De Cultores Noviembre de 2013 - Nº 56
Saber el vino
Sumario • Tapas y corchos para conservar el vino
Corchos naturales de alcornoque, sintéticos y tapas a rosca son las maneras posibles con las que se tapa y conserva un vino. Todos tienen sus pros y sus contras, pero ¿cuál es el indicado para cada ejemplar?
• Un hotel diferente a todo lo conocido
Les Cols Pavellons, en Girona, España, es uno de los hoteles más sofisticados y admirados del mundo por su diseño. Además de su decoración única, paredes y techos de cristal permiten que los turistas puedan tener un contacto íntimo con la naturaleza y el imponente paisaje volcánico.
• Variedad de olivos
Tal como sucede con el vino, el aceite de oliva puede elaborarse con distintas variedades de aceitunas que, con sus aromas y sabores únicos, permiten disfrutarlos en un amplio abanico de preparaciones gastronómicas.
• Olivier Falchi: con acento francés
El cocinero francés que comanda el prestigioso restaurante Le Sud tiene una larga experiencia en la Argentina. Es amante del asado y asegura que, si bien extraña algunos sabores de su tierra, los vinos argentinos no tienen nada que envidiarles a los franceses.
Publicación coleccionable editada por Bodega Luigi Bosca - Familia Arizu
Edición impresa
Con la impronta de la tierra La interacción del clima, el suelo, la situación geográfica, la variedad de la uva y la mano del hombre tiene una incidencia fundamental en el carácter de tintos y blancos. Pero ¿qué son, realmente, los llamados “vinos de terroir”? Beber con moderación. Prohibida su venta a menores de 18 años
Saber el vino
Editorial
Novedades
La importancia del terroir
Cabernet - Malbec, un nuevo blend de alta gama de Bodega Luigi Bosca Siguiendo la tendencia de creciente consumo de vinos genéricos, Luigi Bosca presenta una nueva etiqueta: el Luigi Bosca Cabernet Malbec 2011. Se trata de un tinto de gran carácter y personalidad, que mezcla partes iguales de Cabernet Sauvignon de la Finca El Paraíso y Malbec proveniente de Finca La Linda. Luego de elaborado, el vino se cría durante 12 meses en barricas de roble, lo que da como resultado un ejemplar con notas especiadas, afrutadas y algo florales, y un paladar intenso, redondo y amable, con una estructura sólida, sostenida por taninos sedosos. Tiene además un volumen de boca envolvente y un final elegante y persistente. Este flamante Luigi Bosca Cabernet Malbec 2011 expresa la experiencia de la familia Arizu en hacer grandes blends de terruño.
Todas y cada una de las personas que formamos parte de la gran familia Luigi Bosca tenemos bien en claro que la tierra donde crecen nuestros viñedos es la que finalmente define el carácter y la identidad de los vinos que elaboramos en la bodega. Eso es, justamente, lo que buscamos demostrarles a los consumidores que nos eligen día a día a través de estos nuevos ejemplares que hoy presentamos en el mercado: la importancia del terroir. Pero ¿qué es el terruño?, ¿por qué es trascendental en la personalidad de los tintos y blancos? El terruño es un espacio limitado donde la interacción de las condiciones físicas y químicas del suelo, la situación geográfica y el clima permiten obtener uvas particulares, distintas de las que nacen en cualquier otra zona. Este concepto involucra elementos muy diversos; desde la altitud, los desniveles y las pendientes hasta el drenaje de agua, la cantidad de horas de luz solar y la orientación de las plantas: todo contribuye a crear la identidad de un terroir determinado. Esto explica claramente por qué al plantar una misma variedad en diferentes regiones se obtienen vinos tan diferentes en aromas, sabores y estructura; por la marcada influencia de su lugar de origen. La mayor parte de los factores que inciden en el terruño son naturales, como la edad geológica del suelo, por lo que el hombre prácticamente no puede influir sobre ellos. Sin embargo, hay otras cuestiones en las que el trabajo humano es fundamental, como el manejo hídrico por medio del riego o la composición química del suelo. Por eso, al fin y al cabo, la mano del hombre también termina integrando este concepto tan asombroso como complejo que es el terroir. Nuestro terruño y sus viñedos se caracterizan por una armonía entre la fruta y el follaje, y un crecimiento logrado gracias a un suelo y un clima superlativos, que se sostuvo a lo largo del tiempo hasta alcanzar una personalidad diferencial para cada una de las cepas que cosechamos. En Luigi Bosca somos conscientes de que cada factor natural y humano que incide sobre nuestros vinos tiene su porqué, su clave, su idioma. Y ahí parece estar el secreto: cada variedad tiene un lugar que la acogerá de la mejor manera; eso es lo que, como hacedores de vinos, debemos identificar. Esa es nuestra misión al servicio de la tierra que tanto nos da: respetarla, cuidarla y entenderla para obtener vinos con un carácter inolvidable, un atributo tan importante como la calidad.
