Suplemento Oris al número 25 de TR Tiempo de relojes

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SUPLEMENTO Nº 5 de TR TIEMPOdeRELOJES nº 25-Otoño-Octubre 2019

BIG CROWN PROPILOT X CALIBRE 115 UNA MIRADA AL INTERIOR DE ORIS


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HISTORIA

UN PASADO INSPIRADOR Oris ha sabido gestionar el éxito y también los momentos de dificultad. Así se ha construido su historia y su futuro. TEXTO R. BALBONTIN

SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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HISTORIA

EL PODER DE HÖLSTEIN El origen de la compañía se sitúa en esta población del Jura suizo y allí continúa la producción de Oris. En su filosofía de marca, el entorno y la defensa del escenario primigenio tiene una notable importancia, y se ratifica en múltiples gestos. En la imagen, la fachada de los headquarters.

PASIÓN MECÁNICA En su postulado creativo, la defensa de los valores relojeros, de su trabajo y que éste siempre sea sobre movimientos mecánicos es uno de los elementos más significativos. Eso sí con un concepto industrial de su producción que también forma parte de la personalidad diferente que define a Oris.

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ODA HISTORIA DE ÉXITO se genera a partir de personas, y especialmente de aquellas que rompen protocolos y clichés para avanzar por territorios no explorados. Oris no es una excepción; su trayectoria se ha escrito durante los últimos 115 años atendiendo a aquellos valores que pusieron en marcha en 1904 Paul Cattin y Georges Christian, cuando llegaron a Hölstein, en el Jura suizo. El lugar que les vio nacer y que también ha visto crecer a una marca que luce con orgullo su nombre en el logotipo. Un gesto de fidelidad que no es anecdótico. Si se revisa cada paso que ha dado la marca se entiende que hay argumentos que han podido evolucionar, por supuesto, pero nunca han cambiado su sentido. Para entender esta aseveración es importante volver al origen y a la visión preclara que tuvieron sus fundadores. Cuando pusieron en marcha los ‘cimientos’ de su proyecto, dejaron claro que era necesario hacer piezas de alta calidad, totalmente suizas y destinadas a un consumidor moderno. Pero quizás lo más interesante es que la propuesta para hacerlo era fabricar relojes mecánicos empleando procedimientos industriales. Ni más ni menos que lo que la marca implementó una vez recuperó su independencia. Porque ese también ha sido uno de los valores en los que Oris ha cimentado su crecimiento desde el principio. Basten dos datos, en 1910 –seis años después de su creación– la compañía empleaba ya a 300 personas y era el negocio más importante de la región. Y al principio de los años 20 habían ideado un sistema de producción en línea de sus relojes, y siempre con los estándares de la máxima calidad. Oris se había convertido en una marca pionera que se atrevía con todo –desde un departamento de galvanoplastia a una factoría de esferas–.

ORIS BIG CROWN PROPILOT CALIBRE 114 Decir Big Crown ProPilot es hablar de un diseño basado en la funcionalidad, la que se exige a un reloj de aviador. Dentro de la colección, sobresale esta creación que incluye el Calibre 114 con su lectura de un doble huso horario y su patentado indicador lineal de autonomía. SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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HISTORIA

Antes de que la Segunda Guerra Mundial marcara un parón en el frenesí mecánico y empresarial de la marca, Oris había empezado a dejar muestras evidentes de su carisma y su vocación con apariciones estelares como la del Big Crown Pointer Date. Era el síntoma de que todo marchaba como sus creadores habían imaginado. Concluida la contienda, NUEVA DIRECCIÓN Desde 2016, el futuro de Oris está en manos de dos Gerentes Ejecutivos Adjuntos Rolf Studer y Claudine Gertiser-Herzog. En la imagen, con Ulrich W. Herzog. BC4 FLIGHT TIMER Muestra tres distintas zonas horarias, de las que una se ajusta mediante la corona vertical a las 2 h. En 2009, recibió una distinción en el certamen Red Dot.

comenzaría también una fructífera etapa con creaciones como el reloj despertador con alarma y ocho días de reserva de marcha, o la aparición del primer calibre automático en el porfolio de la casa –Calibre 601, en 1952– o el primer movimiento con certificado de cronómetro, fechado en 1967 (Calibre 652). Era simplemente la constatación de que el espíritu que presidía la gestión de Oris seguía intacto. Tanto como para ser considerado en los años 50 como una de las manufacturas más avanzadas de la industria relojera suiza. Salvo las agujas, espirales y rubís, todos los componentes se realizaban in-house.

t  1938 BIG CROWN El primer reloj para pilotos se distingue por su corona –de ahí el nombre– y el calendario circular.

p 1904 EL NACIMIENTO Oris nace con las ideas muy claras y los conceptos relojeros auspiciados por un principio de calidad. Este es uno de sus primeros relojes.

q 1904 DOS FUNDADORES Paul Cattin y Georges Christian (en la imagen) abren la primera factoria de Oris y un concepto de relojería industrial.

