R EVISTA PR MERA AÑO: 1 Nº 11
LIMA, DOMINGO 6 DE ABRIL DE 2014
EDITOR: PACO MORENO
Por el derecho de amar
Proyecto de ley de la unión civil entre homosexuales gana respaldo frente a una especie de cruzada lanzada contra la propuesta por el cardenal Cipriani.
ADEMÁS
A mí nadie me toca
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Opinión Paco Moreno
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l caso Diez Canseco y el de García son diferentes. La imagen de Diez Canseco hablándole al pleno del Congreso en el que sabía que había una conspiración de distintos odios para sancionarlo y recordando en voz alta que había luchado toda su vida y asumido todos los riesgos posibles, porque era un hombre de principios y no un pesetero, no tiene comparación con García que pide
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Nunca será lo mismo
informes en su contra usando pretextos legales, justamente para evadir llegar al pleno a explicar lo que no pudo hacer en la Megacomisión, no es más que una casualidad de la vida. No es cierto que Diez Canseco quisiera evitar que lo investiguen, cuando lo que él exigía era decir su verdad. Todo lo contrario de García, que no quiere ser investigado ni decir ninguna verdad. Solo hubiera habido un paralelo entre ambos casos si el expresidente
a un juez que anule la citación para que se borre lo que había dicho en la Megacomisión y que ha encargado a los más caros abogados del mercado salvarlo de tener que ir al pleno a responder por cada uno de los delitos que se le imputan. Que el juez Velásquez sea el mismo para un Diez Canseco que después de sancionado va en defensa de su buen nombre a pedir un amparo de la Justicia, y para un García pidiendo anulación de citaciones y de
Citas citables
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CHISPA
hubiera ido a la Justicia después de una sanción que considerara que atropellaba sus derechos. Pero este no fue el caso. En fin, las diferencias están ahí donde otros ven similitudes para tratar de ayudar al líder aprista.
Los más comentados Julio Rosas
Así como nadie nace cristiano, ateo, musulmán, etc. nadie nace gay, bisexual, etc. Atracciones merecen libertades no Derechos Humanos ni especiales.
Sobre fallo antimega
“Yo creo que al margen de los detalles, esos hay que preguntárselos al Poder Judicial, todo funcionario público no debe tratar de escabullirse de una investigación, sino colaborar con ésta”. (Presidente Ollanta Humala).
Carlos Bruce ¿O sea los gay y lesbianas no tienen derechos humanos? Hay que ser imbécil.
Cualquier ciudadano “Una organización de la sociedad civil, puede ser la Procuraduría Anticorrupción, o cualquier ciudadano, puede dirigirse directamente al Parlamento, a la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, con una denuncia constitucional contra García que incluya los hallazgos de la Megacomisión”. (Julio Arbizu).
Alan García Humala, verdadero presidente de la Mega se desespera porque no pudo eliminarme. Que no se escabulla de sus cobros a los narcoaviones.
Yo no estoy en contra de que me investiguen, solo quiero que no encuentren la verdad
Sergio Tejada La historia de nuestro Perú no debe registrar un nuevo episodio de impunidad. La democracia se ve fuertemente mellada cuando hay intocables.
Unidos por la paz
“Miles de ciudadanos nos movilizamos por las diversas ciudades del país unidos por la frase ‘El Perú Unido Exige Paz y Seguridad Ciudadana’. Fue un día histórico en el que organizaciones de diversos sectores sociales y económicos se unieron para proponer al país ‘Un Pacto Nacional’ destinado a enfrentar a la violencia, delincuencia y seguridad ciudadana”. (Mario Huamán).
to que Diez Canseco lo quisiera evitar que o investiguen, cuand lo que él exigía era o d decir su verdad. To a, cí lo contrario de Gar que no quiere ser investigado ni decir ninguna verdad.
No es cier
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Ronald Gamarra En Lucanamarca, Sendero Luminoso asesinó, el 3 de abril, a 18 niños entre los 6 meses y los 10 años de edad. También a mujeres embarazadas.