Más espumantes de Finca La Linda, y con imagen renovada Todos buscamos novedades y ansiamos innovación. Por eso, Finca La Linda ha dado un gran paso en la composición, presentación y diseño de su línea de espumantes. Desde ahora, al tradicional Extra Brut se le suman un muy interesante Brut Nature de idéntica composición (50% Chardonnay y 50% Semillón) y un rosado elaborado con uvas Malbec. Los primeros dos son espumantes blancos de gran elegancia y frescura, burbujas finas y aromas a frutas blancas sutiles. El rosado tiene cuerpo medio y es ideal para disfrutar junto a comidas de mayor estructura. Esta nueva propuesta agrega valor y significado a la marca; ilumina, excita, actualiza, dignifica, seduce, persuade y hasta divierte. Además, amplía la percepción y magnifica la experiencia de la marca. En suma, el nuevo diseño de estos excelentes espumantes es el gran catalizador de las emociones que una persona experimenta cuando interactúa con La Linda.
Alberto Arizu (h)
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Consumo El vino en casa
Tapando el vino de la mejor manera Corchos y tapas son claves para garantizar la duración, calidad e inviolabilidad del vino. Naturales, sintéticos o a rosca, ¿cuál es el mejor? Conozca ventajas y desventajas de cada uno.
Corcho natural: Es un extracto elástico e impermeable con gran capacidad para comprimirse, ciento por ciento natural y reciclable. Se fabrica con la corteza del alcornoque desde hace siglos. Su longitud puede variar, al igual que su porosidad. Su estructura celular permite una permeabilidad gradual al oxígeno, de forma tal que el vino pueda evolucionar en la botella. Su imagen está bien vista por los consumidores, que la asocian a vinos de calidad. Son los que garantizan una correcta evolución de los vinos de guarda. Los diferentes grados de porosidad pueden facilitar la entrada de oxígeno que provoca una oxidación no deseada del vino. Al ser de materia orgánica, los corchos pueden producir la aparición de TCA. Requiere de un elemento adicional (sacacorchos) para ser extraído.
Corcho sintético: Su composición química no es del tipo natural, sino que se usan diversos plásticos de la familia de las poliamidas. Hay de varios colores y fue inventado por los estadounidenses a mediados de los noventa.
El material inorgánico no permite el crecimiento microbiológico ni la formación de TCA. Es inocuo en aromas y sabores. Resulta más limpio, no se quiebra y no genera polvo al ser extraído. Las botellas pueden estar en posición vertical, ya que no necesita estar en contacto con el vino para poder expandirse. Por su mayor consistencia y uniformidad, permite menor entrada de oxígeno, con lo cual es apto solo para vinos que no necesiten evolucionar en botella.
Tapa a rosca (screw cap): Está construida de aluminio y en su interior tiene tres hilos de rosca, que ensamblan con los del cuello del envase, y una lámina circular de plástico (a menudo PVDC), corcho, caucho u otro material similar, que se emplea para sellar herméticamente la boca de la botella. Otorga un cierre hermético que permite conservar los aromas, sabores y frescura. Por estar fabricada con materiales inertes, es inmune a problemas como hongos y contaminaciones con TCA. Permite guardar las botellas en posición vertical y volver a taparlas fácilmente. No se necesita un sacacorchos para extraerla. Poca aceptación por parte de algunos consumidores, que asocian su imagen con la de un producto de bajo precio y calidad. Al no permitir que entre oxígeno, puede producir malos aromas, entre ellos los de sulfatación (olor a azufre).
CÓMO SE FABRICA UN CORCHO:
1. Se realiza una selección de las mejores partes de la corteza del alcornoque y se hierven en agua para que adquieran flexibilidad.
2. Luego se mantienen en reposo para que adquieran una forma plana (planchas) y se dividen por espesor y calidad.
3. Con procesos automáticos o semiautomáticos se extraen los corchos de la plancha.
4. Una vez que adquieren su forma cilíndrica, se lavan y luego se secan hasta hacer descender su humedad al 6%.
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5. Se los separa según su nivel de porosidad y en el laboratorio se analizan la humedad final, el diámetro y la resistencia.