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p 1917 RELOJES DE PULSERA La gran corona de Oris es el reflejo de lo que había acompañado a los relojes de bolsillo, que también fueron reconvertidos para la muñeca.

q 1949 DESPERTADORES Un negocio que comenzó en 1940 y que tiene su culminación en esta pieza con ocho días de reserva de marcha.

q 1920 LÍNEAS DE EXPRESIÓN Relojes de forma que no eran otra cosa que el reflejo de una época, la del Art Decó.

p 1938 ESCAPES PROPIOS Hasta 1960 fabricaron solo relojes con escape de varilla –movimiento Roskopf–, que mostraron toda su eficacia.

t  1952 PRIMER AUTOMÁTICO Mostraba un indicador de reserva de marcha y estaba impulsado por el Calibre 601.


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HISTORIA

Y aquí es donde entra de lleno un apellido, Herzog, y un nombre, Oscar, que será determinante en gran parte del crecimiento de la compañía, pretérito y futuro. Tanto como para desarrollar máquinas propias –como por ejemplo, para construir las platinas– y un sistema de fabricación lineal del proceso relojero que se muestra mucho más eficiente. De hecho, creó un departamento de ingeniería en la que llegaron a trabajar hasta 80 personas. Protagonizó una revolución dentro de un sector que siempre se ha mostrado conservador y reacio a los cambios. Pero había un hecho evidente, en 1970 la compañía tenía contratadas a 800 personas y producía nada menos que 1.200.000 piezas, lo que la convertía en una de las diez mayores empresas relojeras. Hasta que llegó la crisis del cuarzo, que a punto estuvo de hacer desaparecer a la industria relojera suiza. Y por extensión a una compañía como Oris, que tuvo que cambiar de manos. Aunque fue un hecho transitorio,

EN LOS AÑOS 50, ORIS ESTABA CONSIDERADA COMO UNA DE LAS MANUFACTURAS MÁS AVANZADAS DE LA INDUSTRIA RELOJERA SUIZA

porque Rolf Portmann y Ulrich W. Herzog, que conocían bien los entresijos de Oris, y que eran firmes defensores de la teoría de que el reloj debía ser mecánico, tomaron de nuevo el control de la misma en 1982. Fue una decisión determinante y decisiva. Abandonaron el cuarzo progresiva y definitivamente –el último reloj se produjo a principios de los años 90– y nunca más han creado nada que no cumpla con su filosofía. La del reloj mecánico. Hay un sello de identidad de ese espíritu; desde 2002 los calibres de Oris se identifican con un rotor de color rojo, que se ha convertido en el símbolo indudable de una calidad contrastada y un planteamiento empresarial que apuesta por la innovación como precepto. La producción Oris no solo ha mejorado sino que ha creado su propia línea de expresión. Sin renunciar a su pasado, Oris es hoy una empresa moderna y con una oferta donde la historia se ha renovado para construir una oferta contemporánea de mucho nivel y con el perfil innovador como una de las claves para su entendimiento. A partir de 2014 se da el paso definitivo, cuando empiezan a desarrollarse los nuevos calibres. Cada ejercicio hasta ahora ha visto nacer un nuevo movimiento, y todos con la misma base y estructura. Un hito más para una firma que ha planteado ya su futuro. Y éste no es otro que el mecánico.

