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Interrogando a la sustentabilidad
En tanto, el consultor e investigador Daniel Montamat, ex-Secretario de Energía de la Nación, expuso su posición referida a las posibilidad de los potenciales inversores respecto de la obtención de nuevas concesiones para la explotación de recursos no convencionales en áreas donde existían concesiones para explotación de recursos convencionales.
Montamar mencionó que “los plazos de las nuevas concesiones desfasados de las antiguas pueden plantear conflictos con el uso de las instalaciones de superficie”. Y se interrogó: “¿Se ajustarán los plazos de las concesiones anteriores a las nuevas? ¿Qué rol tienen las provincias titulares del dominio originario de los hidrocarburos en todas estas decisiones?”. Para el especialista, “si hay conflictos jurisdiccionales, surgirán nuevas dudas”.
La distancia entre los dólares que hay que invertir en el presente y las dudas que ofrece su recupero auguran escasa adhesión al régimen. Daniel Montamat, ex-Secretario de Energía de la Nación.
El desarrollo sustentable y la demanda futura de alimentos fue el eje central de diferentes conferencias a cargo de referentes y expertos.
EL POR Qué del desarrollo sustentable ”Todos hablan de que es necesario fortalecer las instituciones para lograr desarrollo, pero pocos hablan del fortalecimiento de la figura del ciudadano”, fue el arranque de unas de las plenarias más concurridas y con mayor intercambio con el público del Congreso. Por su parte, Carlos March, periodista y responsable de Saber Social, construyó diciendo que “las toma de decisiones deberían darse por medio de la participación ciudadana desde la educación” y agrego “Hay un sistema perverso para contribuir en la ignorancia cívica”.
En este sentido, el Licenciando en Economía Política Gustavo Daniel Braier, apuntó que “los periodistas están poco instruidos o informados sobre estos temas. Es tan amplio el saber, que hay que darle poder al otro para que investigue más”. El QuE de la sustentabilidad Horacio Sanchez Caballero, Licenciado en Psicología y Coordinador del proyecto Seguridad alimentaria global y recursos naturales agrícolas, abrió el debate “¿Tiramos todos para el mismo lado o cada cuál para el lado que le conviene? ¿La naturaleza transforma, el hombre deforma? Pudo exponer varios conceptos relacionados a la producción mundial de alimentos a largo plazo, y preguntó al auditorio: “en los próximos años, seremos extras o nos convertiremos en actores destacados”.
“Al productor como ciudadano hay que darle las herramientas necesarias, hay que formar gente para hacer nuevos generaciones; para seguir creciendo en el desarrollo sustentable”, respondió Ricardo Sánchez, Director de Seguridad Alimentaria Región Latinoamerica The Nature Conservancy “A futuro, deberán tener responsabilidades crecientes los políticos y los periodistas. Hay que centrarse en saber pedir ayuda”, remarcó Braier
El desafío que nos planteamos es ser parte de la solución a la problemática de alimentos. Horacio Sánchez Caballero.
Desde nuestra compañía, nos propusimos hace 5 años duplicar los rendimientos de los principales cultivos agrícola. Jesús Madrazo
Jesús Madrazo, Líder de Asuntos Internacionales Corporativos en Monsanto, por su parte explicó en que está trabajando la empresa Monsanto, y recalcó el rol fundamental de las alianzas entre empresas, instituciones y otras entidades, para contribuir al desarrollo sustentable.
Por último, fue el turno de Allyson Paolinelli, Presidente Ejecutivo de ABRAMILHO, quién pudo exponer acerca del crecimiento que experimento el país brasilero, y otorgó gran importancia a la inversión en desarrollo científico y educación. El COMO del desarrollo sustentable “No hay sustentabilidad ambiental sino se piensa en lo económico y social, es imposible pensar sustentabilidad ambiental sin el apoyo de las empresas. No hay sustentabilidad económica sino es sustentable un país y sus instituciones” destacó Gustavo Oliverio, asesor y coordinador de proyectos de la Fundación Producir Conservando.