6. Se imprime una imagen en cada uno de ellos y después se someten a un tratamiento para lograr su aspecto final.
Saber el vino
Vinos de terruño viene de pág. 1
En pocas palabras Un vino de terruño… ·Expresa su lugar de origen. ·Tiene el carácter de la zona en la que nace. ·Es genuino e irrepetible. ·Tiene el valor agregado de su unicidad. ·Tiene trascendencia a lo largo del tiempo. y un trabajo humano particular crea, con el correr del tiempo, un entorno productivo donde crece una fruta específica para elaborar un vino único. Esta es una de las grandes maravillas de la más noble de las bebidas: el lugar donde nace y la mano del hombre otorgan tintos y blancos irrepetibles. La intervención del hombre en la finca es clave para aportar una identidad definida en los vinos que allí nacen
Los aficionados al mundo del vino están familiarizados con palabras como viñedo, barrica y cepajes, entre muchas otras que, con el tiempo, pasan a formar parte del vocabulario de los consumidores. Sin embargo, hay un concepto en particular que cada vez cobra más importancia en la actualidad vitivinícola argentina: el terruño. Fue, justamente, el país que históricamente llevó la delantera en producción, consumo y venta de vino, Francia, el que tomó del latín la palabra terratorium y dio nacimiento al terroir, que en español se traduce como ‘terruño’. Si bien podría entenderse que la palabra hace referencia meramente a un sitio determinado; el terruño se refiere a un territorio en particular, pero lo excede por mucho. Es, más bien, la construcción que a lo largo de los años una zona y su gente logran hacer de ese lugar. Esto quiere decir que una finca recién plantada y trabajada correctamente a nivel agronómico no basta para conformar un terruño; debe haber una regularidad a lo largo de los años que haga de esa zona algo reconocible. Porque, si hay algo que tiene una incidencia trascendental en el carácter de una etiqueta, eso es la interacción del clima, el suelo, la situación geográfica, la variedad de uva y la intervención del viticultor; cinco ele-
mentos fundamentales que conforman este concepto medular para entender un vino. Históricamente ligado a la personalidad de los vinos, el terruño es la base de la identidad de tintos y blancos, algo tan importante como la calidad. El hecho de que las mismas variedades vinificadas siguiendo idénticas técnicas den como resultado vinos distintos entre sí en diferentes zonas geográficas solo se puede explicar mediante la influencia de su tierra. Una parcela determinada de la finca con un perfil de suelo, un microclima
La expresión de la unicidad
Gran parte de la identidad de los llamados “vinos de terroir” está en la uva. Luego, en la bodega, hay muchos manejos que guiarán el destino del producto final, pero la génesis del vino ya está dentro de esa cuasi esfera de piel delicada y pulpa carnosa que, por obra de la naturaleza y con la ayuda del hombre, se transformará en vino. Un vino de terroir es, entonces, la suma de las condiciones naturales de crecimiento de la vid y un hombre que maneja esa viña y hace vinos con su fruto. Pero no existe un solo clima, ni una sola topografía, ni un solo
Suelo, clima, topografía, cepa y un saber hacer histórico dan como resultado vinos únicos e irrepetibles
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De Cultores | Noviembre de 2013
Los vinos de terroir de Luigi Bosca Luigi Bosca Riesling. Las Compuertas 2013 El carácter y la personalidad de un vino representan el terroir y la mano del hombre que han influido en esa creación. Este Riesling nacido en Finca Los Nobles, en Las Compuertas (subapelación de IG Luján de Cuyo), expresa la experiencia de la familia Arizu desde 1970, pionera elaborando esta cepa en Mendoza, y busca expresar todas las características del suelo y el clima de esta zona tan especial. De un brillante color amarillo con tintes verdosos muy sutiles, sus aromas son singulares; evocan al tilo y tiene ciertos recuerdos florales (retama), a cáscara de limón y a rosa mosqueta, que se combinan con una sutil nota mineral. Luigi Bosca Grand Pinot Noir. La Consulta 2012 Este Pinot Noir de La Consulta (subapelación de IG San Carlos), corazón del Valle de Uco, muestra lo mejor de la variedad con una gran tipicidad y elegancia. Tiene muy buen color, con ciertos tintes violáceos muy atractivos a la vista. Sus aromas denotan una excelente tipicidad: se perciben frutas rojas de baya chica y notas a clavo de olor y algo de mermelada. En el paladar entra con buena intensidad; es fresco, con la madera integrada y perceptible de manera muy sutil. Tiene un paso por boca compacto, taninos finos presentes y una muy agradable textura fluida. Su final es equilibrado, con sabor sutil a frutas frescas.