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n el cuento de Franz Kafka, Ante la ley, vemos a un guardián que cuida la puerta de entrada a la Ley y vemos a un campesino que le solicita entrar. El guardián le dice que por ahora no puede ser. Ante la pregunta de si más tarde lo dejará entrar, el guardián responde que tal vez, “pero no por ahora”. La puerta de la Ley siempre está abierta, afirma el narrador, “como de costumbre”. Por eso, cuando el guardián se hace a un lado, el campesino aprovecha para espiar el interior. El guardián sonríe y le dice lo siguiente: “Si tu deseo es tan grande haz la prueba de entrar a pesar de mi prohibición. Pero recuerda que soy poderoso. Y sólo soy el último de los guardianes. Entre salón y salón también hay guardianes, cada uno más poderoso que el otro. Ya el tercer guardián es tan terrible que no puedo mirarlo siquiera”. Recuerdo este cuento kafkiano ahora que el cardenal Juan Luis Cipriani, en su programa radial Diálogos de la Fe, planteó la realización de un referéndum para decidir la aprobación de la unión civil de personas del mismo sexo y el aborto terapéutico, porque, según él, son temas que no deben resolver “veinte personas en un Congreso o cuatro grupos de unas ONG”. “Si hay temas que cambian profundamente la naturaleza de la familia, cambian profundamente la protección de la vida y, por tanto, trascienden, son más importantes que una simple discusión o que una propuesta legislativa”, afirmó el cardenal en un país laico. Convertido en el guardián de la Ley, sostuvo, además, que la unión civil busca “cambiar la naturaleza de una familia, porque afectan la relación de un hombre y una mujer, que es lo que constituye el matrimonio y la familia”. Estas afirmaciones no hacen sino confundir a la población, mezclando el debate de un derecho constitucional (el de regularizar la situación civil de dos personas del mismo sexo que se aman) con dogmas religiosos no tocados en el proyecto de ley que ha presentado el congresista Carlos Bruce. La unión civil no matri-
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Un cardenal como guardián de la ley LO QUE ES POLARIZAR A LA POBLACIÓN peruana, mezclando los derechos civiles con creencias religiosas, despertando la censura.
monial planteada quiere decir que dos integrantes de una pareja del mismo sexo pueden ser reconocidos ante la ley peruana como compañeros civiles. Esto les otorgaría (o reconocería) el derecho de poder realizar contratos económicos, o el de recibir una herencia; o, por ejemplo, si algún miembro de la pareja no pudiese tomar decisiones sobre su estado de salud, su compañero civil podría autorizar un tratamiento de emergencia. Los beneficios no son solo económicos, sino, también, relacionados a la dignidad de la persona. La propuesta de Cipriani, como ya lo han dicho los especialistas, no es constitucional, “no puede someterse a referéndum la supresión o
disminución de los derechos fundamentales de la persona”, dice Bruce. Lo que busca el cardenal, por tanto, es polarizar a la población peruana, mezclando los derechos civiles con creencias religiosas, despertando la censura, y juntando, en su propuesta, el
debate de la unión civil (que dentro de poco se votará en la Comisión de Justicia para luego pasar al Pleno del Congreso) con el tema del aborto terapéutico. Tiene razón el Movimiento Homosexual de Lima, al decir que el cardenal “está desesperado en su odio
Lo que dijo Cipriani ayer
“He escuchado un griterío para que la Iglesia no hable y eso es un error. Se intentó en tantas épocas silenciar la voz de la Iglesia. Ahora se dice usted no intervenga en los asuntos relativos a la vida y al comportamiento de los ciudadanos, no quiero que hable usted señor Cardenal”
contra los homosexuales”. El campesino, en el cuento de Kafka, no había previsto estas dificultades. “La ley debería ser siempre accesible para todos”, piensa y, al ver al guardián “con su abrigo de pieles, su nariz grande y aguileña, su barba negra de tártaro, rala y negra”, decide que le conviene más esperar. Entonces el guardián le da un cascabel y le permite sentarse al lado de la puerta. Allí pasa años el campesino, suplicándole en vano que lo deje entrar, observándolo tanto que se olvidó de los otros, pareciéndole ahora, aquel guardián, su único obstáculo para entrar a la Ley. Ya anciano maldice su suerte, y en su agonía hace señas al guardián para que se le acer-
que, porque quiere hacerle una pregunta que hasta ahora no ha formulado. El guardián se agacha y le oye decir: “Todos se esfuerzan por llegar a la Ley (…); ¿cómo es posible entonces que durante tantos años nadie más que yo pretendiera entrar? El guardián comprende que el hombre está por morir, y (…) le dice junto al oído con voz atronadora: Nadie podía pretenderlo porque esta entrada era solamente para ti. Ahora voy a cerrarla”. Y así acaba el cuento. Esta paradoja muestra cómo la ley nos puede excluir incluyéndonos y, a la vez, incluir excluyéndonos. Para Kafka la relación con la ley es aquello que nos incluye y nos excluye; nos excluye porque nunca hemos podido entrar, y nos incluye porque solo estaba destinada para nosotros. En el cuento, el guardián nunca quiso ponerse del lado del campesino, no tuvo curiosidad por saber cómo era interiormente. Para él, la ley es atemporal e inexorable (o como se diría en esta polémica del referéndum: “natural”); sin embargo, la ley es un producto histórico, sometida a constante evolución. Por eso, la iniciativa de Carlos Bruce ha sido recomendada por el Ministerio de Justicia y la Defensoría del Pueblo, señalando que dicha unión sí tiene fundamento constitucional. En el Congreso habrá que debatir, luego, si con la unión civil no matrimonial se crea un nuevo estado civil o si el proyecto da a los beneficiarios mayores derechos de los que tienen los concubinos, como señala el doctor Mario Castillo Freire. Pero en todo caso, este debate corresponde ya al interior de la Ley, habiendo traspasado la primera puerta kafkiana.
