Candidato
Revista SIGNUM
Año 9, Núm.115
ComunicacióN PolíticA & CulturA
Claudia Sheinbaum bota los votos
Alfonso Gómez
El “show” de los debates
Gabriela Seoane
El ‘momentum’ de Xóchitl
Alberto Mendoza
Campañas electorales: Contexto Político
Enrique Paz
Redes sociales, libertad de expresión y elecciones
Carlos Ezeta
El valor del voto Cuauhtémoc Miranda
DIRECTORA GENERAL
Claudia Martínez Díaz direccion@revista-signum.com
28 6
Dossier político Jorge Álvarez Máynez
8
DIRECTORA DE COMUNICACIÓN Y ESTRATEGIA
Sobre patrimonio culturaly cuerpo social (I) Manuel Parodi
34
10
Modalidades de votación para residentes en el extranjero Martha Mercado
Política del futuro o cómo recuperar la esencia
Mónica Martínez Díaz COLABORADORES (en orden alfabético)
12
Antonio Sola
14 18
Claudia Sheinbaum bota los votos Alfonso Gómez México nos necesita Guadalupe Gutiérrez
El voto joven en la próxima elección presidencialRicardo Homs
22
Actividades Prohibidas Durante las Campañas Electorales en México Armando Hernández
Campañas electorales: Contexto Político Enrique Paz
38
Alberto Mendoza
Alfonso Gómez
Antonio Sola
El “show” de los debates
Gabriela Seoane
Redes sociales, libertad de expresión y elecciones Carlos Ezeta
24 26
42
El ‘momentum’ de Xóchitl Alberto Mendoza
Arlene Ramírez
Armando Hernández
Carlos Ezeta
¿Y después del 2 de junio? Eduardo Higuera
44
Cuauhtémoc Miranda
Eduardo Higuera
Enrique Paz
Cumplimiento normativo en el sector empresarial mexicano Arlene Ramírez
46
Gabriela Seoane
Guadalupe Gutiérrez
Ileana Hidalgo
48
Acceso a la información contra la corrupción Ileana Hidalgo
50
Manuel Grapain
Manuel Parodi
Martha Mercado
Ricardo Homs
DISEÑO EDITORIAL
52
La elección del poder (II) Selección Natural Manuel Grapain Estimado Lector... Claudia Martínez
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En los últimos tiempos, México se ha enfrentado a un fenómeno preocupante en su esfera política: la apatía electoral. A pesar de los esfuerzos por infundir un espíritu de participación en la ciudadanía, casi la mitad del electorado se muestra indiferente a las urnas. Esta realidad, contrastada con el vigor democrático de naciones como Bélgica, Suecia y Brasil, cuestiona la robustez de nuestro propio tejido cívico y democrático.
Al mirar el espejo de las democracias internacionales, encontramos que la participación ciudadana en México, aunque ha tenido sus momentos estelares, enfrenta ahora un desgaste manifiesto. La última elección presidencial registró una participación que apenas rebasó el 60%. Frente a esto, cabe preguntarse: ¿qué caminos debemos explorar para revitalizar el entusiasmo democrático de nuestra ciudadanía?
Más allá de la comparación con otros países, la reflexión obligada nos lleva a entender que la democracia no se alimenta únicamente de leyes o decretos que obligan a votar, sino de una conexión profunda y significativa entre los ciudadanos y el futuro de su nación. La participación electoral no puede ser vista como un mero acto protocolario, sino como la expresión más genuina de la voluntad popular.
No es un secreto que el camino hacia una cultura electoral sólida y arraigada en México está lleno de retos. La herencia de una alternancia política esperanzadora con la elección de Vicente Fox, que fue seguida por administraciones sucesivas con altibajos en la participación, es prueba de que la tarea es ardua y requiere más que promesas y consignas. Requiere una movilización de la conciencia colectiva, una educación cívica que promueva no solo el acto de votar, sino el compromiso activo con los asuntos públicos.
En el presente, nos encontramos ante una encrucijada. La responsabilidad de avivar la llama de la participación recae no solo en las autoridades electorales o en los partidos políticos, sino en cada uno de nosotros como miembros de esta sociedad. Cada voto no ejercido representa un paso atrás en nuestro avance democrático, un silencio que resuena con el eco de la indiferencia.
La juventud, con su potencial transformador y su nueva visión, puede ser la clave para cambiar este panorama. Su participación activa y consciente puede redibujar el mapa político del país y dar paso a un nuevo capítulo en nuestra historia democrática.
Mirando hacia el horizonte electoral, debemos asumir el desafío de incentivar una cultura de participación que trascienda los muros del conformismo. Es hora de que cada ciudadano mexicano se vea a sí mismo no solo como un espectador, sino como un actor principal en el drama electoral. Solo así podremos aspirar a una democracia que se celebre no solo en las urnas, sino en cada rincón de nuestra vida pública.
El 2 de junio de 2024 no debe ser visto solo como una fecha más en el calendario electoral, sino como el día en el que México reafirme su compromiso con la democracia y con el poder del voto como el arma más poderosa de la ciudadanía. La participación electoral es la piedra angular de nuestra democracia, y su fortalecimiento es una tarea que nos incumbe a todos.
Radio. Autor del libro Crónicas hertzianas, historia de la radio en México. Estudió la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, además realizó la maestría en Filosofía y Crítica de la Cultura en la Universidad Intercontinental.
Desde 1992 ha sido productor y conductor para diversos grupos radiofónicos entre los que destacan Radiópolis, Radio Fórmula e Imagen Multicast. Premio Nacional de Locución 2019. Es catedrático del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey Campus Ciudad de México. @cumiranda
El valor del voto
Cuauhtémoc Miranda*
Es una lástima que en México no se tenga una cultura electoral a prueba de todo; casi la mitad del registro de electores no muestra interés en participar en lo que han intentado llamar la “fiesta democrática”. En las últimas cuatro elecciones presidenciales, el porcentaje más alto de votantes fue de un 61.3% ¿Qué pasa con los demás posibles sufragios? Simplemente es apatía; no les interesa ejercer su voto, y de eso se valen los partidos políticos, porque solo llegan a los ciudadanos que ya tienen asegurados con su sufragio.
Para comparar el desinterés por la democracia reflejado en estos tiempos en México, revisemos algunos números fríos pero reales. Los países que han tenido elecciones presidenciales en los últimos años nos muestran otra movilidad de sus ciudadanos, donde el común denominador es acudir de forma mayoritaria a ejercer su derecho a elegir de manera libre y secreta. En primer lugar está Bélgica, un claro ejemplo de cultura electoral; en este país, casi el 88.4% de la población acudió a las urnas en su más reciente proceso. Por amor o por la fuerza acuden a las casillas, ¿por qué decimos esto? Si no ejercen su derecho, se les aplica una multa que, desde luego, deben pagar. Es por ello que los números son tan altos en este tipo de ejercicios. Le sigue, en segundo lugar y muy de cerca, Suecia, con el 87.2%. De América el mejor posicionado en estos menesteres de elección es Brasil, con el 79.7%, resultado arrojado en el proceso de 2018. En cuarta posición está Corea del Sur, con el 77% de participación electoral; Alemania, el quinto país, y Francia, el sexto con 74.9% de votantes en las presidenciales. En sexto lugar se encuentra España, con 66.2%1, un porcentaje significativamente mayor que el de México por casi un 5%.
Lo anterior es una radiografía muy clara de cómo, en otras latitudes, se toma en serio el papel de los ciudadanos como verdaderos agentes de cambio; solo ellos pueden determinar y modificar los resultados de cada gobierno en turno. Pero, ¿cuál es el panorama en nuestro país? A continuación, algunos datos.
Cuando se presumió de una alternancia en el poder y después de más de 70 años de un partido hegemónico, llegó a la presidencia Vicente Fox Quezada con una amplia ventaja del 42.72%, traducida en 15,989,636 votos frente a su más cercano contendiente, Francisco Labastida, con el 35.77%. La participación fue una de las más altas del país y ofreció un triunfo incuestionable para la supuesta transición de poder.2 Aunque con ese crédito electoral no se hizo mucho, eso queda para otro análisis histórico. Lo importante fue la gran participación de la población en la búsqueda de ese sueño mexicano. En aquellos
Al conquistar nuestras libertades hemos conquistado una nueva arma; esa arma es el voto.
Francisco I. Madero
años, la población era de 102,814,471; estaban registrados 59,727,295 y votaron 37,602,618, es decir, el 62.9% del padrón.
Después de Fox, llegó a la presidencia otro panista, Felipe Calderón Hinojosa. En ese periodo electoral, la población era de 111,390,076; de estos, 71,374,373 estaban registrados y solo votaron 41,791,322. Calderón ganó los comicios con un margen muy corto, obteniendo 15,000,284 votos y López Obrador logró 14,756,350. Fue en este proceso donde comenzó el desdén de este último hacia Calderón. Cabe destacar el descenso en el número de votantes, pasando del 62.9% en el año 2000 al 58.5% en 2006.
Con Enrique Peña Nieto, los votantes fueron 50,143,615; el 63.3% del padrón acudió a las urnas. La población era de 122,073,250 habitantes; se registraron 79,454,802. Peña ganó con el 38.1%, traducido en 19,158,582 votos, y su más cercano contendiente, que aparecía por segunda vez en la boleta electoral, López Obrador, obtuvo 15,848,827. Con resignación aceptó la derrota y comenzó una nueva campaña para llegar a la presidencia, deseo que se cumpliría seis años después.
Andrés Manuel López Obrador, después de 12 años, llegó a la presidencia cuando en México la población era de 123,520,000; de estos, 89,332,031 estaban registrados en el INE con posibilidad de votar y, al momento de las elecciones, ejercieron su derecho 56,611,027, es decir, el 63.1% del padrón. 30,113,483 votaron a favor del tabasqueño, quien con propuestas utópicas logró su objetivo. En este ejercicio se dio una ligera disminución en el número de electores que acudieron a las casillas en comparación con la elección anterior.
Sin lugar a dudas, todas las democracias adolecen de participación; son pocos los países donde se puede presumir de un alto nivel de votantes. El reto para México es, sin duda, uno de los más importantes de su historia posmoderna. Con un padrón electoral de más de 100 millones de personas (51 millones 852 mil 294 mujeres y 48 millones 188 mil 701 hombres), el compromiso es de dimensiones mayúsculas. Nos queda claro que cada partido político hará lo imposible por atraer votos, pero al final la responsabilidad recae en cada individuo, en solitario, frente a la boleta, de forma anónima, con el poder de decidir lo que cree y cuál es la mejor opción. Por cada ciudadano que no vote, se desaprovecharán 24.03 dólares3, aproximadamente 405.38 pesos, que es el costo del voto en México.
Una mención importante en estas elecciones presidenciales es la población joven. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el número de jóvenes en edad de votar entre los 20 y 39 años es de 38,856,1994; es este grupo el que definirá el rumbo de la nación, de ahí la importancia de que no hereden el desinterés de otras elecciones. Por ello, deben demostrar madurez política y ejercer su derecho y obligación; el tiempo demostrará su nivel de ciudadanía o su indiferencia.
REFERENCIAS
1. https://www.lasexta.com/programas/lasexta-clave/esta-lista-paises-donde-mas-vota-espana-decimo-puesto-ranking_2022062362b4bb85378ee100019d9da1.html
2. https://www1.udel.edu/leipzig/270500/ela040700.htm
3. https://www.elsoldemexico.com.mx/finanzas/sabes-cuanto-cuesta-tu-voto-11145996.html
4. https://www.inegi.org.mx/app/tabulados/interactivos/?pxq=Poblacion_Poblacion_01_e60cd8cf-927f-4b94-823e972457a12d4b
México nos necesita Guadalupe Gutiérrez*
*Guadalupe Gutiérrez es Doctora en Derecho Constitucional Electoral. Académica de FES Acatlán de la Universidad Nacional Autónoma de México, consejera local propietaria de INE Querétaro, coordinadora y ponente de los diplomados: Derecho Procesal Electoral y Temas Selectos en Materia Electoral que ofrece la FES Acatlán de la UNAM. Integrante del claustro docente del Instituto Electoral del Estado de México, ha participado en once procesos electorales, trabajando principalmente para el Instituto Electoral del Estado de México, y en el Instituto Electoral del Estado de Querétaro.
@GuadalupeGtzH
El próximo 2 de junio de 2024, a nivel federal, elegiremos titulares de la Presidencia de la República, 500 diputaciones y 128 senadurías. A nivel local, también se elegirán una gran cantidad de cargos. Las autoridades administrativas organizadoras del proceso electoral están saturadas de trabajo, principalmente las del Instituto Nacional Electoral (INE), encargadas de la notificación y capacitación electoral, con el objetivo de integrar las mesas directivas de casilla para que podamos emitir nuestra votación, una labor titánica ya que deben convencer a la ciudadanía insaculada para que acceda a participar.
En estos momentos de polarización, México nos necesita para poder incidir en los resultados de las elecciones. Es momento de participar, de allegarnos información certera y confiable para hacer la mejor elección. Aprovechemos que en México contamos con sufragio universal, donde lo único que necesitamos es tener al menos 18 años, la nacionalidad mexicana y un modo honesto de vivir en términos del artículo 34 de nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos para ser ciudadanas y ciudadanos, además de contar con nuestra credencial para votar con fotografía vigente.
Con corte al 7 de marzo de 2024, contamos con un padrón electoral de 100,132,953; una lista nominal de electores de 99,082,450, de los cuales 51,432,610 son mujeres; 47,649,735 hombres y 105 no binarios (cfr. INE, 2024-03-07). Por lo tanto, las mujeres seguimos siendo mayoría; nosotras podemos determinar el resultado de una elección. Ejercitemos el poder que tenemos; nadie puede ni debe hacerlo por nosotras.
Un tema también de gran relevancia es el relativo a las personas jóvenes. Para ello, debemos partir de ¿Quiénes son jóvenes? La Organización de las Naciones Unidas los contempla como aquellos que tienen una edad entre los 15 y 24 años (Naciones Unidas, primer párrafo). El artículo 2 de la Ley del Instituto Mexicano de la Juventud contempla una cantidad mucho mayor al establecer como población beneficiaria la que se encuentra entre 12 y 29 años. Dicho artículo, a la letra, dice:
“Artículo 2. Por su importancia estratégica para el desarrollo del país, la población cuya edad quede comprendida entre los 12 y 29 años será objeto de las políticas, programas, servicios y acciones que el Instituto lleve a cabo, sin distinción de origen
La mejor candidatura no es la que te ofrece más cosas, sino la que te dice lo que sí podrá realizar, lo que sí le faculta la Constitución federal.
