Evaluación COG

Rethinking Evaluation

Evaluaci贸n COG

Rethinking Evaluation Evaluación COG

Esta experiencia de evaluación en grupos nació de nuestra necesidad de alivianar la tensión que nuestros estudiantes suelen sentir en instancias de evaluaciones sumativas formales, pero a la vez de una preocupación que rondaba en nuestra mente hacía tiempo, y tenía que ver con cómo lograr que las instancias de evaluación sumativas formales –que son un requerimiento en las instituciones educativas de

nuestro país- se convirtieran también en una instancia de aprendizaje para los estudiantes, dejando de ser una simple medición de lo logrado hasta el momento. Con esto en mente, y apoyadas en descubrimientos neurocientíficos, es que nos embarcamos en dicha experiencia.

Para realizar esta evaluación, los estudiantes trabajaron en equipos previamente formados por las docentes de acuerdo a sus niveles de aptitud. Se compartió con

ellos la modalidad innovadora con la cual realizarían la evaluación, lo cual inmediatamente tuvo en ellos un efecto sumamente positivo. Parecían sentirse más seguros y relajados desde un comienzo, sabiendo que tendrían el apoyo de sus compañeros. Como podrán observar en el video, el ambiente de trabajo se apreciaba totalmente tranquilo y relajado, con estudiantes comprometidos con la tarea, pero sin los nervios típicos de estas instancias.

Rethinking Evaluation Evaluación COG

Para la realización de la evaluación en sí, los alumnos recibieron sobres que contenían tarjetas con preguntas acerca de los contenidos a evaluar. Los miembros de cada grupo seguían un orden para turnarse al escribir las respuestas, las cuales eran construidas con los aportes de todos los integrantes. En esta ocasión, se les asignó un tiempo para responder cada tarjeta, la cual era entregada a la docente al cumplirse el plazo.

Una vez que la docente recolectara todas las tarjetas, las respuestas de las mismas eran compartidas con toda la clase, y se iniciaba un debate a través del cual los estudiantes debían ponerse de acuerdo para asignar un puntaje a cada grupo, justificando el mismo. Es en esta misma instancia, que los estudiantes que no habían alcanzado el puntaje máximo, podían ver, gracias a los aportes del resto de la clase, qué parte del contenido había estado incompleto o incorrecto, y conocer exactamente qué era lo que se esperaba de ese desempeño. Así, resolvían sus dudas

al respecto y se encontraban más seguros para avanzar a la siguiente tarjeta.

Sin lugar a dudas, lo más gratificante de esta experiencia, tanto para los docentes como para los estudiantes, fue convertir una instancia de evaluación sumativa en una instancia de aprendizaje enriquecedora para ambos, ya que ellos dejaron el aula ese día, comprendiendo más de lo que comprendían cuando entraron, lo cual en sí mismo representa un objetivo cumplido para cualquier docente.

Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook