Cartas amarillas de La Boca a Rosario

Page 1


Los verdes de Quipu

Cartas amarillas de La Boca a Rosario

Mercedes PĂŠrez Sabbi Ilustraciones Sole Otero


Uno, dos, tres comienzos...

Amigos por carta I

11 15

Martes por la noche

25

Amigos por carta II

33

Jueves por la noche

49

Amigos por carta III

57

Primera entrega de las cartas amarillas

61

Amigos por carta IV

71

Segunda entrega de las cartas amarillas

75

Lunes por la tarde

81

Amigos por carta V

93

Tercera entrega de las cartas amarillas

97

Viernes por la tarde

101

Antes del sรกbado 20

105

Sรกbado 20

109



Uno, dos, tres… comienzos

Hubo un brevísimo instante en el que Violeta, parada en el pequeño espacio que en la alfombra de su cuarto ocupan sus dos pies -delicados, saltarines-, pensó que su vida sería feliz si contara con un amigo. Tenía a Carla y a Jazmín, que eran amigas, amigas; pero un amigo, lo que se dice un amigo, no. Nico lo había sido hasta que se mudó, prometiendo mandar la nueva dirección apenas se instalara; pero habían pasado más de tres meses y Violeta no tenía noticias de él. Descalza, caminó hacia el balcón, miró el río y como si éste le hubiera traído algunos recuerdos, sonrió con picardía. Y vaya uno a saber lo que pasó por su cabeza, porque inmediatamente se puso a escribir a la sección "Amigos por carta" de la revista infantil de los viernes: "...Quiero tener un amigo... Tengo doce años, me gusta el cine, la música y el misterio. También me gusta el fútbol. Y como vivo en Rosario, soy de Rosario Central (obvio). Si querés que sea tu amiga, escribime... La amistad es una vitamina que aporta alegrías al corazón... P.D.: los de Newell's, guardarse en el freezer". 11


Y así fue como, para Violeta, esta carta dio comienzo a una nueva historia. Una historia con el olor dulce del río Paraná, que está justo ahí, frente al jardín de la casona de Violeta donde vive con sus padres, sus mascotas y el limonero del abuelo. Pero esta historia, al igual que todas, tiene más de un comienzo: Para Pablo todo se inició cuando le respondió a Violeta: "...Quiero ser tu amigo. Vivo en La Boca, frente al Riachuelo y, obviamente, soy de Boca..." y, entre otras cosas, le aclaró que en cuanto a él, “los de Newell's, ni fu ni fa”; además, no perdió la oportunidad de señalarle la colorida coincidencia entre las camisetas de sus favoritos: “tanto Boca como Rosario Central llevan el ponderado azul y amarillo”. En esa presentación, Pablo le contó que vivía con su familia, pero trató de ignorar a su hermana Wanda evitando nombrarla, "es una enana que se mete en todo…”. Para Javier, el amigo de Pablo, todo se inició con los ladridos de Cuco –el perro del conventillo de la otra cuadra– y con la audacia que le permitió andar por los techos aquella noche de tormenta. Para los primeros habitantes del conventillo

12


esta historia comenzó hace un siglo, en otras tierras o en un barco que llegaba a América. Y así podemos seguir enumerando infinitos comienzos, porque las historias se inician ahí, en el punto justo donde llega la mirada. Igual, debo decirles, sin ninguna oposición, que esta historia se desarrolló durante todo el siglo XX, de principio a fin.

13


14


Amigos por carta I

La amistad es la vitamina que alegra el corazón

Entre marzo y abril, la rosarina Violeta Oviedo y el porteño, más precisamente, boquense, Pablo Mangiaterra, intercambiaron una media docena de cartas. Quizá, por este motivo, Violeta se sintió segura de su amistad con Pablo y se animó a escribirle un pedido especial:

Rosario, otoño del 96

Pablo: Antes que nada y como te considero mi amigo, te pido: mejorá la letra. No te entiendo ni jota, mejor dicho no entiendo ni las jotas, ni las eles que confundo con las e, las o con las a, y otras que no sé con cuáles confundo. Y si no podés mejorar la letra, no te olvides de mandarme

