EL GUARDIÁN · NÚMERO 10 · MARZO 2014 by Ángel Guardián

AÑO 1 · NÚMERO 10 · MARZO 2014 · COLIMA / MANZANILLO · www.angelguardian.mx

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El placer culposo de comer ¿Sabías que no comer bien y tener kilos de más es un problema de salud pública? En 2012, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición señalaba que en Colima 7 de cada 10 hombres y mujeres mayores de 20 años tenían sobrepeso y obesidad.

Índice 4 6

Si la estadística fuera democrática, se diría que Colima es tierra de gorditos. Sabemos que consumir los nutrientes necesarios diariamente es indispensable para la vida humana, pero, ¿en qué momento se cruza la línea entre comer

para vivir y comer solo por comer? Nos han dicho que es el sedentarismo, la mala alimentación, la influencia y apogeo de la comida chatarra, el estilo de vida apresurado que lleva la modernidad y recientemente que se trata también de nuestros genes. Según estudios realizados por investigadores mexicanos, la población de nuestro País presenta una alta predisposición genética para desarrollar sobrepeso y obesidad; sin embargo, ¿es verdaderamente genética o más bien una cuestión cultural?

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México -así como Colima- es un lugar rico en gastronomía, en el cultivo de

sino de estados, regiones y hasta comunidades. La variedad en recetas y platillos es amplísima. Y aunque luego nos pongamos a la defensiva, la verdad es que la mayoría de estos platillos se sustentan en el maíz o trigo: grano, tostada, masa, pan o tortilla.

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Entonces, ¿es herencia genética o herencia gastronómica lo que nos llevó a 49.7 millones de personas en el País con sobrepeso y obesidad en 2012? Seguro ahora somos más. Y aunque las cifras asustan, ¿quién se resiste a una

orden de sopitos?

22 25 EL GUARDIÁN DE COLIMA. Revista mensual. Marzo 2014. Editor responsable: Dorian Levy Lavalle. Número de

certificado de Reserva de Derechos al uso exclusivo otorgado por el Instituto Nacional del Derecho de Autor: En trámite. Número de Certificado de Licitud de Título: En trámite. Número de licitud de Contenido: En trámite. Domicilio de la publicación: Calzada La Armonía 270 Colima, Colima México CP 28020 Teléfono (312) 313 19 40 Fax (312) 313 15 00. Dirección: Dorian Levy Lavalle Diseño: Omar Bobadilla Edición: Gaby A. Pinto Ilustración: Alejandro ‘Monero’ Ponce Colaboran en esta edición: Brenda Torres, Edgar Torres, Luis Tadeo, Xiomara Espinosa, Fernando Castillo, Fernando Montes de Oca, Lorena Vargas, Zorayda Castro, Javier Barragán y Rosalba Thomas. Ventas: PromoLevy (312) 313 1940 ventas@radiolevy.com

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El mayor nivel es la Universidad. La gente de Mondou Loft Salón se capacita ahí. Del mu ndo a tu m e sa

Todo fuera como saber de dónde viene el jitomate de la salsa y la sal que esparcieron sobre el corte de carne que estás a punto de comer. L a f ru ta ta m b i é n s e p one e n s u s d í as

Del árbol, de la tierra, a las manos de quienes la producen, a las bolsas de quienes la venden en los camellones, a tu boca. 8 a ntojos , 4 t ip os de pa r e ja

Algunos tan diferentes, otros que se emparejan perfecto. Como el amor mismo. A fa lta de pa n … to r t i llas

¿Cuántas tortillas te comes al día? Acá una ingesta promedio por familia y personal. Desay u na co m o r e y, come como pr í n c i pe y c e na com o m E n d i g o

La Chef Pirata se lanzó a cuatro cenadurías. Las dividió: dos de Colima y dos de Villa de Álvarez. Cuatro cenadurías, tres platillos. Aquí su crítica.

alimentos, así como en la cría de animales para el sustento de carnívoros. Son pocos los lugares en el mundo con comidas propias típicas no sólo de un País,

E l a rt e de h ac e r co lo r

28 30 30 31

E l ‘sa b or g o r d i to ’ de l p ozol e s e co

A que no sabías que se tiene que hervir más de 3 veces para que salga así. C a rne p ro h i b i da , c a rne con s u m i da

Si a ti la codorniz te parece un alimento extremo, mejor no leas este artículo. F otos e rie : E l c h a n g a r r o más b onito d e Co li m a

7 fotos de 7 amigos que disfrutan atorarle en la calle. Cómo no tragarte las emociones

Una báscula industrial en la entrada. Testimonios e información sobre los centros. Almorzando en el 5 de mayo

Todo el País en un solo lugar: el mercado 5 de mayo de Manzanillo. Lo sa lu da b le sa le c a r o

El Rufián hace de las suyas: es que hay un mar de diferencia entre comer en un lugar de ensaladas y una lonchería. ¿B a ja r de pe s o o come r sa n o?

Esa es la cuestión. C h ik ih u it e s pa’ la b a n da

Canasto, frutas, verduras, arroz, huevos, hortalizas. Si eres el típico colimense que no sabe qué es un chiquihuite, lee esto. N o más c ro q u e tas , dic e n los pe r r os

Comida para can como nunca la imaginaste. S il l as h asta e n e l t e c h o

En Gaudí. Literal.

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El arte de hacer color Mondou Loft Salón es el único espacio en Colima con coloristas certificadas por la Universidad Redken Gaby A. Pinto

Alejandro ‘Monero’ Ponce

Hace miles de años los egipcios usaban henna, cenizas y plantas para cambiar el color del cabello. La gran revolución: los colorantes sintéticos del siglo XX. Esa salvación para nosotros las codas que no queremos pagar un salón. Para las que terminamos con pelo de escobeta. Para las que terminamos con las manos apestosas y manchadas. Para las que nos dura el color 15 días. Para las que terminamos con el cuero cabelludo reseco y tristes porque no es el tono almendra prometido que se le ve bien chido a la modelo de la caja. ¿Por qué no te haces color en el salón? El 60% nos hacemos color solas. Y es pésimo. Olvídate del tiempo rápido y de las malas experiencias en el salón de belleza -maltratos, trozos. Para exhibir el talento creativo y encontrar el color perfecto para cada cliente, Pedro Flores y Gloria Zárate -creadores de Mondou Loft Salón- han hecho que la experiencia de color sea perfecta. Es el primer y único salón en Colima en tener un estudio tan intenso en color. Nadie más ha terminado una universidad en colorimetría. Su equipo es capacitado constantemente en la Universidad Redken México para aprender los principios básicos en la teoría del color para utilizar la colorimetría con profesionalismo y confianza. Al momento de ver tu tono de piel y de cabello, Gloria Zárate y su equipo ya saben qué color te queda. Imagínate qué padre que te hagan un color exclusivo. Es una experiencia de color, es hacer color de verdad. “Si sabes colorimetría, dominas el color”, dice Gloria. Olvídate de lo que te dice tu estilista acerca de tu pigmentación: no tiene por qué terminarte rojo o naranja. Esto es falso. La razón de ser del color es trasmitir una mejor imagen y lo mejor es encontrar aquellos colores que nos favorecen. Así como la naturaleza tiene una gama de colores para cada estación, de igual manera hay una gama de colores que van a resaltar lo mejor de nosotros. Mondou Loft Salón se encarga de estudiar la psicología aplicada en el color del cabello, eso los ayuda a reflejar la personalidad del cliente, la fluctuación del alma que tiene cada quien. Lo barato sale caro. Debemos de tatuárnoslo. Los tintes de caja tienen tanto amoniaco que es tan fuerte que puede llegar a hacer daño. Aquí usan colorimetría cero amoniaco. Tienen hasta tintes para embarazadas. Hombre, para ti también hay tinte: camouflage y brillo, para resaltar color. Que tu estilista no te mienta y no vuelvas a quedar como no te gusta. Pagues lo que pagues, fácil: no te queda, no te lo hacen. Si tu cabello no soporta equis altura de tono en rubio, no lo hacen. Ni siquiera en corte. Tú sales de Mondou con una garantía firmada por Pedro o Gloria. Es neta, yo la vi. Es un formato en el que anotan las fórmulas que te aplicarán en el cabello. Firmas antes, pero también se hacen responsables por si algo le pasa a tu cabello. Si algo no te gusta, puedes regresar con toda la confianza, no te cobran nada y lo arreglan. “Puede haber errores, pero nos hacemos responsables sin ningún costo”, confirma Gloria. Pero ahí no queda. Al tercer día te llaman para ver cómo sentiste tu color, si estás usando el producto o si tienes alguna duda. Creo que es un sentimiento universal: que nos traten bien. Aquí se vive y lo garantizan. Tú decides.

PARA HACER ESTE TEXTO Escribí la palabra color 19 veces, contando esta última.

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Del mundo a tu mesa Edgar Torres

La verdad, así siendo sinceros, ¿te preguntas de dónde habrán traído la carne del corte fino que estás a punto de comer en un restaurante?, o ¿te preocupa saber de dónde vienen los chayotes, el perejil, incluso la sal que a diario consumes en casa y compras en el supermercado? Supongo que muy pocos o nadie lo hace. Preocupa poco saber en dónde siembran, cultivan y cosechan las frutas y verduras que semana a semana son surtidas en tu sitio de preferencia. Seamos realistas, la primera preocupación es el precio. La segunda, la calidad del producto, es decir que se vea apetecible y que esté en buenas condiciones. Tal vez la última sea acerca de dónde viene en realidad el producto. Puedes pensar, con la fama que tiene el limón colimote con todo y su feria del limón -que por cierto fue celebrada en enero-, que los ricos y jugosos frutos cítricos que encontramos en los centros comerciales provienen de los árboles de Tecomán -que incluso tienen un enorme monumento en la entrada al Municipio-, pero no es así. Los limones que se consumen en Colima, en su mayoría provienen de Michoacán, estado que tiene una producción al doble que la de nosotros, o de Veracruz y Guerrero. Ambas entidades también son proveedores de un estado que tiene uno de los mejores limones del País. Es tan excelente el limón que produce Colima que la mayor parte es enviada a otras entidades, incluso a otros países. Para que te des una idea sobre la diferencia en la producción de este cítrico, en 2012 Michoacán produjo 687 mil toneladas, mientras que en Veracruz 555 mil toneladas y Colima 330 mil. La producción de limón en Michoacán equivale en peso a 29 veces la Torre Latinoamericana. El limón de Colima que se queda para consumo local es el que se encuentra en su mayoría en los tianguis. Se le conoce como ‘pachanga’, producto de un tamaño menor al que se exporta. También las tiendas de abarrotes suelen ofrecer este limón colimense que es el que no pasó los estándares para su venta fuera del estado. Si tuviéramos que enumerar el producto del 1 al 5 siendo el 5 el de mejor tamaño y peso, el que se queda en el mercado local es el 1 y el 2, el resto se exporta. Cuando vas al centro comercial y lees en las etiquetas la variedad de fruta que compras, algunas nos dicen de dónde vienen, como el plátano Tabasco que en realidad es plátano ‘Valeri’, como el que se produce en Colima. Igual que el limón, el plátano de mejor tamaño se exporta y en las tienditas y tianguis conseguimos la producción que se maduró o no reunió los estándares, la famosa pachanga. Son también de Colima las piñas que se venden en las calles, esas de tamaño pequeño. Las de exportación son mucho más grandes… se trata de fruta de 30 o hasta 40 centímetros. El hecho de que las piñas pequeñas se queden para el consumo interno no significa que sean de mala calidad, no; pero sí son, como me dijo un amigo que conoce del tema, las sobras.

