Laberinto No.691 (10/09/16)

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Laberinto

LEONARDO PADURA

santiago gamboa p. 02

POEMAS INÉDITOS

elena garro p. 04 y 05

UN RECUERDO DE REGINA SWAIN mauricio carrera p. 05

NÚM. 691

MILENIO

sábado 10 de septiembre de 2016 FOTO: RICARDO TRABULSI

ENTREVISTA A ENRIQUE NORTEN laura cortés p. 06 y 07


ANTESALA

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LABERINTO

ESPECIAL

El comunista en Nueva York AVELINA LÉSPER www.avelinalesper.com

CASTA DIVA

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Qué hace un muralista comunista en Nueva York? Pintar a Lenin. Diego llevaba sus ideas políticas a los muros, pero los muros soportaban a Diego. Con su natural y casi obsesiva fijación por llamar la atención, por dominar el espacio, que como decían de Orson Welles, lo hacía también físicamente, hizo de su paso por Estados Unidos un espectáculo que se convirtió en leyenda. La petición de Rockefeller de que borrara a Lenin fue la oportunidad de explotar un escándalo, presintió que negándose conseguiría más que cediendo y así fue, la destrucción del mural lo hizo eterno. Es inimaginable que un artista VIP mexicano le diga “No” a un potentado gringo, al contrario, son obsequiosos y fáciles. La exposición Diego Rivera re-

ALFILERES ARMANDO ALANÍS @elsaltillero

visiones de Norteamérica en el Museo Mural reúne bocetos y fotografías de esta épica estancia. La exposición muestra cómo el dibujo es el alma del muralismo, cada idea, personaje, situación, la composición misma están planeados meticulosamente en el papel. La línea pulcra del dibujo de Rivera, la sencillez de sus trazos, organizaban una composición que refleja las condiciones laborales y sociales del capitalismo moderno y nos remite a la construcción de la pintura renacentista. Las máquinas, el nuevo obrero, el apogeo industrial que desembocaría en la Gran Depresión están en los murales de Detroit. El mural del San Francisco Art Institute y su inteligente propuesta de centrar el tema en el proceso de creación muralista,

Mural de Diego Rivera en el Instituto de Arte de Detroit (fragmento)

con cada estado descrito sobre los andamios, es una evolución de secuencias cinematográficas. Entre 1930 y 1933 permaneció allá con Frida Kahlo, la gran capacidad de trabajo de Diego se dividía entre sus murales y su intensa campaña de promoción, en las fotografías expuestas está Frida Kahlo con su uniforme de folclórica, en la típica actitud de “una mexicana en Nueva York”, eran embajadores artísticos y agitadores sociales, ese tipo de personas a las que la sociedad neoyorquina es adicta. Diego ya era un artista conocido, había

expuesto en el MoMA y posicionó al muralismo mexicano en un lugar que nuestro arte nunca ha vuelto a ostentar. Es revelador ver que sus obras muestran a un artista individualista, original, que es capaz de imponer su lenguaje y estilo en la selva del arte mundial. El contraste con la pobreza, el populismo del arte VIP mexicano de hoy, que se pierde entre la imitación y la paupérrima realización, vive de explotar el hecho innegable de que el arte mexicano se cimentó internacionalmente con el muralismo. L

El dinosaurio y el caballo se miraron desconcertados desde dos momentos de la Historia. EFE

Padura AMBOS MUNDOS

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SANTIAGO GAMBOA Facebook: Santiago Gamboa–círculo de lectores

unca olvidaré una noche de julio de 1992, en el hotel Chamartín de Madrid. Yo acababa de llegar de París como periodista para cubrir la Semana Negra de Gijón, dedicada al género policial, cuya primera jornada era el Tren Negro que partía de Madrid. Todos debíamos llegar a ese hotel, pues al día siguiente, muy temprano, salíamos juntos hacia Gijón. Pero al registrarme me llevé una sorpresa y fue que el festival tenía por costumbre alojar a dos invitados por cuarto. Me pareció incómodo pero lo acepté, emocionado como estaba por ir a la Semana Negra. Al subir a la habitación no había nadie y rogué por que mi compañero no viniera, pero después de la comida, casi al filo de la medianoche, volví a subir

y ahí lo vi: era un cubano de barba muy negra estilo Abraham Lincoln. Nos presentamos, nos lavamos los dientes por turnos y luego cada uno se metió en su cama, pero al apagar la luz ocurrió algo monstruoso: ¡el cubano empezó a roncar como si se hubiera tragado una motosierra! Desesperado volví a vestirme y salí a buscar un bar donde pasar la noche. El de la estación ya había cerrado así que debí ir a uno de taxistas que abría hasta el amanecer. Regresé poco antes de las seis, hora en que había que levantarse, para usar primero la ducha. El cubano me dio los buenos días sin preguntar nada, pero luego se pasó el festival diciéndole a todo el mundo: “¡Qué raros son los colombianos! Se acuestan con su pijama completo y apagan la luz, pero a los diez

minutos se vuelven a vestir y se van. ¿Duermen todos tan poco?”. Pero le perdoné esa noche, pues a partir de ahí, y de la mano de Mario Conde, Leonardo Padura me hizo vivir los sinsabores de La Habana, lo que él llama la cultura ciclónica de la ciudad, atacada cada cierto tiempo por esos vientos endiablados, pero también el valor de las viejas amistades y el apego a ciertos barrios, a ciertas casas que son el paisaje de nuestra vida y que, de algún modo, saben de nosotros. Y por encima de todo el amor a la

escritura, a esa novelita que Mario Conde está escribiendo siempre en medio del huracán que llega, y por eso mientras otros amarran las tapas de los depósitos de agua o cargan colchones o televisores, Conde sigue en su cuaderno, “hasta que otro estruendo, llegado de la calle, le advirtió al escribano que la demolición continuaba, pero él se limitó a cambiar de hoja para comenzar un nuevo párrafo, porque el fin del mundo seguía acercándose, pero aún no había llegado, pues quedaba la memoria”. L

dirección josé luis martínez s. edición roberto pliego, iván ríos gascón arte y diseño salvador vázquez


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ANTESALA

ESPECIAL

× J UA N

RA FA E L

CO R O N E L

R I V E R A ×

Febbre Gialla Este poema forma parte de African Jamboree (Talamontes Editores, México, 2016), un volumen que confía en las sonoridades musicales

L

a luz de las cebras a galope es el silencio amarillo de la parvada nievan agujas copos de alfileres en la laguna congelada de Lovere se oye seco trote el de la madera del pasacaballo aquí el soplo pasmado ráfagas de aves se desmanchan mi hermana envolviendo regalos navideños parece un palafrén preso en los brillos cada moño un abalorio mientras tanto cosechado estruendo la negrada de Guerrero ejecuta la comparsa del pescado suben y bajan bultos ×EKO×EX LIBRIS×LISÍSTRATA×