étnico o nacional, género, discapacidad, condición social, condiciones de salud, religión, opiniones, preferencias, estado civil o cualquier otra” (Art. 2 LIMJ).
Sin embargo, como ciudadanía, solo podemos contemplar a quienes tienen más de 18 años; por lo tanto, si consideramos el límite más amplio, sería el de 18 a 29 años. Dentro de la juventud, encontramos a la población que ejercerá por primera vez su derecho al voto y a quienes ya lo han ejercido. En términos de la estadística de la lista nominal que nos brinda el INE, la ciudadanía joven se encuentra integrada de la siguiente manera:
De lo anterior se desprende que la ciudadanía joven que tiene el derecho a ejercer su voto en las próximas elecciones constituye el 26.8% del total de personas en lista nominal. México les necesita; su participación es importante. Recordemos que está en nuestras manos el futuro de nuestro país, de nuestras familias, el nuestro. Las juventudes de hoy serán las personas adultas del mañana; deben reflexionar sobre en qué país quieren vivir y que vivan sus hijos.
Seamos responsables y no permitamos que unos pocos tomen las decisiones. Es momento de votar; tú decides por quién
votar. Recuerda que el voto es libre, secreto, personal e intransferible. Independientemente de los resultados de la elección, ¿cómo te quieres sentir después del día de la jornada electoral?
a) Contenta o contento por haber cumplido con tu deber ciudadano, porque acudiste a votar e hiciste lo que te correspondía.
b) Triste porque no acudiste y piensas “si yo hubiera acudido”, pero como dicen, “el hubiera no existe”, y en consecuencia tendrías que aceptar que dejaste que otros tomaran la decisión por ti.
Estamos en cuenta regresiva respecto al día de la jornada. La mejor candidatura no es la que te ofrece más cosas, sino la que te dice lo que sí podrá realizar, lo que sí le faculta la Constitución Federal. Si te ofrece cosas que no están dentro de sus atribuciones, es que no sabe ni siquiera lo que su cargo le permite. Es momento de evaluar, informarnos y tomar decisiones. Una vez tomadas esas decisiones, deberemos asumir las consecuencias; todo depende de nosotros. Son momentos importantes en la historia de nuestro país.
No dejemos que el abstencionismo gane las elecciones; participemos.
REFERENCIAS
1. INE. (2024-03-07). Lista Nominal y Padrón Electoral. https:// www.ine.mx/credencial/estadisticas-lista-nominal-padron-electoral/
2. Ley del Instituto Mexicano de la juventud. (2022-03-23). Congreso de la Unión. https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ pdf/LIMJ.pdf
3. Naciones Unidad. Paz, dignidad e igualdad en un país sano. Juventud, ¿Quiénes son los jóvenes? https://www.un.org/es/ global-issues/youth
Modalidades de votación para residentes en el extranjero
Martha Mercado**Martha Mercado es Magistrada Electoral del Tribunal Electoral de la Ciudad de México. Licenciada en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México, con el grado de Especialidad en Derecho Electoral por la misma casa de estudios, con mención honorifica en ambos casos. Se desempeñó como Secretaria de Estudio y Cuenta en la Sala Regional Especializada, así como en la Sala Regional Ciudad de México. Fungió como asesora en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y fue Directora del Instituto de Formación y Capacitación del Tribunal Electoral de la Ciudad de México.
@MarthaMercadoRm
Es de sobra conocido el movimiento migratorio existente de mexicanas y mexicanos hacia los Estados Unidos. La comunidad mexicana se encuentra entre las más grandes en el territorio estadounidense, con más de 11 millones de personas. Todas estas personas, al residir en otro país, no pierden su condición de ciudadanas y ciudadanos mexicanos, lo que implica que siguen siendo titulares de los derechos políticos reconocidos en nuestra Constitución federal, en especial del derecho de voto.
Por ello, durante las últimas décadas se han dedicado diversas acciones y esfuerzos para garantizar a las personas residentes en el extranjero su participación en los procesos democráticos. A diferencia de la reciente atención que se está dando a otros grupos en situación de vulnerabilidad, el voto extraterritorial tiene una trayectoria más larga en la historia electoral de nuestro país. Una de las primeras obras en analizar el tema desde la perspectiva jurídica fue la de Carpizo y Valadés en 1998.
En ese sentido, las discusiones en este momento se enfocan principalmente en ofrecer mejores formas o modalidades de votación a distancia, así como en el aprovechamiento de las nuevas tecnologías. En otras palabras, se busca llegar a todas las personas votantes en el exterior con el menor gasto posible. Las modalidades de votación para las personas residentes en el extranjero han ido en aumento con el paso de los años.
Hasta 2014, con la abrogación del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, solo se contemplaba el voto postal para la elección presidencial. Con la aparición en ese año de la vigente Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, al tradicional voto postal se agregaron posibilidades tales como el voto electrónico por Internet y el voto presencial en embajadas y consulados, según el artículo 329. Además, se contempló la posibilidad de votar por senadurías, gubernaturas de las entidades federativas y la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Por su parte, en algunas entidades federativas, entre las que se encuentra la Ciudad de México, se contempla la figura de la diputación migrante.
En efecto, el voto en el exterior se ha identificado con la modalidad del voto postal, que es como comenzó y se mantiene hasta nuestros días. El proceso es relativamente sencillo: se llena una solicitud específica; al ser procedente, la persona solicitante forma parte del listado relativo; se le envía el paquete electoral por vía postal; la persona votante tiene un plazo fijo para llenar la boleta electoral y devolverla por la misma vía. Es una modalidad eficaz y segura.
Posteriormente, con la llegada de las nuevas tecnologías de la información y comunicación al ámbito electoral, el voto electrónico por Inter-
Existe la visión de que en los próximos años el voto electrónico por Internet se convierta en la modalidad principal de votación para las personas residentes en el extranjero.
net se hizo presente. En 2021, en las elecciones locales de varias entidades federativas como Baja California Sur, Chihuahua, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Querétaro, San Luis Potosí y Zacatecas, se utilizó por primera vez esta modalidad, sin importar la lejanía. Es interesante observar que en los recientes procesos electorales de Coahuila y Estado de México, en 2023, la vía de votación por Internet fue la más utilizada: 567 coahuilenses residentes en el extranjero votaron por Internet, 389 por vía postal y 79 presencialmente; por su parte, 1376 mexiquenses residentes en el extranjero votaron por Internet, 811 por vía postal y 131 presencialmente.
La tercera modalidad es la votación presencial en las embajadas o consulados. Esta modalidad se puso en funcionamiento a partir de una sentencia de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (SUPJDC-1076/2021 y acumulados), ante la omisión de la autoridad administrativa electoral de implementarla. En 2023, en los procesos electorales locales de Coahuila y Estado de México, el Instituto Nacional Electoral (INE) realizó la correspondiente prueba piloto en tres consulados en Estados Unidos y uno en Canadá.
Lo interesante es que las personas que opten por esta modalidad emitirán su voto en una urna electrónica (estación de votación). Cabe mencionar que serán 23 sedes consulares (20 en Estados Unidos; 1 en Canadá; 2 en Europa) donde el INE habilitará los denominados “Módulos receptores de votación” para las elecciones en curso. En las estaciones de votación, la persona electora seguirá al menos tres pasos: 1) escanear el código de apertura; 2) esto permitirá visualizar la oferta electoral; 3) seleccionar la opción, confirmar la selección y emitir su voto.
Cabe precisar que, si se toma en cuenta la cifra mencionada al principio, la votación de las personas residentes en el extranjero en las dos
últimas elecciones presidenciales es relativamente baja. En 2012, de las 59,115 personas inscritas, votaron 40,714, lo que significó el 68.8% de participación en ese universo. En 2018, de las 181,873 personas inscritas, votaron 98,470, lo que representó el 54.1% de participación. Como se advierte, de 2012 a 2018 la votación se duplicó, pero disminuyó el porcentaje entre los inscritos y los que efectivamente votaron. Para las próximas elecciones se espera que este patrón de aumento moderado en la participación se mantenga.
En cuanto a la CDMX, la figura de la diputación migrante fue introducida en la normativa electoral con el objetivo de reservar un escaño en el Parlamento local a representantes de este grupo de personas históricamente marginado. La primera experiencia tuvo lugar en 2021, cuando participaron once candidaturas. Del total de 12,226 personas registradas en el listado respectivo, el 72% emitió su voto, es decir, hubo 8,906 votantes, tanto por vía postal (1556 votos) como por Internet (7350 votos).
Finalmente, queremos recalcar algo que ya habíamos señalado en una colaboración anterior (Signum 104): a la vista de la presentación de nueva cuenta por el Ejecutivo federal de una iniciativa de reforma electoral, existe la visión de que en los próximos años el voto electrónico por Internet se convierta en la modalidad principal de votación para las personas residentes en el extranjero.
REFERENCIAS
1. Carpizo, J. y Valadés, D. (1998). El voto de los mexicanos en el extranjero. México: IIJ-UNAM.
2. Sala Superior (2021). SUP-JDC-1076/2021 y acumulados, 14 de octubre de 2021.
Política del futuro o cómo recuperar la esencia Antonio Sola*
te como “Creador de Presidentes” por las 16 victorias presidenciales conseguidas en paí- ses de África, América y Europa, Antonio es estratega y ha realizado más de 500 campañas electorales de todo tipo. Entiende que ganar es fruto de la ciencia, la técnica y el arte, y que no todos sirven para gobernar. Por eso, valora especialmente la dimensión ética de los candidatos con los que trabaja. Hoy dirige procesos en cuatro de los cinco continentes del planeta y está considerado dentro de los top 5 de los estrategas a nivel mundial.
Antonio preside la Fun- dación Liderar con Sentido Común, nacida para ayudar a cerrar las grietas que nos dividen, y es cofundador de la Escuela Política Fratelli Tutti que busca los líderes del futuro presente para que ayuden a entrar en la nueva era que empieza sin dejar a nadie atrás.
@AntonioSola_En la Fundación Liderar con Sentido Común, seguimos avanzando en el estudio y análisis de los liderazgos por las distintas Comunidades Autónomas de España y ya estamos a punto de terminar el recorrido que nos permitirá realizar una comparativa en profundidad.
Todo llegará, pero hoy os queremos hablar de las encuestas realizadas en las dos Ciudades Autónomas que tiene España en el continente africano: Ceuta y Melilla. Las encuestas desarrolladas en estos enclaves revelan datos sorprendentemente similares en lo que respecta a la percepción de la ciudadanía hacia los líderes políticos, aunque con pequeñas diferencias que vale la pena analizar.
En ambas ciudades autónomas, una abrumadora mayoría de los encuestados considera que la honestidad es la principal cualidad que debe tener un líder político. En Ceuta, el 74 % de los ciudadanos creen en esta premisa, mientras que en Melilla el porcentaje desciende ligeramente a 68 %. Además, en ambas encuestas se destaca la preferencia por cualidades de bondad moral sobre aspectos puramente racionales, como la dedicación al trabajo.
Ambos estudios también reflejan un alto nivel de desconfianza hacia los políticos que actualmente gobiernan. En Ceuta, ocho de cada diez encuestados indican desconfiar de los políticos, mientras que en Melilla esta cifra alcanza el 71 %. Estos porcentajes revelan una desconexión significativa entre los líderes políticos y la ciudadanía, marcando así la necesidad de nuevas figuras de liderazgo.
En lo que respecta a los posibles líderes para solucionar los problemas, en Ceuta tres de cada diez ciudadanos (27 %) proponen la figura de un nuevo líder, superan-
Las personas anhelan un retorno a la esencia y nos lo hacen claro: no sirve alguien fuerte y trabajador si no es también honesto.
do ligeramente al 23 % que señala a los políticos actuales. En contraste, en Melilla dos de cada diez encuestados (19,47 %) abogan por un nuevo líder, siendo superados por el 25,3 % que sigue confiando en los políticos para resolver los problemas. Ambas encuestas indican que si bien los ciudadanos reconocen a los políticos como una potencial solución, existe una sensación de obligación más que de esperanza en su capacidad real para solucionar los problemas.
En cuanto a las figuras más admiradas como verdaderos líderes, tanto en Ceuta como en Melilla, los padres ocupan el primer lugar, seguidos de figuras como profesores y médicos que representan valores cercanos y de confianza para la ciudadanía. Por otro lado, figuras distantes como el presidente del Gobierno, el presidente de la Ciudad Autónoma, la policía y el sacerdote son percibidas con mayor lejanía por parte de los encuestados en ambas ciudades.
En conclusión, las encuestas en Ceuta y Melilla muestran similitudes en cuanto a la importancia de la honestidad en un líder político, la desconfianza hacia los políticos actuales y la necesidad de nuevos liderazgos. A pesar de algunas di-
ferencias en los porcentajes, ambas ciudades reflejan un clima de escepticismo hacia la clase política y una búsqueda de líderes que representen los valores y el sentido común que los ciudadanos anhelan.
Todos estos datos nos llevan a valorar que la ciudadanía demanda más de lo que tiene, que lo que hay no sirve. Las personas quieren una vuelta a la esencia y, así, nos lo dejan claro, porque no sirve alguien fuerte y trabajador si además no es honesto. Las PERSONAS, y lo escribo en mayúscula, demandan liderazgos reales, auténticos, que se preocupen por ellos. Por eso, enlaza con la figura de liderazgo que ellos tienen en su mente, en la que las personas que enseñan y cuidan superan con creces a aquellos que se dedican a lo institucional.
En definitiva, debemos repensar el modelo y tener en cuenta que esta sociedad que estamos construyendo debe sostenerse sobre los pilares más profundos que tenemos: los valores, y que todo lo que hagamos debe girar en torno al bienestar y la felicidad de las personas.
El voto joven en la próxima elección presidencial
Ricardo Homs**Ricardo Homs es presidente de la Academia Mexicana de la Comunicación AC. (www.amdc.org.mx), autor y conferencista. Ha publicado más de 23 libros con las editoriales más importantes. Es editorialista del periódico El Universal y participa en noticieros de ADN40.
Es experto en liderazgo social, marketing político y posicionamiento.
Fundó la empresa de consultoría Ries & Ries México, la cual forma parte de la corporación global fundada por Al Ries en Atlanta.
www.ricardohoms.com
FB: @Ricardo.Homs1
LI: Ricardo Homs
TW: @homsricardo
Al pensar en la trascendencia de la próxima elección presidencial para el futuro de México, no logramos evitar recordar el referéndum realizado en Reino Unido el 23 de junio del 2016.