IMPORTACIÓN

Sinaloa

EXPORTACIÓN COLIMA

LIMÓN

PIÑA

POLLO

NAYARIT

POLLO

HUEVO

JALISCO

CARNE

LÁCTEOS

MICHOACÁN

GUERRERO

LIMÓN

CARNE

HUEVO

AGUACATE

LIMÓN

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AZÚCAR

BRASIL

NARANJA

LIMÓN

veracruz

plátano

TABASCO

¿Te apetece un juguito de naranja? De seguro en los restaurantes o en casa acostumbras acompañar el desayuno con un jugo de naranja. Por si no lo sabías, lo que consumes es naranja de Veracruz, que es uno de los principales productores a nivel nacional y que provee al estado de Colima debido a que la producción local es muy pequeña. Incluso la marca Citrus se abastece de naranja veracruzana cuando no es temporada en Colima. En el País, Veracruz produce el 44.3% de la naranja, seguido de San Luis Potosí con 12.6% y en tercer lugar Tamaulipas con el 9.9%, según datos del Siap (Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera) en los que Colima no figura. El aguacate para el sushi o guacamole que consumimos en Colima proviene de Michoacán. La leche, la crema, los quesos y lácteos en general provienen de Jalisco o Michoacán. La única marca local es ‘La Ordeña’, pero al ser leche entera, una buena parte de colimenses prefiere la pasteurizada, deslactosada y la gran

variedad que ya se oferta en el mercado. Aunque en Colima se produce caña de azúcar, resulta que consumimos azúcar de Brasil. Eso, gracias a que el anterior gobierno federal calculó que la producción en el País sería insuficiente. Entonces, se mandó comprar a otras partes, situación que no gustó a los cañeros. ¿Sabías que México es el principal consumidor de huevo fresco en el mundo? Según la Unión Nacional de Avicultores así es, y en el País se consumen un promedio de 21 kilos de huevo al año por persona. En Colima comemos los blanquillos y pollos de Nayarit. No se compra a los estados vecinos de Jalisco o Michoacán porque su estatus fitosanitario es inferior al nuestro y en todo caso se debe buscar a un productor con estándares superiores y en ese sentido, les ganamos. La producción de huevo en Colima es mínima: existen alrededor de 19 granjas avícolas tecnificadas y cerca de 500 traspatios en la zona rural. En el estado se produce anualmente un aproximado de 13 mil 600 toneladas de carne de pollo

y en todo México se consume entre 26.8 y 27 kilogramos de pollo por persona al año, según los datos de los productores a nivel nacional. En cuanto a la carne de res, Jalisco y Michoacán siguen siendo los principales proveedores. En el caso del cerdo se suma el ganado de Sinaloa -según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa). También es de Sinaloa la harina de trigo, en Colima no se produce esta semilla. Con este breve recorrido en productos que consumimos a diario te enteras cuál es el proceder de lo que comemos. Los alimentos que cuentan con el sello de ‘orgánicos’, en su mayoría son del estado de Colima. El café, por ejemplo, que se produce en Comala. También hay otros productos que están abriéndose paso de forma exitosa como los plátanos fritos que encontramos en algunas tiendas y que son producto colimense; pero en general, lo que consumimos en la mesa, viene de fuera.

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La fruta también se pone en sus días Luis Tadeo

Colima produce todo el año plátano, lima, piña, coco, papaya y maracuyá asi que aprovéchalos

Desde pequeños, el discurso constante que recibimos de nuestros padres y que nos repiten por todos lados incluye la frase ‘Come frutas y verduras’. La de los papás es ‘Cómete las verduras’- y lo hacíamos a regañadientes. Con el tiempo, ya más creciditos empezamos a consumir una que otra manzana -llamada la fruta del pecado, por aquello de Adán y Eva-, unas fresas -la fruta de la pasión por su color y forma de corazón, y algunas otras como el mango -con chile y limón- que apaciguaban el antojo voraz de nuestra adolescencia. Esas etapas pudieron pasar casi desapercibidas para algunos de nosotros porque la palabra “nutrición” no era parte del vocabulario que usamos cuando chavos. Tampoco nos eran comunes las “calorías”, el “sobrepeso”, “la dieta balanceada” y mucho menos “salud”. Muchos queremos arreglar cada problema ya que este nos está aplastando, y como adultos, son las complicaciones de hipertensión, triglicéridos, diabetes, embolias y paros cardiacos las que nos recuerdan que no hemos tenido una buena alimentación: basada en la combinación adecuada de granos, verduras, carnes y lácteos. El nutriólogo es el único indicado para decirnos qué comer y en qué proporciones, pero esta profesión -licenciado en

nutrición- no es tan valorada. Incluso, datos del Inegi advierten que en el País existe un promedio de apenas 2.4 especialistas en nutrición por cada 1 mil habitantes.

¿Quién nos ayudará? México ocupa el segundo lugar en sobrepeso y obesidad entre los países que integran la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (Ocde), y el nada honroso primer lugar mundial en obesidad infantil. Hoy, 70% de los adultos mexicanos son obesos o tienen sobrepeso. Uno de cada tres adolescentes de entre 12 y 19 años ya presenta sobrepeso u obesidad, según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012. Todo esto es el resultante de la suma de malos hábitos alimenticios que poseemos tal vez por costumbre, falta de orientación o mala condición económica, aunque estos tres últimos pudieran parecer excusas. La solución es más sencilla y barata de lo que pudieras pensar, no requiere de medicamentos “milagrosos” ni dietas “maravillosas”, ni te la queremos vender en abonos. Desde tiempos prehistóricos, el hombre y la mujer tenían dos funciones principales para mantener a su grupo alimentado: ellos se dedicaban a la cacería y ellas salían en

búsqueda de frutos, los cuales recolectaban para su consumo y otros fines. Juntos, por instinto, balanceaban su dieta: comían lo que en ese momento les apetecía, siempre y cuando lo hubiesen tenido a la mano.

Entre las ramas Las frutas y las verduras han sido el secreto, desde entonces, para complementar la alimentación, que actualmente se basa en granos y carnes… además de mucha grasa, sal, exceso de colorantes, saborizantes, y endulzantes. Si no me crees, dale un vistazo a los ingredientes de todo lo que te comes empaquetado, verás nombres de químicos impronunciables y lo peor es que no sabemos qué son, ni para qué están allí. Lo más natural, sobre todo satisfactorio, es comer una fruta de temporada, que normalmente nos refresca haciendo que nos sintamos ligeros… y es que frutas y vegetales están constituidos en 80 ó 90% de agua. Nuestro cuerpo también. Te invito a consumir verduras y frutas. Seguro tu mamá o tu abuelita te dieron a probar platillos deliciosos a base de las mismas y has dejado de comerlos. Si sigues estas sencillas recomendaciones, ahorrarás mucho dinero en médicos y lograrás sentirte como cochecito recién salido de agencia: nuevecito.

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Sergio ‘Tapiro’ Velasco

Temporadas y propiedades La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) comparte las opciones que tenemos durante el año en Colima: Aguacate

Granada

Mango

Pepino

Se produce durante 7 meses, de mayo a noviembre, alcanzando su máximo en el mes de inicio y fin.

La hay desde agosto hasta noviembre.

Abunda de enero a febrero y julio-noviembre.

Producción mayor de junio a diciembre.

(Anti envejecimiento):

Cereza

(Regula ritmo cardiaco):

A la venta durante 4 meses, desde abril -con abundancia-, hasta julio. Ciruela

(Baja el colesterol):

Se da desde mayo hasta septiembre. Durazno

(Desintoxicante):

Disponible por 6 meses, de abril a septiembre, con abundancia en el mes de inicio y fin. Frambuesa

(Mejora la circulación):

Mayo-septiembre es su temporada. Fresa

(Tiene ácido fólico):

En los estantes, de enero a junio.

(Previene infecciones):

Guamúchil

(Calma el dolor de dientes y de oídos, cura la indigestión, útil en caso de abortos y contra la diarrea):

Desde diciembre hasta mayo. Jícama

(Previene el estreñimiento):

Abundante de noviembre a febrero. Kiwi

(Fortalece sistema inmunitario):

Desde enero hasta abril y de septiembre a diciembre. Limón

(Combate la gripe):

Se encuentra en dos periodos, enero-junio y octubre-diciembre. Mandarina

(Antiviral y diurética):

Desde enero hasta abril y de octubre a diciembre.

(Para piel y cabello):

(Rehidrata la piel):

Melón

Pitayas

Con producción de mayo a octubre.

Abril, mayo y junio.

(Neutraliza la acidez):

(Depura intestinos y sangre):

Membrillo

Pomelo

Disponible de julio a octubre.

Tiene dos temporadas fuertes, de enero a mayo y de octubre a diciembre.

(Ataca problemas respiratorios):

Moras

Protege el corazón, cuida las encías y previene el cáncer

Agosto a septiembre. Naranja (Anti estrés):

De enero a mayo y octubre a diciembre. Pera

(Disuelve ácido úrico):

En su apogeo desde mayo a diciembre.

(Para perder peso):

Sandía

(Contra la hipertensión):

Con producción continua de mayo a septiembre. Tacuachines

(Propiedades diuréticas):

Se encuentran de mayo a septiembre. Uva

(Purifica la sangre):

Se consigue fácil desde agosto hasta diciembre.

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Alejandro ‘Monero’ Ponce

8 antojos, 4 tipos de parejas

Ponche de granada

ALFAJOR DE COCO

Amor de lejos. Aunque el ponche es más tradicional en Comala, las distancias se acortan cuando queremos acompañar un delicioso alfajor de coco con un ponche de granada bien fresco.

TEJUINO

PALETA VILLANA

Amor apache. Quizá la mezcla entre el saborcito de limón del tejuino y lo dulce de una paleta de mamey de La Villa no sea la ideal, pero vamos, muchas veces los opuestos se atraen, ¿no? Producción: Gaby A. PInto, Fernando Montes de Oca, Diego Hernández, Alejandro ‘Monero’ Ponce y Omar Bobadilla.

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PICÓN COMALTECO

CAFÉ DE CANOAS

Amor de mis amores. Cuando ven juntos a este par todos suspiran, claro, pues es amor puro y real, ya que lo calientito del café y lo suave del picón hacen una combinación perfecta, más en una mañana lluviosa.

TOSTADA DE CUERITOS

COCO HELADO

Amor correspondido. Qué bonito ser correspondido, y con esta pareja no tuvimos que buscarle mucho, desde el principio supimos que la frescura del coco era ideal para complementar lo picosito de los cueritos, sobre todo cuando hace calor.

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A falta de pan… ¡Tortillas!

