Revista TRAIL n.92 by Revista Trail

EDITA No Limit, S.L. José Roca Suárez Llanos, 45 1º 1ª 08329 Teià Barcelona Tel. 93 540 36 86 revistatrail.com trail@revistatrail.com

PORTADA

DIRECTOR Néstor Bohigas

Fotografía: Quim Farrero

Darlo todo en un kilómetro vertical.

JULIO I 2020

REDACCIÓN redaccion@revistatrail.com DIRECTOR DE FOTOGRAFÍA Quim Farrero quim@revistatrail.com DISEÑO ORIGINAL 3A Disseny Gràfic DIRECTOR DE PUBLICIDAD Néstor Bohigas publicidad@revistatrail.com PUBLICIDAD publicidadl@revistatrail.com SUSCRIPCIONES suscripciones@revistatrail.com

SUMARIO

MAQUETACIÓN Teresa Sabater ADMINISTRACIÓN administracion@revistatrail.com HAN COLABORADO EN ESTE NÚMERO Andreu Calvó, Eliseu T. Climent, Quim Farrero, Kilian Jornet FOTOGRAFÍA Quim Farrero

12 7

Prohibida la reproducción total o parcial de esta revista sin autorización previa por escrito de la empresa editora. TRAIL no comparte necesariamente las opiniones expresadas por sus colaboradores.

OFFICIAL MEDIA PARTNER

52 GALERÍA

EDITORIAL

DEBERÍAMOS HABER ESTADO EN...

OPINIÓN KILIAN JORNET

EN PORTADA KILÓMETRO VERTICAL

ENTREVISTA LAIA DÍEZ

TEST TOPO RUNVENTURE 3

60 ESCAPARATE 62

MITOS Y LEYENDAS

38 TERRITORIO

REFUGIO VENTOSA i CALVELL

revistatrail.com

facebook.com/revistatrail

instagram.com/revistatrail

REPORTAJE

A pesar de las apariencias, se puede acceder corriendo (Montardo 2.833 mts). FotografĂa: Quim Farrero

CRONOmetraJE DE carreraS

Informaciรณn: crono@nlmt.com - T. 93 540 36 86

EDITORIAL

MONTAÑA Es la esencia del trail: el entorno, la montaña. Sin montaña no hay trail. No se trata sólo de que en el suelo no haya asfalto, se trata de que el entorno acompañe, de que el paisaje complemente la sensación del contacto con la tierra, las piedras, las ramas y raíces. La montaña es diversa, hay muchos tipos de terreno que entran claramente dentro de ese concepto. De ahí uno de los puntos fuertes del trail, la diversidad de entornos. Pero hay una montaña inequívoca, “La Montaña” con mayúsculas, eso que se conoce como alta montaña y cuya definición puede variar en función del entorno: lo que aquí es alta montaña, en otro lado puede no serlo, pero es aquel espacio que exige un compromiso y unos conocimientos más allá de la forma física y técnica. Y, en cierto modo, de esto va este número, de montaña. Por un lado, damos un repaso al concepto de kilómetro vertical, probablemente la modalidad más montañera de todas las opciones del trail. La cima es el objetivo, más allá del viaje. Ascender, desde el fondo del valle, a esa punta aislada que nos observa impasible día tras día, sin que nada de lo que hacemos le importe y que, de tiempo en tiempo, nos permite acceder a su reino. Por otro lado, os ofrecemos una pequeña muestra de las posibilidades del trail de alta montaña en una de esas zonas privilegiadas del Pirineo, una de tantas -la oferta, afortunadamente, es muy extensaEn este caso, si la montaña es la esencia del trail, entramos en el territorio del posgrado, la llamada “alta montaña”, esa zona que, para los amantes de lo cuantificable se sitúa, en nuestro territorio, por encima de los 2.000 metros, pero que más allá de los números, tiene otras implicaciones en cuanto a compromiso y a la necesidad de conocimiento del terreno. Y hemos elegido para ello un territorio particularmente técnico, para no dar lugar a equívocos; la alta montaña es un terreno que hay que tomarse en serio y con una buena dosis de humildad, por mucho que hayamos entrenado y por muy en forma que nos creamos. Es la montaña quien nos da permiso para estar ahí. No lo olvidéis nunca.

El próximo número de Revista TRAIL, el 93, saldrá en septiembre. Estad a tentos a nuestra web (www.revistatrail.com) para la actualidad del verano.

REPORTAJE

Queda poco mĂĄs por dar, en pocos kms ha quedado todo por el camino. FotografĂa: Quim Farrero

ASÍ SOY YO

CONDICIONES KILIAN JORNET

En el deporte de competición no hay igualdad. Ya podemos sacarnosesa idea de la cabeza. Si, por ejemplo, hubiera querido ser jugador de baloncesto, aunque me hubiera entregado con toda la pasión del mundo, me hubiera esforzado en cuerpo y alma y me hubiera dejado la piel, no habría llegado muy lejos, la verdad. En las pruebas de acceso al centro de tecnificación ya demostré tener las cualidades necesarias para labrarme un futuro en el deporte de resistencia en la montaña. Pese a ocupar la parte baja del grupo en cuanto a fuerza y explosividad, cuando nos poníamos a correr pendiente arriba, me sentía muy a gusto y era capaz de acompañar a los mayores. Debía de ser porque tenía una buena capacidad de recuperación y un cuerpo pequeño y ligero, lo que me ayudó cuando empecé. No podemos elegir nuestra carga genética ni nuestra morfología, y nos acompañan toda la vida. Sin embargo, no son suficientes, ni de lejos, para practicar con éxito según qué deportes. Esta predisposición natural debe ir siempre acompañada de mucho trabajo y, además, debe complementarse con mucha pasión. He tenido la inmensa suerte de aglutinar todos estos requisitos, algo que, por desgracia, no han podido hacer muchos deportistas. Los hay que viven con pasión la actividad que realizan. Tal vez no disponen de un cuerpo que los siga, ni de las

capacidades más idóneas y, después de años de tenacidad estoica, consiguen grandes resultados, pero no logran la excelencia absoluta porque carecen de ese plus necesario. También hay personas que tienen unas capacidades inmensas, pero no aman lo suficiente el deporte para perfilar una carrera de éxito. No se dedican a él lo suficiente y pueden acabar desmotivados y con problemas psicológicos. Aunque cueste creerlo, no fui yo quien escogió practicar deportes de montaña. Fueron mis padres los que me introdujeron en este mundo, ya de muy pequeño, así como también a mi hermana. Vivíamos en un refugio a dos mil metros de altura, y los libros que poblaban las estanterías eran de Kurt Diemberger, Roger Frison- Roche o Walter Bonatti. Cuando teníamos vacaciones en el colegio, siempre íbamos a algún sitio de los Pirineos o de los Alpes a hacer montaña. Puede parecer una paradoja, pero, muchas veces, una inmersión tan intensa en una actividad desde la infancia puede abocar, en la adolescencia, a que los hijos huyan a hacer exactamente lo contrario de lo que los padres quieren. Sin embargo, me imagino que tanto mi hermana como yo seguimos amando la montaña porque edificamos una relación mucho más profunda con ella, superior al simple placer de practicar un deporte .

Fragmento extraído del libro Nada es imposible. Barcelona, Now Books-Ara Llibres, 2018

KILÃ&#x201C;METRO VERTICAL

DESNIVEL +

KILÓMETRO VERTICAL

DARLO TODO Texto y fotografía: Quim Farrero

Es, conceptualmente, una de las opciones más montañeras del trail: subir y llegar a un punto alto. La cima. Sólo la opción de ascenso y descenso se acerca más al origen alpinístico de la actividad. Es también una de las disciplinas pioneras del trail; antes de la eclosión de la ultra distancia, el kilómetro vertical ya era una opción consolidada. Los cuádriceps queman, los pulmones parecen a punto de explotar, los brazos, con bastones o sin ellos, hacen lo que pueden para ayudar a las piernas, la sensación de estar al límite es evidente. La dignidad ha quedado atrás: si hay que avanzar a cuatro patas, pues a por ello… y sólo hace unos minutos que hemos abandonado la línea de salida, hay que resistir un rato más, es un kilómetro vertical. Pero primero habría que definir qué es un kilómetro vertical; según el reglamento de la FEDME, un KV es una carrera con un desnivel positivo de 1.000 metros y un recorrido de un máximo de 5 kilómetros. Más allá del reglamento, las características de cada 14

lugar hacen que algunas carreras sean interesantes sin cumplir exactamente los requisitos oficiales. Aunque sigan siendo denominados “kilómetro Vertical”, no todos los que se celebran cumplen esas condiciones, sea por defecto o por exceso: en los últimos años han aparecido varias pruebas basadas en dobles, o incluso triples, kilómetros verticales. Por lo que hace al recorrido, a pesar de que se suele hacer de más y de menos, sí que hay un acuerdo común en denominar la prueba como “carrera vertical” cuando la distancia supera ampliamente esos 5 kilómetros, pero es únicamente en ascenso. Lo que está claro es que, con más o menos margen de

A veces, hay sorpresas.... (ÂżOtro corredor?)

