Un Pasquin — Edición 63

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E L PE R IÓDIC O DE L A O P O LÍTI CAM ENTE I N C O RR ECTO

Vladdo.— Cortesía de revista Semana

EDICIÓN 63 | MARZO, 2018 | VALOR: CIVIL

ADEMÁS [ENTREGA INMEDIATA] Correo Descertificado El regreso de Hassan Nassar al Canal RCN, la salida de Luis Carlos Vélez de Caracol Radio y más mensajes. por hermes pg. 2 || [CRÓNICA] Hans y Sophie Scholl: ejemplos de coraje civil. Los pétalos de la resistencia. por marc von lüpke pg. 8 || [ANÁLISIS] De por qué odiamos a las Farc (y no tanto a los paras). Las Farc se ganaron a pulso el rechazo de los colombianos; pero las atrocidades de los paras sólo generaron indiferencia. ¿Por qué? por alexandra garcía pg. 10


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Correo Descertificado POR HERMES n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN

Al reincorporarse a sus actividades, y después de ponerse al tanto de la situación, Arizmendi decidió tomar el toro por los cachos y convocó a su mesa de trabajo en pleno, para resolver el problema de raíz y sin dilaciones...

D I R E C T O R / P R O P I E T A R I O : vladimir flórez [ vladdo ] E N EST E N Ú M E RO:

Dibujan: Boligán, Elena Ospina, Fontanarrosa, Mheo y Pinto. || Caricaturas de Vladdo, cortesía de Semana. Escriben: Ricardo Sánchez Ángel, Mario Quadros, Angélica Suárez, Marc von Lüpke, Alexandra García, Erick C. Duncan, Olgahelena Fernández y Antonio Jiménez Castañeda. www.unpasquin.com || Mail: correo@unpasquin.com Twitter: @unpasquin Administración: Luz Myriam Flórez Asesoría Gráfica: Gustavo del Castillo D E R E C H O S R E S E R VA D O S © 2 0 1 8 N E W S A N D D E S I G N

E D I T O R I A L

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Malos presagios

a campaña para las elecciones al Congreso ha sido todo menos limpia, a pesar de los supuestos compromisos adquiridos por varios de los candidatos para adelantar un debate de altura. En las últimas semanas en los medios, en las tarimas y, sobre todo, en las redes sociales, hemos visto que las propuestas ideológicas han pasado a un segundo plano, opcacadas por un festival de agravios personales, zancadillas, falsas imputaciones, codazos, y todo un catálogo de bajezas, promovidas o toleradas por los dirigentes de las distintas organizaciones políticas. Lo peor es que esta oleada de ofensas y consignas para desacreditar a los rivales no va a terminar con las votaciones parlamentarias, sino que son apenas el abrebocas de lo que será la carrera por la presidencia. Lo deseable sería que las discusiones se llevaran a cabo a partir de la confrontación de las ideas, pero estamos todavía muy lejos de una contorversia civilizada y, salvo muy contadas excepciones, lo que se impone es la distorsión de los mensajes del adversario y los golpes bajos; es decir, la antigua e indeseable estrategia del todo vale. Así que, señoras, señores, abróchense bien los cinturones.

[DÍAS DE RADIO] Luego de dos años como director de La FM, de RCN, Hassan Nassar vuelve a la televisión; esta vez al Canal RCN, medio en el cual ya había trabajado y donde ahora se enfrenta a un nuevo desafío, como director de la franja mañanera... Hassan debutó en televisión en el Canal NTN24 como panelista invitado del programa La mañana y luego fue director de Zoom a la noticia; antes de pasar por Cablenoticias y Red Más TV, canales donde tuvo su propio programa de opinión hasta 2016, cuando asumió la dirección de La FM, en reemplazo de Vicky Dávila... Por estos días Hassan y el equipo creativo y de contenidos del canal están dedicados a conformar su nómina de trabajo para armar un programa que mezcle información y entretenimiento, al estilo de los espacios gringos, como Good Morning, America... Lo que falta saber es qué va a pasar con el ‘Gordito’, como cariñosmaente llaman al veterano presentador J. Mario Valencia.

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[MÁS DEL DIAL] Como reemplazo del combativo Hassan, las directivas de la Organización Ardila nombraron en La FM a Luis Carlos Vélez, quien está que no se cambia por nadie, desde el aterrizaje en esa emisora, el pasado 26 de febrero... La nueva chanfa fue un salvavidas para Vélez, tras su accidentado paso por Caracol Radio, de donde salió en forma intempestiva, luego de protagonizar varios impasses, no sólo con sus compañeros, sino con su propio jefe, Darío Arizmendi... Durante mucho tiempo, Luis Carlos contó con el respaldo del director de 6:00 AM, quien pasó por alto varias metidas de pata del delfín de Carlos Antonio Vélez. Incluso, en noviembre pasado, cuando Arizmendi salió a vacaciones y viajó al exterior lo dejó a cargo del programa... y ahí fue Troya... Aunque tuvo una serie de roces con sus colegas de Caracol Radio, la gota que rebosó la copa fue el poco disimulado interés del joven Vélez por conocer los detalles de la expiración del contrato de Darío Arizmendi...

Ilustración de Angel Boligán, El Universal, México / www.caglecartoons.com

En una reunión inusualmente tensa –pues Darío es un hombre jovial y de muy buenas maneras, que pocas veces se ofusca–, le dijo a su equipo que le parecía lógico que algunos de ellos quisieran sucederlo, una vez se retirara de Caracol... Sin embargo, aclaró que aunque algunos ya hablaran de su jubilación él tenía un contrato vigente con el Grupo Prisa y –en referencia directa a Luis Carlos– fue muy categórico al decir que no iba a permitir que ninguno de sus colaboradores le hiciera el cajón... De ese modo quedó sellada la suerte de Vélez, quien días después fue notificado del final de su vinculación con Caracol Radio... No obstante, con RCN a Luis Carlos se le apareció la Virgen, pues gracias a su contrato podrá compaginar el trabajo con su vida familiar. De hecho, todos los fines de semana podrá visitar a su esposa y a su pequeña hija, que siguen radicadas en Miami, a la espera de la visa de residentes en Estados Unidos.

