sostienen que la norma sólo empeora la condición de esclavitud invisible, lo que permite a los delincuentes trabajar en apartamentos sin interferencia de la policía. “El gobierno aprobó leyes agresivas y represivas para combatir la prostitución callejera”, dijo Corso a IPS. “Pero está bien que frecuenten los pasillos del poder. Sigue siendo un país con doble moral, de día debes tener un comportamiento intachable, pero de noche puedes hacer lo que quieras y alegar que es ‘privado’”, se lamentó. “Las compañeras de fiesta sufren tanto como las prostitutas callejeras, víctimas de un sistema que las obliga a pasar por la cama de hombres poderosos para tener éxito”, explicó. “La única diferencia es que las primeras venden su cuerpo para comprar carteras Prada, mientras sus compañeras de la calle lo hacen para comprar comida”, añadió Corso. .n


/Mayo de 2011

Todo es de acuerdo al color del cristal con que se mira…

La “inmoralidad de la

riqueza mal habida”

E

s ya algo bastante frecuente presentar por los medios masivos de comunicación a algún encumbrado delincuente en el momento que cae detenido, y hacer de él una crítica feroz. Pero la crítica –si es que así puede llamársela– no pasa de ser una retahíla moralista y recriminatoria, recordatoria de lo que “no debe hacerse”, de lo que “está mal”, de lo “inmoral” en juego. Ante la detención de, por ejemplo, algún capo de un cartel del narcotráfico, pasó a ser ya moneda corriente mostrarlo esposado con cara de circunstancia, dando a conocer inmediatamente, entre otras cosas, su(s) mansión(es), el modo en que vive, sus vehículos de lujo y sus anillos de seguridad como un mensaje insultante, una falta de decoro, un atentado a los principios éticos. “¡¿Cómo alguien traficando con sustancias prohibidas puede vivir con ese lujo?!”. La indignación no demora ni un instante en aparecer, y sin dudas, contagiosa como todos estos productos de la psicología colectiva, no tarda en irradiarse y dejar huella. Incluso no sólo es ya común mostrar, luego de su captura, a algún maleante y toda la parafernalia de lujo que lo rodea; ya comienza a ser algo más o menos corriente presentarlo en cualquier momento como parte de un paisaje social natural. En otros términos: un mafioso con un buen capital ya va teniendo espacio en los medios de comunicación, los que no se casan de hacer un panegírico

MARCELO COLUSSI

de su fortuna. Claro que –esa es la gran diferencia aún– la misma no es aún encomiable, no se ha ganado (todavía) el respeto del colectivo. Y ahí viene nuestra pregunta insidiosa: ¿por qué? Preguntémoslo de otra manera: ¿por qué un vendedor de cocaína –habitualmente un latinoamericano, nunca un primermundista (¿pero quién la vende en Estados Unidos y Europa? ¿No hay “blanquitos” en el negocio?)– es un mafioso de quien pueden mostrarse sus lujos excéntricos como un atentado a la moral pública? ¿Por qué no constituyen también un atentado a la moralidad colectiva, por ejemplo, los lujos de un fabricante o vendedor de whisky? ¿Y los de un gran productor vitivinícola? Porque ambos –el productor de whisky y el de vinos– ponen en el mercado sustancias nocivas para la salud, quizá no tan distintas de la cocaína. Lo cierto es que nunca vemos, como con el mafioso, hacer leña del árbol caído con alguna entrevista a un acaudalado vitivinicultor donde se exhiben sus “inmorales” riquezas, casi aborreciéndolo. Todo lo cual nos lleva a pensar cuándo y por qué algo está moralmente sancionado y algo es encomiable: ¿por qué la marihuana no, pero el alcohol sí? ¿Por qué la trata de blancas no, pero la fabricación y venta de armas sí? ¿Por qué la investigación en el campo de la energía nuclear para Irán o para Corea del Norte no, pero para las contadas potencias atómicas sí?


