Antihla N°29

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REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA, ARTE Y LITERATURA

Año 10

N°29

Mayo-Agosto 2021


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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA

Antilha publica artículos originales e inéditos. El contenido de los artículos y opiniones ex-

Editores

presadas en Antilha son responsabilidad

América Malbrán Porto

exclusiva de sus autores.

Ana Igareta

Antilha, Revista Latinoamericana de Historia, Arte y Literatura es una publicación cuatri-

Diseño editorial

mestral editada y publicada por el Centro de

América Malbrán Porto

Estudios Sociales y Universitarios America-

nos S.C.

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ción Pública, número ( en trámite ) . Certificados de licitud de título y de contenido, Co-

Antilha es una revista dictaminada por pares secretos. El sistema de arbitraje recurre a evaluadores externos al Centro de Estudios Sociales y Universitarios Americanos S.C.

misión Certificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas, Secretaría de Gobernación, números ( en trámite ) , ISSN ( e n trámite ) .

Portada, cenefa y viñeta: “Ocas”, bordado, punto de cruz, hilo de algodón sobre textil industrial. Cortesía, Ivonne Ramos, 2005. Colección particular.

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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA

Comité Editorial Dr. Jorge Angulo Villaseñor

DEA-INAH, México.

Dr. Daniel Schávelzon

CAU-UBA, Argentina

Dra. Ana Igareta

UNLP, Argentina.

Dr. Víctor Ortega León

Centro INAH Chihuahua, México.

Mtra. América Malbrán Porto

Centro INAH Chihuahua, México.

Mtro. Alfredo Feria Cuevas

Centro INAH Baja California Sur, México.

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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA

CONTENIDO Editorial

P. 7

El libro de una sola página Ricardo Alberto Díaz Quintana

P. 9

La importancia del estudio de la arqueología mexicana para los estudiantes de Turismo Ivon Cristina Encinas Hernández

P. 16

El sureste de Chihuahua: Investigaciones recientes en el Bolsón de Mapimí Víctor Ortega León

P. 29

El alucinante espectáculo de las luciérnagas en Bosque Esmeralda, municipio de Amecameca, Estado de México. Álbum de campo Magdaleno Martínez Martínez

P.55

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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA

EDITORIAL

E

n este nuevo número tenemos el placer de contar con un breve cuento de Ricardo Alberto Díaz Quintana, «El libro de una sola página», que de la mano nos lleva al misterio de los desiertos ignotos del sur de Meckh

y a conjuros que producen que las letras se muevan, aparezcan, desaparezcan… Díaz Quintana nos recuerda a los clásicos del terror y nos deja deseando poder leer más. Por su parte Ivon Encinas Hernández reflexiona sobre «la importancia del estudio de la arqueología mexicana para los estudiantes de Turismo». En este texto, nacido de sus cátedras en diversas universidades, destaca el patrimonio arqueológico y el hecho insoslayable de que los egresados de la carrera de Turismo serán los encargados de recibir y orientar a los turistas interesados en este patrimonio, por lo cual deben tener amplios conocimientos sobre el pasado prehispánico del país y entender que estos no se limitan a la explicación de una zona arqueológica, sino que en muchos casos nos permiten conocer y comprender nuestra cultura actual. En el tercer artículo Víctor Ortega León nos comparte algunos de los resultados del proyecto arqueológico que dirige en el Bolsón de Mapimí, al suroeste de Chihuahua, desde 2019, haciendo énfasis en las manifestaciones gráfico rupestres que ha localizado en los últimos años. Para ello nos proporciona una revisión de trabajos previos y explica porqué es necesario realizar más estudios arqueológicos en esta región.

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Por último Magdaleno Martínez nos presenta un álbum fotográfico, muy bien explicado de la visita realizada al santuario de Bosque Esmeralda, en Amecameca, Estado de México, para contemplar las luciérnagas durante el período de

apareamiento. Martínez nos presenta interesantes datos biológicos de estos insectos, que nos permiten tener una idea más clara de por qué se da este fenómeno durante los meses de lluvia, en varios santuarios del centro de México. Con esta nota nos invita a visitarlos. Esperamos que disfruten de esta nueva entrega llena de sorpresas y excelente lectura.

Las Editoras

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CESUA

EL LIBRO DE UNA SOLA PÁGINA Ricardo Alberto Díaz Quintana1 Artículo recibido 26/06/2021 Artículo aceptado 10/072021

C

aminaba sobre la acera con las manos en los bolsillos, pensando en lo desgastada que tenía mi dignidad. Tuve que ir al centro de la ciudad a comprar algunas cosas, de las que sinceramente no recuerdo. Ese día no había tantas

personas en las calles, no sé si por el día, la hora o por flojera. Me distrajo una librería antigua que estaba al otro lado de la calle, me pareció algo tétrica, pero llamó mi atención como la luz a las moscas. Crucé la avenida con la urgencia de meter mi nariz entre los libros que se apilaban por todos lados, de todos colores y tamaños. El espacio era reducido, algo largo y un tanto oscuro. —Buenos días— me saludó un viejo que acomodaba un par de ejemplares. —Buenos días. —¿Busca algo en especial? ¿Lo puedo ayudar? —Sólo veré, muchas gracias. El olor a páginas viejas sujetó mi nariz, como si la apretara. Pasé entre los estantes leyendo los nombres de los lomos de los soldaditos bien alineados; tomé uno que otro título que me interesó, pero al final desistí. Di media vuelta para mirar el otro estante,

1 A pesar de ser Ingeniero industrial, fui llamado por las letras desde temprana edad. Publiqué mi primer cuento (Un camino que recorrer) con la editorial Porrúa, salió en agosto del 2017 y cuento con algunas otras en revistas digitales. Actualmente soy escritor de tiempo completo y creo, firmemente, que el mejor mundo, es el que creamos con cada historia que leemos y escribimos. UNITEC. ricardo_diaz_pan188@live.com.mx Antilha 10 (29) 2021:9-15 9


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CESUA Ricardo Alberto Díaz Quintana

en la parte más alta encontré algunos

en realidad sí.

ejemplares de diferente tamaño, muy

—Me lo llevo entonces.

diferentes a los demás; algunos tenían

—Joven, trataré de persuadirlo, este li-

nombres en latín y letras doradas. Entre

bro no es como una novela, un cuento o

todos ellos, se apretujaba uno delgado

una historia que todos puedan disfrutar;

que casi pasa desapercibido; me estiré

a decir verdad, no tiene sentido y su

para alcanzarlo, la punta de mis dedos

contenido es oscuro.

apenas lo tocaban. Por poco tiro el es-

—Ahora me intriga aún más. ¿Cuánto

tante, pero conseguí bajar el libro. Antes

cuesta?

de poder abrirlo, se acercó el señor.

—Quinientos setenta pesos.

—¿Todo bien, joven?

—Pues espero valga la pena, me lo lle-

—Sí, muchas gracias. ¿Sabe de qué tra-

vo.

ta este libro?

Pasamos a la caja registradora para ha-

—No lo abra, por favor— bloqueó la ta-

cer la transacción, al dueño no le pare-

pa con su mano. —Es un libro muy anti-

cía del todo bien la venta de aquel ejem-

guo, no debería de estar al alcance.

plar de una sola página. Recibió el dine-

—Perdón, no lo sabía.

ro cabizbajo, metió el libro en una bolsa

—Este libro tiene una sola página, no se

de estraza y me lo entregó junto con el

puede revelar el contenido porque desa-

recibo.

parecen las letras.

—Le daré algunas recomendaciones:

—¿Está en venta?

No se lo enseñe a nadie; no lo lea en

Me miró intrigado, mudo, sorprendido,

voz alta; no comente su contenido con

sin poder articular una respuesta.

nadie; no lo lea ni abra en el día; se lee

—Pues… — no dejaba de verme. —Sí,

de noche y lo más importante, jamás pa-

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El libro de una sola página

se la página.

única página de un libro tan caro. Hice a

—Muy bien, muchas gracias.

un lado todas mis hipótesis para descu-

Salí, confesaré, intrigado; quería abrir el

brir, de una vez por todas, el contenido;

libro en ese mismo instante para averi-

así que saqué el ejemplar haciendo el

guar su contenido, es decir, ¿qué tanto

mayor ruido posible con la bolsa, creo

podría decir una sola página?

que no le gustó que la haya despertado.

Ya en casa, me dirigí a la cocina para

La pasta estaba forrada con piel, al tacto

prepararme algo de comer; encontré las

era muy distinta al cuero común, era una

galletas que no me terminé en el desa-

sensación más rígida, lisa, como de piel

yuno, con eso bastaría hasta la cena. Ya

de cerdo; una tinta negra y desgastada

en mi habitación, sin ganas de continuar

pintaba la pasta que no llevaban letra

con el trabajo, me recosté un poco.

alguna, ni si quiera para el título. Abrí la

Desperté mirando la ventana, el sol ya

tapa despacio, curioso, con miedo, intri-

se había ocultado y la oscuridad reinaba

gado, expectante: una hoja un tanto

en mi casa. Apreté los ojos tratando de

amarillenta dio la cara vacía; sentí cómo

ahuyentar la modorra, me senté en la

mis entrañas se apretujaban, mi cara se

orilla de la cama, estiré los brazos al te-

calentaba y mis manos se hacían pode-

cho mientras bostezaba y por fin me le-

rosas para arrojar el libro por los aires,

vanté. Encendí la luz, regresé a la coci-

realmente estaba enojado, había gasta-

na por algo de agua, la bolsa de estraza,

do parte del dinero para el material de

arrugada, trataba de pasar desapercibi-

mi trabajo, sin embargo, a punto de

da, sin moverse, sin hacer ruido, tal vez

mandar a volar el ejemplar, las letras

dormida. Serví agua en un vaso, me

emergieron de la parte posterior, cami-

senté y bebí mientras veía la bolsa, tra-

naron para organizarse y dar paso al

tando de especular el contenido de la

prólogo; fue como ver a un montón de

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CESUA Ricardo Alberto Díaz Quintana

hormiguitas alinearse para formar letras,

«Por la envidia del culto y la hechicería

palabras, párrafos. Describían lo si-

de Elh Ailn a este manuscrito, no se po-

guiente:

drá leer en voz alta».