Esta votación debía interpretar la voluntad ciudadana del Reino Unido, ya fuera de abandonar la Comunidad Europea o permanecer en ella. Es el llamado Brexit.
Los promotores del Brexit argumentaban que permanecer como miembros de la Unión Europea minaba la soberanía británica y la toma de decisiones. Sin embargo, estos argumentos de corte nacionalista estaban más vinculados a la visión tradicionalista de país, que a las oportunidades de crecimiento y desarrollo. Era la gente de edad madura, la tradicionalista, que abogaba por esta visión nacionalista que, sin duda, cortaría los beneficios que tenían los jóvenes de poder moverse por toda Europa en busca de oportunidades laborales y empresariales para tener un mejor futuro. Sin embargo, los jóvenes no defendieron como debían su postura sobre esta decisión que afectaría su vida futura -ya sea por apatía o desinterés- y la votación terminó definiéndose por la escisión.
La promoción del voto entre los jóvenes en las próximas elecciones presidenciales de México enfrenta varios retos significativos.
El 31 de enero del 2020 Esta nación abandonó la UE con un grave costo para el futuro de la gente joven.
Las conductas de las nuevas generaciones de votantes en las elecciones presidenciales de México han mostrado cambios significativos en los últimos años. Uno de los aspectos más destacados es el desinterés por la política y falta de participación comprometida en asuntos colectivos que afecten a la comunidad, y en ello está el riesgo de una participación nula en esta elección que decidirá el modelo de país que será México en los próximos años, con sus oportunidades y los riesgos que esta decisión implica.
Es evidente que la gente joven hoy tiene muchas más áreas de interés que las que
teníamos las generaciones anteriores. Quizá también afecten las circunstancias que esa edad implica en la definición del futuro personal y las dificultades de hacerse de un lugar de éxito en un mundo cada vez más competido. Esta visión les distrae de su participación en asuntos colectivos.
Sin embargo, su participación es fundamental pues ellos serán los protagonistas del futuro. Por ello se deben buscar vínculos que permitan estimularlos a participar activamente en la próxima elección.
Las nuevas generaciones están muy activas en plataformas como “X”, (Twitter), Tik Tok, Facebook e Instagram entre otras, donde comparten información y expresan sus opiniones sobre lo que
les rodea. Por ello es importante utilizarlas para motivar su participación política.
Los jóvenes votantes suelen mostrar un interés particular por temas como el medio ambiente, la igualdad de género, la inclusión social y la transparencia gubernamental. Estos temas pueden influir en su decisión de voto y en su apoyo a ciertos candidatos.
Sin embargo, muchos jóvenes se muestran desencantados con los partidos políticos tradicionales y buscan alternativas fuera del sistema establecido. Esto ha llevado a un aumento en el apoyo a candidatos independientes o de nuevos movimientos políticos.
Los jóvenes votantes suelen utilizar fuentes de información en línea para informarse sobre los candidatos y las propuestas electorales. Esto incluye sitios web de noticias, blogs políticos, videos en línea y otros medios digitales.
xico están adoptando conductas y actitudes diferentes en comparación con generaciones anteriores, lo que está teniendo un impacto en el panorama político y en las estrategias de los candidatos durante las elecciones presidenciales. Quizá la ausencia de educación cívica en el ámbito escolar -pues esta formación fue retirada de los programas de estudio desde hace varios años- impide el desarrollo del sentido de responsabilidad ciudadana desde temprana edad, necesario para fomentar una cultura de participación política activa.
La promoción del voto entre los jóvenes en las próximas elecciones presidenciales de México enfrenta varios retos significativos, como el desinterés en la política y en el proceso electoral, lo que dificulta motivarlos para que participen en las elecciones.
En resumen, las nuevas generaciones de votantes en Mé -
Algunos jóvenes perciben que las instituciones políticas y electorales no representan sus intereses o que están afectadas por la corrupción, lo que disminuye su motivación para votar.
La información disponible sobre los candidatos y las propuestas electorales a veces puede ser confusa o sesgada, lo que dificulta que los jóvenes tomen decisiones informadas sobre su voto.
Algunos jóvenes pueden enfrentar barreras para acceder al proceso electoral, como la falta de información sobre cómo registrarse para votar.
Las campañas de promoción del voto dirigidas a los jóvenes a menudo no son lo suficientemente atractivas o relevantes para captar su atención y motivarlos a participar en las elecciones.
Para abordar estos retos, es importante implementar estrategias efectivas de promoción del voto entre los jóvenes, como:
Utilizar las redes sociales y plataformas digitales para llegar a los jóvenes y compartir información clara y objetiva sobre el proceso electoral y los candidatos.
Organizar eventos y actividades en universidades, escuelas y espacios juveniles para informar y motivar a los jóvenes a participar. Hasta hoy los candidatos solo se acercan a las universidades privadas y parecen evadir a las universidades públicas.
Involucrar a líderes juveniles y figuras influyentes en la promoción del voto entre los jóvenes, utilizando mensajes y enfoques que resuenen con sus intereses y preocupaciones.
Estas acciones pueden contribuir a aumentar la participación de los jóvenes en las elecciones presidenciales y fortalecer la democracia en México.
¿A usted qué le parece?
Claudia Sheinbaum bota los votos
Alfonso Gómez**Alfonso Gómez lleva ejerciendo el periodismo desde hace 35 años. Fue reportero en los periódicos: Diario de México y El Sol de México. Reportero, investigador y conductor en Canal 13 de Televisión, posteriormente Imevisión (Canal 13 y Canal 7 TV). Trabajó durante 17 años en Grupo Monitor de Radio Red donde se desempeñó como Jefe de Redacción, de Noticieros Metropolitanos, Gerente de Información, Director de Información, Director de Internet y Director de Operaciones. Gerente de las emisoras
XEFAJ 1560 AM XENET 1320
AM. En el sector público ha ocupado las Subdirecciones de Información de la PROFECO, y las Direcciones de Información en las secretarías de Gobernación y Economía. Actualmente se desempeña como Subdirector de información del GPPAN en la Cámara de Diputados. Es egresado de la carrera de Periodismo y Comunicación Colectiva de la UNAM, FES Aragón y actualmente cursa la Maestría en Periodismo Político en la Escuela de Periodismo Carlos Septién García.
La lucha en las urnas está perfectamente definida y mal haríamos en dar por cantado que ya tenemos una ganadora, nada más porque así lo marcan las encuestas.
A riesgo de no ser del agrado de algunos de nuestros lectores, las encuestas dejaron de ser una herramienta metodológica para conocer las condiciones de un fenómeno, debido a que se convirtieron en medios de influencia política y de propaganda electoral. Esto no solamente es privativo de México, también es un recurso maniqueísta muy utilizado en muchos otros países.
En nuestra realidad y haciendo a un lado la figura decorativa que representa el candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, consideramos que la ganadora de las elecciones presidenciales de 2024 saldrá de entre Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum.
Por ahora, Claudia no tiene los veinte o treinta puntos de ventaja sobre Xóchitl, quizá los tuvo el año pasado cuando su opositora apenas empezaba a ser conocida entre las preferencias ciudadanas, pero hoy la distancia es cada vez
Hay demasiado coraje y hartazgo en el ambiente por las injusticias consentidas cínicamente por la cuatroté.
más cerrada entre una y otra. Hoy, con el inicio de la campaña electoral, la clave está en convencer cada día a nuevos simpatizantes, incluso sectores completos, siempre y cuando se siga con una buena estrategia electoral.
Por ejemplo, Claudia se da el lujo de “desdeñar” invitaciones para sumar adeptos. Mandó el mensaje que no asistiría a la Plenaria de Citibanamex por motivos de agenda. También declinó la invitación para hablar en el Congreso Nacional de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción. Dejó en “veremos” su asistencia a la Universidad Iberoamericana. Y le puso objeciones a la firma del Acuerdo por la Paz, cuando asistió a la Conferencia del Episcopado Mexicano.
En cambio, Xóchitl y Máynez sí acudieron a todos esos en -
cuentros, enviando un mensaje de apertura y disposición en todo aquello que fuera mostrarse ante la gente.
Claudia evita estar en eventos con auditorios no controlados, ella está para agradar a los asistentes leales, sin importarle si son los mismos que han ovacionado a López Obrador en diferentes momentos de su sexenio. Su fortaleza es AMLO y por eso en su primer acto oficial de campaña presentó las 100 acciones con su visión de Estado, incluidas las 20 iniciativas enviadas por el presidente de la República al Congreso de la Unión.
Claudia es la candidata para aquellos que ven en el lopezobradorismo su medio de subsistencia, es decir, los que están empleados en la burocracia orgánica, tanto del gobierno federal, como en los 23
gobiernos estatales y los cientos de alcaldías distribuidas por todo el país, abanderadas con la marca de Morena.
Con mucha temeridad se dice que “tiene en la bolsa” a los beneficiarios de los programas sociales, algo así como 25 millones de posibles votantes, sin embargo, tan solo en el sector de los adultos mayores no todos están con la cuatroté y para muestra hay que ver las imágenes de los asistentes a las marchas convocadas en defensa de la democracia. También réstele la falta de transparencia en los padrones de beneficiarios y que suman por cientos de miles de “fantasmas” que no votarán, pero cuyo recurso alguien está recibiendo cada bimestre de manera puntual.
Lo mismo diremos de quienes aseguran que el gremio de los maestros los tiene Morena como aliados. Es una verdad a medias y hay que poner atención en los miles de maestros comprometidos con la educación, que ven el retroceso de los últimos años en el sector.
brá un voto incondicional para Claudia, pero hay un evidente descontento porque, primero, muchos de ellos han sido ignorados y puestos como pretexto para exhibir el clima de inseguridad que priva en el país; segundo porque en el Ejército Mexicano y la Marina y Armada de México, si bien han aumentado sus filas, existe inconformidad por las improvisadas tareas asignadas, junto con los “contratazos” de negocios con el gobierno pero que solo benefician a las élites castrenses. Luego tenemos al gremio de los investigadores y académicos que, votaron convencidos por la oferta de AMLO en la campaña de 2018. Hoy definitivamente no todos estarán con Morena en la boleta, pues se sienten traicionados por los recortes presupuestales a Escuelas, Institutos, Universidades y Centros de Investigación.
También se dice que entre los policías, militares y marinos ha -
Mencionemos además a los transportistas, que se cuentan por miles, ya sea de carga, de pasajeros, urbanos, federales y demás que, pese a su afiliación corporativa implementada en este gobierno, han dado muestras de rechazo al régimen mediante marchas, ma -
nifestaciones y cierres de vialidades a lo largo del sexenio por la inseguridad y falta de políticas públicas en el sector.
Si bien es cierto que hoy la economía ha marchado por una ruta de crecimiento, este no ha sido acorde con las expectativas y por el surgimiento de una casta empresarial proveedora del gobierno con sospechosos lazos de corrupción.
Otro de los sectores que motorizan la economía: la pesca y el campo mexicano, sobreviven en condiciones lamentables por el abandono en el que los ha dejado el gobierno y la simulación de los supuestos programas de apoyo.
Suman miles los pacientes del sector salud botados a su suerte por la precaria situación que viven día con día. Y habrá que agregarles a los empleados, médicos y enfermeras igual de inconformes.
Hay demasiado coraje y hartazgo en el ambiente por las injusticias consentidas cínicamente por la cuatroté . La connivencia de las mafias y el crimen organizado con la cla -
se gobernante tienen indignación y existe ya una masa social opositora que se está agitando más y más.
Un factor extraordinario que podrá mover más la balanza es la hipocresía y displicencia del presidente de la República frente a los sucesos que todos los días impactan a la nación. A todo esto, advertimos que el derroche de dinero repartido para adornar la asistencia a los actos masivos de Claudia no garantizará que quienes estiran la mano lo reflejen con su voto en las urnas.
Xóchitl tiene la posibilidad de aglutinar a una millonada de mexicanos enojados por lo que se vive en el país y solo un error de cálculo la podría descarrilar en su propósito ¿Cuál podría ser ese error? Creer que la gente acudirá masivamente a emitir su voto.
Xóchitl tendrá que seguir administrando el enojo para ofrecer soluciones a lo destruido, mejorar lo que está bien y llevar a México hacia la modernidad sin delincuencia y con justicia. El reto no está fácil.
Actividades Prohibidas Durante las Campañas Electorales en México
Armando Hernández*
*Armando Hernández es Licenciado, Maestro y Doctor en Derecho, con Especialidades en Derecho Constitucional, Administrativo, Electoral, Parlamentario y Derechos humanos. También es Licenciado en Periodismo, Economía, Ciencias de la Comunicación y Administración y Gestión Pública, así como Doctor en Ciencias Políticas y Sociales. Es profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM, así como Profesor Investigador visitante en el CIDE, (Centro Público de Investigación). Cuenta con la distinción de Investigador Nacional nivel II del Sistema Nacional de Investigadores del CONAHCYT.
@DrArmandoHdz
Se calcula que el actual proceso electoral 2023-2024 en México, que implica una gran cantidad de cargos a elegir en los niveles federal, estatal y municipal, será uno de los más grandes, complejos y, quizá, de los más impugnados en la historia reciente de nuestro país.
Asimismo, es muy común que existan dudas sobre lo que se puede y no se puede hacer a lo largo del período de campañas electorales. Incluso, se llega a considerar indebidamente que los servidores públicos prácticamente deben dejar de realizar una serie de tareas o actividades, en virtud de lo que coloquialmente se conoce como “veda electoral”.
Debido a lo anterior, resulta importante clarificar las actividades que deben evitar tanto los candidatos como los servidores públicos y los ciudadanos para garantizar la equidad y transparencia del proceso electoral.
La legislación electoral mexicana establece una serie de disposiciones normativas cuyo fin es preservar la integridad de las elecciones y evitar prácticas que puedan distorsionar el proceso democrático. A continuación, se detallan algunas de las principales actividades prohibidas durante las campañas electorales en México:
1. Uso de recursos públicos con fines electorales: El uso indebido o desvío de recursos públicos es ya de por sí una conducta ilícita, pero adicionalmente, en el período electoral, los servidores públicos tienen prohibido utilizar recursos del Estado para promover a un candidato, partido político o coalición. Esto incluye el uso de instalaciones, vehículos oficiales, material de oficina, e incluso el tiempo en horarios laborales u otros recursos públicos con fines electorales.