SISTEMA ROTATIVO DE SEGURIDAD En 2009, Oris presenta el trabajo desarrollado en compañía del embajador y buceador comercial Roman Frischnecht. Nace el ProDiver con este sistema patentado: un bisel giratorio unidireccional que permite su fijación en un lugar determinado y evita errores en la inmersión.

t 1970 MÁQUINAS PROPIAS Uno de los elementos distintivos de la firma en aquella época. En esta se producían las platinas.

p 1958 EN CONTINUO CRECIMIENTO La fábrica de Hölstein se amplia para dar respuesta a los planteamientos mecánicos de la compañía.

p  1965 DIVERSIXTY-FIVE, LA REVOLUCIÓN Este reloj de buceo con bisel rotatorio, escala temporizadora y cifras luminiscentes era sumergible hasta 100 metros.

q 1967 PRIMER CRONÓMETRO El Calibre 652 (con escape de palanca superior), obtiene la certificación de cronómetro del Observatoire Astronomique et Chronométrique.

q 1970 PRIMER CRONÓGRAFO Atendía al nombre de Chronoris y fue el primer reloj destinado al motor. Sigue en la oferta de Oris.

q 1997 WORLDTIMER PIONERO Con función patentada que modifica la hora local mediante pulsadores y en tramos de una hora. p  1984 CALENDARIO ORIS Se reintroduce el Calendario de Alidada, visto por primera vez en los Big Crown de los años 30. Función distintiva de la casa.

p 2004 CORONA DE CIERRE RÁPIDO Sistema pionero que se diferencia de la corona tradicional atornillada en que solo precisa un giro de 120 grados para ser fijada.

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GO YOUR OWN WAY

ORIS HA GESTADO SU PROPIA CULTURA Y LIBRO DE ESTILO CREATIVO. Y TIENE TAMBIÉN MUY CLARO DÓNDE ESTÁ SU FUTURO CRECIMIENTO. SIEMPRE EN EL LADO MECÁNICO Y LA CALIDAD

PASIÓN MECÁNICA Los relojeros de Oris son los auténticos protagonistas a la hora de hacer realidad los postulados mecánicos de la casa. Gozan de esa libertad necesaria para aplicar no solo los valores atesorados sino la necesaria innovación que persigue toda firma que se precie. Y en Oris ese es el motor que mueve a todas sus creaciones.

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GO YOUR OWN WAY

UN CAMINO DEFINIDO Oris se muestra como una marca moderna, con ideas muy claras y una notable personalidad. TEXTO A. SOLANA

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S MUCHO MÁS QUE UN LEMA. ‘GoYourOwnWay’ sintetiza y expone con certeza las claves para interpretar un estilo, una filosofía y, por supuesto, el futuro de Oris. Desmenuzado convenientemente, no hace otra cosa que reafirmar su historia, argumentar sus fortalezas y, por supuesto, gestionarlas. Uno de los primeros elementos distintivos de la marca nacida en Hölstein, radica precisamente en su lugar de nacimiento. Siempre ha marcado su territorio creativo y es también el escenario donde se ha desarrollado su fortaleza y carácter. Su pureza relojera. Defensora a ultranza del Swiss Made, en Oris la tradición y los valores no se pueden separar de la localidad situada en el cantón de Basilea. Otro apartado importante, y en el que Oris lleva la delantera a la mayoría, es su relación con la Naturaleza y la sensibilidad ante la sostenibilidad del medio. Lo que hoy en día nos parece un ejercicio cotidiano, no era tal cuando en los años 80 la compañía comenzó a apoyar proyectos vinculados con el respeto al medio ambiente y su mejora. Con el paso del tiempo, la implicación ha ido en aumento, y es uno de los puntos que marca el ‘GoYourOwnWay’. La mecánica relojera en Oris es un elemento innegociable en el camino emprendido hace más de cien años y es también la base de un futuro que reivindica todos los valores de la relojería, desde su carácter totalmente mecánico que queda ratificado en la incorporación del rotor rojo, símbolo de Oris, y la entrada en el desarrollo y producción de calibres manufacturados. Es el paso definitorio de una marca que siempre ha hecho de su independencia una parte importante de su caminar en el territorio de la excelencia relojera. Eso ha forjado su carácter, por supuesto, pero lo más importante, le permite tener una visión a mucho más largo plazo.

MANUFACTURA A lo largo de su centenaria historia, Oris ha implementado calibres e innovaciones que han pasado a formar parte del bagaje de la relojería suiza. Pero es sobre todo a partir de 2014 cuando la compañía refleja en su repertorio mecánico un salto hacia el concepto que todo el mundo entiende como manufactura. En cinco años otros tantos calibres lo han ratificado.