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[OTRA DE MEDIOS] Juan David Correa dejó la dirección de la revista Arcadia, para convertirse en director editorial de Editorial Planeta para la Región Andina. Su reemplazo será Camilo Jiménez, quien regresa a Publicaciones Semana, luego de poco más de un año como director de Vice Colombia.

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[SIN EXPERIENCIA] A mediados de 2006, cuando Álvaro Uribe le ofreció el cargo de canciller a María Consuelo Araujo, la joven exministra no cabía de la felicidad, a pesar de que era novata en el tema. De hecho, esa noche la ‘Conchi’ no pudo pegar pestaña y como a las tres de la mañana, en medio de la desvelada, decidió llamar a su padre y consejero, el exministro Álvaro Araujo, para ponerlo al tanto y conocer su opinión. Sin inmutarse, este le dijo: “No te preocupes; mañana te regalo un mapa mundi”... Ahora algunos se preguntaban qué habrá ocurrido el mes pasado, cuando el alcalde Enrique Peñalosa la nombró gerente de Transmilenio; pues su experiencia en temas de transporte y movilidad es tan nula como lo era en el año 2006 su trayectoria diplomática. ¿Qué le habrá obsequiado en esta ocasión su consejero de cabecera? ¿Una pista de Lego?


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Jugar como bombero y no como incendiario

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no de los imaginarios creados como sicología de masas y referente político acerca de la diáspora venezolana, es que han llegado unos depredadores de la riqueza y el empleo colombiano. Con los venezolanos, se dice, llegó mayor delincuencia y peligro. Hay una sensación de miedo y se generaliza la consigna “cuidado con los venecos”, despojándolos así de su dignidad. Toda una construcción de posverdad. La frontera colombo-venezolana tiene 2.219 kilómetros, con 280 pasos libres. Además de Cúcuta, forman parte de esa frontera 53 municipios en 7 departamentos, con grandes contrastes socioculturales arropados por la pertenencia a Colombia. Es una frontera permeada por flujos migratorios desde hace décadas y por una circularidad de poblaciones entre los dos países. Las fronteras no son solo conglomerados humanos en movimiento y lugares de intercambio comercial. En nuestro caso, como en otras partes del mundo, se dan allí despliegues militares, donde se suele hacer algo más que ruido de sables y de aviones. En los actuales momentos, están creciendo las tensiones y aumentando la militarización. Se está jugando con candela. En la actual campaña electoral se está llamando al golpe de Estado, postura que se fortaleció con el pronunciamiento, en la misma dirección, por parte del secretario de Estado Rex Tillerson, en su reciente gira por varios países, incluyendo Colombia. Y en las declaraciones públicas del presidente Juan Manuel Santos ante el procónsul de los Estados Unidos, demandando la intervención de la gran potencia, más allá del bloqueo económico y de la ofensiva mediática. Venezuela vive duras dificultades, EL ÉXODO COLOMBIANO por el desabastecimiento de alimentos, AL PAÍS VECINO VIENE drogas y otros productos básicos, en raDESDE LOS AÑOS 50 zón al fracaso del modelo extractivista y AL COMENZAR LA una fallida política económica, además VIOLENCIA. del bloqueo a la economía de consumo masivo. El país hermano padece una asfixia, y ve deterioradas las reformas sociales, el activo más preciado y la base del apoyo popular. A esto se suma la violencia, de tanto en tanto, generada en las calles por parte de grupos extremistas, causando muertos y zozobra, con una represión por parte de las fuerzas armadas que aumenta la espiral de violencia. Aunque al final gana el orden establecido, el costo humano es demasiado alto. Es en este contexto que se da el creciente éxodo hacia Colombia, alrededor de 600 mil personas. Hasta el 31 de diciembre de 2016, era del 65% de colombianos, la mayoría con doble nacionalidad, retornando a su país. Este porcentaje se invirtió para 2017, al ser mayoría los migrantes venezolanos. Hay que tener en cuenta que Colombia es un lugar de paso hacia Ecuador, Perú, Chile, Argentina y otros países. El éxodo colombiano al país vecino viene desde los años 50 al comenzar La Violencia, alcanzando en la actualidad las 5 millones de personas. La acción de solidaridad debe responder a criterios estrictos de procurar una estadía con dignidad. La verdad es que el gobierno está improvisando, mezclando intereses políticos antagónicos en la región, que no se compadece con la situación de estos condenados de la tierra. Al igual, hay que exigirle al gobierno de Nicolás Maduro la prudencia, abstenerse del uso político del problema contra Colombia. Hay que coordinar entre los gobiernos de aquí y allá, a través de las Naciones Unidas, la acción humanitaria. No es hora de despliegues nacionalistas.

Los ministros de Defensa, Villegas y Padrino, han retomado el diálogo, que debe ser realista en sus conclusiones. Esto es saludable y contrasta con la postura del Grupo de Lima, del cual forma parte Colombia, de excluir al presidente Maduro de la Cumbre de las Américas. De parte de Colombia, sería sensato retomar el curso de su diplomacia, como potencia moral y pacífica, sumándose a la negociación que encabezan el presidente de República Dominicana y el ex presidente español Rodríguez Zapatero. Colombia debe jugar como bombero y no como incendiario. Colombia y Venezuela tienen un origen común en la independencia y la República, cuyos hilos de unidad han estimulado la colaboración con respeto. Son pueblos que saben que los enfrentamientos entre sus Estados debilitan sus energías y disminuyen su creatividad. La divisa de la fraternidad no es un trapo rojo en desuso. Hay que izarla, bien alto, como bandera aquí y allá. Ricardo Sánchez Ángel es doctor en Historia de la Universidad Nacional.

Ilustración de Angel Boligán, El Universal, México / www.caglecartoons.com

OPINIÓN | RICARDO SÁNCHEZ ÁNGEL

n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN


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¿Cuál es la pendejada con Rusia?

