N.º 23 • DOMINGO X ORDINARIO, CICLO B
• 7 de Junio de 2015 •
El MAL...
N
o es difícil hacer la lista del mal en el mundo. Y la lista sería larga, dolorosa: nuestra envidia y nuestro egoísmo, la imposición de nuestra voluntad a los demás, el hacer lo que nos viene en gana sin pensar si con ello perjudicamos a otros, nuestra capacidad para criticar e incluso calumniar sin pensarlo dos veces... Y luego, junto a esa lista, otra dramática y horrorosa, hecha de armas, hambre, más ricos y cada vez más pobres... Todo eso es nuestra realidad, nuestra dramática realidad. Nuestra realidad que, sin embargo, desde entonces, desde siempre –como nos decía también la lectura–, lleva dentro de sí una promesa, una certidumbre contenida en las palabras
que Dios dirige definitivamente a la serpiente: «Ella, la mujer, te pisará la cabeza...», de la que Jesús, nuestro Salvador, nació. Esta es nuestra fe. Existe alguien que ha escogido decididamente el plan amoroso de Dios, alguien que no se ha dejado atrapar por el estilo que la serpiente quería imbuirle, también a Él. Ese alguien es Jesús. Y nosotros miramos hacia Él, y nos agarramos a Él, y creemos que, a pesar de tanto mal, la fuerza de la serpiente no lo domina todo. Creemos que la fuerza del amor de Dios, que se manifiesta en Jesús, es más fuerte. Nosotros, si no estamos atentos, podemos hacer como hacían con Jesús la gente de su tiempo, según hemos escuchado en el Evangelio. Él viene a liberar del
mal, Él viene a abrir caminos de vida nueva. Pero la gente de su misma familia decía que no estaba en sus cabales. Y los letrados decían que estaba poseído por el demonio. Ante esas acusaciones, la respuesta de Jesús es muy dura, y es también una advertencia para nosotros: podemos ser débiles, podemos ser pecadores, podemos ser egoístas, y Dios nos lo perdonará. Pero lo que no podemos hacer es insultar al Espíritu Santo. No podemos decir que es obra del diablo lo que es obra de Dios. Y no podemos atribuir a Dios, al Espíritu de Dios, lo que es obra del mal y del egoísmo humano. Tenemos que andar muy atentos, muy despiertos, muy dispuestos a convertirnos siempre. Jesús lo espera de nosotros.
1
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, de quien todo bien procede, escucha nuestras súplicas y concédenos que comprendiendo, por inspiración tuya, lo que es recto, eso mismo, bajo tu guía, lo hagamos realidad. Por nuestro Señor Jesucristo...
SALMO RESPONSORIAL
Sal 129, 1-2. 3-4ab. 4c-6. 7-8
R. Perdónanos, Señor, y viviremos.
Desde el abismo de mis pecados clamo a ti; Señor, escucha mi clamor; que estén atentos tus oídos a mi voz suplicante. R. Perdónanos, Señor, y viviremos. Si conservaras el recuerdo de las culpas, ¿quién habría, Señor, que se salvara? Pero de ti procede el perdón, por eso con amor te veneramos. R. Perdónanos, Señor, y viviremos. Confío en el Señor, mi alma espera y confía en su palabra; mi alma aguarda al Señor, mucho más que a la aurora el centinela. R. Perdónanos, Señor, y viviremos. Como aguarda a la aurora el centinela, aguarda Israel al Señor, porque del Señor viene la misericordia y la abundancia de la redención, y Él redimirá a su pueblo de todas sus iniquidades. R. Perdónanos, Señor, y viviremos.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 12, 31-32
R. Aleluya, aleluya.
Ya va a ser arrojado el príncipe de este mundo. Cuando yo sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mí –dice el Señor–.
R. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que la virtud medicinal de este sacramento nos cure por tu bondad de nuestras maldades y nos haga avanzar por el camino recto. Por Jesucristo, nuestro Señor.