Las misóginas CARACTERES

ÁLVARO URIBE alvuribe@yahoo.com.mx

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ese a lo que piensan muchas mujeres (y a lo que dicen pensar muchos hombres), la misoginia no es una malformación intelectual exclusivamente masculina. Parece innegable que muchos hombres (cuando no la mayoría de los hombres, o acaso todos los hombres sin excepción) contemplan a las mujeres con extrañeza o con recelo o con temor o con desprecio o hasta con odio, como si ellas pertenecieran a otra raza, o incluso a otra especie, ambas naturalmente inferiores. Resulta muy probable, además, que este vicio o este defecto del pensamiento, constitutivo de la psicología general del macho, sea hereditario: no en el sentido genético, sino atávico. Los varones son misóginos porque lo fueron sus padres y los padres de sus padres y así hasta el despadrado Adán, que nunca le perdonó a Eva el ardid de la manzana. Pero desde la pareja primigenia no hay hijo de varón que no sea también y sobre todo hijo de hembra. Y el machismo, así como la misoginia, son venenos que se inoculan en la mente de los vástagos por conducto de la mente de los progenitores. Y la madre puede ser tanto o más misógina que el padre. En sus hijas, y en las hijas de otras hijas, muchas mujeres (cuando no la mayoría de las mujeres, o acaso todas las mujeres sin excepción) se extrañan o recelan o temen o desprecian o hasta odian a sí mismas: como si los hombres pertenecieran a otra raza, o incluso a otra especie, ambas no por fuerza inferiores ni superiores, aunque sí de segunda importancia. A Lavinia no la preocupa que a los hombres les vaya bien, ni siquiera que les vaya mejor que a ella. Le interesa, bastante más, que a las mujeres les vaya mal y, de ser posible, peor que a ella. Ha publicado varios volúmenes en cuyas páginas escasas hay pocos renglones siempre cortos y muchos espacios vacíos. Así, es poeta. Cuando su colega Vandervelde el otrora rebelde ganó un concurso nacional de poesía al que ella también había enviado un manuscrito inédito, lo felicitó con efusión que no parecía insincera. Cuando su amiga Regina ganó un premio nacional de poesía al que ella también había mandado un libro, Lavinia solo se resignó a felicitarla hasta que, luego de hacer unas averiguaciones, pudo decirle con verdad que el jurado la eligió porque descalificaron al favorito. Regina también tiene lo suyo. Un año después, cuando a ella le tocó ser jurado del premio que había obtenido y Lavinia se presentó con el libro resultante del manuscrito perdedor en el otro concurso, no solo votó en su contra en la ronda final. Regina también le explicó a Lavinia, sin que ésta le pidiera explicaciones, que había abogado por ella con toda su energía pero los demás prefirieron a un poeta hombre. Tales trapacerías recíprocas no contaminan su complicidad feminista. Siempre que se defiende la causa de las mujeres, Lavinia la adalid de la misoginia y Regina la misógina están juntas. La semana pasada firmaron un manifiesto para exigir la paridad de género en los jurados que otorgan las becas a los creadores artísticos. L

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LABERINTO

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Cuatro poemas Durante sus estancias en Nueva York, París y otras ciudades europeas, la autora de Los recuerdos del porvenir incursionó en la poesía que, a su regreso a México en 1953, se dedicó a revisar y transcribir. En 1997, un año antes de su muerte, puso esos trabajos en manos de Patricia Rosas Lopátegui, quien ha dado fin a la encomienda de editarlos y publicarlos con el título de Cristales de tiempo (UANL, México, 2016). A la luz del centenario de su nacimiento, ofrecemos estas piezas que muestran la andadura de un temperamento volcánico ENSUEÑO

ELENA GARRO

Roto el ensueño, quebrada la ilusión, el soñador del campo que con los ojos abiertos oyó una noche el canto de la oscuridad, ahora vela una fétida esperanza.

O. Todo el año es invierno junto a ti, Rey Midas de la nieve. Huyó la golondrina escondida en el pelo. La lengua no produjo más ríos atravesando catedrales ni eucaliptos en las torres. Huyó por la rendija la ola azul en cuyo centro se mecía la paloma. El cielo blanco bajó para ahogar a los árboles. El lecho es el glaciar que devora los sueños. Surgió el puñal de hielo para cercenar minuciosamente la pequeña belleza que defiendo. El sol se aleja cada día más de mi órbita. Solo hay invierno junto a ti, amigo. 18 de enero de 1955

MAR DE DEDOS Hay muchos dedos. Muchos dedos agresivos. Los índices se levantan. Los índices que señalan al prójimo que acusan que envidian. Una cortina de dedos Una marea de dedos Una muralla me señala. Las lenguas se levantan, se despiertan se afilan se liman en los dientes se envenenan en la saliva del colmillo. Lenguas rasposas. Lenguas que han lamido culos. Lenguas que duermen solas en sus cuevas de cavidades putrefactas. Las lenguas que no vemos en medio de las risas. Lenguas sin ventilar. Lenguas que pican. No muerdan a su nombre tan hermoso. México, 1956

Olvida sus campos alguna vez inundados de ensueño, la tierra que siempre reverbera porque nació sin saberlo enamorado de ella. Olvida hasta el tiempo cuando amó mujer, cuando ebrio ahuyentaba los espantos. Olvida en fin de todo lo que es ensueño y despierta un día infinitamente lejos de la infancia y de cuanto soñó. Como si en un mismo día se hubiera hecho viejo. Él, que despertó de golpe abandonado por los astros, perseguido por el hombre, la tierra inundada de sangre, el día que ya no oyó ladrar los perros y que en silencio los montes y las nubes y hasta el mismo azul del cielo se le vinieron encima, en ese día en que ocurrió todo, perdió el ensueño. Y si tuvo algún pensamiento después, ya no fue bueno… Había sido tocado ciertamente por el mal… Para acabar con la rabia hay que matar a muchos Perros. México, 1964


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HOY ÁRMESE MI MANO (VERSIÓN 2) Hoy ármese mi mano, enciéndase la luz verdosa con el odio. Hace tiempo que tengo un enemigo. Estamos frente a frente. La puerta se ha cerrado. Algo trama. Nada va a producirse. Los dos cerramos la boca. La puerta se abre, se cierra. Puerta maldita al infinito olvido de la calle. Mi odio el fantasma de mi odio sigue sus pasos. El odio de una daga en la garganta. El furor de la hoguera con las ramas. La frialdad repetida de la hacha. El ojo del reptil pegado a un pájaro. El buitre y su apetito de carroña. La muerte gusanera en una boca. Mi odio son esos odios juntos. Su cuerpo sigue al tuyo Se te aparece en las bocacalles. Te nubla los ojos para mirar los rostros Te amarga el paladar para probar los frutos Ronda tu cabecera y puebla tus sueños de imágenes sombrías. Entra reptil en tu pecho. La sonrisa te la vuelve mueca. Petrifica el amor en tu mano. Te deja desnuda. Te mata poco a poco. El odio tiene pies de gato. L París, 1949

