Reseña de una Pesca Vertiginosa
La Revista de Pesca
Deportiva en México
Pescar y Soltar
Geneticamente Hablando
Platiquemos de
Fish Finders Los Ranchos
Atuneros Edición Nº 26 Febrero de 2012
Lobinas José Luis y Marcelino Rodríguez Cavazos PRESA MARTE R. GOMEZ
DIRECTOR GENERAL PEDRO SORS GARCIA DIRECCION EDITORIAL PEDRO SORS MUÑOZ DE ALBA ALEJANDRO SORS MUÑOZ DE ALBA GERENCIA DE MERCADOTECNIA ALAN EDUARDO SIFUENTES ATTA DISEÑO EDITORIAL RAYMUNDO MARTINEZ TORNEOS Y SISTEMAS FIDEL MALDONADO GUEVARA MIGUEL ANGEL OLVERA BRICEÑO ADMINISTRACION GENERAL BERTHA RODRIGUEZ CONTABILIDAD PAMELA HERRERA FOTOGRAFIA GABINO GONZALEZ DOMINGO PEREZ REDACCION Y ORTOGRAFIA AURORA GARCIA LOPEZ PRODUCCION
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Las Embarcaciones II
POR GERMAN TOLEDO
Platiquemos de Fish Finders
POR YAISA CORRALES
Pescar y Soltar Genéticamente Hablando
POR VICTOR CANTU
Lo que puedo decir de los Jigs
POR PEDRO SORS
Ranchos Atuneros
POR ALBERTO TAPIA
Reseña de una Vertiginosa Pesca
POR JOSE ANTONIO RUELAS
EDITORIAL DEPORTIVA MEXICANA S.A. DE C.V.
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Ranchos Atuneros
¿Tienen que ver con la pesca deportiva? Texto y fotografía: Alberto Tapia Landeros CICMuseo, UABC.
Se capturan peces juveniles y se meten a corrales circulares (quizá de aquí la idea de llamarles ranchos) de maya con flotadores, que son remolcados lentamente desde miles de kilómetros, hasta la costa de Baja California.
Resulta que en la costa del Océano Pacífico nor bajacaliforniano, están proliferando los llamados “ranchos atuneros”. Un concepto empresarial novedoso para satisfacer el exigente mercado oriental, particularmente el japonés, por el consumo de carne roja de atún, lo más fresco posible. Este cárnico marino es la base del sashimi, que significa “carne cruda”; y el sushi “arroz avinagrado”. Esta cultura culinaria milenaria nipona ya se extendió a Europa, y con ello la demanda de atún fresco. La moda llegó al viejo continente cuando ellos, los europeos, casi extinguieron la especie de atún del atlántico o “atún rojo”, Thunnus thynnus, (por su carne), el cual llegaba a crecer hasta las 1,496 libras (Récord Mundial, 1979).
La Lista Roja UICN de Especies Amenazadas ha anunciado que la reproducción de este túnido en el Mar Mediterráneo ha disminuido en un 50% durante los últimos 40 años, debido a la sobre pesca comercial (UICN, 20/IV/2011).
Tres corrales de engorda y dos barcos sardineros que los alimentan.
L
os mexicanos asociamos intuitivamente la palabra “ r a n c h o ” c o n g a n a d o , c o n s i e m b r a y, despectivamente con algo inferior. Hasta ahora el vocablo no ha sido empleado en la acuicultura o acuacultura, donde se prefiere el de “granja” o “cultivo”. Por ejemplo de camarón o tilapia. Pero utilizar el concepto rancho en el mar es toda una novedad, tanto literaria como cultural.