«Al lector. Debéis olvidar todo lo que co-

«Jamás se deberá dar la vuelta a la pá-

nocéis, pues vuestro entendimiento está

gina, ya que todo demonio, ser ignoto,

fuera de los preceptos de la autoría de

energía o seres desconocidos por la ra-

este vademécum. No busquéis com-

za humana, se liberarán».

prensión o vuestra mente se convertirá

Las letras volvieron a caminar para es-

en insana. Tomad en cuenta las siguien-

conderse detrás de la hoja e inmediata-

tes reglas»:

mente surgieron nuevas; sin embargo,

«Lo que se leerá en las siguientes letras

tenían una caligrafía distinta, un tanto

fue creado por Adhab Algab, hechicero

góticas, otro tanto manuscritas.

maldito de los desiertos ignotos del sur

«Capitulo Primero».

de Meckh».

«Hechizos y encantamientos».

«Dado a que se obligó a Mephistopheles

«Debierais tocar el que se quiere reali-

a redactar el contenido, se deberá leer

zar. A continuación, se despliega la lis-

con la mínima cantidad de luz».

ta»:

«Se invocó a Leviathan para cuidar envi-

«Locura».

diosamente las ciencias que aquí se ex-

«Destrucción».

presan, dado tal, que la magia y los he-

«Obediencia».

chizos no deben ser divulgados a ningún

«Mala suerte».

ser, de ninguna manera deberán ser

«Muerte».

aprendidos o transcritos en ninguna de

«Vida eterna».

sus formas».

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El libro de una sola página

A decir verdad no sabía qué hacer, tenía

la página había quedado en blanco. Es-

una sensación de ansiedad en el estó-

ta vez tardaron más de lo normal en sa-

mago, no sabría decir si era miedo o es-

lir, tal vez habían perdido el turno co-

trés. Releí la lista varias veces, creí que

rrespondiente o ya estaban cansadas de

obediencia era la más ligera de todas,

reptar. Para cuando regresaron, consti-

así que la oprimí con mi dedo. Pasó a

tuyeron la lista anterior. Por curiosidad,

ser el título de la página, todo lo demás

presioné muerte, fue como un impulso,

huyó para dar paso a otras letras.

como si alguien hubiera tomado mi

«Obediencia».

mano para hacerlo. Emergieron todas

«Colocareis cinco vasos con veladoras

las letras pintando la página de negro,

negras formando un círculo. En el cen-

ahora hacían espacios para describir en

tro, aventaréis la esencia de la víctima al

blanco.

tiempo que pronuncias el siguiente con-

«Muerte».

juro»:

«Leeríais en voz alta, sin interrupciones,

«Voltum ad m-ell. Sekt muln ist y’hrn.

lo que se describe» (Procuráis que na-

Obn sekin jcia q’ekn pghon-adqon,

die os vigile a lo lejos, escuche a lo cer-

wjoch xhe hogn’erkand obn ertna».

ca, rodee entre las paredes o acompañe

«Se repetirá las veces necesarias hasta

en el lugar).

que se apaguen todas las velas».

Miré para todos lados en busca de algún

«En este procedimiento, jamás se deben

testigo, sabía que no había nadie, pero

cerrar los ojos, trataos de manteneros

quise rectificar.

despierto todo el tiempo, no importa si el

«Mrkht oktu’yl, rgaq-aptokl. Ufkoprolo

sueño os invade».

antghanyr latqote koncisx perht om ow-

Las letras se desplomaron, cayendo por

bijto».

la hoja hasta desaparecer, una vez más,

Me costó mucho trabajo el pronunciarlo,

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CESUA Ricardo Alberto Díaz Quintana

a decir verdad, no sé si lo hice bien, así

mi cuerpo y alma; traté cerrando y

que lo leí varias veces en voz alta, cada

abriendo la tapa, el resultado era el mis-

una más emotiva que la otra.

mo: una página vacía, sin tinta, sin pró-

Fue hasta que el libro estuvo satisfecho

logo, sin remedio.

de mi recitación cuando apareció el si-

Afuera, la oscuridad parecía aguardar

guiente párrafo:

para engullirme, agazapada, paciente,

«Una vez conjurado el hechizo, todo

espesa. «Tal vez todo haya sido un mal

aquel que os escuche, vea, lea, sienta o

sueño, una mentira», pensé; «no debe-

huela, perecerá de manera inminente sin

ría tomarme tan en serio algo así, no

remedio alguno».

puede ser posible», traté de tranquilizar-

«Si tu ser se llegara a arrepentir, el con-

me, mentalmente. Cerré incrédulo el li-

tra hechizo está a la vuelta de la pági-

bro con la respiración un tanto agitada,

na».

repitiendo para mis adentros que todo

Mi desesperación por revocar mi estupi-

esto eran patrañas.

dez me llevó a darle la vuelta a la pági-

Escuché gruñidos al otro lado de la

na, olvidando así la última regla.

puerta, algo o alguien caminaba por el

Las letras huyeron del libro, escaparon

pasillo; sonó un golpe en el techo, como

despavoridas por todos lados como di-

si dejaran caer un costal lleno de pie-

minutas arañas tratando de esconderse;

dras; un olor infecto inundó la habitación

me levanté asustado sacudiendo algu-

provocándome el vómito; sonaron voces

nas m, a, r, x de mi pantalón. El papel

que no pude entender, no sé si dentro

yacía como muerto, vacío; lo moví repe-

de mi cabeza o a mi alrededor. Me esta-

tidas veces al derecho y el revés, pero

ba volviendo un demente, porque co-

no encontré nada, estaba helada como

mencé a creer lo que había leído. Asus-

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El libro de una sola página

tado, entré al baño colocando el seguro,

Tropecé con la bañera, al caer jalé la

me miré al espejo: estaba demacrado,

cortina y cerré los ojos.

macilento, al borde del pánico. Golpearon la puerta tratando de derribarla, recargué mi cuerpo para ayudarla a resistir los embates; se intensificaron las voces que sonaban como los hechizos que traté de leer; un líquido denso, viscoso, fétido y amarillo opaco entró por la parte de abajo haciéndome retroceder. En el espejo apareció una sombra con enormes ojos brillantes que me sonrió. Derrumbaron la puerta en el segundo intento, pude ver figuras distintas que hacían ruidos guturales dispuestas a atacarme.

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LA IMPORTANCIA DEL ESTUDIO DE LA ARQUEOLOGÍA MEXICANA PARA LOS ESTUDIANTES DE TURISMO Ivon Cristina Encinas Hernández1 Artículo recibido 26/06/2021

Artículo aceptado 20/07/2021

Resumen: México es un país con una gran riqueza cultural que muestra orgullosamente a sus habitantes y a los turistas de las distintas naciones del orbe, y algo que destaca sin lugar a dudas es su patrimonio arqueológico, el cual es considerado también como un gran atractivo turístico, y por lo mismo muchas zonas arqueológicas son promocionadas junto con los diversos destinos turísticos en los cuales se ubican, lo que aumenta la competitividad de los mismos. Ahora bien, aunque muchos investigadores estamos involucrados con la difusión del conocimiento de estos sitios, los diferentes recorridos y actividades turísticas que en ellos pueden realizarse, y con su gestión en general, los egresados de la carrera de Turismo son en muchas ocasiones quienes reciben a los turistas, y se convierten en el rostro de México ante ellos, por lo cual deben tener amplios conocimientos sobre nuestro pasado prehispánico, y entender que estos no se limitan a la explicación de una zona arqueológica, sino que son necesarios para la comprensión de nuestra cultura actual. Palabras clave: México, zonas arqueológicas, turismo, turismólogos, cultura.

1 Arqueóloga por la Escuela Nacional de Antropología e Historia de la Ciudad de México. Expositora y coordinadora logística en Paseos Culturales del Instituto Nacional de Antropología e Historia desde 1997. Catedrática de la Universidad del Tepeyac, la Universidad de Londres y la Universidad Justo Sierra. Jefa del Programa de Intercambio, Vinculación, Cooperación Académica y Cultura de la Universidad del Tepeyac. Expositora y coordinadora logística bilingüe en Paseos Culturales del Instituto Nacional de Antropología e Historia desde 1997. Antilha 10 (29) 2021: 16-28 16


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CESUA Ivon Cristina Encinas Hernández

M

Abstract: Mexico is a country with a great cultural richness which proudly. Is shown to its inhabitants and tourists from all over the world, something that distinguishes without doubts is It's archeological heritage that Is also considered as a great touristic atractive and that's why many archeological sites are promoted with the different touristic destinations where they are located, this fact increases the competivity of them. Then, although many researchers are involved with the difussion of the archeological sites knowledge and It's general management, the professionals in Tourism are often the face of Mexico from them, that's why they must have a wide acknowledgement of our prehispanic past and understanding that they are not limited to a unique explanation of an archeological site, but that they're all necessary for the comprehension of our current culture.