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LITERATURA

Regina Swain

Superniña y la Generación X SEMBLANZA MAURICIO CARRERA

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acida en Monterrey en 1967, Regina Swain llega en 1988 a una Tijuana donde “la cultura estaba de moda. Todo mundo quería ser intelectual o cuando menos vestirse como ellos” (Ensayos de juguete, Instituto de Cultura de Baja California, 1999). La existencia o no de una cultura y una literatura fronterizas estaba en el debate tijuanocéntrico de entonces. Conoce al poblano Doc Eleache (Jorge Raúl López Hidalgo), quien la invita a formar parte de la Asociación de Escritores de Tijuana. Esta “morra fronteriza”, como se define, era la más joven e ingenua de ese “grupo de artistas, bohemios y librepensadores”. Gana en 1992 el Premio Gilberto Owen con un libro de cuentos minúsculo aunque deslumbrante: La señorita Superman y otras danzas. De él proviene “Basilio Tajadura”, un texto que contiene muchos de los elementos característicos en la narrativa de Swain. La magia y el surrealismo literarios. El rompimiento de los ejes paradigmáticos para crear imágenes insólitas en sus adjetivos pero tercas y bellas en su necesidad de ser. La renovación del mito y de los cuentos de hadas (“Me moviste el tapete./ Ella preguntó si era persa y si volaba”). La crítica a la sociedad de consumo, o mejor, el canto a la tremenda irresponsabilidad que significa ser joven en un mundo marcado por la crisis económica, el desempleo, la violencia, la computadora, el amor nestlé y la tele. En sus cuentos, los protagonistas se debaten entre el ser ideal que se les impone y la cruda realidad que los marca y los limita. Es un mundo femenino donde las niñas buenas, obligadas a tomar Shirley Temples en lugar de tequilas, a no fumar, a comer como pajaritos, a no interrumpir y a no llegar a su casa después de las diez de la noche, se rebelan y preguntan: “pero, ¿y las sopas instantáneas, madre, y las carreras de perro por conseguir trabajo? [...]. ¿Dónde meto todo eso? ¿Dónde lo coloco? ¿A un lado de los osos de peluche? ¿Entre las sábanas blancas? ¿Dónde guardo las prostitutas de la Zona, mamá, dónde pongo las angustias? ¿Dónde pongo el miedo de no ser lo suficiente? [...]. Suficientemente linda, suficientemente buena, suficientemente seria, alta, bella, fuerte, brava o experimentada. ¿Cómo viven hoy las niñas buenas, entre gritos y conflictos bélicos, entre azul y buenas noches, entre listas de amores frustrados, líneas de coca y uno que otro arponazo a la conciencia, entre nubes de humo que se burlan?” Era la literatura rosa transformada por quien ha leído desde Beauvoir hasta La pequeña Lulú y desde la revista Fem hasta La familia Burrón . Es el realismo mágico versión Generación X. Ella misma se asume

como parte de este movimiento generacional, caracterizado por las McChambas, o empleos mal pagados y sin prestigio, la aminorescencia o filosofía de las bajas expectativas, así como por una gran sensibilidad para no caer en las trampas mercantiles y reconocer la abrumadora vida cotidiana que los marca y ve con desdén. Regina Swain teorizó al respecto en su libro Ensayos de juguete: “La imaginación era la clave de entrada a un mundo mágico que nos hacía olvidar los divorcios de nuestros padres”. La infancia y la preadolescencia eran felices en su mundo kool–aid, Fiebre de sábado por la noche, Señorita cometa, Siempre en domingo y la cueva de las orquídeas susurrantes y la princesa Amanecer. “Y entonces llegó la nacionalización de la banca. El sueño del petróleo acabó. La mayoría de los padres de tus amigos se divorciaron. Alguien de tu salón murió antes de acabar la prepa. Tus amigas se convirtieron en madres solteras. Alcoholismo. Drogadicción. SIDA [...]. ¿Te suena familiar? Bienvenido a la Generación X”. Agrega: “Los jóvenes de la Generación X nacimos en el cuerno de la abundancia, y ahora, como adultos, se nos obliga a enfrentarnos a un mundo en crisis económica”. Estos jóvenes viven en un universo de “sopas instantáneas y amores instantáneos”, como se queja la señorita Superman en su cuento del mismo nombre. Esta queja es la “rebelión del basurero” que caracteriza a la Generación X, surgida gracias a factores como el libro homónimo de Douglas Coupland, la película Slackers, el grunge y, en México, al sexenio de Echeverría. En las narraciones de Swain se respira un mundo adolescente que no quiere crecer, que entiende el mundo pero no le gusta. “Soy excéntrica, caprichosa, impredecible, vanidosa, opinionada, lloronzuela y terrible. Una mutación genética que a veces se ríe de la vida y a veces piensa demasiado. Creo que así es mi literatura”. En uno de sus textos definió su estilo literario como “una especie de cursilería posmoderna, con una gran influencia de las tiras cómicas y la televisión de los setentas y ochentas”. En Ensayos de juguete reconoce la gran influencia de sus abuelos en su vocación como escritora. El abuelo le decía: “Güerita: te compré un caballo con alas, pero cuando llegamos al rancho se rompió la cuerda y ahora tienes que ir a buscarlo”. Su oficio literario giraba alrededor de esa búsqueda. Juan Villoro consideraba a Swain como “una escritora iconoclasta. Una escritora peligrosa”. Algo de esa fuerza se perdió en los últimos años, si bien ahí está esa novela curiosa (con título de verso de e.e. cummings), Nadie, ni siquiera la lluvia . Murió el 1 de septiembre de 2016, a los 49 años. Inició entonces, como lo dijo en uno de sus versos, “la tarea eterna de tejer los tiempos”. L


LABERINTO

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Enrique Norten

“NOS TOCA CREAR EL AMBIENTE QUE HABITAMOS”

Con ambiciosos proyectos próximos a inaugurarse, lo mismo en Nueva York y San Francisco que en Ciudad de México, el arquitecto mexicano expone en esta entrevista la médula de su quehacer y de sus creaciones mayores Museo Amparo LAURA CORTÉS

E

n el año 2000, Enrique Norten (Ciudad de México, 1954) abrió en Manhattan una sucursal de su firma TEN Arquitectos (Taller de Enrique Norten). Sus proyectos en el extranjero iban en aumento y necesitaba un centro de operaciones con ubicación estratégica. La audacia no fue menor. Norten fundó en la gran metrópoli estadunidense el primer despacho arquitectónico mexicano con potencial para trabajar en cualquier lugar del mundo. Con más de 90 obras construidas y cientos de diseños en México, Estados Unidos, Corea, Gran Caimán y España, Norten es el arquitecto mexicano con el mayor número de proyectos en el extranjero. El urbanista, quien divide su tiempo entre su oficina en Manhattan y la localizada en la colonia Hipódromo, en la Ciudad de México, tiene en puerta alrededor de 20 proyectos, cada uno de ellos supervisados directamente por él. “Sería irresponsable aceptar más”, dice en entrevista con Laberinto quien desde 1998 es catedrático de la Universidad de Pennsylvania y ha sido profesor en instituciones como la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Yale y crítico de Diseño en la de Harvard. En julio pasado se colocó la primera piedra del Museo Mexicano de San Francisco, el primer recinto de arte, cultura y patrimonio mexicano, chicano

y latinoamericano del mundo, cuya edificación está a cargo de Norten. Su firma también realiza un complejo arquitectónico de usos mixtos en Brooklyn, que albergará 379 condominios y será sede de la nueva sucursal de la Biblioteca Pública, además de otros organismos culturales. Su consolidación en el panorama internacional no le ha impedido seguir trabajando en México, donde es autor de ambiciosos proyectos. Uno de ellos es el Museo Nacional de la Energía y la Tecnología, en el Bosque La belleza en la de Chapultepec, que arquitectura es algo muy relativo. Una buena contará con más de 40 pieza de arquitectura no mil metros cuadrados siempre es considerada de áreas verdes. Ciudad de México y bella por una mayoría Nueva York albergan algunas de sus obras más representativas como el edificio de usos mixtos de Televisa Chapultepec, por el que recibió el prestigioso Premio Mies Van der Rohe; el Centro Nacional de las Artes; el primer rascacielos en el barrio de Harlem; el conjunto habitacional y corporativo de Mercedes Benz: Mercedes House y el lujoso Hotel Americano en Manhattan, logros superiores si se considera la complejidad que conlleva construir en la isla neoyorquina, que va desde numerosas trabas burocráticas hasta el reducido espacio físico.