ORIGEN Siempre presente en su ideario, Oris tiene un vínculo especial con la tierra que lo vio nacer y con ese carácter independiente que siempre ha mantenido en un mercado que se ha concentrado en las últimas décadas. Ese también en su signo de distinción. SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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VALORES

SUPERANDO LOS LÍMITES Tres piezas que resumen a la perfección el mandato innovativo que está presente en Oris. TEXTO A. SOLANA

LA LEY DE BOYLE MARIOTTE Es la que aplicaron en Oris para crear el profundímetro patentado del Aquis Depth Gauge. El cristal de zafiro, un 50% más grueso de lo normal, dispone de un canal perforado en el costado que recorre la esfera en dirección contraria a la de las agujas del reloj, que marca la inmersión y que se detiene entre la 1 y las 2 horas. A las 12 está el punto de unión entre el cristal y la caja, sellado por una junta de caucho.

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A REALIDAD DE UNA FIRMA relojera se mide analizando su evolución, su crecimiento y, por supuesto, su creatividad. Pero hay un elemento trascendental y que explica la mayoría de las veces la razón del éxito: su capacidad para innovar. Oris ha firmado una historia donde ha dejado suficientes ejemplos para asegurar que uno de sus principios innegociables ha sido precisamente el que marca la innovación. Y siempre con la funcionalidad como elemento distintivo. Basta con revisitar algunas de las creaciones de los últimos años para ratificar que ese espíritu innovador no solo no ha cesado sino que, además, tiene rango de excelencia; siempre con el mejor precio. La calidad en Oris es un mandato ineludible y eso es lo que llevó a cabo con la creación del profundímetro del Aquis Depth Gauge. Presentado en 2013, ha sido reconocido como uno de los relojes de buceo más innovadores por el medidor de inmersión, patentado, que permite medir la inmersión hasta 100 metros de profundidad –es sumergible hasta

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500 m–. Un avance notable para seguir progresando en su forma de afrontar la relojería. En la actualización del modelo, incorporaba otras innovaciones, éstas relativas al anclaje de seguridad de la correa y al cierre corredizo para adaptar su tamaño sin necesidad de quitarse el reloj. Si esto ha ocurrido en las profundidades marinas, en el aire también ha dejado muestras de sus capacidades... en forma de altímetro mecánico que da vida a uno de los Big Crown Pro Pilot. Llegó al mercado en 2014 con detalles como la aguja de fibra de carbono o el patentado sistema de ventilación de la corona multifunción –este reloj se distingue visualmente por sus dos coronas–. En el territorio de la materia, Oris encontró en la Fórmula 1 y en la fibra de carbono la inspiración para crear una caja de altas prestaciones formada a partir láminas de fibra reforzadas con polímero y endurecidas al horno. El peso del reloj es de apenas 7,2 gramos. Un detalle que no necesita más explicación y que habla por sí solo de la innovación Oris, su valor más preciado en un sector, el relojero, marcado por lo excepcional.


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VALORES

ORIS HA DADO MUESTRAS SUFICIENTES PARA AFIRMAR QUE EL PRINCIPIO DE LA INNOVACIÓN ES ALGO INNEGOCIABLE Y DISTINTIVO

ANTE TODO PRACTICIDAD El sentido pragmático de Oris quedó patente en la fácil lectura del profundímetro. La línea gris en la esfera es la que marca hasta dónde está llegando la inmersión, calculada en metros (la lectura llega a 100 m), y aparece indicado por números en color amarillo. El medidor, obviamente, va avanzando a medida que aumenta la presión del agua sobre el reloj. Pura ciencia. SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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PORTADA

UNA MIRADA AL FUTURO Oris estrena su sexto calibre, el 115; esta vez esqueletado, es el resumen de la historia y del porvenir de Oris. Siempre en clave mecánica. TEXTO R. BALBONTIN