Por su parte Julio Boehler, Presidente FADA, destacó que “no se puede hablar de sustentabilidad sino tenemos reglas claras y estables. Hay que mirarlo desde lo económico, con sustentabilidad a las empresas, producir con menor impacto posible, y en lo social, mejorar la calidad de vida de todos”.
Según índices de FADA y la distribución de la renta agrícola proyectada (2014), el Estado capturará el 76 % de la renta en la soja, y el 79.3 % del maíz. Sabemos cómo hacer la agricultura sustentable.
Oscar Solís, Subsecretario de agregado de valor y nuevas tecnologías de la Nación, destacó que en el marco de la búsqueda de un desarrollo sustentable, se encuentra el desarrollo de los “Bio insumos”, tratando de generar reglamentación para desarrollar nuevos productos para empresas. Afirmó que “El objetivo de la política no es solamente seguir vendiendo poroto de soja, sino generar acciones para la producción de Argentina, con escalas de desarrollo sustentable en todas la zonas agropecuarias del país”. Bernardo Piazzardi, Director Ejecutivo del Departamento Alimentos y Agro-negocios para Argentina y Perú de la firma consultora Prospectiva2020, remarcó sobre el desafío institucional, el rol de las instituciones públicas y privadas, una visión consensuada y quienes, cómo y cuándo deben activarse.
March le dio un merecido cierre al plenario expresando: “Defender la transparencia, asumir la libertad y la democracia, es un marco de valor que luego se puede sostener en cualquier discusión. El problema de la Argentina es lo que nos toca ser, un empresario, un dirigente, un policía y después un ciudadano. Anteponemos el rol ocasional, en vez del rol de pensarnos colectivamente”.Boheler: “Tenemos un país con el enorme potencial, debemos participar en la construcción de las políticas públicas para el país”.
“Sin dudas la sustentabilidad, no es responsabilidad del otro. La debemos construir entre todos e insisto, entre todos”, opinó Oliverio. “Se buscan distintos elementos para mantener los recursos genéticos de la Argentina y de la región, a través del INTA y las universidades” detalló Solis.
Bernardo Piazzardi “Las instituciones son las que están fallando cuando se nombra una inversión estrepitosa de alguna empresa, y en la primera plana no se dice cuánto se invirtió en la campaña agrícola”.
Agricultura de Conservación y Siembra Directa, en la búsqueda del consenso
Especialistas referentes de Francia, Brasil y Argentina dieron su visión acerca de la agricultura sustentable en Europa y América Latina.
En el panel moderado por la Ing. Agr. M. Beatriz Giraudo (Vicepresidente de Aapresid), el primero en hacer uso de la palabra fue el francés Gérard Rass, miembro del Instituto para la Agricultura Sustentable de Francia. Desde una perspectiva global puso bajo análisis la realidad agrícola en suelo europeo y, en particular, en algunas regiones de su país. “Necesitamos acuerdos para alimentar personas pero también para proteger la biodiversidad. Se trata de lograr un equilibrio entre las necesidades humanas, la preservación de los habitantes y el medio ambiente. Ese es el desafío vital”, planteó Rass.
Como quien no quiere dar lugar a segundas interpretaciones, el disertante fue enfático al asegurar que “la mejor y la única forma de mantener un suelo de calidad es la Agricultura de Conservación”. Y de inmediato avanzó en algunos puntos para desglosar el concepto: “Agricultura de Conservación es sinónimo de remoción mínima del suelo, cobertura permanente del suelo y rotación diversificada de cultivos”, resumió.
Sin embargo, a su juicio, esa noción se encuentra más difundida en América Latina que en Europa. Para graficar su planteo tomó el ejemplo de Francia donde señaló que sólo el uno por ciento de la tierra cultivada se trabaja con sistemas de Agricultura de Conservación “a pesar que allí radica la columna vertebral de la sostenibilidad”. El segundo en tomar la palabra fue el brasilero Rafael Fuentes Llanillo, investigador en socio-economía del Instituto de Agronomía de Paraná, Brasil. ¨Soy investigador de una provincia pionera en el empleo de Siembra Directa¨, dijo en referencia al estado de Paraná, Brasil.