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Unión civil: cuestión EL PROYECTO DE LEY de la unión civil, presentado por Carlos Bruce despertó un debate hasta en los sectores más conservadores. En las próximas semanas este proyecto podría convertirse en una realidad. Gustavo Palomino M.
Todapersonatiene derecho a la vida, a su identidad, a su integridad moral, psíquica y física y a su libre desarrollo y bienestar (...) a la igualdad ante la ley. Nadie debe ser discriminado por motivo de origen, raza, sexo, idioma, religión, opinión, condición económica o de cualquiera otra índole”. Me pregunto cómo sería el Perú si se cumpliera al pie de la letra el artículo 2 de nuestra Carta Magna que acabo de citar. Tal vez hoy no escribiría sobre la unión civil entre ciudadanos del mismo sexo. Tal vez esto sería una realidad desde hace muchos años en nuestro país. Tal vez no escucharía a personas decir que los gay no merecen derechos. Tal vez los peruanos seríamos un poquito más tolerantes y menos desiguales. Tal vez. Cuando en setiembre del año pasado el congresista Carlos Bruce se atrevió a presentar el proyecto de ley denominado “Unión Civil no Matrimonial para personas del mismo sexo”, diversas personalidades, entre analistas, políticos, religiosos, periodistas, y ciudadanos de a pie empezaron a opinar y debatir sobre este tema que, para muchos, aún era tabú. Han pasado siete meses desde entonces y el debate no ha cesado, por el contrario, se ha agudizado con pronuncia-
mientos de los distintos gremios y movimientos que apoyan la unión civil y manifestaciones en contradeesteproyecto,comolas expresadas por el cardenal Juan Luis Cipriani y, recientemente, por la Conferencia Episcopal Peruana, así como algunos parlamentarios. EL PROYECTO Pero, ¿de qué se trata la unión civil homosexual? ¿Realmente este proyecto de ley distorsiona la “verdadera identidad” de la familia? Es ampliamente subjetivo y hasta repudiable el argumento que dos ciudadanos que deciden compartir sus vidas juntas, por ser del mismo sexo, no pueden ser considerados una familia porque los vínculos de ésta tienen que ver con la consanguinidad más que con la afectividad.
Muchos se preguntarán, ¿por qué es importante que a las parejas de homosexuales se les considere familias? Lamentablemente, en el ordenamiento legal vigente, los derechos de familia –donde están incluidos los derechos de herencia– están por encima de los contratos civiles. ¿Qué significa esto? Que si una de las dos personas fallece, la “familia” de éste puede reclamar todos los bienes del difunto y, si desea, dejar en la calle a la persona que lo acompañó durante toda su vida. Para evitar esto, el proyecto de Bruce contempla que las parejas homosexuales sean consideradas parientes de primer grado para convertirse así en herederos forzosos. Además, la unión civil les permitirá a las parejas del mismo sexo tener un seguro social común, tomar
Airada oposición del legislador Julio Rosas Mi posición es clara en defensa de la familia, que viene de la constitución de un matrimonio entre hombre y mujer. Naturalmente, este es un tema polémico que se ha prestado para adjetivar y calificar a quienes defendemos a la familia, que es la base de la sociedad y no puede ser denigrada. El hecho de que dos ciudadanos del mismo sexo quieran unirse, requiere libertades, pero no derechos especiales ni derechos humanos, que ya les corresponden por ser personas. Además, nadie nace gay, la ciencia ha demostrado
que no existe el gen gay, solo se nace hombre o mujer con el sexo que a uno le identifica. La orientación sexual, que es una atracción, requiere libertades y los homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales tienen el libre albedrío para decidir lo que consideren conveniente, pero ya tienen derechos que les corresponden por ser personas. Yo tengo un proyecto de ley de Atención Mutua, sobre derechos patrimoniales, bienes mancomunados y ganancias. (Congresista Julio Rosas).
