DIOS LLEGA Por la megafonía de la liturgia vamos a escuchar reiteradamente este mensaje: Jesús llega, llega la Navidad. Llega como a él le gusta: sin la parafernalia de los gobernantes, sin la expectación de los cantantes, sin el glamur de las estrella de cine, sin la exhibición de fuerza de los desfiles militares. ¿Quieres saber por dónde viene? Te voy a dar unas pistas. Llega en medio del silencio Llega por la escucha de su palabra. Llega por el pobre solicitando que compartas. Llega por la presencia de nuestros prójimos. Llega por la senda de un servicio callado. Llega por el perdón ofrecido a quien te ofendió. Llega por la cercanía al enfermo. Llega por el dolor de los que te rodean. Llega por el gozo de un rato de oración. Llega por el abrazo ofrecido a quien te lastimó. Tú, sal a recibirle por donde llega.
Adviento, tiempo de ESPERA Este es el tiempo de la espera. Espera María, tras decir: «Hágase». Espera José, confiando en el Dios de los sueños. Esperan los magos, ya en camino tras una estrella. Espera, con miedo, Herodes, atrincherado en sus muros. Esperan los pastores, que no tienen nada que perder. Esperaron los hombres y mujeres de ayer, y esperamos los de hoy. Que vengas. Que toques nuestra vida. Que llenes el mundo.
VIDA PARROQUIAL 1.- El lunes, día 8, es la fiesta de la Inmaculada, fiesta de guardar. Las misas serán las de los días festivos: 10,00; 11,30; 13,00 y 19,30 h. 2.- Durante los días previos a la fiesta de la Inmaculada, de 19 a 19,30.h. tendremos un sencillo momento de oración y de homenaje a la Virgen. 3.- En próximas fechas, un grupo de voluntarios de la parroquia pasará buzoneando por sus domicilios para informarles de la “OPERACIÓN KILO”. La recogida tendrá lugar el sábado día 22, pasarán por los domicilios. 4.- El martes, día 16, CELEBRACIÓN PENITENCIAL. 19,30 h.
Del discurso del Papa en la Eurocámara “Queridos Eurodiputados, ha llegado la hora de construir juntos la Europa que no gire en torno a la economía, sino a la sacralidad de la persona humana, de los valores inalienables; la Europa que abrace con valentía su pasado, y mire con confianza su futuro para vivir plenamente y con esperanza su presente. Ha llegado el momento de abandonar la idea de una Europa atemorizada y replegada sobre sí misma, para suscitar y promover una Europa protagonista, transmisora de ciencia, arte, música, valores humanos y también de fe. La Europa que contempla el cielo y persigue ideales; la Europa que mira, defiende y tutela al hombre; la Europa que camina sobre la tierra segura y firme, precioso punto de referencia para toda la humanidad.”
PARROQUIA CORAZÓN DE MARÍA GIJÓN www.pacomargijon.org Avda. Pablo Iglesias, 82 985 37 09 44
Domingo
1º de Adviento
30-11-2014
¿ADVIENTO? No esperes nada. No sueñes nada, no maldigas nada. Tú, sal al encuentro de Jesús. Comienza dando pasos que hagan germinar la esperanza. Tienes en ti mismo los recursos necesarios para alumbrar un tiempo nuevo, un presente nuevo, una persona mejor. Decídete a abonar la tierra de tu vida con la visión aguda de Juan el Bautista, con la disponibilidad de María, con los ojos abiertos de Isaías. El Adviento no es una cinta deslizante que te lleve inexorablemente al cielo de tus utopías. Es un camino exigente iluminado por la estrella de tu fe. Sólo ella te podrá llevar al portal donde acabarás reconociendo el llanto de un niño y el calor de unos padres arropándole en medio de la inclemencia. Adviento: calla, mira, ama y espera.
Te Esperaré, Señor Te esperaré, Señor, tenso el oído, al callado temblor de tu pisada sobre la senda nueva acostumbrada de tanto presentirte ya venido. Te esperaré, Señor, estremecido el cielo de mi noche inacabada, Despierta mi impaciencia a tu llamada y hecha mi cárcel vuelo reprimido. Te esperaré, Señor, hasta que quieras trocarme en logro de tu dulce encuentro esta amarga quietud de mis esperas. Te esperaré en mi casa anochecida, vallada en soledad por fuera y dentro.
H
áblame, Señor
1ª Lectura: Isaías 63,16 Y, sin embargo, Señor, tú eres nuestro padre, nosotros la arcilla y tú el alfarero: somos todos obra de tu mano. 2ª lectura: 1Cor 1,3-9 ...Por Cristo habéis sido enriquecidos en todo: en el hablar y en el saber, porque en vosotros se ha probado el testimonio de Cristo. Él os mantendrá firmes hasta el final, para que no tengan de qué acusaros en el día de Jesucristo, Señor nuestro. Dios os llamó a participar en la vida de su Hijo, Jesucristo, Señor nuestro. ¡Y él es fiel! 3ª lectura: Marcos 13,33-37 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: “Mirad, vigilad, pues no sabéis cuándo es el momento. Es igual que un hombre que se fue de viaje, y dejó su casa, y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando ak portero que velara. Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos. Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: ¡Velad!»
Un tiempo para ilusionarse “Levantaos, alzad la cabeza. Se acerca vuestra liberación” (Lc 21,28). Qué bueno es tener motivos para esperar. No pasa nada si nos falta algo, si hay heridas, si en algún momento la vida va achuchada. En realidad hay etapas en las que lo importante es escuchar la promesa de algo bueno. Y creerla, si quien promete es alguien de fiar (Dios lo es). Llegará la sanación para las heridas. Llegará la luz para disipar las sombras. Llegará la paz a las personas. Llegará el amor a poblar las soledades. Llegará la palabra a tender puentes. Llegará el descanso, compartido. Llegarán nuevas ideas, nuevas canciones, nuevos proyectos. Llegará Jesús. ¿Qué me ilusiona hoy? ¿Qué espero, anhelo, deseo en este momento de mi vida?
La virtud de la esperanza – quizás menos conocida que la de la fe y la caridad– nunca debe confundirse con el optimismo humano, que es una actitud más relacionada con el estado de ánimo. Para un cristiano, la esperanza es Jesús en persona, es su fuerza de liberar y volver a hacer nueva cada vida. (Papa Francisco)