KILÓMETRO VERTICAL

Darlo todo. Pere Rullan exhausto en la cima del KV de la Olla de Núria.

tolerancia, un kilómetro vertical no puede celebrarse en cualquier lado, el territorio tiene, por fuerza, que acompañar con su configuración. Desde el punto de vista del equipamiento y a pesar de estar en las opciones más minimalistas, no deja de requerir un material específico en el ámbito del calzado en el que, por delante de todo, prima el concepto tracción y, como no, ligereza. Y, en el caso que el reglamento de la carrera lo permita (suelen), y el corredor se sienta cómodo con ellos, los bastones, con la técnica correcta, son una ayuda inestimable. Por otro lado, es obvio que una preparación específica nos hará la vida más llevadera cuando se trata de darlo todo, pero no deja de ser interesante el porcentaje significativo de corredores que, despuntando en el KV, también lo hacen en otras disciplinas, incluso la larga distancia; más allá de Kilian Jornet, que ha demostrado que puede permitirse cualquier 16

modalidad, es siempre destacable el papel que suelen hacer en este tipo de pruebas corredores como Luís Alberto Hernando, Miguel Caballero, Pere Rullan, Maite Maiora o Stephanie Jiménez, por citar sólo algunos. Gente habitualmente más identificada con otro tipo de carreras, desde las medias maratones a la larga distancia. Precedentes El kilómetro vertical es una modalidad vinculada al trail desde su eclosión a principios de siglo. Aunque en el calendario hay carreras con mucha solera en modalidades clásicas de maratón, media maratón o resistencia (lo que después será “ultra”), algunas incluso con historia previa a la aparición del término “trail”, no es hasta el cambio de siglo, en el que se produce esa explosión en la actividad corredora por montaña, en la que los kilómetros verticales tienen un papel importante.

Los bastones pasan a ser una herramienta aĂşn mĂĄs frecuente

KILÓMETRO VERTICAL

La noche no estña reñida con el kilómetro vertical: Limone (arriba) y Nit Pirineu (pag.derecha)

En el mundo del alpinismo, la rivalidad extraoficial en lo que respecta a la velocidad ha existido, de forma más o menos velada, siempre. El propio Reinhold Messner en los años 70 fulminó, junto a Peter Habeler, el récord de la vía clásica de la cara norte del Eiger, uno de los gigantes alpinos, dejándolo por debajo de las 10 horas. Más adelante, el sacrificio de tecnicidad por velocidad será, en cierta manera, el germen del kilómetro vertical. La mayor parte de grandes cimas con accesos no muy técnicos han sufrido el acoso de deportistas a medio camino entre el corredor, el montañero o el alpinista veloz: a finales del pasado siglo, Kiko Soler bate el récord de ascenso-descenso del Aneto, en una hazaña admirable aún hoy. El propio Mont-Blanc ha sufrido en innumerables ocasiones el asalto de seres humanos que, a toda velocidad, han ido fulminando tiempos desde el valle, hasta llegar a las poco menos de 5 horas de Kilian Jornet (ascenso/descen18

so) en 2013. Un Jornet que ha llegado a ascender (y descender naturalmente) de la cima alpina dos veces en un día. Ni siquiera el Everest se ha librado de la fiebre de la velocidad vertical: en 1986 el tándem suizo formado por Erhard Loretan y Jean Troillet ascendieron hasta la cima en menos de 40 horas, un récord que el nepalí Lhakpa Gelu Sherpa dejaría en poco menos de 11 horas en 2003. A medida que la dificultad técnica y las dificultades ambientales se van reduciendo a favor de la velocidad, el objetivo inicial, inicialmente alpinístico, es decir, ascender y descender a una cima, va dejando paso a un concepto más vinculado a correr en el que se mantiene la cima como objetivo, más allá del recorrido o la distancia, ideas más vinculadas a la tradición de la carrera a pie. Pero ¿Y si damos una vuelta más de tuerca? ¿Y si, en pos de la velocidad, nos olvidamos del descenso?

Los brazos aportan potencia extra a las piernas

KILÓMETRO VERTICAL

Espectacularidad, esfuerzo y proximidad con el público.

Esa es la idea del KV: darlo todo para llegar arriba. Si se nos permite la comparación, el kilómetro vertical sería la escalada deportiva del mundo del trail. Espoleadas por esa visión alpina de la carrera, en la primera década del siglo aparecen diversas pruebas de esta disciplina, algunas de las cuales aún siguen celebrándose (Puigcampana, Torreón, Prat Primer…). Cabe destacar por su singularidad, la Cuita al Sol. Celebrada por primera vez en 2004 e inspirada en un relato del escritor Pep Coll, en el que un personaje debe ascender a una montaña antes de que la sombra lo alcance. Dicho y hecho, la carrera se iniciaba en el municipio de Àreu, en el Pirineo catalán, en cuanto la sobra de la tarde alcanzaba el pueblo. Desde ese momento, los corredores debían ascender al Monteixo (2.905 mts) superando, y ahí viene la otra particularidad de este “kilómetro vertical”, los 1.685 metros de 20

desnivel en 5,4 kilómetros, antes de que la sombra los alcanzara. Aquellos que quedaban a la sombra, eran automáticamente eliminados. Tras la Cuita al Sol, aparece el primer circuito estatal de kilómetros verticales, de la mano de Gore-Tex como patrocinador y No Limit como organizadores: las Gore-Tex Series, con tres carreras por circuito celebradas en Benasque, Canillo (Andorra) y Baqueira-Beret. La guinda final la ponía, a modo de fiesta, un ascenso cronometrado a la torre de comunicaciones de Collserola, en Barcelona, en la que una selección, por clasificación, de los participantes en el circuito, se batían en las escaleras de la torre y decidían la clasificación final. KV hoy A pesar de su solera, el kilómetro vertical, como disciplina, siempre ha sido una opción minoritaria, véase secundaria. Muchos eventos de trail incluyen

Final de las Gore-Tex Series en 2008. Just Sociats en acciรณn en la torre de comunicaciones de Collserola (Bcn).

KILÓMETRO VERTICAL

Hay muchas maneras de darlo todo.

hoy en día un KV en su agenda como actividad complementaria, la hermana pequeña, a pesar de que sigue siendo la base de muchos eventos. Este es un fenómeno que se ha ido multiplicando en los últimos cinco años de la mano de carreras como Zegama, Ultra Pirineu, la Olla de Núria o Gorbeia-Suzien, algunas de las cuales incluso dejan un día de margen entre carreras a fin de que los que así lo deseen puedan participar en las dos modalidades. Una fórmula que ha demostrado tener mucha aceptación. Tal vez, con los parámetros actuales más relacionados con la distancia, el kilómetro vertical sepa a poco, y es evidente que, si lo que nos apetece es 22