2. Compra y coacción del voto: Tanto a los candidatos como a los ciudadanos les está prohibido comprar votos o intercambiarlos por beneficios económicos, materiales o de otra índole, así como coaccionar a otras personas, especialmente subordinados, para ese fin. Estas prácticas atentan contra la libre voluntad del electorado y constituyen también delitos electorales.
3. Difusión de encuestas falsas o alteradas: Durante las campañas electorales, está prohibida la difusión de encuestas falsas o manipuladas con el propósito de influir en la percepción de los votantes y alterar los resultados electorales.
4. Propaganda negra, o “guerra sucia”: Los candidatos, servidores públicos y ciudadanos no deben incurrir en actos como difundir men-
El respeto a la normativa electoral y la ética en la contienda política son fundamentales para garantizar la legitimidad y transparencia de las elecciones en México.
sajes que promuevan el odio, la violencia o la exclusión de determinados grupos o personas por motivos políticos, así como la difusión de propaganda que atente contra la imagen o dignidad de las personas o contenga mensajes de odio o discriminación.
5. Propaganda electoral irregular: Se prohíbe la colocación de propaganda electoral en lugares no autorizados (por ejemplo, dentro del equipamiento urbano), la elaboración de propaganda político-electoral con ciertos materiales (no reciclables, por ejemplo) o en ciertos momentos específicos, como el “período de reflexión” (tres días previos al día de la jornada electoral).
6. Uso indebido de medios de comunicación: Los candidatos y partidos políticos tienen prohibido utilizar los medios de comunicación de forma indebida para difundir propaganda electoral, así como contratar espacios publicitarios que excedan los límites establecidos por la ley.
7. Violencia política y violencia política de género: Cualquier forma de violencia política, ya sea física, psicológica o simbólica, está estrictamente prohibida durante las campañas electorales. Los candidatos, servidores públicos y ciudadanos deben promover un ambiente de respeto y tolerancia en el debate público. Cuando se trata de violencia política en contra de las mujeres por razón de género, las consecuencias son más graves.
8. Difusión de propaganda gubernamental: El artículo 41 constitucional, Base III, Apartado C, segundo párrafo, señala que:
“Durante el tiempo que comprendan las campañas electorales federales y locales y hasta la conclusión de la respectiva jornada comicial, deberá suspenderse la difusión en los medios de comunicación social de toda propaganda gubernamental, tanto de los poderes federales
como de las entidades federativas, así como de los municipios, de las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México y cualquier otro ente público. Las únicas excepciones a lo anterior serán las campañas de información de las autoridades electorales, las relativas a servicios educativos y de salud o las necesarias para la protección civil en casos de emergencia.”
9. Promoción personalizada con uso de recursos públicos: Los párrafos séptimo y octavo del artículo 134 constitucional disponen que:
“Los servidores públicos de la Federación, las entidades federativas, los municipios y las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México, tienen en todo tiempo la obligación de aplicar con imparcialidad los recursos públicos que están bajo su responsabilidad, sin influir en la equidad de la competencia entre los partidos políticos.
La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público.”
Flor de Loto: El respeto a la normativa electoral y la ética en la contienda política son fundamentales para garantizar la legitimidad y transparencia de las elecciones en México. Todos los actores involucrados en el proceso electoral tienen la responsabilidad de cumplir con las reglas establecidas y contribuir a la construcción de una democracia sólida y participativa.
El “ show” de los debates
Gabriela Seoane*
*Gabriela Seoane es licenciada en periodismo y comunicación por la UNAM FES Acatlán y Maestra en educación también por la UNAM. Se ha desempeñado como guionista, redactora y reportera de radio y televisión. Ofrece capacitación para entrenamiento en medios y ha sido profesora del ITESM CCM en el Departamento de Español, Literatura y Arte de la preparatoria.
@GabseomxUn debate es la discusión de un tema entre expertos bajo la conducción de un moderador. Al buscar en la Real Academia Española el término debate, encontramos que es sinónimo de controversia, polémica, discusión, disputa.
En México, la realización de debates entre los candidatos a los diferentes puestos de elección popular forma parte de las etapas previas a los comicios, y los que reciben más atención son los que se realizan entre los aspirantes a la Presidencia de la República, y en menor protagonismo, los que buscan las gubernaturas de los estados, entre los que destacan, por su importancia política, el de la Jefatura del Gobierno de la Ciudad de México.
Sin embargo, ¿qué tan útil sigue siendo este ejercicio para que la ciudadanía conozca los planes de gobierno y las propuestas de los participantes? ¿Es significativo el número de ciudadanos que ven los debates? Y quienes los ven, ¿realmente ponen atención en las propuestas?
En principio, y de acuerdo con su definición, el debate debería permitir a los ciudadanos conocer las propuestas y puntos de vista de los candidatos sobre diversos temas de interés general. Sin embargo, por el formato tan rígido que ha prevalecido en los debates realizados hasta ahora, es muy difícil que los participantes profundicen en los temas.
El debate también ha permitido, en algunos momentos, conocer la capacidad o incapacidad de respuesta de los participantes, así como su preparación o falta de conocimientos sobre determinados temas. Es decir, el debate se ha convertido, en algunos momentos, en una prueba para los aspirantes a un puesto de elección popular.
En los años en que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) gozaba de total hegemonía, los debates no se consideraban necesarios. A partir de la elección de 1994, inician los debates en México. En este primer ejercicio de discusión de ideas, Diego Fernández de Cevallos, candidato por el Partido Acción Nacional (PAN), destacó por sus cualidades de oratoria por encima de los otros dos candidatos: Cuauhtémoc Cárdenas del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Ernesto Zedillo Ponce de León por el PRI. Sin embargo, el ganador fue Zedillo Ponce de León, quien, por cierto, sustituyó en la candidatura a Luis Donaldo Colosio, quien fue asesinado el 23 de marzo de ese año.
En la elección presidencial del año 2000, el debate comenzó a transformarse, pues no solo destacaron las cualidades discursivas de los participantes, sino también el carisma que proyectaban a los elec-
A estas alturas, muchas personas ya tienen definido su voto y difícilmente van a cambiar de opinión.
tores. Así, el candidato por el PAN, Vicente Fox Quezada, hizo famosas frases como el "¡hoy, hoy, hoy!" con la que insistió a Cuauhtémoc Cárdenas para realizar el debate durante la campaña. Posteriormente, también surgieron frases como "Ricky Riquín Canallín" o "deja guardar mi cartera" que Andrés Manuel López Obrador le asestó a Ricardo Anaya en el debate presidencial de 2018.
Cabe señalar que, si bien las frases y actitudes chuscas han ido en aumento, los formatos de los debates no han evolucionado; siguen siendo rígidos y prevalecen los tiempos recortados, así como la poca posibilidad de respuesta para facilitar una verdadera discusión. Es una constante que la falta de respeto a los turnos les resta frescura y oportunidad a las réplicas.
Por otra parte, los candidatos se preparan más para defenderse de los ataques (principalmente acusaciones de corrupción) de sus contrincantes y de tener preparada información para demostrar sus malos manejos, que para profundizar en sus propuestas.
Y es que se ha privilegiado presentar el "show" como espectáculo de los debates para causar un efecto de indignación, burla o sorpresa entre la ciudadanía, en lugar de intentar dar respuesta a las necesidades en materia política, económica y social. En concordancia con esto, para los estrategas de campaña, resulta más importante dar la apariencia de resultar ganador del debate, aunque no se conozca a ciencia cierta qué se gana.
Evidentemente, se conforman con alentar en redes sociales más "me gusta" o, tal vez, convertirse en tendencia, incluso conseguir muchos comentarios favorables, pero esto no garantiza el triunfo en las urnas.
El candidato Andrés Manuel López Obrador demostró en el debate de 2018 que lo importante es soltar frases chuscas y ocurrentes para lograr simpatías. No olvidemos que también "El Bronco",
Jaime Rodríguez, logró la gubernatura de Nuevo León por muchas de sus frases efectistas basadas también en ocurrencias. Con su campaña permanente por mantener el poder en favor de Morena, a través de la mañanera, López Obrador les ha dado la receta a los candidatos de su partido: negar todas las acusaciones en su contra, contratacar acusando a sus contrincantes de actos de corrupción, aunque no presenten pruebas, y utilizar frases pegajosas enfocadas en lograr la simpatía de las personas que ven el debate.
Por otra parte, los ciudadanos, ya bastante polarizados, tampoco escuchan las propuestas ni asumen una actitud crítica ante lo que ven y escuchan. Simplemente se suman a la defensa irrestricta de su candidato y al ataque contumaz de aquel que consideran su enemigo. Tampoco es muy alto el número de personas que se interesan por ver el debate y algunas, incluso, no se enteran de la fecha en que se celebra.
Cabe recordar que a estas alturas, muchas personas ya tienen definido su voto y difícilmente van a cambiar de opinión. Sin embargo, todavía hay un amplio sector de indecisos a quienes tal vez sí les haría falta conocer las propuestas de los candidatos.
Tristemente, en los debates por venir, lo más probable es que seguirán prevaleciendo acusaciones y descalificaciones sobre las propuestas. Lo que será triste es que los ciudadanos no exijamos más y nos conformemos con el "show de los debates".
REFERENCIAS
1. Juárez Gámiz. J. (2021). Los debates electorales en la democracia contemporánea. Apuntes para analizar su presencia, función y evolución en las campañas. INE. https://www.ine.mx/wp-content/uploads/2021/08/Deceyec-CDCD-42.pdf
Redes sociales, libertad de expresión y elecciones
Carlos Ezeta**Carlos Ezeta es Licenciado en Derecho por la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México; con estudios de Especialización en Derecho Civil y estudios de Maestría en Derecho Electoral por la Escuela Judicial Electoral del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Cuenta con diversos cursos y diplomados, entre ellos, Diplomado en Análisis Político Estratégico por el Centro de Investigación y Docencia Económicas.
Se ha desempeñado como Secretario Auxiliar con funciones de Secretario de Estudio y Cuenta en el Tribunal Electoral de la Ciudad de México.
En 2019 obtuvo la incorporación a la Lista de Personas Habilitadas para el cargo de Secretario de Estudio y Cuenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
@LicEzetaMacias
El surgimiento de Internet y su desarrollo exponencial a lo largo de los últimos 20 años ha generado una serie de comportamientos sociales que no estaban previstos en las normas jurídicas que rigen la conducta de las personas, al no ser posible que estas regulen todos los actos y omisiones realizados por los seres humanos a fin de mantener el orden público. Por ello, ahora más que nunca, cobra sentido el significado de la frase latina ubi societas, ibi ius (“donde hay sociedad, hay Derecho”), que consiste en explicar que la creación del Derecho está supeditada a la existencia de la sociedad, la cual se encuentra actualmente en constante evolución a partir de las consecuencias que son resultado de los avances tecnológicos, como Internet.
Si a lo anterior se suma el fenómeno particular del uso de las redes sociales (entre las más importantes, Facebook, X1, Instagram o incluso TikTok), se tiene como resultado un incremento en la gama de conductas llevadas a cabo por la gente y, en consecuencia, se justifica la regulación de estos nuevos medios de comunicación en las leyes de cualquier país, ya que la dinámica espontánea que traen aparejada no solo propicia aspectos benéficos para el mundo, sino también efectos negativos derivados de su mala utilización.
En ese sentido, tomando en consideración que el 1 de marzo pasado iniciaron las campañas electorales2 en el marco del Proceso Electoral Federal 2023-2024, el Derecho Electoral no escapa del impacto que tiene el manejo de las redes sociales, pues constituye una herramienta que en diversas ocasiones han sabido aprovechar los principales personajes que participan directa o indirectamente en el proceso de renovación de los Poderes Legislativo y Ejecutivo (personas precandidatas y candidatas, partidos políticos o la ciudadanía en general), a pesar de que ello implique que a veces se vulneren las reglas y principios que norman la competencia electoral.
Y es que en México, el verdadero problema surge ante la falta de un marco jurídico específico que reglamente el uso de las redes sociales durante el desarrollo de las elecciones (en especial, en lo concerniente a la propaganda electoral)3, así como de la falsa idea empleada como escudo por los referidos personajes en el sentido de que el derecho a la libertad de expresión es absoluto, alegando una vulneración a dicho derecho para amparar cualquiera de sus acciones.
Por una parte, hoy en día en nuestro país no existe un sistema normativo en materia de propaganda electoral expuesta y difundida en redes sociales, volviéndose indispensable la intervención de las autoridades para verificar las actuaciones que se efectúan en el transcurso del
En México, el verdadero problema surge ante la falta de un marco jurídico específico que reglamente el uso de las redes sociales durante el desarrollo de las elecciones.
Proceso Electoral Federal, con el objetivo de inhibir comportamientos que sean susceptibles de afectar la equidad de la contienda. Es aquí donde cobran relevancia los criterios contenidos en las sentencias y jurisprudencias emitidas por el TEPJF (por mucho que aún haya gente que dude de la necesidad de su existencia), como una alternativa que subsana las deficiencias creadas por la carencia de normas que impongan límites a quienes participan activamente en las elecciones.
Por otro lado, es cierto que el derecho a la libertad de expresión es un pilar fundamental para la democracia en un Estado de derecho, toda vez que permite la divulgación de ideas, pensamientos, creencias y opiniones que motivan el debate público, lo que incluso ha sido coincidente con lo sustentado por el TEPJF desde el año 2016 al afirmar que los puntos de vista exteriorizados por la ciudadanía a través de las redes sociales en relación con el desempeño o las propuestas de los partidos políticos o sus personas candidatas gozan de presunción de espontaneidad y, por ende, se encuentran protegidos ampliamente por el derecho en comento; sin embargo, esto no puede traducirse en que la libertad de expresión sea absoluta, ni que sea admisible la lesión de otro tipo de derechos o bienes jurídicos que pongan en duda la legitimidad de los procesos electorales.
De hecho, esto último también ha sido demostrado por el propio TEPJF cuando en el año 2022 sostuvo que los contenidos propagandísticos o proselitistas que se publiquen en redes sociales de manera previa a la veda electoral4 y se mantengan disponibles para la ciudadanía durante ese periodo no actualizan alguna infracción en materia electoral, al no haberse originado o publicado en esta etapa; en otras palabras, la infracción a la prohibición de realizar propaganda elec-
toral o proselitismo durante la veda electoral se actualiza en el momento en que la conducta denunciada ocurre en tal periodo de reflexión, y no por el solo hecho de que los contenidos difundidos previamente se mantengan publicados en redes sociales.
