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Gasto absurdo del esfuerzo. Alma Delia Miranda Flores
from ANTiDOGMA #6
by uc_2021
de convocar a las mujeres que movían el elefante cultural del estado, por llamarlo de algún modo. Derivado de esta idea, nace el Club del Tupperware, proyecto que tiene como objetivo reconocer el poder de las reuniones de grupos de mujeres, como una comunidad que se congrega, se conoce, se mira y, al mismo tiempo, se confronta. Lo anterior con el fin de abordar desde la fuerza y la sutileza los temas que nos preocupan, unen y solidarizan. La participación en estas actividades fue nutrida y enriquecedora. Sin embargo, una semana después, la efervescencia tuvo que ser contenida tras ser confinadas en los espacios personales por la pandemia.
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Entonces surge el cuestionamiento: ¿esto a lo que hemos dado inicio mantendrá la misma fuerza con el paso del tiempo? La respuesta vendría dos años después cuando las mujeres nos posicionamos desde los puestos directivos de los recintos culturales del estado. Y entonces nos reunimos con la intención de hacer que marzo sea nuestro, tal y como lo planteamos una tarde en la oficina del Centro de las Artes de Querétaro (CEART). Después de una profunda conversación, encontramos eco en nuestras palabras, experiencias, inquietudes e historias, para dar continuidad a la labor que se inició a través del Club del Tupperware que propuso Paulina dos años atrás.
Queríamos crear un espacio seguro de visibilización y escucha sobre el hacer de las mujeres artistas queretanas. La efervescencia estaba de vuelta; lo comprobamos cuando en una sesión de trabajo logramos aterrizar en términos creativos lo que sería INASIBLE, Reflexiones Actuales de Mujeres en las Artes 2022. El planteamiento inició como una apuesta que, a base de redes y voluntades, logró la sinergia de las más de sesenta artistas queretanas que se sumaron al programa de cuarenta y cinco actividades en las que se congregaron las más diversas disciplinas (teatro, fotografía, danza, escultura, pintura, performance, grabado, creación colectiva, arte instalación, mesas de discusión, literatura, restauración, música y talleres).
Foto: Diana Cano, “Borré las paredes de las pintas”
El programa completo fue alojado tanto en el CQI como en el CEART durante todo el mes de marzo de este año, porque solo un día no basta. Así, como una bella obra de arte colectiva, hecha a base de generosidad, empatía, encuentros y arrojo, y contra todo aparente pronóstico, INASIBLE se gestó como un surco imparable en el que todas las reflexiones artísticas de las mujeres queretanas hallaron un eco imposible de contener.
Foto: Sandra Hernández