CHUYITO ACUNA EN EL Bajan de la nube a...

Jesús Manuel Acuña Méndez fue degradado. Ya no presidirá la Junta Directiva del ISSSTESON, máximo órgano de gobierno donde se toman las decisiones de peso y de pesos, en cuyas sesiones tendrá voz, pero sin voto. Al relevo el mismo gobernador Alfonso Durazo, que ahora alternará sus funciones de Jefe del Poder Ejecutivo con la presidencia de la Junta Directiva del Instituto. Algo importante detectaron en la institución, quizá una falla que podría afectar todo el sistema, ya que acompañan a Durazo en este relevo nunca visto el secretario de Hacienda y el Oficial Mayor del gobierno estatal.

Lana y administración representan los relevistas, posiblemente el principal problema detectado. Todo hace indicar que fallaron los chicos harvardianos. El aún director, en la Junta Directiva, fue degradado a secretario técnico. Acuña Méndez arribó a ese puesto desplegando una llamativa campaña mediática. Quizá eso no gustó en las alturas, además de los errores adminis ­ trativos que impactan en la población derechohabiente, que suman más de 177 mil, entre asegurados y beneficiarios. Para atenderlos se cuenta con 14 coordinaciones médicas. Claro, esa cantidad de derechohabientes representa un importante gasto pero también una buena cantidad de dinero fresco, que se capta por medio de aportaciones. Hasta ahora no se ha resuelto del todo la falta de medicamentos, mejoró, sí, pero aún hay escasez, pero un problema mayor se encuentra en los pensionados y jubilados que litigan lo que consideran es suyo y el Instituto no les quiere dar. Ya estamos acostumbrados a ver que el equipo jurídico del ISSSTESON pierde casi todas las demandas, de ésta y anteriores administraciones.

Eso es lo visible. Lo que no se ve a simple vista es el motivo de los cambios. Nunca se había visto a un gobernador presidiendo la Junta Directiva. La costumbre es que desde su sillón de Palacio ordenaba, quitaba y ponía, sin necesidad de dejarse ver. Quizá el golpe de timón era necesario para enderezar una nave que hace agua. Esperemos que las cosas mejoren en el ISSSTESON, donde destaca la rebelión del Ayuntamiento de Hermosillo, que decidió crear su propio issstesoncito. Ignoramos si otros ayuntamientos buscan imitarlo, pero sería difícil. Los alcaldes afines no se moverán. Y Toño Astiazarán debe pagar más de 120 millones de pesos que adeuda al Instituto. La libertad cuesta. Pero se amplía el juego de los intereses. Suerte, porque la va a necesitar.