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ebo reconocer que el gran complot contra Trump avanza y un Golpe Blanco parece empezar a configurarse en los Estados Unidos. El Presidente pierde control y el llamado “deep state” asume algunas de las políticas del Estado. El Profesor de Política Rusa de Boston College Gerald Easter llama atención al hecho de como a Trump se le ha impedido mejorar las relaciones con Rusia, una promesa de su campaña que va en contra de los intereses de los órganos de seguridad y del establishment occidental. Agrega el profesor que una alianza informal bipartidista CNN Y EL NEW YORK TIMES y las lideranzas militares y de OMITEN EL PRONTUARIO DE inteligencia han asumido el INJERENCIA DE LOS ESTADOS comando de esa política. UNIDOS EN ELECCIONES Y Las nuevas sanciones imGOLPES DE ESTADO. puestas por el Congreso a Rusia y la autorización de la venta de armas letales al gobierno de Ucrania son actos hostiles contra Rusia y contrarias a la política de Trump hacia ese país. Sobre las sanciones, Trump aún mantiene el poder de dilatar su implementación y eso está haciendo a través de su Secretario del Tesoro y del Departamento de Estado. Ambas decisiones pasarán desapercibidas, supongo que por la dificultad de asimilar cómo un Presidente de los Estados Unidos puede ser ignorado y atropellado. La prensa, parte activa de ese complot, también se encargó de dar poca importancia o de analizar el verdadero significado de esos hechos. Por otro flanco, el “deep state” continúa atacando a Rusia y a Trump. El exdirector del FBI y Fiscal Especial acusó a 13 rusos de interferir en las elecciones presidenciales a través de redes sociales, a favor de Trump. No obstante, no vi en la acusación ninguna referencia al

gobierno de Rusia. Trump respondió agresivamente a ese ataque a través de su Twitter acusando al FBI de ser negligente en relación al joven de 19 años que asesinó a 14 niños en la Florida. Afirmó que ese órgano de seguridad está más preocupado en probar la conexión de su campaña con Rusia que proteger al pueblo. Un ambiente de guerra. Interesante observar que CNN y el New York Times, en sus publicaciones y noticieros, omiten de forma flagrantemente ostensiva y sutilmente agresiva el prontuario de injerencia de los Estados Unidos en elecciones y promoción de golpes de Estado. Una cosa tan importante pero tratada como si Estados Unidos fuera la gran víctima y al mismo tiempo la “Madre Teresa de Calcuta” en la implementación de su política externa, como dijo alguna vez el embajador ruso en la ONU. La publicación de artículos o comentarios en TV que denuncian la verdadera realidad de ese tema es muy rara. En dos años conozco apenas dos del New York Times: el escrito por el profesor chileno/americano Ariel Dorfman de la Universidad de Duke y publicado el 16 de diciembre de 2016. Su título dice mucho, “Now, America, You Know How the Chileans Felt”. Y el segundo es del 17 de febrero de 2018 y trae esa perla: “Si le preguntas a un oficial de inteligencia si los rusos violaron las reglas o hicieron algo extraño, la respuesta es no, para nada”, dijo Steven L. Hall, quien se retiró en 2015 después de 30 años en la CIA, donde fue el jefe de operaciones rusas. Estados Unidos “absolutamente” ha llevado a cabo históricamente tales operaciones de influencia electoral, dijo, “y espero que sigamos haciéndolo”. Concluyendo y perdónenme las palabras porque no hay mejores: ¿Cuál es la pendejada con Rusia? O mejor: ¿Cuál es la pendejada con Putin? Mario Quadros es Ingeniero Civil Comentarios: mtquadros@gmail.com.

Ilustración de Elena Ospina

OPINIÓN | MARIO QUADROS

n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN



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Todos los desaparecidos

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n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN n un lugar desconocido, a lo largo del territorio nacional, hoy día, un hijo, una madre, un padre, un ser amado ha desparecido y detrás, el corazón delator de un victimario, ahí sin más, latente y la verdad total que todas las víctimas (civiles y militares) esperan, el cómo, quién, cuándo sucedieron los hechos y dónde está su ser querido. En medio de la nébula de la desaparición, las cifras también son confusas, en el Registro Nacional de Desaparecidos (RND-Medicina Legal) se reportan a diario un promedio de 20 personas desaparecidas, con un registro de 91.362 personas desaparecidas, y de manera forzada 26.871 (2018), en contraste con los datos del Centro de Memoria Histórica (CNMH) con 60.630 víctimas (2018). Los antecedentes y el presente de la violencia, pobreza y conflicto armado, son evidencia de estos datos. Así las cosas, la desaparición forzada es uno de los hechos criminales que producen más dolor por el enorme vacío que deja en la sociedad y familiares, y su valor simbólico, con carácter de opresión social; es uno de los aparatos del poder más brutales, que en su actuar victimiza a centenares de personas, violador rampante de los derechos humanos, su incidencia mella todo el tejido social. Desaparecer a una persona, es quitarle su identidad, su razón de ser frente a la vida, implica borrar su carácter existente, su individualidad, se usurpan sus derechos y su proyecto de vida. En consecuencia, la dignidad también se pierde, con eco de ausencia en las familias, en su identidad, espiritualidad y unión, incluso en su relación con la tierra, que muchas veces también es despojada por el mismo agente que es causa de las desapariciones, o por su contraparte en el conflicto; el lugar de la tierra que les unía y sus recuerdos, igualmente son arrebatados. La desaparición aparta a las personas del marco legal de protección, es la aplicación de una tortura masiva, ya elevada al nivel de herramienta en la guerra psicológica, que durante décadas se instaló en Colombia, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha considerado violado el derecho a la integridad psíquica y moral de familiares de víctimas con motivo del sufrimiento adicional que éstos han padecido a causa de las posteriores actuaciones u omisiones de las autoridades estatales frente a los hechos de la desaparición (Caso Blake vs. Guatemala, 1998). En consecuencia, la ausencia de recursos efectivos y su aplicación, ha sido entendida por esta Corte como fuente de sufrimiento y angustia adicionales para las víctimas y sus familiares (Caso Anzualdo Castro vs. Perú, 2009), por tal razón, negar cualquier procedimiento es causa de re victimización. Es por ello, que hablar de una verdad completa sin dilaciones, implica además abarcar a todas las víctimas, el CNMH – Hasta Encontrarlos (2016), expresó que entre ellas están las víctimas de la Fuerza Pública por las acciones del conflicto y secuestros convertidos en desapariciones, que se estiman en un 10.8% de las 5.231 víctimas registradas por ocupación en las que incluyen a miembros de las guerrillas y paramilitares, por otra parte, los datos suministrados por el Ministerio de Defensa - Ejército (2018), registran sus desaparecidos de la siguiente manera: la Armada Nacional 480, Ejército Nacional 4.919, Fuerza Aérea 79, Ministerio de Defensa 3, Policía Nacional 371, para un total 5.852, números que complementan la necesidad de una vista en conjunto de todas las víctimas para dar efectividad a políticas enmarcadas en las leyes sobre la búsqueda de todos los