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XPLICAR CERTERAMENTE pasado, presente y futuro. No es una tarea fácil, y menos aún cuando el contenido se halla en un solo reloj, en una única creación. Eso es lo que se ha propuesto Oris con el Big Crown ProPilot X Calibre 115, que sea ni más ni menos el reloj que resuma la historia de la firma y que se proyecte sobre un futuro que está ligado de forma inexcusable a la mecánica relojera... y, por supuesto, a la innovación. Oris ha sido uno de los defensores de los valores relojeros vinculados a los movimientos mecánicos, porque el producto resultante es un objeto hecho a mano con el que podemos conectarnos en el sentido más natural y tangible. Por eso da un paso más y convierte su nuevo calibre –el sexto en otros tantos años– en un reloj esqueleto que pone al descubierto el estilo y la filosofía de Oris. Porque el Big Crown ProPilot X Calibre 115 se adentra en las raíces históricas de su relojería, esas que forjaron una empresa de carácter, pero al mismo tiempo, debe ser el impulso hacia el futuro de una marca que, además de independiente, siempre ha apostado por la calidad. Se puede afirmar que Oris, la empresa, se muestra aquí en estado puro, como la Naturaleza a la que está íntimamente ligada. Oris no solo se siente independiente, ejerce como tal y uno de sus elementos distintivos es que solo fabrica relojes mecánicos. Y el mejor reflejo de ello, de lo que el Calibre 115 es heredero, comienza en 2014, cuando coincidiendo con el 110 aniversario se presenta en sociedad el Calibre 110, un reloj de edición limitada con un movimiento desarrollado internamente que llevaba una reserva de marcha de 10 días, un indicador de reserva de marcha no lineal patentado y un pequeño segundero. Esta innovadora combinación de complicaciones pasó a ser la arquitectura base de una serie de movimientos que siguieron hasta el Calibre 114, lanzado el año pasado. Todos ellos se han convertido en el símbolo de Oris y en el paso definitivo de la visión in-house

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PORTADA

ELEMENTOS COMUNES. Con los calibres previos comparte los diez días de reserva de marcha, la indicación de autonomía no lineal patentada y el pequeño segundero. SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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PORTADA

ESTA NUEVA CREACIÓN ES LA MEJOR SÍNTESIS DE LA HISTORIA DE ORIS, PERO TAMBIÉN DE SU FUTURO Y DE SU APUESTA PERMANENTE POR LA CALIDAD

LA CARA DE UNA FILOSOFÍA. Pericia relojera y una íntima relación con la Naturaleza, uno de los detalles que definen a su filosofía de trabajo. Ahora, muestra su interior en todo su esplendor con la idea de que el público conozca y comprenda lo que se esconde tras el trabajo mecánico que atesora la relojería.

de la compañía. Ahora llega este nuevo calibre que tiene ese punto de sofisticación y atractivo que no hace dudar a los responsables de Oris: “es el reloj más Oris que hemos fabricado”. Y habría que añadir que es el mejor compendio de muchos ejercicios relojeros y también de muchos sueños. De lo que no hay duda, es que el resultado final es simplemente espectacular. Esta oda mecánica prescinde de cualquier añadido. Es pura esencia. Tradicionalmente, la esqueletización ofrecía una oportunidad al talento de los relojeros, pero este movimiento tiene ambiciones más elevadas. SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS

Ha nacido para reconectar a la gente con la forma en que funcionan las cosas, llevarlas al interior de la mecánica. El ProPilot X Calibre 115 de Big Crown deja al descubierto su funcionamiento interior. No hay nada escondido. Incluso el barrilete emplazado a las 12 horas ha sido esqueletizado, por lo que se puede ver el resorte principal extendido. Al dar cuerda a la corona, se observa como éste se comprime y a medida que se consumen los diez días de autonomía se va abriendo. Por eso no hay detalles innecesarios en el reloj, ni componentes llamativos. Es esencial y funcional al mismo tiempo. Demuestra la competencia relojera de Oris y también su confianza en la industria relojera suiza; porque esa es otra de sus realidades, defiende a ultranza el Swiss Made frente a cualquier otra procedencia. No ha sido una tarea fácil, porque como reconoce Beat Fischli, jefe de operaciones de la compañía, crear un calibre esqueletado “es un proceso complejo y más cuando había que hacerlo sobre una estructura base cuyo rendimiento conocíamos en cinco versiones previas pero ninguna de ellas esqueletada. Y cuando empiezas a retirar material del calibre surge la duda de dónde y cuándo la construcción deja de ser estable. Puede tener una imagen bonita, ¿pero realmente es operativo?”. Pero el resultado fue óptimo y como añade Fischli, “en cada detalle se descubre la pericia de Oris, la experiencia y de lo que somos capaces. Y lo ves de una manera muy honesta, pura y lujosa. Para Oris, la relojería se trata de seguir tu propio camino, hacer algo porque quieres. Tenemos la libertad de hacerlo, y creímos que era el momento adecuado para ello. Así que lo hicimos”. Y a pesar de quedar reducido a la mínima expresión, de haber vaciado el reloj de cualquier elemento superfluo, como buen pilot tiene una excelente legibilidad, que además reduce considerablemente su peso al utilizar el titanio tanto para la creación de la caja de 44 mm de diámetro como el brazalete. Y como en todos los Oris, no solo se ha creado el mejor reloj, sino que lo hace con el mejor precio posible.


