CENTRO DE INVESTIGACIÓN Y ESTUDIOS AVANZADOS DE VERACRUZ
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN Sede: Álamo Temapache, Ver.
COMPILACIÓN DE INVESTIGACIONES ASIGNATURA: SEMINARIO DE TESIS II
CATEDRÁTICA: DRA. GUILLERMINA RODRÍGUEZ ROSAS
Cambio de actitudes en los alumnos de bachillerato y sus repercusiones en el proceso enseñanza – aprendizaje
Carlos Nicolás González
En el ámbito de la globalización y la era del conocimiento, la sociedad actual está atravesando por grandes cambios, dentro de los cuales se observa el cambio de actitudes negativas en los alumnos de bachillerato. Los alumnos, en el ámbito familiar, asumen una serie de roles con actitudes positivas, acorde a los valores y normas del hogar; sin embargo, varios de ellos, ya en el contexto escolar muestran actitudes completamente opuestas, generando una serie de problemas que se manifiestan en conductas inapropiadas ante los demás compañeros, descortesía impuntualidad, falta de respeto al docente y personal administrativo, así también, apatía en la construcción del conocimiento y poco interés por el estudio, lo cual se traduce en bajo nivel de aprendizaje. Las conductas inapropiadas en los alumnos de bachillerato, caso especifico quinto semestre, genera una gran preocupación, debido a que se encuentran en proceso de formación como individuos para integrarse a corto plazo a la sociedad, ya sea en el ámbito laboral o ingresando al nivel superior para realizar una carrera profesional. De ahí, la importancia de explicar desde el enfoque del Materialismo Histórico (Marxismo) las causas que generan el cambio de actitudes en los alumnos de bachillerato y posteriormente dar alternativas de solución para beneficio de los educandos, padres de familia, docentes, escuela y la sociedad. El cambio de actitudes en los educandos es generado por la influencia de las amistades, influencia social de los medios de comunicación y la desintegración familiar. En lo que respecta a las influencias de las amistades, esta se refleja desde el momento de elegir el bloque, ya que la mayoría de los alumnos no lo eligen de acuerdo a sus aptitudes, sino por amistad o compañerismo, por consiguiente presentan apatía en las clases, no cumplen con las tareas encomendadas por el docente, lo cual se traduce en un severo desinterés por el bloque y bajo rendimiento cognitivo. La mayoría de los alumnos no tienen
definido la carrera a estudiar y sus actitudes son una limitante para tener una visión de proyecto de vida a corto plazo. En el aula académica existen alumnos que en relación al contexto sociocultural del cual provienen, tienden a influenciar negativamente a determinados compañeros, caracterizándose por romper la disciplina de la clase, comportamientos inadecuados ante sus compañeros y docentes, uso inapropiado del mobiliario y material didáctico. La influencia de las amistades ha propiciado que varios alumnos no se relacionen con los demás compañeros, debido a que no comparten las mismas idas y acciones, generando una división grupal, repercutiendo negativamente a la hora de que el docente realiza actividades en su asignatura mediante trabajo colaborativo o en su caso, en las diferentes actividades programadas por la dirección, subdirección académica y administrativa del plantel (actos cívicos, campañas de limpieza, elaboración de periódicos murales, etc.). La influencia de las amistades también ha generado que determinados alumnos no asistan en ocasiones a la escuela, cuando en casa los padres de familia están con la idea de que el hijo lleva a cabo las actividades académicas; sin embargo, dichos alumnos están en otros ambientes totalmente ajenos a la educación, poniendo en riesgo su salud e integridad física. Otra de las causas que contribuyen al cambio de actitudes en los alumnos, es el impacto que generan los medios sociales de comunicación, especialmente la televisión. El materialismo histórico ubica a la televisión como una expresión del desarrollo de las telecomunicaciones que acompañan al desarrollo de las fuerzas productivas en el capitalismo. La necesidad de crear una industria de la publicidad para promover el mayor consumo de mercancías ha generado un mercado para los mensajes que informan y seducen sobre nuevas mercancías que deben consumirse, pero, a la vez, esta situación es la base para la industrialización del entretenimiento. Si ubicamos a la televisión en el marco de la totalidad social, vemos entonces que desde el punto de vista económico es un poderoso medio de comunicación que propicia el consumo de mercancías en grandes cantidades, pues tiene una teleaudiencia de masas, y por ello contribuye a una mejor circulación y realización del ciclo de producción capitalista. Pero a la vez esta función económica está vinculada a la reproducción cultural de valores y
