Gobernanza mediática

Ricardo Homs*

Hoy es cotidiano ver un nuevo estilo de gobernar a partir de un despliegue mediático. La cercanía con el ciudadano se ha vuelto fundamental. En este contexto democrático, caracterizado por la competencia electoral, que genera una dinámica de inestabilidad política, la aprobación ciudadana se vuelve fundamental.

Es más, el empoderamiento de la sociedad a través de las redes sociales ha fortalecido esta demanda de cercanía.

Antiguamente, antes de la irrupción de las redes sociales, la ciudadanía estaba alejada de sus gobernantes, lo que les daba a estos un poder absoluto.

Hoy es imperativo estar cerca de los ciudadanos, cubriendo sus expectativas y gobernando teniendo siempre como referencia, el nivel de aprobación ciudadana.

De este modo han surgido conductas comunicacionales que dan identidad a quienes gobiernan. El uso del Twitter caracterizó a la administración de Donald Trump, lo cual dio un sello muy personal a su gestión. www.ricardohoms.com

La capacidad de emitir sus posturas personales respecto a los temas del momento, con total inmediatez, a través de su Twitter personal, propició un estilo emocional de gran inestabilidad, lo cual se evidenció como un gobierno unipersonal, encabezado por un caudillo.

El presidente no utilizaba voceros para dar a conocer sus posturas, lo cual contrasta con el estilo tradicionalista del presidente Joe Biden, quien se comunica a través de los voceros de la Casa Blanca. En México, el estilo populista del presidente López Obrador queda patente con su conferencia mañanera, que le permite intentar imponer la agenda pública tomando el micrófono de forma directa y sin intermediarios, para exponer su visión personalista, atacar a sus adversarios, replicar a la prensa, y hasta fijar posturas frente a gobiernos extranjeros.

*Ricardo Homs es presidente de la Academia Mexicana de la Comunicación AC. (www.amdc.org.mx), autor y conferencista. Ha publicado más de 23 libros con las editoriales más importantes. Es editorialista del periódico El Universal y participa en noticieros de ADN40.

Es experto en liderazgo social, marketing político y posicionamiento. Fundó la empresa de consultoría Ries & Ries México, la cual forma parte de la corporación global fundada por Al Ries en Atlanta.

FB: @Ricardo.Homs1

LI: Ricardo Homs

TW: @homsricardo

A su vez, el espíritu de showman del presidente Nicolás Maduro queda patente con la diversidad de perfiles de los programas de televisión que él produce y conduce. Lo mismo crea programas de contenido político que musicales y de entretenimiento, lo cual le da una imagen más frívola y populachera.

La forma de crear su estilo comunicacional define una identidad de los jefes de gobierno.

Además, el carisma se convierte en un atributo fundamental.

Un caso actual y de gran significación es el de Volodimir Zelensky, -presidente de Ucrania-, quien con su gran carisma personal y potencial comunicativo logró hacer de un conflicto regional, un problema internacional.

Los conflictos de Crimea y la región del Dombás, que eran parte de Ucrania, -pero territorios disputados por Rusia-, con apoyo de la población prorrusa, terminaron quedando en el ámbito regional, mientras la Guerra de Ucrania ha enfrentado a Rusia con la Comunidad Europea y con la OTAN, el tratado de El Atlántico Norte, el acuerdo que surgió después de la Segunda Guerra Mundial, para defender a Europa de sus enemigos. Los mensajes de Zelensky en la ONU, así como en importantes foros globales.

La nula trayectoria de Zelensky en la política y su identidad como candidato ciudadano le han dado la fortaleza que hoy lo caracteriza para enfrentar al gobierno de Vladimir Putin.

Zelensky representa a la nueva generación de líderes que gobiernan.

Zelensky, hasta cuando fue nombrado candidato presidencial, producía y conducía un programa de TV dedicado a la comedia política, lo cual define la importancia de la comunicación en los nuevos estrilos de gobernar.

¿A usted qué le parece?.