Pero Norten está habituado a los desafíos. Ya lo había demostrado a fi nales de la década de 1980, cuando junto a colegas como Alberto Kalach e Isaac Broid revolucionó el diseño nacional dominante y creó una arquitectura mexicana original haciendo uso de la tecnología y aplicando conceptos de sustentabilidad. “Buscábamos, desde nuestra plataforma mexicana, participar en el discurso universal”, reitera. Con su arquitectura de acero y cristal no solo rompió con los cánones establecidos, también se incorporó de manera defi nitiva al escenario internacional. ¿Cómo ha sido trabajar en una ciudad tan compleja desde el punto de vista arquitectónico como Nueva York?

Nueva York es una ciudad de oportunidades. Tenemos la suerte de llevar muchos años trabajando ahí y de seguir teniendo numerosas oportunidades. Nueva York es una ciudad que se reinventa todos los días. Algunas cosas se tiran y otras se sustituyen. Algunas más se transforman mientras que otras se consolidan. El espacio no ha sido impedimento para seguir construyendo. Ahora mismo tenemos un gran proyecto de más de 200 mil metros cuadros para un centro comercial. Creamos mil 200 viviendas, comercios y oficinas en un espacio que ya estaba totalmente construido.


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DE PORTADA

FOTOS: TEN ARQUITECTOS

Escuela de Negocios de Rutgers

Ese es solo un ejemplo de cómo la ciudad va transformándose. Otro ejemplo es el edificio Mercedes House, al oeste de la isla de Manhattan. Es nuestra edificación más alta y la de mayores dimensiones: un conjunto de usos múltiples que ocupa tres cuartas partes de una manzana. Está a punto de terminar la llamada Torre Brooklyn. ¿En qué consiste?

Se trata de un proyecto muy interesante de participación pública y privada; esto es, con inversión del gobierno de la ciudad y de un desarrollador privado. Es una torre con 350 departamentos, pero es mucho más que eso: una combinación de vivienda, comercios y espacios culturales para cuatro importantes instituciones neoyorquinas. Esta obra tiene una condición muy especial por muchas razones. Una de ellas es su ubicación en el centro de Brooklyn, una de las áreas de mayor desarrollo urbano. El proyecto es una especie de ancla en un parte que desde hace algunos años se ha considerado el Centro Cultural de Brooklyn. ¿Cuáles son los proyectos actuales de TEN en México?

Tenemos varios y en distintas etapas. Uno que está prácticamente terminado y en el que las cosas parecen ir muy bien es el nuevo Museo Nacional de la Energía y la Tecnología en el Bosque de Chapultepec. El diseño pretende integrar armónicamente el edificio al bosque, las áreas verdes serán totalmente públicas. La oficina también está a cargo del diseño de las estaciones de la nueva línea del tren que unirá al Estado de México con la Ciudad de México. Además, tenemos proyectos privados, edificios de usos mixtos que son casi como pequeñas ciudades dentro de otras ciudades. Su oficina diseñó un plan maestro para la recuperación de Xochimilco. ¿Qué sucedió con él?

Por desgracia, está totalmente olvidado en uno o en muchos cajones. Es uno de esos proyectos que no sobrevivieron al cambio de administración sexenal. No hubo continuidad debido a la diferencia de intereses entre los líderes de la administración pasada y la actual. Trabajamos en ese diseño durante los seis años anteriores y está totalmente concluido. Con esta obra se pretendía el rescate de un área importantísima de la ciudad, protegida por la UNESCO. El proyecto contempla la posibilidad de reinventar esa zona y al mismo tiempo darle una plataforma para que pueda desarrollarse hacia un futuro mejor. Ojalá un día renazca el interés en él. ¿Cómo puede la arquitectura hacer las ciudades más habitables?

Es una profesión que puede aportar muchísimo a la calidad de vida de las personas. Los arquitectos somos los encargados de crear el ambiente que habitamos. En ese sentido, construimos estructuras de todo tipo, no solo físicas, también creamos estructuras de movimiento y de pensamiento. A

través de la arquitectura se van definiendo las oportunidades que una ciudad brindará a sus habitantes. La gran mayoría de los arquitectos quiere cumplir con responsabilidades que no tienen que ver solo con condiciones funcionales o de uso sino también estéticas.

arquitectura. Surgió un discurso universal que no se había vivido antes y como arquitectos nos tocó documentar ese gran movimiento a través de nuestro trabajo.

La arquitectura es muy compleja. La belleza en la arquitectura es algo muy relativo. Una buena pieza de arquitectura no siempre es considerada bella por una mayoría. Pero una obra no pierde su belleza por el hecho de que, por desconocimiento, un público no la considere así. La belleza es, desde mi punto de vista, un valor absoluto, pero puede ser interpretada de muchas maneras. Por eso prefiero no utilizar ese término.

Yo no quiero creer que hay un mexican moment porque eso implicaría una condición muy efímera. Es casi como decir “vamos a vivir nuestros 15 minutos de fama”. Prefiero pensar que México ha llegado a un momento de madurez, de consolidación en distintos campos en las artes plásticas, en la música y en la arquitectura. México tiene una fama bien merecida en la creación global. Los mexicanos somos jugadores que participamos seriamente en el discurso universal y eso ha merecido la atención del mundo hacia nuestro país.

¿Una de las funciones de la arquitectura es embellecer las ciudades?

Se le considera precursor de un movimiento que transformó la arquitectura mexicana. ¿Cómo recuerda esa época?

No me toca a mí determinar si fui precursor. Eso se lo dejo a ustedes. Pero lo que sí puedo decir con certeza es que a varios arquitectos nos tocó vivir un cambio definitivo en este país. A partir de la década de 1980 vivimos un momento de apertura. La globalización, las nuevas tecnologías, la interconectividad, todo eso tuvo un efecto importantísimo en la

En la escena artística internacional (cine, música, danza), hay muchos mexicanos destacados. A usted se le ha llamado el arquitecto del mexican moment. ¿Qué opina de eso?

¿Por cuál de sus obras le gustaría ser recordado?

Cada proyecto es diferente y responde a condicionantes muy diversas. Cada uno tiene su propio sello y su propia personalidad. No es que me gusten los ejemplos simplones pero es como una familia: todos los hermanos se parecen pero cada uno es diferente. Sin sonar cursi, pienso que el mejor proyecto es el que estoy haciendo ahora. L


LITERATURA

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LABERINTO

ESPECIAL

muchos referentes simbólicos, alquímicos, para dar cuenta de la posible experiencia de lo inefable. No es tradicionalmente místico porque la mística se debe entender como la experimentó Teresa de Ávila o San Juan de la Cruz, que es ese trance y experiencia de la criatura con su creador: la boda mística. Más bien, tiene este sesgo porque busca el espíritu a través de muchas figuras alegóricas, tradiciones, pero no hay ninguna religión o dogma. Los investigadores han dicho que es más un libro alquímico que místico, aunque entre la alquimia y la mística hay caminos de búsqueda de conciencia y de espíritu parecidos. Lo que digo es que Liber (Libres) Scivias es más alquímico porque implica esta transformación y decantación de la materia, que era el fin de los alquimistas. En principio era la búsqueda de la piedra filosofal, de la transformación de la piedra en oro que era llegar al conocimiento o la iluminación. Esto lo explica muy bien Carl Jung, quien es el gran transformador de la alquimia moderna, pues en Psicología y alquimia explica que el proceso para que las personas cumplan el proceso de individuación es un proceso alquímico.

