(El Valle tiene Bancada) Cuestionario al senador del Partido de la U, Ritter López, sobre la Ley de Crecimiento Económico.
Con motivo de la crisis económica que se vive en el país y a nivel mundial producto de la contingencia generada por la pandemia del Covid-19, quisimos relacionar esta entrada con la postura del senador Ritter López sobre la Reforma Tributaria - Ley de Crecimiento Económico aprobada en el Congreso de la República en diciembre del año pasado. La reforma tributaria denominada “Ley de Crecimiento Económico” elaborada por el gobierno nacional y aprobada el 18 de diciembre de 2019 en sesión plenaria “por medio de la cual se adoptan normas para la promoción del crecimiento económico, el empleo, la inversión, el fortalecimiento de las finanzas públicas y la progresividad, equidad y eficiencia del sistema tributario”, ha suscitado debates, polémicas, conformidades e inconformidades en aspectos cruciales de su contenido. Todo comienza con la aprobación de la Ley de Financiamiento del gobierno de Iván Duque el 19 de diciembre de 2018, la cual empezó a regir durante el 2019. Desde este mismo momento, se empezaron a generar polémicas producto de su aprobación. Sin embargo, en octubre de 2019, la Corte Constitucional con seis votos a favor y tres votos en contra, declaró inexequible toda la Ley de Financiamiento aprobada el año inmediatamente anterior por considerar que hubo vicios en su tramitación 1. Según los magistrados, hubo un error en su tramitación pues no hubo una deliberación racional sobre la Ley y a su vez se incumplió con el principio de publicidad, es decir, a partir de las evidencias enviadas desde el Congreso, se demostró que el texto no fue publicado en las gacetas para que fuese estudiado por los representantes. En este sentido, se aprobó una Ley en la Cámara de Representantes y posteriormente enviada al Senado que no fue estudiada a profundidad por parte de los Representantes. A partir de lo anterior, surgió entonces la necesidad de formular una nueva reforma tributaria 1 La República (2019): La Corte Constitucional declaró inexequible toda la Ley de Financiamiento. Disponible en: https://www.larepublica.co/especiales/apoyo-tributario/la-corte-constitucional-declaro-inexequible-toda-la-ley-definanciamiento-2921534
que replanteara algunos artículos y se incluyeran algunos nuevos, para ser tramitada en el Congreso. Así, uno de los debates y polémicas que ha desatado la Ley de Crecimiento radica en las exenciones y descuentos a la tributación de las empresas, con lo cual, según el gobierno nacional, se pretende incentivar la inversión privada y de esta forma, promover la generación de empleo. De acuerdo con lo contenido en la Ley, el senador Ritter López manifiesta estar en desacuerdo con la misma teniendo como motivo principal “su carácter regresivo en total contravía con lo consagrado en la constitución política. (Art. 363)”. Este articulo determina la equidad, la eficiencia y la progresividad como principios fundantes del sistema tributario. Por consiguiente, para el senador López el sistema tributario colombiano es ante todo ineficiente e inequitativo, y manifiesta que “esta inequidad, preocupante y profunda, tiene a Colombia en el segundo lugar en América Latina y en el séptimo en el mundo”. A su vez, sostiene que es una reforma que está pensada al corto plazo y tiene pretensiones meramente fiscalistas, y que contrario a las necesidades de recaudo de dineros para el funcionamiento del Estado, “se establecen unas exenciones de impuestos (de entre 9 y 10 billones de pesos), que más tarde tendrán que recuperarlas, por lo que se haría necesaria una nueva reforma”. Así, la generación de reformas tributarias pensadas en el corto plazo, pensadas sobre todo en producir exenciones de impuestos para grandes capitales, termina por hacer necesario la tramitación de nuevas reformas tributarias. Prueba de ello es que desde el año 1995 se han realizado 15 reformas tributarias con el objetivo de subsanar los déficits fiscales del Estado, no lográndolo y haciendo necesarias nuevas reformas. “Así, continúa una tendencia de crear exenciones tributarias para sectores específicos de la economía en vez de nivelar las reglas de juego para todas las empresas, y muchos académicos consideran que no se ha ofrecido justificaciones de peso para estas exenciones. Se desconoce el criterio con que fueron seleccionados los 70 sectores que componen la llamada “Economía Naranja” para otorgar los beneficios tributarios”. De este modo, para el senador López, esta reforma tributaria evidencia su
carácter inequitativo “hace parte de una estrategia del capitalismo neoliberal que ha fracasado en el mundo entero”, según por la cual, más que alivianar la crisis de desigualdad producida por la profundización de políticas neoliberales, lo que hace es fortalecerlas y agudizar estas brechas. Así, las consecuencias de las exenciones de impuestos generadas por la Ley de Financiamiento, a saber: “la posibilidad de descontar el 50% del ICA al impuesto a la renta, la disminución progresiva del impuesto a la renta, el descuento del 100 % del IVA a la importación de bienes de capital, la “normalización” tributaria, un régimen tributario especial por 20 años para mega inversiones mayores a 30 millones de UVT ($1 billón) en cualquier actividad industrial, comercial o de servicios que consiste en una tarifa preferencial del pago de 27% del impuesto de renta, las utilidades que se distribuyan no pagarán impuesto a los dividendos, al patrimonio”, serían dejar de recaudar entre 9 y 10 billones de pesos. En consecuencia, lo que produce la reducción y exención de impuestos a los grandes capitales según el senador López, es el aumento de impuestos a las personas del común y la reducción de los recursos públicos y, por ende, los servicios que buscan garantizar derechos económicos y sociales. De igual manera, si bien una de las intenciones de esta reforma es la reducción de impuestos para incentivar la generación de empleo, para el senador López, se ha demostrado estadísticamente que “ese modelo no genera empleo, no se constituye en redistribución del ingreso y una de las muestras es que cuando el crecimiento del país ha sido grande, la pobreza no se reduce ni baja el desempleo”. En relación con los tres días sin IVA planteados en la reforma, situados en algunos días del año en los meses de enero, julio y octubre, con el ánimo de facilitar compras a través de medios electrónicos -tarjetas débito o crédito-, el senador López menciona que “esta flexibilidad para aplazar o adelantar las compras se va reduciendo entre menores sean los ingresos del hogar, sobre todo porque no es factible que los hogares de menores ingresos aplacen en gran medida sus decisiones de compra. Es decir, ese ahorro es utópico y se daría principalmente, en hogares de mayores ingresos que son las que usualmente tienen acceso a pago electrónico”. Y de igual manera, afirma que
estudios realizados en Estados Unidos para el año 2017 “concluyeron que las exenciones no promueven el crecimiento económico ni aumentan las compras de los consumidores pues solo cambia el momento de las compras y algunos de los vendedores aumentan los precios de los productos justo en esos días sin IVA”. De esta manera, las exenciones en el IVA impactarían más a la población de altos ingresos que a la población con bajos ingresos en el país. De este modo, el senador López sostiene que para mejorar las condiciones económicas del país y de los colombianos en general es necesario “cambiar el modelo económico tan inequitativo. Durante décadas se ha legislado y se ha gobernado para las grandes élites políticas, para beneficiar a un menor porcentaje de la población. Esta inequidad demuestra lo equivocado y fallido del modelo económico”. Y en esta medida el Estado tiene la tarea de “reactivar el agro, estimular al campesinado, fortalecer las mipymes, apoyar la industria colombiana, gratuidad en la educación, ampliar sus cupos, robustecer el sistema de salud, garantizar empleo estables y formales con buenos salarios, entre otras”.