/Mayo de 2011

Es obvio que las cosas dependen del lugar desde donde se las mira. Un vaso puede ser al mismo tiempo medio vacío o medio lleno. El discurso dominante, el discurso con el que se valora la sociedad, es siempre el que fija las reglas de juego. Lo cual no es sino decir que la historia la escriben los que ganan; por supuesto, entonces, hay otra historia, la no contada oficialmente, aquella de los que pierden, la de las grandes mayorías excluidas. Hoy, el libreto de la historia lo escriben las grandes corporaciones dominantes; y nos guste o no, todos debemos bailar a ese son. ¿Por qué seguimos utilizando combustibles fósiles cuando hay otras alternativas mucho más racionales? ¿Por qué el principal negocio del mundo siguen siendo las armas? Las preguntas se podrían multiplicar al infinito. Nadie se sorprende que un accionista de una de estas megacorporaciones tenga mansiones de varios millones de dólares, que viaje en avión privado o se desplace en una limusina con enchapados de oro. Pero si eso lo hace un narcotraficante –el nuevo “malo de la película” en estos tiempos postmodernos– ¡gran pecado! Se podrá decir que se lo juzga pues se trata de una fortuna mal habida. ¿Acaso podría haber fortunas bien habidas? ¿Alguien remotamente puede ser un multimillonario –esta figura a que dio lugar el capitalismo donde una sola persona dispone de más recursos que la población de varios países juntos– a partir de su sano y transparente esfuerzo personal? ¿No es eso, incluso, mucho más ofensivo, irritante e insultante para nuestra inteligencia y nuestra ética? La acumulación de riqueza –hoy, con el capitalismo financiero global, llevada a niveles descomunales, demenciales sin dudas– es, ella misma, un acto inmoral, depredatorio, obsceno. Junto a personas (poquísimas en el mundo, por cierto) que acumulan fortunas como para alimentar a media humanidad, otras no tienen qué comer. Si se pudiera ser “buenos católico”, simplemente con eso: ¿no sería para denunciar la inmoralidad humana en juego –la asimetría en la apropiación de los recursos por ejemplo– como un tremendo atentado a la ética mínima y elemental de la Iglesia? Pero en los medios de comunicación del sistema se ensalza esa pornográfica riqueza en vez de condenarla. Se podría decir, como principio de justificación, que un acaudalado banquero o empresario produce algo para la humanidad, y no así un narcotraficante, o un mafioso. Sí y no. “Es delito robar un banco, pero más delito es fundarlo”, sentenció mordaz Bertolt Brecht. Una vez más: todo depende del color del cristal con que se mira. En un mundo manejado por banqueros, el capital financiero es el cimiento primero de toda la sociedad, cantándosele loas y rindiéndole tributos a lo que, en otro contexto, se podría ver como la peor inmoralidad pública (infames usureros, ¿verdad?). Es indecente que de un narcotraficante se sepa, por ejemplo, que tiene una mansión con helipuerto y piscina climatizada, pero no lo es si se trata de un actor de Hollywood. Y de las mansiones de los grandes accionistas –aquellos que manejan Hollywood y los bancos respetables donde se lavan los narcodólares–, de eso ni se habla.

En definitiva: ¿por qué esas riquezas serían más “limpias” que la de los mafiosos? Si las actuales drogas ilegales se legalizaran (cosa que se ve muy remota hoy por hoy), ¿pasarían a ser más “morales” y dejarían de ser condenables las fortunas de los narcotraficantes? ¿Cuándo empieza a ser “inmoral” una fortuna? ¿Lo es la del hacendado cuyos antepasados labraron su riqueza con mano de obra esclava? Y si no lo es, ¿lo sería la del dictador de algún país tercermundista que abrió su cuenta secreta en un paraíso fiscal? ¿Por qué uno sí y otro no? Hoy nadie declararía inmoral la fortuna del principal accionista de, por ejemplo, la Coca-Cola, o la de la Corona Británica. Al contrario: para el discurso dominante, el mismo que repetimos acríticamente, buena parte de la población mundial la envidia, la anhelaría, la respeta. Pero ¿por qué no condenarla al igual que la del capo mafioso? ¿Cuál es la diferencia sustancial entre una y otra? Todo lo dicho acá no es nada nuevo, por supuesto. ¡Pero nunca está de más recordarlo: la única fuente posible de la riqueza es el trabajo! Los multimillonarios de un sistema de explotación no son sino eso: ¡explotadores!, no importando lo que pongan en el mercado. n