éxico es una nación con un pasado prehispánico impresionante. En nuestro país,

de acuerdo con la Red de Zonas Ar-

queológicas del INAH, existen 193 zonas arqueológicas abiertas al público, de las cuales once están declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: Palenque, en el Estado de Chiapas; Teotihuacán, en el Estado de México; Paquimé, en Chihuahua; Xochicalco, en Morelos; Chichén Itzá y Uxmal en Yucatán; Tajín en Veracruz; Monte Albán y las Cuevas Prehistóricas de Yagul y Mitla, en Oaxaca (Fig. 1); las Pinturas Rupestres de la Sierra de San Francisco, en Baja California Sur; y Ca-

Keywords: Mexico, archaeological zones, tourism, tourismologists, culture.

lakmul, en Campeche. Las 10 primeras corresponden a las declaratorias de Patrimonio Cultural, de las cuales conta-

Dedicatoria: Comparto este artículo con gran cariño a todos aquellos turismólogos que han sido mis alumnos.

mos con 28 en total en este rubro, y la última a una de las dos declaratorias de

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La importancia del estudio de la arqueología mexicana...

patrimonio mixto que se le han dado a nuestro país2. Todas estas zonas, además de resguardar gran parte de la historia prehispánica

de nuestra nación, representan importantes atractivos turísticos, y es fundamental estudiarlas, delimitarlas, excavarlas, restaurarlas, conservarlas y habilitarlas de la infraestructura turística necesaria para difundir el conocimiento. Protegerlas para que todas las personas puedan conocerlas y entender su valor contextual y riqueza cultural, es parte de la gran labor que instituciones como el INAH y la Secretaría de Cultura realizan

Fig.1. Zona arqueológica de Mitla, Oaxaca. Digitalización, Ivon Encinas, 2019.

hoy en día, pero no sólo depende de ellas. Además, se debe considerar también que los sitios arqueológicos que no

habilitación turística alguna ni custodios,

están abiertos al público, que no tienen

o que ni siquiera se encuentran en terrenos delimitados, están expuestos al saqueo, el vandalismo, la invasión e inclu-

2 México cuenta, a la fecha con 46 declaratorias de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), de las cuales 35 son sitios de gran riqueza natural y/o cultural, y 11 corresponden a patrimonios inmateriales. https://es.unesco.org/fieldoffice/mexico

so la destrucción total. Ahora bien, una vez que las zonas arqueológicas son abiertas al público, de-

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CESUA Ivon Cristina Encinas Hernández

be haber una gestión responsable de

mientos de estos sitios, los profesionis-

ese patrimonio nacional, lo que incluye

tas en Turismo son, en diversas ocasio-

no sólo el mantenimiento de los restos

nes, la cara de México ante muchos de

materiales, el espacio natural en que se

los visitantes nacionales y extranjeros,

encuentran (con planeaciones como zo-

por lo cual deben tener amplios conoci-

nas eco-arqueológicas por ejemplo) y de

mientos de las culturas prehispánicas de

la infraestructura y servicios turísticos

su nación, que son las raíces de nuestra

(casetas, accesos, estacionamiento, sa-

cultura actual y se reflejan en distintas

nitarios, tiendas de artesanías, museo

manifestaciones del folklore contempo-

de sitio, senderos interpretativos, áreas

ráneo.

de descanso), sino también una promo-

Además, las zonas arqueológicas enten-

ción turística adecuada, y es aquí donde

didas tanto como patrimonio nacional,

3

el papel de los turismólogos es de gran

así como atractivos dentro de la oferta

relevancia.

turística cultural de los destinos mexica-

Si bien somos los investigadores de las

nos, constituyen un incremento en su

distintas ramas de la Antropología, como

capacidad competitiva (independiente

los arqueólogos, lingüistas, historiado-

de la calidad-precio de los productos

res, antropólogos físicos y sociales quie-

que se ofrecen, y relacionadas con las

nes nos dedicamos a la investigación y

ventajas competitivas de tipo funcional

generación de muchos de los conoci-

más que estructural)4, lo que les da ma-

3 El término turismólogo, a diferencia del de turistólogo, se refiere al profesionista que estudia el turismo en su totalidad, concibiendo al Turismo más como una ciencia social que como una industria.

Miguel Ángel Acerenza (2009:14-15), distingue dos tipos de ventajas competitivas de un destino según su origen: estructurales y de tipo funcional. Las primeras están dadas por la ubicación de los destinos en relación con los mercados emisores, como la relación tiempo-costo para llegar a esos destinos desde esos mercados.

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La importancia del estudio de la arqueología mexicana...

yores oportunidades de éxito frente a las

pasado (sitios y objetos arqueológi-

ofertas de otros destinos competidores.

cos, arquitectura virreinal y post vi-

Y siendo México una nación que tiene al

rreinal, documentos y obras de arte),

Turismo como una de sus principales

sino también lo que se denomina pa-

actividades económicas, es imprescindi-

trimonio vivo, las diversas manifesta-

ble que estas zonas sean promovidas,

ciones de la cultura popular, las po-

visitadas y conservadas.

blaciones o comunidades tradiciona-

Coincido con Martínez Cárdenas en la

les, las artes populares, la indumen-

apreciación siguiente:

taria, los conocimientos, valores, cos-

La materia prima del Turismo Cultural

tumbres y tradiciones características

está representada en los sitios del

de un grupo o cultura (Martínez Cár-

patrimonio y las representaciones

denas, 2009:12).

culturales de una nación o sociedad, y constituyen por sí mismos atracti-

La percepción que los turistas tienen so-

vos turísticos. El patrimonio cultural

bre lo bello o interesante que puede ser

está compuesto por todos aquellos

un lugar, como señala en otras palabras

elementos y manifestaciones tangi-

Miguel Ángel Acerenza

bles e intangibles producidas por una

…es el primer factor que influye en

sociedad, resultado de un proceso

la atractividad del destino, debido a

histórico en donde la reproducción de

que existe una relación muy estre-

las ideas y del material se constitu-

cha entre los atractivos del lugar y

yen en los factores que identifican y

las motivaciones de viaje […] son

diferencian a una población o región,

precisamente las necesidades, los

y por lo tanto, debe incluir no sólo los

deseos o las expectativas de los tu-

monumentos y manifestaciones del

ristas los que dan origen a los distin-

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CESUA Ivon Cristina Encinas Hernández

tos tipos de turismo. Por ejemplo, el

una parte del turismo cultural, donde la

deseo de contemplar y disfrutar de la

motivación principal de viaje está dada

naturaleza dan lugar al ecoturismo;

por el deseo de visitar una ciudad

las expectativas de emoción y aven-

prehispánica, como sucede a menudo

tura al turismo de aventura y de de-

con las «pirámides de Teotihuacan», co-

portes

mo se les llama coloquialmente a los

extremos,

etcétera

(Acerenza, 2009:19).

grandes basamentos de la zona ceremonial de esta antigua metrópoli (Fig.2).

Continuando con esta lógica podemos

No obstante lo anterior, no sólo se trata

hablar del turismo arqueológico, como

de promocionar las zonas arqueológicas

Fig. 2. Pirámide del Sol y Calzada de los Muertos. Zona arqueológica de Teotihuacán, Estado de México. Digitalización, Ivon Encinas, 2006.

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La importancia del estudio de la arqueología mexicana...

para tener más visitantes y más recur-

tes y equipamiento turístico que un área

sos económicos por el pago de entradas

puede soportar, se deben considerar los

y derechos. Estos sitios deben ser ges-

siguientes:

tionados responsablemente, lo que in-

atractivo, periodicidad de las visitas

cluye, entre otras cosas, cuidar la capa-

(semanal, estacional o permanente), tipo

cidad de carga o soporte de los mismos,

de ocio practicado en el lugar y compor-

esto es, como señalan Lohmann y Pa-

tamiento de los turistas» (Ídem).

nosso para el caso específico del turis-

Lo anterior salta a la vista en las zonas

mo «…la capacidad que posee un deter-

arqueológicas en fechas clave como el

minado ambiente para soportar el flujo

día del equinoccio de primavera, donde

de visitantes y turistas, sin perder su ori-

numerosos visitantes, las más de las ve-

ginalidad y sin ver amenazada su integri-

ces motivados por falsas creencias co-

dad» (Lohmann y Panosso, 2015: 264),

mo la idea de «cargarse de energía» y,

entendiendo que ésta no indica el nivel a

en muchos casos, también sin el menor

partir del cual comienzan a darse los im-

respeto hacia los restos arqueológicos ni

pactos, pues toda actividad turística los

a los custodios que los resguardan,

supone, ni es tampoco el límite de satu-

desean no sólo asistir a las antiguas ciu-

ración del espacio natural-cultural, sino

dades prehispánicas, sino subirse a la

que «…existe siempre la posibilidad de

parte más alta de los basamentos pira-

mantener la actividad turística de mane-

midales y otros edificios en ocasiones

ra sustentable […] garantizando la cali-

casi a costa de lo que sea. Por ello, el

dad del medio ambiente y de la expe-

conocimiento de la Arqueología y la pre-

riencia del visitante» (Ídem).

