ENTORNOS DESDE ENSENADA, B.C., SE PUEDE VISITAR UNA ZONA ECOLÓGICA PROTEGIDA QUE BRINDA AL VISITANTE LA OPORTUNIDAD DE CONOCER EN UN SOLO RECORRIDO, LOS ELEMENTOS MÁS REPRESENTATIVOS DE LA BIODIVERSIDAD COSTERA Y MARINA BAJACALIFORNIANA. ALBERTO TAPIA LANDEROS altapialanderos@gmail.com
ESTERO PUNTA BANDA
E
n el extremo Sur de la Ensenada de Todo Santos, B.C., se encuentra un humedal de vital importancia para la vida silvestre. Aquí desemboca el arroyo El Zorrillo y otros cauces de agua de lluvia, protegidos de las fuertes marejadas oceánicas por una barra de arena, en la cual se han edificado residencias playeras para disfrute de nacionales y extranjeros. Esta laguna de casi 500 hectáreas sube y baja de nivel con cada marea, lo cual permite una gran variedad de vida animal y vegetal.
FOTOS: ALBERTO TAPIA LANDEROS
Paisaje del estero.
En un verano vimos anidando a una pareja de branta de mar (Brantabernicla) un pequeño ganso marino que es cazado en la Bahía de San Quintín hacia el Sur. Los sarapicos (Numeniusamericanus) son comunes entre muchas otras aves playeras. En las dunas que dividen el estero del mar hemos observado a la ardilla de tierra (Citellusbeecheyi), así como a la inconfundible codorniz de California (Callipepla califórnica) que anida entre los chamizos y pinillos salados invasores.
La lista de animales reportados aquí va desde plancton hasta ballenas. Un grupo de ensenadenses ambientalistas, Pro Esteros y Pronatura, lograron proteger el lugar consiguiendo que fuese declarado Sitio de Importancia Internacional para las Aves Acuáticas, pero ningún nivel de Gobierno se ha comprometido para vigilar que no se lleve basura y entren lanchas motorizadas que perturban la anidación de aves acuáticas, entre las que destaca el rascón picudo (Ralluslongirostris), pariente de nuestro palmoteador de Yuma.
No obstante ser un área natural protegida y por falta de vigilancia, perros y gatos domésticos entran y destruyen nidos, sobre todo. Los habitantes y visitantes de las casas de la lengua de arena han llevado plantas exóticas que se han extendido y amenazan con desplazar a especies nativas protegidas. A pesar de tratarse de aguas someras aún en marea alta, investigadores han capturado aquí lenguado, sardina, cabrilla, jurel, curvina y otros peces marinos.
Sarapicos.
Sin embargo, lo más notorio son sus aves, de las cuales se han identificado hasta 104 especies, 64 de ellas acuáticas y comunes, como garzas, gaviotas y pelícanos. Pero también están presentes rapaces como el gavilán cola roja, milano, cernícalo, halcón peregrino, búho sin orejas, y el águila pescadora. En los fangos de la baja mar, abunda el pequeño cangrejo violinista, llamado así por tener su pinza izquierda pequeña y la derecha muy grande. En el pasado cuando estaba despoblado, se observaron aquí venados, coyotes y linces, lo que habla de su importancia ambiental.
Cangrejo violinista.
Rascón picudo.
El recorrido del sendero interpretativo es muy recomendable para familias completas, y una excelente oportunidad para la educación ambiental” INVESTIGADOR AMBIENTAL INDEPENDIENTE.
SUPLEMENTO |
| LA CRÓNICA | ENERO 2016
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