SALUD

Dime que te duele y te diré cual es tu problema

(Filosofía y metafísica del dolor)

La persona que está padeciendo algún dolor, incluso si éste les está parando la vida, son seres afortunados, aunque en estos momentos lo pongan en duda. Los que tienen una llamada de atención, un paréntesis en su ajetreada vida, y pueden pensar: “¿Para qué vale todo lo que hemos hecho hasta ahora?, ¿Por qué me ha tenido que pasar esto a mí?” … Si logramos trascenderlo, habremos aprendido algo más, y dejaremos de cometer siempre los mismos errores

Dolor en cervicales

espalda a sus conflictos y deja de lado un aspecto del mundo.

Un cuerpo erguido obliga al ser humano a mirar de frente las exigencias y los desafíos del mundo. Pero si ladeamos la cabeza, rehuimos la confrontación. El individuo se hace parcial y vuelve la cara para no ver lo que no quiere. Tiene una visión “sesgada”. La expresión alemana de “girar a alguien la cabeza” es sinónimo de manipular a la persona.

Una nuca rígida indica inflexibilidad de su dueño. Alguien se encuentra paralizado en una situación limite. Nuestro agarrotamiento hace que nuestro cuerpo nos haga todo lo sincero que no somos nosotros.

Físicamente, se la puede desbloquear con un fuerte tirón, se llama “maniobra de Kaaba”, hasta alcanzar el movimiento pendular donde pueda volver al centro.

Pero la mayoría se encallan en el extremo. Las personas se quedan atascadas en sus opiniones y en sus formas de conducta. Esta alteración nos indica que hemos forzado tanto el movimiento en una dirección que se impone rectificar.

Dolor por contracturas

Estamos ante un tipo de mensaje que indica el impedimento o dificultad para un movimiento, que en este caso no es total. No por ello el mensaje es menos claro y reclama una reflexión sobre los motivos de ese impedimento para saber si es debido al exterior (los demás) o al interior (uno mismo). También nos dicen que la crispación o la tensión por alguna situación que nos desagrada, únicamente nos hace daño a nosotros mismos.

Cuando afecta a la musculatura voluntaria (músculos del esqueleto) se trata más bien de impedimentos debidos al exterior y, cuando se trata de la musculatura involuntaria (intestinos, uréteres, vías biliares, trompas...), son debidos al interior, o sea a nos- otros mismos.

El dolor de cadera.

Representa el eje básico de nuestro mundo de relación. Nuestros esquemas profundos. Nuestra relación con el otro y con el mundo exterior y la manera en que vivimos están automáticamente representadas por la cadera. Las caderas son, junto con la pelvis y la zona lumbar, el asiento de nuestra profunda potencia, así como el de nuestra capacidad de movilidad y de agilidad, interiores y exteriores. Es a partir de las caderas que nuestro “Ser” está en relación con el mundo.

Los problemas de cadera, dolores, tensiones, bloqueos, artrosis, etc., nos muestran que atravesamos una situación donde lo básico de nuestras creencias profundas ha sido puesto en tela de juicio, implica una gran decepción. El hecho de que esta articulación, que es el apoyo primigenio y

fundamental de la pierna, falle, significa que nuestros apoyos interiores más profundos, nuestras creencias mas soterradas que están en relación con la vida también nos fallan. Nos encontramos con un sentimiento de traición o de abandono, tanto por nuestra parte como por parte del otro.

El dolor de rodillas.

Cuando una articulación se paraliza, existe un bloqueo, una incapacidad inconsciente para realizar la función que llevaba a cabo dicha articulación. En este caso, sería falta de deseo inconsciente a desplazarnos a determinados lugares que deseamos.

El significado de la flexión de la rodilla está en relación con doblarse hacia atrás; es la puerta de la aceptación, la capacidad de soltar, ceder ante la vida, “recular”.

La colocación de una prótesis sustitutoria representa una mentira, una simulación de ser quien no somos.

El dolor de hombro está enfocado a la acción mientras que la cadera está enfocado a la relación. El hombro sostiene la trama inconsciente de nuestra relación con esa acción y esa voluntad de dominio. Los prejuicios y las intenciones pertenecen al aspecto simbólico del hombro; es un nivel de expresión de auto exigencia. Nuestra propia censura es brutal.

Lumbalgia y lumbociática

El problema que refleja este síntoma es la sobrecarga de quien toma mucho sobre sus espaldas, generalmente más de lo que podemos aguantar. El dolor obliga a descansar y habría que aprovechar este descanso para reflexionar...

Aseguran que detrás de las grandes hazañas siempre hay un complejo de inferioridad que se está tratando de superar. El aplastamiento de los discos vertebrales empequeñece físicamente y obliga a encorvarse. De esta forma el cuerpo traduce la verdad que se intenta ocultar.

Indica dificultad de la persona para aceptar los cambios, en particular en los medios familiares y profesionales. Sentimos dificultad en cambiar de posición o de actitud ante la vida.

Al igual que la cadera, el hombro es la puerta de la integración, la puerta del no consciente, sólo que, en este caso,

Texto : Doctora Maria Isabel Heraso www.fundacioninternacionaldeldolor.org