Fernando Castillo

Los colimenses no comemos, tragamos bien… pero no tan bien como se debiera. Las mamás chapadas a la antigua creían que las porciones que les servían a sus hijos eran buenas, aunque fueran las de un adulto. Creían también que ser gordito era sinónimo de bien alimentado, es decir, mejor gordo que dé gracia a flaco que dé lástima. Pero estaban en un error. A diferencia de otros países, en México hay comida de dónde escoger, muchos árboles frutales y animales de dónde obtener carne. El problema es que la mayoría de las veces escogemos mal, es decir, no balanceamos bien nuestra alimentación. Un ejemplo: ¿Cuántas tortillas te comes al día? Si tu respuesta fue tres, es obvio que estás mintiendo. De acuerdo a un estudio realizado en 2012 por el Inegi, el promedio de tortillas por día de una persona era ocho. Hay quienes es capaz de comerse hasta medio kilo de tortillas. Según el Inegi, una persona puede comerse 6.5 kilogramos de tortillas al mes, ¡78 kilos de tortilla al año! Sólo de tortilla. Y no sólo comemos mucha tortilla, también consumimos más refresco al mes (12.8 litros) que leche (10.4 litros) e incluso que agua (5.8 litros). Eso que gastamos en refresco bien podríamos invertirlo en frutas, verduras, huevo e incluso pescado. ¿No lo crees? La mayoría de nuestras comidas no son malas, simple y sencillamente no come-

Me nú de u n día pa ra u na fa mil ia de 5 pe r s o n as

Desayuno

COMIDA

CENA

2 huevos fritos por persona

3 Albóndigas por persona

2 Tazas de cereal por persona

1/2 kilo de tortillas

1 Refresco de Cola de 2 litros

1 Plátano para los 2 niños

(180 kcal)

(1280 kcal)

Café

(129 kcal)

(829 kcal)

1 kilo de tortillas

(10 kcal)

(2560 kcal)

(248 kcal)

(96 kcal)

2 Tamales de ceniza por adulto (824 kcal)

1 Vaso de leche (248 kcal)

Me nú de diE GO E N UN DÍA NORMAL

Desayuno

COMIDA

CENA

2 Tazas de cereal

1 Torta de lomo adobado

3 Hotdog con papas

(248 kcal)

1 Pieza de pan dulce (365 kcal) (248 kcal) 4 Tacos tuxpeños 1 Vaso de leche (458 kcal) (248 kcal) 1 Papas fritas (183 kcal)

1 Refresco de Cola de 600 mililitros (251 kcal)

(986 kcal)

1 Refresco de Cola de 600 mililitros (251 kcal)

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Alejandro ‘Monero’ Ponce

mos balanceado. Aunque para muchos la buena alimentación va ligada a su ingreso económico, no saber combinar los grupos de alimentos es el motivo principal por el cual llevan una mala alimentación.

Más vale pura tortilla que hambre pura Casi todas las familias recurren a los cereales, es decir, el arroz y el maíz, en sus diferentes formas de preparación. Muchas veces se intenta sustituir lo que es inalcanzable -por cuestiones económicas- con los cereales, que son más accesibles y para satisfacer el paladar. Los alimentos más recurrentes en la dieta de los mexicanos son el huevo y los frijoles. Y pese a que México tiene vastos litorales, el que menos se consume es el pescado. Para valorar bien qué y cómo comemos, analizamos el caso de una familia integrada por cinco personas así como de una persona soltera que vive sola. Aunque pareciera imposible, el consumo de verduras se limita a unas cuantas como las papas -en carne con papas-, zanahorias y calabacitas -regularmente con huevo- y los chayotes -en su mayoría en caldos y cocidos.

Sin embargo, la alimentación cambia drásticamente -y no para bien- cuando una persona vive sola y su alimentación depende de su ritmo de trabajo. Diego, un joven maestro de 24 años, que viaja todos los días a Manzanillo para impartir sus clases, asegura que no come bien y que ha intentado cambiar su alimentación pero le es imposible por su carga de trabajo. En pocas palabras, sus comidas dependen cien por ciento de sus actividades. Regularmente desayuna en su casa, ya sea un plato de cereal, pan dulce con leche o una taza de café. A mediodía, cuando tiene que tomar el autobús a Manzanillo, compra una torta en la tienda de la central de autobuses. Durante el receso come 4 tacos tuxpeños, papas fritas, duritos con salsa o flautas de pollo; eso sí, siempre con un refresco de cola de 600 mililitros. Una vez de regreso a Colima capital –donde vive-, sale a comer con sus amigos a algún sushi o franquicia de comida rápida. Los días que decide comer en casa y no sale con sus amigos suele pedir pizza –que regularmente se come la mitad y al día siguiente la otra mitad-. Diego reconoce que su alimentación

no es buena y no respeta los horarios para comer. Algunas veces come al salir de casa y otras no, como cuando se despierta tarde después de una larga noche de bares. Además, dice haber subido por lo menos seis kilos desde que inició el ciclo escolar. Para Diego, comer ensaladas y “alimentos saludables” es necesario desembolsar un buen monto económico. Para la familia es aún más complicado hacerlo pues comer alimentos saludables todos los días es imposible debido a que las porciones se duplican a la par del costo de los ingredientes, “y no es el único gasto que hay que cubrir”. Un estudio realizado por Consulta Mitofsky revela que para el 47 por ciento de los mexicanos comer sanamente es caro, y un 38.7 por ciento señaló que es barato. “Si se busca una alimentación balanceada se puede seguir el plato del bien comer”, nos recomienda el nutriólogo Sergio Magaña Peña. El plato del bien comer clasifica los alimentos en tres grupos: verduras y frutas, cereales, y leguminosas y alimentos de origen animal. Además de las tres comidas

diarias, es importante llevar dos colaciones entre el desayuno y la comida, y la comida y la cena. Además, señala el nutriólogo, si se deja el refresco, la comida chatarra, el pan dulce y el cigarro o alcohol -que no son alimentos pero significan un gasto considerable-, una familia podría llevar una excelente alimentación, redistribuyendo lo que erogaba en estos productos en comprar fruta de temporada -que es más barata-, agua fresca y una buena porción de verduras al día. Sin duda alguna, un error que la mayoría cometemos –me incluyo- es pensar que las tortillas son como las cucharas. Las usamos para sopear, para el huevo, para los frijoles y todas las demás comidas. De ahora en adelante, usaré más los cubiertos y reduciré mi consumo de tortillas. Mi consejo personal es también incluir más verduras solas que acompañadas. Es decir, en lugar de acompañarlas con huevo u otros ingredientes, comerlas al vapor con sal –pero no mucha porque también es mala en muchas cantidades- y pimienta. Cambiar la pasta por una pequeña ensalada –podría ser tipo César, mi favorita-. Si nos da hambre, cambiar las frituras por fruta picada.

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Desayuna como rey, come com La Chef Pirata

NUEVE CENTÍMETROS

De diámetro tienen las tortillas para sopito. Las de taco callejero tienen entre 13 y 15 y es más delgada.

Eso rezan los profesionales de la salud. Si solo comiéramos obedeciendo a nuestras necesidades calóricas diarias, ¿en dónde quedarían los caprichos del paladar? En México tenemos una palabra muy particular para referirnos a este tipo de alimentos, a los cuales llamamos “antojitos”, la cual evoca al aperitivo, a ese deseo de paso que por un lapso se instala en nuestra mente y se resiste a dejarla en paz hasta no ser saciado. También nos pudiera dar idea de una cocina simple, callejera e informal. Sin embargo, muchas de las preparaciones que podríamos considerar dentro de esta categoría de la vastísima cocina mexicana, distan de ser rápidas o simplonas en su hechura y estructura de sabores. Para los antojos no hay horarios fijos. En varios estados de la república se sirven los antojitos a cualquier hora del día, ya sea desde el desayuno hasta la merien-

da. Sin embargo, en nuestro querido Colima, es más común encontrarlos como un platillo crepuscular. En un rango que va desde las 7 de la tarde hasta las 11 de la noche. Apenas oscurece y las cenadurías comienzan a montar mesas, colocar manteles y sobre ellos el imprescindible servicio de salsa, limones y sal para que el comensal termine de ecualizar los sabores de acuerdo a su gusto, una vez llegado el plato. Lupita, Julia, Meche, Katy. Las cenadurías son restaurantes con nombres femeninos en su gran mayoría. Esto se debe a que son bautizados con el nombre de su fundadora y generalmente permanecen con el mismo a través de los años, aunque el conocimiento y el arte vaya pasando de generación en generación. Es, pues, una forma de rendir homenaje o preservar la memoria de quien dio inicio a esa tradición familiar.

En las cenadurías se sirven antojitos mexicanos, sí, pero en esa enorme variedad de antojitos que existen en nuestro País, veremos que en Colima destacan el pozole, las enchiladas, las tostadas, los sopes gordos y sus hijitos ‘los sopitos’. Definir el origen de estos platillos con precisión sería tan arriesgado como meterse en una huizachera. Entraríamos en una disertación filosófica nivel “¿qué fue primero, el huevo o la gallina?”. No obstante, algunas de estas preparaciones son versiones tropicalizadas o modificadas de algunos platillos que son bandera de otros estados. Aunque a muchos orgullosos les cueste aceptarlo. Ojo, no por eso se devalúan o pierden mérito. Los sopes, por ejemplo, son un platillo típico del centro de México. Estas tortitas redondas de masa, son un poco más gruesas que las tortillas, además de tener un borde en su contorno el cual es logrado

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Alejandro ‘Monero’ Ponce

mo príncipe y cena como mendigo a base de pellizcos. Se untan de frijoles y montan con diferentes ingredientes, ya sea de guiso de papa con chorizo, pollo o puerco deshebrado, alguna salsa, cebolla picada, queso fresco desmoronado, lechuga picada y rebanadas de rábano. La versión de los sopes que se sirven en las cenadurías en Colima podría decirse que es prácticamente igual o muy cercana a la original. “¡Enchílame ésta!”. Algunos dicen que el origen de esta curiosa frase viene de la acción de untar las tortillas con la salsa de chiles secos después de haber sido fritas en manteca. Es decir, hacer enchiladas. Esta preparación es una de las que presenta mayor despliegue de versiones o variantes dentro de los antojitos mexicanos. Existen las enchiladas del Santuario, originarias de San Luis Potosí; las Tultecas de Tamaulipas; las Placeras o de Pollo de Plaza, provenientes del estado de