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n de derechos
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esa comisión. En el marco de este debate, el martes pasado el colectivo “¡Unión Civil Ya!” le entregó al autor de la iniciativa legislativa un padrón con diez mil firmas de ciudadanos en respaldo a su proyecto, el mismo que fue trasladado al congresista Juan Carlos Eguren, titular de la Comisión de Justicia.
decisiones médicas de emergencia y manejar sus bienes como sociedades gananciales. RECONOCIMIENTO ParaGiovannyRomero,presidente del Movimiento Homosexual de Lima (MHOL), la aprobación de la unión civil en el Perú sería un reconocimiento a la condición de ciudadanos de las personas homosexuales. “La unión civil busca concretar la ciudadanía de las parejas homosexuales que en el Perú no tienen ningún derecho, pues no se ha dado ningún avance en este tema. Todos los intentos que ha habido han fracasado por la intromisión de los sectores más conservadores del país”, recalca. El activista es enfático al responderle a quienes señalan que una pareja homosexual no puede ser considerada
una familia. “La familia está formada por personas que se aman, se respetan y son solidarias entre sí. El único orden natural de la familia es el amor y pretender negar el derecho fundamental de protegerse entre sí es un acto macabro. Lo que busca la unión civil es que las personas puedan proteger legalmente a quienes aman”, sostiene Romero. DAN SU RESPALDO En las últimas semanas en las que el debate en torno a este temanohacesado,laDefensoría del Pueblo ha recomendado al Poder Ejecutivo y al Congreso de la República “adoptar políticas públicas dirigidas a superar el estado de vulnerabilidad de
los derechos fundamentales de este importante sector de la población”. El Ministerio de Justicia se ha mostrado también a favor de la aprobación del proyecto de unión civil entre personas del mismo sexo, el cual, señala, es “jurídicamente viable y representativo de la concreción de los derechos fundamentales al libre desarrollo de la personalidad, igualdad y no discriminación”. Amparada en estos pronunciamientos, la secretaría técnica de la Comisión de Justicia del Parlamento ha elaborado un predictamen que recomienda la aprobación de la iniciativa legislativa de Carlos Bruce, el cual será debatido en breve por
EN CONTRA El respaldo que ha ido ganando la unión civil ha despertado la preocupación en los sectores más conservadores y religiosos, que hace dos semanas organizaron su ya tradicional “Marcha por la Vida” con un amplio despliegue de recursos técnicos y económicos, en el cual aprovecharon para manifestar su rechazo a la unión civil. Al enterarse de que este proyecto sería debatido en las próximas semanas en la Comisión de Justicia del Congreso, el cardenal Juan Luis Cipriani planteó en su programa radial que se convoque a un referéndum para que los mismos ciudadanos decidan si están de acuerdo o no con la iniciativa legislativa. “No es un tema que puedan definirlo 20 personas en un Congreso o cuatro grupos de unas ONG, son temas que cambian profundamente la naturaleza de la familia, trascienden y son más importantes que una simple discusión o que una propuesta legislativa (…) si hay un deseo de entrar a esos temas, que se vaya a un referéndum y se consulte a la población”, refirió. De inmediato, la propuesta del arzobispo de Lima desató una polémica sobre si era constitucional o no convocar a un plebiscito para este tema. El último jueves, mediante un comunicado, la Conferencia Episcopal Peruana consideró que la unión civil es antinatural y distorsiona la identidad de la familia. Los obispos, además, exhortaron a los congresistas “a de-
Bruce cree que la ley será aprobada Mi proyecto de unión civil para personas del mismo sexo le permite a las parejas que desean vivir juntas porque se quieren, el manejo de sus bienes como sociedades gananciales. Asimismo, la pareja se convierte en un heredero forzoso porque en este proyecto se le considera pariente de primer grado. Además, esta ley le permitiría a estas parejas tener un seguro social común, derecho de visitas al hospital y a decidir sobre procedimientos quirúrgicos en caso de que la pareja no pueda. Y, por supuesto, el derecho de poder enterrar a la pareja con toda dignidad el día que eso sea necesario. Todos estos son derechos fundamentales que están acorde a la dignidad de todo ser humano para dos personas que se quieren. La ley que he propuesto tiene un costo-beneficio muy alto porque no le genera mayor gasto al Estado y beneficia a más de 2 millones de peruanos. Y, para implementarla, solo basta con abrir un registro donde las personas inscriban sus uniones civiles.