paración de los prestadores de servicios

Siguiendo a los autores antes citados, al

turísticos, así como la manera en que

respecto del número máximo de visitan-

gestionan y conducen las visitas en oca-

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«fragilidad

ambiental

del


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CESUA Ivon Cristina Encinas Hernández

siones, como la antes señalada, es más

cias, naturales y sociales, como la Geo-

que primordial.

grafía y la Etnología, que son indispen-

El estudio de nuestro pasado prehispáni-

sables para entender la continuidad de

co para comprender nuestras raíces es

nuestras tradiciones prehispánicas, que

parte de nuestra cohesión social, y la

subsisten en 68 grupos etnolingüísticos

actividad turística ayuda a su difusión.

o pueblos originarios (INPI, 2020) que

Hace cerca de dos décadas, en el Pro-

preservan un sinfín de conocimientos y

grama Nacional de Turismo (2001-

tradiciones ancestrales, y de entre los

2006), como lo escribe Molina (2007:57)

cuales, nuevamente destacan los patri-

se definió una visión al año 2025, la cual

monios, en este caso intangibles o inma-

se expresó de la siguiente forma: En el

teriales, declarados de la Humanidad

año 2025 México será un país líder en la

por la UNESCO, como la Danza y Cere-

actividad turística, ya que habrá diversifi-

monia Ritual de Voladores (Fig.4); los

cado sus mercados, productos y desti-

Parachicos en la Fiesta Tradicional de

nos y sus empresas serán más competi-

Enero de Chiapa de Corzo; la Tradición

tivas en los ámbitos nacional e interna-

Gastronómica de Michoacán – Cultura

cional. El Turismo será reconocido como

Comunitaria, Ancestral y Viva; las Fies-

pieza clave en el desarrollo económico

tas Indígenas Dedicadas a los Muertos;

y su crecimiento se habrá dado con res-

la Pirekua o Canto Tradicional Purépe-

peto a entornos naturales, culturales y

cha; y los Lugares de Memoria y Tradi-

sociales, contribuyendo al fortalecimien-

ciones Vivas de los Otomí – Chichime-

to de la identidad nacional.

cas de Tolimán: la Peña de Bernal,

Por otro lado, no se debe olvidar, por

Guardiana de un Territorio Sagrado.

supuesto, que la Arqueología está estre-

En otras ramas del turismo nuevamente

chamente relacionada con otras cien-

la importancia del estudio de la Arqueo-

Antilha 10 (29) 2021: 16-28 23


Antilha

CESUA

La importancia del estudio de la arqueología mexicana...

logía se hace presente, como sucede con el turismo religioso, que desde una perspectiva propia se refiere a los viajes o desplazamientos donde las personas,

además de buscar la recreación y/o el conocimiento, pueden tener también como objetivo una conexión religiosa o espiritual a través de prácticas rituales, como la peregrinación, que es uno de los mayores actos de culto y una experiencia de fe. De acuerdo con Claudine Chaspoul (en Martínez Cárdenas, 2009:13), el turismo asociado a motivaciones religiosas puede tener cuatro enfoques diferentes: espiritual (como una forma de acercarse a Dios); sociológico (un medio por el cual el creyente conoce la historia de la comunidad religiosa a la que pertenece); cultural (donde tanto creyentes como no creyentes se interesan por aspectos históricos principalmente);

Fig. 4. Danza de Voladores al exterior de la Zona Arqueológica de Cholula, Puebla. Foto, Ivon Encinas, 2014.

y geográfico

(que permite observar modificaciones en los flujos de personas y adaptarse a las

Antilha 10 (29) 2021: 16-28 24


Antilha

CESUA Ivon Cristina Encinas Hernández

 El santuario principal está construi-

nuevas necesidades del mercado turístico).

do, como muchos otros en México,

Entre los principales ejemplos de nues-

sobre antiguos espacios rituales

tra nación se encuentra Chalma en el

prehispánicos.

Estado de México, santuario donde el

 Las peregrinaciones fueron comu-

número de visitantes, principalmente

nes en los pueblos mesoamerica-

motivados por la fe, es de los más altos

nos

registrados en el país. Sin embargo, a

Sobre este lugar, Martínez Cárdenas

pesar de su relevancia histórica y religio-

señala lo siguiente:

sa, hay una falta tremenda de seguridad,

Mención aparte merece el santuario

cultura turística, limpieza, servicios sani-

de Chalma, ya que éste no fue fun-

tarios, orden y civismo principalmente.

dado por los misioneros católicos,

Hay que caminar por un muy reducido

sino que los monjes agustinos susti-

espacio generalmente lleno de gente en-

tuyeron al ídolo de los indígenas

tre cientos de puestos de dulces, comida

por un crucifijo en la misma cueva

y artículos religiosos que por las lonas

donde adoraban a su dios produ-

que los cubren, ni siquiera permiten ver

ciendo tan sólo un efecto de sustitu-

al visitante por dónde va, además de

ción, es decir, el santuario actual es

que tristemente hay días en que se ob-

el mismo sitio de adoración preco-

serva basura tirada por todos lados.

lombino, sólo con una nueva devo-

Sobre la necesidad del estudio de la Ar-

ción (Ibíd.:48).

queología para el conocimiento e interpretación de este lugar, cabe simple-

La visita a estos centros devocionales

mente señalar los siguientes aspectos:

suele ser masiva, sobre todo en las fies-

Antilha 10 (29) 2021: 16-28 25


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CESUA

La importancia del estudio de la arqueología mexicana...

tas patronales y celebraciones litúrgicas

cesiones religiosas o se desplazan a si-

importantes para el calendario católico,

tios de fe en todo el mundo. Estos flujos

donde la promoción que se hace de es-

requieren necesariamente el uso de los

tos eventos generalmente está mal enfo-

servicios turísticos, lo que impacta de

cada y hace énfasis sólo en los aspec-

manera directa la actividad económica

tos religiosos más que en el potencial

del lugar (Ibíd.: 7).

turístico de la región, sin considerar que

Como puede verse, el estudio de la Ar-

el turismo religioso es una fuente gene-

queología es imprescindible para expli-

radora de riqueza para los sitios donde

car el devenir histórico de una sociedad

se encuentran los santuarios de fe, que

y para el desarrollo de la actividad turís-

puede considerar diferentes oportunida-

tica es de vital importancia, ya que es

des como el rescate y la promoción del

básico para entender los orígenes cultu-

patrimonio cultural; la generación de ru-

rales de los pueblos que hoy en día son

tas turísticas, la diversificación de la

parte de sus emblemas, de su identidad

oferta cultural en los recintos religiosos y

y de esa riqueza auténtica que tanto se

la promoción de la inversión privada pa-

busca conocer y es admirada por visi-

ra el mejoramiento y desarrollo de servi-

tantes nacionales y extranjeros en cada

cios turísticos (Ibíd.: 57).

rincón de México a través de su gastro-

El turismo espiritual representa uno de

nomía, el arte popular de sus pueblos

los principales flujos de turistas a nivel

originarios, sus museos, sus escenarios

mundial, ya que es cada vez más el nú-

naturales y por supuesto, sus zonas ar-

mero de personas que para cumplir un

queológicas.

voto o satisfacer una promesa, pedir algún tipo de beneficio, o dar gracias por uno ya recibido, forman parte de las proAntilha 10 (29) 2021: 16-28 26


Antilha

CESUA Ivon Cristina Encinas Hernández

Zona Arqueológica de Chicaná, Campeche. Digitalización Ivon Encinas, 2012.

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La importancia del estudio de la arqueología mexicana...

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CESUA

EL SURESTE DE CHIHUAHUA: INVESTIGACIONES RECIENTES EN EL BOLSÓN DE MAPIMÍ Víctor Ortega León1 Artículo recibido 26/07/2021 Artículo aceptado 12/08/2021

Resumen: El presente trabajo, presenta algunos de los resultados del proyecto Patrimonio rupestre en el Desierto de Chihuahua. Documentación, investigación y conservación de sitios con manifestaciones rupestres en el sureste del estado, desarrollado en el Bolsón de Mapimí a partir de 2019. Se revisan algunos de los antecedentes para destacar la importancia de realizar más estudios en la región y poner en perspectiva los datos obtenidos por este proyecto. Aunque todavía pocos, los sitios registrados son altamente significativos, en especial El Tepetate que, como se verá, destaca por sobre todos los demás debido a su complejidad y dimensiones. Este proyecto se encuentra actualmente en desarrollo, razón por la cual los avances aquí presentados no son concluyentes, pero aportan valiosa información sobre una de las regiones menos estudiadas del norte de México. Palabras clave: Gráfica rupestre, Desierto de Chihuahua, Cazadores -recolectores. Abstract: This paper presents some of the results of the Patrimonio rupestre en el Desierto de Chihuahua. Documentación, investigación y conservación de sitios con manifestaciones rupestres en el sureste del estado Project, developed in the Bolson de Mapimí as of 2019. Some of the background is reviewed to highlight the importance of carrying out more studies in the region and putting the data in perspective obtained by this project. Although still few, the registered sites are highly significant, especially El Tepetate, which, as will be seen, stands out above all others due to its complexity and dimensions. This project is currently under development, which is why the advances presented here are not conclusive, but they provide valuable information on one of the least studied regions of northern Mexico. Keywords: Rock art, Chihuahuan Desert, Hunter-gatherers. 1 Arqueólogo por la ENAH, Maestro y Doctor en Antropología por la UNAM, investigador del INAH Chihuahua. victorortegaleon@hotmail.com Antilha 10 (29) 2021: 29-54 29


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CESUA Víctor Ortega León

Introducción

E

l sureste de Chihuahua es, sin duda, una de las zonas con menos investigación arqueoló-

gica de toda la entidad. En particular, el municipio de Jiménez, colindante con los estados de Durango y Coahuila, solo ha recibido la atención directa de dos proyectos y, de manera indirecta, de otros

Fig. 1. Ubicación de la zona de estudio, señalada con un círculo azul, dentro del marco del Bolsón de Mapimí. Digitalización Víctor Ortega León.

cuatro. Esta zona de colindancia interestatal, conocida como Vértice de Trino, es particularmente difícil de caracterizar debido precisamente a la escasez de estudios.