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La Chef Pirata

Desayuna como rey, come como príncipe y cena como mendigo Michoacán; las de Jalisco; las sencillas del centro de México; las rojas de Aguascalientes; las de Fresnillo de Zacatecas y las mineras de Guanajuato, solo por nombrar algunas. El homólogo colimense se caracteriza por tener un gusto dulce, el cual es conferido por las pasitas que se agregan al relleno de picadillo y el azúcar que se adiciona a la salsa de guajillo y pasilla en la que se mojan las tortillas. También hay quienes agregan clavo, chocolate, piloncillo, canela y masa de maíz a esta salsa, convirtiéndola en una especie de mole por su sabor especiado y textura. Una verdadera delicia. El origen del pozole se remonta a la época prehispánica. Su nombre, se deriva de la voz náhuatl pozolli, que significa “espuma”, ya que los granos de maíz cacahuazintle presentan ese aspecto cuando revientan por el proceso de nixtamalizacion -cocción en agua con cal- al cual son sometidos. Rojo o blanco, el pozole es una sopa que está constituida de maíz cacahuazintle y carne -ya sea cerdo, pollo y hasta pescado y mariscos como el camarón. Los aderezos son muy variados según la región. En Celaya, Guanajuato por ejemplo, el caldo ya servido se corona con chicharrón de cerdo y rebanadas aguacate, pero el común denominador para el resto de los estados sería col, lechuga, rebanadas de rábano, jugo de limón, salsa de chile, y cebolla picada. Y como acompañamiento, las tostadas de maíz. El pozole en Colima es un caldo blanco opaco, acompañado de diferentes piezas de cerdo, como lo son la maciza, bandera, espinazo, pierna, pata y cuerito. Los granos de maíz pozolero deben de ser firmes y estar completamente “floreados”, como describen las expertas cocineras de las pozolerías del mercado de abastos. Esta receta es prácticamente igual al blanco guerrerense. Sin embargo, existe una variante, que es el pozole seco. La diferencia de este platillo estriba en que en lugar de caldo, se forma una pasta con los granos molidos previamente cocidos, sobre la cual se esparcen algunos granos enteros y se remata con la carne cocida. No es casualidad ver generosos platos de pozole en los altares de muertos de la ciudad en el 2 de Noviembre. Es una pócima poderosa, un caldo reconstituyente que deleita hasta a los difuntos. Sin más preámbulo, les comparto entonces está brevísima lista-reseña de algunos de los establecimientos que son un referente de cenadurías de antojitos mexicanos en Colima. Me encantaría leerte. Deja tus comentarios en: lachefpirata@hotmail.com

DE OCHO A DIEZ HORAS

Es lo que tarda el maíz en estar cocido, previo a recibir la carnita de puerco. Hierve por más 500 minutos.

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Antojitos mexicanos Doña Veda Ruben Darío 334, Lomas de Circunvalación, Colima, Colima. Horario: 14:30-20 hrs de lunes a sábado.

“Este restaurante no tiene nombre”, explica Doña Veda, quien es propietaria de un pequeño establecimiento montado en la cochera de un domicilio particular, donde apenas 5 mesas reciben a los “hambreados”. Veda, quien podría presumir de tener doctorado en pozole, opera desde 1975 en este mismo local convenientemente ubicado en una de las vías más transitadas de la ciudad. Con orgullo comparte que ha sido testigo de cómo familias colimenses siguen visitando su restaurante aún después de 3 generaciones. Mientras degustaba un pozole chico acompañado de un agua de jamaica, pude ver cómo varias personas que parecían ser vecinos de la colonia, fueron desfilando uno por uno con sus recipientes de plástico, ordenando platillos para llevar la cena a sus casas. Sobre el muro, una cartulina fluorescente enlista las opciones: pozole especial, normal y chico, enchila-

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Cenaduría Katy

Avenida Manuel Álvarez 386. Casi frente al excine Reforma. Villa de Álvarez. Colima. Horario: 19-23:30 hrs. Descansan los martes. Tamalos solo los sábados y domingos.

Sobre la Avenida Manuel Álvarez se divisa, a la altura del excine Reforma, “Katy”: un pulcro local bien iluminado y decorado en rojo y blanco en donde familias Villalvarenses se reúnen para degustar los platillos que ahí se preparan: pozole, tostadas, sopitos, sopes gordos, flautas, tacos dorados, enchiladas, atole y tamales. Mi elección en este lugar fue la fabulosa tríada: pozole, enchiladas y sopitos con un vaso de agua de horchata. Llegan los sopitos en orden de 6, ‘regulares’ -es decir, ni muy duros ni muy blanditos-, con una abundante porción de carne molida encima, convirtiendo a la tortita frita en tan solo el vehículo para el resto de los ingredientes que igualmente se agregaron en forma copiosa. La salsa de la cual se acompañan, que incluye el caldo de la cocción de la carne, está bien con-

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dimentada y de buen sabor. En definitivo, estos sopitos serían unos dignos representantes de este platillo en otro estado de la república. Segundo plato, las enchiladas. El mole con el que están bañadas es dulce y a su vez se percibe el sabor de los chiles secos y las especies. Suficientemente espeso para permanecer sobre la tortilla sin resbalarse completamente. En el relleno se aprecian los diversos componentes. En resumen, unas enchiladas bien balanceadas. Para rematar, el pozole. La carne es un poco seca, lo cual se mitiga con el caldo que acompaña la cucharada. Los granos son pequeños, pero con buen punto de cocción. Fue un pozole modesto, pero la experiencia general, bastante buena.

Cenaduría Lupita Álvaro Obregón 144, Centro, Colima.

Horario: 12-22 hrs. Descansan los martes.

Definitivamente algo digno de destacar de este restaurante es la decoración y el lugar. Un techado que asemeja un tejaban, cuadros de pintorescos paisajes y motivos mexicanos decoran los muros de este establecimiento que abre sus puertas desde 1974. Además de las preparaciones, servilleteros artesanales, coloridos manteles y sillas de asiento tejido son algunos de los detalles en los que han puesto atención los propietarios de cenaduría Lupita. Son 6 los sopitos duros que llegan a la mesa junto con un gran jarro de agua de jamaica. Los sopitos muestran una buena porción de carne molida y demás ingredientes. La salsa que

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das, tostada o sope, tacos dorados, orden de costilla, sopitos, tostada o sope senc. (abreviatura de sencillo). Llegué tarde, las enchiladas se habían acabado, por lo que inicié mi merienda con un sope gordo de lomo. Era un sope con unas gruesas rebanas de lomo de cerdo, untado de frijoles y servido con col, tomate, queso seco y salsa. De muy buen sabor, el sope estaba lo suficientemente grueso para ser percibido en cada bocado pero sin ser lo que más predominaba en el platillo. Sin duda uno de los mejores sopes que me he comido en la ciudad. Después llegó mi pozole chico, el grano era firme y el caldo bien condimentado, sin ese “tufo” a cerdo. Lo pedí con maciza, la carne era rosada y tierna, fue imposible dejar rastro de ella en el plato.

los baña tiene un sabor un poco pesado a comino. La tortita del sopito se ha oscurecido por haber sido frita en exceso, lo cual la ha amargado un poco. Son servidas después las enchiladas. En el relleno se distinguen la zanahoria, el chícharo y la papa. La salsa-mole que las baña tiene buen sabor y textura. El pozole es servido, los granos son pequeños, bien cocidos pero a la vez aún crocantes, algo deseable en este platillo. El caldo está bien condimentado, sobre sale el sabor a ajo cocido. El servicio me pareció especialmente amable y puntual, quedé invitada a regresar y darle una segunda oportunidad..

Cenaduría MERCEDES

J. Merced Cabrera 100. Villa de Álvarez, Colima. Horario: 17-23 hrs. Descansan los jueves.

El éxito de este lugar se evidencia con las obvias ampliaciones por las que ha pasado este inmueble. Desde la calle se aprecia el abarrotamiento de esta cenaduría, la cual presume de ser una de las favoritas y de más tradición en la ciudad desde 1974. Con el barullo de los comensales de fondo, las meseras parecían un poco abrumadas o desconcentradas. Minutos después de haber recibido un vaso de agua de horchata, el pozole es servido sin tener aún disponibles sobre la mesa el servicio de salsa, limones y verdura, algo que desespera a los que ansiamos iniciar de inmediato la degustación. El sabor era bueno, sin embargo el grano era chico y estaba demasiado suave por haber sido recocido. Como segundo tiempo, las enchiladas. Para mi decepción, el relleno era una masa disforme y desabrida. Difícilmente uno podría adivinar de qué ingredientes estaba compuesto. Además, la salsa-mole era muy aguada y con un resabio a café instantáneo. Al final llegaron los sopitos, fritos en término medio, parcos de

ingredientes y bañados con una salsa carente de su ansiado sabor. Quiero pensar que tuve mala suerte, que justo ese día su cocinera estrella “brilló por su ausencia” provocando que las preparaciones salieran de la cocina y fueran servidas a los clientes sin la debida supervisión. Para muchas familias colimenses, es parte de un ritual el culminar el domingo con todos los miembros de la familia reunidos con sendos platos de pozole, unas dulzonas enchiladas o los famosos sopitos, y demás platillos que se facturan en las cenadurías del centro de la ciudad y Villa de Álvarez. Quizá es de ahí donde derive en gran parte esa asociación inconsciente e inmediata que solemos hacer de los antojitos con la celebración, el gozo, la fiesta y la alegría, la familia y nuestra identidad como mexicanos. Son preparaciones cargadas de emotividad, capaces de lograr que un paisano que ha dejado México derrame lágrimas al volver a saborearlos, como si parte de su alma le regresara al cuerpo al comerlos.

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El ‘sabor gordito’ del pozole seco Alejandro ‘Monero’ Ponce Una adaptación que lo vuelve uno de los atractivos gastronómicos para los que visitan el estado y uno de los principales gustitos culposos dentro de la dieta colimense, ¿o no? No me dejarás mentir: ¿Una señora cruda de aquellas? Vamos a la Morelos. ¿Ya hay confianza con la novia? Tiempo de invitarla al Pozole seco Luisa. ¿Comida familiar? No hay por qué cocinar, pidamos un balde de Pozole seco Ramón. Por cierto, esa es otra de las peculiaridades de este platillo: lo puedes adquirir por kilo. Sí, encargas tu balde, le empacas sabroso y al final de la tragazón, regresas la cubeta y te devuelven tus $50 extras. Se dicen muchas cosas: que si el pozole verde de Guerrero es más sa-

broso por su variedad, que el rojo del Estado de México es mejor, que en el meritito DF preparan el más sabroso y que “qué transita por tus venas que no lo has probado en la Gran Tenochtitlán, carnal”. Se podrá decir misa de la evolución que ha tenido este platillo ancestral en cada región del País. O al menos eso digo yo. Pero los que realmente saben son los chefs jurados de la Justa Pozolera Nacional. Este es un evento que se organiza cada año, reuniendo a las 10 mejores pozolerías de México. A que no adivinas cuál fue el pozole ganador de la edición de 2012… Redoble de tambores… Relamida de bigotes… ¡El colimense! Tal como lo lees: en la sexta edición de dicho concurso, el pozole

calificado con mejor sabor, higiene y presentación fue el colimense, específicamente el manzanillense de la Pozolería Raquelito. En este restaurante, a cargo de Raquel Lozoya, preparan el pozole seco con carne de cerdo, lechuga, rabanitos, cebolla, col y limón. Si no lo has probado, ¡hazlo! Ahí o en donde quieras: un pozole calientito con limón y mucha salsa, de la picosita con chile de árbol. *Aplican términos y condiciones. Un delicioso y grasosito plato de pozole bien servido aporta aproximadamente 230 calorías.

Alejandro ‘Monero’ Ponce

Pozole rojo, verde o blanco; de cerdo, pollo o mariscos… vamos, ¡existe hasta pozole de champiñones! Mucha variedad, pero todos ellos y en todos lados con caldo. Pero, ¿pozole seco? ¿Así nada más? ¿Sin caldo? Si tú eres de fuera o aún no has probado este peculiar platillo, quizá te suene raro. Si lo has comido, seguramente eres asiduo consumidor y coincidirás en que forma parte de los manjares colimenses. Se basa en una receta bastante particular, cuyo secreto radica en… que no lleve caldo. El maíz se cuece con todo y carne -“con carne gorda para que suelte sabor gordito”, como dice la mamá de un amigo-, y se machaca o se bate hasta que quede consistente.