/Mayo de 2011

Arturo Uslar Pietri

NELSON PINEDA PRADA*

y el Socialismo del siglo XXI A

rturo Uslar Pietri, cuya obra fue silenciada durante los cuarenta años del puntofijismo en Venezuela, con su Editorial del Diario Ahora, del 14 de Julio de 1936, desarrolló la tesis del derroche y malversación del ingreso petrolero, proponiendo como alternativa: la Siembra del Petróleo. Cuando uno analiza los años correspondientes a la dictadura gomecista (1908-1935), se encuentra con que la riqueza nacional fue colocada al servicio de la estructuración capitalista de la sociedad venezolana, proceso a partir del cual la economía agrícola perdió toda su importancia como factor dinámico de la economía nacional, para cederle el paso a la renta petrolera, lo que habría de significar el tránsito de un Estado subsidiado por la agroexportación a un Estado rentista. Se estructuró un Estado capitalista, que sustentaba las bases de su edificación en la renta del suelo, categoría ésta no propia del sistema capitalista, incluso contradictoria con él mismo. La conformación de un verdadero Estado central y de una burocracia estatal, habrían de ser los pilares fundamentales de dicha estructuración capitalista, mecanismos institucionales éstos que determinaron que la economía rentista fuese una “economía destructiva”, “que consume sin preocuparse de mantener ni de reconstruir”. Proponía Uslar Pietri la necesidad de “crear sólidamente en Venezuela una economía reproductiva y progresiva”, economía que fuese capaz de aprovechar la riqueza generada por la renta petrolera para su inversión en las más diversas áreas de la producción nacional. Exhortaba, asimismo, a que se fuese previsivo para evitar que el petróleo no se transformara en “una maldición que haya de convertirnos en *HISTORIADOR. PROFESOR UNIVERSIDAD DE LOS ANDES

un pueblo parásito e inútil”; que más bien, “sea la afortunada coyuntura que permita con su súbita riqueza acelerar y fortificar la evolución productora del pueblo venezolano en condiciones excepcionales”. De allí el título de su artículo: La siembra del petróleo. Cincuenta años después, el Gobierno Bolivariano de Venezuela, Presidido por Hugo Chávez, se ha propuesto hacer realidad la propuesta de Arturo Uslar Pietri. En el Plan Siembra Petrolera 2005-2030, el cual va más allá de las preocupaciones de Uslar, están formuladas las bases conceptuales y programáticas de la nueva política petrolera nacional. En éste se define la política petrolera como una política de Estado, soberana, cuyos intereses fundamentales son los intereses de la nación. por lo que, la riqueza generada por la economía petrolera tiene como principal beneficiario al pueblo venezolano, con lo cual se alcanza la verdadera nacionalización y socialización de dicha riqueza. Esta política ha sido hecha realidad a través de las Misiones Socialistas, como políticas sociales del Estado venezolano, así como la creación de los distritos sociales, el

fomento de Empresas de Producción Social (EPS), el desarrollo de núcleos de desarrollo endógeno y los aportes brindados al Fondo de Desarrollo Económico y Social (FONDEN), como ente rector de las políticas sociales del Estado venezolano. Todo este proceso que nos ha permitido ir consolidando las bases del diseño estructural del nuevo modelo de desarrollo formulado en el Proyecto Nacional Simón Bolívar, Primer Plan Socialista (PPS) 20072013. Hemos hecho de nuestra política petrolera una política al servicio de los más nobles intereses del proceso de integración energética de América Latina y el Caribe. Concebimos la economía petrolera como un instrumento geopolítico capaz de promover la conformación de un mundo multipolar que beneficie a los países en vías de desarrollo y que sea capaz de enfrentar las pretensiones hegemónicas del imperio. Por ello nuestra más firme defensa de la OPEP, como institución capaz de garantizar la cohesión y articulación de la política petrolera de los países miembros. Porque Venezuela es otra, el petróleo ahora sí es de todos los venezolanos. n