Claudia Posadas

“La poesía es un acto de rebeldía” La escritora conversa sobre su libro Liber Scivias, reeditado en fechas recientes, un ave rara que convoca mitologías clásicas y mitos medievales ENTREVISTA MARCOS DANIEL AGUILAR

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ditado por la Dirección de Publicaciones de la UNAM, Liber Scivias (México, 1970), de Claudia Posadas, es un libro que no solo trata de rastrear los orígenes de las pulsiones humanas sino el principio del lenguaje y de la literatura, pues Posadas se inspira en mitologías clásicas y mitos medievales para escribir este poema de largo aliento que constituye un caso sui generis en las actuales letras mexicanas. Platicamos con la también autora de La memoria blanca de los muros (1997) acerca de la poesía y su planteamiento estético. ¿Por qué crees que hay pocos espacios para la poesía y la crítica de ésta?

Tiene que ver con la forma en que los géneros literarios funcionan en un mercado real. Evidentemente la novela es un campo de prioridad. Y hay géneros que no entran en estas dinámicas de hegemonías comerciales, como el ensayo, la poesía y los géneros híbridos, pero no es que no tengan valores estéticos, sino se debe a cómo se organizan en el mercado globalizado. Ahí la poesía no ocupa un lugar preponderante. Sin embargo, hay que defender los espacios donde haya reflexión en torno a las obras. Los lectores, al final de cuentas, tienen la última palabra, muy alejada de los discursos estéticos como mecanismos de poder.

Por otra parte, como la poesía no está determinada por estos discursos que mueven el campo cultural, es más libre en el sentido de que tú creas la obra para ti. Desde este punto de vista, la poesía es un acto de rebeldía y de creación genuina. Liber Scivias es un libro extraño. Aparentemente utilizas un lenguaje y estructuras del pasado.

Me considero una rara avis de mi generación. Este trabajo no tuvo mucho entendimiento mientras se fue creando en lecturas, talleres y en las becas de Jóvenes Creadores del FONCA. Tuvo rechazo e incomprensión porque la gente desconocía los temas, porque es un trabajo con pocas referencias en la poesía mexicana. Sin embargo, fui fiel a mí misma. No es un poemario que se adecue a modas estéticas. Curiosamente, mi trabajo fue reconocido y entendido, y lo sigue siendo, en Chile, cuando lo di a conocer en una residencia artística en 2008 que realicé con apoyo del FONCA. Este libro ya fue motivo de una tesis de licenciatura, de estudios en coloquios de poesía mística organizados por el Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM y ha llamado la atención de académicos como Alejandro Higashi quien está preparando un artículo donde sitúa mi libro fuera de los sistemas actuales de posicionamiento estético que él analiza muy crítica y honestamente. Defines tu poemario como de “compresión mística”. ¿Qué significa hacer poesía mística hoy?

Tiene una búsqueda de conciencia muy fuerte, que es la búsqueda de un “yo poético” a través de

Al leer tu poemario se pueden identificar ideas encriptadas en palabras. Interesante pero no es una lectura sencilla.

Son poemas muy referenciales, escritos bajo la idea de Ezra Pound de que la poesía y el poema son un testimonio de lo humano. Por ello, hasta el final se cumple la transformación de la materia en conciencia y ahí entra el lenguaje simbólico, porque es donde se habla de una experiencia de lo inefable y porque, como dice Pound, el símbolo expresa lo que no puede el lenguaje cotidiano normal. Ahí la importancia de la poesía, porque ella llena esos ecos y huecos que deja el lenguaje. A pesar de la forma y el fondo, ¿hay valores contemporáneos en tu libro?

Hay una metáfora que utilizo cuando hablo de las herejías medievales. Te preguntarás ¿qué tienen que ver las herejías medievales con la época contemporánea? Pues éstas fueron un acto de resistencia desde el espíritu a los discursos hegemónicos de la iglesia ortodoxa que se estaba imponiendo y que creó la Inquisición para romper estas herejías, las cuales, por cierto, tenían ideas interesantes, ideas apegadas al espíritu. Por ello, me parece una metáfora contemporánea y actual de cómo los discursos hegemónicos, que necesitan legitimarse para tener un poder, destruyen las otras formas de pensamiento, no solo de religión, sino en el arte, en la política, en el lenguaje, y éste es el valor contemporáneo que he querido expresar. En la modernidad, que es exclusivamente materialista, desconocemos esta forma de sentir y pensar. ¿Piensas que no entendemos del todo el Medioevo?

No soy especialista en pensamiento medieval, pero es interesante para mí para crear una revelación, un paralelo contemporáneo, pero más que lo medieval es la peregrinación hacia las fuentes lo que hemos olvidado. Quiero recordar a Lanza del Vasto, autor de la novela Judas, de quien aprendí a recorrer las fuentes antiguas. Este poemario ha sido una peregrinación por las fuentes que especialistas como Angelina Muñiz–Huberman me han enseñado a través de referencias y tradiciones: lo judaico, lo gnóstico, lo alquimista. Soy una alumna humilde de todo esto. L


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PERFUME DE HIELO YOKO OGAWA Funambulista España, 2015 312 pp. Tras un año de aparente felicidad, Ryoko recibe inopinadamente la noticia de que su pareja, el perfumista Hiroyuki, se ha suicidado. Para ella, que se dedica al periodismo, será el inicio de una serie de revelaciones. Primero, que Hiroyuki tiene un hermano, Akira, quien viene a la ciudad al enterarse de lo sucedido. Y si bien Ryoko llega a sentir celos de él, no tardan en identificarse pues, para ambos, Hiroyuki tenía secretos. Ella se dedicará a investigar por qué él tomó una decisión tan radical en un día importante para ella. Perfume de hielo puede tomarse como una novela de duelo. ANTOINE DE SAINT–EXUPÉRY. AVIONES DE PAPEL MONTSE MORATA Stella Maris España, 2016 321 pp. Aviador, inventor, matemático, mago, adivino, amaestrador, dibujante, reportero y escritor, Antoine Marie Jean–Baptiste Roger, conde de Saint–Exupéry, ha quedado reducido, como observa Montse Morata, a la etiqueta de “escritor juvenil” por su celebérrima obra El principito, cuya profundidad, que la tiene, ha sido trastocada por malos lectores en cursilería. Este solitario que participó en la Guerra Civil española y desapareció misteriosamente en un vuelo luchando por la liberación de Francia, fue uno de los últimos humanistas del siglo XX. Morata intenta darle su verdadera dimensión. EL OCASO DE LA ARISTOCRACIA RUSA DOUGLAS SMITH Tusquets México, 2016 511 pp. Se ha escrito tanto del triunfo de los bolcheviques, de Lenin conduciendo su locomotora hacia la dictadura del proletariado, que poco interés historiográfico ha suscitado el destino de los grandes terratenientes y consentidos del zar. Qué fue de éstos después de 1917, una vez que la policía política inició la primera de sus innumerables purgas; qué se hizo de quienes no quisieron abandonar Rusia y se dedicaron exclusivamente a sobrevivir; adónde fueron a dar todos aquellos que en un tiempo se supieron poderosos. Smith responde a estas preguntas con pasión y misericordia. U2 REVOLUTION MAT SNOW Grijalbo Barcelona, 2015 238 pp. Emblema de los radical chic , el grupo irlandés U2 comenzó su decadencia artística cuando se subió a una limusina (aunque no se quiera, la fama desubica). Si los últimos discos se han caracterizado por los altibajos, en aquellos tiempos todavía tuvo el impulso para crear álbumes fundamentales como Achtung Baby. Mat Snow realizó esta meticulosa biografía, que puede considerarse definitiva, desde la admiración, y eso se siente página a página. Profusamente ilustrada, dejará satisfechos a los fans. Y bueno, solo los ingenuos lo van a seguir llamando “el mejor grupo del mundo”.