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Carne prohibida, carne consumida

Xiomara Espinosa

Además de pollo, res y cerdo, existen otros alimentos que son poco comunes entre los colimenses. Sin embargo, hay quienes los consumen. Aunque sorprenda, existe gente que incluye conejo, iguana, venado, caguama, armadillo, tejón o víbora -por mencionar algunos- en su dieta regular.

El restaurant mítico En alguna ocasión que fui a visitar familiares a Michoacán me platicaron de un restaurante pintoresco desde el nombre: La Ley del Monte. Según mis parientes preparaban platillos tan exóticos como faisán o jabalí. La curiosidad por conocerlo terminó llevándome hasta El Ranchito, Michoacán, lugar exacto donde se encontraba este restaurante. Estaba ubicado en el barrio ‘El Tinaco’, uno de los más bajos del municipio. Sin embargo, llegabas sin dar tantas vueltas. No era en sí un restaurante lujoso, no. Era una casa con un aire de minizoológico por el tipo de decoración y la carta de platillos. Al principio había un amplio corredor. Después, en un salón más grande, se encontraban las típicas mesas de plástico y una rockola donde ponían canciones populares. Las paredes tenían publicidad de la cervecería Corona, de las que suele haber en los botaneros, aunque este no era precisamente uno. Entre los platillos que recuerdo se

encontraban víbora, venado, chacales o birria de caguama. Digamos que había variedad. La iguana, por ejemplo, se podía preparar de tres maneras: a la mexicana, donde la carnita estaba deshebrada y era como en caldito con verduras; adobada, con un chilito especial que se veía bastante bien; y a la diabla, con una salsita picosa que le sacaba sus lágrimas a los comensales. El olor a carne a la leña y chiles de La Ley del Monte fue lo que me atrapó y también me dio un poco de seguridad, ya que cualquier carne asada es buena. Cuando llegó el momento de ordenar, mi electo fue venado, pues no me arriesgué a probar cosas nuevas. Podías encargar para llevar, llamabas para hacer un pedido. Cocinaban con leña, eso le daba un buen sabor a los platillos. Podías tomar cerveza. Muchas veces tuvieron problemas: en varias ocasiones cerraron el negocio por vender carne de animales prohibidos. El lugar era concurrido por federales y políticos de diversos estados. Pude conocer este mítico lugar del cual decían muchas cosas, incluso que si no respetabas la “Ley del Monte”, recibías un castigo. Lamentablemente, la idea de Gris Álvarez de convertir su restaurante en algo que le diera sustento a su familia y al mismo tiempo fuera algo distinto al paladar no sobrevivió y La Ley del Monte cerró sus puertas, con ello la posibilidad

de que muchos probaran platillos traídos del monte, o por lo menos que no son tan comerciales.

Carne no común Quizá algunos de estos platillos no causen sorpresa en el entorno local, pero vistos de lejos, no dejan de parecernos exóticos debido a la carne con la que se preparan. Las costumbres gastronómicas de cada País, estado, municipio e incluso de cada familia son distintas ya que la combinación de ingredientes es muy variable y el gusto por ciertos alimentos hace que los platillos cambien. Comer carne de conejo podría decirse que no es tan extravagante, pues ya se comercializa congelada y en la capital hay carnicerías donde te venden los kilos que necesites. Sin embargo, sólo algunos restaurantes presentan platillos con este tipo de carne, como es el caso de Los Portales de Suchitlán, donde acompañado de frijoles y tortillas, podrás saborear unas piernas de conejo asado. Ahora bien, hay de gustos a gustos. La iguana, por ejemplo, es uno de los alimentos que tampoco es tan extremo y tiene un alto valor nutrimental, pero no es tan común que las familias se reúnan y saborear un ejemplar ya sea asado, en caldo o bien sazonada en birria. No está de más decir que la iguana verde es una especie protegida.

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Marshall Astor · Flickr @lifeontheedge

ADVERTENCIA

Como dato curioso, en el recetario de Cocina indígena y popular (Conaculta: 2013) la iguana figura como un ingrediente principal en diversos platillos característicos de la gastronomía colimense. Aunque nos guste la película de Bambi, otro tipo de alimento cuyo sabor es intenso, pero delicioso, es la carne de venado -lo digo por experiencia propia. Es un poco más oscura que la carne de res y es necesario cuidar que no se ponga dura en el momento que se pone a asar, el venado es combinable en infinidad de platillos -uno de los más comunes es la barbacoa. Entre mis recuerdos de comida poco común se encuentra la carne de tejón. Cuando aún era pequeña, probé esa carne porque una vecina me regaló un poco. Era carne cocinada con salsa de jitomate. La verdad, si no me dicen que era tejón, no me doy cuenta. La carne de este ani-

Como nota que no puede faltar, es importante recalcar que este artículo habla de carnes provenientes de animales que están protegidos por leyes federales. El hecho de mencionarlas y hablar sobre ellas no es con la intención de promover su consumo ya que quien lo hace es bajo su responsabilidad y no queda exento de una multa o proceso legal.

mal no es lo único que los colimenses utilizamos: la grasa o manteca que produce es utilizada como remedio casero para ayudar con los síntomas de la gripe. La mayoría de los que han probado la carne de víbora de cascabel es por carácter medicinal, por más temor que cause. Las creencias colimenses aseguran que puede curar desde un dolor de cabeza hasta el cáncer. La forma más cotidiana para consumir víbora es asada o en caldo. Conseguir este producto resulta complicado -por obvias razones. Sin embargo, cuando se trata de curar enfermedades la gente se atreve a pagar y hacer lo que sea con tal de ver resultados favorables. Los precios por pieza de víbora oscilan entre $250 y $350 dependiendo del grosor que tenga el ejemplar. Tal vez conozcas o hayas escuchado hablar sobre los armadillos y su característica concha. La mayoría de las veces

que hay disponible carne de armadillo es porque estaba fuera de su cueva. Según dice mi abuelo, cocinar carne de armadillo tiene su chiste, ya que si no lo realizas correctamente, seguramente cuando lo consumas te hará daño. La receta que compartió amablemente conmigo, está basada en hervir la carne dos veces. En la primera ocasión debes colocar la carne en una olla con agua y añadir unas hojas de guayabo, éstas ayudarán a quitar el sabor fuerte a raíces que tiene la carne de armadillo. Una vez que haya hervido por aproximadamente 10 minutos, debes retirar el agua por completo, volver a llenar de líquido y dejar que termine su cocción por completo. A pesar de no ser tan común, los huevos y carne de caguama son otra de las rarezas que se consumen sobre todo en la parte costera del estado. Es necesario

señalar que consumir este tipo de alimento está prohibido por las autoridades de protección al medio ambiente, por ello los precios de estos productos son elevados y sólo pueden adquirirse por quienes realmente pueden pagarlos. Para cerrar este tour por platillos poco comunes, quisiera mencionar uno que me agrada mucho y que sólo puede ser consumido cada primavera. Las semillas de parota con huevo fue para mi paladar algo diferente, pero agradable. El sabor es muy parecido al de las alubias o habas. Este alimento es muy común entre las personas de comunidades en el municipio de Colima. La preparación es simple: las semillas se deben recoger o cortar del árbol cuando aún están verdes, luego se ponen a cocer en agua con sal y ya que estén un poco blandas, las cocinas con huevo.

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El changarro más

bonito de Colima Le pedimos a siete amigos fotógrafos que nos compartieran en imagen su lugar favorito para comer en la calle. Ajá, ese lugar al cual acuden para echarse unos taquitos al vapor o unos dogos llenos de piña y champiñones. Así que aquí te presentamos esta galería de la diversa gastronomía callejera, donde el primer mandamiento es comer de pie y hacer que el agua de horchata te rinda hasta que te acabes el último bocado. ¿Has visitado alguno de estos?

Rafael Cruz Realizada por artesanos colimenses, esta bebida de origen prehispánico, tradicional de esta zona del País, insiste en persistir en el desarrollo de una ciudad en constante movimiento, refrescando a una sociedad moderna que reconoce sus costumbres con un agradable sabor de miel de piloncillo y semilla de chan doradas en comal de barro, molida en metate y servida en jícaras o vasos.

Montserrat López Vas regresando a casa por la noche y tienes muchas hambre. Ves una luz muy brillante que te invita a parar, hay mucha gente en la acera así que te acercas más y ves que es un puesto de hotdogs con una cantidad enorme de aderezos y cosas para ponerle a tu ‘dogo’: piña, champiñones, jalapeños y salsas. Pides el hocho especial que tiene jamón, queso amarillo y asadero y así de fácil tu cena nocturna se acaba de convertir de un hotdog normal a un manjar de dioses.

Verónica Velasco Los tacos El Tigre son muy conocidos por los colimenses. Se caracterizan por su excelente servicio, ya que al llegar puedes sentir una atmósfera de amistad entre los clientes y el dueño. Además de tener un buen sazón y ser un lugar muy higiénico, es una excelente opción para cenar a altas horas de la noche. Se encuentran ubicados sobre la Av. Maclovio Herrera frente al jardín de San Francisco.

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Daniel Tadeo Me gusta comer en Chile Amor porque su ambiente es único y tradicional, prueba de ello son los colores que lo inundan de alegría. En este lugar te envuelven las costumbres mexicanas, con artesanías y canciones de grandes talentos como Pedro Infante. Las tortillas a mano, el sazón de los guisados y los atuendos que lucen quienes te atienden hacen que tu visita ahí sea realmente un viaje.

Pablo Mojica Desde que tengo memoria los Tacos Fredy , mejor conocidos como ‘tacos de a peso’ o ‘tacos de a dolar’, le han dado vida al barrio y no solo son famosos por su precio, simplemente el cotorreo natural de los que atienden y de los que asisten hace que te resulte muy familiar este lugar. Siempre he dicho que si un taquero no tiene buen cotorreo, lo más probable es que tampoco tenga buenos tacos.

Nelson Aldape

Este lugar es sencillamente uno de mis lugares favoritos para desayunar en Colima. Tacos don Miguel, ‘tacos el chicuelo’, ‘tacos del monte de piedad’ muchos son los nombres con los que identificamos. Me llenan el estómago con su rico sabor, auténtico y original, donde la col parece haber sido picada milimétricamente y la salsa me deja siempre las ganas de chuparme los dedos. El trato que me ofrece su propietario, Miguel García, me hace sentir consentido, lo siento como un tío, como un gran amigo de años por toda esa amabilidad que ofrece junto con sus tacos tuxpeños. Cada vez que voy me llevo unos de frijoles con mucha col y una sonrisa de oreja a oreja.

Diego Pérez

Asada, adobada, labio, lengua, chorizo, quesadillas, burritos y gringas. A dos cuadras de la entrada, es una visita obligada en tu paseo nocturno comalteco. Tacos doña Mary, atendidos por ella misma, se han mantenido por 12 años en el gusto no sólo de los locales, sino de quienes han disfrutado su sazón también en Colima, cuando Mary inició en el negocio de los taquitos hace 40 años.