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PORTADA

SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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CALIBRES

EL MOVIMIENTO SE DEMUESTRA... Desde 2014 se han sucedido los movimientos de nueva factura en Oris. Estos son los compañeros del Calibre 115. TEXTO A. SOLANA

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RIS SIEMPRE HA MOSTRADO una pasión especial por la mecánica relojera, traducida en 279 calibres in-house previos a un momento, 2014, el año en el que coincidiendo con el 110 aniversario de la compañía se lanzaba un movimiento dotado de 10 días de autonomía de marcha, y que respondía al nombre de Calibre 110. Pero hay otro elemento importante, la casa relojera siempre ha defendido la relojería industrial como base para crear los mejores relojes a los mejores precios, y en estos nuevos calibres está presente. Los mejores proveedores de componentes suizos forman parte del elenco que acompaña a la tradicional funcionalidad creativa que preside los productos Oris.

SOLO EN LA PRODUCCIÓN DE LOS PUENTES DE ESTOS CALIBRES SE PRECISAN HASTA OCHO DISTINTAS FASES

Traducido mecánicamente, Oris ha procurado con estas nuevas propuestas ir conformando calibres inéditos y al mismo tiempo, prácticos. Para empezar, cuenta con un elemento patentado, el indicador no lineal de la reserva de marcha. A eso hay que añadirle que para lograr esa reserva de marcha emplea un único barrilete que ha sido diseñado para que además libere una cantidad de energía uniforme durante todo el periodo. Todo ello con unos niveles de acabados y controles de calidad de primer nivel. Un buen ejemplo está en la realización de los volantes, donde cada uno de ellos es mecanizado con tolerancias de milésima de milímetro para conseguir un óptimo rendimiento en la marcha del reloj. Si el Calibre 110 fue el impulso de una edición limitada –también a 110 piezas– que celebraba el aniversario de la marca, los sucesivos movimientos han investigado en esa línea de funciones prácticas. El 111 (2015) lo hizo con la incorporación de la fecha. En 2016 aparece en escena el calibre 112, con la introducción del GMT con indicación día-noche. Un año después llegaría el 113 convertido en un calendario de negocios que además del día, fecha y mes del año, añadía la lectura de la semana. Cierra este capítulo el calibre 114, un segundo huso horario 24 horas con indicación de las medias horas.

CALIBRE 110

CALIBRE 111

El punto de partida y la síntesis de una filosofía de trabajo que Oris defiende desde su nacimiento, y no es otro que la relojería industrial, lo que debía traducirse en los mejores relojes a los mejores precios. En este calibre se concentra no solo el ejercicio relojero, sino la conjunción de componentes provenientes de los mejores fabricantes suizos, como los volantes, con tolerancias de milésima de milímetro.

Todos los calibres realizados desde 2014 por Oris comparten la misma base mecánica, a la que se le han ido incorporando complicaciones y funciones que han acompañado a la muestra no lineal de la autonomía de marcha, cifrada en 10 días, que muestran todos ellos. En el caso del calibre que nos ocupa, se añadió la indicación de la fecha, cuya lectura se realiza a través de una ventana a las 9 horas.

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CALIBRES

CALIBRE 114 Vinculado al universo de la aviación prácticamente desde su creación, en Oris plantearon para la realización del calibre 114 un movimiento que tuviera su destino un reloj piloto, en concreto el Big Crown ProPilot. Como en los anteriores se buscaba la funcionalidad y se tradujo en la incorporación de un segundo huso horario 24 horas y con la lectura de medias horas.

CALIBRE 112

CALIBRE 113

Una de las claves de Oris es su independencia como marca con el añadido de que solo desarrolla relojes mecánicos, lo que le ha llevado a crear un alto número de módulos con complicaciones útiles, y a haber creado nada menos que 285 calibres in-house. En este calibre 112 se incorpora una función de notable practicidad: el segundo huso horario con indicación día-noche.

