MISIÓN
DO EN EL MUN M I LU G A R No estás aquí por casualidad. Estás por una muy buena razón. Estás porque Dios te dio dones y talentos para usar en favor de los demás; y on tres historias, tres experiencias, tres para hacer cosas que vidas... Son reales y concretas. Son desinteresadas y anónimas; aunque sus pronadie más puede tagonistas son reales y es verdad todo lo que dicen hacer.
S
y vivieron en diferentes lugares. Siempre escuchamos historias de voluntarios de diferentes partes del mundo, y muchas veces hasta soñamos serlo algún día; pero lo importante es que hay que decidirlo, y que para ser voluntario hay que empezar a serlo. Estas historias intentan mostrar, en pocas palabras, algunas vivencias buenas y malas, pruebas y anécdotas de lo que estos jóvenes vivieron en sus lugares de trabajo. Y cada uno de ellos nos muestran que no hay una sola manera de cumplir con lo que Dios nos encomendó. Pero todos mencionan que, a pesar de las pruebas y las dificultades, Dios está con nosotros, y que cuanto más cerca estemos de él, más nos va a mostrar cómo servirlo. El voluntario busca siempre seguir el ejemplo de Jesús cuando estuvo en la Tierra: primero, responder a las necesidades físicas, emocionales y/o espirituales de las personas; y recién después mostrar por medio de la amistad y las relaciones sociales a Aquel que nos amó tanto que envió a su Hijo para morir por nosotros. A veces pensamos que para ayudar a los demás primero debemos cambiar nuestra vida, pero, como veremos a continuación, estas historias nos muestran que, en realidad, ayudar a los demás cambia nuestras vidas.