pasar tiempo en la montaña, se nos va quedar corto: probablemente en esa permanencia en la montaña resida parte del éxito de las grandes distancias en los últimos años. Eso no quita que, a fin de dar más color al evento sin tener que organizar otra prueba, algunos ultras reserven, en su clasificación, un premio especial al mejor crono en una sección del recorrido que cuadre con las características del kilómetro vertical, como es el caso de l’Ultra de les Valls d’Àneu, que contaba con una sección de KV en su ascenso al Tésol, con clasificación aparte. El KV tiene numerosas virtudes, para el participante, para el organizador y para el espectador; desde un punto de vista logístico, todo se simplifica mucho para el corredor: sin avituallamientos, sin perfiles, con un solo tiempo de corte… únicamente hay que pensar en avanzar hacia arriba a todo lo que la máquina pueda sostener. Si la meteorología y las características del terreno lo permiten, la cima, la meta, lo es todo: final, avituallamiento, base de vida, zona post carrera… Por otro lado, la habitualmente sacrificada tarea del asistente se limita a estar en meta con lo que el corredor necesite a su llegada. En algunos casos incluso, el acceso al final de la carrera no representará ni tan solo esfuerzo físico dado que, por cuestiones logísticas, muchos kilómetros verticales finalizan en lugares en los que es posible acceder de alguna forma mecanizada. En cuanto al público, tras un breve paseo, tal vez incluso descendente, puede apostarse tranquilamente donde quiera en el recorrido para asistir y animar a corredores que, literalmente, lo están dando todo en ese momento: las expresiones en un KV lo son todo. Por otro lado, y dado los tiempos que corren, el kilómetro vertical ofrece una opción excelente para la organización de eventos deportivos en los que esa distancia social “coronavírica” deba ser respetada. La opción de salida individual cada cierto tiempo es una práctica habitual en muchas carreras de este tipo. Eso, por un lado, facilita la ausencia de acumulación de corredores a la salida y, por otro, confiere un cierto misterio a la carrera porque, en teoría, hasta que la organización no dispone de los tiempos de todos los corredores, no se sabe oficialmente quien es el vencedor. Más allá de necesidades pandémicas, la opción más clásica, la salida en línea, es también una buena opción: las diferencias que se suelen generar entre corredores de niveles parejos, no son muy grandes, con lo cual el espectáculo está servido.

Las manos se convierten en pieza fundamental.

KILÓMETRO VERTICAL

LOS ESPECIALISTAS OPINAN MIGUEL CABALLERO El Kv es la esencia del Sky running. Mis inicios fueron en el Kv, en las Gore-Tex Series, cuando no sabía bajar (menos que ahora) ¡Era la sensación de darlo todo! El Kv ha perdido mucha popularidad, en favor de los ultras. Desde mi punto de vista es injusto; siempre he dicho que en un KV te da tiempo a petar 3 veces, no hace falta hacer 100kms para darlo todo

PERE RULLAN Un buen Kv es aquel que tiene un recorrido directo, que dibuja una línea recta por donde dar tus pasos hasta la cima, además de exigir superar fuertes pendientes donde dar lo mejor de ti para ganar tiempo al crono.

MAITE MAIORA Un Kv es una carrera corta, explosiva, en la que tienes que llegar a meta a sabiendas que no puedes seguir a ese ritmo e intensidad ni un metro más. Creo que en en un buen estado de forma es la modalidad más agradecida.

LUÍS ALBERTO HERNANDO Mis sensaciones en Kv han ido cambiando; de ser la carrera donde me sentía más relajado, sin miedo a hacerme daño ni sensación de penalizar, a llegar a ser carreras agónicas en las que voy fuera de punto de principio a fin, sobretodo a principio de temporada sin una buena puesta a punto. Es una forma bastante objetiva de comprobar si la pretemporada ha ido bien.

AINHOA LENDÍNEZ Para muchos un kilómetro vertical es solo una modalidad de carrera de montaña. Para mí es mucho más. Es la única modalidad que me garantiza llegar siempre a la cumbre. Bajando soy pésima, subiendo me defiendo. Me encanta entrenar series en cuesta, sentir la explosividad traducida en sabor a sangre en la garganta. Y, sobre todo, me encanta llegar exhausta y derrumbarme en la cima, mientras veo el paisaje a mis pies

ORIOL CARDONA KV es la oportunidad de exprimirse y obtener el máximo rendimiento de tu cuerpo durante 30’, un tiempo que equivale, más o menos, a un 10k y permite tener una marca de referencia, a pesar de que cada KV es diferente.

LAURA ORGUÉ Un km vertical representa un tipo de esfuerzo que requiere máxima concentración, constancia, agonía controlada y determinació. Y para mí, además ¡Una forma de meditación!.

STEPHANIE JIMÉNEZ Es difícil explicar la emoción cuando llegas arriba. Me acuerdo de todos mis Kv: Japón, Malasia, Andorra, francia , Italia. Un esfuerzo corto pero intenso, con mucha adrenalina y mucha emoción. Fueron mis inicios y todavía lo disfruto mucho. Es un esfuerzo muy duro a nivel muscular que, además, necesita mucha fuerza mental. Una buena base para otras distancia.

KILÓMETRO VERTICAL

PROPUESTAS KV TRANSVULCANIA Prueba integrada en la celebración de Transvulcania www.transvulcania.es Recorrido: Tazacorte / Torre forestal de El Time (1.160 mts) Desnivel: 1230 mts Distancia: 7,6 kms ZEGAMA KV Prueba integrada en la celebración de Zegama-Aizkorri www.zegama-aizkorri.com Recorrido: Arriaundi / Cima Iraule (1.507 mts) Desnivel: 1015 mts Distancia: 3 kms (+2 kms neutralizados al inicio) NIT PIRINEU Prueba integrada en la celebración de Salomon Ultra Pirineu www.ultrapirineu.com Recorrido: La Molina / Cima Niu de l’Àliga (2.537 mts) Desnivel: 860 mts Distancia: 5 kms KV PUIG CAMPANA “De la costa a la cima” ww.costablancatrails.com Recorrido: Finestrat / Cima Puigcampana (1.410 mts) Desnivel: 1020 mts Distancia: 3,6 kms (+1,5 kms neutralizados al inicio) CRONOESCALADA TORREÓN CARRERA VERTICAL Con 15 ediciones, es una de las pruebas añejas del calendario. www.torreon.branosera.com Recorrido: Brañosera / Torreón de Valdecebollas (2.144 mts) Desnivel: 1000 mts Distancia: 7,6 kms

CROSS VERTICAL PRAT PRIMER Con salida desde el centro de Andorra www.torreon.branosera.com Recorrido: Andorra La Vella / Refugio Prat Primer (2.200 mts) Desnivel: 1250 mts Distancia: 6,3 kms 1/2 KILÓMETRO VERTICAL DE GARACHICO 20 ediciones respaldan a este medio kilómetro www.torreon.branosera.com Recorrido: Garachico / S.Juan del Reparo (500 mts) Desnivel: 500 mts Distancia: 3 kms MILLA VERTICAL D’ÀREU Un Kv especialmente largo www.millaverticaldareu.com Recorrido: Áreu / Cima Monteixo (2.905 mts) Desnivel: 1.685 mts Distancia: 3,6 kms FUENTE DÉ Un escenario espectacular www.carreraverticalpicosdeeuropa.com Recorrido: Fuente Dé / Teleférico Fuente Dé (1.872 mts) Desnivel: 972 mts Distancia: 2,6 kms OLLA DE NÚRIA Un KV de altura www.olladenuria.cat Recorrido: Santuario de Núria / Puigmal (2.913 mts) Desnivel: 941 mts Distancia: 3,8 kms .

Ascenso al Tèsol en el Ultra Valls d’Àneu: un Kv dentro de un ultra.

REPORTAJE

El hito de piedra se convierte en el faro del corredor en alta montaĂąa. FotografĂa: Quim Farrero

ENTREVISTA

LAIA DÍEZ “Un entrenador tiene que tener empatía” Texto y fotografía: Quim Farrero