fender los inalienables valores de la familia, como lo pide la Constitución y el sentir de la mayoría de los peruanos”. OPTIMISMO Pese a estos pronunciamientos y a la resistencia conservadora a entender el verdadero sentido del proyecto de la unión civil, los distintos movimientos y colectivos que respaldan esta iniciativa confían en que ésta será aprobada por el Congreso. “La unión civil no propone ningún derecho especial, son derechos que tienen que ser reconocidos. Si el Congreso decide de acuerdo a las leyes,
sin ninguna duda este proyecto va a ser aprobado”, sostiene Giovanny Romero. Bruce, por otro lado, destaca los avances que ha tenido el debate de su propuesta y se muestra optimista ante la eventual aprobación de la misma. “Sin duda, cada día que pasa veo más posibilidades de que el proyecto sea aprobado. Desde que lo presenté el año pasado hasta hoy, el proyecto ha avanzado mucho y cada vez son más congresistas de distintas bancadas que me dicen que ya entendieron el sentido del proyecto. Confío que se aprobará”, apuntó.
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Un triunfo del cinismo El juez Velásquez Zavaleta salvó a García de una manera jamás antes vista.
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na caricatura del gran Carlín muestra el desfile de los citados por el Congreso en diversas investigaciones entre ellos Toledo (Ecoteva), Castañeda (Comunicore) y otros, y entre ellos a García al que un amable juez lo está retirando de la cola porque a él no se le puede citar como a otros. Es lo que decía en otra nota bajo el título “El hombre que no podía ser citado” y que el caricaturista resume con la genialidad que todos le reconocen.
Y es verdad. García y sus amigos se están vanagloriando de haber “vencido”, porque un juez increíble ha inventado la argucia de que para que haya “debido proceso” los investigadores deben citar al presunto culpable con indicación de sobre qué van finalmente a acusarlo y con las pruebas que sustentarán la acusación. Algo que jamás se le pide a un fiscal y a un juez instructor, que sobre la base de elementos que permiten discernir que existe un probable delito y una posible implicación de personas en su ejecución, cita a cada una de ellas para que hagan su declaración. No se conoce casos en que un juez constitucional se interponga entre un fiscal y las
personas investigadas para exigir que se les cite de tal o cual manera, menos que el fiscal los cite con la acusación ya armada, antes de que el investigado haga sus descargos. Tampoco hay antecedente alguno de que a un juez que está por decidir si
abre o no un proceso le hagan algo como eso. Y, finalmente, tampoco ninguna comisión investigadora parlamentaria, que ha habido muchas, ha sido invadida en sus esfuerzos por reunir elementos para sus informes
El Poder Judicial ha hecho prevalecer la justicia Terminaré mi vida política cuando el pueblo lo disponga y mi conciencia lo mande, no cuando lo ordene quien esté en Palacio. El Poder Judicial ha hecho prevalecer la justicia ante la arbitrariedad política, declarando nulos el informe y sus consecuencias”, dijo Alan García el lunes, el día que apareció el fallo.