Una combinación inédita en relojería y de nuevo el sentido de la practicidad como ‘motor’ creativo de Oris. El resultado es un movimiento que presenta un calendario de negocios, o lo que es lo mismo, a la indicación de día, fecha y mes del año, se le añade la información del número de la semana que ocupa en el año. Una información nunca vista en otro reloj en ese momento. SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


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PUNTOS CARDINALES

ESPÍRITU BENEFACTOR El mundo submarino es uno de los puntales de Oris. Un patrimonio relojero acompañado de acciones sostenibles. TEXTO A. SOLANA

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AS FORTALEZAS CREATIVAS de Oris están muy definidas. Y también sus propósitos. La historia de la compañía deja muy claro que una de sus potencialidades reside en el medio marino, especialmente sumergido... y sus relojes de buceo nunca han dejado indiferente a los aficionados. Como tampoco lo ha hecho su preocupación por la situación de los océanos, consecuencia de un interés por la sostenibilidad que comienza en los años 80 y que Oris va haciendo crecer. De hecho, desde el año 2010 hay un compromiso activo en la conservación de los océanos que se concreta en una serie de proyectos. Todo comienza con La Gran Barrera de Coral donde, junto con la Sociedad Australiana de Conservación Marina –que casualmente se fundó el mismo año, 1965, en que Oris lanzó su primer reloj de buceo–, se han realizado diversas actuaciones (2016 y 2019) para proteger este patrimonio de la UNESCO, y acaba por el momento en una acción directa con Ocean Clean, un ambicioso trabajo para eliminar el plástico de las aguas. Entre ambos, Oris ha ‘visitado’ las Maldivas (protección de los corales de los atolones, 2011), los Arrecifes de Tubbtaha (Filipinas, 2012), el Mar Rojo (2014), el volcán de la isla de El Hierro (2016), la ruta de los tiburones martillo en el Golfo de México (2017) o los arrecifes de Staghom (Florida, 2017) y el Atolón de Clipperton (2018). Y un detalle importante, cada incursión submarina se ha acompañado de una creación limitada que muestra el estilo inconfundible de Oris.

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PUNTOS CARDINALES

DIVE CONTROL LIMITED EDITION

AQUIS DATE RELIEF

DIVERS SIXTY-FIVE

Si hay que hablar de reloj de buceo esta evolución del ProDiver es la pieza. La caja de 51 mm ha sido fundida en titanio ligero de grado 2 y recubierta de DLC. Cuenta con el Sistema de Seguridad de Rotación, un dispositivo que bloquea el bisel durante la inmersión.

Esta creación es parte de la asociación con el nadador Ernst Bromeis y ha sido utilizada en el lago Baikal (el lago dulce más grande del mundo), como parte del proyecto ‘El milagro azul’ que toma conciencia sobre el problema del agua. Caja de acero, 43,5 mm y estanco a 300 m.

Oris recuerda el primer reloj submarino con el Divers Sixty-Five. En esta ocasión, la esfera es de color verde intenso y se complementa con el anillo exterior de bronce del bisel del reloj. Como todos los de esta línea, la caja es de 42 mm y destaca por su imagen vintage.

DESDE 2010, ORIS HA APOYADO DISTINTOS PROYECTOS VINCULADOS A LOS OCÉANOS Y SU PRESERVACIÓN. TODOS, ACOMPAÑADOS DE EDICIONES LIMITADAS

CLEAN OCEAN LIMITED EDITION Si todos los proyectos de Oris son ambiciosos, éste sorprende por el alcance de futuro. El plástico se ha convertido en el gran enemigo de los mares y en esta propuesta hay una posible solución. Con un diámetro de 39,5 mm, es sumergible a 300 m y está limitado a 2.000 piezas.

BLUE WHALE LIMITED EDITION

GREAT BARRIER REEF LIMITED EDITION III

Última pieza de la Oris Ocean Trilogy, basada en el Aquis. Limitado a 200 piezas, solo estará disponible como parte del estuche realizado con plástico reciclado PET. Cronógrafo automático en caja de acero de 45,5 mm y hermético a 500; bisel de cerámica azul y esfera azul turquesa.

La Gran Barrera de Coral ha ocupado una parte importante en el proyecto de conservación de los océanos emprendido por Oris. Esta tercera edición, limitada a 2.000 unidades, tiene un diámetro de 43,5 mm. La caja es de acero y el movimiento de cuerda automática. 300 metros.

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PUNTOS CARDINALES

TIEMPO PARA TOCAR EL CIELO La aviación ha sido fuente de inspiración para Oris. Y también un excelente espacio para la genialidad. TEXTO A. SOLANA

ORIS BIG CROWN POINTER DATE 80TH ANNIVERSARY EDITION Para celebrar los 80 años del nacimiento de esta pieza, en Oris decidieron modelar su caja de 40 mm en bronce y rematar su estética con una esfera de color verde. Una combinación que rinde tributo a la excelencia mecánica de la casa y también a su vinculación con la Naturaleza. Destaca también su bisel acanalado que aporta el definitivo toque vintage.

