La salud siempre ha sido un activo de gran valor, a nivel individual y colectivo, y cuando la salud se considera como un valor colectivo es importante conversar sobre equidad y sostenibilidad como elementos esenciales del sistema de salud pública.
Nuestra carta magna establece claramente que "El goce de la salud es un derecho fundamental del ser humano", lo que une de manera intrínseca ambos conceptos, salud y humanidad. En marzo de 2019 se generó a nivel mundial un punto de inflexión entre el signif icado de la salud para el desarrollo de la vida, por la aparición de la pandemia por Covid 19. Dos años después, los aprendizajes han sido importantes, revelaron la vulnerabilidad de los 18
sistemas de salud, y para Guatemala también se evidenció la necesidad de realizar cambios fundamentales, la salud y sus determinantes sociales deben abordarse de manera integral, que la falta de promoción y prevención tienen consecuencias graves, es necesaria la atención individualizada, basada en el principio de equidad. Solamente en relación a coronavirus, en Guatemala ha habido cerca de 0.9 millones de contagios y más de 18 mil muertes desde que comenzó la pandemia según Reuters, y sumado a esto, los medios de información nos han revelado que los esfuerzos del Estado por focalizarse en contener esta crisis sanitaria han dejado desatendidos otros temas de salud, particularmente la atención sanitaria a condiciones crónicas, y como resultado se ha incrementado la carga de enfermedad relacionada.