15


las claves, así puedo dec, des, de… descifrar los enigmas. (Disculpame los borrones, pero mi mamá me deletreó d-e-s-c-i-f-r-a-r y no podía entender que llevara la s-c juntas). Mi tía Maru, la pintora que tiene 24, ¿te acordás que te hablé de ella?, me contó que la Boca, es un barrio muy especial. El otro día vi un video y te cuento que me encantaron las casas pintadas de rojos, azules, verdes y cuanto color una se imagine. Aquí las casas son claras, y hay jardines con árboles y frutas. Decime, ¿por qué tanto colorido en las paredes? Bueno, ahora te hablo de mis mascotas: tengo dos perros (Pardo y Corcho), una gata (Rita) y dos conejos (Doni y Refa) que me los regalaron el otro día. No sé si son machos o hembras o una pareja; pero mi papá dice que en poco tiempo nos vamos a dar cuenta. Ya te contaré. Decime, ¿tu mascota Popotitos, qué es? ¿Gato, perro, sapo…? Hablás de ella pero te olvidaste de decirme lo que es. Igual mandale saludos míos. También mandale saludos a tu amigo Javier. Decile a tu hermanita Wanda que gracias por mandarme el dibujo de Popotitos; decile que está muy lindo, pero no le digas que no se sabe qué es; tampoco le cuentes que mi tía Maru piensa que es el unicornio azul “aquel que se perdió…”, y menos que pienso que tienen un cangrejo por mascota. Igual me parece bárbaro tener hermanos. Te aclaro que, a pesar de tus quejas, me gustaría tener uno o una. Ya que vivís en La Boca, que es el lugar donde vivieron los primeros inmigrantes (así lo explicó ayer mi seño), mandame alguna historia que conozcas, porque para el Día del Inmigrante los chicos de mi grado tenemos que preparar

16


una obra de teatro para representar en la plaza. Yo igual le pregunto a medio mundo cuál es el origen de su apellido y que me hablen de sus antepasados. ¡¡¡No te imaginás de las cosas que me estoy enterando!!! Te dejo, tengo que hacer tareas. Odio las tareas. Te mando un beso y te repito: me hace feliz tenerte de amigo y estoy inventando frases célebres sobre la amistad. Cuando tenga una piola, te la mando. ¿Te gustó la de la vitamina que alegra el corazón? Besos a Wanda. Chau. Violeta P.D.1: No te olvides de mi pedido especial: letra clara Acepto uso de computadora. Este año voy a tener Internet. ¿Y vos? P.D.2: ¡Bravo el 2 a 0 de Boca! Lloren los gallinas. P.D.3: Mi mamá dice que los chicos de la ciudad no conocen la flor de la violeta. ¿Vos la conocés? P.D.4: Me gustan las posdatas.

17


La Boca, otoño del 96

Violeta: Aunque me lleve una hora más escribir esta carta, haré el esfuerzo que me pediste. Espero hacer las a como las a, las e como las e; y las h como las h, eso sí, no me pidas que acierte dónde ubicar las haches. En fin, alguna debilidad ortográfica uno puede tener, ¿no es cierto? No puedo usar la compu porque se infartó la semana pasada, así dijo el técnico para que entendiéramos el fin del disco rígido. Ahora tenemos que esperar para hacerla arreglar… y la Internet está lejos para nosotros, dijo mi viejo. Te cuento que las casas de mi barrio son tan coloridas porque aquí está el Riachuelo y los primeros inmigrantes se dedicaban a la pesca, arreglaban los barcos y los pintaban. Entonces, Quinquela Martín, que ahora es famoso, pero antes era el pintor del barrio, les aconsejó que usaran las pinturas que les sobraban para pintar las fachadas de sus casas. Por eso el barrio es bien colorido… Cambio de tema: para encontrar historias que te ayuden a armar la obra de teatro que me dijiste, voy a preguntar por el barrio; igual en la próxima carta te cuento la historia de mis bisabuelos, ¿querés?, mirá que tiene escenas prohibidas para menores de 18. Milonga, mi gata, la escuchó y quedó colorada.

18


Prestá la debida atención para averiguar el sexo de tus conejos. De manera privada le preguntás a cada uno: ¿A vos te gustan los conejos o te gustan las conejas?, y de acuerdo con el gusto que tengan te das cuenta del sexo. No hay cómo errarle ¡¡ja…ja!! Le di tus saludos a Popotitos cuando hoy la tuve en mi mano. Es pequeña y solitaria. Si con estos datos no te das cuenta de qué es, va otro dibujo de Wanda que, no es porque sea mi hermana, pero cada día dibuja peor. ¡¡¡Ja… ja !!! Gracias por tu P.D.2, ese partido fue inolvidable. ¿Viste qué golazo les metimos…? Los desplumamos. ¡Lloren gallinas, lloren! Sobre tu P.D.3, te aclaro que en una de las ventanas de mi casa, mi mamá colgó una maceta con violetas; pero hay un problema: a Ratín, el gato de mi vecina, le gustan las flores, y apenas se asoma alguna violetita, la come. Así que yo casi, casi, no las conozco. Sé que son chiquitas y seguro que si le pregunto a Ratín, me va a decir que son muy sabrosas. Viole, te voy a contar un secreto: resulta que desalojaron el conventillo que está a la vuelta de mi casa, lo van a derrumbar para hacer un edificio nuevo. Y como los vecinos del conventillo escuchan ruidos extraños, con Javier vamos a darnos una vuelta para saber lo que hay adentro y de paso, nos fijamos si hay piezas antiguas porque nos gusta coleccionarlas. En la próxima carta, te cuento. Wanda hizo a Popotitos. Como ayer fue al dentista y le pusieron los aparatos para enderezar los dientes, y habla con la zeta y agrega erres, me dijo que te dijera algo así:

19



Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.