Así, aunque exista la imperiosa necesidad de crear un marco jurídico específico que delimite el derecho fundamental de libertad de expresión en redes sociales concerniente a la propaganda electoral que se utiliza en época de comicios, no todo está perdido, puesto que la máxima autoridad jurisdiccional electoral ha comprendido la importancia de los avances tecnológicos y ha sabido dar una respuesta apropiada ante las conductas irregulares que se suscitan en aras de obtener adeptos que se traduzcan en votos para conseguir triunfos electorales.
Sin perder de vista que la importancia de las redes sociales no solo se observa desde el punto de vista de las personas contendientes en las elecciones, sino también de aquellas que forman parte del número total del electorado que participa en las urnas para elegir a sus representantes populares, pues no hay que olvidar que la ciudadanía también hace uso de las redes sociales para obtener la información que le permita tomar la mejor decisión al momento de expresar su voto.
Aún hay mucho que aprender de redes sociales, libertad de expresión y elecciones.
REFERENCIAS
1. Anteriormente llamado Twitter.
2. La campaña electoral es el conjunto de actividades realizadas por los partidos políticos, coaliciones y personas candidatas para la obtención del voto.
3. La propaganda electoral es el conjunto de escritos, publicaciones, imágenes, grabaciones, proyecciones y expresiones que pro- ducen y difunden los partidos políticos, personas candidatas y sus simpatizantes durante la campaña electoral, con el propósito de presentar sus propuestas ante la ciudadanía.
4. Periodo que comprende los 3 días anteriores a la jornada electoral y el mismo día de ésta, en los cuales está prohibida la distribu- ción o colocación de propaganda electoral.
5. https://web.diputados.gob.mx/inicio.
6. https://www.te.gob.mx.
Revista
SIGNUM
Dosier político
Jorge Álvarez Máynez, nacido el 8 de julio de 1985 en Zacatecas, Zacatecas, México, es una figura destacada en la política mexicana. Actualmente, se destaca como candidato presidencial de Movimiento Ciudadano para las elecciones de 2024. Sus padres son Felipe Álvarez Calderón, fundador del Partido Comunista en Zacatecas y exalcalde de Guadalupe de 2001 a 2004, y Gabriela Máynez.
Completó su licenciatura en Relaciones Internacionales en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), seguida por maestrías en Administración Pública y Políticas Públicas, y en Estudios Internacionales en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM). Asimismo, cuenta con una maestría en Derecho Constitucional y Derechos Humanos del Centro de Estudios Jurídicos Carbonell.
Su carrera política empezó siendo regidor en el ayuntamiento de Zacatecas de 2004 a 2007, y posteriormente, diputado local por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Zacatecas de 2010 a 2013. Tras un breve periodo como candidato independiente, se unió a Movimiento Ciudadano, donde desempeñó varios roles importantes, incluyendo el cargo de diputado federal durante dos periodos y secretario general de acuerdos del partido. Durante su tiempo en el Congreso, se destacó por su productividad legislativa al presentar un notable número de iniciativas.
Su designación como candidato presidencial por Movimiento Ciudadano en 2024 ocurrió después de haber sido inicialmente el coordinador de la campaña presidencial de Samuel García. La renuncia de García abrió el camino para que Álvarez Máynez encabezara la candidatura del partido, marcando un hito significativo tanto para él como para Movimiento Ciudadano, ya que sería la primera vez desde la fundación del partido que presentaran a su propio candidato presidencial.
Las imágenes utilizadas en este dosier fueron tomadas de las redes sociales del candidato, por lo que se presumen púbicas y solo tienen fines ilustrativos.
Políticas públicas y propuestas
El análisis de las políticas públicas propuestas por Jorge Álvarez Máynez, candidato presidencial por Movimiento Ciudadano para las elecciones de 2024 en México, revela un enfoque multidimensional que abarca desde la seguridad hasta el desarrollo económico, pasando por la justicia y el manejo de las drogas.
Álvarez Máynez plantea un cambio de paradigma en la seguridad pública, buscando revertir la militarización y fortalecer las policías civiles mediante un proceso de profesionalización. Esto incluye limitar la actuación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública, haciéndolas excepcionales y temporales, y requiere de una reforma constitucional para restringir las facultades del Ejecutivo en este aspecto.
En cuanto a la infraestructura, propone incrementar la inversión pública en 100,000 millones de pesos anuales, con el objetivo de que el gasto alcance el 4.5% del PIB en su sexto año de administración. Este aumento estaría destinado a proyectos de desarrollo regional y se financiaría mediante ajustes fiscales, combate a la evasión y redistribución del gasto público.
En el ámbito de la seguridad, Álvarez Máynez busca implementar un modelo de justicia que privilegie la prevención del delito, la reparación del daño y promueva una verdadera reinserción social. Propone una reforma efectiva de las fiscalías, fortalecimiento del poder judicial y una nueva política de drogas que incluye la regulación integral del cannabis para usos industriales, farmacéuticos y de consumo adulto responsable.
Otras propuestas relevantes incluyen el combate a la corrupción a través de la transparencia en las licitaciones públicas, la creación de una academia nacional de mandos policiacos, y el desarrollo de infraestructura sustentable que abarque desde obras hidráulicas hasta el impulso a la electromovilidad. Además, Álvarez Máynez se compromete a garantizar becas para estudiantes de nivel superior y a aumentar los recursos destinados a las uni-
versidades, apoyando así la educación y la investigación en México.
Documentos legales y regulatorios
El análisis de los documentos legales y regulatorios asociados a las propuestas de Jorge Álvarez Máynez, revela un enfoque hacia la reforma y adecuación de marcos legales en diversas áreas, incluyendo seguridad, infraestructura, y políticas de drogas, aunque la información disponible se enfoca más en propuestas políticas generales que en documentos legales específicos.
En materia de seguridad, Álvarez Máynez propone una desmilitarización ordenada, buscando reforzar las capacidades civiles en lugar de depender de las Fuerzas Armadas para tareas de seguridad pública. Esta propuesta implicaría reformas constitucionales para limitar la capacidad del presidente de asignar funciones de seguridad a los militares sin la aprobación del Congreso.
En el ámbito de las políticas de drogas, ha planteado una regulación integral del cannabis para diversos usos, lo cual requeriría una revisión y modificación sustancial de la legislación actual sobre sustancias controladas, apuntando hacia un modelo que privilegie la regulación y la generación de ingresos fiscales sobre la prohibición.
Es importante mencionar que, más allá de estas áreas, la campaña de Álvarez Máynez no ha detallado específicamente los documentos legales y regulatorios que serían introducidos o modificados bajo su administración. La implementación de sus propuestas requeriría una serie de iniciativas legales, que, hasta el momento, no han sido esbozadas en documentos formales disponibles públicamente.
Posiciones
Hasta la fecha, las encuestas muestran que Jorge Álvarez Máynez, tiene un nivel de apoyo en un solo dígito, lo que indica que está detrás de las otras dos candidatas. Este escenario sugiere retos significativos para aumentar su base de apoyo frente a competidores con mayor preferencia electoral. Esto significa que el porcentaje
de personas encuestadas que expresan su intención de voto por Álvarez es menor al 10%, lo que indica una baja preferencia.
Álvarez Máynez, se encuentra en una posición más distante respecto a sus competidoras, con un respaldo significativamente menor. Las preferencias hacia su candidatura se estiman en apenas un 3.2% según México Elige, y otras encuestas lo posicionan con un 5% de las preferencias, destacando un decrecimiento en su apoyo en las últimas semanas del 2023.
Discursos y declaraciones públicas Álvarez Máynez, ha presentado una serie de discursos y declaraciones públicas que abarcan una amplia gama de temas, desde propuestas de seguridad hasta la transparencia en sus declaraciones patrimoniales. Aunque no fue posible acceder directamente al contenido detallado de sus discursos a través de las fuentes disponibles, se pueden destacar varios puntos clave que han sido parte de su agenda y mensajes públicos.
En un foro universitario, Álvarez Máynez propuso la legalización de la marihuana como parte de sus políticas de seguridad, argumentando que esto ayudaría a combatir el mercado negro y abonaría a la pacificación del país. Enfatizó que el enfoque debería estar en enfrentar las adicciones con evidencia y regulación, sugiriendo que la regulación de las drogas podría ser un paso necesario para México.
Durante su campaña, Álvarez Máynez también ha hecho críticas a sus oponentes políticos y ha resaltado la importancia de la autenticidad y la conducta ética en la política. Acusó a la oposición de plagiar sus propuestas de campaña y subrayó la necesidad de una campaña basada en propuestas concretas en lugar de ataques digitales y desinformación. Destacó su compromiso con una batalla limpia y con propuestas para mejorar el país.
En otro acto de transparencia y como una medida para contrarrestar lo que él llama la "guerra sucia" en su contra, Álvarez Máynez anunció que hará públicas sus declaraciones patrimoniales. Señaló que conti-
nuará mostrando en redes sociales una conducta como la de cualquier ciudadano, argumentando que no tiene nada que ocultar y que se diferencia de otros políticos por su honestidad y transparencia.
En cuanto a políticas específicas, se pronunció a favor de cerrar las refinerías de Tula y Cadereyta en su primer año de gobierno, argumentando a favor de un cambio hacia energías limpias y renovables. Esta postura destaca su enfoque en la sostenibilidad ambiental y la salud pública sobre los intereses económicos a corto plazo de empresas estatales como Pemex.
A través de sus declaraciones y propuestas, busca captar la atención de un electorado joven y comprometido con la transformación social y política de México.
Informes de prensa y medios de comunicación
La cobertura mediática en torno a Jorge Álvarez Máynez, ha resaltado diversos aspectos de su campaña, enfocándose en propuestas específicas, críticas y respuestas a otros políticos, y la presentación de su candidatura.
También ha sido objeto de críticas y polémicas, particularmente en relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y otros candidatos. AMLO, a través de su cuenta de X (anteriormente Twitter), criticó las propuestas de Álvarez Máynez y Xóchitl Gálvez sobre el cierre de refinerías, lo que generó una respuesta directa de Álvarez Máynez, quien reafirmó su apuesta por las energías limpias y renovables en lugar de los combustibles fósiles.
En el ámbito de los informes de prensa y medios de comunicación, la presentación de su candidatura fue un momento significativo, resaltando la unión y respaldo de figuras importantes dentro de MC, como el gobernador de Nuevo León, Samuel García. Este evento marcó oficialmente su camino hacia la contienda electoral y estableció las bases de su campaña.
Otro aspecto relevante de su cobertura mediática ha sido su interés en revisar y potencialmente adaptar estrategias de
seguridad inspiradas en las implementadas por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, para reducir la violencia en México. Esta posición ha generado interés y debate sobre las posibles aplicaciones de dichas estrategias en el contexto mexicano.
Finalmente, el registro de Álvarez Máynez como precandidato único de MC fue un hito importante en su carrera política, respaldado por la retirada de Samuel García de la contienda presidencial. Este movimiento estratégico dentro de MC subraya la consolidación de Álvarez Máynez como el representante del partido para las elecciones presidenciales de 2024.
Estudios de opinión que reflejen las percepciones, apoyos y críticas En marzo de 2024, Álvarez Máynez denunció la existencia de bots o cuentas falsas que, según él, emitían mensajes de apoyo a favor de Xóchitl Gálvez, lo que podría interpretarse como parte de una campaña en su contra. Esta acción subraya la tensión existente entre los candidatos y los desafíos que enfrentan en la era digital.
Por otro lado, Álvarez Máynez se ha mostrado confiado y desafiante y ha enfatizado su preparación para enfrentar cualquier obstáculo, destacando la importancia de construir una relación de respeto con los medios de comunicación. A pesar de no tener la misma atracción en redes sociales que otros contendientes, resalta su seguimiento de un millón
de seguidores en Facebook, y su compromiso por representar a su generación y abogar por sus necesidades y aspiraciones.
Álvarez Máynez también ha expresado críticas hacia otros políticos y movimientos. Por ejemplo, ha cuestionado la gestión y las promesas de gobernadores asociados a Morena, argumentando que su actuación contradice los principios de no mentir, no robar y no traicionar. En este contexto, ha sido vocal sobre la necesidad de una defensa genuina al género y la lucha contra la violencia de género, señalando que la simple presencia de mujeres en el poder no garantiza la defensa de estas causas.
Las percepciones, apoyos y críticas hacia Jorge Álvarez Máynez reflejan un panorama complejo, donde los desafíos políticos, la presencia en redes sociales y las interacciones con otros candidatos juegan roles fundamentales en la definición de su imagen pública. Su campaña resalta un enfoque dirigido hacia el futuro, con un énfasis particular en la juventud y los cambios que busca implementar en el país.
Redes sociales y tendencias digitales
El análisis de la presencia digital de Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano a la presidencia de México, revela una estrategia de campaña que navega a través de retos y oportunidades en el vasto mar de las redes sociales y las tendencias digitales. Aunque enfrenta la tarea de aumentar su visibilidad frente a contrincantes con mayor reconocimiento, Álvarez Máynez ha sabido utilizar las plataformas digitales para conectar con un electorado más joven y diverso.
Ha adoptado un enfoque directo y personal en redes sociales, intentando ser la voz de su generación, como él mismo ha señalado en entrevistas. Con un millón de seguidores en Facebook, se destaca su esfuerzo por generar un diálogo abierto con sus seguidores, aunque reconoce no tener la misma atracción que otros contendientes en el espectro digital. Esta honestidad y transparencia pueden jugar
a su favor, atrayendo a votantes jóvenes que valoran la autenticidad por encima de la popularidad.
Tendencias Digitales y Desafíos Futuros
Para Álvarez Máynez, el desafío será amplificar su mensaje en un espacio saturado de información y competir por la atención de los votantes en un entorno cada vez más fragmentado.
Su capacidad para conectar genuinamente con los electores y manejar efectivamente las críticas y ataques digitales determinará en gran medida su impacto en las tendencias digitales y su éxito en las urnas. Es decir, la presencia digital de Jorge Álvarez Máynez refleja un esfuerzo concertado por establecer una comunicación auténtica con los votantes, enfrentando desafíos significativos en el camino. Su estrategia digital, centrada en la autenticidad y la resiliencia, resuena con un segmento del electorado cansado del discurso político tradicional. Sin embargo, la eficacia de esta aproximación en un ambiente digital competitivo y en constante cambio, seguirá siendo un área clave de observación conforme se acercan las elecciones.