Las excavaciones de cuatro sitios su-

No obstante, es sabido que la presencia

perficiales en el desierto de Charcos

humana en esta región del país, inmersa

de Risa, al sudoeste de Coahuila,

en el Bolsón de Mapimí (Fig. 1), data de,

realizadas por Heartfield en 1975,

por lo menos, el inicio del Holoceno, es-

proporcionaron dos puntas Lerma,

to es, más de diez mil años.

fechadas en el resto de México entre

Walter Taylor (1972), apunta fechas muy

7500 y 5000 a. C. (Smith, 2007:31).

tempranas para la región cercana de Cuatro Ciénegas, específicamente para

Investigaciones previas

Cueva Espantosa, de 7500 a. C. Por su

Los estudios en la región son escasos.

parte, Hermann Smith refiere que:

En 1966, Walter Taylor da noticia de un

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 30


Antilha

CESUA

El sureste de Chihuahua...

trabajo arqueológico cercano a nuestra

la sierra de Los Remedios, en 13 de los

zona de estudio:

cuales se realizó una inspección más

In eastern Chihuahua, Paul Reiter

detenida y recolección de materiales. En

conducted a field school of the Uni-

total, se recuperaron 852 artefactos, de

versity of New Mexico in 1947, locat-

los cuales 850 eran de lítica tallada, una

ing sites with Archaic material on an-

cuenta de concha y un percutor, cuyo

cient lake terraces in the vicinity of

análisis arrojó los siguientes resultados:

Jimenez. Considerable numbers of

«Se encontraron 412 puntas de proyectil

contracting-stem point were similiar

en el distrito de Jiménez. De este

to, but somewhat variant from, those

número, 288 (70%) eran indicativas de

of the early Coahuila complex; other

las culturas paleoindias, mientras que

types were certainly the same gener-

las restantes 124 (30%), se atribuyeron

ic style and period as the middle and

a las culturas neoindias de fechas más

late Coahuila complex points having

recientes» (Marrs, 1949:133. Traducción

stems

mía). Hasta donde sabemos, este alto

and

notches

(Taylor,

1966:93).

componente Paleoindio (y no solo Arcaico como refiere Taylor) no ha sido

Derivado de este «field school», en junio

debidamente considerado ni para su

de 1949, Garland J. Marrs presentó su

comprobación ni para su falsación.

trabajo de tesis intitulado Problems Aris-

Charles Kelley refiere que, en el verano

ing from the Surface Occurrence of Ar-

de 1949, se llevó a cabo un reconoci-

chaeological Material in Southeastern

miento arqueológico en la cuenca del río

Chihuahua, Mexico. En éste, el autor da

Conchos, más precisamente entre La

cuenta de 19 sitios arqueológicos entre

Junta y Jiménez, cerca del río Florido

las poblaciones de Jiménez, Escalón y

(Cf. Kelley, 1990). De hecho, en el mapa

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 31


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CESUA Víctor Ortega León

que acompaña la publicación, se seña-

present state of our understanding,

lan dos sitios arqueológicos al noroeste

the culture complexes of Coahuila

de Jiménez, sobre la ribera norocciden-

are merely variations upon a single

tal del río. Lamentablemente, no se ano-

cultural tradition. However, it should

tan más datos al respecto.

be stated that we are still in the pro-

En 1972, Walter W. Taylor propone una

cess of studying the archaeological

caracterización de los grupos cazadores

material, and it is possible that at

y recolectores del norte mexicano, con

least some of our present ideas will

especial énfasis en Coahuila y el nores-

change […] although it is doubtful

te. Recopilando información histórica

that any such change will be drastic

(dos fuentes) y arqueológica (tres sitios),

or be more than a modification of our

el autor aduce la ocupación milenaria de

basic

una cultura nomádica conservadora para

1972:170).

beliefs

today

(Taylor,

la región, desde 7 500 a. C., lo que coloca a los grupos humanos más antiguos

La caracterización general ofrecida por

conocidos en el Paleoindio tardío, conti-

Taylor, trata aspectos como los atributos

nuando la ocupación regional hasta

físicos de los individuos, la indumenta-

inicios del siglo XVII, tiempo de las pri-

ria, la vivienda, las estrategias de sub-

meras entradas colonizadoras de los es-

sistencia, las prácticas ceremoniales, las

pañoles. Sin embargo, el autor reconoce

costumbres funerarias, los utensilios y

que:

otros objetos manufacturados.

These are not to be thought of as

De acuerdo con el autor, los datos dis-

‘cultures’ or as representing socio-

ponibles hablan de una cultura aborigen

political or linguistic groups: in the

de muy larga duración, de gran estabili-

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 32


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CESUA

El sureste de Chihuahua...

dad y prácticamente sin cambios duran-

za. Morteros fijos se encuentran arqueo-

te miles de años. Individuos dolicocéfa-

lógicamente, aunque los documentos

los altos, delgados y robustos, con cabe-

mencionan también otros de madera.

lleras crecidas, vestimenta escasa y de-

Varios tipos de textiles, cestería, redes,

coración corporal (pintura y escarifica-

palos conejeros, varas para hacer fuego

ciones); además de otros accesorios de-

y posibles instrumentos musicales com-

corativos como plumas, conchas, hue-

pletan el conjunto de cultura material co-

sos y dientes de animales. Poco higiéni-

nocida para los grupos de la región.

cos desde el punto de vista de los con-

Por otro lado, vino de agave y peyote

quistadores.

eran consumidos durante festividades y

Al menos para el suroeste de Coahuila,

ceremonias donde el venado jugaba

de acuerdo con el autor, no se reportan

también un rol de suma importancia y, al

sitios habitacionales fuera de algunas

parecer, se habría practicado algún tipo

cuevas; aunque se han detectado fogo-

de canibalismo ritual. En cuanto a los

nes sin ningún patrón de distribución re-

aspectos funerarios, Taylor afirma haber

conocible. En la zona de la Comarca La-

encontrado algunos restos en nichos pe-

gunera, la subsistencia se fincaba en la

queños, bajo pilas de rocas y con picto-

práctica de la recolección, la pesca y la

grafías de color rojo en las cercanías.

cacería, no existiendo evidencia clara de

Algunos hallazgos de cabello humano

agricultura hasta la colonización españo-

realizados por el autor durante sus in-

la.

vestigaciones en Cueva Espantosa, po-

Arco y flecha se cuentan entre los uten-

drían estar relacionados con prácticas

silios más representativos, en conjun-

funerarias, según se relata en la Historia

ción con otros como los cuchillos de pe-

de Nuevo León con noticias sobre

dernal, hachas y posibles puntas de lan-

Coahuila, Tejas, Nuevo México, de Alon-

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CESUA Víctor Ortega León

so de León (Ibíd.: 176).

de Chihuahua, Zacatecas y Nuevo León,

Concluye este autor plenamente con-

incluyendo algunos sitios que ya habían

vencido de que, desde principios del Ho-

sido registrados, como El Sol, Cueva

loceno hasta el siglo XVII, por lo menos

Ahumada y Cerro Blanco de Covadonga

en la región de Coahuila, existió una cul-

(Cf. Aveleyra, 1981 y 2002).

tura de caza recolección sumamente

Producto de este trabajo, fue también el

conservadora y con muy pocos cambios

registro de los sitios Cueva de los Re-

visibles a lo largo de los milenios. Huel-

medios y Cascada de los Chuzos, en el

ga decir que esta interpretación encontró

municipio de Jiménez, Chihuahua, los

tierra fértil en el enfoque mesoamerica-

únicos sitios arqueológicos rupestres

nista y es la que ha primado para carac-

registrados hasta el momento, ¡cuarenta

terizar a la mayor parte del norte mexi-

años después!, en el municipio, y casi

cano (Cf. Ortega León, 2020).

los únicos en el sureste chihuahuense2.