finales. Y, mucho menos, que un juez cualquiera se irrogue todos los hechos, porque al citado no le gustó lo que él mismo dijo frente a los comisionados. Por tanto la “victoria” de García es la del abuso y de la confabulación. Basta leer las resoluciones del juez Velásquez Zavaleta sobre Alan García, para tener claro que están absolutamente parcializadas y su punto de partida es que los investigadores quieren perjudicar al quejoso que acude donde él y no estudiar lo que realmente pasó con los actos de gobierno del período 2006-11. En esa perspectiva no solo cuestiona a la Megacomisión por citar supuestamente mal
a García, sino que al hacerlo sugiere que para qué se le cita si no se sabe de qué se le va a acusar, lo que lleva la crítica hasta el pleno del Congreso que creó la comisión Tejada. TREMENDO JUEZ En algunas partes de su resolución, Velásquez suelta incluso la idea de que el hecho de que la Megacomisión volviese a citar a García de acuerdo a su propio mandato, intentando seguir al pie de la letra sus indicaciones sobre el mayor detalle acerca de los temas en investigación y el acceso de los abogados a los documentos que sustentan las pruebas, sería una maniobra de su presidente para volver a violar el “debido proceso”, con lo que casi queda la conclusión de que con García el debido proceso consiste en que no se le puede investigar ni citar, y que si él asiste a declarar no
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Claro que cuando se dio cuenta de lo que
había dicho se asustó, abandonó a su colaborador a su suerte y se refugió en negarse a explicar los puntos picantes del caso: ¿por qué se centraron las gracias en personas vinculadas al narcotráfico?, ¿por qué el expresidente no sólo no rechazó las recomendaciones que recibía de sus subordinados, sino que al margen de los informes que tenía en sus manos, hizo correcciones para aumentar los años conmutados y lograr liberaciones inmediatas de jefes narcos?
importa las barbaridades que diga porque siempre habrá un Velásquez Zavaleta para anular sus palabras. Y todo esto ha ocurrido a los ojos de la población peruana que ya había visto antes a García escapando con una prescripción de responder por los delitos de corrupción de su primer gobierno, y ahora aparece burlándose de todo el mundo y asegurando que nadie lo sacará de la política, que es donde hizo las fechorías que lo convirtieron en un hombre muy rico, y que nunca tendrá que responder por narcoindultos, BTR, decretos de urgencia y otros delitos. Puede efectivamente que se trate de un triunfo del cinismo y un alarde de poder, pero lo que queda en la conciencia de los peruanos, si alguna duda podía tener, es que no se estaba jugando la inhabilitación, porque si de eso fuera el ego colosal iría al Congreso a defenderse a los
ojos de todo el mundo. Se trata de ocultar faenones que no se pueden explicar en público. Eso ya se vio en la Megacomisión donde todas las veces García se fue de boca ¿Qué hubiera pasado si eso hubiera ocurrido en una reunión del pleno con todas las cámaras de televisión sobre el expresidente? COMISIONES INVESTIGADORAS Cuando se iba a formar la Megacomisión, el APRA y el fujimorismo vetaron como cosa de vida o muerte a Javier Diez Canseco para que no fuera el encargado de presidirla. Pesaba claramente el temor a que el parlamentario izquierdista repitiera el impecable trabajo que hizo en el año 2003, para esclarecer los delitos económicos, políticos y sociales de la década de los ‘90 y pusiese sobre la mesa los mecanismos que usan los corruptos para evitar ser descubiertos. Cuando el oficialismo retrocedió, surgió el nombre de Sergio Tejada que por su juventud e inexperiencia parecía mucho menos temible. Precisamente el menospreciar a su investigador le costó a García hacer una presentación deplorable el 3 de abril, cuando dijo que los nombres de los indultados y conmutados los consultó con Dios, o que Facundo Chingel era un aprista de los antiguos que no se interesaban en el dinero y por eso ponía la mano al fuego por sus actos. Facundo está preso, porque la fiscalía estima que operó una red de corrupción para la compra-venta de gracias presidenciales, que aparentemente proveían de fondos al Partido Aprista, a diferencia de otros focos de desvío de recursos que iban en beneficio de la cúpula de poder. Por ahí es que vendría entonces la idea de “probidad” que sostuvo García.
Tejada no cumplió y el juez así lo ha dejado establecido “Esta resolución (del Quinto Juzgado Constitucional) que
tengo en la mano es solamente la etapa final de lo que el juez resolvió el 22 de octubre de 2013 mediante la cual, en actuación inmediata de la sentencia, ordenó que la citación que le cursaron para el 30 no era válida, tenía que adecuarla. Sin embargo, el congresista Tejada no cumplió y el juez así lo ha dejado establecido”, indicó el abogado del expresidente Alan García, Wilber Medina.