Laia Díez (Sant Vicenç de Castellet, 1978) es un personaje inquieto. Un factotum del trail. Corredora, entrenadora y difusora de este deporte. En todo destaca: tiene un palmarés envidiable, por sus manos han pasado corredores de la talla de Pau Capell o Fernanda Maciel y es, junto a su pareja, Elisa Ruíz, fundadora de la escuela de trail Laia Díez. Cordial y buena conversadora, hay una palabra que repite a menudo: “empatía”. La capacidad de ponerse en la piel del otro. Algo básico, no sólo para su labor de entrenadora en la que tiene que entender la situación personal y emocional de cada corredor a fin de poder hacer lo mejor para cada uno, si no también para la vida cotidiana: el que es empático lo es siempre, no existe la empatía selectiva. Y Laia transpira esa capacidad. Se define como disciplinada y organizada, algo que a buen seguro es si nos atenemos a su capacidad de trabajo, que combina con la dedicación a su familia, el verdadero eje central de su forma de entender la vida. ¿Un posgrado de deportes en equipo para dedicarte al mundo del trail? De adolescente, durante muchos años jugué a baloncesto y fui también entrenadora. Me gustaba hacer de todo. Estudiando INEF, hice amistad con un grupo con el que me inicié en el mundo de los raids de aventura. Más allá de vivir en un entorno próximo a la naturaleza, no había tenido nunca relación directa con los deportes de montaña, pero los raids se revelaron como una actividad que me llenaba mucho y en la que llegamos a participar en el mundial que se celebró en España, el Bimbache. Bici, correr, escalada, piragua… la variedad me atraía mucho, disfrutaba con todo, pero lo que se me daba mejor era correr. Ya era así cuando jugaba a baloncesto, incluso de pequeñita había ganado alguna carrera infantil. En los raids, cuando se trataba de correr, era yo la que tiraba del equipo, hasta que llegó una época en que prácticamente dejaron de organizarse y me dio por probar una carrera. Eso fue en 2012, y fue en el Montsant, en Tarragona y, aunque no gané, hice podio. Era mi primera carrera y era un ultra. Entré por la puerta grande, supongo que porque ya venía

del mundo de los raids y el tema de estar muchas horas en una actividad me gustaba y lo tenía controlado. Además, fui sola, sin asistencia ni amigos. Siguiendo la línea, mi segunda carrera fue la TDS, en la que mi pareja ya me hizo la asistencia. Fue también en 2012, un año en el que llovió mucho. Quedé, creo recordar, la quinta o sexta mujer, sin saber demasiado bien donde iba. Me lo tomé con mucha calma en los avituallamientos, me cambiaba… fui a disfrutar lo máximo. Ya hacía unos cuantos años que había dejado el baloncesto. Volviendo a la pregunta, el máster en deportes de equipo, que hice en el F.C.Barcelona, fue muy interesante, lo disfruté mucho, y creo que, aunque correr es una disciplina individual, en el mundo del trail hay algo más que eso y está muy vinculado al concepto equipo. Siempre lo enseño así en la escuela de trail. Aunque pueda parecer extraño, ese máster me ha servido mucho en mi actividad vinculada al trail. En tu trayectoria como entrenadora, pasas del equipo al individuo… A los tres años, más o menos, de acabar INEF, ya empecé a trabajar de entrenadora personal, en un

gimnasio de Manresa llamado Altius y que es uno de los primeros de la ciudad. Ahora ya hay muchos, naturalmente. Es un gimnasio pequeño, con un aforo máximo de 12 personas en el que empezamos cuatro entrenadores, todo muy próximo. Allí, cada entrenador trabajaba una hora con cada cliente en lo clásico: ejercicios de mantenimiento, para bajar peso y, en mi caso, para mejorar rendimiento que es lo que a mí me gusta. Hace dieciséis años que empecé a trabajar con ellos, aunque actualmente ya no hago horas allí porque no tengo tiempo, aunque soy socia del gimnasio. Allí empecé a especializarme en el tema del entrenamiento personal. El mundo de la educación me parece fantástico, pero yo no me veía dando educación física a treinta chavales de los cuales, probablemente, muchos no estuvieran por el tema. Haber empezado a correr y conocer gente del mundillo me llevó a que me empezaran a pedir planes de entrenamiento, y hasta ahora que llevo un montón de corredores de todo el mundo. Me cuesta mucho decir que no, aunque estoy aprendiendo. Esto me lleva mucho tiempo porque soy muy perfeccionista. Tengo muchos corredores sudamericanos, por ejemplo. Es obvio que 31

ENTREVISTA

entrenar, y conseguir buenos resultados, con gente como Pau Capell, Fernanda Maciel o Joaquín López me ha proyectado como entrenadora. Recibo muchas solicitudes por correo electrónico y me gusta, de alguna forma, llegar a conocer a todos mis deportistas, eso me ocupa mucho tiempo

fico, y cada corredor es un mundo. Además, entreno a gente que corre desde 10 kilómetros hasta 180, pero siempre intento ponerme en su piel. Un entrenador tiene que tener empatía y, además, entender que hay corredores que hacen más caso que otros, por las razones que sea. Ahora, desde hace poco, estoy tra-

¿Te aplicas tus métodos para ver cómo funcionan? Para proponer alguna cosa tengo que haberlo probado yo, como en casi todo en la vida. Por tanto, a nivel de entrenamiento es lo mismo. Aunque ahora me ayudan a entrenarme, lo he hecho yo sola durante mucho tiempo. De todos modos, prescindiendo de cómo me vaya a mí, me baso mucho en un buen conocimiento de mi corredor, saber cómo es y qué necesita. No se trata de aplicar una plantilla, cada plan de entrenamiento es especí-

“No se trata de aplicar una plantilla, cada plan de entrenamiento es específico.”

bajando con una plataforma americana, Training Peaks, y allí lo veo todo, es una gran herramienta de seguimiento. En general suelen hacer bastante caso. Corredora, entrenadora, escuela de trail… ¿Cómo organizas tu tiempo?

Soy muy disciplinada pero también muy entregada a mi familia. Me suelo levantar muy temprano por la mañana, sea para preparar planes de entrenamiento o para entrenar yo, aunque hay variables cotidianas que hay que tener en cuenta. Hay días en que, a lo mejor, mis hijas no me han dejado dormir bien, y ese día los planes pueden cambiar, aunque intento cada día dedicar una parte del tiempo a cada cosa. Planificar entrenamientos me lleva mucho tiempo. Ahora estoy un poco más tranquila porque, de momento, tenemos la escuela de trail cerrada. Confinamiento y forma física… Ha sido muy duro. De la noche al día nos hemos tenido que quedar en casa. El primer domingo por la tarde (y noche) estuve cambiando la planificación de todos mis deportistas, fue incluso divertido porque

les decía “-se dónde vivís, cómo es vuestra casa, si tenéis escaleras, balcones, jardines…” cosas que, antes no tenía ninguna necesidad de saber, pero al tener que entrenar en casa durante tantas semanas tuve que readaptarlo todo, buscar muchos ejercicios diferentes a fin de a ver los planes lo más variados posible. Tuvimos que ponernos a trabajar muchas cosas de fuerza porque no era posible plantear otras opciones. No sólo eso, el material planteó también un problema, todos tuvimos que inventarnos alternativas. En mi caso lo tuve más fácil porque tengo espacio y un cierto equipamiento, aunque no tengo cinta de correr y, a pesar de tener el bosque a la puerta de casa, no salía a correr porque creo que no tocaba, no era el momento. Es obvio que la condición física ha bajado, incluso a pesar de hacer un par de horas

diarias de actividad. He ganado musculatura, pero he perdido capacidad cardiopulmonar. Pero las cosas se van poniendo en su sitio. En cualquier caso, incluso en una situación normal, un plan de entramiento es algo que, la mayor parte de las veces, hay que ir adaptando en función de las

“Ahora me entrenan, y es mejor. Es más complicado hacerlo uno mismo” posibilidades reales del corredor: hay trabajos, hay horarios, familias… imponderables del día a día que lo condicionan todo. Toda la actividad de la escuela ha quedado en suspenso... El doce de marzo, que era un jueves, ya paramos la actividad. Con los niños no reemprenderemos la

actividad hasta después del verano si todo va bien. Pero con los adultos ya hemos empezado de nuevo haciendo alguna salida. En verano solemos hacer un campus con unos quince chavales, pero este año no lo vamos a hacer. ¿Es más fácil entrenar a otro que a uno mismo? Si, yo no me hago caso a mi misma, y eso que soy disciplinada y lo he hecho durante muchos años, pero siempre hay días que apetece más o menos. Ahora me entrenan y es mejor. Creo que es más complicado hacerlo uno mismo. ¿Qué planes tenías para esta temporada? Este año quería ir a Transvulcania, a Kima… carreras que me hacían mucha ilusión. Mis tres pilares de la temporada eran Transvulcania, Ultrapirineu y Camí de Cavalls, y 33

ENTREVISTA

ahora las tres son el mismo fin de semana. Aún no se ni qué haré, ni qué se hará. Iremos sobre la marcha. Este será, para todos, un año de transición. Entrenadora de Pau Capell, Fernanda Maciel… ¿Se intuye el potencial de alguien así antes de que despunte? En el caso de Pau sí. Nos conocimos en Menorca un año que yo gané allí. Él era muy joven. Volvimos a coincidir en otra carrera y a partir de ahí empezamos. En el caso de Pau, más que su potencial físico, era su manera de hacer las cosas, era muy maduro (y muy ambicioso) para su edad. Tenía las ideas muy claras. Fue mi pareja quien me dijo “-A este chico tienes que entrenarlo”. Ella tiene mucha visión y había muy buena química con Pau y una vez nos pusimos a trabajar, la progresión fue meteórica. Además, 34

en estos siete años que hemos trabajado juntos, Pau ha hecho, físicamente, un cambio brutal. Hemos ido adaptando el entrenamiento a este a cambio y también a su dedicación, que con los años ha ido aumentando hasta el punto de poder estar exclusivamente focalizado en el trail. A parte de la condición física, a Pau le acompa-

“A Pau le acompañan mucho su madurez y su ambición” ñan mucho su madurez y su ambición. Además, es muy metódico y perfeccionista. Normalmente se puede detectar cuando un corredor tiene posibilidades de destacar, pero el tema es que se tienen que juntar muchos factores para que todo vaya en la dirección correcta. No es sólo un tema físico. La mente falla muchas veces.