/Mayo de 2011

San Payaso

LUIS BRITTO GARCÍA

E

n el expediente de San Payaso consta que este habría sido expulsado del pequeño grupo original de seguidores de San Francisco de Asís porque le quitaba seriedad a la pobreza La noticia de la canonización de San Payaso pareciera haber sido ideada para distraer la atención mundial de ciertas escandalosas imputaciones contra altos dignatarios de la Santa Sede. En el expediente de San Payaso consta que este habría sido expulsado del pequeño grupo original de seguidores de San Francisco de Asís porque le quitaba seriedad a la pobreza. Ni una sola florecilla le dedica la crónica del Poverello. Rechazado por quienes habían decidido no ser nada, cayó San Payaso en el extremo de ser menos que nada. Después de todo, qué es un payaso con su aspecto y sus actos unánimemente torpes. No se sabe cómo puede pecar un payaso, que es atrapado en todas sus travesuras y rechazado por todas las trapecistas y colombinas. El payaso no mata con sus cuchillos de goma y sus trabucos que sólo disparan papelillo. El hábito no hace al monje pero sí al payaso y sabemos que un hombre de nariz roja y traje de balón se ha retirado drásticamente del mundo y sus vanidades. Ni siquiera el mayor asceta condescendió al maquillaje de harina o ceniza que borra la individualidad y a la cabeza baja de quien representa estruendosamente el fracaso. Ni siquiera el león del circo encerrado en su jaula es tan desventurado como el payaso de quien todos se ríen. No puede estar seguro el payaso ni siquiera de la amistad de los niños, pues hay quienes temen su rostro desfigurado y lloran ante sus greñas de penitente. Parece que, como el Cordero de

Dios, el payaso hubiera asumido para sí todas las desdichas del mundo. Con esta cotidiana aniquilación a veces opera el payaso el milagro de la risa, que es la única prueba tangible de la posibilidad de la bienaventuranza. El Diablo resiste a todo menos al ridículo, y por las comarcas de Umbría se le enfrentó San Payaso a todas sus encarnaciones: el aburrimiento, la solemnidad, la pesadumbre. No podía evitar San Payaso la muerte, pero dibujaba en los labios de los apestados la extremaunción de la sonrisa. Según Marsilio de Padua, esto podría haber salvado millares de almas si se considera que San Pedro juzga a los que llegan por su cara, y devuelve de una vez a los malencarados. San Payaso murió de hambre y de frío un invierno frente a la puerta cerrada de la más fastuosa catedral del mundo. Los perros lo olfatearon y desdeñaron devorarlo. No fue enterrado en sagrado porque la envidia lo acusó de predicar la más perniciosa herejía. San Payaso reía con todos, pero nadie sabe si reía de Dios, del mundo o de sí mismo. No sabemos si el Cielo existe ni si lo tendremos. Un instante de dicha aquí es el Paraíso.

El coleccionista de desnudos de almas Se tapa el cuerpo para ocultar sus funciones o imperfecciones y con igual finalidad se esconde el alma. Un cuerpo desnudo es bello en la medida en que cumple a plenitud con sus funciones, que nos invitan a ejercer las nuestras, y un alma en pelota puede ser horripilante en el grado en que elude su función de hacer cumplir las del cuerpo. Ya a casi nadie inhibe mostrar la piel, pero el pudor del alma se intrinca bajo el traperío de las falsas confesiones. Dijo Poe que la inmortalidad aguardaba a quien escribiera un libro llamado Mi corazón al desnudo y fuera fiel a su título. Los museos del mundo rebosan de exhibiciones de piel destapada, pero en todas las bibliotecas del universo no hay un libro semejante. El coleccionista de almas procede entonces como aquellos mirones de antaño, siempre atentos al revuelo de unas faldas o al indiscreto reflejo de un espejo de tocador. Un alma o un cuerpo desnudos, mientras más próximos se revelan a sus funciones, más indefensos. Ni tetas ni sinceridad falsas engañan.n