Un golpe judicial contra el Parlamento “El Poder Judicial está siendo adverso y ha dado un golpe judicial contra el Parlamento, cercenando nuestra capacidad de fiscalización que tiene sus propios procedimientos y que están establecidos en su reglamento, que tiene rango de ley. De manera que caer en el juego del Poder Judicial no nos lleva a nada. Si constituimos una nueva comisión encontrará algún argumento para querer tumbarla también. Y no podemos caer en ese juego”, dijo el presidente de la Megacomisión, Sergio Tejada.
PREGUNTAS Claro que cuando se dio cuenta de lo que había dicho se asustó, abandonó a su colaborador a su suerte y se refugió en negarse a explicar los puntos picantes del caso: ¿por qué se centraron las gracias en personas vinculadas al narcotráfico?, ¿por qué el expresidente no sólo no rechazó las recomendaciones que recibía de sus subordinados, sino que al margen de los informes que tenía en sus manos, hizo correcciones para aumentar los años conmutados y lograr liberaciones inmediatas de jefes narcos?, ¿por qué se extendieron las gracias a reos que estaban en semilibertad, es decir que ni siquiera ocupaban
algún espacio en la cárcel que quisiera dejarse libre?, etc. Lo amargo para García fue enterarse en los hechos que el joven Tejada, nieto y bisnieto de apristas, era más sólido y consecuente de lo que pensaba, y que mientras García hacía desplantes y gestos de autosuficiencia, Tejada se mantenía sereno sin moverse de su objetivo de reunir la mayor información posible antes de hacer una acusación en regla. En otras palabras, fue Tejada el que ganó la lucha sicológica de la investigación. Y el viejo lobo de García el que repitió los papelones y los gestos fuera de caja que lo hicieron desmoronarse en
las encuestas. Si Toledo no hubiera sido capaz de aparecer con un caso, menos grave, pero suficientemente chirriante como para que su credibilidad se vaya a cerca de cero, y si el gobierno no hubiera patinado en explicar el caso de la vigilancia a López Meneses, lo que se tendría es a un García mucho más arrinconado que lo que está ahora. Pero como casi todo el sistema político está manchado, los investigados han llegado a creer que su supervivencia ya no depende de que puedan descargarse de las acusaciones que los agobian, sino de las maniobras que se hacen para no terminar presos. Pocas veces se ha podido decir que el destino de los políticos de un país haya podido quedar reducido a solo dos opciones: o se le condena por corrupto o se le reelige para la presidencia. Este, obviamente, es un síntoma de una grave enfermedad del sistema. La “victoria” que el juez Velásquez le ha regalado a su protegido García, lleva a su punto más bajo la confiabilidad de la sociedad hacia sus instituciones. Después de esto se puede robar, matar o cualquier otro crimen desde el poder, y si se tiene jueces
amigos se puede evitar las investigaciones con el simple expediente de decir usted no me ha citado como a mí me parece, como si en alguna parte estuviera escrito cómo los parlamentarios deben dirigirse a los expresidentes.
La “victoria” que
el juez Velásquez le ha regalado a su protegido García, lleva a su punto más bajo la confiabilidad de la sociedad hacia sus instituciones. Después de esto se puede robar, matar o cualquier otro crimen desde el poder, y si se tiene jueces amigos se puede evitar las investigaciones con el simple expediente de decir usted no me ha citado como a mí me parece, como si en alguna parte estuviera escrito cómo los parlamentarios deben dirigirse a los expresidentes.