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A AVIACIÓN Y LA RELOJERÍA han mantenido una relación que se ha movido entre la épica y la imagen romántica protagonizada por los pioneros que se atrevían a romper los límites de la lógica del momento. Oris también fue pionero en su acercamiento a la experiencia aérea. Su primera creación, en 1938, llamaba la atención por una distintiva gran corona y por la función de calendario de alidada con su característica aguja recorriendo la esfera. Había nacido el Big Crown Pointer Date, un reloj que todavía hoy sigue siendo uno de los sellos inconfundibles de la marca y que forma parte del patrimonio creativo Oris. Era el principio de una ingente y afamada producción de distintas propuestas que quedaron asociadas a la historia de la aviación. Pero además, Oris ha creado

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posteriormente un imaginario que recuerda y reconoce momentos claves, como el que representa el Oris Flight Timer 1945 LE, una pieza creada 60 años después del final de la Segunda Guerra Mundial. Estaba limitada a 1.945 unidades. O la hazaña protagonizada por Polly Vacher, la primera mujer en volar en solitario alrededor del mundo vía los dos polos en 2003, que también gozó de su edición limitada. En la colección actual, junto al Big Crown, que se mantiene como referente 81 años después, hay que mencionar dos propuestas: BC3 y BC4. El primero fue presentado en 1999 y muestra un robusta caja y la estética propia de un reloj de piloto; el segundo se presentó en 2008 con un diseño que toma la inspiración de los instrumentos de cabina y, como es tradicional en Oris, apostando por la funcionalidad en su información.


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PUNTOS CARDINALES

EN TIERRA FIRME El sentido creativo de Oris permite una oferta que transita entre la elegancia y la deportividad. TEXTO A. SOLANA

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OS DOS ELEMENTOS QUE completan la esencia creativa de Oris, no abandonan la tierra, pero ofrecen dos mundos alternativos a los aclamados pilot y divers. El primero de ellos está representado por Artelier y la línea Classic; ellos son los representantes de la elegancia, del elemento cultural que también cultivan en la compañía. Han sido los elegidos para mostrar el legado y la innovación que acompaña a la compañía. Tanto como para haber sido los protagonistas –Artelier– de los primeros relojes que lucían en su interior los calibres desarrollados in-house desde 2014, y que han cambiado la visión de la marca en un mercado cada vez más exigente. Pero no solo eso, Oris lleva años asociando su nombre al de proyectos en los que tiene cabida el arte y la música, pero sobre todo son las personas que protagonizan todas estas manifestaciones. Ese vínculo tan especial se produce atendiendo a valores como la independencia, la artesanía y, por supuesto, la calidad. Principios que Oris no solo defiende sino que práctica desde hace 115 años. Cuando nos desplazamos al mundo del deporte del motor, el Chronoris es el reflejo icónico de una historia que comenzó en 1970 y donde se convirtió en el primer cronógrafo de Oris. Años más tarde, en 2003, la casa se asoció con el equipo Williams. La colección con el nombre del equipo se lanzó en 2015, y se complementa con la línea TT1, pensada para los nuevos aficionados del deporte del motor y apasionados de la alta tecnología. Cierra la oferta Artix GT, un reloj acabado en acero y que entre sus innovaciones cuenta con un bisel birrotatorio con incrustación cerámica. Porque la innovación no es una opción en Oris; es una obligación.

CHRONORIS DATE La interpretación contemporánea del primer cronógrafo realizado por Oris es un excelente ejemplo de que los clásicos siempre tienen su espacio en la relojería actual. En caja de acero, con un diámetro de 39 mm y estanco hasta 100 metros, monta un movimiento automático con 38 horas de reserva de marcha e indicación de la fecha.

ORIS INDAGA EN SU LEGADO Y TAMBIÉN EN LOS DETALLES QUE LE HAN DADO FAMA POR SU CARÁCTER INNOVADOR

SUPLEMENTO ESPECIAL ORIS


Cuando se han fabricado relojes desde hace tanto como nosotros lo hemos hecho, algunas cosas suceden sencillamente con naturalidad.

Big Crown ProPilot X Calibre 115


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