desaparecidos en igualdad de condiciones. También que, como institucionalidad, se responda de manera completa las solicitudes de las organizaciones de víctimas con la entrega de expedientes y documentos que necesitan los familiares de las víctimas para esclarecer los hechos de desaparición, como un acto de responsabilidad frente a la verdad, tanto para civiles como para los militares. Finalmente, hay que reconocer que existe un marco normativo interno que garantiza la prevención, sanción y erradicación de la práctica de la desaparición forzada de personas en Colombia, contemplando asimismo medidas concretas junto con la Fiscalía, Medicina Legal y la LA DESAPARICIÓN APARTA A recién creada Unidad de PerLAS PERSONAS DEL MARCO sonas Desaparecidas, con meLEGAL DE PROTECCIÓN, didas de protección, derecho a ES LA APLICACIÓN DE UNA la verdad, justicia y reparación TORTURA MASIVA. integral del daño a las víctimas de este delito y que como objetivo busca acabar con la impunidad de los perpetradores incluida en los Acuerdos de Paz. Aún hay un gran trabajo de identificación sobre víctimas históricas y futuras que necesitan visibilidad y empatía por parte de quienes atienden los problemas directos e indirectos de estos hechos victimizantes, todo ello para no agregar más dolor a los familiares de las víctimas que se encuentran buscando a sus seres queridos que en su corazón esperan que estén vivos. Angélica Suárez es abogada consultora en DDHH.

Ilustración de Marco Pinto

OPINIÓN | ANGÉLICA SUÁREZ


VOTA


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Hans y Sophie Scholl: ejemplos de coraje civil Hace 75 años, los hermanos Scholl fueron detenidos y ejecutados. Eran estudiantes y luchaban en la resistencia contra el régimen nazi. Hasta hoy son considerados ejemplos de valentía y generosidad. CRÓNICA | MARC VON LÜPKE

n CORTESÍA DE DW EN ESPAÑOL

E

l 15 de febrero de 1943, poco antes de la medianoche, tres jóvenes caminaban hacia el centro de la ciudad de Múnich. Eran Hans Scholl, Alexander Schmorell y Willi Graf, y los tres pertenecían al grupo “Weiße Rose” (La rosa blanca), que luchaba en la resistencia contra Adolf Hitler y su régimen. Por eso llevaban consigo miles de volantes que denunciaban con palabras claras la dictadura nazi y sus crímenes. Pero Scholl y Schmorell tenían una idea aún mejor: protegidos por la oscuridad escribieron “Abajo Hitler” en negro sobre la fachada de la cancillería bávara, además de “Hitler genocida”. En su casa de la calle FranzJoseph-Straße 13, Sophie, la hermana menor de Hans Scholl, esperaba el regreso de los tres jóvenes. Cuando los nazis tomaron el poder, en 1933, Hans y Sophie Scholl vivían con su familia en la tranquila ciudad de Ulm. Ambos iban todavía

a la escuela. Hans nació en 1919 y su hermana, Sophie, en 1921. Eran cinco hermanos, y Robert Scholl, el padre, se ganaba la vida como asesor fiscal. De tendencia liberal, Scholl no estaba de acuerdo con el régimen nacionalsocialista. Junto con su esposa, Magdalena, trató de educar a sus hijos en el marco de la moral y la tolerancia cristianas. Pero sus hijos estaban fascinados con el nazismo. La “Juventud Hitleriana” acogió a Hans Scholl, que hizo carrera allí rápidamente. A los 16 años ya comandaba a 160 jóvenes de Hitler. Al igual que él, su hermana menor, Sophie, simpatizaba con los nazis e ingresó a la “Asociación de Muchachas Alemanas”, la rama femenina del movimiento juvenil nazi. También llegó pronto a ocupar una po-

n La plaza del hall central de la Universidad de Múnich está dedicada a Hans y Sophie Scholl; y en el piso hay incrustadas réplicas de los panfletos de La rosa blanca, así como del veredicto con su sentencia de muerte.

sición de liderazgo y, según un testigo de la época, “estaba entusiasmada y era fanática del nacionalsocialismo”. Pero en 1942, Hans y Sophie Scholl ya no creían en Hitler. Los hermanos notaban cada vez más que su fe cristiana y sus convicciones éticas no correspondían con los objetivos del régimen nazi. Hans Scholl llegó a la conclusión de que debía hacer algo contra la dic-

tadura criminal de Hitler. En 1942 fue llamado a luchar en el frente oriental. Allí vio con sus propios ojos la crueldad de la guerra. Además, lo preocupaba profundamente el destino de los judíos perseguidos y deportados.