estilos de vida modernos que exigen altos niveles de consumo de mercancía; es decir, la televisión conecta estrechamente lo económico con lo cultural dentro de la totalidad social moderna, creando una cultura consumista de masas. Dentro del materialismo histórico se puede enfocar a la televisión acudiendo a la perspectiva de clases sociales, la cual señala que hay una orientación clasista en los modos como se genera esta cultura consumista, teniendo así, que al surgir estilos de compra – venta de mercancías asociados a la idea de que comprar la última tecnología o vestir a la moda da prestigio. La televisión anuncia entonces tecnologías y modas que pueden adquirir rápidamente sólo unos cuantos, en tanto que la mayoría no puede hacerlo. Aun más, puede anunciar productos de marca que están fuera del alcance de los individuos y que por lo mismo consumirlos da prestigio y distinción. Bajo este contexto, la televisión es una forma de dominación al servicio de la clase capitalista e intereses del Estado; en donde el alumno va creciendo con una idea totalmente distorsionada de la realidad; adquiriendo patrones de conducta y estereotipos que tiende a reproducir en el salón de clase y en su vida diaria, manifestándose a través de la violencia, pornografía, falta de respeto a las normas, consumismo, falta de valores solidarios y transculturación. Los estudiantes de bachillerato han incluido en su vocabulario
una serie de
palabras, que retoman de los programas de la televisión, caso específico, la palabra “wey”, que diariamente se escucha en sus conversaciones al interior del aula o en los pasillos de la institución educativa. Otra de las actitudes que están tomando los alumnos de bachillerato, es el uso del celular en horas de clase, lo cual genera distracción al propio alumno, al resto del grupo y al docente. Así también, pretenden redactar contenidos de temas, utilizando palabras incompletas a como lo hacen en los mensajes de celular, lo cual propicia una distorsión de las reglas gramaticales. El cambio de actitudes que están tomando los jóvenes estudiantes, también se refleja en la forma de vestir y de peinarse, cuyo objetivo es imitar a personajes de la televisión; es así, que los alumnos van formando círculos de compañerismo, y quienes deseen ingresar a el, deben cumplir con las mismas actitudes para darle más identificación a su grupo interpersonal.
El alumno que está expuesto a la televisión, tiende a disminuir el funcionamiento cerebral y provoca un bajo rendimiento cognitivo. La televisión no sólo obstaculiza el trabajo intelectual y escolar sino que, además, influye negativamente en el estado de ánimo del educando. El cual presenta una actitud de no querer hacer nada de actividades académicas. Los alumnos están perdiendo interés por el estudio, asisten a la escuela no por iniciativa propia, sino porque los papas así lo deciden. La televisión va cambiando las mentalidades de los alumnos, ahora les cuesta trabajo implementar la actitud critica y reflexiva para abordar los contenidos temáticos de las respectivas asignaturas que cursa, así también, severas limitantes para relacionar dichos contenidos con el contexto social en que se desenvuelve. Los alumnos se dejan guiar por lo que los medios les presentan, y aunque ellos piensen que tienen una opinión, están opinando sólo lo que la televisión les ha inculcado ya. Otro de los factores que inciden en el cambio de actitudes, es el de la desintegración familiar. La familia es la organización social en la que nace y se desarrolla el individuo de manera consciente, el cual es capaz de realizarse como persona y de relacionarse con el entorno social, y lo más importante, es el ámbito donde se inicia la educación. La familia ha sufrido grandes trasformaciones en estas últimas décadas, en donde la mujer se ha integrado al sector productivo, con la finalidad de ser parte del sustento económico. De acuerdo al materialismo histórico, se concibe a la familia como un pequeño sistema social, donde imperan relaciones de poder y dominación, y a la vez hay rebelión a esta forma de dominación por parte de la esposa o los hijos, que en la mayoría de los casos tiende a la desintegración familiar; generando cambio de actitudes en los respectivos hijos en el contexto escolar. La familia nuclear (padre, madre e hijos), ya no es la misma; por lo general, ambos padres trabajan, o bien la cabeza de familia la conforma el padre o madres solteras, divorciados o separados; algunos alumnos incluso viven con otros familiares cercanos o en su caso con los amigos.