Fortalezas
1. Autenticidad y conexión directa: Álvarez Máynez ha priorizado una comunicación auténtica y directa, especialmente a través de las redes sociales, intentando ser la voz de su generación.
2. Resiliencia ante la adversidad: Frente a las acusaciones de guerra sucia y la desinformación, Álvarez Máynez ha mostrado una actitud resiliente, destacando su determinación para superar obstáculos y críticas.
3. Compromiso con valores y propuestas concretas: El candidato ha sido vocal en sus críticas hacia otros políticos y sus gestiones, sugiriendo un intento de posicionarse como una alternativa genuina comprometida con la solución de problemas reales del país, especialmente en temas de género y gestión gubernamental.
Desafíos
1. Visibilidad y reconocimiento: A pesar de sus esfuerzos, Álvarez Máynez enfrenta el desafío de aumentar su visibilidad y reconocimiento entre un electorado amplio, dada la dominancia de figuras con mayor reconocimiento en el escenario político.
2. Impacto en tendencias digitales y elecciones: Su estrategia digital, aunque enfocada en la autenticidad, debe superar barreras significativas en un ambiente digital competitivo para traducirse efectivamente en apoyo electoral.
3. Manejo de críticas y ataques digitales: La gestión de las críticas y los ataques, especialmente en el entorno digital, es un área crítica para Álvarez Máynez, dado el papel crucial que juegan las redes sociales en la formación de la opinión pública hoy en día.
4. Construcción de una agenda que resuene con el electorado amplio: Aunque ha hecho énfasis en representar a su generación y abogar por sus necesidades, la construcción de una agenda que resuene con un electorado más amplio y diverso se presenta como un desafío esencial para su campaña.
Conslusión general
Jorge Álvarez Máynez, enfrenta el desafío de aumentar su visibilidad e impacto en un escenario político dominado por figuras con mayor reconocimiento. Su estrategia se centra en una comunicación auténtica y directa, particularmente a través de las redes sociales, donde busca conectar con un electorado joven y diverso, a pesar de reconocer limitaciones en su atracción mediática.
Su reconocimiento entre el electorado y la percepción positiva de su figura pública siguen siendo bajos. La estrategia digital de Álvarez Máynez, centrada en la autenticidad y la conexión directa con los votantes, busca superar estas barreras, aunque su impacto final en las tendencias digitales y en las urnas está por verse.
Sobre patrimonio cultural y cuerpo social (I)
Manuel Parodi-Álvarez**Manuel Parodi es arqueólogo y Doctor en Historia. Analista y gestor de patrimonio cultural. Autor de 41 libros, 250 artículos científicos y más de un millar de artículos divulgativos sobre Historia y Patrimonio. Es Miembro de ICOMOS y académico electo de la Academia Andaluza de la Historia, académico correspondiente de la Escuela de Arqueología Italiana de Cartago (SAIC), historiador asociado de la Fundación de los 500 Años de la Villa Rica de la Veracruz A.C. y miembro del Comité Editorial de la Asociación Archivo de Indias Veracruz-Sevilla, formando parte de varias sociedades científicas y académicas. Imparte docencia en los másters de Patrimonio Histórico y de Turismo de la Universidad de Cádiz (España), así como en cursos especializados en diversas universidades dentro y fuera de España, habiendo participado en diferentes proyectos de investigación en España, México, Marruecos, Italia y Portugal. Asimismo es articulista en varias cabeceras y dirige la Revista Digital de Historia, Arqueología y Patrimonio “Gárgoris”.
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Volvemos a encontrarnos con uno de los temas que acaso más nos interesan y que de forma objetiva consideramos al mismo tiempo como de mayor interés a la hora de afrontar la gestión del patrimonio cultural y natural (incluyendo como es propio el patrimonio histórico, arqueológico, artístico, etnológico, inmaterial…), especialmente en ámbito local.
Nos referimos al binomio que conforman el cuerpo social de una comunidad y el patrimonio cultural y natural (en adelante PCN) de la misma, el contexto patrimonial en el que se desenvuelve dicho cuerpo social, y que ha sido modelado (especialmente el patrimonio cultural, pero también y en no menor medida el patrimonio natural, en cuyo contexto se desenvuelve dicha sociedad) por dicho cuerpo social.
Porque es indisociable la ecuación que una sociedad forma con su propio bagaje patrimonial, que forma parte de la identidad y el ser de dicho cuerpo social, de lo que se desprende que un compromiso esencial de toda sociedad que se quiera y se conciba a sí misma libre y crítica es el de cuidar de su propio patrimonio, ante el que dicha sociedad se encuentra obligada y al que debe dotar de instrumentos y mecanismos que procuren el desarrollo de los cuatro pilares básicos de la gestión (que es decir de la
El patrimonio cultural, y no solo el arqueológico o el monumental, es reflejo del pasado, de la historia, del legado histórico de una sociedad.
misma supervivencia) del patrimonio, esto es, la protección, la conservación, la investigación y la divulgación del mismo.
En este sentido, y especialmente en lo que se refiere a los contextos locales, es de señalar cómo las administraciones locales dentro del ámbito de sus competencias y responsabilidades han de velar por la preservación del patrimonio en sus términos municipales, una obligación que en el caso de España se vehicula a través del cumplimiento, por ejemplo, de la Ley de Bases de Régimen Local, la Ley 7/1985, de 2 de abril, reguladora de las bases del régimen local, cuyo texto en relación con las competencias de las administraciones locales (las administraciones municipales, esencialmente) en materia de patrimonio es sensiblemente escueto, y de la Ley 27/2013, de 27 de diciembre, de racionalización y sostenibilidad de la administración Local, que
viene a ampliar la citada normativa precedente de 1985.
Asimismo en el caso español es de considerar la aplicación (sin menoscabo de las competencias de las administraciones superiores, caso de la administración de cada comunidad autónoma sobre la que recae buena parte de las competencias en materia de PCN) de las diferentes Leyes de Patrimonio actualmente en vigor y que tienen aplicación en el territorio de la Comunidad Autónoma de Andalucía (acaso el marco que conozcamos mejor), al Sur de España, como es el caso de la Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del patrimonio histórico de Andalucía, de la Ley 8/2007, de 5 de octubre, de Museos y Colecciones Museográficas de Andalucía, o de la Ley 13/2011, de 23 de diciembre, del Turismo de Andalucía, sin perjuicio -además- de las normativas de carácter estatal españolas, caso de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del patrimo-
nio natural y de la biodiversidad, o de la Ley 16/1985, de 25 de junio, del patrimonio histórico español.
Partiendo siempre de la actuación en materia patrimonial desde el respecto y el cumplimiento de la Ley, señalaremos que tareas tales como la divulgación del conocimiento y los valores del patrimonio cultural y natural y la defensa de dichos valores son cuestiones fundamentales, irrenunciables, en la construcción y el fortalecimiento de una sociedad más libre y más crítica.
Cabe en este sentido apuntar que la socialización, la difusión, y la extensión del conocimiento es tanto un deber de las administraciones públicas como un derecho de los ciudadanos, al tiempo que una responsabilidad de estos últimos. En este sentido es de señalar que el conocimiento y los valores del PCN deben ser considerados como uno de los principales capitales de la ciudadanía, como uno de los principales capitales sociales a disposición del ciudadano.
Por ello la difusión y la socialización de los valores del patrimonio y del patrimonio (cultural y natural) como un elemento referencial en sí han de ser empeños básicos e irrenunciables tanto de las administraciones públicas como
de la propia ciudadanía, que no puede ni debe conformarse con el rol pasivo de elemento “administrado”, y debe asumir sus responsabilidades como verdadero motor del cuerpo social al que da forma, algo que se hace aún más inmediato y evidente -como es natural- en los contextos locales.
Es responsabilidad de las administraciones públicas el redoblar los esfuerzos en la divulgación de la historia del territorio de su competencia, así como en la defensa y la promoción del patrimonio de dicho territorio de su competencia con el ánimo esencial de la conservación de dicho patrimonio, así como desde la imprescindible e irrenunciable voluntad de la socialización del conocimiento, de la extensión entre la ciudadanía de los valores de este incalculable capital social que es el PCN, teniendo como referente fundamental y como elemento vertebrador de este esfuerzo el valor positivo del patrimonio (cultural y natural) como elemento identitario y de cohesión social, como fruto, reflejo y consecuencia de la interacción del territorio y las comunidades y horizontes culturales (en su caso) que lo han habitado en el tiempo.
Y todo ello atendiendo al patrimonio como manifestación de la unión entre una comunidad hu-
mana y el territorio que la misma ha venido habitando a lo largo de su historia, y como elemento imprescindible para que un cuerpo social pueda comprenderse a sí mismo como tal y entenderse en diálogo permanente consigo mismo así como con su entorno y su contexto, con el marco en el que históricamente se ha desarrollado como tal cuerpo social y, por ello, como realidad histórica e identitaria.
Por ello la acción de trabajo (considerada desde una perspectiva global, no simplemente como conjunto de pequeñas acciones puntuales, esporádicas) a desarrollar de manera sostenida (y sostenible) por las administraciones en torno al patrimonio debe necesaria y oportunamente partir de la base de la cooperación institucional y social.
Para ello puede articularse el desarrollo de contenidos de dicha línea de trabajo a través de acciones y programas (con especial atención, en lo que atañe a la ciudadanía, a los elementos de naturaleza divulgativa de cara a la socialización del conocimiento, todo apoyado por la imprescindible línea de acción en materia de conservación del patrimonio) de diversa naturaleza, unos programas algunos de los cuales pueden desarrollarse a lo largo de
todo el año mientras otros pueden centrar su ámbito de actuación en determinados momentos del año estando acaso vinculados a determinadas efemérides o a una posible estacionalidad acorde con las mismas características de dichos programas y acciones en cuestión, sin perjuicio de la convivencia de dichos programas y acciones con factores y segmentos como el educativo y el turismo.
Así pues, normativas legales y sociedad han de ir siempre de la mano en lo que atañe a la acción sobre el patrimonio cultural, siendo imprescindible que el cuerpo social asuma sus responsabilidades y sus derechos en esta materia, especialmente dado que el conjunto de los bienes patrimoniales de una sociedad forman parte del propio bagaje identitario de dicho cuerpo social: el patrimonio cultural, y no solo el arqueológico o el monumental, es reflejo del pasado, de la historia, del legado histórico de una sociedad, y por ello es parte de la misma esencia de dicha sociedad que lo ha generado a lo largo del tiempo.
Campañas electorales: Contexto Político Enrique Paz*
*Enrique Paz es politólogo y Maestro en Estudios Políticos y Sociales por la UNAM. Experto en asuntos legislativos, proceso electoral y partidos políticos. Consultor político y asesor en la Secretaría de Educación de la Ciudad de México. Fue coordinador de asesores del Grupo Parlamentario Nueva Alianza en la Cámara de Diputados en la LXII Legislatura. Consejero Electoral Distrital del entonces Instituto Federal Electoral (hoy INE) en los procesos electorales de 2000, 2003 y 2006. Participó como consultor político en campañas electorales de presidentes municipales y diputados federales. Ha sido profesor en los diplomados impartidos por el Instituto Ortega y Gasset en México en materia Educativa y Transparencia y Acceso a la Información.
@jepp_79
El camino a la Presidencia de la República lleva, al menos formalmente, un tercio del recorrido. Un mes en el que la ciudadanía ha escuchado las propuestas de las candidatas y el candidato que pretenden suceder a López Obrador en la silla presidencial.
Desde que iniciaron las campañas electorales hemos sido bombardeados día y noche con los spots publicitarios en el que cada una de las postulantes se presentan, ya sea como la mejor opción para continuar el proyecto de país que se instauró en el 2018 o bien, quien se considera tiene la capacidad de evitar el desastre nacional que representa el gobierno de AMLO. Mientras que una tercera opción, que se presenta a sí misma como la nueva política, pretende romper con la narrativa de que solo hay dos proyectos de país.
Como en todas las campañas presidenciales, los contendientes trazan sus promesas de campaña a partir de realidades contrapuestas. La parte oficial asume que el país avanza hacia niveles de desarrollo “nunca” antes vistos, con resultados que asume han beneficiados a grandes sectores de la población y, por
Los actores políticos seguirán tratando de influir en la percepción de los electores usando cualquier recurso de poder político.
ende, quieren la continuidad de dicho proyecto. En la oposición, la realidad que exponen es la de un país a un paso del “desastre” en todos los rubros, lo que pinta un país con un estancamiento económico, inseguro, violento y corrupto. Por ello, la necesidad de cambiar y detener la hecatombe nacional.
En cualquier democracia, la confrontación de estas realidades sirve para que los electores puedan contrastar la información a partir de lo que realmente viven todos los días. Si la gente tiene empleo, tiene niveles de bienestar social y confía en quien gobierna es muy probable que su voto sea por la continuidad. En caso contrario, su valoración podría ser cambiar de gobierno a partir de las opciones que más se acerquen a sus propios intereses y preferencias.
Este escenario pocas veces se presenta de manera clara debido a que hay factores que moldean la percepción de las personas. En el caso de las campañas que estamos viviendo, hay al menos tres factores que buscan influir en las preferencias de las personas y orientar su voto.
Uno de ellos es la clara e ilegal intervención del presidente López Obrador que usa todos los recursos de poder que conlleva la figura presidencial para un día sí y otro también favorecer la continuidad de su proyecto a través de la candidata oficial, Claudia Sheinbaum. Cabe recordar que el obradorismo nace como movimiento político precisamente del mito fundacional del supuesto fraude electoral de 2006.
Fue López Obrador como candidato en esas elecciones quien
fustigó el intervencionismo de Fox, primero por sacarlo de la contienda a través del desafuero de 2005 y luego en plena campaña a quien le endilgó aquella frase de “cállate chachala”. Ahora como presidente, Obrador se escuda en sus derechos políticos, su libertad de expresión y de réplica para influir en la contienda presidencial de manera ilegal al hacer uso de recursos públicos, como las conferencias matutinas en las que diariamente arremete contra la oposición y promueve a la candidata de su partido político.
La violencia que se vive en varias regiones del país es otro factor que va a influir en las preferencias electorales. Aunque los gobiernos morenistas tanto a nivel federal como local traten de minimizar los eventos violentos aduciendo que son ajustes entre los mismos grupos delincuenciales, lo cierto es que hay muchas dudas sobre el rol que van a jugar estos grupos en la contienda electoral.
septiembre de 2023, se han registrado 182 incidentes relacionados con la violencia política en la que han sido afectadas 238 víctimas entre funcionarios públicos, exfuncionarios, políticos o aspirantes a cargos de elección popular.