/Mayo de 2011

Alberto Granado: El Che confía en mí ROSA MARÍA FERNÁNDEZ SOFÍA*

“Era sociable, de actitud despreocupada y con un provocativo sentido del humor, pero no daba una muy favorable impresión física para el deporte por su cuerpo endeble.” Así fue narrando Alberto Granado, el entonces entrenador de rugby del adolescente Ernesto Guevara. “Cuando nos conocimos él tenía catorce años y yo veinte. Quería jugar y yo lo puse en mi equipo con el sobrenombre de Fuser: “Furibundo Serna”. Lo hice por su carácter, por su ímpetu en el juego y tenacidad. Y le sumé el apellido materno. Los equipos teníamos derecho a una hora de entrenamiento. Había que hacer fila. Entonces era normal esperar su turno. Y Fuser siempre tenía un libro en la mano. Leía novelistas estadounidenses como William Faulkner y John Steinbeck, que revelaban la realidad de la sociedad capitalista yanqui, la discriminación al negro y al latino. También a los escritores franceses Jean-Paul Sartre, Albert Camus, además de diversos filósofos. Yo estaba desconcertado de que a tan temprana edad se interesara por esos autores y temas. El leía algunos en francés, idioma que le enseñó su madre, durante las largas horas que le obligaban a permanecer tranquilo por su condición asmática”. Casi diez años después, Alberto y Ernesto, emprendieron un viaje en motocicleta por el sur de América, que marcaría definitivamente sus vidas. Entusiastas y ávidos por conocer, atravesaron Argentina y cuatro países más durante nueve meses. Aventura que convirtió la relación de estos jóvenes en una especial amistad a prueba del tiempo y fronteras. Para ambos todo estaba naciendo. A partir de ahí, giros radicales del azar los separan para converger a inicios de la década de 1960 en Cuba. Alberto visita a su amigo, ya convertido en el Comandante Che Guevara. Es entonces que Alberto junto a su esposa y sus dos pequeños hijos, comienzan un nuevo camino. - ¿Y en esos años iniciales de la Revolución qué vínculo tuvo usted con el Che? ¿Cuándo fue la última vez que vio al Che? - Bueno, él cada vez que podía, me llamaba. Me despedí de él en 1964. Sin saber que él se iba. Partía para la Organización de Naciones Unidas, donde representó a Cuba. Pero nunca me lo dijo…sin anunciarse, apareció Ernesto con su esposa, Aleida March. Le pregunté, ¿qué querés hacer vos?” y me dijo muerto de risa, “lo que tú digas”. “Pues voy a darme el lujo, por vez primera en mi vida, de invitar a almorzar a un Ministro y su esposa. Me permitió que lo invitara a comer pizzas (…). Transcurría el tiempo y empezamos a no saber nada de él. Pasaron varios años, hubo rumores de su muerte. Hasta que me llamaron para mostrarme una fotografía, donde estaba aparentemente muerto el Che. Querían que yo confirmara si era él. Me decían que los brazos del Che eran demasiado delgados para la fuerza que él tenía. Entonces les dije que

la fuerza del Che era bien nerviosa, más que muscular. En cuanto vi los brazos dije, efectivamente son los del Che. Era el cadáver de mi amigo. Lo que me queda de remordimiento es que él siempre, siempre me buscó a mí. Y yo no quería molestarlo, porque sabía que dormía 4 ó 5 horas. Que una hora conmigo, era una hora menos de descanso. Yo en ese sentido fui menos cariñoso que él. Pero lo hice pensando que hacia bien. -¿Cómo es que no ha escrito una biografía suya? - No me gusta hablar de mí mismo, aunque he hecho muchas cosas. He caminado mucho desde que nací en Argentina, en 1922. Estuve en Cuba, estuve en Girón, en la Crisis de Octubre. Formé médicos y científicos cubanos… -¿Y, en Girón, tuvo alguna participación? - No. Pero lo más importante es que cuando regresa el Che, que había estado en Pinar del Río dirigiendo y esperando la llegada de una posible invasión por allí, yo aproveché, lo contacté y le dije que me llevara con él. Estuve en Girón el día posterior a la rendición de los mercenarios de la Brigada 2506, el 20 de abril de 1961. El Che pasó de Pinar del Río a Girón, donde estaban los mercenarios. Prácticamente lo obligué para que me llevara. -¡Qué oportunidad la suya! -Yo he tenido una suerte en la vida ¡del carajo!, pero eso cuéntalo en tu libro…” * PERIODISTA DE LA TV CUBANA. AUTORA DE “EL CHE CONFIA EN MI”. ENTREVISTA A ALBERTO GRANADO.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.