Cada día, se dan más casos de violencia familiar, en la que los hijos no sólo insultan, sino que llegan a golpear a sus padres, acciones que tienden a reproducir en la escuela, en donde el alumno ofende al maestro y golpea a sus compañeros. La desintegración familiar también ha propiciado que el alumno presente bajo autoestima, lo cual se refleja en incumplimiento de tareas, falta de trabajo colaborativo y de antemano de un proyecto de vida. En las reuniones que se tienen con los padres de familia para tratar asuntos relacionados con la entrega de calificaciones o problemas de conducta, es común oír a los papás quejarse de que sus hijos están fuera de su control, “no sé que hacer con el”, “nunca me hace caso”; situación que agrava más el problema de las conductas, porque no hay un apoyo total del padre de familia. Hay casos de alumnos que en debido a sus conductas inapropiadas tienden a faltar el respeto al docente, los cuales son canalizados al departamento de prefectura para girar los citatorios correspondientes a los padres de familia, para que se presenten a dicha instancia para dialogar sobre las conductas de sus respectivos hijos; sin embargo, le dan toda la razón a sus hijos, poniendo en evidencia al docente, a quien lo acusan de anticuado, prepotente e incomprensivo. En la sociedad actual estamos viendo dos panoramas distintos. Por un lado, familias en que las madres se encuentran agobiadas con la responsabilidad de educar solas a sus hijos. Mientras que en el otro tenemos a padres de familia que corren el peligro de pensar que pertenecer a la familia significa solamente ser portador de dinero para el sustento familiar y que ahí termina su obligación; sin embargo, sus funciones implican muchas cosas, desde inculcar valores, guiar al hijo hacia una educación ejemplar y estar al pendiente del rendimiento académico que presenta en la escuela. Es indiscutible que la sociedad esta cambiando. La familia ha perdido a la madre que funcionaba como núcleo y que le daba unión al hogar. Cada vez más, ambos padres se encuentran envueltos en un sinfín de actividades, que los obliga a vivir cada vez más aprisa y más estresados, olvidándose del cuidado y formación de los hijos, que en muchos de los casos quieren que el maestro asuma el paternalismo que no le corresponde.