“¡Viva la libertad!” En la Universidad de Múnich se había formado en 1942 un pequeño grupo en torno a Hans Scholl que le había declarado la guerra al nazismo. Además de los cuatro estudiantes de medicina Hans Scholl, Christoph Propst, Alexander Schmorell y Willi Graf, también el profesor de filosofía Kurt Huber se unió al grupo. Sophie Scholl los siguió en mayo de 1942, cuando se mudó a Múnich para estudiar Biología y Filosofía. El grupo enviaba sus panfletos, los “Volantes de La rosa blanca”, por correo, los repartía en casetas de teléfono o sobre los autos aparcados en la calle. Pero los volantes se difundieron, a través de amigos y conocidos, más allá de Múnich, llegando también a su ciudad natal, Ulm. “Cada palabra que sale de la boca de Hitler es mentira”: era el sexto volante de La rosa blanca e iba a ser el último. El 18 de febrero


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n Hans Scholl, Sophie Scholl y Christoph Probst en Múnich, en 1942.

“Nada es tan indigno de una nación como el permitir que sea gobernada sin oposición por una casta que ha cedido a los bajos instintos”: —Hans Scholl y Alexander Schmorell

de 1943, Sophie repartió, junto con su hermano Hans, los folletos en la Universidad, y cuando ambos ya los habían repartido en los lugares más importantes, Sophie Scholl decidió subir las escaleras hasta lo alto del atrio y lanzar los últimos folletos sobre los estudiantes. Allí fue vista por un conserje que era miembro del partido nazi, quien la delató. Los hermanos fueron detenidos y agentes de la Gestapo los sometieron a interrogatorio. Incluso en esa situación desesperada, Hans y Sophie Scholl demostraron valentía diciéndoles en plena cara que “no querían tener nada que ver con el nazismo”. El peso de las pruebas era aplastante. El 22 de febrero de 1943, el denominado “Tribunal Popular” (Volksgerichtshof), bajo la presidencia de Ronald Freisler, emitió tres sen-

tencias de muerte contra Hans Scholl, Sophie Scholl y Christoph Propst. Ese mismo día fueron ejecutados. Las últimas palabras de Hans Scholl fueron: “¡Viva la libertad!”.

Ejemplos de moral “Ellos nos hacen pensar que no todos los alemanes de esa época eran colaboradores mudos y cobardes del régimen nazi”. Así resumió en 2013 el entonces presidente alemán Joachim Gauck la importancia de los hermanos Scholl y del movimiento La rosa blanca. En el cuarto folleto escribieron: “No callaremos. Somos su mala conciencia. ¡La rosa blanca no los dejará en paz!”. Esas palabras siguen teniendo validez hasta ahora. Los hermanos Scholl y sus amigos tuvieron el valor de luchar por sus convicciones y oponer resistencia al nazismo. Así de valientes eran solo pocas personas en esa época. Hasta hoy, los hermanos Scholl siguen siendo honrados por su valentía. Casi todas las ciudades alemanas cuentan con una escuela que lleva su nombre, y Hans y Sophie están presentes en los nombres de las calles y las plazas del país. El “Premio de los Hermanos Scholl” es uno de los premios más relevantes de la literatura alemana.

A contracorriente Con la caída de la Alemania Nazi, La rosa blanca pasó a representar la oposición a la tiranía en la psique alemana, al no haber tenido interés en un poder personal o un autoengrandecimiento. La plaza del hall central de la Universidad de Múnich fue rebautizada “GeschwisterScholl-Platz”, en recuerdo de Hans y Sophie Scholl; y la plaza contigua, “Professor-Huber-Platz.” Varias calles y lugares en toda Alemania recibieron nombres en memoria de los miembros de La rosa blanca y 200 escuelas alemanas llevan el nombre de los Scholl. Las actividades del grupo han sido tema de dos películas alemanas: Die weiße Rose, de 1982, dirigida por Michael Verhoeven, y presentada en Estados Unidos como The White Rose; y Sophie Scholl. Die letzten Tage [Sophie Scholl. Los últimos días] de 2005, dirigida por Marc Rothemund. “La rosa blanca es una página radiante en los anales del Siglo XX. El coraje de nadar contra la corriente de la opinión pública, aun cuando fuera equivalente a un acto de alta traición, y el convencimiento de que la muerte no era un precio demasiado alto a pagar por seguir los dictados de la conciencia”, escribe Clara Zimmerman en La rosa blanca: su legado y su desafío.


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De por qué odiamos a las Farc (y no tanto a los paras) Las Farc se ganaron a pulso el rechazo de los colombianos. La pregunta es por qué las atrocidades de los paras sólo generaron indiferencia. Aquí parte de la respuesta. ANÁLISIS | POR ALEXANDRA GARCÍA

n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN

A

demás de la ‘ideología de género’ y el ‘castrochavismo’, uno de los motores del NO es el odio visceral que los colombianos sentimos hacia las FARC. La inmensa mayoría de los colombianos dijo NO (sea por actuación o por omisión) a un acuerdo que pondría freno al derramamiento de sangre. Lo irónico es que en el 2002 elegimos un presidente que ofreció a los paramilitares un acuerdo con condiciones mucho más laxas que las establecidas en las 297 páginas del documento de la Habana. (Las penas de hasta 8 años de

cárcel fueron introducidas por la Corte Constitucional). Para su aprobación no se requirió plebiscito, ni hubo protestas o marchas en su contra. Si preguntamos al colombiano de a pie qué grupo es responsable por más muertes en el conflicto, la mayoría responderá que las FARC. De hecho, ya esto se ha preguntado. También se preguntó a los colombianos si ‘el paramilitarismo era un mal necesario’. Casi el 40% respondió que sí. Imagínense ustedes si se le preguntara a la gente de Francia si ISIS es un mal necesario. Pero ¿qué nos dicen las estadísticas? La siguiente gráfica ilustra el número de víctimas por cada grupo (guerrillas en

rojo, paramilitares en azul) durante el período 1998-2006. Las cifras son del Centro Nacional de Memoria Histórica. Es decir que la percepción del conflicto que tiene la mayoría de los colombianos, quienes no han sido víctimas, es completamente opuesta a lo que las estadísticas demuestran. La mayoría de los colombianos sólo hemos vivido el conflicto a través de los medios. Entonces, es posible que esta percepción errada tenga algo que ver con la manera como los medios construyen el conflicto. Para mi tesis doctoral, analicé más de 500 reportes de hechos violentos cometidos por guerrilleros y paramilitares entre 1998 y 2006. Escogí los cuatro pe-

