GASTRONOMÍA

Cochinita pibilCochinita pibil UN FAVORITO UN FAVORITO DE MÉXICO DE MÉXICO

POR MAITÉ URUÑUELA LADRÓN DE GUEVARA

Chef y profesora de Lic. en Negocios Gastronómicos

Un platillo representativo de Yucatán y de México, protagonista infaltable de las taquizas que tanto amamos hacer en toda ocasión, es la cochinita pibil.

Este platillo, nacido en la época prehispánica, era un clásico para comer en el Día de Muertos, aunque no se preparaba con carne de cerdo, sino de otros animales.

Jugosa, flexible y tradicional, la cochinita pibil puede acompañar muchos otros platillos de nuestra gastronomía, y hasta del extranjero. Aquí comparto con ustedes cómo prepararla en casa.

INGREDIENTES: ● 2 kg de pulpa de cerdo. ● 2 litros de jugo de naranja. ● ¼ cebolla morada para licuar y rebanar. ● ¾ taza de vinagre de manzana. ● 200 g de pasta de achiote. ● 2 limones. ● 8 cucharadas de aceite de oliva. ● Chile habanero al gusto. ● Sal y orégano al gusto.

Licue jugo de naranja, cebolla morada, el vinagre y el achiote. Lave bien la carne. Córtela en trozos pequeños y póngala a cocer con la mezcla que licuó en el recipiente de su gusto: olla de barro, de presión o refractario para el horno.

En una olla de presión, cocine por 35 minutos. Si decide hacerla en el horno, póngale hoja de plátano, tápela y deje que se cueza a fuego lento.

Corte la cebolla morada en julianas, saltéela y póngala en un recipiente con vinagre, sal y orégano para que se desfleme. Luego agregue chile habanero en rebanadas finas con jugo de limón, agua y sal.

Una vez terminado el proceso, sírvalos juntos; puede acompañarse con arroz, frijoles, tortillas, ensalada y mucho más.

ALMA MATER 42

Por Elvira Zorrero Lara Máster en Educación

LOS INTERCAMBIOS ACADÉMICOS

Sin darnos cuenta, nuestra existencia se beneficia con aportaciones de otras partes del mundo, como la ropa, los dispositivos, los zapatos, los productos que consumimos… Podríamos hacer una gran lista con lo que utilizamos a diario. Pero si aprovechamos las cosas materiales, ¿por qué no hacerlo con el conocimiento, los proyectos y las experiencias de vida?

Viajar nos enriquece, porque nos permite apreciar diferentes niveles de desarrollo y organización, formas de vida y costumbres, que amplían nuestro panorama, nos invitan a aplicar cambios en nuestra vida y aprender sobre el país que visitamos.

Ahora, si esa experiencia implica un fin educativo y abarca un periodo mucho más largo que unas semanas de vacaciones, los beneficios serán mucho mayores, porque además podríamos enriquecernos de sus programas curriculares, su forma de generar experiencias de aprendizaje, su nivel académico, su infraestructura y, en el ámbito personal, aprenderíamos a valorar lo que tenemos y nos haría madurar.

Hoy la globalización se hace evidente en una mayor movilidad. Cada vez más personas de diferentes nacionalidades viven en nuestro estado y forman parte de nuestra sociedad.

Es igualmente importante que nuestros jóvenes se preparen para desempeñarse en cualquier entorno, que sean capaces de cubrir las demandas del siglo XXI, que escuchen puntos de vista diferentes y, sobre todo, que aprovechen la oportunidad que una clase internacional puede aportar. Los proyectos de nuestros jóvenes no deben limitarse a atender las necesidades de la comunidad, el estado o el país, sino que deben ser escalables, enfocados en atender la demanda mundial, y generar empleos para nuestra sociedad. Quienes tienen la fortuna de estar en las aulas deben ser agentes de cambio, y a través de sus ideas y conocimientos generar patentes, negocios y empresas de clase mundial.