Bastaron sólo unos pocos datos aportados por Llanillo para advertir la importancia de enfocar el análisis de la producción agrícola a nivel global desde una perspectiva latinoamericana. “En el mundo son 117 millones las hectáreas explotadas con sistema de Siembra Directa. Esto significa apenas un ocho por ciento de la superficie agrícola total, y Sudamérica representa las dos terceras partes de ese territorio”, explicó.
Tras repasar los beneficios que la adopción del sistema de Siembra Directa representó para la agricultura brasilera desde su implementación hace tres décadas, el investigador se refirió al problema del monocultivo de soja que afecta distintas regiones de su país. Con humor, luego de plantear alternativas y explicar el valor de rotar los cultivos, dijo: “La soja es la reina del sistema agrícola pero el maíz es el primer ministro, por eso debemos cuidarlo”.
En tercer y último lugar, tomó la palabra Miguel Taboada, director del INTA, encargado de traer a la mesa de exposiciones el escenario argentino.
Rafael Fuentes Llanillo, investigador en socio-economía del Instituto de Agronomía de Paraná, Brasil. Taboada brindó prácticamente una clase académica, dando cuenta de su vasta trayectoria en casas de altos estudios. Citó infinidad de trabajos de investigación desarrollados en el marco de diversas instituciones para plantear algunas ideas.
“El crecimiento exponencial en la adopción del sistema de Siembra Directa en Argentina a lo largo de las últimas dos décadas muestra la historia de una éxito”, analizó Taboada.
En esa misma línea, repasando algunas bondades de “la directa” destacó la mayor estabilidad de los suelos. “Se vuelve evidente que la calidad del suelo depende del manejo de los cultivos”, reflexionó.
El Director del Instituto de Suelos del INTA no sólo habló de Agricultura de Conservación y Siembra Directa sino que trajo a debate otro tema de su interés: el riesgo de contaminación por pesticidas. Y lo puso en perspectiva histórica. “Tenemos una agricultura más sana que la de 50 años atrás. Sin embargo, recientes estudios dan cuenta de restos de glifosato en los cultivos, se trata de un dato que refuerza la necesidad de monitorear la producción agrícola de cerca”, concluyó.
La biología al servicio de la sustentabilidad
Referentes de Estados Unidos, Brasil y Argentina dieron su visión sobre diferentes organismos de suelo, su uso actual y potencial.
“Ese año se estima que haya en el mundo 9 mil millones de habitantes y esas personas van a consumir más y por lo tanto vamos a tener que ampliar nuestra capacidad de producción y el problema actual es necesitamos más espacio para cultivar”, anunció Arlan Peters, Licenciado en Biología y líder de Sustentabilidad de Novozymes. A continuación, Peters no tuvo ningún reparo en sostener que “cuando hablamos de sustentabilidad, hoy por hoy nos tenemos que referir a un verdadero estado o situación de caos”. El estadounidense también indicó que en la actualidad, y también en el futuro, son los propios consumidores los que están liderando el cambio en la adquisición de artículos “que tengan el menor impacto ambiental posible”.
Respecto al suelo, concretamente el Licenciado en Biología explicó que se trata de “un organismo dinámico en el que conviven miles de millones de bacterias, y que a través de los inoculantes los productores agropecuarios
Los inoculantes pueden reducir la presión sobre los hábitats naturales y los recursos del planeta. Arlan Peters
pueden mejorar la calidad y el crecimiento de la planta, ya que eso colabora a aumentar la vida útil de los nutrientes”.
El conferencista también se refirió al ciclo del nitrógeno en las plantas y la rol que cumplen los diferentes microbios en la fijación de nitrógeno. En cuanto al impacto del medio ambiente, llamó a los productores a no perder el foco sobre todo en el eje del ciclo del rinde y en la función que los microbios que colonizan el sistema radicular de los vegetales.