F U EG O

EN LIBRERÍAS

L E N TO ×

LO QUE MATA NO ES LA BALA

Alberto Mansur Ediciones B México, 2016

La perla del género negro ROBERTO PLIEGO robertopliego61@gmail.com

L

o que mata no es la bala debe ser la primera novela de Alberto Mansur porque la segunda de forros solo informa de un abogado “que litiga pleitos de negocios”. Pero eso importa poco; lo que debe ocupar nuestra atención es la mudable naturaleza de su ritmo y su temperamento, una virtud ausente en la mayoría de los representantes del thriller en México, cada vez más propensos a concebir historias y personajes que se obstinan en permanecer iguales a sí mismos del inicio hasta el fi nal. Hace falta una buena dosis de inconformismo y desde luego talento para escribir una novela significativa con los mismos ingredientes que utilizan las demasiadas y prescindibles novelas que se adhieren al género negro y naufragan en el cliché: un reportero de dudosa moralidad, un narcotraficante bendecido por la Santa Muerte, un político matriculado en la escuela de la traición, una belleza morena que se defi ne por sus caderas y su ambición, una rica heredera que despilfarra sexo y mariguana. Mansur ha transformado esa materia inerte en savia literaria. Lo que en muchos es copia dócil de los expedientes policiacos, en él es temple narrativo que ignora las supersticiones preconcebidas. Que Lo que mata no es la bala destaca por la naturaleza mudable de su ritmo y su temperamento puede comprobarse en el curso que siguen las vidas de sus tres protagonistas: el reportero, la belleza morena, la heredera, que comparten cama, techo e infortunios en un país que sugiere a México por los servicios que presta a la barbarie. Están enteros en un principio y a medida que corre la trama vemos cómo emprenden su conversión hacia abominables disposiciones del alma. Son juguetes de los hechos y los hechos respetan las normas dictadas por la política convertida en la faceta conciliadora del narcotráfico, y son también rigurosos en la práctica de la manipulación. Mansur se siente atraído por la violencia pero sabe convocarla. La violación que anuncia la caída de una de las protagonistas se escenifica con las claves del teatro de cámara. La escena inaugural es tan quirúrgicamente sensitiva que no podemos evitar un gesto de repulsa. Por fortuna, esa violencia no augura ningún sermón. Mansur no regaña, no predica, no milita. Narra, narra simplemente con un estricto dominio del tiempo. Lo que mata no es la bala parece destinada a ejercer un influjo benéfico en el género negro a la mexicana. Ya que desdeña ser un apéndice de los espacios editoriales de los medios noticiosos, se instala por derecho en el mundo libre de la imaginación. L


CINE

sábado 10 de septiembre de 2016

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LABERINTO

ESPECIAL

¿En qué momento decidió eliminar la división en capítulos?

Hubo un momento en que me parecía obvio, y no creía que fuera necesaria la referencia. Todo empieza en Jueves Santo y termina en Domingo de Resurrección. ¿Por eso una iluminación que contrasta con la luminosidad propia de la playa?

La estética sirve para transmitir atmósferas y en mi caso quería que fuera decadente. Por eso también fui a la zona vieja de Acapulco. Me interesaba un ambiente un poco sórdido y de pesadez.

Los personajes de su filme, incluyendo al niño, están rotos.

Quería hablar de la construcción de una nueva familia, algo muy común en las sociedades contemporáneas. Creo que todas las descomposiciones sociales empiezan en la casa y en la familia, y según yo se relacionan con la negación de nuestros demonios. En la medida en que superamos estos problemas podemos ser felices.

Alejandra Márquez

“La descomposición social empieza en casa” La prosperidad o el fracaso de una nueva familia es el eje argumental de Semana Santa ENTREVISTA

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ali (Anajosé Aldrete) y su hijo de 8 años, Pepe (Esteban Ávila), se van de vacaciones a Acapulco con el novio de la madre, Chávez (Tenoch Huerta). Sin saberlo de manera consciente, los tres enfrentan el reto de fortalecer sus lazos. Los fantasmas de cada uno propician que en vez de que el viaje les sirva para unirse, se confronten. En Semana Santa, Alejandra Márquez plantea una ácida reflexión sobre la forma en que se construye una familia.

HÉCTOR GONZÁLEZ gonzalezjordan@gmail.com

¿Por qué ceñir la película a la Semana Santa? Primero: es el periodo vacacional más identificable. Segundo: quería hacer referencia a la fiesta católica. En principio, queríamos dividir la película en capítulos y que cada uno aludiera a cada día de esta época. No podemos negar el papel del catolicismo en la configuración de las familias en Latinoamérica. Una de las decisiones que tomamos fue la de no traducir el título cuando fuera necesario para marcar más la referencia.

HOMBRE DE CELULOIDE

¿La familia se vuelve un lastre?

En las familias empieza todo, son reflejo de lo que vive un país. Una forma de verlo, es comprender que no podemos encasillarnos. No todos cabemos en los mismos esquemas, cuesta trabajo aceptar lo que en realidad queremos hacer. Siento que vengo de una sociedad en la cual la familia es cerrada e inflexible. Por eso juego con los roles y de pronto los adultos se comportan como niños y viceversa. A cada personaje le otorga la posibilidad de escapar de su condición pero ninguno termina por concretar el cambio.

Porque se dejan llevar por el esquema conservador. Las vacaciones tienen un sabor agridulce porque solemos verlas como un escape para ser felices y estables, cuando la realidad es que arrastramos nuestros miedos y frustraciones. ¿Hay una razón particular por la que no usa música incidental?

Hay poca música, la uso cuando me ayuda a proyectar las emociones de los personajes. Las canciones de playa aportan atmósferas pero hasta ahí. El cine produce una sensación similar a la que tenemos cuando llegamos a un restaurante e intentamos entender la conversación de la mesa de al lado. L FERNANDO ZAMORA

@fernandovzamora ESPECIAL

La frialdad de la modelo tonta

E

l demonio neón es un pretexto para fotografiar mujeres bonitas, jugar con la fotografía y construir una obra sostenida por completo en la imagen. El director Nicolas Winding Refn consigue una obra de arte visual que, aunque bien escrita, promete más de lo que cumple y es tan fría como las modelos de las que, a veces, parece burlarse. La historia está contada en viñetas mediante las cuales nos vamos enterando de que Jesse es una provinciana inocente que ha llegado a Los Angeles con el deseo de triunfar: “No sé cantar, no sé escribir, no sé actuar, pero soy bonita y creo que puedo hacer dinero con ello”. En la gran ciudad, Jesse encuentra a una misteriosa maquillista que pronto se revelará como fuente de problemas. Además de sus falsas promesas, la historia está llena de cabos sueltos. Nunca se explica, por ejemplo, cómo es que habiendo triunfado nuestra modelo aún tiene que vivir en un hotel de mala muerte. Tal vez sea porque El demonio neón se solaza en una única apuesta: ser tan truculenta que por momentos parece ser más bien un catálogo de parafilias: el dueño del motel (interpretado por un decadente Keanu Reeves)

es un pedófilo; hay también una necrófila, dos caníbales y una secuencia en que una mujer orina frente a una ventana en franca imitación de las imágenes chocantes pero hermosas del fotógrafo Jan Saudek. A decir verdad, las influencias del director van más allá del mundo de la moda y llegan hasta el cine. Hay en Nicolas Winding Refn ciertas pretensiones que recuerdan, en sus mejores momentos, a David Lynch: una hermosa mujer vomita un ojo azul y otra se lo come. ¿Cómo olvidar el inquietante inicio de Terciopelo azul en que el protagonista encontraba una oreja humana tirada frente a su casa? Como sea, la mayor parte del tiempo uno tiene la impresión de que, a pesar de la belleza esnob de la obra, el danés no ha sabido conseguir lo mejor de sus actores quienes, lejos de parecer intrigantes o misteriosos, resultan más bien acartonados. Es entonces cuando El demonio neón se revela como la obra de un presuntuoso director joven que tal vez más adelante consiga una gran película. La oportunidad se le fue aquí porque sus actores confunden el silencio con la solemnidad y la obra se alarga tanto que uno