suelo, ni un solo manejo de viñedos, ni una sola cepa, ni una sola manera de hacer vinos; existe un número indeterminado. Los vinos de terruño son producto de un estudio del entorno de cada parcela específica en la que se encuentran plantados los viñedos. Y ahí parece estar la clave: cada cepa tiene un lugar acotado que la acogerá de alguna manera u otra, y eso es lo que los enólogos buscan identificar y descifrar concentrándose en pequeños paños homogéneos. Todas estas regularidades naturales y humanas, mantenidas a lo largo de los años, dan un estilo de vino particular con un cierto tipo de identidad. El vino de terruño tiene que ver con un entorno determinado y con un saber hacer producto de la experiencia de años, que da como resultado ciertos aromas y sabores que atraviesan los vinos de una zona, que le otorgan unicidad e identidad al vino de un lugar. Un tinto o blanco que refleja su terruño es un vino que habla de su zona, de sus características y de su gente, de la manera única e irrepetible que tienen los hacedores de un sitio determinado para elaborarlo. Hay momentos en que un vino parece decir a quienes lo disfrutan: “yo soy de acá, y de ningún otro lugar”; eso es, definitivamente, un vino de terruño.
Luigi Bosca Malbec. Terroir Los Miradores 2011 Un Malbec que expresa todas las características del terroir de Finca Los Miradores, situado en Villa Seca (subapelación de IG Tunuyán), Valle de Uco. Este tinto es de un color violeta intenso, con aromas afrutados que recuerdan a moras y frutas negras. Además, tiene una elegante nota floral y cierto perfil especiado, muy típico de los vinos elaborados con uvas del Valle de Uco. En el paladar es intenso, con gran volumen y fuerza frutal. Sus taninos dulces y sedosos se conjugan con su carácter sobrio y redondo que llena la boca. Muy buena textura sin astringencias y acidez equilibrada que aporta frescor en el paladar. Final largo, profundo y elegante.
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Lifestyle
Romántico y natural: un hotel diferente Olot, un municipio español de la provincia de Girona, sorprende a los turistas con un alojamiento muy especial cuyas habitaciones con paredes de cristal permiten el contacto directo con la naturaleza y sus asombrosos paisajes: Les Cols Pavellons.
Tanto para los amantes de la naturaleza como para aquellos que disfrutan de los destinos románticos, hay un hotel que lo tiene todo; lujo, privacidad y un diseño increíble en un entorno soñado: Les Cols Pavellons. Situado en el municipio de Olot, en Cataluña, a solo una hora en auto desde la ciudad de Girona y a 150 kilómetros de Barcelona, este alojamiento es, sin dudas, distinto a todos. Próximo a la reserva natural volcánica de la Garrotxa, Les Cols Pavellons está rodeado de campo y cuenta con cinco pabellones (pavellons) con paredes de cristal inmersos en pequeños jardines cercados por la vegetación, que invitan a los huéspedes a disfrutar de una experiencia inolvidable: la intimidad en pleno contacto con la naturaleza. Creados especialmente para disfrutar del paisaje volcánico, las estrellas y los cambios del cielo y la luz; un sistema domótico permite a los
visitantes cubrir o descubrir los cristales a través de un cuadro de mando. Por la filosofía zen del lugar, no solo se destaca la ausencia de televisión en los pabellones, sino que prácticamente tampoco hay mobiliario, a excepción de una cama de estilo japonés (tipo tarima). Otro de sus atributos es que, por la noche, es posible dormir literalmente bajo las estrellas gracias al techo corredizo que se encuentra sobre las camas. El toilette también es una obra maestra de diseño moderno, con una minipiscina que en verdad es una especie de onsen japonés con capacidad para cuatro personas y un fondo hecho de pequeñas piedras volcánicas. Como el hotel está situado, justamente, en tierras volcánicas, este detalle está presente en todo el establecimiento. Si bien el desayuno se sirve en los pabellones, como parte de esta experiencia intimista,
En Les Cols Pavellons, tanto paredes como techo son de cristal, lo que permite un contacto íntimo con el exterior
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junto a ellos se encuentra una antigua masía catalana reformada que combina cristal y acero, y alberga un restaurante galardonado con dos estrellas Michelin: Les Cols. La carta se basa en platos modernos a partir de ingredientes y productos autóctonos de pequeños proveedores que cultivan, cuidan o elaboran sus propios productos como verduras, frutas y animales de granja. Es recomendable dejarse sorprender por su extensa selección de quesos artesanales, que se pueden combinar con mermeladas caseras para la sobremesa, y la carta de vinos nacionales e internacionales con un exclusivo apartado de sofisticados cavas y champagnes. Les Cols Pavellons (www.lescolspavellons. com) es una experiencia única para todos los sentidos, principalmente si se lo visita durante un viaje romántico. El costo de una noche en este alojamiento, que fue ganador en 2013 del Certificado de Excelencia del portal Trip Advisor, ronda los 500 euros por pareja, con cena degustación y desayuno en la cama incluidos.