VÍCTIMAS POR TIPO DE ACCIÓN n Guerrilla

VÍCTIMAS POR ACTOR Guerrilla

n Paramilitares

4500

2000

4000

1800

Paramilitares

1600

NÚMERO DE VICTIMAS

3500 3000 2500 2000 1500

1400 1200 1000 800 600 400

1000

200

500 0

riódicos principales del país: El Tiempo, El Colombiano, El País y El Heraldo. (El Espectador no fue escogido ya que era un semanario durante gran parte del período en estudio). Para seleccionar las noticias, utilicé la información en bases de datos como el CINEP, el CERAC o el Observatorio de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, para verificar la autoría del hecho. Por ejemplo, el infame caso del collar-bomba, tan utilizado en los memes de la campaña del NO, no fue incluido ya que sus autores fueron delincuentes comunes. Seleccioné un porcentaje de eventos con mayor número de víctimas (e.g. El Salado, Bojayá, La Gabarra) y también crímenes representativos de las poblaciones vulnerables (periodistas, sindicalistas, líderes comunitarios, defensores de derechos humanos). Las noticias fueron divididas en dos períodos: 1 – 1998-2002 y 2 – 2002-2006 y por actor. Así entonces, el corpus (colección de textos) fue subdividido en G1, P1, G2 y P2, donde la inicial representa el actor (G para Guerrilla y P para paramilitares) y el número, el período. Al comparar los datos, es evidente que la prensa recurre a estrategias lingüísticas para aminorar u ocultar la responsabilidad de los paramilitares en los hechos violentos y resaltar la de la guerrilla. Esta tendencia aumenta durante el período 2002 al 2006. Los datos que voy a presentar a continuación están basados en un estricto análisis cuantitativo y estadístico. Todos los resultados presentados son estadísticamente significativos, es decir que podemos decir por lo menos con un 95% de certeza que no son resultado del azar. En muchos casos la certeza estadística es de más del 99.99% Una de las estrategias más obvias es evitar utilizar nombrar a los paramilitares en las noticias. Se recurre entonces a expresiones como ‘hombres armados’, ‘encapuchados’, ‘los asesinos’, etc. Los re-

0 Terrorismo

Bélicas

Fuente: Centro Nacional de Memoria Histórica

Asesinatos  selectivos

Masacres

1998

1999

2000

2001

2002 AÑO

Fuente: Centro Nacional de Memoria Histórica

2003

2004

2005

2006


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n Diferencias en titulares de prensa de guerrilla y paramilitares. portes de la guerrilla, por el contrario, se caracterizan por la nominación específica de los participantes (e.g. guerrilleros del frente 37 de las Farc), y por la alta frecuencia con la que se mencionan a través del texto. Esta diferencia es especialmente notoria en los titulares. También se recurre a la nominalización o a la voz pasiva para ocultar el actor del hecho (e.g. la masacre fue cometida en el municipio de…). De hecho, de todas las instancias en las que aparece el verbo ‘asesinar’ en el corpus (la colección de textos) de los paramilitares, sólo en menos del 25% se identifica a estos como los autores, lo cual contrasta con el 60% en las noticias de la guerrilla. En uno de cada ocho (8) casos en que los paras son identificados como los asesinos, se utilizan expresiones que ponen en duda la autoría del hecho, por ejemplo ‘al parecer’, ‘presuntamente’, ‘presuntos’. En cambio en G1, estas expresiones aparecen una vez cada 42 instancias. Además de ‘asesinar’, existen otras expresiones para denotar este crimen.

Algunas intensifican la negatividad del hecho, al ser más gráficas, indicando la causa de muerte de la víctima, por ejemplo: descuartizar, degollar, ahorcar, decapitar. Estas fueron más frecuentes en el G2. Por el contrario, expresiones que separan a la víctima del núcleo de la acción o eliminan al actor que causa la muerte (morir, costar la vida, dar muerte, causar la muerte) fueron más frecuentes en el P2.

Muchos hemos escuchado que el reporte periodístico debe ser ‘objetivo’, libre de juicios de valor como por ejemplo ‘procedieron a asesinar a los presentes de manera brutal e indiscriminada’. Compilé una lista de más de 200 términos incluyendo por ejemplo ‘salvajes’, ‘satánicos’, ‘sangriento’, ‘maldito’. La gráfica Valoración- Juicio ilustra la diferencia en el número de términos utilizado en cada corpus.

VALORACIÓN-JUICIO Diferencia en el uso del número de términos: “Procedieron a asesinar a los presentes de manera brutal e indiscriminada en noticias sobre guerrilla (G2) y sobre paramilitares (P2)

G2 P2

RESPONSABLES DE LA VIOLENCIA EN COLOMBIA ENCUESTA DE PERCEPCIÓN

¿Quién tiene más responsabilidad de la violencia que ha vivido Colombia en los últimos años? RM MUESTRA ALEATORIA REPRESENTATIVA n Total Población General 32%

La guerrilla Todos nosotros los colombianos

7%

Los paramilitares

6% 1%

8%

1%

24% 37%

9% 5%

5% 1%

6%

23%

10%

3%

n Expertos

14%

16%

9%

11%

23%

29%

16%

10%

La delincuencia común

31%

23%

16%

Los narcotraficantes

MUESTRA EXPLORATORIA n Víctimas organizadas

n No afectados

37%

28%

El gobierno

Otros

n Afectados (víctimas)

12% 1%

24% 2%

15% 5%

TOTAL MUESTRA (NÚMERO DE ENCUESTAS): Población general: 1.843, Víctimas organizadas: 304, Expertos: 138. La muestra de Población General representa 8.514.987 hogares