El demonio neón (The Neon Demon). dirección: Nicolas Winding Refn. guión: Nicolas Winding Refn. con Elle Fanning, Jena Malone, Bella Heathcote, Abbey Lee, Keanu Reeves. Estados Unidos, Francia, Dinamarca, 2015.

termina por aburrirse. La historia de esta modelo pudo ser contada en un cortometraje o, aun mejor, en un videoclip. Tal vez por las aspiraciones del director, El demonio neón nació con vocación de película de culto. Y encontrará fanáticos, sin duda, cinéfilos amantes de las historias de horror en que Los Angeles es el monstruo que devora los sueños de la muchachita de pueblo que se mete en problemas por ser tan hermosa. La verdad es que si lo que el público está buscando es entretenimiento, quizá El demonio neón le deje un sabor amargo, mientras que los amantes del cine de arte tendremos que esperar nuevas películas de este artista danés para pronunciarnos con respecto a sus temas y a su efectividad. L


MILENIO

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sábado 10 de septiembre de 2016

ESCENARIOS

ESPECIAL

La orfandad de Miles Davis Miles Davis nació en 1926; lo recordamos con un recorrido que va de 1959 a 1964 VIBRACIONES

HUGO ROCA JOGLAR hrjoglar@gmail.com

Q

ue Miles Davis trabaje con Bill Evans, un pianista blanco, es algo que los músicos negros del bebop neoyorquino —muchos de ellos sin trabajo— no entienden. Le dicen desagradecido; lo acusan de traición. Pero cuando se trata de su sonido, Miles Davis no hace concesiones. Aspira a un flujo continuo —libre, espontáneo, que no requiera cambios de acorde— en el que la capacidad de invención melódica sea la única limitante. El camino hacia ese idioma ideal lo ha encontrado en los modos antiguos (“me intrigan todas aquellas escalas diferentes que usaba; eso quería yo: profundizar mi conocimiento en escalas modales, no melodías con acordes, pues así el resultado salía demasiado espeso”), y Bill Evans —un elegante hombre con lentes que estudia a Aram Kachaturian sin descanso— es un virtuoso de la música modal. “Por eso está con nosotros y no hay más”, le dice Miles Davis al resto del grupo: Jimmy Cobb (batería), Paul Chambers (bajista), John Coltrane y Cannonball Adderley (saxos). Graban Kind of Blue (1959): “Canciones de blues sobre mis 6 años, cuando caminaba al final de la tarde por el bosque [en la granja de su abuelo en Arkansas] y de pronto escuchaba las voces de un coro de góspel y sentía un miedo sobrenatural, de violenta creatividad. Es música que busca sembrar en quien escucha un miedo que lo transporte a las últimas fronteras de sus memorias”. Dan conciertos en París, Londres y Viena, cada noche, ante por lo menos 2 mil personas. La música embriaga; es poderosa, sensual y vibrante, pero Miles Davis toca solos breves, no sonríe y se va del

escenario sin haber pronunciado palabra; ni siquiera gracias. Es cínico y amargo, como si supiera que su vida está a punto de torcerse. ◆◆◆ Miles Davis regresa a Estados Unidos. Le diagnostican una anemia falciforme que lentamente le irá deformando las articulaciones. Recibe una carta de su padre y se le olvida abrirla. Para combatir el dolor acude a la cocaína, al alcohol y los calmantes. Una noche (mayo de 1962), su hermano Vernon lo despierta por teléfono con la noticia de que su padre ha muerto. Miles Davis abre la carta olvidada: “Pocos días después de que leas esto, habré muerto, así que cuídate bien, Miles. Te he amado de veras, y tú has hecho que me sintiera orgulloso”. Miles Davis desquita la tristeza con su esposa Frances. Le prohíbe salir sola (“la única mujer que celé en mi vida”) y la golpea con frecuencia. Siente culpa y le pide perdón con un anillo de zafiro que le tiende envuelto en una servilleta.

DANZA

Viven en una antigua iglesia ortodoxa rusa de cinco plantas ubicada en el 321 de la calle 73, junto al Hudson, entre Riverside Drive y West End Avenue. En el sótano hay un gimnasio con sauna y una sala de conciertos en la parte alta. Frances le propone tener hijos. Miles Davis la desprecia; no tiene humor para participar en nacimientos. Se olvida de la música y comienza a parecer cada vez más un fantasma: “Solía deslizarme por el túnel que había debajo del edificio, paranoico y perdido, hecho una mierda y generalmente yo mismo me sorprendía al encontrarme allá abajo, como un lunático. Por la casa aparecían extraños personajes que venían a traerme cocaína”. Y otra vez su hermano Vernon llama de noche (marzo de 1964). No encuentra a Miles y deja el mensaje con Frances: “Ha muerto nuestra madre”. Miles Davis toma el primer avión a St. Louis, pero éste no puede despegar en un primer intento y él lee el incidente como una señal de que el avión va a caerse. Desciende y regresa a su casa. L

ARGELIA GUERRERO

makarova81@yahoo.com.mx ALDO CHÁVEZ

Aciertos y desaciertos

U

na fiesta en tiempos de cambio e incertidumbre” es como el secretario de Cultura de la Ciudad de México definió el Encuentro Nacional de Danza 2016 que comenzó con el ballet Giselle a cargo de la Compañía Nacional de Danza, y culmina hoy con la gala final del Premio Nacional de Coreografía Guillermo Arriaga. Esto tiene varios matices y se puede mirar desde distintas ópticas: “La danza recuerda que todo es movimiento y todo cambia”, dijo también el secretario. Eso sin duda es cierto, pero más allá de lo poético de la expresión, moverse por moverse no implica necesariamente algo positivo y los cambios, si no son instrumentados de modo adecuado ligados a una política cultural clara y objetivos bien establecidos, corren el riesgo de naufragar y no llegar a ningún sitio.

El Encuentro tuvo como preludio un reclamo de Jaime Hinojosa, director de la Escuela Municipal de Danza de Torreón, sede del encuentro el año anterior, por quienes no se contemplaron para esta edición dejando en el aire la continuidad en la motivación para bailarines y coreógrafos de distintas zonas del país. Volvemos a ver no solo una centralización geográfica, sino también la exclusión de diversas propuestas por no contar con una logística y un apoyo adecuados para su traslado y estancia. Es decir, vemos una serie de aciertos al invitar a figuras trascendentes y expertas de la danza nacional, así como una inversión para invitar artistas extranjeros que enriquezcan el diálogo entre los artistas, pero se escatiman recursos para que los artistas nacionales acudan a los encuentros y sostengan este proceso dialógico.