De Cultores | Noviembre de 2013
Gastronomía
Aceites de oliva para todos los gustos Si bien existen en el mundo más de 2000 variedades de aceitunas, en nuestro país los aceites se hacen con unas pocas que dan la mejor calidad y que abren un abanico de aromas y sabores amplio para distintas situaciones de consumo y una gran diversidad de platos.
delicado, fluido y aromático; levemente amargo y picante. Al ser un cultivo que se adapta bien a distintas zonas, puede presentar diferentes características distintivas del terruño. La Arbequina realza el sabor de pescados blancos, pollos, ensaladas a base de endivia y lechuga mantecosa, y escabeches. También se usa para preparar postres.
Empeltre
Es una variedad de doble propósito, y el aceite que produce es muy frutado al inicio de la cosecha, aunque con el tiempo se vuelve dulce, transparente y de sabor agradable. Su carácter puede percibirse en el Essencia Luigi Bosca Fruttato Medio; su aroma recuerda a las frutas silvestres y se caracteriza por su marcado sabor a almendras y manzana verde, con buen equilibrio amargo-picante. Realza el sabor de pescados no muy grasosos, como el bacalao, ensaladas de hojas verdes y postres con naranjas. Cada variedad de aceituna da aceites de características únicas, que pueden ser utilizados para distintos platos
Al igual que sucede con los vinos, dentro del mundo del olivo y su aceite se pueden encontrar muchas variedades. Existen en el mundo más de 2000 cepas distintas que se diferencian entre sí por sus características: pueden ser variedades aceiteras, que se utilizan exclusivamente para elaborar aceite, o variedades de doble propósito, que sirven tanto para elaborar aceitunas en conserva como para aceite. En la Argentina crecen varias, aunque para los aceites de calidad se utiliza apenas una decena. Históricamente, la composición de los aceites de oliva era de mezclas de distintas variedades, aunque con el tiempo se fue dando una varietalización de los productos, lo que les dio mayor individualidad. Las principales variedades plantadas en la Argentina son:
Arauco
Es la única variedad originara de la Argentina y aporta su carácter a los tres aceites de oliva Essencia Luigi Bosca. Produce aceitunas grandes, de forma ovalada y alargadas. Los aceites elaborados a partir de Arauco son amargos y picantes, muy frutados y con aromas vegetales y minerales muy característicos. Se suele utilizar en cortes con variedades más suaves, como Manzanilla o Arbequina, y como varietal se usa para acompañar carnes y pescados asados a la parrilla, quesos fuertes, verduras, como rúcula, radicheta, radicchio, espinaca, y salsas.
Arbequina
Esta variedad española es la base del Essencia Luigi Bosca Fruttato Suave. El aceite que con ella se elabora es frutado, suave,
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Frantoio
Es una variedad italiana que se adaptó a numerosos terruños en el mundo. Es el cepaje preponderante en el Essencia Luigi Bosca Fruttato Medio y Fruttato Intenso. Sus aceitunas son medianas y ricas en polifenoles. A partir de ellas se elabora el prototipo del aceite italiano: muy afrutado y de larga duración. El Frantoio es compañero para panes, pizzas, pastas, risottos, pescados y quesos suaves.
Manzanilla
Es una variedad española de doble propósito. En la línea Essencia Luigi Bosca aporta su carácter especial en el Fruttato Intenso. Su fruto es pequeño y esférico, da un aceite de color verde, con aromas vegetales, buen cuerpo, amargor y picante marcado. Vale la pena probarlo con pescados a la parrilla, sopas sabrosas y verduras grilladas.