Por último, Peters dijo: “Los inoculantes dan una respuesta en rendimiento en una amplia gama de cultivos y ambientes de todo el mundo. Los inoculantes pueden reducir la presión sobre los hábitats naturales y los recursos del planeta”. Y a modo de conclusión agregó: “En la actualidad usamos los recursos como si tuviésemos tres planetas y estamos viviendo como en una fantasía porque la realidad indica que tenemos sólo uno y por lo tanto debemos cuidarlo y preservarlo de otra manera”.
En segundo término tomó la palabra el Doctor en Ciencias Biológica Luis Wall, quien comenzó su charla con una especie de sentencia: “La microbiología de hoy no es la misma de siempre, ahora sabemos que es de otra manera”. En su conferencia el especialista explicó que “el manejo de las bacterias cultivables son la base de los inoculantes y bio fertilizantes”, y a modo de graficar el amplio universo biológico al cual se enfrentan los productores indicó: “Tenemos que darnos cuenta que en un gramo de suelo viven 10 mil millones de microorganismos o bacterias”.
Luis Wall se refirió a los análisis climáticos y de qué manera impactan sobre los estudios de suelo y la necesidad de realizar un exhaustivo perfil fisiológico de cada unos de los suelos en los que se va a trabajar. “La microbiología es el origen y el sostén de la fertilidad de los suelos. También necesitamos mejorar los estudios de diagnóstico de la calidad de los suelos”. En tercer y último lugar, fue el turno de la Bióloga brasilera Marie Bartz, que hizo una presentación sobre las propiedades fisiológicas de los suelos. La conferencia de Bartz, estuvo centralizada en su materia de estudio que son las diversidades de lombrices (más de cuatro mil a nivel mundial) en el Estado de Paraná de Brasil. “Las lombrices son como el intestino del suelo y son muy importantes para el crecimiento de las raíces y la actividad de los microorganismos. El secreto para el suelo es la diversidad de alimentos y nutrientes como también la rotación y la sucesión de cultivos”, concluyó Marie Bartz.
Las lombrices son como el intestino del suelo y son muy importantes para el crecimiento de las raíces y la actividad de los microorganismos. Marie Bartz.
¿Puede el sistema de producción inferir sobre el valor nutritivo de los alimentos?
Durante su presentación, el Ingeniero Ross Welch (USDA-ARS, U.S. Plant, Soil and Nutrition Laboratory, Cornell University, Ithaca, NY, USA) intentó responder ese gran interrogante.
En primer lugar, planteo que la desnutrición es un tema crucial en la sociedad y que no solo está dada por la baja ingesta energética sino de determinados factores nutricionales entre ellos macro y micronutrientes, el rol de la agricultura debe verse como proveedora de nutrientes, además de la provisión energética. Así es posible pensar en una agricultura de calidad, donde los alimentos producidos estén concebidos mas allá del rendimiento en kg/ha y en función de su valor nutricional.
Hay factores edáficos, prácticas agronómicas y aspectos genéticos (y biotecnológicos) de los cultivos capaces de afectar la calidad de los granos producidos, y por lo tanto tener un impacto positivo en la salud, esto plantea una posibilidad de interacción entre la ciencia de la agronomía y la salud. Desde la agricultura es viable pensar en producir alimentos de calidad con estrategias de fertilidad que contribuyan a aumentar la bio disponibilidad y la calidad de los alimentos.
Para hablar de agricultura sustentable, debemos pensar en que la sociedad, donde esa agricultura se desarrolla, sea sustentable y para ello la población debe estar bien nutrida en calidad y cantidad.
La agricultura de calidad puede implicar una mejora en la rentabilidad, para la cual se debería pensar en esta producción en forma diferente a la producción de comodities, además se deben desarrollar la trazabilidad y los análisis correspondientes a respaldar la calidad nutricional, en la medida en que ambos aspectos se desarrollen será posible pensar en una mejora en rentabilidad. Hasta hace poco tiempo no se habían pensado los desafíos para producir nuevos y mejores valores nutritivos en los cultivos para trasladarlos a los alimentos. Ross Welch