Ahora sin esos gigantes, los europeos han tenido que voltear hacia el otro océano, el Pacífico, en busca de un sustituto que satisfaga el irresistible gusto por comer carne roja marina cruda, acompañada de arroz hervido y otros ingredientes. Este reciente antojo europeo, más la demanda tradicional nipona, más la que empieza a surgir en los EUA, ha empujado a algunos mexicanos a intentar novedosas formas de desarrollar biomasa marina con estas características, para que después de haber sido extraído del mar, pueda llegar al último consumidor en el menor tiempo posible. Con capital nipón mayoritario funcionan en Baja California 11 empresas como “Ranchos Atuneros” o engordas de atún, que mediante concesiones federales capturan vivo atún aleta azul (Thunnus orientalis), cuando sale de las aguas japonesas a crecer en el mar internacional. Una vez transferidos los peces a corrales anclados de 50 metros de diámetro por 25 de fondo, los cuales son de patente japonesa y australiana, los peces son
nosotros, los mexicanos, no pagaríamos jamás. En México, el atún enlatado es uno de los productos marinos más baratos y por ende, puede llegar a la mesa del más humilde. En Japón vendido en crudo, como sushi o sashimi en restaurante, alcanza un valor de hasta $ 394 dólares por kilogramo. Pero nosotros lo vendemos entero a 17 dólares En cuatro meses los atunes encerrados alcanzan su el kilogramo, lo que da por resultado que de esta rica mayor talla, de hasta 70 kilogramos de peso. Entonces son cadena productiva, repescados por buzos México se queda con el profesionales que los 5.9% y Japón con el capturan a mano Quienes están a favor de la existencia y proliferación 94.1 %. ¿Qué hace la cuando se cansan de de los “ranchos atuneros”, aducen que crean fuentes de diferencia? La cultura nadar y luego los empleo y accionan los viejos barcos sardineros del siglo culinaria de ambos sacrifican perforando pasado, los cuales ya no tienen otro uso. países. El gusto del su cerebro con una paladar, los usos y piqueta, para cumplir costumbres, lo cual es con uno de los parte integral de su economía, que impone sus reglas aquí. requisitos del exigente mercado ahora internacional: que Una vez que el atún es inmovilizado con el alambre el sacrificio no deje huella en el animal. mencionado, se hacen cortes precisos en su cuerpo, para que el corazón todavía latiendo, bombeé la mayor sangre Luego de la piqueta, se les introduce un alambre posible fuera del cuerpo, lo cual ahorra ese trabajo al intervertebral, que paraliza al pez evitando que se golpeé y hombre y conserva mejor el cadáver. se marque su piel, la cual debe mostrase como “cutis de colegiala” en las subastas de pescado, donde compradores especializados pagan por ellos sumas de dólares que alimentados dos veces diarias, “hasta la saciedad”, principalmente con sardina. Pero también pudiesen utilizar anchoveta, gruñón y otras especies menores costeras bajacalifornianas.
Inmediatamente se protege con un gel frigorífico patentado y exclusivo y se envía al aeropuerto de Los Ángeles, California, ciudad distante tres o cuatro horas de Ensenada, B.C., desde donde inmediata y diariamente son transportados directamente a compradores pre contratados o a las subastas de mariscos. ¡Este es un mercado especializado! Pero, ¿qué le queda a México? Hasta ahora sólo el mencionado 5.9 %, y la oportunidad de algunos empleos y el resurgimiento de los viejos barcos sardineros ensenadenses. Investigadores como Raúl del Moral y Juan Guillermo Vaca de la Universidad Autónoma de Baja California, opinan que esta no es una industria pesquera, la califican de “maquiladora marina”. Cualquiera que sea el calificativo o categoría, el hecho es que favorece más al comprador que al productor. Pero hasta en la creación de fuentes de empleo perdemos, pues en Japón el sueldo mensual de un pescador es de 3, 504 dólares y en Ensenada es de 454 dólares. También alegan que hoy por hoy, en Ensenada no se está pescando la sardina comercialmente. Que a nadie perjudica alimentar dos veces diarias con nuestras sardinas, la engorda de peces para consumo exclusivo extranjero. Pero debido a esta demanda extra de sardina, su precio se duplicó de 60 a 120 dólares por tonelada. Sí, bueno para los sardineros, pero malo para los pescadores deportivos.
Esta fue la introducción a un problema muy serio para nosotros los pescadores deportivos, pero ¿cómo esto nos puede afectar a nosotros los pescadores deportivos? Hagan sus investigaciones y en la próxima edición de esta revista contestare esta pregunta Bibliografía McClane, A. J. 1974. Field Guide to Saltwater Fishes of North America. Henry Holt and Company, Nueva York. (Pág. 181) Raúl Jesús del Moral–Simanek, Juan Guillermo Vaca–Rodríguez. Captura de atún aleta azul en Baja California, México: ¿Pesquería regional o maquiladora marina? (Internet). Raúl Jesús del Moral–Simanek, Juan Guillermo Vaca–Rodríguez y María del Carmen Alcalá Álvarez. Análisis socioeconómico e interrelación de las pesquerías de sardina y atún aleta azul en la región noroeste de México. (Internet).