¿Trabajabais pensando en el UTMB el año pasado? Normalmente nos planteamos dos objetivos prioritarios en la temporada para buscar el pico de forma. El año pasado fueron Transgrancanaria y UTMB. Programar la temporada no es fácil. Siempre hablamos de cómo planificarla, lo hago con todos mis corredores. En el caso de Pau, él propone muchas cosas que le hacen ilusión o le interesan, y ahí entra la negociación. Pau estaría corriendo a fondo cada semana, pero hay cosas que es necesario dejar para otro momento si se buscan pìcos concretos de forma. Luego están las obligaciones por patrocinios, que no dejan de ser un factor a tener en cuenta, sin perder de vista las carreras que representan un ingreso económico significativo. Al fin y al cabo, Pau es, ahora mismo, un corredor profesional, y la carrera de un

corredor es corta. No es fácil combinarlo todo en una temporada, y eso que Pau se ha lesionado muy poco. También es verdad que cada corredor es un mundo y, como entrenador hay que conocer a cada uno, pero las posibilidades de Pau están en otra norma. El tema de la programación de la temporada es algo que deberían entender los organizadores que invitan a corredores de élite, hay que entender que no pueden estar en todas las carreras que les proponen, no hay ni mala intención ni arrogancia en la declinación de la invitación. A Pau le sabe mal tener que decir que no. Luego está el tema del reposo, que para mí es el mejor entrenamiento. Con Pau, a veces, he tenido algún problema al respecto: le cuesta mucho parar. Siempre intento que, al menos un día a la semana, mis corredores descansen. Luego hay gente como

Pau o Fernanda (Maciel) que no quieren descansar, entonces hay que buscar alternativas más suaves pero activas: bici, caminar, gimnasio... siempre de intensidad baja, para engañar a la mente, que es también un tema muy importante y que creo que se me da bien. Para mí es un aspecto muy importante.

“Las posibilidades de Pau están en otra norma”

nanda y no le iba a fallar. Al final a Fernanda no le salió la carrera como hubiera querido y pude estar en meta. Fue brutal todo, desde el primer momento. Pau fue en cabeza toda la carrera. Es como su hubiera podido soñar todo eso y, sobre todo, la llegada. Fue increíble. Nos hartamos de llorar. Estoy convencida que fue un momento único, por todo, por la carrera, por el ambiente, por lo que Pau representa para mí…Pienso que es la mejor meta del mundo.

Y lo conseguisteis … Como entrenadora, dudo que vuelva a vivir algo como eso. Fue brutal. Además, el año pasado ya no fui a correr, principalmente porque Fernanda me pidió que le hiciera la asistencia. Yo tenía súper claro que Pau iba a ganar, y me daba mucha lástima perdérmelo, pero me había comprometido con Fer-

En 2016 empezaste con tu escuela de trail… Si, es aquí donde vivo, en Castellnou del Bages, un lugar privilegiado que es un poco el desencadenante de la idea. Es un proyecto iniciado con mi pareja en el que podía combinar cosas que me gustan: familia, trail y niños. Es un proyecto que me hace mucha ilusión, y ya tenía 35

ENTREVISTA

el referente de alguna de las que hay alrededor (creo que la de “Mountain Runners del Berguedà” en Berga fue la primera). En esta zona, alrededor de Manresa, hay mucha afición por el trail y la bicicleta de montaña, y ha dado nombres destacables en los deportes de montaña. Empezamos con veintisiete niños, y al siguiente año doblamos. De ahí pasamos a cien y este último año hemos estado trabajando con ciento veinte chavales. Empezamos Elisa y yo junto con dos chicos de prácticas que nos ayudaban, y ahora somos ocho entrenadores. Tenemos chavales de cinco a diecisiete años y estructuramos los grupos por niveles, no por edad. Cada semana trabajamos algo diferente a nivel deportivo, pero trabajamos sobre todo los valores, la relación con sus 36

compañeros y la naturaleza. Aquí volvemos a mis conocimientos sobre el equipo. El trail es un deporte individual que comporta una relación social, nosotros lo tratamos desde el punto de vista del equipo. Un día al mes hacemos

“Estructuramos los grupos por niveles, no por edad” el día de padres: pueden venir a entrenar a condición de que no agarren de la mano a las criaturas, porque si no, no hacen nada. Pero así pueden ver lo que hacemos y compartir la actividad con sus hijos. La actividad habitual de la escuela es lunes y jueves, y los chavales pueden venir un día o los dos. Hacemos actividad todo el año escolar, de seis de la tarde a las

siete y cuarto. Vamos siempre al bosque haga el tiempo que haga: si llueve nos mojamos, si hace frío nos tapamos más y si hace calor nos mojamos antes y bebemos mucha agua. Cuando llueve, de hecho, es cuando mejor se lo pasan, pisando charcos y ensuciándose con el barro. Sólo limitamos las salidas en caso de tormenta. ¿Hay chavales, como en otros deportes, que van más porque a los padres les gusta, que no a ellos? También se da, no mucho, pero se da, sobre todo con los más pequeños. También está bien que el chaval lo pruebe, pero no insistir si no le va. La gran mayoría vienen porque les gusta mucho y se lo pasan bien, pero a veces pasa que

los padres son corredores, les hace ilusión y quieren que, por lo menos, la criatura lo pruebe. A los más pequeños los cuidamos mucho. En cuanto a los padres, nuestra relación se da tanto con padres como con madres, muchas de las que viven por aquí también corren, de hecho, al poco de empezar con la escuela, nos empezaron a pedir que hiciéramos actividades en la escuela también para adultos. Empezamos haciendo actividad mixta los lunes, hombres y mujeres, y posteriormente, muchas de las mujeres que venían, nos pidieron hacer actividad dedicada sólo a las mujeres. Ahora mismo son veinticinco que vienen los jueves. De una forma o de otra, es una cuestión de agrupar a los participantes por nivel general, da lo mismo edad o sexo, el tema es que, si por exceso o defecto el grupo no está nivelado, la gente no se lo pasa bien. El ayuntamiento de aquí, además, nos ha ay udado mucho cediéndonos espacios desde el primer día y que solemos utilizar en caso de tormenta, por ejemplo. Además, una vez al mes, solemos traer a alguien de fuera para que de charlas y motive a los chavales: Pau, Gerard Morales, nutricionistas… suelen ser actividades diver-

“Si, por exceso o defecto, el grupo no está nivelado, la gente no se lo pasa bien.” tidas. Desde un punto de vista más formal, la escuela está inscrita como club de trail y hay un aspecto muy importante a tener en cuenta por lo que respecta a los seguros, algo que en una actividad al aire libre es muy impor tante. Estamos todos asegurados, hay que decir que no a través de la

muy por debajo de sus posibilidades. ¿Cómo te imaginas la escuela de trail en unos años? Me la imagino creciendo. Estamos trabajando en proyectarla en otros lugares, hacer más Escuelas de Trail by Laia Díez. En breves empezaremos con una en Sant Cugat, cerca de Barcelona, que la gestionará uno de los corredores que entreno. Yo aporto el nombre, los conocimientos… algo parecido a una franquicia. Nos estamos planteando incluso hacerlo en otros países. Pensamos que es un proyecto muy bonito.