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Cómo no tragarte las emocion Zorayda Castro

El miedo es el principal enemigo de una persona de talla normal u obesa. El miedo en una persona con sobrepeso puede ser la barrera más alta que tiene que vencer, al ingerir alimentos para llenar un hueco, una ansiedad. La obesidad es un tema gordo, tan gordo como es el problema en la realidad. A petición de las entrevistadas, no usaré sus nombres reales. Martha venció su miedo y se enfrentó a ella misma. Cansada de tener 60 kilos más de lo que corresponde a su peso normal, buscó dietas, pastillas y mil horas de gimnasio, pero no lograba bajar ni la cuarta parte a la que tenía que llegar. Fue una compañera de trabajo quien le recomendó que acudiera a uno de los dos centros de Tragones Anónimos que hay en la ciudad. Con la decisión de cambiar su vida y mejorar su salud, llegó al centro TA con más expectativas y vergüenza que los kilos de más que llevaba encima. Las siglas son iguales a las de Alcohólicos Anónimos (AA). El tratamiento y las reglas son muy parecidos, lo que diferencia es el alcohol de los alimentos, pero ambos coinciden que la raíz del problema son las emociones. Tragones Anónimos (TA) emula reglas de AA. En los centros es fundamental trabajar con las emociones, de ahí el por qué de las reuniones constantes para compartir experiencias de vida, pero sobre todo de la

lucha constante por alcanzar su peso, más que ideal, normal. Para llegar a una meta se debe plantear un proceso, es decir, pasos a seguir para llegar al objetivo: el peso ideal o correcto. La honestidad, aceptar y reconocer uno mismo que tiene un problema de salud, ayuda a buscar y encontrar soluciones. También la fe en la creencia en un ser superior que guíe. No existe un nombre porque no define creencia religiosa. Sólo un ser superior, a quién platicar y pedir resolver los problemas personales, que brinde fortaleza, derribe miedos y de manera humilde, que limpie culpas. La disciplina es la medición de la fuerza de voluntad y el quererse a sí mismo. La humildad es también fundamental porque se reconocen los errores y los daños que pudieron haberse hecho a terceros. Con humildad se autoanalizan aspectos negativos en uno mismo para lograr corregirlos. Los centros de Tragones Anónimos tienen la característica de ser una casa normal, pero con la diferencia de tener una báscula industrial en la entrada. Es importante que el adicto a la comida se sienta como en casa: sala, cocina, dormitorios, cuarto de servicios y hasta un plan alimenticio en el refrigerador de la casa. ¿Quién no lo ha hecho? Aunque sea para ver la dieta de vez en cuando y recordar que se debe comer con moderación.

Terapia grupal Además de seguir con los 12 pasos, es necesario participar en la terapia grupal. Martha asegura que da mejores resultados. Recordó que al inicio de su tratamiento era renuente a participar en una sesión que está dentro del mismo centro, sólo llegaba por su pesaje semanal, recibía alguna recomendación de las compañeras y se retiraba de manera inmediata. Los resultados eran mínimos y su pesaje era de subidas y bajadas. Pero un día, Martha, con 165 kilogramos y estatura de 1.60, venció otro obstáculo, el miedo “al qué dirán” de su vida, a que la enjuiciaran por sus actos. Como con cualquier médico, requiere de una radiografía para conocer lo que hay en el interior del paciente, saber la raíz del problema y curar; el paciente de tragonismo necesita hacer una “radiografía” de su vida, para descubrir la raíz de su problema. Es la terapia grupal la que expone el mal, siendo el autoanálisis como el enfermo es también el médico. Hoy su lucha está en mantener su peso actual de 65 kilogramos.

Números “chonchos” de la obesidad El último registro que presentó públicamente la Organización para la Coopera-

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Ulises Quiñonez

nes

ción y el Desarrollo Económicos (Ocde) señala que después de Estados Unidos, México ocupa el segundo lugar en obesidad entre adultos y niños, reveló en un artículo el periódico nacional Milenio en enero del año 2013. Esta organización publicó en un artículo que casi un tercio de los adultos (32.4%) mexicanos sufrían de obesidad en el año 2012, un importante aumento, partiendo del 24% que había en el año 2000. Además aseguraron que casi un tercio de los niños mexicanos tiene sobrepeso o sufre de obesidad. La Ocde registró que al menos el 16% de los mexicanos entre 2079 años son afectados por la diabetes, que es una enfermedad crónica relacionada con la obesidad. En Colima, la Secretaría de Salud y Bienestar Social del gobierno estatal reveló que en la entidad hay más obesidad y sobrepeso en adultos y adolescentes: 70% de mayores de 20 años y 39% de 12 a 19 años, según resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición. Desde 2007, las autoridades de Salud en el estado revelan que Colima ocupa el segundo lugar a nivel nacional en obesidad

infantil. Cifra que hasta este 2013 no se ha podido modificar de manera positiva. José Clemente Vázquez Jiménez, investigador del Centro Universitario de Investigaciones Biomédicas (Cuib), publicó en el 2006 los avances de una investigación para conocer el porcentaje de niños de 5 a 9 años de edad con problemas de obesidad y desnutrición en las escuelas primarias de la entidad, prevaleciendo en primer lugar, hasta un 60% de niños obesos. El especialista manifestó que para empezar el tratamiento de la obesidad es necesario tener una alimentación equilibrada y hacer ejercicio por lo menos una media hora diaria, aunque también dependerá de cada caso, puesto que la obesidad es compleja y en ocasiones es necesario atacarla con tratamientos psicológicos.

El lado gordo de la obesidad en la salud Padecer obesidad o sobrepeso no solo arrastra la enfermedad espiritual, la carencia de valores, amor propio y sentimiento de culpa -que es uno de los ma-

yores males en el enfermo de tragonismo. La diabetes, la hipertensión, y el colesterol son enfermedades que resultan del sobrepeso u obesidad, y en casos crónicos puede llevar a la muerte. Existen también otros padecimientos que van de manera paralela con la obesidad, que por una mala alimentación deterioran la calidad de vida de las personas, como son las várices; las enfermedades cardiovasculares; la infertilidad; la dificultad para respirar, caminar o subir escaleras; la disminución de libido sexual; los cálculos biliares -piedras en el riñón-; la hepatitis tóxica -por la grasa en el hígado-, la depresión y otros trastornos psíquicos.

El mensaje para dejar de sufrir Hace 31 años, Miriam buscó ayuda para salir del sufrimiento que le generaba la obesidad. Fue en el estado de Durango, donde Miriam descubrió que la cura estaba en ella misma, pero con el plan de trabajo de Alcohólicos Anónimos. Un amigo le explicó la estructura de la agrupación de AA y modificando sus hábitos para es-

tar sobrios -él con el alcohol, ella con la comida. “Sólo por el día de hoy”, Miriam logró encontrar la salida a sus problemas. Al tener los resultados positivos en su peso corporal, regaló el mensaje al resto del País. Gracias a Cecilia el mensaje llegó a Colima por primera vez en 1996. Ella buscó un centro de TA y lo encontró en Guadalajara, Jalisco. Una vez alcanzado el peso ideal y mantenerse en él, fundó el primero de tres grupos de TA que existen en el estado: dos en Manzanillo y uno en la ciudad de Colima. El centro ‘Serenidad’ de Manzanillo fue el primero y festejó en enero, 17 años de haber abierto sus puertas a las personas con problemas de obesidad o sobrepeso. Paz tiene seis años en el centro TA. Logró bajar más de 40 kilogramos en unos meses. Hoy se encuentra en su peso ideal, pero su lucha es mantenerse en él. El plan alimenticio de TA lleva al peso ideal en ocho meses, siendo disciplinado y celoso en no quitar ni agregar ingredientes. No pagas cuota, ni te obligan a comprar “pastillas milagrosas”. Se llega a la meta respetando el plan y sin hacer ejercicio.

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Cómo no tragarte las emociones

“Yo decía que el aire y el agua me engordaban, hasta que llegué al grupo me di cuenta que yo comía para llenar un vacío emocional. Había cosas en mi entorno que no me gustaban y comía evadiendo así mi realidad”, dijo Paz. Hay más mujeres que hombres, pero no hay cifras precisas porque es muy variado, al igual que las edades. En los centros existe un espacio para quienes deseen extremar el cuidado de sus tres alimentos, se les denomina ‘Anexados’. Duermen en el centro con características de un hogar. No se especifica un tiempo de estancia porque cada individuo va a su propio ritmo, pero el objetivo son los ocho meses. En los 17 años de los centros TA en Colima ha habido casos de personas que llegan con 220 kilogramos. La mayoría no alcanza su peso ideal, pero logra liberarse de la mitad de peso con el que llegó. “Ojalá y se den la oportunidad de conocer TA. A mí me cambió la vida y me ha regalado a través de un plan alimenticio un cuerpo que yo no conocía, porque yo sufrí de gorda desde muy joven y hoy puedo hacer otras cosas que no hacía, tanto en la casa como en el trabajo. Acudan a los grupos y no tengan la impresión de lo que escuchan, porque cada quien cuenta como le fue en la feria. No se arrepentirán al acercarse al grupo. Hoy no me duele nada, no estoy enferma de nada y me puedo vestir como yo quiera”, señaló Paz. La historia de Rosa es otro ejemplo. Ella logró bajar 55 kilogramos. Casualmente, vende frutas y verduras y era lo que menos consumía. Hoy la lechuga es vital para ella. Cambió sus hábitos con el plan de alimentación y ha salvado su propia vida. “Al centro llegué con 133 kilogramos. Actualmente peso 76 kilos, quiero bajar otros cinco kilos y me sentiré más con-

Zorayda Castro

tenta”, dijo mientras sonreía y saludaba a sus clientes en el mercado. Rosa asegura que a los ocho meses logras ver cambios muy drásticos y la verdadera lucha empieza en mantener el peso logrado. En los tres años y medio dice sentirse sana y tranquila con ella misma, “las emociones descontroladas te llevan a la enfermedad. Si estás muy contento, comes. Si estás muy triste, comes también. Por ello debemos controlar las emociones y un grupo te puede ayudar”. Hoy su vida cambió 360 grados. “Por hoy estoy pasando por una de mis mejores experiencias, disfrutando ampliamente de una vida sana. No hay mejor medicina contra la obesidad que el propio alimento, pero en sus proporciones normales. Prefiero gastar 300 pesos a la semana que me cuesta aproximadamente los ingredientes de mi plan, que pagarle 500 la cita al nutriólogo más los medicamentos y la despensa, que sumándole sale más costoso”, puntualizó. Dentro de los 12 pasos que marca TA, al igual que en AA, es importante realizar a conciencia un autoanálisis. Reconocer las propias debilidades llamadas miedos, y que podría ayudar en mucho para alcanzar el peso deseado. Muchas veces comemos para evadir una realidad problemática, llenar ese vacío como lo han hecho la mayoría de los integrantes de TA que se apoyan de la fe, primero en un ser superior y segundo en uno mismo. La obesidad no distingue sexo, edad ni estatus social. Tragones Anónimos ayuda a conocer el cuerpo que no conocías. Escucha a quienes por años han callado y acumulado sentimientos que el cuerpo grita conforme pasa el tiempo, manifestándose el llamado a través de las enfermedades, en donde la comida es nuestra propia medicina.