Así, entre la violencia que se genera por cuestiones delictivas y aquellas con una clara intención política, la incertidumbre y zozobra entre la población puede inhibir a los electores a salir a votar el próximo 2 de junio. O en el peor de los casos, tal como se ha documentado en las elecciones intermedias de 2021 en varias zonas del país como Sinaloa y Michoacán, estos grupos pueden ejercer presión violenta para favorecer a una opción política.
Por lo pronto, desde el inicio de este proceso electoral,
Otro factor que sin duda está buscando influir en la percepción de la ciudadanía es la publicación de los resultados de las encuestas, particularmente de aquellas que muestran una diferencia abismal entre el primero y segundo lugar. En la actualidad, las encuestas han
dejado de ser instrumentos de análisis de las campañas y se han convertido en piezas de propaganda electoral para las narrativas empleadas para influir en el electorado.
En este caso, se busca que la narrativa sea que, ante la amplia diferencia entre el primero y segundo lugar, los simpatizantes de quien ocupa la segunda posición se desmovilicen ante el inminente triunfo de quien encabeza las encuestas, o bien, cualquier resultado de la jornada electoral que difiera de lo anterior sea puesta en duda.
En un país donde la cultura del fraude y la sospecha reina en el imaginario colectivo, el uso propagandístico de las encuestas para sostener la narrativa de un triunfo anticipado contribuye a generar un clima de animadversión hacia la autoridad electoral y desconfianza hacia el proceso en general.
Es verdad que la sociedad mexicana hemos aprendido a votar a partir de informar -
nos y conocer la realidad en la que vivimos. La incipiente democracia ha contribuido a fortalecer nuestra cultura política y democrática, que nos ha permitido valorar nuestro voto y configurar nuestras preferencias a partir de nuestra percepción de la política, el gobierno y los partidos políticos.
Sin embargo, debemos reconocer que los actores políticos seguirán tratando de influir en la percepción de los electores usando cualquier recurso de poder político, económico o de fuerza para que prevalezcan sus intereses. Es tarea nuestra identificarlos y desactivar cualquier tipo de manipulación que pretenda torcer la voluntad popular.
es periodista y consultor de comunicación y asuntos públicos. Licenciado por la Universidad Complutense, especialista en Información Internacional y con un Máster de Política Mediática. Cuenta con un posgrado en Dirección de Campañas Electorales por la Universidad Pontificia Comillas. Por más de 15 años ha desarrollado su carrera en medios, instituciones y campañas electorales de España y México.
@AlbMendoza
El ‘ momentum ’ de Xóchitl
Alberto Mendoza*
¿Sobre qué trata una campaña presidencial? En México, hasta la fecha, no versa sobre la seguridad, pese a que la violencia ha continuado su terrible expansión por el país. No se centra en la marcha de la economía, pese a que se suele asumir como un factor determinante. Y tampoco sobre salud, pese a la reciente pandemia y las promesas incumplidas del gobierno. ¿Cuál será entonces el tema decisivo? Lo más probable es que en las actuales circunstancias no haya ninguno, a no ser que algún suceso imprevisto haga descarrilar el avance rutinario de la campaña. Un progreso atonal que solo beneficia a la candidata favorita.
Y es que la campaña de Xóchitl Gálvez no puede permitirse caer en la apatía. Si pretende que en mayo todavía exista incertidumbre sobre cuál será el resultado del 2 de junio, debe mover las encuestas ocho puntos a su favor durante el mes de abril, recortándoselos directamente a Claudia Sheinbaum. Ya no le basta con sumar a partir del desgaste de Movimiento Ciudadano. Si lo consigue, podrá plantearse un sprint final en busca del milagro. De lo contrario, incluso el grifo del financiamiento se cerrará definitivamente.
Lo cierto es que en las primeras semanas de campaña se ha sentido una escasa tensión competitiva, que se debe en parte a la distancia existente en los sondeos, y en parte también a que todas las candidaturas han apostado por unas estrategias muy previsibles. Esto no significa que sean campañas mal planteadas desde el punto de vista técnico, pero la falta de audacia penaliza a la coalición opositora mucho más que a la gobernante.
Un buen ejemplo de esta dinámica son los eslóganes elegidos. “Honestidad, resultados y amor al pueblo” es el escogido por el equipo de Sheinbaum. Una enumeración de tres conceptos que podrían haber sido también dos o cinco, si no fuera por el atractivo de las triadas. Como sustantivos, están suspendidos en el tiempo. Se supone que forman parte del bagaje político de la candidata y también que le guiarán en el futuro. Una fórmula que busca además diferenciarse de su rival, pero sin activar un programa narrativo, y que elige el personalismo frente a una dimensión colectiva.
“Por un México sin miedo” es el lema de la campaña de Gálvez, quien se atreve a incluir un término negativo como “miedo” en su
Mientras seamos capaces de imaginar otra realidad mejor, podremos afrontar el nuevo año con la disposición necesaria para perseguirla.
nube de palabras, aunque sea para combatirlo, y aun a riesgo de que pueda jugar una mala pasada en el inconsciente. En todo caso, se aprecia el intento de incluir una pequeña articulación narrativa: propone el tránsito de un país que vive con miedo a uno que se libera de ese temor.
Denota un contraste entre la situación actual, marcada por la inseguridad y la incertidumbre en múltiples aspectos de la vida cotidiana, y la situación deseada, caracterizada por la tranquilidad. Además, el “por” conlleva un intento de llamado a la acción colectiva, que se refuerza con la inclusión de “México”. Sin duda es diferente ofrecer un México sin miedo a un México seguro, y probablemente más factible.
En todo caso, más allá de claims y ejercicios publicitarios, Gálvez necesita que arrecie el viento del cambio, que está lejos de soplar con fuerza. La fatiga de los electores y el desgaste del gobierno no se han manifestado de manera suficiente para que Morena caiga por su propio peso. La popularidad de la alternancia, en forma de voto de castigo, ha recorrido el mundo en los últimos años, pero su furia parece haberse relajado en México. Ante el enfriamiento de esta pasión, el voto del cambio necesita otro medio de propulsión.
Por supuesto que el programa de gobierno es importante, al igual que los diagnósticos y las propuestas racionales para abordar los grandes desafíos de México. Pero no será así como cambien los resultados de las encuestas. Los electores que se sumen al cambio en este periodo electoral lo harán a través de una gestión de su senti-
miento de identidad política. Como señala Eric Landowski en Presencias del otro, “el cambio, esperado, deseado, asumido, se convierte paradójicamente en productor de identidad”. Es decir, los votantes atestiguan y se involucran en el devenir del cambio a la vez que viven su propia transformación. Reafirman su existencia y su presencia como sujeto político. Un proceso que suele darse, sin que resulte un demérito, como una moda: que la coalición gobernante pase de moda para que le suceda la temporada de un nuevo posible.
La candidata opositora también necesita que algo suceda, una explosión de nuevos significados que le otorgue la posibilidad de vivir su "momentum". No hay campaña retadora que pueda ganar sin ese casi indefinible impulso que se adquiere de repente. Un aumento en la popularidad, el apoyo y la percepción favorable generado por una serie de eventos, logros o tendencias que captan la atención del electorado y potencian un sentido de optimismo y confianza en su capacidad para ganar.
El "momentum" puede ser el resultado de diferentes situaciones, como victorias en debates televisados, un cambio súbito en las encuestas o un suceso viral. En definitiva, es un fenómeno crucial que puede influir en la percepción y en el comportamiento de los votantes. Los estrategas de Gálvez deberán encontrar la manera de provocarlo o la rutina acabará con sus esperanzas.
¿Y después del 2 de junio?
Eduardo Higuera*
*Eduardo Higuera es un profesional con 20 años de experiencia en el campo de la comunicación, colaborando en medios informativos, comunicación social institucional, producción de medios, posicionamiento y manejo de relaciones públicas.
@HigueraBCuando usted lea este artículo, estaremos más o menos a un mes del día de las elecciones, una jornada que promete ser definitoria de las décadas por venir.
Esto ha hecho que los grupos identificados con dos proyectos de país, los cuales voy a obviar en esta ocasión, se vuelquen en un esfuerzo casi sin precedentes por lograr movilizar el voto, ya sea con escenarios apocalípticos, ataques personales, descalificaciones a grupos o clases sociales completos, intervención ilegal de funcionarios e incluso amenazando realizar una elección de Estado con tal de mantener y acrecentar el poder que detentan.
Personas, medios, analistas, pseudoperiodistas y personajes de los social media, grupos políticos, así como amplios sectores de la sociedad civil nos hemos entregado con alegría preocupante a esta dinámica de agredir a quien no comparte nuestros puntos de vista y asegurar que tenemos la única y absoluta verdad, como si tal cosa fuera posible o deseable.
Es cierto, hay sectores que hacen esto más que los demás, pero todos, en algún momento o de tiempo completo, hemos llegado a ese punto. Quemamos nuestras naves, decidimos que la tierra arrasada políticamente y el fin del diálogo son las únicas vías pertinentes para vencer.
Casi nadie nos hemos preguntado, ¿qué va suceder después del 2 de junio?
La intolerancia y la persecución de las ideas que no convergen con mi visión de nación son un caldo de cultivo peligroso y difícil de neutralizar.
Estados totalitarios como la Alemania Nazi y la URSS de Stalin se fundaron en esa verdad “evidente e incuestionable” ante los designios del destino y sus elegidos. Intentos de golpe de Estado como el de Tejero, asaltos militares al
Casi nadie nos hemos preguntado, ¿qué va suceder después del 2 de junio?
poder exitosos como el de Pinochet y revoluciones armadas devenidas en dictaduras como las ocurridas en Nicaragua y Cuba se alimentaron de la noción de “ellos o nosotros”.
Incluso, aunque de forma menos violenta, esta forma de pensar, de dividir, a una nación en dos polos es lo que ha llevado a grandes países como Argentina a ser peronista o no y terminar la disputa con un loco en el poder que prefiere la motosierra al dialogo y el consenso que debe seguir a un disenso en los temas esenciales de la sociedad.
Ninguna de las personas que aspiran a ocupar la presidencia este año, sucediendo a AMLO, han hecho un verdadero esfuerzo discursivo y de campaña para crear una propuesta de reconciliación y unión nacional.
“Qué se larguen del país”, “los fusilaremos en el cerro de las campañas”, “no merecen ser mexicanos”, “antipatriotas” y muchos epítetos más son el pan nuestro de cada día, acercándonos cada vez más a un conflicto que sea irresoluble. Una especie de España de antes de la guerra civil.
Todas las personas merecen respeto por quiénes son, cómo piensan y/o por la forma en que creen que el país debe ser dirigido, sin embargo, nadie tiene derecho a amenazar,
difamar, agredir gratuitamente, ya sea que la otra posición les parezca aberrante o no.
Karl Popper decía que hay que ser intolerante solo con los intolerantes y me parece correcto. Una sociedad abierta se basa en la discusión, el debate, la lucha de ideas y la posibilidad del cambio de gobierno y de rumbo del país de forma civilizada y pacífica.
Los que niegan el derecho a los demás a expresarse o a existir políticamente, a cuestionar las acciones de quién este en el poder -sea quién sea- y siempre hable de bandos irreconciliables y nada más, no fomentan la democracia, más bien la socavan con fines autoritarios.
El debate real en esta campaña ha sido mínimo y no creo que mejore con el debate protocolario de inicios de abril entre las candidatas y el candidato a la presidencia, mucho menos espero que se tienda una mano que sirva de puente para que transiten las ideas favorables a los mexicanos.
El 2 de junio será un parteaguas y la decisión del tipo de país que deseamos no solo estará plasmada en las boletas sino en los discursos que se usen desde ese día en adelante. De nuevo, no soy optimista.
Cumplimiento normativo en el sector empresarial mexicano
Arlene Ramírez**Arlene Ramírez es licenciada en Relaciones Internacionales por el Tec de Monterrey Campus Estado de México, con Mención Honorífica (1998), Maestra en Diplomacia con especialidad en Terrorismo por la Universidad de Norwich (2010) donde también realizó estudios de Doctorado en Relaciones Internacionales.
@ArleneRUEl entorno empresarial contemporáneo está vinculado a un marco normativo complejo que involucra regulaciones locales, nacionales e internacionales. El incumplimiento de estas regulaciones compromete la reputación y sostenibilidad de una organización.
En México, a pesar de que según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), hay más de 4 millones de unidades económicas, de las cuales aproximadamente el 99.8% son micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) y que este segmento genera alrededor del 52% del Producto Interno Bruto (PIB) y proporciona empleo al 72% de la población económicamente activa; muchas de estas empresas operan en un marco de incertidumbre legal y falta de claridad normativa, lo cual las hace especialmente vulnerables a sanciones y multas.
Un plan de cumplimiento normativo se presenta como una solución integral que permite a las empresas operar dentro de los parámetros legales y éticos establecidos. Dicho plan implica un conjunto de políticas, procedimientos y acciones diseñadas para asegurar que la empresa y sus empleados se adhieran a las leyes y regulaciones aplicables. La ausencia de un sistema robusto de cumplimiento no solo incrementa el riesgo de sanciones legales, sino que también deteriora el capital social y la confianza del consumidor.
La implementación efectiva de un Plan de Cumplimiento Normativo inicia con un análisis exhaustivo de las operaciones de la empresa para identificar áreas de riesgo y oportunidades de mejora.
En este sentido, es fundamental afianzar el compromiso de la alta dirección para lograr el involucramiento de todas las áreas de la empresa y del personal. Esto debe ir acompañado de una comunicación clara y una cultura organizacional
La cultura de cumplimiento en una organización abarca también sus valores, creencias y comportamientos compartidos.
fortalecida a través de un sólido set de valores, la ética y la transparencia. Las mejores prácticas de cumplimiento normativo nos enseñan que establecer directrices claras, procedimientos operativos estándar y una objetiva asignación de responsabilidades sienta bases sólidas de un plan de cumplimiento. La consolidación de una cultura orientada al cumplimiento se da con la mediante programas de formación regular para empleados en todos los niveles para garantizar que están al tanto de las políticas y regulaciones.
En todo este proceso es fundamental contar con mecanismos de monitoreo y auditorías (internas y externas) periódicas para evaluar la eficacia del plan de cumplimiento, lo que redundará en una disminución de riesgos potenciales que puedan comprometer el crecimiento y la continuidad de negocio.