federación. Por lo que respecta a la competición, es algo que, en general, el resto de escuelas de trail no quieren promover mucho, pero pienso que si un chaval quiere competir, si le motiva, tiene que poder hacerlo, de la misma manera que, al que no le gusta, no tiene porqué competir. No lo fomentamos, pero tampoco lo cortamos. Tampoco hay mucha ofer ta de competición para menores. Durante un tiempo tuvimos la Catalonia Kids Cup, que ya no existe, pero entre escuelas organizamos una liguilla que, como todo, ha quedado parada y, actualmente, algunos grandes eventos tienen sus carreras para los más pequeños, aunque los que de verdad quieren competir, suelen tener muchas limitaciones, con kilometrajes que están

¿Qué obligaciones tienes como corredora patrocinada? Depende del tipo de patrocinio. Yo no soy un Pau, por poner el caso. Él tiene mucha más presión. Hay lugares en los que tiene que estar, si o si. A mí, todo lo que me piden es que en mis actividades lleve el equipamiento de la marca y luego alguna sugerencia sobre el calendario. Este año que viene, por ejemplo, iré al UTMB. Ya me había planteado hacerlo, pero ahora hay un cierto compromiso con el patrocinador. Aunque desde la marca no te condicionen demasiado, el hecho de tener un patrocinio te obliga a hacerlo siempre lo mejor posible. Es una cuestión de honestidad. Cuando no hay patrocinio detrás estás más relajada. Y luego está el tema redes: hay que alimentarlas.

Un libro: Los puentes de Madison, de Robert J.Waller Una película: La vida es bella, de Roberto Benigni Música: Run de Leona Lewis

TERRITORIO Y REFUGIOS

Posgrado en Trail

TERRITORIO Y REFUGIOS

TRAIL DE ALTURA Texto y fotografía: Quim Farrero

Este año, muchos de los que viajan fuera y casi todos los que habitualmente basan su actividad en carreras, tendrán la oportunidad de explorar territorios más cercanos. Tradicionalmente relacionado con el popular recorrido “Carros de Foc”, el refugio Ventosa i Calvell, en el Parque Nacional de Aigüestortes, ofrece muchas posibilidades para el trail de altura. Una verdadera escuela de alta montaña. Un punto de partida por encima de los 2.200 metros, es una declaración de intenciones. Situado justo encima del Estany Negre, el refugio Ventosa i Calvell recibe de éste su nombre de batalla: “el refugi del Negre”, o “Negre-3” en las comunicaciones por radio con el resto de refugios de la zona. Erigido en un pequeño balcón por encima del mencionado lago, Ventosa i Calvell es uno de aquellos refugios que conservan la esencia de la montaña, de los que exigen un esfuerzo para llegar a disfrutar del entorno eminentemente mineral que lo 40

acoge. El granito es la esencia del paisaje, salpicado por la característica hierba de alta montaña del Pirineo. Muchos de los usuarios del refugio llegan a él espoleados por la merecida fama de “Carros de Foc”, decano de los recorridos de montaña en la Península, sea desde el refugio de la Restanca y de camino al refugio del Estany Llong o al revés, el paso por Ventosa i Calvell precede o sigue al que es el punto clave del recorrido: el collado del Contraix que, impasible, observa desde la distancia a la pequeña edi-

A principio de temporada los neveros son moneda corriente.

TERRITORIO Y REFUGIOS

Madrugar nos evitará tener que estar pendientes de posibles tormentas por la tarde.

ficación de la que salen, a diario en verano, seres diminutos que lo transitarán. Pero más allá de un lugar de paso, el refugio del Negre merece, sin querer deslucir a sus vecinos, especial atención por las posibilidades de actividad que ofrece, sobre todo para aquellos que disfruten del trail en alta montaña o de los que quieran adentrarse en esta opción del trail, que tiene sus propias 42

particularidades y condicionantes. Si estamos dispuestos a enfrentarnos a un terreno técnico, la lista de cimas practicables desde el refugio es muy extensa, sea para limitarse un rápido ascenso y descenso, sea para poner imaginación a la jornada construyendo recorridos, encadenando cimas o visitando refugios vecinos.

Un terreno a veces complejo, obliga a la exploración y, a menudo, a la rectificación; es frecuente la necesidad de recular para corregir una trayectoria y recuperar no tanto el camino, que suele aparecer y desaparecer como por arte de magia, si no la dirección correcta. El mal tiempo es un enemigo confirmado en ese territorio en el que, no por disponer de una sólida experiencia, es menos fácil perderse en caso de baja visibilidad por niebla o lluvia. La presencia de neveros a principio de temporada obliga también a prestar especial atención en algunos casos, en los que hay que valorar a veces si es mejor cruzar o rodear. Dependerá de la experiencia de cada uno, del estado de la nieve y de la recepción en caso de un posible resbalón. A pesar de todo esto, las posibilidades siguen siendo muchas y para todos los gustos y experiencias, en un terreno de juego extraordinario para vivir y aprender qué quiere decir el término “alta montaña” como terreno para correr, un espacio en el que los números quedan en segundo término y hay que ver la actividad como una inmersión en la montaña más que como una suma de kilómetro, desniveles y ritmos. Una buena dosis de humildad será necesaria para aquellos que basan todo en lo cuantificable.

Compromiso y humildad A pesar de sus posibilidades para el trail, no hay que relajarse demasiado. El terreno hace que los kilómetros pasen despacio y la presencia de roca convierte en especialmente desaconsejables las caídas. Así mismo, el aislamiento en algunos puntos obliga a una especial atención y a una sólida autonomía en montaña.

Llegar El acceso habitual en verano es desde el pantano de Cavallers, situado en el extremo del valle de Boí, una zona especialmente rica en muestras de arte románico -es patrimonio de la Unesco desde el año 2000- de las que destaca la iglesia de Sant Climent de Taüll, que ofrece una espectacular visita. Unos pocos kilómetros antes del pantano, entramos en el parque nacional de Aigüestortes, momento a partir del cual, además de seguir las normas que el sentido común y la decencia marcan en la montaña, deberemos seguir las normas del propio parque. Es importante informarse porque es fácil, sin querer, contravenir alguna de estas normas. El acceso al refugio se inicia en lo alto de la presa, de donde parte el camino que bordea el pantano y que nos va a ir dando una aproximación de cómo es el terreno: desde zonas muy pedregosas en las que es difícil andar, a tramos de camino estrecho y limpio, pasando por losas de granito por las que es un verdadero placer evolucionar. Rodeados por la cadena de tres miles de los Besiberri a la izquierda, y la masa de la Punta Alta, otro tres mil, a la derecha, 43

TERRITORIO Y REFUGIOS

El collado de Contraix vigila nuestra evoluciรณn.

El tiempo cambia rápido....

el camino se adentra hasta el nacimiento del valle en la llamada Pleta del Riu Malo, de donde, tras un último ascenso, se desvía a la derecha para acceder al ya mencionado Estany Negre y de ahí al refugio, que no veremos hasta que estemos a punto de llegar. A pesar de que los números no son espectaculares, unos 5 kms y 500 metros de desnivel, al acceso al refugio nos dará una aproximación del ritmo de paso de los kilómetros en la zona. Sólo hay que pensar que Carros de Foc, con 55 kilómetros y algo más de 9.000 metros de desnivel positivo -unos números que hoy en día no asustan a nadie- mantiene, desde 2009, su récord en 9h27. Un tiempo establecido en 2009 por un corredor de la solvencia de Txus Mari Romon y que está próximo al récord de otros itinerarios con casi el doble de distancia. Tendremos que dejar los números en casa. El terreno: opciones y propuestas Desde el refugio, más allá de disfrutar de una vista

impresionante, las posibilidades son diversas, con dos sectores bien marcados según nos dirijamos hacia el este o el oeste. Es decir, desde la parte trasera o delantera del refugio respectivamente. Lo primero que llama la atención es la presencia masiva de roca que forma, en algunos sectores, verdaderas murallas que parecen cerrar el paso aislando la zona, aunque todas ellas ofrecen algún punto débil por el que transcurre algún sendero, más o menos técnico, que nos permitirá ir más allá. En los tramos más populares, que son los que coinciden con Carros de Foc, los senderos están bien definidos y son fáciles de seguir, marcados incluso con unos pequeños postes de madera con la punta amarilla que la dirección del parque ha ido instalando. En cuanto salimos de las rutas más evidentes, la cosa se complica y el mapa, junto con una idea clara de hacia dónde nos dirigimos, se convierte en esencial. Las paradas para disfrutar del paisaje o 45