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Ulises Quiñonez

Almorzando en el 5 de mayo

Javier Barragán

DIRECTO DEL REGLAMENTO DEL MERCADO 5 DE MAYO

El mercado debe estar abierto todos los días de la semana de 5 a 22 hrs, excepto los días que el Ayuntamiento lo decida.

Los derechos de los locatarios sólo podrán cederse por motivo de fallecimiento, incapacidad o pérdida de sus derechos civiles.

De 500 salarios mínimos -más de $31 miles la multa más pesada en el mercado.

Elegir el mejor sitio para ir a desayunar es un cuento de nunca acabar. Las clásicas preguntas: “¿Qué se te antoja?” y “¿A dónde vamos?” son los cuestionamientos que intercambiamos en pareja, con los amigos e incluso con nuestros padres, sobre todo cuando se trata de salir de casa y visitar un restaurante. En Manzanillo son muchas las opciones para elegir, pero existe una que satisface a los paladares más exigentes, a los trasnochados, a chicos y grandes y ese lugar se llama mercado 5 de mayo. Este sitio se convierte en un flamante restaurant gigante con un menú amplísimo, platillos mexicanos que representan a cada uno de los estados de nuestro País. Puedes degustar un platillo yucateco en el mercado 5 de Mayo, una birria al estilo Tecalitlán, las carnitas estilo Sahuayo, el mole poblano, el pozole colimote -por cierto el más rico a nivel nacional, luego del concurso que ganara Raquelito. Una gran variedad de exquisitos manjares ofrece este mercado, situado en el corazón de la ciudad de Manzanillo. A temprana hora se levantan las cortinas y abren paso a los comensales, quienes aprovechan para realizar las compras del día, surtir la despensa o simplemente curiosear en el interior de este mercado municipal.

Quienes se fueron de parranda, seguro es que andarán buscando el tradicional menudo. Lo hay en rojo y blanco, acompañado de las sabrosas tortillas hechas a mano, “cacheteaditas”, dice la señora que sonriente amasa el nixtamal; luego de formar las “gordas” para lanzarlas al comal, lentamente admiras cómo se inflan, lo que indica que ya están listas para acompañar ese menudo que combinaste con limón, cebolla, chile verde picado, orégano y sin faltar la aromática hierbabuena. En el mercado podemos encontrar los tradicionales tacos yucatecos de cochinita pibil, bañados con salsa, col, zanahorias y chiles serranos; sin faltar las aguas frescas elaboradas con frutas de la temporada, las hay de limón, mango, naranja, maracuyá, horchata y jamaica -todas ellas deliciosas. Justo lo necesario para el fuerte calor que se deja sentir en el puerto de Manzanillo. Las carnitas recién salidas del cazo, jugosas, servidas con tortillas calientitas, acompañadas de una salsita picosita, son del agrado de los comensales, que degustan de tres hasta diez o 15 tacos, gente de buen comer que gusta de la sazón michoacana. Por si esto fuera poco, el bullicio y la algarabía se hacen presentes con las no-

tas musicales del mariachi que entona los sones que más de alguno baila en pleno mercado 5 de mayo. Es la fiesta popular, la convivencia entre porteños y turistas que asisten a este lugar. De pronto es el mariachi, pero también llega la marimba con los sones jarochos, la bohemia con los tríos, duetos y solistas que con guitarra en mano, complacen a los asistentes, convirtiendo el día de compras en toda una festividad. El desayuno pudo haber sido el delicioso pozole de Raquelito, espesito, con carnita de cerdo, con crujientes tostadas y la salsita picante. Día a día, centenares de comensales llegan a la segunda planta del mercado para comprobar lo que se ha dicho en todo el País: que los manzanillenses tenemos el pozole más rico de México, superior al rojo de Guerrero, al blanco de Jalisco, el de pollo y champiñones, en fin, de todas las variedades de este platillo en el territorio nacional. Al concluir el desayuno, los comensales toman su bolsa e inician las compras del día, las frutas y verduras más frescas de la región y tantos productos que expende el mercado 5 de mayo, un sitio que vale la pena conocer para descubrir la magia que ofrece a los visitantes.

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Lo saludable sale caro

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El Rufián

La mera verdad yo sí soy de los que, a la hora de la comida, le meto el diente a todo. Y es que a últimas fechas todo mundo anda buscando quesque lo que hay para comer sano, que lo que no engorde, que lo láit y lo orgánico. Yo no sé para que tanto rollo si al final de cuentas siempre caerán redonditos ante los tacos, las carnitas y el pozole con cueritos. Y como todo mundo empezó a comer bajo en calorías y saludable, las grandes cadenas de comida rápida -las hambugueserías, pues, para que me entiendan- sacaron su menú según ellos saludable, pero en realidad no es más que pura pantalla. Seamos honestos, cuando vamos al Burger vamos por la hamburguesota doble capa, papas y refresco, que al final de cuentas por 10 pesos más se hace grande. Dígame usté, ¿quién se resiste ante tentadora oferta? Mientras, la susodicha ensalada cuesta igual o más cara, no tiene papas ni refresco, los aderezos son de lo peor y en realidad el valeroso y saludable comensal que la pide pasa como bicho raro entre el resto de personas que

tiene en sus charolas super combos que hasta incluyen helado. Si bien es cierto que el dicho dice que “lo barato sale caro”, al menos en Colima parece que “lo saludable sale caro”. Si llamas a la tortería más cercana verás que por 60 ó 65 pesos, más o menos, puedes encargarte una torta bien servidita con milanesa, aguacate, lechuga, jitomate y jamón, más el refresco y hasta papas fritas; mientras que por el mismo precio te ajusta para una ensalada mediana en tu ensaladería más cercana y en realidad no lleva ingredientes muy costosos, en una idita al mercado más cercano con eso mismo saco tres platos de ensalada, me cae. No hace falta irnos tan lejos, vaya usted a su tienda de conveniencia preferida, podrá ser testigo de cómo la botellita de agua viene costando igual que la botella de refresco y eso que no lleva ni jarabe ni conservador. Es más, hasta la botellita la hicieron más fácil de reciclar, ¿no debería costar menos? ¿O a poco las gaseosas están subsidiadas?

La verdad que los restaurantes que ofrecen las comidas “saludables” tienen como un aire “nais” que, por ejemplo, no tienen las torterías. Entonces, ya de entrada cuando alguien como uno piensa en salir al almuerzo se vuelve más fácil caerle a las tortas o a los tuxpeños que hay en todos lados, que pensar en irse a un lugar así donde uno cree que nomás lo están midiendo, ¿no? Aunque para conquistar a la novia vale la pena hacer el esfuerzo como de llevarla unas dos veces por semana para que vea que somos orgánicos, refinados y billetudos, aunque de ahí luego nos vayamos a las nieves a reponer el azúcar que nos ahorramos en la ensaladita o a entrarle bonito a las palomitas con caramelo en el cine. Si se fijan bien, se puede comer de todo y ahorrarse unos billetes. Mire: si se va a comer unos tacos, escoja un lugar donde le ofrezcan por el mismo precio lechuga, rabanitos, frijolitos, y de esa forma le agrega al carbohidrato y la proteína algo de vegetales, además que le sirve de freno

para no atragantarse de pura grasa y hasta proteger el bolsillo y de paso bajar la lonja que buena falta le hace a dos que tres que me están leyendo. Segundo: cómprese un bote de esos de litro y medio de plástico que puede estar reusando y rellénelo de agua de garrafón cuantas veces sea necesario. Deje de tomar tanta gaseosa y de comprar botes desechables de agua. Verá cómo en pocos días le baja la panza y el dinero le alcanza para llevar a la novia más días a las ensaladas “nais”. Y tercero: hay un ejercicio muy bueno y barato que le ayudará a usted a comer de forma responsable y económica en el momento que vaya por su archimegacombo de hamburguesa: cuando el cajero le ofrezca crecer su paquete por sólo diez pesos más, mueva la cabeza, con el cuello recto, de izquierda a derecha suavemente en repetidas ocasiones, no diga nada más y aléjese de ahí. Verá cómo ahorra unos pesos y evita que le crezca la panza más de lo debido.

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Alejandro ‘Monero’ Ponce

¿Bajar de peso o comer sano?

Rosalba Thomas

Si entre tus propósitos del año está bajar de peso y todos los días quieres alimentarte sanamente y buscas cómo lograrlo, déjame decirte algo: hay una enorme diferencia entre alimentarse sanamente y bajar de peso, pero sin duda una cosa lleva a la otra. Resulta que mientras que bajar de peso implica una pérdida de kilos tanto de masa muscular, como de grasa y líquidos -dicho de forma muy simple-, alimentarte sanamente implica saber balan-

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cear nuestros alimentos para evitar enfermarnos, o para vernos y sentirnos bien. Hay muchas formas para identificar alimentos sanos, pero se requiere paciencia y autodeterminación. Hacerlo es una tarea muy difícil que sólo algunos logran con mucha disciplina. A continuación una lista de 5 alimentos que todos conocemos por la publicidad como ‘sanos’ y que no siempre lo son:

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Barras de proteína

Margarina

Yogurt

Si lees la etiqueta al reverso y revisas su contenido, te darás cuenta de la gran cantidad de azúcar que contienen. Algunos pueden tener más grasa y carbohidratos que una rebanada de pastel de chocolate. Busca aquellos que no contengan mermelada en su interior; pero si tienes opción, nada mejor que fruta de la temporada para calmar el hambre.

Tiene casi el mismo número de calorías, pero muchas más grasas trans, que sirven para incrementar el tiempo de vida útil de los alimentos, y que también elevan el colesterol “malo” (LDL) y los triglicéridos y aumenta el riesgo de un ataque cardíaco. Ante ello, siempre es mejor preferir aceite de oliva para ensaladas y aceite de coco para freír.

Es una excelente fuente de calcio y vitamina D, pero hay marcas que tienen tanta grasa como cualquier pieza de pan glaseado. Lo mejor es comer yogurt natural sin saborizantes artificiales y de preferencia hecho en tu localidad.

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Frutos secos

Ensaladas

Resulta que apenas un cuarto de taza puede contener más de 100 calorías. Así es que si tienes una bolsa y los vas comiendo en tus traslados vespertinos, cuando menos lo pienses habrás ingerido una buena cantidad de calorías. Lo más recomendable es escoger nuevamente fruta fresca.

Pues lo que acabas de leer es verdad, las ensaladas también están en el grupo de alimentos de los cuales te tienes que cuidar, sobre todo cuando son acompañadas con quesos, comida frita, fideos, camarones, etc., o cuando se combinan tantos ingredientes que incluso se llegan a bloquear los efectos sanos que pueden tener sobre nuestro organismo. La alternativa podría ser no poner demasiado de: aceitunas (son ricas en sal y sodio, y te harán acumular líquidos), frutos secos, queso (añaden más grasas). Como aderezo prefiere uno hecho en casa con poca sal, combinando vinagre balsámico, jugo de limón y condimentos como pimienta y mostaza.