En varias familias, los hijos han dejado de ser prioridad y el trabajo ocupa el lugar primordial; sin darse cuenta, de que los hijos requieren de su cariño, orientación y comprensión. El sistema capitalista ha orillado a que las familias se centren más por las cosas materiales y mejores posesiones en el ámbito laboral, destinando demasiado tiempo a las reuniones laborales que al propio hogar y cuidado de los hijos. Es trascendental que las familias que aun permanecen unidas se sigan respetando mutuamente, que convivan, que practiquen los valores y participen de manera responsables en cada una de las tareas que les corresponde llevar a cabo, porque la familia es la célula elemental de la sociedad. El docente no puede ser un simple espectador de las malas actitudes del alumno en el salón de clase; por consiguiente, de manera conjunta con las autoridades del plantel y padres de familia, pueden implementar una serie de estrategias para inducir al alumno al cambio de actitudes positivas; dentro de las más viables esta el taller de escuela para padres, conferencias motivacionales, taller de fortalecimiento académico y taller de adolescencia. En lo concerniente al taller de escuela para padres, brinda la oportunidad para crear un espacio de reflexión donde los padres amplíen sus conocimientos acerca de cómo educar y orientar a sus hijos, lo cual permita el fortalecimiento integral de los lazos familiares contribuyendo a la construcción de un proyecto de vida. Es importante motivar la participación de los padres de familia en la vida de sus hijos para mejorar las relaciones afectivas y familiares. El taller da la opción al intercambio de experiencias y puntos de vista en la resolución o tratamiento de problemas entre padres e hijos. El presente taller contribuirá en la orientación de los padres para que apliquen de manera oportuna su autoridad y disciplina en sus respectivos hogares, en un marco de respeto y tolerancia. Así como promover en los padres estilos de vida saludables y de prevención de enfermedades. El talleres es indispensable para sensibilizar a los padres, para que dejen de ser autoritarios, es decir, que no humillen y castiguen a sus hijos; que no le den toda la razón a
sus hijos, solo cuando lo amerite, caso contrario orientarlos y corregirlos para que no repitan las mismas acciones. Se requiere de padres conscientes, padres que guíen al alumno para que sea responsable en sus estudios y con sus semejantes. Las conferencias motivacionales son elementales en los alumnos, ya que les permite incrementar al autoestima para el logro de sus objetivos y metas. También contribuye a la sensibilización para desempeñar positivamente las tareas encomendadas por el docente y mejorar las relaciones con los compañeros de grupo. Las conferencias motivacionales también comprende temas referente a los valores universales como parte de la educación integral del alumno. Para reducir el índice de reprobación ocasionado entre otros factores, como el incumplimiento de tareas, apatía por el estudio, indisciplina; es conveniente llevar a cabo el taller de fortalecimiento académico, el cual mediante el apoyo del docente se puede implementar cursos remédiales a los alumnos de bajo rendimiento, donde se den a la tarea de resolver
ejercicios del material didáctico, elaborar mapas conceptuales, cuadros
comparativos, cuestionarios, exposiciones de contenidos temáticos, aclaración de dudas referente a los objetos de aprendizaje. El taller de fortalecimiento académico se puede aplicar en horas extraclase, con la finalidad de que el alumno no pierda clases de acuerdo a su horario. El taller también dará la opción a dialogar con los alumnos para que mejoren sus conductas y muestren más dedicación y empeño al estudio. Una de las características de los alumnos de bachillerato, en este caso quinto semestre, es que se encuentran en la etapa de la adolescencia, donde presentan cambios biológicos, psicológicos y sociales; los cuales se manifiestan mediante la rebeldía, ansiedad, preocupación, confusión, vulnerabilidad, inseguridad, soledad e impotencia; por lo tanto, es importante implementar el taller de adolescencia, a través del cual se logre orientar al alumno, convivir con el, escucharlo, contenerlo, pero sobre todo comprenderlo. Convivir con el alumno adolescente da la oportunidad para conocer sus prioridades, su inseguridad y sus miedos. El taller será de utilidad porque permitirá corregir y ampliar las metas del educando y darle una dirección positiva a su vida.
En las instituciones educativas del nivel bachillerato se habla de las malas actitudes de los alumnos en el salón de clase, sin embargo; no se ha investigado a fondo este problema desde la perspectiva del materialismo histórico, lo cual da apertura para quien se interese indagar y dar alternativas de solución a esta problemática; lo cual resulta un reto, pero no difícil de alcanzar.
CENTRO DE INVESTIGACIÓN Y ESTUDIOS AVANZADOS DE VERACRUZ
PLANTEL
CENTRO VERACRUZANO DE INVESTIGACIÓN Y POSGRADO