Podría atiborrarlos de estadísticas hasta el cansancio, pero prefiero enfocarme en un último punto: la construcción de las víctimas. En los textos del corpus de los paramilitares, en muchas ocasiones las víctimas son reducidas a un número (e.g. ‘Matan a 7 en Zambrano’) o identificadas como simplemente ‘personas’. De hecho esta última es la palabra más frecuente en el corpus. Por el contrario, en el corpus de la guerrilla, a las víctimas se les presenta en muchas ocasiones como seres humanos con sueños y aspiraciones, con familias y dolientes. Uno de los casos que se quedó conmigo durante esta investigación fue el de Angy, una bebé de 23 días de nacida que murió en los brazos de su madre mientras huía del fuego cruzado entre paramilitares y guerrilleros en el Nudo del Paramillo. Cuando escribía el capítulo final de mi tesis, cargaba a mi hija recién nacida en brazos, y no podía sacarme de la cabeza a la pobre Betty, quien tenía que sobrevivir con el dolor de no volver a sentir a su bebé en su pecho. Yo no sé si de pasar por lo mismo, sería capaz de perdonar, pero quienes lo han sufrido, como las madres de Bojayá, lo hicieron. No porque las Farc sean merecedoras de su perdón, sino porque no quieren que nadie más sufra como ellas el dolor de perder a un hijo. Esa nobleza de espíritu es lo que a mí parecer debería primar a la hora de renegociar los acuerdos. Ya lo dijo Alan Jara, secuestrado por 7 años por las Farc: “A mí no me sirve que mi secuestrador se pudra en la cárcel, a mí me sirve que no haya más secuestros”. En búsqueda de justicia, estamos arriesgando la vida de muchos colombianos. Si ya hemos perdonado (o ignorado) los crímenes de unos, si las víctimas han perdonado a sus victimarios, es hora de que el resto de colombianos pensemos en las vidas que podemos salvar. Alexandra García es PhD en lingüística de Macquarie University.


12 ~ MARZO DE 2018

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Imaginarios alzados en armas

D

elicado es, quizá, el rotulo más oportuno para referirnos a los imaginarios que en Colombia tenemos sobre el conflicto, sus protagonistas, modos de violencia y, también, sus cifras. El cinismo que subyace a una mirada, a un cierto discurso de un amplio sector de la población que al día de hoy, por ignorancia o por astucia, sigue validando un escabroso repertorio de violencia: el del paramilitarismo. Marcadas líneas editoriales de importantes medios de comunicación han podido contribuir a esta deformación de la verdad histórica y de la memoria del país; medios donde el periodismo se ha ejercido sin el equilibrio ético que acompaña, por principio, a la profesión del comunicador; así las cosas, la construcción de nuestra historia y los actos de memoria penden de un acto de fe, de la voluntad sana que debería tener toda ciudadanía por estar informada. No son pocos los académicos que, con justicia, han pedido discreción y prudencia para la elaboración de nuestras memorias del conflicto y sin embargo algunas cifras y datos de contexto saltan a la vista como la irrupción del color escarlata. No basta con que repudiemos con fuerza las acciones de bandolero de las guerrillas si dejamos encallada en las aguas turbias del olvido el horror que significó el fenómeno paramilitar, sus dinámicas y las lógicas que lo hicieron posible. Es necesario para la salud mental del país revivir el contexto que dio lugar al exterminio sistemático de los campesinos, de los sindicatos y de los estudiantes: el mismo contexto que logró que nuestros mejores hombres se exiliaran, como García Márquez, y que otros murieran atragantados en la mitad de una comida nocturna, como Feliza Bursztyn. La mayoría de los colombianos al día de hoy no solo desconoce la existencia de algunos de los indicadores que más vergüenza debieron causarnos, como el hecho de que el país ocupara el primer lugar en número de desplazados internos en el mundo y que el coeficiente GINI estuviera entre los diez peores, sino que también ignoran la nefasta influencia de doctrinas y formas de pensamiento que permearon a fondo importantes instituciones como lo fue la Doctrina de Seguridad Nacional, una variante de la doctrina estadounidense de lucha internacional contra la Unión Soviética y el comunismo que en Latinoamérica se plasmó en el auge de dictaduras militares cuyo deber principal era combatir al enemigo interno. Lo que quedó consignado en los manuales de contrainsurgencia del ejército Colombiano entre 1962 y 1987 explica sin la necesidad de recurrir a adjetivos parte del horror que vivieron las personas excluidas de esa concepción del mundo y del país. La labor de hormigas de los recolectores de memoria de algunos de los principales centros de investigación de Colombia, como el Cinep, revelaron algo de la oscuridad que acompañó tales manuales de contrainsurgencia: la tesis en común esgrime que la guerra moderna consistía en enfrentarse “a una organización establecida en el mismo seno de la población” (Manual de 1963), o de que “en la población civil se fundamenta la existencia de los grupos subversivos” (Manuales de 1979 y 1987). En estos manuales también quedó consignada la tesis de que los estudiantes indignados, los obreros, los empleados públicos, los campesinos, intelectuales y artistas en oposición al régimen del momento no eran otra cosa que un brazo desarmado de la insurgencia. En el informe Basta ya, del Centro Nacional de Memoria Histórica se dice que “la violencia contra la integridad física es el rasgo distintivo de la violencia paramilitar mientras que la violencia contra la libertad y los bienes

define la violencia guerrillera. En pocas palabras los paramilitares asesinaron más que las guerrillas y los guerrilleros secuestraron más y causaron mayor destrucción que los paramilitares”. Y las cifras están respaldadas: “de las 1982 masacres documentadas por el GMH entre 1980 y 2012 los paramilitares perpetraron 1.166.es decir el 59% de ellas. Las guerrillas fueron responsables de 343 y la fuerza pública de 158. Es decir que de cada diez masacres seis fueron perpetradas por paramilitares, dos por guerrillas y una por miembros de la fuerza pública”, 7160 personas desaparecieron para siempre de la geografía nacional por cuenta de las masacres paramilitares. LA GUERRA NO DEBERÍA La guerra, sus masacres y lógiSER TAN INDIFERENTE A cas no deberían ser tan indiferente LOS HABITANTES QUE NO a los habitantes que no la padecieLA PADECIERON. ron toda vez que en un país de 1.123 municipios, 526 registraron una masacre como mínimo entre 1980 y 2012. Algo similar ocurre con la crueldad, los niveles absurdos de sevicia que documentó el GMH entre 1981 y 2012 coinciden con la llegada del fenómeno paramilitar; el informe Basta ya las categoriza así: “Del total de 588 eventos con episodios de sevicia y crueldad extrema, 371 (63%) fueron atribuidos a los grupos paramilitares; 57 (9,7%), a miembros de la Fuerza Pública; 30 (5,1%), a las guerrillas; y 4 (0,7%), a grupos paramilitares y Fuerza Publica en acciones conjuntas”. En suma, seis de cada diez casos de esta naturaleza fueron perpetrados por paramilitares: la sevicia fue una práctica de violencia con sello paramilitar Construir imaginarios certeros será ese acto de fe que nos libre de los horrores del pasado. Erick C. Duncan es periodista.