2
Lectura del libro del Génesis 3, 9-15
Después de que el hombre y la mujer comieron del fruto del árbol prohibido, el Señor Dios llamó al hombre y le preguntó: “¿Dónde estás?”. Éste le respondió: “Oí tus pasos en el jardín; y tuve miedo, porque estoy desnudo, y me escondí”. Entonces le dijo Dios: “¿Y quién te ha dicho que estabas desnudo? ¿Has comido acaso del árbol del que te prohibí comer?”. Respondió Adán: “La mujer que me diste por compañera me ofreció del fruto del árbol y comí”. El Señor Dios dijo a la mujer: “¿Por qué has hecho esto?”. Repuso la mujer: “La serpiente me engañó y comí”. Entonces dijo el Señor Dios a la serpiente: “Porque has hecho esto, serás maldita entre todos los animales y entre todas las bestias salvajes. Te arrastrarás sobre tu vientre y comerás polvo todos los días de tu vida. Pondré enemistad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya; y su descendencia te aplastará la cabeza, mientras tú tratarás de morder su talón”. Palabra de Dios.
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los corintios 4, 13-5, 1
Hermanos: Como poseemos el mismo espíritu de fe que se expresa en aquel texto de la Escritura: Creo, por eso hablo, también nosotros creemos y por eso hablamos, sabiendo que aquel que resucitó a Jesús nos resucitará también a nosotros con Jesús y nos colocará a su lado con ustedes. Y todo esto es para bien de ustedes, de manera que, al extenderse la gracia a más y más personas, se multiplique la acción de gracias para gloria de Dios. Por esta razón no nos acobardamos; pues aunque nuestro cuerpo se va desgastando, nuestro espíritu se renueva de día en día. Nuestros sufrimientos momentáneos y ligeros nos producen una riqueza eterna, una gloria que los sobrepasa con exceso. Nosotros no ponemos la mira en lo que se ve, sino en lo que no se ve, porque lo que se ve es transitorio y lo que no se ve es eterno. Sabemos que, aunque se desmorone esta morada terrena, que nos sirve de habitación, Dios nos tiene preparada en el Cielo una morada eterna, no construida por manos humanas. Palabra de Dios.
EVANGELIO Lectura del santo Evangelio según san Marcos 3, 20-35
E
n aquel tiempo, Jesús entró en una casa con sus discípulos y acudió tanta gente, que no los dejaban ni comer. Al enterarse sus parientes, fueron a buscarlo, pues decían que se había vuelto loco. Los escribas que habían venido de Jerusalén, decían acerca de Jesús: “Este hombre está poseído por Satanás, príncipe de los demonios, y por eso los echa fuera”. Jesús llamó entonces a los escribas y les dijo en parábolas: “¿Cómo puede Satanás expulsar a Satanás? Porque si un reino está dividido en bandos opuestos, no puede subsistir. Una familia dividida tampoco puede subsistir. De la misma manera, si Satanás se rebela contra sí mismo y se divide, no podrá subsistir, pues ha llegado su fin. Nadie puede entrar en la casa de un hombre fuerte y llevarse sus cosas, si primero no lo ata. Sólo así podrá saquear la casa. Yo les aseguro que a los hombres se les perdonarán todos sus pecados y todas sus blasfemias. Pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo nunca tendrá perdón; será reo de un pecado eterno”. Jesús Continúa en pág. 3
La Profesión de nuestra
Fe
Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso, Creador del Cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo Señor Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por Quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación, bajó del Cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras; y subió al Cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su Reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo; que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.
Gloria a Dios en el Cielo, y en la Tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos; te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial,
dijo esto, porque lo acusaban de estar poseído por un espíritu inmundo. Llegaron entonces su madre y sus parientes; se quedaron fuera y lo mandaron llamar. En torno a Él estaba sentada una multitud, cuando le dijeron: “Ahí fuera están tu madre y tus hermanos, que te buscan”. Él les respondió: “¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos?”. Luego, mirando a los que estaban sentados a su alrededor, dijo: “Estos son mi madre y mis hermanos. Porque el que cumple la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre”. Palabra del Señor.