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OTRAS DISQUISICIONES
Antes
Víctor Hurtado Oviedo
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ngel Agustín María Carlos Fausto Mariano Alfonso Rojas Canela del Sagrado Corazón de Jesús Lara y Aguirre del Pino fue una miniatura de tamaño natural. El bolero –que es grande– no se encarnó en él solo por falta de espacio, pero el bolero era él como Mahoma es el islam. Su cuerpo de ramas secas fue un trazo de pincel chino humedecido en barro indígena, en el cieno perfumado y ocre del que se hicieron las vasijas antiguas del golfo de Yucatán: talle de estrechez de asombro, como un cuchillo de frente. Admira que de aquella magrura haya emergido tanta pasión inacabada, tanta hambre de posguerra que consumió hasta el mínimo instante. En el fondo de esa potencia para sobrevivir al frenesí, estuvo el desborde loco del amor, capaz de alimentar los más extremados desmanes, los escándalos, los llantos y los arrepentimientos. La suya fue una cara sucesiva, de reencarnaciones incontables. Antes de mirarlo por primera vez, uno sabía que ya había visto el rostro de Agustín Lara en alguna piedra rota, en un pájaro mínimo o en la arena calcinada por el sol del Caribe. Un tajo célebre de rival furioso había ofendido a esa cara. Los labios finos de este dandi jarocho –entrenados para el beso– jamás olvidaron el cigarrillo, trampolín en llamas del que nunca se decidió a saltar el punto suicida de la brasa. Ejerció la galantería como un sacerdocio, y no sabemos si –al final– también como una farsa pues toda sinceridad puesta ante un público, termina un poco en impostura. Su numen feraz de padre pródigo engendró madres de cabellera blanca, novias imposibles y mujeres malas. Así, fue uno de los últimos platónicos, no porque le bastase el amor casto –lejos de él la tentación de la pureza–, sino porque nos donó un museo de eternos arquetipos: la madredolorosa llorada por el hijo perdulario, la prometida de blanco inmortal, la dama impracticable, la chica burlada por el hombre cruel, y la efe cíclica de la mujer fatal, falsa, falaz, fatídica, fingida y funesta.
de
mirarlo por primera vez, uno sabía que ya había visto el rostro de Agustín Lara en alguna piedra rota, en un pájaro mínimo o en la arena calcinada por el sol del Caribe. Un tajo célebre de rival furioso había ofendido a esa cara.
Dandi jarocho »
AGUSTÍN LARA fue un platónico que no cayó en la tentación de la pureza Lara no inventó el bolero, pues este honor secreto tiene otro dueño: Pepe Sánchez, cubano, sastre y mulato, quien compuso Tristezas, primer rey
de la dinastía gloriosa. Sin embargo, Agustín Lara creó de otra manera ese ritmo perdurable: lo convocó a crecer, le dio alas del tamaño del mundo y lo lanzó a volar a través de las generaciones, que son territorios de tiempo. El genio jarocho marcó también al bolero, «para bien o para mal» –cual se excusan los centristas–, con las improntas del
cariño interesado (amor de bolsillo), la traición, el desengaño, la malquerencia, la falsía, el dolor y otros agotadores sentimientos. Toda esta mitología inconsolable ha convencido a gente de mucha fe de que sólo quien sufre como vendedor de enciclopedias tiene derecho a sentir un bolero; pero esto es solo la convención de las lágrimas. En realidad, uno pue-
CADA CUAL TIENE SUS BOLEROS como se tiene a sí mismo, y nadie es intercambiable (excepto los candidatos, que siempre son las mismas caras nuevas).
de vivir a la luz de esa música y ser, aunque no lo quiera, indiscretamente feliz. Agustín Lara cuelga de las horcas sedosas de las academias pues muchas de sus letras veneran lo cursi; algo hay de razón en ello. Ponemos un disco de Agustín Lara, y, tras una ronda de huesos sobre el piano, su voz de pésame entra conversando en la canción y dinamita la retórica: «El mundo se me abre a mis pies como si mis pecados hubieran deshecho la tierra, y, dentro de mi sublime inconsciencia, se pudiera sentir, sacando el corazón por la ventana de la vida, un rocío bienhechor que fecundara el último retoño de mi fantasía». ¡«Sacar el corazón por la ventana de la vida»!, ¡«fecundar el último retoño de la fantasía»! Por gruesas, estas líneas no hubiesen pasado la aduana de Rubén Darío; pero todo creador gigante es un huracán que trae vientos nuevos junto con hojas muertas, y en el propio Rubén hay tales hojas como para alfombrar un otoño. Agustín Lara es Rubén Darío tocado en una pianola, y Rubén Darío es un indígena portentoso que camina sobre el verso con pies griegos. En fin, es cosa de ellos: Rubén Darío, Agustín Lara: que entre los genios se entiendan. Cada cual tiene sus boleros como se tiene a sí mismo, y nadie es intercambiable (excepto los candidatos, que siempre son las mismas caras nuevas). La música amada no es solo una ondulación que se desdobla en el aire: es también un tiempo pasado; es una escena, un encuentro que viene otra vez. Es toda una época que insiste en buscarnos y quizá sea el tiempo viejo de la juventud. El bolero es un dulce felino de siete vidas que muere y mata de amor y deja a todos sobrevivientes.