Revista Balance Ed. 29

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Cannabis Medicinal

Cannabis Medicinal en Puerto Rico 2020:

Logros y retos

Por Dr. Jaime Claudio Villamil Profesor de Cannabis Medicinal Facultad Medicina de Familia Universidad de Puerto Rico jaimeclaudio@me.com

Logros Los logros al momento han sido muchos. La industria de cannabis en Puerto Rico ha logrado grandes triunfos en el desarrollo de decenas de cepas y productos de alta calidad que están disponibles a través de toda la isla. Se han certicado sobre 100,000 pacientes y contamos con 90 dispensarios, 25 cultivos, 23 manufactureros de productos y 9 proveedores de educación continua. Contamos con un registro digital expedito que permite registrar al paciente en cuestión de horas. Muchos pacientes reportan alivio a su malestar y la disminución en el uso de medicamentos problemáticos o con efectos adversos serios como el uso crónico de narcóticos para el dolor y pastillas para dormir como el Ambien. Hemos tenido un gran impacto en muchos pacientes con dolor, insomnio y ansiedad, Hay un potencial de ayuda en el autismo y calidad vida del paciente con Alzheimer y Parkinson. Con el desarrollo de cepas y productos altos en CBD, de alta calidad y con certicado de análisis, disponibles tanto en el dispensario como en la consulta del medico, ampliamos el arsenal terapéutico para condiciones que requieren poco o ningún contenido de THC como la bipolaridad y la esquizofrenia.

Retos El médico en Puerto Rico emite una recomendación de que el paciente cualica para usar cannabis medicinal por que padece una condición debilitante. No obstante no obliga o adiestra al medico para que emita la misma con detalle y precisión. La misma puede ser tan ambigua como “sativa por el día e indica por la noche”. Asimismo, un paciente puede recibir autorización para uso del cannabis por un año sin revisión o calibración de la misma en visitas de seguimiento a su medico. Esto es parecido a un paciente tener dolor y recibir permiso para usar narcóticos por un año, visitando a su farmacia de predilección y escogiendo el producto que preera entre Ultracet, Percocet, Morna o Fentanyl. Se necesita fomentar una recomendación precisa, una formula o sistema estandarizado para emitir la misma. Garantizar seguimiento en particular a los pacientes con múltiples condiciones crónicas y en polifarmacia. Se debe también fomentar un comunicación obligada entre esa recomendación, su despacho en el dispensario, y el conocimiento informado entre paciente, medico recomendador

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y el resto de especialistas que atiende a este. Se ha cometido el error de omisión de no tener un sistema de vigilancia y acopio de la experiencia del paciente y sus condiciones a productos y su resultado favorable, inefectivo o adverso. Se debe tener como alta prioridad para Puerto Rico el iniciar estudios de investigación observacional. Por ejemplo en este momento que surge las dudas sobre el vapeo en Estados Unidos y Puerto Rico, se podría extraer data de uso de vapes por pacientes y si estos han reportado algún efecto adverso. La industria ha sido muy innovadora en introducir distintos productos para uso en comestibles, vaporización, ungüentos o para aplicación en parchos tópicos. No obstante muchos pacientes se frustran al conseguir un producto efectivo que luego no esta disponible para resuplido. Se tiene que garantizar unos productos medulares o formulaciones magistrales esenciales, por ejemplo, cepas especícas y productos formulados de composición consistente y suplido disponibles sin interrupción. El paciente que busca el cannabis añora una terapia integrada y natural. Por tanto el Cannabis tiene que integrarse tanto a tratamientos convencionales que sean efectivos y seguros a la vez que se combinan con servicios y estrategias de medicina funcional. Por ejemplo, si el paciente tiene problemas para dormir y sufre de ansiedad, se debe buscar que el cannabis se combine con adiestramiento en atención plena (mindfullness) al igual que terapia cognitiva para eliminar pensamientos erróneos que provoquen angustia y malestar innecesario en el paciente.


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