TERRITORIO Y REFUGIOS

Los tramos de cómodo sendero....

hidratarse tendrán a menudo, como finalidad añadida, comprobar que vamos en la dirección correcta, tarea que se verá facilitada por los hitos de piedra diseminados por el territorio y que indican un lugar de paso, aunque no necesariamente sea el nuestro: es fácil equivocarse siguiendo una serie de hitos errónea. De la misma manera, a veces los hitos pueden ser, simplemente, testimonio de que alguien ha estado ahí. Hay que estar atentos y hacer uso de la capacidad de observación, del sentido común y no dar nada por sentado. Desde el refugio hacia el oeste, el espacio es más abierto, con una visión privilegiada del macizo de Besiberri y, con él, toda la cresta que conforma el horizonte por el oeste: Punta Harlé, Pa de Sucre, Tumeneja, Monges y, finalmente el Montardo, una de las cimas más populares de la zona que, con sus 2.833 metros es un extraordinario mirador sobre Val d’Aran y la zona que nos ocupa. Ninguna de las sugerencias propuestas representa 46

un kilometraje más allá de los 15 kilómetros, incluso el desnivel no es, en términos absolutos, excesivo, pero todos ellos implican adentrarse en terreno técnico y aislado en el que hay que ser prudente y, sobre todo, estar muy pendientes de la meteorología. En cualquier caso, Miquel Sánchez, guarda del refugio y un gran conocedor de la zona, podrá facilitarnos información sobre cualquiera de los itinerarios que nos propongamos y, en función de nuestro nivel y capacidades, podremos combinarlos o hacerlos más largos. Monges, Montardo, Travessany Ventosa i Calvell ofrece un excelente punto de partida para una ascensión rápida al Montardo desde su vertiente sur, recorrido que puede ser redondeado con una ascensión previa al vecino Pic de Monges que, aunque de una altitud más discreta (2.690 mts) es también un excelente mirador y, importante, mucho menos concurrido. Desde ahí, podemos descender

... se alternan con secciones más técnicas.

por debajo de cuerda hasta el collado de Oelhacrestada, lugar de paso de Carros de Foc y desde donde enlazaremos con la ruta normal de ascenso al Montardo. Una vez en la cima, retrocederemos un poco para retomar el camino que, pasando bajo las Agulles de Mangades, nos llevará hasta el Port de Caldes, de donde podemos regresar al refugio. Pas dels Isards, Besiberris, Riu Malo Una opción más larga y comprometida, en la cual accederemos a un rincón realmente salvaje cruzando un pequeño collado bajo la Punta Harlé llamado Pas dels Isards, visible desde el refugio. De ahí entramos en el circo que forma la cadena de los Bessiberris en la cual podemos ascender a cualquiera de ellos para luego volver a Ventosa i Calvell bajando por el valle del rio Malo hasta encontrar el camino que sube de la presa de Cavallers. Sólo puntualizar que el cresterío de los Bessiberris, si se sigue desde el Bessiberri Norte, exige el uso

de cuerdas, con lo que la mejor opción si se quiere acceder a todas las cimas es ascender a la cima norte, descender, y de ahí ir a buscar la cima central, desde donde ya podremos seguir por la cresta (fácil) hasta la cima sur o, incluso, hasta el Comaloforno. Un recorrido en el que nos habremos embolsado hasta cuatro cimas de más de tres mil metros en zapatillas y que nos enfrentará a un largo y empinado descenso por el riu Malo hasta la mencionada Pleta. Brecha Harlé, Coll de Tumeneja Un recorrido dedicado a los que se sientan a gusto entre bloque de granito, con una primera parte común al anterior. Entre la Punta Harlé y el Pa de Sucre, la brecha Harlé abre la visión al Estany de Mar, situado ya en la Val d’Aran. Es una zona aislada y salvaje en la que evolucionaremos bajo la atenta mirada de la gran mole de granito del Pa de Sucre y, tras el collado, del llamado Drac del Pa de Sucre, una impre47

TERRITORIO Y REFUGIOS

La pendiente del terreno puede llegar a ser muy pronunciada.

Cerca de la cima del Pic de Monges, aún queda un pequeño nevero para disfrutar relajadamente de la vista (ver doble de entrada del artículo).

sionante pared granítica con grandes posibilidades para la escalada. Una vez en el Estany de Mar, retomaremos el sendero que sube al Coll de Tumeneja y que es una de las variantes de Carros de Foc para aquellos que quieran algo más salvaje y aislado en la etapa que une los refugios Ventosa i Calvell y La Restanca. Una vez pasado el Coll de Tumeneja, es posible acceder al Pic de Monges si no se quiere bajar ya directamente al refugio, apuntando así una cima más a la lista. Collado de Contraix, Pic de Contraix, Collado de Colieto El collado de Contraix es la bestia negra de los senderistas que recorren Carros de Foc. Siempre vigilante, es el collado más evidente cuando, desde el refugio, miramos hacia el Este. Es frecuente la presencia de nieve al inicio de la temporada. El ascenso al collado, una vez dejamos atrás el Estany de Colieto, es un festival de bloques de granito que

exigirá toda nuestra atención para progresar. Una vez en el collado, descenderemos un poco para, hacia la derecha, rodear al Pic de Contraig (2.958 mts) y acceder a su cima evitando la cresta. A continuación, descenderemos hacia el sudoeste para buscar el Coll de Colieto, desde el que podemos ir de vuelta al refugio o, una vez en el Estany Blau de Colieto remontar para apuntar la Punta Alta, con sus 3.014 mts, a un recorrido de altura.

REFUGIO VENTOSA i CALVELL refugiventosa.com 69 plazas Abierto de Junio a Septiembre (incluidos) Refugio de emergencia habilitado durante los meses de cierre Reservas: refusonline.com

TERRITORIO Y REFUGIOS

GALERÍA

DEBERÍAMOS HABER ESTADO EN:

DOLOMITI EXTREME TRAIL

Fotografía: Quim Farrero

DOLOMITI EXTREME TRAIL

GALERIA GALERÍA

DEBERÍAMOS HABER ESTADO EN...

DOLOMITI EXTREME TRAIL

GALERIA GALERÍA

DEBERÍAMOS HABER ESTADO EN...

DOLOMITI EXTREME TRAIL

TEST

Runventure 3 TOPO ATHLETIC

Texto: Eliseu T. Climent Fotografía: Topo Athletic

FICHA TÉCNICA Peso comprobado (talla 9,5 US): 263 gramos Drop: 0 mm Suela: Vibram XS Stack (altura al suelo): 20 mm Rock plate: placa de protección en mediasuela contra las piedras Plantilla: Ortholite Costuras termoselladas Refuerzos laterales en el upper

A la tercera va la vencida Los lectores asiduos a esta sección ya conocéis la filosofía de la marcade las zapatillas que os presentamos: Topo es la firma por excelencia del correr natural, o natural running , tanto en trail como en asfalto, que ha ido buscando su propio camino y definiendo el producto generación tras generación para mejorar el rendimiento del atleta. Eso sí, sin renunciar a sus principios fundamentales que son tres: amplio espacio anterior para máxima libertad de los dedos y una óptima biomecánica, drops bajos —entre 0 y 5 mm— y ligereza. En esta ocasión, analizamos la Runventure 3, la tercera generación de un modelo que dio mucho que hablar cuando nació en 2015, al ser la alternativa al minimalismo, protegida y amortiguada, para quien buscase un contacto directo con el suelo. En 2018, nació la Runventure 2, que aportó ciertas mejoras, como una placa de protección en la mediasuela y costuras termoselladas. No obstante, el verdadero salto conceptual se produce ahora, en 2020, con la tercera generación. La Runventure 3 ha tomado cuerpo, se ha vuelto más zapatilla en comparación con sus predecesoras, más capaz y polivalente. Más enfocada, en fin, al rendimiento. Veamos dónde reside la clave. Empezando por la suela, la nueva Runventure equipa la Vibram XS, de solvencia contrastada y montada en otros modelos de la marca, como la Terraventure. Además del agarre y tracción excelentes, el compuesto es algo más rígido que la suela propietaria de la generación anterior, con lo que ofrece más confianza en terrenos abruptos y sueltos. A ello, cabe añadir el rock plate en la zona del antepié, ya presente en la Runventure 2. La nueva amortiguación posee un carácter reactivo que, unido a la

ligereza del conjunto —263 gramos—, crean una zapatilla rápida y extremadamente ágil. El upper cambia su carácter liviano por un tejido más cerrado y consistente, mermando algo su transpirabilidad y flexibilidad. Unos refuerzos laterales cortados con láser otorgan, más allá de la protección, estabilidad y fijación añadida del pie. El talón flexible concebido en elastane de la Runventure 2 es sustituido por uno rígido convencional, no demasiado alto pero suficiente. En este, desaparecen los insertos para fijar las polainas de la misma marca, vendidas como accesorio.