De Cultores | Noviembre de 2013
Saber el vino
Perfiles
Olivier Falchi: con acento francés El chef a cargo de la cocina del prestigioso restaurante Le Sud, en el corazón de Recoleta, es un amante de la gastronomía y el carácter argentinos. Pero además, es un gran admirador de los vinos mendocinos, a tal punto que asegura que las etiquetas locales no tienen nada que envidiarles a las francesas. ¿Cómo llegaste a trabajar a Buenos Aires? En mi carrera cociné en muchas ciudades, en restaurantes con estrellas Michelin y en Relais Châteaux. Trabajando en la Polinesia, un anuncio publicado en L’Hôtellerie me llamó la atención: Jean-Paul Bondoux, del restaurante La Bourgogne, Relais Châteaux en Buenos Aires, buscaba un chef de partie. Y así fue como llegué a mi queridísima Argentina.
Olivier Falchi nació en Pierrelatte, Drôme, una pequeña ciudad del sudoeste francés. Allí estudió; luego trabajó en varios países y, en el año 2004, el grupo Accor le ofreció el puesto de chef ejecutivo en el restaurante Rëd Resto & Lounge, del flamante Hotel Madero by Sofitel. Ese fue su primer gran desafío laboral y allí dio rienda suelta a su imaginación plasmando una cocina moderna, con toques tradicionales franceses y gran refinamiento. En 2008 tuvo una oferta que significó su retorno a Francia: ser el chef ejecutivo en el Sofitel Arc de Triomphe, en el corazón de París, y en 2009 volvió al Río de la Plata con un nuevo proyecto: el prestigioso restaurante Le Sud, en el Hotel Sofitel Arroyo. Pero la Argentina no solo le dio trabajo: aquí conoció también a quien hoy es su esposa, María Fernanda (“… ella tuvo una influencia muy positiva en mi carrera”), y juntos tuvieron una hija, Agustina.
¿Qué es lo que más te gusta de la comida argentina y sus platos típicos? Me gusta mucho la carne argentina, la combinación que hacen en sus platos y la gran variedad. Me encanta la ceremonia familiar que se crea los domingos cuando se prepara un asado, la picada, la provoleta de entrada, la carne, las achuras. Las charlas que se generan alrededor de esta hermosa reunión. ¿Qué opinás de los vinos argentinos? ¿Extrañás los vinos franceses? Uno extraña ciertos sabores de la tierra natal, pero los vinos argentinos no tienen nada que envidiarles a los franceses. Hoy en día existen variedades para todos los paladares y eso es importante porque, de esta manera, uno puede brindar a los comensales un sabor diferente para acompañar cada comida. ¿Cuál es el mejor maridaje entre cocina francesa y vinos argentinos? Siempre va a depender de qué plato queremos preparar. Por ejemplo, si vamos a cocinar cassoulet, un guiso consistente y suculento, necesitamos un vino tinto similar y el Malbec sería una combinación perfecta. Si, en cambio, queremos preparar un rico Paris Brest, el maridaje por excelencia sería un Pinot Noir.
Hace poco tuviste la posibilidad de cocinar con los vinos de Luigi Bosca en la Patagonia, ¿qué te parecieron? Fue como una caricia para mi paladar; son vinos distinguidos que hacen que cada plato que uno prepara se convierta en único. ¿Qué vinos de Luigi Bosca son los que más te gustaron? Los varietales de Luigi Bosca, especialmente el Malbec, el Pinot Noir y el Merlot.
Le Sud, un sitio especial Olivier Falchi es miembro de la Academia Culinaria de Francia y del Instituto Les Toques Blanches. Tanto en el restaurante Le Sud como en el Café Arroyo ofrece en sus platos una fusión perfecta con recetas de la cocina francesa tradicional y una delicada selección de los mejores productos estacionales locales. La experiencia gastronómica incluye platos clásicos, como la sopa de cebolla, el dúo de langostinos y la terrina de foie gras, y principales como la merluza negra, la costilla de ternera grillada con papas bouchon o bien el cordero patagónico braseado.
De Cultores Nº 56 - Noviembre de 2013 Director: Emma Castello| Editor responsable y propietario: Leoncio Arizu S.A. - Alicia Moreau de Justo 740 Of 7/8, Dock 5 - (C1107AAP) Buenos Aires, Argentina - (54-11) 4331-2206 e-mail: luigibosca@luigibosca.com.ar | Impreso en Galt Printing | Ayolas 494 - Ciudad de Buenos Aires | Registro de la Propiedad Intelectual Nº 5013799. Permitida su reproducción total y/o parcial mencionando la fuente. Ejemplar de distribución gratuita.
Beber con moderación. Prohibida su venta a menores de 18 años
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