A finales de los setenta, Luis Aveleyra

El análisis de la documentación genera-

Arroyo de Anda comienza el proyecto

da por este proyecto, inédita hasta el

Estudio sistemático del arte rupestre de

momento, redundaría en una compren-

la Comarca Lagunera (1977-1983), des-

sión más informada de la región.

de el entonces Centro Regional del INAH, con sede en Torreón, Coahuila. Este proyecto de rescate e investiga-

2 En la relación de sitios arqueológicos de Chihuahua, de la DRPMZA del INAH, se asienta un tercer sitio rupestre, La Cueva Pinta, pero las coordenadas referidas para este nos remiten a una localización en el municipio de Bocoyna, casi 9 kilómetros al oeste de la cabecera municipal y a 300 kilómetros de distancia del municipio de Jiménez. Suponemos, entonces, que hay un error en el registro.

ción, en el transcurso de seis años, logró registrar más de 50 sitios con manifestaciones rupestres tanto en la Comarca Lagunera como en áreas circunvecinas

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El sureste de Chihuahua...

En la ficha de registro de Cueva de Los

rriente cae en cascada. Este sitio es de

Remedios (División del Norte), con fe-

carácter mixto, es decir, presenta tanto

cha del 11/12/1977 al 4/02/1978, Luis

pictografías y petrograbados como la

Aveleyra destaca la importancia del ma-

combinación de ambos en algunos moti-

nantial de aguas termales presente en el

vos y, a decir del investigador, es «en

sitio como un factor que pudo haber in-

extremo importante». Destaca la repre-

fluido en la selección de la cueva aleda-

sentación naturalista de un conjunto nu-

ña y en la «concentración indígena

trido de puntas de proyectil, lo que da

prehispánica» en la zona. Aquí mismo

pie a que el autor vea la oportunidad de

afirma también que: «Por su localización

proponer una datación aproximada ba-

geográfica, ésta localidad queda alejada

sándose en la identificación tipológica

del área de los laguneros o irritilas, sien-

de los artefactos representados:

do probable que deba atribuirse al grupo

El tipo de punta de proyectil repre-

de los Tobosos. Estilísticamente, tam-

sentado en esta localidad, con clari-

bién, difiere del arte rupestre común en

dad y total consistencia, es uno solo,

el área de La Laguna». Parece sugerir,

el llamado SHUMLA, descrito por

que se trata de un área cultural distinta,

primera vez por Suhm y Krieger en

al menos basándose en la comparación

1954 en varios sitios del S. W. de

de estilos rupestres (Cf. Aveleyra, 1981).

Texas. Su distribución se centra en

Por otro lado, en la ficha de registro de

el área de la confluencia de los ríos

Cascada de Los Chuzos. Cañada de

Pecos y Bravo del Norte y se extien-

Cerros

del

de hasta el Big Bend y norte de

12/03/1979 a mayo de 1980, Aveleyra

Coahuila. En Texas constituye tipo

resalta igualmente la presencia de agua,

característico del Pecos River Focus,

esta vez en forma de un arroyo cuya co-

desarrollo cultural que muestra es-

Colorados,

con

fecha

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 35


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CESUA Víctor Ortega León

trecha relación con los materiales de

1000 al 200 a. C.3 Para la Cueva de Los

la cueva mortuoria de La Candelaria

Remedios, en cambio, no propone nin-

y otros sitios arqueológicos de La

guna asignación cronológica pero sí

Laguna. La edad de estas puntas, en

reitera una posible asociación con los

Texas, cubre un lapso entre algunos

grupos Tobosos, aunque solo en razón

siglos antes de la era cristiana hasta

de una coincidencia geográfica (Cf. Ave-

700 a 800 D. C. (Ídem).

leyra, 1981; Mendiola, 2002). Sin duda, es el Proyecto Arqueológico

Coincide el área con la ocupada por los

Bolsón de Mapimí, desarrollado por Leti-

tobosos en tiempos de la colonización

cia González entre 1979 y 1988, el que

española, aunque el autor no asegura

más ha aportado información sobre esta

ninguna relación de autoría directa. Más

región del país. Esta arqueóloga esta-

bien, parece establecer algún tipo de

bleció una clasificación de sitios divi-

vínculo con el sur de Texas, pero sin de-

diéndolos, de inicio, entre aquellos que

cirlo abiertamente.

se encontraban al aire libre y aquellos

En una publicación posterior, la única

otros que se localizaban en espacios

efectuada sobre este proyecto por el au-

cubiertos. Los sitios al aire libre se sub-

tor, Aveleyra propone, para la Cascada

dividen, a su vez, en: (a) artefactos dis-

de Los Chuzos, una cronología tentativa

persos de piedra tallada, con o sin arte-

de 300-900 d. C. (Cf. Aveleyra, 2002),

factos de piedra pulida; (b) los restos de

basada en la representación clara de las puntas de proyectil tipo Shumla; sin embargo, actualmente este tipo de elemen-

3 Para una discusión sobre la representación rupestre de puntas Shumla en el noreste mexicano Cf. Smith, 2007.

tos están fechados para el periodo del

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 36


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CESUA

El sureste de Chihuahua...

fogatas; (c) combinaciones de los tipos

cación personal, 2019).

(a) y (b); (d) morteros de piedra de le-

En trabajos posteriores, Leticia Gonzá-

cho, con o sin artefactos; (e) hornos pa-

lez ha reelaborado el concepto de Cultu-

ra el agave; (f) petroglifos aislados o

ra del Desierto, propuesto antes por

agrupados; y (g) pinturas rupestres. Los

Walter Taylor, para adaptarlo a esta

sitios en abrigos incluyen habitaciones y

enorme región. Entendiendo que se tra-

depósitos aislados o agrupados de ca-

ta principalmente de una cultura de ca-

dáveres (Cf. González, 1992; Mendiola,

zadores recolectores nómadas, la define

2002). Como podemos apreciar, casi el

de la siguiente manera:

30% de la clasificación de sitios se rela-

Incluyo como característica de esta

ciona con manifestaciones rupestres, lo

cultura a los sitios y artefactos resul-

cual habla de la importancia de esta ex-

tantes de las actividades de subsis-

presión cultural en la región.

tencia y rituales de los cazadores-

De particular importancia resultarían pa-

recolectores y pescadores prehispá-

ra nuestro proyecto los trabajos de Gon-

nicos, habitantes del desierto, elabo-

zález en lo que definió como la Unidad

rados con materia prima del desierto

geomorfológica mínima Laguna de Palo-

como restos de plantas, rocas y ani-

mas, por encontrarse dentro del territorio

males. Las formas, tamaño de los

de nuestra región de estudio (Cf. Gonzá-

artefactos y grado de modificación

lez, op. cit.). Sin embargo, aún no hay

de los mismos, se basan en una tec-

nada publicado al respecto. Posterior-

nología desarrollada y enfocada a

mente, Arturo Guevara revisitó esta zo-

responder a las exigencias de la ma-

na con resultados alentadores, aunque

teria prima, y a las exigencias de una

no le fue posible desarrollar proyecto

forma de vida productiva dirigida a la

alguno en la misma (Guevara, comuni-

caza, recolección, pesca y produc-

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CESUA Víctor Ortega León

ción de artefactos y elaboración de

que le permitió a las sociedades nó-

alimentos, muy articulada con las

madas que lo habitaron su produc-

necesidades de una sociedad nóma-

ción y reproducción hasta la llegada

da. Es importante subrayar el hecho

de los europeos (González Arratia,

de que en la Cultura del Desierto

2013:58-59).

predomina el proceso de trabajo de recolección de plantas silvestres so-

Además, advierte que existe una corre-

bre la caza y pesca, tanto para la ali-

lación entre esta estrategia de subsis-

mentación o como materia prima.

tencia y las dimensiones y ubicación de

Sus principales industrias giran en

los sitios ocupados por sus practicantes,

torno al aprovechamiento de hojas y

sitios como campamentos habitaciona-

fibras (textil); la madera, la roca y la

les, estaciones de trabajo, campamen-

transformación de vegetales en ali-

tos para pasar la noche, etc., relación

mentos utilizando técnicas como la

que se extiende al entorno natural. La

molienda de semillas y el horneado

expresión de dicho vínculo se traduce

de agaves y otros como la planta del

en ideas de índole religiosa que pode-

sotol. La tecnología de manufactura

mos identificar, al menos, en la gráfica

de instrumentos, sobre todo, mues-

rupestre y en las prácticas mortuorias:

tra una práctica de milenios, lo que

Estas ideas abarcan las religiosas y

indica la repetición de normas san-

constituyen una parte sustantiva de

cionadas y que aparecen a lo largo y

la dinámica social de las sociedades

ancho del Desierto de Chihuahua, lo

cazadoras recolectoras del desierto

que indica una continuidad en la

que quedan generalmente asenta-

transmisión de los conocimientos

das en el caso que me ocupa, muy

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 38


Antilha

CESUA

El sureste de Chihuahua...

especialmente en las pictografías, en

transformarlos por medio de diferen-

los petrograbados y en la disposición

tes procesos de tal manera que les

de los muertos. A partir del análisis

permitieran

que he realizado tanto de las figuras

ideológicamente a lo largo del tiempo.

representadas en los dos primeros y

Considero, pues, como parte intrínse-

del contenido de cuevas mortuorias,

ca de la Cultura del Desierto, por lo

he propuesto la presencia de una

que a los artefactos se refiere, la co-

religión basada en el chamanismo

rrelación entre al menos dos varia-

con al menos cuatro cultos: el culto a

bles: la materia prima proveniente del

los antepasados; el culto al venado;

desierto y la tecnología propia de los

el culto a los astros; el culto al peyo-

cazadores-recolectores. Si éstas no

te (Ibíd.: 59-60).

