MADRE DEL RESUCITADO
Dios te salve, María de Nazaret, llena de Dios y de ternura hacia los hombres. Como mujer, pisando el polvo de Galilea. Como madre, amasando el pan con tus manos. Igual que Jesús, tú nos envías al mundo, Madre del Crucificado que Vive. Vuelve tus ojos piadosos a los que habitan las regiones de la muerte: Donde los hombres son carne de pobreza, donde tus hijos derraman su vida por los olvidados del mundo. Como tú, haznos templos del Espíritu, y el Espíritu se hará en nosotros fuego que abrase toda inhumanidad y aceite que alivie tanto sufrimiento. Para que la dureza no llegue a nuestro corazón, danos entrañas de misericordia, ante tantos hermanos, tirados en el camino. Que el amor hacia los más pobres muestre que somos hijos tuyos. Que, al darnos tu ternura ante el dolor, muestres que eres nuestra Madre. Haz que el soplo del Espíritu remueva las cenizas de nuestra indiferencia y avive las brasas de un corazón ardiente. De tu mano, María, pasaremos sembrando resurrección, “para que el mundo viva”. Conrado Bueno, cmf
VER AL RESUCITADO
Es inútil querer experimentar la resurrección o reconocer al resucitado si no somos capaces de contemplar las llagas, en manos y pies, del que murió crucificado, de quienes mueren crucificados; si no somos capaces de compartir lo que tenemos para comer - pan, miel o pescado- con quien lo pide. Cada vez que se reúne la comunidad, cada vez que se proclama la palabra, cada vez que un pueblo lucha por su liberación, cada vez que compartimos dinero, alimento, comida, cada vez que abrimos una ventana al futuro, cada vez que nos arrancamos el miedo, cada vez que somos testigos de esto, cada vez que no pasa nada (pero la vida florece)..., aparece Jesús resucitado, porque él mismo, en persona, está vivo. La iniciativa es del Señor, pero la respuesta es de los discípulos. Jesús, como Señor, está en la humanidad doliente que busca nueva vida, en la comunidad creyente que escruta las escrituras y espera ser revestida de la fuerza que viene de lo alto, y en el banquete de los hermanos que comparten lo que tienen para comer y vivir. Pero sólo quienes tienen fe, una fe realista, pueden encontrarse con el Señor.
LA VOZ DEL PAPA FRANCISCO
El mundo propone imponerse a toda costa, competir, hacerse valer... Pero los cristianos, por la gracia de Cristo muerto y resucitado, son los brotes de otra humanidad, en la cual tratamos de vivir al servicio de los demás, de no ser altivos, sino disponibles y respetuosos. Esto no es debilidad, sino autentica fuerza. Quien lleva en sí el poder de Dios, de su amor y su justicia, no necesita usar violencia, sino que habla y actúa con la fuerza de la verdad, de la belleza y del amor.
PARROQUIA CORAZÓN DE MARÍA GIJÓN www.pacomargijon.org Avda. Pablo Iglesias, 82 985 37 09 44
Domingo
3º de Pascua Ciclo B
19-4-2015
¡¡No es hora de callar!!
LLAMADOS A DECLARAR
Es dura la misión: hablar de Dios, defender a los pobres y oprimidos, estar con los que pierden, las víctimas, decir no a los poderosos y violentos. Se reirán de vosotros los que mandan, irán contra vosotros los que tienen. ¡El vuelo de la paloma dispersado por halcones terribles, sin entrañas! Es dura la misión: continuar mi obra, ser testigos del evangelio día a día y encarnar las bienaventuranzas en vuestras entrañas yermas. Por eso, yo estaré junto a vosotros alentando la fuerza del Espíritu, y seréis mis testigos elocuentes: profetas, servidores y mis mártires. No se perderá vuestra semilla, no; ni quedará infecunda vuestra sangre. Veréis a la justicia florecer aunque sea invierno, más allá de vuestros sueños. Os lo aseguro.
A
l Calor de tu Palabra
HECHOS 3,13-19
1ª Juan 2,1-5 “En esto sabemos que lo conocemos: en que guardamos sus mandamientos. Quien dice: «Yo lo conozco» y no guarda sus mandamientos, es un mentiroso y la verdad no está en él.” Lucas 24,35-48 En aquel tiempo contaban los discípulos lo que les había acontecido en el camino y cómo reconocieron a Jesús en el partir el pan. Mientras hablaban, se presentó Jesús en medio de sus discípulos y les dijo: -Paz a vosotros. Llenos de miedo por la sorpresa, creían ver un fantasma. El les dijo: -¿Por qué os alarmáis?, ¿por qué surgen dudas en vuestro interior? Mirad mis manos y mis pies: soy yo en persona. Palpadme y daos cuenta de que un fantasma no tiene carne y huesos, como veis que yo tengo. Dicho esto, les mostró las manos y los pies. Y como no acababan de creer por la alegría, y seguían atónitos, les dijo: -¿Tenéis ahí algo que comer? Ellos le ofrecieron un trozo de pez asado. El lo tomó y comió delante de ellos. Entonces les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras. Y añadió: -Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día, y en su nombre se predicará la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos.
BIENAVENTURANZAS DE LA RESURRECCIÓN Felices quienes mueren cada día al pecado del egoísmo y renacen a una vida nueva. Quienes están persuadidos que el odio, la guerra, la maldad la sinrazón jamás podrán vencer a las fuerzas de la vida. Felices quienes saben descubrir entre las realidades de muerte del mundo de hoy, signos de vida y esperanza. Felices quienes alcanzan la convicción, desde su compromiso vital, de que tras las derrotas cotidianas, está latiendo la victoria de la vida. Felices quienes riegan gotas de vida, quienes siembran semillas de vida, quienes alientan deseos de una vida en plenitud. Felices quienes han logrado percibir, detrás de la muerte de millones de inocentes el dolor, la rebeldía, la audacia, la llamada a una entrega absoluta por la vida. Felices quienes han transformado su existencia por los testimonios de los que han derramado su sangre por la vida de otros seres humanos. Felices quienes creen en el Dios de la vida. Y quienes creen en una nueva humanidad que pueda ser feliz y disfrutar de la vida. Unos y otros, juntos, lograrán que triunfe la pasión por la vida, otra tierra más llena de vida.
VIDA PARROQUIAL
Del jueves, día 9, al domingo, día 12, hemos celebrado la Semana Vocacional. Charlas, oración y mesas redondas han jalonado dichas jornadas animadas por los claretianos PP. Luisma Suárez y Óscar García-Romano. El pasado domingo, día 12, la eucaristía de la tarde tuvo un color nada habitual: la presencia y participación de jóvenes de nuestros grupos parroquiales. Les felicitamos y nos felicitamos por la aportación su presencia joven en nuestras celebraciones. Aquí los tenéis a la derecha.