La dinámica de los ambientes de negocios globales y las oportunidades que trae para las empresas mexicanas la internacionalización y la diversificación de los mercados, requieren empresas con planes de cumplimiento dinámicos y que permitan su adaptación a las cambiantes leyes y circunstancias del negocio y del entorno internacional.
La implementación de un plan de cumplimiento normativo efectivo es imperativa para las empresas en México. Este plan no solo ayuda a mitigar riesgos legales, sino que también fomenta una cultura corporativa de ética y responsabilidad. En el sector empresarial mexicano la adaptabilidad y la vigilancia continua son la clave para un cumplimiento exitoso.
En la búsqueda de la excelencia organizacional y la creación de empresas resilientes y flexibles, el fortalecimiento de la cultura organizacional emerge como un pilar fundamental. La cultura de cumplimiento en una organización abarca también sus valores, creencias y comportamientos compartidos, actuando como un norte que guía a sus miembros hacia la consecución de objetivos comunes con una brújula ética bien calibrada.
La importancia del liderazgo en el compliance ha cobrado especial relevancia en las organizaciones. Hoy, en la transformación de los valores organizacionales en conductas precisas y congruentes es parte de la propuesta de valor, de la ventaja competitiva y quizás uno de los activos más importantes de las organizaciones.
Acceso a la información contra la corrupción
Ileana Hidalgo*
*Ileana Hidalgo es Licenciada, Maestra y Doctora en Derecho, con especialidad en Derechos Humanos por la Universidad Castilla la Mancha, en España y maestría en Argumentación Jurídica por las universidades de Alicante, España y Palermo Italia.
Es directora de Auditoría Interna en el INAI, dentro del IEDF, ha sido directora de Organizaciones de Representación Ciudadana y presidenta del Comité Derechos Humanos “Nuestros Amigos A.C.”
También ha sido investigadora en el Instituto de Investigaciones Legislativas del Senado de la República “Belisario Domínguez”.
Es conferencista a nivel nacional e internacional, y también docente en varias universidades del país. Actualmente es secretaria de Acceso a la Información del INAI.
@IleanaHidalgoR
Cuando hablamos de transparencia y acceso a la información es común llegar al pensamiento de que su pleno desarrollo recae en lo utópico, sin embargo, aunque México es modelo para otros países en materia de acceso a la información, aún hay mucho que trabajar para que el ideal de transparencia se cumpla. Uno de los objetivos de que exista el derecho de acceso a la información es evitar los actos de corrupción, y si bien podemos identificar un cambio, estos se siguen llevando a cabo.
De inicio, es esencial no perder de vista que la corrupción no emerge de forma espontánea ni es una característica arraigada en la naturaleza del hombre; esta nace por la combinación de una serie de factores que incitan a la persona a tomar una decisión individual corrompiendo sus valores sociales para la obtención de un provecho fuera de lo establecido en la norma y la moral. Del mismo modo, no podríamos decir que es un hecho aislado o generado de forma espontánea por una sola persona ni una característica histórica de la sociedad y sus estructuras, sino un fenómeno que, derivado de la conjunción de ciertas características, obliga al individuo a tomar una decisión por beneficios propios.
La corrupción ha estado presente desde décadas atrás conduciendo a la sociedad y Estado a efectos negativos con implicaciones directas al desarrollo económico, político y social de un Estado. Al ser una problemática multicausal tiene efectos en diversas esferas y libertades del individuo, lo que inevitablemente vulnera el bienestar de las comunidades, la violación de derechos humanos y la descomposición de las estructuras institucionales.
Ante ello, es primordial el desarrollo no solo de una conciencia sobre las afectaciones de la corrupción, ade -
La corrupción es un mal que aqueja no solo a México, sino al resto de países en el mundo.
más, de mecanismos que se orienten a prevenir, mitigar y castigar las conductas que se desvían de la legalidad de servidores públicos, instituciones y personas en general, como un paso hacia la construcción de un verdadero Estado de derecho.
Uno de los objetivos del derecho de acceso a la información es justamente evitar los actos de corrupción y si bien ha funcionado, pues ya no le es tan fácil a los funcionarios públicos mantener en secrecía todo lo que se llega a hacer con el recurso público, aún no es del todo transparente. Se requiere estrictamente de la participación de los ciudadanos para poder alcanzar estos objetivos.
En los Informes ejecutivos sobre corrupción que realiza el Comité Técnico Especializado de Información sobre Corrupción del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, uno de los rubros analizados es el de las denuncias recibidas por incumplimiento de las obligaciones del personal de la Administración Pública Estatal donde en su mayoría va en aumento. Esto quiere decir que los ciudadanos al hacer las solicitudes de información están indagando en las actividades del sector público, sin embargo, así como aumenta el número de estas, también aumenta el número de administrativos que se niegan a proporcionar
la información y es por esta razón que de sebe recurrir a una denuncia por incumplimiento.
Ahora bien, hay un rezago en el cumplimiento de las funciones de transparencia, pues cuando se detecta alguna inconsistencia en un proceso, cualquier ciudadano tiene derecho a conocerlo; pero ¿Y la información que no se solicita? Detectar actos de corrupción es un trabajo colaborativo y requiere principalmente de la participación de los ciudadanos, que se cuestione todo. De ahí la apremiante necesidad de visibilizar el fenómeno de corrupción como una consecuencia directa de la falta de desarrollo del Estado en todas sus capacidades.
Lo que queda claro es que la corrupción es un mal que aqueja no solo a México, sino al resto de países en el mundo. Sin embargo, el hecho de que nuestro país sea evaluado cada año entre los más corruptos nos coloca en una situación desfavorable, ya que gracias a estas valoraciones se mide el crecimiento donde la corrupción funciona como una especie de dominó que a su paso afecta diferentes aspectos.
La elección del poder (II) Selección Natural
Manuel Grapain**Manuel Grapain es director, guionista y fotógrafo cinematográfico, así como actor, egresado de la Escuela de Arte Teatral (INBA) como Lic. En Arte Dramático.
Maestro en Mercadotecnia por la Universidad de la Comunicación, donde también es profesor en la carrera de Cinematografía.
Forma parte de la Comisión de Evaluación del EFICINE PRODUCCIÓN que otorga el estímulo fiscal por la cláusula 189 de la Secretaría de Hacienda.
@mr_manugz
La camarera logra pescar un pulpo, lo prepara lo sazona, es una delicia percibir el crujido de su carne al fuego de la leña. En una situación como esta el más apto busca la solución y se sublima, el más vulnerable mira desde abajo y se envilece.
La camarera termina de preparar el pulpo, todos lo miran, babean, es el pulpo más delicioso jamás puesto frente a sí; quien lo parte lo reparte, la camarera decide en cuantas partes lo distribuirá entre el resto; en seguida esta camarera que en el barco recibía órdenes, ahora tiene el poder de pescar porque nadie más en el grupo sabe hacerlo, tiene el poder de repartir y de tomar lo que le plazca, porque es quien los alimenta a todos y ante sus ojos tienen ahora a la nueva jefa del grupo, la líder, la que preside.
Ahora la presidenta no solo maicea, también dispone de la labor comunal, generó grupos de trabajo, dispuso de las habilidades de cada uno de los sobrevivientes y repartió responsabilidades, el asunto no fue tan automático o natural, en algún momento el modelo se rebela, sin embargo, una sola pregunta lo para en seco ¿Cómo conseguirás comida? Un par de miradas acuerdan un encuentro.
La presidenta de esta micro-sociedad organiza a las mujeres del grupo incluyendo a la novia del modelo quien genera con ella una relación fraterna (dos mujeres hombro a hombro disponiendo el nuevo orden mundial), pero aquella mirada y aquel encuentro se comienza a repetir cada vez más; a la presidenta le gusta su semental y al modelo le gusta ser el favorito y el mejor alimentado. Ambos consideran que es necesario com-
No es lo mismo compartir el poder que tener el poder para compartir, la sociedad no es buena por naturaleza.
partir el poder a cambio del placer, pues el poder sin el placer que supone no tendría ningún sentido.
No es lo mismo compartir el poder que tener el poder para compartir, la sociedad no es buena por naturaleza, por que en la naturaleza no existe la paz, ni el bien ni el mal, para que esta prevalezca es necesario estar a la altura de las circunstancias, y en este grupo la de menor rango tuvo lo necesario para alcanzar el máximo nivel de respeto, pues fue la única que estuvo a la altura de las circunstancias. Había que comer.
Algunas noches alrededor del fuego sonidos extraños llegan hasta ahí, el miedo que sienten no es algo en específico, pero sí es el miedo más feroz que han sentido jamás, el que sentimos a lo desconocido, los paraliza, solo la presidente guarda la calma.
Es más placentero poder compartir, que compartir el poder, es más útil repartirlo que compartirlo, pasan por la mente de la presidenta todas estas reflexiones, mientras los brazos del modelo la aprietan casi hasta la asfixia justo antes de terminar
en clímax brutal; a la mañana siguiente algunos de los hombres del grupo se prestan valor unos a otros para acercarse temblorosos, pero decididos, a la presencia nocturna a plena luz del día, el millonario cibernético es el elegido para arriesgarlo todo en busca de la luz, una piedra al doble de su cabeza vuela y en un segundo una mula cae sin sentido, el ruido cesa, esta mula era la criatura misteriosa, y a partir de ese momento ese grupo conoció el final del túnel y todos cenaron burro asado.
La presidenta conoció también que su poder disminuía, hasta entonces ella manejaba los recursos, ahora el resto incluida la furiosa novia del modelo podrían obtener los suyos propios; cometió el error de compartir el conocimiento, el pueblo dejó atrás la ignorancia y entonces a la presidenta no le quedó más que agarrar una piedra al doble de su cabeza y tomar por la espalda la vida de su adversaria.
* Claudia Martínez , es Mtra. en Ciencias y Artes para el Diseño con especialidad en Teoría e Historias Críticas, también es mercadóloga y publicista, lo que la ha llevado a trabajar en las mejores agencias de publicidad en México como Lowe Lintas, BBDO México, J. Walter Thompson y Ogilvy México. Así mismo trabajó con 20th Century Fox, Columbia Pictures and Tri Star Films y United International Pictures. También ha desarrollado proyectos para Clío, HarperCollins Publishers y Houghton Mifflin Harcourt.
Estimado Lector...
Claudia Martínez*Me dirijo a usted no solo como ciudadano de esta gran nación que es México, sino también como alguien que comparte con usted las mismas preocupaciones, esperanzas y sueños para el futuro de nuestro país. Las elecciones venideras representan no solo un evento político, sino un momento crucial en nuestra historia, un punto de inflexión que determinará el rumbo de México en los años venideros. Es por ello que siento la imperiosa necesidad de reflexionar sobre la importancia del voto, ese acto que, aunque pueda parecer efímero en el momento, tiene el poder de moldear nuestro destino colectivo.
El acto de votar es, en esencia, el ejercicio más puro de la democracia. Es la herramienta que nos permite, como ciudadanos, tener voz en las decisiones que afectan nuestra vida diaria y nuestro bienestar. A través del voto, ejercemos nuestro derecho a elegir a aquellos que tomarán decisiones en nuestro nombre, confiándoles no solo la gestión de los recursos y las políticas públicas, sino también la representación de nuestros valores e intereses tanto en el ámbito nacional como en el internacional.
Es fácil caer en el cinismo y pensar que un solo voto no puede cambiar el curso de una elección, que nuestras voces se perderán en el mar de la política. Sin embargo, esta perspectiva ignora el poder colectivo del voto. Cada elección que se ha definido por un estrecho margen nos recuerda la importancia de cada voto individual. Cuando optamos por no participar, dejamos que sean otros quienes decidan por nosotros, quienes modelen el futuro de nuestra nación según sus propias visiones y conveniencias. En una democracia, la abstención no es una forma de protesta; es una forma de silencio, y el silencio, en el contexto de las elecciones, equivale a consentimiento.
Más allá de la elección de representantes, votar es un acto de afirmación de nuestra identidad como mexicanos y como parte de una comunidad. Es una declaración de nuestra fe
En una democracia, la abstención no es una forma de protesta; es una forma de silencio, y el silencio, en el contexto de las elecciones, equivale a consentimiento.
en el futuro, una muestra de nuestra voluntad de participar en la construcción de ese futuro. Cada periodo electoral nos brinda la oportunidad de evaluar el estado de nuestra nación, de reflexionar sobre los logros y desafíos de los últimos años, y de decidir colectivamente el camino a seguir.
Este proceso de evaluación y decisión no debe tomarse a la ligera. La importancia de informarse sobre las propuestas de los candidatos y los programas de los partidos políticos no puede subestimarse. En una era de información instantánea y a menudo abrumadora, la responsabilidad de buscar fuentes confiables y de cuestionar críticamente la información que recibimos es más crucial que nunca. Nuestro voto debe ser informado, reflexivo y consciente, basado no en el fervor momentáneo o en lealtades incondicionales, sino en una consideración cuidadosa de las opciones disponibles y sus implicaciones para el futuro.
Además, votar es rendir homenaje a las generaciones que lucharon por este derecho. Recordemos que la democracia en México ha sido forjada a través de sacrificios, luchas y la resiliencia de aquellos que vinieron antes que nosotros. El derecho al voto, que hoy podríamos dar por sentado, fue el resultado de esfuerzos incansables por parte de hombres y mujeres que
creyeron en la importancia de la participación ciudadana en la gobernanza. Al ejercer nuestro derecho al voto, honramos su legado y reafirmamos nuestro compromiso con los principios democráticos.
Votar es una inversión en el futuro, es nuestra manera de decir a las generaciones venideras que hicimos nuestra parte, que nos esforzamos por dejarles un país más justo, próspero y pacífico. Cuando votamos, estamos enseñando a nuestros hijos, amigos, vecinos, etc., la importancia de la participación cívica, inculcándoles el valor del compromiso con nuestra comunidad y nuestro país.
Lo invito a que en las próximas elecciones, haga uso de su derecho al voto. No permita que el desaliento o la apatía le impidan participar en este proceso democrático fundamental. Su voto es su voz, y nunca ha sido más importante que ahora. Juntos, con cada voto emitido, podemos escribir el próximo capítulo en la historia de México, un capítulo que refleje nuestras esperanzas más queridas para el país que amamos.
Con un profundo respeto por nuestra democracia y un inquebrantable optimismo en el futuro de México, lo invito a votar.