Ilustración de Marco Pinto

OPINIÓN | ERICK C. DUNCAN

n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN


MARZO DE 2018 ~ 13

NÚMERO 63

Fake news, boobies... ¡todo fake! OPINIÓN | OLGAHELENA FERNÁNDEZ

S

n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN iendo las 10 de la mañana de un martes y después de haber apagado el despertador más de 10 veces desde las 6 de la mañana — porque supuestamente me iba a levantar a hacer ejercicio— prendo mi teléfono y leo mis correos. Me encuentro uno de Vladdo donde nos recuerda a quienes alguna vez hemos escrito en Un Pasquín que hay un nuevo cierre, luego del “coma inducido” en el que estuvo su periódico por varios años. Entre los temas de esta nueva edición, están, por supuesto, las noticias falsas y las próximas elecciones. Inmediatamente me pregunto: ¿puede haber algo más falso que la política? y la respuesta es obvia: claro que sí. Por ejemplo mis intenciones de hacer ejercicio esta mañana. Aquí va el listado de las falsas noticias que he dicho (y me he dicho a mí misma) en los últimos 50 años —desde políticas hasta culinarias—. •En el trabajo: —No voy a salir con un compañero de trabajo. —Así me paguen millones, renuncio si mi jefe no valora lo que hago. •En política: —Voy a estudiar todas y cada una de las hojas de vida de los candidatos al Senado, pues esta vez no pienso equivocarme. (aplica para todos los cargos de elección popular) —Esta vez no voy a votar “en contra de”; prometo votar por el que en realidad me guste.

•En la universidad: —Me voy a graduar con honores. —Nunca me voy a emplear. Voy a ser mi propio jefe. —Me voy a concentrar en estudiar...nada de rumba, nada de noviecitos, nada de nada. •En el colegio: —Voy a hacer las tareas el viernes para tener libre todo el fin de semana. —Me voy a sentar en la primera fila para poner atención. •En nutrición: —No vuelvo a comer carbohidratos. —Dejé la gaseosa. Conclusión: mi vida ha sido una total, completa y permanente serie de “fake news”, por lo tanto estoy impedida para criticar a quienes las promueven, así sean los políticos más repugnantes. Me parece normal que abran páginas en Facebook con la única intención de decir mentiras. Es más, yo también he pensado en abrir una cuenta fake para poner fotos mías retocadas y... ¡ups! Ya lo hago. Dios mío, es tan deprimente descubrir que soy una uribista/trampista, que sólo se dice mentiras a sí misma, que he decidido en este instante cambiar y dejar ese mundo de farsas atrás. Por eso, voy a parar de escribir en este instante y me voy a ir a trotar 20 kilómetros, este año voy a correr la maratón de Berlín. Olgahelena Fernández es periodista.


Vladdo.— Cortesía de revista Semana

14 ~ MARZO DE 2018 NÚMERO 63


NÚMERO 63

MARZO DE 2018 ~ 15

calumnia. (Del lat. calumnia). 1. f. Acusación falsa, hecha maliciosamente para causar daño. || 2. f. Der. Imputación de un delito hecha a sabiendas de su falsedad. Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua


E L PE R IÓDIC O DE L A O

El tonto no se contenta con violar una regla ética: pretende que su transgresión se convierta en regla nueva”. —nicolás

g ó m e z d áv i l a

M A R ZO D E 2 0 1 8

TRESENUNO POR ANTONIO JIMÉNEZ CASTAÑEDA n ESPECIAL PARA UN PASQUÍN

¡VOTEMOS

Ya estoy resuelto: voy a votar en la consulta uribista del 11 de marzo por Alejandro Ordóñez, el ex procurador general, corrupto, inmoral y rezandero. El eremita del oscurantismo, el enemigo de la homosexualidad, del matrimonio entre parejas del mismo sexo, de las transfusiones de sangre, del aborto, del divorcio, de la adopción de niños por parejas que no sean heterosexuales, del ateísmo, de la penicilina y de los antibióticos. El adversario de la paz, la libertad y la tolerancia en la vida de una sociedad.

POR

Voy a votar en la consulta por Alejandro Ordóñez, el que considera que es obligatorio no solamente creer en la existencia real del mito de Dios, émulo del Hombre Araña, al que, además, hay que temerle y adorarlo de rodillas y lamiendo el suelo. El que está convencido de que ese dios fue engendrado por una paloma y una virgen, a espaldas de un burlado carpintero. El que cree que la Biblia –decenas de páginas escritas por orates– es de obligatorio cumplimiento social, por encina de la Constitución Nacional y las leyes. El que alega que no existió el holocausto de la Segunda Guerra Mundial y asegura que la tauromaquia es “un arte” en el que el toro no siente dolor.

Ilustración de Mheo

ORDÓÑEZ!

Voy a votar por Alejandro Ordóñez porque solamente si él gana la consulta popular de las hordas uribistas y se convierte en candidato oficial de esa submasa poblacional estará plenamente garantizada su derrota. La cantidad de morrongos y fundamentalistas religiosos de vida privada dudosa –es decir, uribistas– que lo respaldarán en unas elecciones definitivas, será muy baja. Incluso a ellos les repugna por godo, dañado, perverso y torcido.


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