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POR LA LIBRE

/ Por la Libre Lo que no se ve…

Michelle PINO*

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El mes pasado dio inicio el ciclo escolar, y con ello miles de niñas, niños y adolescentes oaxaqueños volvieron formalmente a las aulas, después de varios meses de confinamiento por la pandemia.

Si ya de por sí, el regreso a clases era un reto por las medidas sanitarias que se deben cumplir, las condiciones en las que la mayoría de las escuelas del estado se encuentran, la falta de suministros de agua, de sanitarios, de espacios suficientes para el lavado de manos, jabón y demás materiales de limpieza, se agregaba un reto más, el nuevo modelo educativo.

Para nadie es desconocido que cada sexenio, el gobierno federal considera que es necesario cambiar, no mejorar ni actualizar, cambiar los enfoques educativos, haciendo que no exista una continuidad en la formación de las y los estudiantes de educación básica y poniendo a las y los profesores a experimentar cada vez que a los gobernantes les parece que sus propuestas son mejores que las anteriores.

Con el modelo que la 4T propone, las escuelas no solo tuvieron que regresar a clases pendientes de la salud mental de las niñas, niños y adolescentes y del personal de las escuelas, de las medidas sanitarias, sino también analizando a marchas forzadas los planteamientos de la Nueva Escuela Mexicana para poderlo implementar el siguiente ciclo, mientras planean el actual con el modelo aún vigente.

Para la mayoría de las y los profesores, esto no es una novedad, están acostumbrados a tener que ajustarse a las “ocurrencias” de los presidentes en turno, sin embargo, en esta ocasión, a diferencia de las otras, es que ni la titular de la Secretaría de Educación Pública conoce lo que el nuevo modelo educativo conlleva.

La lamentable entrevista que la secretaria de educación dio en cadena nacional, no solo la hizo blanco de burlas, críticas, memes y demás en las redes sociales y los diferentes medios de comunicación, sino también pone en evidencia las carencias de las personas que integran el gabinete presidencial y la poca importancia que el ejecutivo federal da a la educación de la niñez y juventud del país.

Lo que invariablemente me lleva a pensar: si así está el gobierno federal, ¿qué podemos esperar las y los oaxaqueños del gobierno morenista el siguiente sexenio? El panorama no se vislumbra favorable, si tomamos en cuenta a las personas que durante la campaña rodearon al gobernador electo, podemos observar que su círculo cercano no se distingue precisamente por su preparación o desempeño académico, aunado a eso, la arrogancia con la que se expresaba el próximo titular del ejecutivo estatal del gremio magisterial, así como el poco interés mostrado en el tema educativo y las escasas propuestas en su plataforma proselitista al respecto, dan a entender que dentro de la agenda política del partido “oficial” la educación de las niñas, niños y adolescentes sigue siendo algo de lo que se habla, que solo en discurso se muestra interés, pero en la práctica, sigue siendo parte de lo que no se ve…

*Licenciada en Comunicación con maestría en

psicoterapeuta humanista; en su experiencia profesional a combinado la Educación y la Comunicación. Disfruta escribir y decir lo que piensa. pino.michelle@gmail.com

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