En marcha

Con la Runventure 3 se ha conseguido un equilibrio óptimo entre el correr natural con un drop 0, la libertad de movimientos de una solución flexible y el carácter polivalente de una zapatilla más montañera. Se acerca, en este sentido, a la esencia de la Terraventure, aunque con un stack más bajo —20 mm por contraposición a los 22/25 mm— y un drop 0 contra los 3 milímetros de la Terraventure. Su horma perfilada en la zona media proporciona una excelente sujeción del empeine y, por consiguiente, más confianza en terrenos técnicos y complicados, a la que se une la suela Vibram XS, de

solvencia contrastada. Si describíamos en 2018 (TRAIL, 78) la Runventure 2 como la alternativa placentera del correr natural, concebida para transitar por zonas fáciles y suaves, esta tercera generación tensa el límite del modelo, llevándolo mucho más allá de las posibilidades reales de su predecesora. He de decir que con la Runventure 3 la sensación de calzar una zapatilla rápida, reactiva, ágil y polivalente abre la puerta a plantearse con ella recorridos de índole muy diversa y variada, sin reparos por sus supuestas limitaciones ante senderos rotos, firme suelto y descensos pronunciados. La zapatilla fija bien el pie, aun siendo este estrecho —como es mi caso— y su stack bajo proporciona una plataforma estable, con lo que resulta factible mantener velocidades vivas con seguridad. En cuanto a distancias, la Runventure 3 funciona bien en kilometrajes cortos y medios, aunque dependiendo del peso del corredor y su técnica —es aconsejable una adaptación progresiva para correr con drop 0—, podría plantearse hasta distancia maratón, o algo superior, donde exprimirse a bordo de esta auténtica voladora.

Peso: 263 g (talla 9,5 US) Precio: 155 €

Uso

A favor

Q Q Q Q Q Entrenamiento

Excelente agilidad. Amortiguación firme y reactiva. Estabilidad superior. Buena tracción y retención de la suela Vibram XS. Amplio espacio en la zona de los dedos. Rock plate en antepié para protegernos de rocas y raíces.

Q Q Q Q Q Larga distancia Carácter Q Q Q Q Q Comodidad Q Q Q Q Q Sujeción Q Q Q Q Q Agarre Q Q Q Q Q Adherencia Q Q Q Q Q Estabilidad Q Q Q Q Q Agilidad Q Q Q Q Q Amortiguación

¡VISÍTANOS!

topoathletic.com

Marca: TOPO ATHLETIC Modelo: Runventure 3

Q Q Q Q Q Media distancia

NUEVA WEB

En contra Poco puedo decir, más que se trata de un modelo que no admite medias tintas: o te enamoras —como es mi caso— o lo tuyo no es correr con drops bajos o nulos.

revistatrail.com 59

ESCAPARATE

MATERIAL

CAMELBAK CINTURÓN ULTRA BELT camelbak.com Formado por un amplio compartimento que envuelve nuestra cintura, y otro específico para transportar el botellín Quick Stow (incluido). Incluye también puntos de fijación para bastones en la zona posterior. De gran estabilidad al correr, se fija al cuerpo deslizándola por la cadera y ajustándola mediante 2 tiradores de regulación. Detalles reflectantes 360º le suman seguridad. Cuatro bolsillos exteriores son una capacidad de carga de 2l. Disponible en dos tallas (M 70-81 cms y L 76-89 cms)

SPORT HG MASCARILLA sporthg.com Mascarillas higiénicas reutilizables, 100% fabricadas en España, con parte de los fondos recaudados destinados a #YoMeCorono y siguiendo la Especificación UNE0065:2020 del Gobierno central.

DYNAFIT ZAPATILLA ALPINE DNA dynafit.com Concebidas para senderos rápidos y técnicos, se adaptan perfectamente a las competiciones de media y larga distancia. Ajuste más estrecho y preciso gracias al llamado reductor de volumen DNA y a su nueva plantilla. Altura dinámica de los tacos de 6mm. El material exterior de malla es muy ligero y transpirable.

COLUMBIA CAMISETA FKT columbiasportswear.es Confeccionada en poliéster, su tecnología reacciona con el sudor y hace descender la temperaturadel tejido, al tiempo que bloquea los rayos ultravioleta (UPF 50) y refleja la luz solar (deflector solar Omnishade). Con cremallera en el pecho para mejorar la ventilación.

ROBENS COLCHONETA AISLANTE robens.de Perfecta para actividades de varios días. Hinchable, se convierte en la mínima expresión una vez guardada en su bolsa de transporte. La válvula Peak ha sido diseñada para regular de forma fácil y precisa la firmeza de la colchoneta. El tejido Nylon ripstop 20D aporta resistencia y ligereza.

SALOMON ZAPATILLA XA PRO 3D V8 salomon.com Versión renovada, ahora es 20 g más ligera. Presenta una pala cosida y materiales más finos y suaves para conseguir el equilibrio perfecto entre comodidad y protección. La nueva geometría del 3D Chassis ofrece la cantidad exacta de amortiguación y estabilidad para una pisada más segura. La suela Contagrip® ofrece mayor agarre.

MITOS Y LEYENDAS

RORY BOSIO La estrella fugaz. Rory Bosio es la encarnación de la corredora vocacional, del placer de correr por correr, más allá de disciplinas, cronos y obligaciones. Brilló, y mucho, en un momento de su carrera, convirtiéndose no sólo en vencedora del UTMB (2013 y 2014) si no siendo la primera mujer que se metía en el Top 10 de la clasificación general. Pero eso, para su filosofía de vida, es secundario. Rory corre desde los 10 años. Probó la pista siendo más joven y no le gustó. Se enganchó cuando descubrió la importancia del entorno: la montaña. Sobre todo, la que rodea su población, Truckee (California), donde nació, creció, vive y donde su madre ya corría y, según Rory, muy bien. Es la pesadilla de cualquier entrenador. Encarna ese perfil de corredor que “entrena según sensaciones”. Cuando se siente bien corre más, cuando se siente cansada corre menos, cuando le apetece va más rápido… No a todos les da los mismos resultados, pero está claro que a ella, al menos en una época de su vida, le dio un resultado excelente. Pero no hay que perder el mundo de vista, los resultados de Rory probablemente no dependen de la calidad de su preparación, si no de unas aptitudes fuera de lo normal, que ella gestiona con su actitud ante la vida. Lo que para otros podría ser la puerta a una carrera profesional, o a una proyección personal pública, para ella es una cosa más. Importante, pero una cosa más. Se define, ante todo, como una enfermera, y para ella eso está por delante. Rory cuida y cura niños como enfermera pediátrica en una unidad de cuidados intensivos, y afirma que no necesita correr para definirse como persona, porque ya se siente definida por su profesión. Correr es disfrutar, desconectar, vivir la naturaleza y, si a veces, eso se traduce en buenos resultados, pues bienvenidos sean. Y es honesta. La prueba es que a pesar de un ascendente y meteórico historial, Rory se ha prodigado muy poco en los años que siguieron a su triunfo en Chamonix. Ha seguido corriendo, ha seguido ganando algunas de las carreras en las que ha participado, pero siempre a su ritmo y porque le ha apetecido. Rory no ha caído en el estajanovismo de la victoria, en la fiebre del “aprovechar el momento” y apuntarse a todo aquello que le pudiera dar proyección. Ha sido siempre fiel a su planteamiento como corredora, a su forma de ver la montaña y la actividad física en ella. Rory es la atleta no atleta. La representación de aquello incuantificable que hace de correr por montaña una actividad especial.