Mes del Sagrado Corazón de Jesús: Junio
E
l 16 de junio de 1675, Jesús se le apareció a Santa Margarita María de Alacoque (+1683). Su Corazón estaba rodeado de llamas de amor, coronado de espinas, con una herida abierta de la cual brotaba sangre y, del interior de su corazón, salía una cruz. Santa Margarita escuchó a nuestro Señor decir: “Mira este corazón mío que, a pesar de consumirse en amor abrasador por los hombres, no recibe de los cristianos otra cosa que sacrilegio, desprecio, indiferencia e ingratitud, aun en el mismo sacramento de mi amor...”. La devoción a su Sagrado Corazón está dirigida a la persona de Nuestro Señor Jesucristo y a su amor no correspondido, representado por su Corazón. Dos, pues, son los actos esenciales de esta devoción: amor y reparación. Amor, por lo mucho que Él nos ama. Reparación y desagravio, por las muchas injurias que recibe, sobre todo en la Sagrada Eucaristía. He aquí las promesas que hizo Jesús a todos los devotos de su Sagrado Corazón: 1. Les daré todas las gracias necesarias a su estado. 2. Pondré paz en sus familias. 3. Les consolaré en sus penas. 4. Seré su refugio seguro durante la vida, y, sobre todo, en la hora de la muerte.
Gloria
Dios Padre todopoderoso. Señor Hijo único, Jesucristo, Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre. Tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; Tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica;
5. Derramaré abundantes bendiciones sobre todas sus empresas. 6. Bendeciré las casas en que la imagen de mi Corazón sea expuesta y venerada. 7. Los pecadores hallarán en mi Corazón la fuente, el océano infinito de la misericordia. 8. Las almas tibias se volverán fervorosas. 9. Las almas fervorosas se elevarán a gran perfección. 10. Daré a los sacerdotes el talento de mover los corazones más empedernidos. 11. Las personas que propaguen esta devoción tendrán su nombre escrito en mi Corazón, y jamás será borrado de Él. 12. En el exceso de mi misericordia, mi amor todopoderoso concederá a todos aquellos que comulgaren por nueve primeros viernes consecutivos, la gracia de la perseverancia final; no morirán sin mi gracia, ni sin la recepción de los santos sacramentos. Mi Corazón será su seguro refugio en aquél momento supremo. Condiciones para obtener esta gracia: • Recibir la Sagrada Comunión durante nueve primeros viernes de mes de forma consecutiva. • Tener la intención de honrar al Sagrado Corazón de Jesús y de alcanzar la perseverancia final. • Ofrecer cada Sagrada Comunión como un acto de expiación por las ofensas cometidas contra el Santísimo Sacramento.
Tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo Tú eres santo, sólo Tú, Señor, sólo Tú, Altísimo Jesucristo, con el Espíritu Santo, en la gloria de Dios Padre. Amén.
3
JUBILEO CIRCULAR 8, 9 y 10: Lunes, Martes y Miércoles CRUZ SANTA, Pintas de Arriba SAN ALFONSO MARÍA DE LIGORIO, Tlaquepaque SAN FRANCISCO DE ASÍS, Col. Jalisco LA INMACULADA CONCEPCIÓN MÁRTIRES MEXICANOS DE CRISTO REY SAGRADO CORAZÓN, San José del Castillo NTRA. SRA. DEL ROSARIO, Santa Cruz de las Flores NTRA. SRA. DEL REFUGIO, Totatiche EL SAGRADO CORAZÓN Y SANTA MARÍA DE GUADALUPE, El Verde
11, 12 y 13: Jueves, Viernes y Sábado SAN JUAN MACÍAS LA TRANSFIGURACIÓN DEL SEÑOR MADRE DE LOS CREYENTES LA SAGRADA FAMILIA, Canal 58 SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS, Dec. San Pedro SANTA MARÍA MADRE Y REINA DE LA PAZ SANTA LUCÍA, Tesistán SAN MIGUEL, Santa Fe
4
Boletín semanal de la Arquidiócesis de Guadalajara, A.R. Tiraje de 200,000 a 300,000. $40.00 ciento