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E XTRA TIPS

1. Bebe agua antes de desayunar 2. Come fruta desde temprano 3. Come despacio 4. Inclínate por lo orgánico 5. Consume altas dosis de fibra 6. Cena ligero 7. Antes de dormir, toma una bebida relajante -té de tila, manzanilla, melisa o azahar

Una característica común que tienen todos los alimentos que nos ayudan a mantenernos saludables, es que para ingerirlos debemos estar conscientes de lo que comemos. Esto inicia desde el momento en que vamos de compras y seleccionamos nuestra despensa. Debemos aprender a leer las etiquetas de los productos. La Norma NOM- 051- SCFI establece que los ingredientes deben listarse en orden según la cantidad, así, el de más peso es el que aparece primero, y así sucesivamente. Por ejemplo, hay cereales que dicen ser “enriquecidos con vitaminas y minerales”. Sin embargo, si leemos los ingredientes, sus principales componentes son: harinas, azúcares y sal, antes que las vitaminas y minerales de la publicidad. Una vez que tengamos la convicción de alimentarnos sanamente y haber ido de compras al mercado, lo siguiente será lo más difícil: dejar de consumir alimentos no sanos. Todo el tiempo encontraremos publicidad que nos dirá maravillas de otros productos, así es que tenemos que ser disciplinados y cerrar los ojos a la publicidad, ya que los mejores productos no la necesitan.

ti ps para sa b e r s e l e cc iona r a l ime ntos sa nos

Revisa la fecha de caducidad de los

alimentos. Prefiere aquellos que fueron puestos en circulación hace poco tiempo.

Evita las grasas trans. Prefiere cocinar con grasas de origen vegetal como aceites de maíz, soya, canola y oliva para obtener los beneficios nutricionales de las grasas, sin colesterol.

“A menos ingredientes, menor producto”. Cuando leas la etiqueta, verás

que mientras menos ingredientes tengan los alimentos, menos conservadores y aditivos tendrán. Busca el ingrediente principal y uno o dos más, seguro esta opción es la mejor.

No consumas alimentos industrializados. Muchos de ellos contienen aditivos que le dan sabor o color artificial a la comida -como el glutamato monosódico o GMS-, que incluso puede generar efectos contraproducentes en tu organismo. Las sopas preparadas Knorr, Maruchan, Campbell, La Moderna, La Sierra; los purés de Herdez, Del Fuerte, Del Monte, los consomés Knorr y Solo; los Cheetos y el Sabridip de Sabritas y los jamones virginia de Zwan, son sólo algunos de los productos que contienen GMS.

Alimentos de origen local.

Por supuesto que las mejores opciones para seleccionar nuestra despensa sana, será ir de compras al mercado y comprar frutas y verduras de la región.

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Chikihuites pa’ la banda

Alejandro ‘Monero’ Ponce

No más croquetas, dicen los perros

Gaby A. Pinto

Huevos, arroz, jamaica, pan y siete frutas, verduras y hortalizas a domicilio. Tú decides si pides para cuatro o seis personas. El concepto Chikihuite nace hace cuatro años entre Elena Sanabria y una amiga. “Se fueron dando las cosas y lo empecé. Mi amiga se fue a Guadalajara, ahora somos mi hermano Miguel y yo”. “¿Qué más regional que un chiquihuite?”, me contestó Elena cuando le pregunté por qué entregar alimentos en un canasto como este.

Chikihuite Chikihuitecolima@gmail.com 312 107 24 93

Chiquigüite o chiquihuite (Del nahua chiquihuitl) Cesto o canasta de mimbre, bejuco o carrizo sin asas.

¿Cómo pedir el tuyo? Los martes entregan a domicilio. De miércoles a viernes están abiertos los pedidos. La mayoría les llegan por Facebook vía Inbox. “Aunque también tengo clientes que ni necesitan decirme, ya sé que a fulanita le tengo que llevar el mediano con pollo, a perenganita el pequeño con doble de huevo”. Nada de bolsas ni cajas ni paquetes. El canasto te lo quedas. Para la siguiente semana, cuando te llevan el nuevo, lo devuelves. Lo que siempre incluye: arroz, jamaica, pan y huevos. Frutas, verduras y hortalizas, las que haya según la temporada y tengan para cosechar. Para completar tu dosis semanal puedes agregar pollo, miel, café, infusiones -de menta, naranja y anís, o de jamaica, gordolobo y aníssal -con romero, mandarina, habanero, cilantro y chocolate. Extra, cada semana el pan es diferente: integral, granos o de centeno. Lo hace la mamá de Elena.

Conocer quién hace tu comida Todo, pero absolutamente todo lo que te llevan Elena y Miguel es producido de manera local y orgánica. “Está padre por-

Las croquetas para animal son asquerosas. Son secas y apestosas. Imagínate comer eso todos los días de tu vida. Miguel Sanabria tiene una alternativa natural para alimentar perros: la dieta B.A.R.F. -acrónimo de Biologically Appropriate Raw Food-, es la práctica de alimentar animales domésticos con una dieta principalmente compuesta por alimentos crudos. Básicamente se compone de hueso molido, carne, frutas y verduras. Miguel cuenta que cuando su perro tuvo un cachorro, le compró croquetas caras. El jardín olía feo y hacían feo. Se encontró con esta dieta y así empezó. “Es alimento adecuado a la evolución, es como una dieta natural”. Dándoles comida cruda evitas harinas que los animales no digieren. Está biológicamente adaptado. Hacen popó más firme y con menor volumen. Optimiza el sistema inmunológico y logra que tengan su pelo y piel saludable. Es una dieta individualizada y les deja de oler el hocico a croqueta. El precio: $25 el kilo y te lo lleva a domicilio. Un perro grande come aproximadamente 1 kilo al día, uno pequeño se echa 1 kilo, pero en una semana. “Vendo para yorkies y chihuahuas hasta cruza con lobo. Lo mismo para todos. Si hay un perro que es alérgico a algo o necesita menos grasa, puedo adecuarlo. Pero es lo mismo para todos”, explica Miguel.

La entrega Kaniuk te llega molido y congelado en raciones de 100 gramos. Tú como dueño calculas la porción y es la que le das a tu can durante el día. Puedes dividirlo en porciones, o todo de un jalón. “Quien prueba Kaniuk, se queda con él”, dice Elena. Ellos lo han comprobado con sus propios perros: más activos y menos gruñones. Si quieres que tu perro lo pruebe, Miguel regala muestras.

que conozco a todos los productores: que los plátanos de Boca de Apiza, pollo de la señora de Comala, papayo del primo de mi esposo, arroz de Colima, la miel del novio de mi hermana…”, agrega Elena. Todo, libre de fertilizantes. Consumir lo producido en el lugar donde vives según la temporada es lo lógico y natural, ¿no? Además, Elena está abierta a completar los chikihuites con otros productos locales.

Así que si crees que lo que haces puede repartirse aquí, llámale. “Mientras sea local, bienvenido”. Observación mía propia de mí: creo que el factor sorpresa es lo más chido de esto. Emocionarte porque no sabes qué va a traer esta semana, ir cambiando la dieta y conocer nuevas. Lo mejor de todo son los precios: de $200 a 300, depende el tamaño que quieras.

Kaniuk

Lo comprobé, lo comprobé Le di a mis gatos y a mis chihuahuas las muestras que me regaló Miguel. Los cinco devoraron Kaniuk.

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Sillas hasta en el techo Gaby A. Pinto

La favorita

La silla Staff de Reqüiez. Hecha con materiales 100% reciclados y reciclables.

Imagínate un mundo en el que tengas que pasar mucho tiempo de pie. Comer, trabajar, estudiar, ver la tele y conducir parado. Pequeño infierno. No todos aguantan siquiera una hora así. Pasamos demasiado tiempo sentados. En promedio, dormimos casi ocho horas y pasamos sentados nueve. Nueve -ojalá- acolchonadas horas. Acolchonadas horas que pueden pasarse gracias a Gaudí, que el mes pasado cumplieron 17 años haciendo que tu postura sea correcta. Esta empresa familiar nació con dos hermanos: Fernando y Patricia Sánchez. Fueron pioneros en calidad y diseño. En 1997 abrieron en Manzanillo y un año después en Guadalajara.

Muebles y sillas Lo + vendido

1. Sillas 2. Escritorios 3. Archiveros y libreros

De punta a punta

El mobiliario de Gaudí ha llegado hasta Playa del Carmen, Chiapas, Michoacán, Jalisco y Sonora.

Cuando entras a Gaudí te encuentras con dos tipos de cosas, pero decenas de las mismas: mobiliario de oficina -escritorios, gabinetes, recepciones, libreros- y sillas de esas en las que quieres sentarte en todas y cada una para decidir cuál es la más cómoda. Tienen sillas, literal, hasta en el techo. Si buscas mobiliario, aquí tienes como opción las marcas más importantes y la de casa, Gaudí. Fabrican tu mueble a la medida. Muebles modernos, funcionales, ergonómicos y diseñados totalmente para ti y el espacio que buscas llenar. Sea lo que sea que necesites, aquí están: mobiliario de madera, vidrio o metal. Lo más rico del mundo es sentarte en una silla cómoda para trabajar, o simplemente para comer. Tu día se arregla cuando las nueve horas que pasas sentado, las pasas en una silla que te permita estar en

la posición ideal: 145°, cómoda a más no poder, y sea armónica con lo que tengas a tu alrededor. Cinco opciones: Reqüiez -con quien tienen contrato de exclusividad desde hace más de 10 años-, Euroseat -de la comunidad económica europea-, Labenze -italiana-, Offiho y Okamura -japonesa. La Okamura tiene una técnica muy distinta a la que conocemos. “Es una silla con un diseño muy diferente: no tiene ningún botón. Se adapta, te sientas y te da la altura e inclinación que necesitas de acuerdo a tu peso y estatura”. Las sillas Okamura han ganado el Product Design Award varios años, ganaron el Universal Design en 2011 y son las favoritas del cliente según Universal Design. Acaban de estrenarla en Gaudí.

y hacen propuesta de diseño de muebles conforme a tus necesidades. “La idea es hacer un mueble desarmable para que mañana o pasado que cambies tu oficina o casa, puedas desmontar, transportarlo y reubicarlo fácilmente en otra área.Te damos a escoger desde el color y la mejor alternativa para tu espacio”. La principal diferencia entre Gaudí y todo lo demás es que encuentras continuidad y armonía en toda la oficina por completo. Colores y formas puedes conseguir un número ilimitado de piezas iguales; pero lo mejor es que una vez que pruebas una silla de aquí, no quieres sentarte en otra.

La diferencia “Siempre hay competencia y cada uno tiene su nicho de mercado. Nos diferenciamos por la garantía y el servicio que damos. También los diseños que manejamos son diferentes”, explica Fernando. La garantía es un punto y aparte y uno de los valores extras de Gaudí. Dos años en mobiliario y dos años en sillería. Algunas sillas tienen garantía de siete “porque sabemos que no tienen ningún problema”. El servicio es al año y depende el volumen para no tener costo. “Procuramos que los tiempos de entrega sean cortos. En sillería tenemos tiempos de 48 horas”. No solo es ir a la tienda y comprar. La experiencia de compra completa en Gaudí es circular. Vas, pero también van. Van a tu empresa, oficina o casa. Miden

Av. Constitución 1599 314 99 11 www.gaudi.com.mx Gaudí Muebles

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