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Implementación de un Programa de Cumplimiento Legal
La existencia de herramientas como los tratados internacionales de comercio, la tecnología, entre otros, hacen sin duda que las partes deban preocuparse cada vez menos de formalidades y obstáculos para establecer relaciones extra fronteras, léase filiales, subsidiarias, clientes y proveedores en otras jurisdicciones distintas a donde se encuentra su centro de negocios.
Es cada vez más frecuente encontrar, dentro de los contratos que se suscriben con terceros, cláusulas petrias en cuanto a que no son negociables, por ejemplo: anticorrupción, aceptación de las normas de ética de la contraparte, declaración de proveniencia de recursos; estas cláusulas si bien no parecieran ser trascendentes para el negocio que se pretende celebrar son importantes ya que dan una luz de la empresa con la que se está estableciendo una relación comercial.
La normativa local, la complejidad de la normativa internacional, las diferencias culturales, los entornos económicos y políticos de cada país, y los enfrentamientos a dilemas éticos o morales han creado la necesidad en las empresas de autorregularse, desde su matriz, alcanzando a sus filiales o subsidiarias, y llegando hasta sus relaciones con terceros. Es aquí donde surge la relevancia de la implementación de un programa de cumplimiento dentro de las organizaciones.
Un programa de cumplimiento se puede definir como todas las acciones y prácticas que se implementan en una organización con la finalidad de crear una cultura de observancia que a su vez tiene como objetivo gestionar los riesgos que puede tener la organización a fin de detectarlos y prevenirlos.
Las acciones y prácticas a implementarse dentro de un programa de cumplimiento dependerán de diversos factores a los que la empresa se puede exponer y pueden ser catalogados como riesgos, por ejemplo: la industria a la que pertenece, el entorno político e índice de corrupción del país en donde se encuentra la compañía o sus filiales, si es proveedora del Estado y por tanto debe relacionarse con funcionarios públicos, entre otros.
La implementación de un programa de cumplimiento es el inicio de una cultura organizacional sólida que permite establecer las bases de cualquier empresa en valores corporativos.
El establecimiento de canales de comunicación apropiados entre directivos, empleados, proveedores, clientes y cualquier tercero es indispensable, por lo que es necesario que estos se implementen de no existir o en todo caso que estén en constante revisión y adaptación, y sobre todo que se lleve a la práctica a través de capacitaciones, investigaciones e inclusión a todos los niveles dentro de la empresa, creando una concientización del papel e importancia que cada persona tiene dentro de la organización.
Carmen María Mérida
Abogada Senir // Deloitte
Estuardo Paganini
Socio // Deloitte