Es verdad que el sector educativo se vio gravemente afectado por la pandemia de covid-19, pero también es cierto que esta benefició a muchas personas, porque pudieron interactuar y compartir clases con estudiantes de otras nacionalidades sin hacer una inversión adicional, aspecto que años anteriores habría sido imposible.

Así como nuestros jóvenes de manera natural buscan nuevas experiencias, los docentes no debemos quedarnos atrás, y es importante que nosotros también propiciemos espacios donde podamos aprender de nuestros pares de diferentes partes del mundo, y que en nuestra cátedra acerquemos a los jóvenes a la realidad internacional, preparándolos para desempeñarse en cualquier latitud.

Sin duda, hoy existen muchas facilidades por aprender de los mejores, y en los últimos meses creció la oferta de cursos, talleres y congresos, la mayoría de ellos a precios muy accesibles e impartidos por expertos de talla internacional. Conociendo los beneficios de estudiar en el extranjero, padres de familia y docentes debemos considerar la movilidad como parte importante de la formación académica. e.zorrero@edu.uag.mx

ALMA MATER 43

Por Juan Carlos Hernández A. LCC y Máster en Educación

MEJORA CONTINUA EN EL ÁMBITO PERSONAL

muéstrame el oro de tu conocimiento y no el cobre de tu ignorancia.

Tan válido es buscar logros profesionales, laborales, intelectuales y de reconocimiento personal como ayudar al prójimo a conseguir sus metas y aspiraciones. En ello reside nuestra capacidad de empatía y ayuda, en la disposición de ser mejores cada día y buscar que otros lo sean también. Si logras que tú y otros estén mejor, ¡perfecto!

Si las personas talentosas que conocemos, empezando por nuestra familia (abuelos, padres, madres, hermanos, primos) y amigos no hubiesen aspirado en la vida a la superación en todo sentido, simple y llanamente no tendríamos arquetipos y ejemplos a quienes imitar. Ni siquiera podríamos aspirar a nada bueno, ético, con valores y moralmente aceptado.

Qué gran error sería vivir sin aspirar a la perfección humana. Y si con ello se adquieren conocimientos, experiencias, valor retribuido al esfuerzo, mejor posición laboral y crecimiento intelectual, pues mucho mejor, porque es y será así como saldremos adelante. Se habla de pobreza económica o nutricional, pero también existe la pobreza de conocimiento, y una forma de remediarla es trabajar en la mejora continua.

Porque, mire usted, es bien sabido que la ignorancia es la madre de las malas decisiones; a mayor incultura y analfabetismo, mayor fragilidad intelectual del individuo frente a los retos del mundo actual. Es impensable siquiera impedir que un niño, un adolescente, un ciudadano de a pie acuda a la escuela, conozca buenos docentes que puedan dejarle mucho, no solo conocimiento; que se acerque a los buenos libros, a los buenos documentales, a las investigaciones interesantes, que conozca la buena historia… obras que en conjunto le hagan pensar, reflexionar y analizar, para luego proponer y actuar en cualquier área profesional.

En México hemos tenido mujeres y hombres brillantes, que han dado muestras de crecimiento personal en varias ramas y áreas del saber, de la ciencia y el conocimiento; que han enseñado al mundo su creatividad sobre cómo hacer y servir mejor, gracias a sus inventos, investigaciones y descubrimientos.

La mejora continua debe ser una actitud constante en el individuo. En su libro El gran escape, el premio Nobel de Economía Angus Deaton sostiene que incluso la desigualdad puede ser buena cuando esta mueve a los individuos a progresar.

Es obvio que en una sociedad existe una gran interdependencia, todos se necesitan mutuamente; las carencias de unos se compensan con los haberes de otros, y en la dinámica diaria se va produciendo una movilidad social, buena si es para mejorar, mala si apunta al declive. México es productivo, sobresaliente y reconocido. Tenemos mucho qué dar, qué aprender y qué compartir. Hagamos de nuestras familias un centro de superación, trabajo y esfuerzo.