coinciden y se encuentran artefactos

sobrevivir»

material

e

con estas características en el territoDe esta forma, la concepción de la Cul-

rio considerado de los cazadores-

tura del Desierto se encuentra definida

recolectores con Cultura del Desierto,

por «la interrelación entre los aspectos

como en el caso del manto tejido en

materiales de subsistencia y las mani-

telar y la cerámica, por nombrar dos

festaciones de índole simbólica en un

artefactos importantes, se debe de

escenario como el desierto» (Ídem). Es-

buscar una explicación de este desfa-

ta relación mutua entre la cultura mate-

samiento (Ibíd.: 60).

rial y su correspondiente simbólico: Incluye «la capacidad de los grupos

Si bien, estas conceptualizaciones com-

cazadores-recolectores

pescadores

peten más de cerca al componente cul-

para seleccionar y ordenar concep-

tural del desierto coahuilense del Mapi-

tualmente los elementos naturales y

mí, son pertinentes también para la zona

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CESUA Víctor Ortega León

sureste de Chihuahua pues, por un lado,

de

las

causas

sirven de caracterización del punto trino

(Guevara, 1999:1).

de

su

extinción

interestatal y, por otra, sirven de contraste para el área más noroeste del munici-

En este trabajo, Guevara se concentró

pio de Jiménez pues, como ya se ha

principalmente en los municipios de Pa-

mencionado, nos encontramos en un

rral y Valle de Allende donde pudo regis-

ecotono que podría tener implicaciones

trar ocho sitios arqueológicos, la mayo-

de índole cultural.

ría de ellos de carácter habitacional,

Varios años más tarde, en 1999, Arturo

mismos en los que reconoce alguna se-

Guevara Sánchez da inicio al proyecto

mejanza con otros localizados en la zo-

arqueológico a «mediano y largo plazo»:

na del sur de Texas colindante con

Estudio de la población indígena del sur-

Chihuahua.

este del estado de Chihuahua. En este,

Posteriormente, durante la temporada

se propone:

de trabajo de campo del mismo proyecto

…incrementar el conocimiento que se

en 2003, el autor se centró en el estudio

tiene acerca de la población indígena

de Peñoles, el sitio arqueológico de ma-

del SE del Estado de Chihuahua, de

yores dimensiones registrado hasta el

sus características culturales en la

momento en el municipio de Villa Coro-

época prehispánica y a principios de

nado. Cabe señalar, que este sitio cuen-

la época colonial, para conocer mejor

ta con gráfica rupestre, tanto pinturas

los procesos de adaptación al medio

como petrograbados, además de otros

ambiente así como de la forma en

elementos arqueológicos que indican

que se asimilaron a las condiciones

una ocupación para el periodo novohis-

sociales del virreinato y en su caso,

pano. Otros vestigios evidenciaban la

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CESUA

El sureste de Chihuahua...

ocupación de la zona durante los siglos

buscaba comprender un poco mejor la

XIX y XX. Dentro de la gráfica rupestre,

dinámica cultural de dicha región. A tra-

predominan los motivos geométricos y

vés del estudio del sitio arqueológico

abstractos y el pigmento rojo. En este

Peñoles, el autor presenta, de nueva

sitio, también, se encontró una punta

cuenta,

tipo Shumla, lo que no solo nos permite

torno al grupo indígena más señero de

compararlo con el de la Cascada de los

la región desde el siglo XVI hasta el

Chuzos sino considerar, además, una

XVIII: los Tobosos. Destaca su plantea-

ocupación mucho más temprana. Otros

miento de que algunos de los sitios con

elementos, como una punta Fragua y

gráfica rupestre no solo están relaciona-

otra del tipo Durán, sugieren algún tipo

dos con esta etnia sino que, además,

de relación con regiones del Estado de

varios de los motivos antropomorfos po-

Coahuila.

siblemente los representan (Ídem).

El autor señala que, hacia el final de la

Por su parte, MacWilliams et al. (2008),

temporada de campo, tuvo la oportuni-

en su estudio sobre la agricultura tem-

dad de visitar el área del punto trino in-

prana en el sur de Chihuahua, tratando

terestatal, pudiendo localizar un sitio ar-

específicamente del extremo sureste,

queológico cercano a la Laguna de Pa-

refieren que: «small roasting pits are

lomas, aunque las limitaciones logísticas

abundant in some áreas, but no known

del proyecto impidieron su registro deta-

evidence indicates that residents ever

llado (Cf. Guevara, 2004).

departed from hunter-gatherer subsis-

En su Arqueología de grupos del sureste

tence in this región» (MacWilliams et al,

de Chihuahua (Cf. Guevara Sánchez,

2008:37). Sin embargo, no ofrecen da-

2007), Arturo Guevara nos presenta al-

tos más precisos al respecto.

gunos resultados de este proyecto que

No hay mucho más publicado sobre la

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algunas

consideraciones

en


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CESUA Víctor Ortega León

arqueología de esta región y, hasta don-

gicos más (Fig.2). Cuatro de ellos, El

de sabemos, tampoco se han llevado a

Mercurio, El Mercurio 2, El Mercurio 3 y

cabo muchos proyectos de investigación

El Mercurio 4, consistentes en concen-

en la misma.

traciones de material lítico; y otro, El Tepetate, de carácter mucho más comple-

Investigaciones recientes

jo, constituido por material lítico, gráfica

Nuestro proyecto Patrimonio Rupestre

rupestre y estructuras. Nos centraremos

en el Desierto de Chihuahua, es el más

aquí en este último (Fig. 2).

reciente intento por registrar y caracteri-

En El Tepetate predomina el componen-

zar el desarrollo cultural de esta región,

te rupestre. Un conteo provisional e in-

al menos para el territorio chihuahuense.

completo, nos permite realizar una esti-

Este proyecto, iniciado en abril de 2019,

mación de, por lo menos, 158 unidades

ha dado prioridad al estudio de la zona

mínimas de registro (UMiR), es decir,

aledaña a la población de Escalón, sita

rocas con gráfica rupestre. La cantidad

al sur del municipio de Jiménez y colin-

de caras de roca que contienen grafis-

dante con el Estado de Durango, por co-

mos es, en conjunto, de 328, hasta el

nocerse previamente algunos asenta-

momento, y el número de grafismos que

mientos que no habían sido registrados

presenta cada cara oscila entre 1 y 30.

aún por el INAH y que contenían varios

Un cálculo preliminar, arroja un total mí-

elementos de interés (Cf. Ortega León,

nimo de entre 485 y 500 motivos indivi-

2019).

duales para todo el sitio.

El análisis de la información recabada

Destacan dos paneles, en las UMiR 1 y

hasta el momento, ha permitido identifi-

43, por sus dimensiones y alta visibili-

car, por lo menos, cinco sitios arqueoló-

dad, realizados en rocas graníticas de

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El sureste de Chihuahua...

Fig.2. Ubicación general de los sitios mencionados en este trabajo (en rojo), y de los sitios registrados por el proyecto en 2019 (en amarillo). La línea azul representa el límite occidental aproximado del Bolsón de Mapimí. Digitalización de Google Earth realizada por el autor, 2020.

gran tamaño, pero la mayoría de los mo-

ples (circunferencias y espirales) como

tivos se encuentran en rocas medianas

compuestas

y pequeñas, es decir, de dos metros cú-

círculos concéntricos), aunque también

bicos de volumen o menos (Figs. 3 y 4).

tienen presencia evidente algunas figu-

De los 485 motivos registrados hasta el

ras cruciformes, lineales y rectangula-

momento, más del 90% pueden clasifi-

res. Las formas abstractas, por su parte,

carse formalmente como no figurativos,

constan de líneas irregulares que, en

tanto geométricos como abstractos; en-

ocasiones, presentan patrones intrinca-

tre los primeros, predominan sobrada-

dos que no imitan ningún objeto natural

mente las formas circulares, tanto sim-

y prescinden de referencias figurativas.

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(conjuntos

globulares,


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CESUA Víctor Ortega León

Fig. 3. Panel rupestre en la UMiR 1. Sitio El Tepetate. Foto. Víctor Ortega, 2019.

Fig. 4. Panel rupestre en la UMiR 43. Sitio El Tepetate. Foto Víctor Ortega, 2019.

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El sureste de Chihuahua...

Fig. 5. Nubes de puntos. Motivo recurrente en El Tepetate. Foto Víctor Ortega, 2019.

Cabe destacar la presencia reiterada de

seguidas por algunos motivos que pare-

nubes de puntos (Fig. 5), sobre todo en

cen remitir a temas astronómicos (sol,

el Sector Sur, de posible carácter nota-

luna) Es posible que una de estas figu-

cional, mismas que, en ocasiones, dan

ras del Sector Sur sea de carácter fito-

la impresión de representar alguna figu-

morfo (peyote), aunque resulta difícil

ra geométrica, aunque normalmente no

asegurarlo sin más datos por el momen-

parecen tener un arreglo definido.

to.