Un momento de Telegrama a los ángeles

Existe una contradicción que revela falta de claridad respecto de los objetivos de éste y otros encuentros, así como un naufragio de la estructura que tiene a su cargo la política cultural del país. Veremos también los resultados del concurso de coreografía tan polémico en su edición pasada al declararse desierto, y motivar con ello un debate sobre la vigencia de su formato

y la necesidad de repensarlo, pues no se trata únicamente de declarar que ha “recuperado su condición de referencia en la creación coreográfica del país”, sino de comprobar que el debate motivó la reflexión y, sobre todo, que se refleje en una mejor condición para el desarrollo de un evento de tal importancia, al margen del voluntarismo de una declaración. Se lo debemos a la danza. L


VARIA

sábado 10 de septiembre de 2016

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LABERINTO

ESPECIAL

Licenciado en taxismo TOSCANADAS

DAVID TOSCANA dtoscana@gmail.com

L

a novela La familia Moskat, de Isaac Bashevis Singer, es, entre otras cosas, una oda a la educación. El tema es candente, y los judíos de cabeza más contemporánea lidian al respecto con los conservadores que aceptan sobre todo la ilustración religiosa. Estamos en la Varsovia de antes de la Primera Guerra y no solo los hombres, también las mujeres, quieren tener acceso a los estudios y, de ser posible, a la universidad. Meshulam Moskat, patriarca de la familia, dice a su nieta: “Sé que eres una chica lista, una chica educada. Pero impráctica. De todos estos libros nada conseguirás. Solo te volverán melancólica. Una chica como tú debería casarse”. Pero ella es buena lectora de clásicos de literatura y tiene una mente poco sumisa. La madre de Klonya, también rebelándose al rol que le asignaba la religión y una cultura rusificada, dice: “Nada hay mejor que una educación. Seas lo que seas, judío o cristiano, todo mundo se quitará el sombrero delante de ti si tienes conocimientos en la cabeza”. Por eso le dijeron al joven Asa Hesel: “Cuando un hombre comienza a estudiar a tu edad, tienes que consagrarte al estudio noche y día, nada de andar persiguiendo chicas”. Por su parte, Abram Shapiro quiere editar una revista y organizar cursos por correo en los que participen los más ilustres maestros y pensadores de los que se pueda echar

mano, y hacerlos llegar hasta los pueblos más apartados de Polonia, pues está seguro de que ahí se esconden miles de potenciales prodigios, “miles de Mendelssohn, Bergson, Ashkenazi”. Y entonces suelta una frase que pone el propósito de la educación más allá de una mera asimilación de las ciencias y humanidades: “A nada le temen más los antisemitas que a nuestra educación. Por eso no nos dejan ingresar a sus universidades”. Y es que en esos días, con el aparato oficial y clerical en contra, estudiar era sobrevivir. Muchos países establecieron cuotas para el ingreso de judíos en escuelas y universidades y hasta llegaron a refundirlos en un gueto en los salones de clases. ¿Cuál fue el resultado? Fue todo lo contrario al sometimiento y, sobre todo, a la ignorancia. Si el estándar para un judío era más alto que para un gentil, las universidades terminaban educando una élite de pocos

CAFÉ MADRID

judíos y una masa de gentiles mayormente mediocres. Tal como se volvieron mediocres las universidades de Tel Aviv y Jerusalén. Para saltar a conclusiones tendría que dedicar años a estudiar el tema y entonces se lo dejo a los académicos. Pero la duda que debe aclararse tendría que ver con cuán inclusivo o exclusivo tiene que ser un sistema de educación para generar un máximo de gente bien educada, y no un máximo de gente titulada. La Universidad de Harvard rechaza al 95 por ciento de los que solicitan ingreso, pero crear la política de “Harvard para todos” no haría sino matar a la universidad. Luego nos lamentamos de que gente con título universitario termine conduciendo un taxi, pero en verdad ciertas universidades dan títulos tan devaluados que apenas alcanzan para eso: para manejar un taxi; no un país. L

VÍCTOR NÚÑEZ JAIME

periodismovictor@yahoo.com.mx ESPECIAL

Ai Weiwei C uenca, provincia de CastillaLa Mancha, es una ciudad de 60 mil habitantes cuyo casco antiguo fue declarado Patrimonio de la Humanidad hace 20 años. A diferencia de otras capitales españolas, no está acostumbrada a recibir hordas de turistas, pero este verano esa situación ha cambiado. En el claustro de su catedral (una de las joyas del gótico español) se han instalado seis grandes cajas de hierro en las que se reproducen escenas del encarcelamiento del artista chino Ai Weiwei. Uno se asoma al interior y observa al personaje que no se cansa de denunciar las arbitrariedades del gobierno de su país bajo la regadera, en el retrete, ante un plato de comida o en la cama, siempre acompañado por dos guardias de uniforme militar. Ai Weiwei, asesor de los arquitectos suizos que construyeron el estadio de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, tenía un blog en el que solía escribir sobre la corrupción y las violaciones de derechos humanos del régimen chino. En una nación dominada por un solo partido, sus críticas y el “ruido”

internacional que causaban eran demasiado molestas. Así que, en abril de 2011, antes de que se subiera a un avión con destino a Hong Kong, lo arrestaron con el pretexto de que “sus motivos de viaje eran demasiado confusos”. Weiwei permaneció encerrado durante 81 días en una celda que tenía la luz siempre encendida y vigilado en todo momento (incluso cuando hacía sus necesidades o se bañaba) por dos carceleros. Las presiones europeas y estadunidenses ayudaron a liberarlo y, a partir de entonces, esa experiencia se convirtió en un punto de inflexión de su obra: lo vivido en carne propia y la denuncia de su persecución serían su principal material artístico. La instalación, que puede visitarse en este templo hasta el próximo 6 de noviembre, se llama S.A.C.R.E.D., el acrónimo de Cena, Acusadores, Limpieza, Ritual, Entropía y Duda en inglés, y recrea los momentos más dolorosos e íntimos del cautiverio de este creador contemporáneo. Si se expone en España es porque lo vivido por Weiwei se compara con el encierro de Cervantes en Argel,

“una experiencia que incubó El Quijote”, y porque coincide con el final de la conmemoración del IV centenario de la muerte del escritor. Por eso el padecimiento del artista, la batalla entre el cautiverio físico y mental y la necesidad de libertad como catalizadores de la capacidad creativa forman el hilo conductor de la muestra. La instalación de Ai Weiwei está acompañada por dos intervenciones más que se extienden por la catedral dedicada a Santa María y San Julián. En las salas capitulares hay un homenaje a algunos de los informalistas que hace medio siglo transformaron Cuenca en la capital

española del arte contemporáneo: Rafael Canogar, Martín Chirino, Luis Feito, el fotógrafo Juan Barte y Florencio Galindo, curador de la exposición junto al poeta Carlos Aganzo. Los visitantes nos centramos en las cajas de hierro y no paramos de husmear por las rendijas. Dicen que la cárcel y el posterior confinamiento en su domicilio han hecho de Ai Weiwei un artista imprevisible. Reside de manera oficial en Berlín, pero las últimas noticias lo sitúan en el Mediterráneo trabajando por los refugiados, quienes huyen de la guerra en busca de un lugar para vivir en libertad. Igual que él. L


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