Un porcentaje mínimo, menos del 10%,

Definitivamente, la temática rupestre del

corresponde formalmente a elementos

sitio El Tepetate es distinta a la de los

figurativos, realistas, aunque no natura-

sitios rupestres más cercanos registra-

listas (Fig. 6). Dominan las figuras es-

dos por el INAH: Cascada de Los Chu-

quemáticas antropomorfas y zoomorfas,

zos y Cueva de Los Remedios; aunque,

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Fig. 6. UMiR 81 y 82, representando motivos figurativos.

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El sureste de Chihuahua...

en la práctica, están a pocas horas de

Se localizaron alrededor de veintiocho

camino unos de otros. En principio, aquí

espacios delimitados, algunos interco-

se trata de petrograbados y no de pintu-

nectados, que fueron registrados como

ra como en aquellos; además, la predo-

«terrazas» debido a su clara definición

minancia indiscutible de motivos geomé-

perimetral y su nivelación horizontal con-

tricos y abstractos permite reconocer el

trastante con la irregular topografía natu-

carácter no figurativo del primero, lo cual

ral del terreno (Fig. 7).

contrasta con la tipología más icónica de

Aunque de dimensiones variables, pode-

los segundos.

mos decir que el área de la mayoría de

Otro componente importante del sitio

tales espacios se encuentra entre los

son algunas terrazas ubicadas entre los

seis y los nueve metros cuadrados. No

conjuntos rocosos de los promontorios.

parecen, empero, ser terrazas de cultivo

Fig. 7. Terraza en El Tepetate. Foto Víctor Ortega, 2019. Antilha 10 (29) 2021: 29-54 47


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CESUA Víctor Ortega León

sino espacios habitacionales o de uso

el uso doméstico o habitacional temporal

doméstico, pero esto solo podrá esclare-

de las mismas (Fig. 8).

cerse mediante un registro más detalla-

El último componente del sitio son sus

do y, sobre todo, trabajos de excavación

materiales arqueológicos muebles, de

Un tercer componente del sitio son los

los cuales se encontró una cantidad

cimientos de algunas estructuras cons-

inusitada para lo que se conoce de la

truidas al margen de los promontorios

región. Prácticamente en su totalidad, se

rocosos, razón por la cual podemos dife-

trata de lítica tallada, presentándose en

renciarlas de las terrazas. En total, se

forma de lascas y artefactos terminados.

localizaron tres: dos cuadrangulares y

Predominan raspadores y puntas de

una en forma de herradura. Aunque de

proyectil (Fig. 9), seguidos de cerca por

dimensiones moderadas, no se descarta

raederas y bifaciales; finalmente, nú-

Fig. 8. Estructura en forma de herradura en El Tepetate. Foto Víctor Ortega, 2019. Antilha 10 (29) 2021: 29-54 48


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El sureste de Chihuahua...

ocupación humana en la región existe, por lo menos, desde el Arcaico Temprano, y continúa ininterrumpidamente hasta el periodo Histórico. La mayor parte de las puntas de proyectil, sin embargo, pueden ubicarse entre el Arcaico Medio y el Arcaico Tardío, aunque les sigue muy de cerca el transicional protohistórico (Rafael Cruz, comunicación personal, 2019). La totalidad de los elementos inmuebles (gráfica rupestre, terrazas y estructuras) se encuentra concentrada en tres puntos específicos del collado, mismos que

hemos denominado, con fines mera-

Fig. 9. Algunos de los materiales líticos recuperados por el proyecto, mismos que evidencian ocupación temprana y prolongada. Foto Víctor Ortega, 2020.

mente analíticos, como sectores Norte, Central y Sur (Fig. 10). La presencia ininterrumpida de materiales líticos entre ellos, sin embargo, permite considerar-

cleos y lascas completan el conjunto re-

los como un solo sitio arqueológico a

cuperado. Un primer análisis, más morfológico que

pesar de su extensión (hasta el momen-

tipológico, de algunos materiales líticos

to, tres kilómetros continuos de norte a

diagnósticos recuperados en los sitios El

sur), atípica para la región.

Tepetate y El Mercurio, indica que la

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CESUA Víctor Ortega León

Fig. 10. Sectores Norte, Central y Sur de El Tepetate. Las concentraciones de puntos indican el núcleo de cada sector. Digitalización de Google Earth por el autor, 2019.

El tamaño exacto del sitio aún está por

queños fogones («small roasting pits»)

determinarse pues la prospección de su-

referidos por MacWilliams et al. (op. cit.).

perficie no ha concluido todavía. De he-

No obstante, y atendiendo al área de

cho, pudimos constatar que cinco kiló-

dispersión de elementos arqueológicos

metros al sur de los motivos rupestres

registrados, únicamente dentro de la zo-

más meridionales registrados, existe una

na prospectada, el sitio ocupa tentativa-

importante presencia de materiales ar-

mente una extensión de 0.5 km2 o, lo

queológicos, históricos y paleontológi-

que es lo mismo, 500 000 m2.

cos, incluyendo concentraciones de ce-

En resumen, sin duda, la ubicación del

niza que podrían corresponder a los pe-

sitio El Tepetate no obedeció a la mera

Antilha 10 (29) 2021: 29-54 50


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El sureste de Chihuahua...

disponibilidad del lugar, sino que se deri-

las cortas estancias de campo realiza-

vó de una elección intencional, premedi-

das en junio y julio del 2019, en rigor,

tada, tras la valoración de sus posibilida-

quince días efectivos de trabajo de cam-

des tanto geográficas como estratégi-

po, y se hace con fines meramente ana-

cas.

líticos.

El lugar no solo constituye un refugio muy apropiado para la región pues pro-

Comentarios finales

vee abrigo y protección, sino que, ade-

De manera preliminar, podemos consi-

más, conserva durante más tiempo el

derar que la cantidad de información y

agua y la humedad que los múltiples

de materiales recuperados, así como su

arroyuelos que bajan de los cerros peri-

naturaleza, indican que la región estuvo

metrales depositan allí, generando una

ocupada, desde el Arcaico Temprano,

abundancia de recursos florísticos y fau-

por grupos de recolectores-cazadores

nísticos que contrasta con las planicies

cuya movilidad se encuentra sugerida

circundantes. También es un punto es-

por lo que podemos interpretar como

tratégico pues, desde sus cimas, se do-

campamentos (sitios en el rancho El

mina visualmente un amplio panorama

Mercurio), y cuyo sedentarismo, aun

en todas direcciones, amén de que el

cuando fuera meramente estacional,

flujo de personas y animales por el colla-

queda respaldado por las terrazas y es-

do es fácilmente controlable por consti-

tructuras del sitio El Tepetate, aunque

tuir este un largo pasillo entre laderas.

no se debe descartar la posibilidad de

Cabe recordar, que este es un primer

que los elementos estructurales de este

acercamiento a la información arqueoló-

sitio, es decir terrazas, estructuras y grá-

gica de superficie recuperada durante

fica rupestre, puedan corresponder a

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CESUA Víctor Ortega León

ocupaciones del Arcaico Medio y Tardío

lleva la mayor presencia de arroyos es-

o, incluso, posteriores. Esta temporali-

tacionales en el primer sitio.

dad, coincide con la propuesta por Ma-

Tales diferencias se advierten también

rrs, en 1949, para el municipio de Jimé-

en el componente biótico. La densidad y

nez, y por Walter Taylor, para Coahuila.

diversidad de la cubierta vegetal es mu-

Debemos considerar, por último, el fac-

cho mayor en El tepetate que en los

tor ecológico como un elemento de peso

otros, creando un verdadero microeco-

a la hora de interpretar la distribución de

sistema; en éste, además, es notoria

los sitios. El Tepetate se ubica en el lími-

una mayor abundancia de algunas espe-

te occidental del Bolsón de Mapimí, y

cies, como aquellas propias del matorral

más cerca de la subprovincia fisiográfica

desértico rosetófilo, especialmente ocoti-

Sierras y Llanuras de Durango; en cam-

llo, yuca y lechuguilla.

bio, los sitios de El Mercurio se localizan

Además, las dimensiones de los sitios

varios kilómetros más hacia el oriente,

hablan por sí mismas. El Tepetate es,

por lo menos cuarenta, adentro del Bol-

con mucho, el mayor de todos los regis-

són, lo que los relaciona con otra diná-

trados hasta el momento en el municipio

mica ecológica.

de Jiménez, y también el más complejo,

El Tepetate se encuentra inserto en un

al menos en términos materiales.

conjunto orográfico más denso, complejo y de mayor altura, mientras que la

Bibliografía

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CESUA

EL ALUCINANTE ESPECTÁCULO DE LAS LUCIÉRNAGAS EN BOSQUE ESMERALDA MUNICIPIO DE AMECAMECA, ESTADO DE MÉXICO Álbum de campo

Magdaleno Martínez Martínez1

¿

Se imaginan ustedes qué bonito es poder presenciar un bello espectáculo de luces titilantes en medio de un denso bosque con inmejorable ambiente, cubierto por blancas nubes que deambulan de un lado para el otro en medio de un

estrecho Valle de Amecameca en el municipio del mismo nombre, frente a las escarpadas laderas del gran Coloso Iztaccíhuatl, humedeciendo el bosque, al principio con una copiosa y pertinaz lluvia y posteriormente (durante el avistamiento) con una tenue,

1 Geógrafo egresado de la UNAM, profesor en los niveles de secundaria, preparatoria y a nivel Licenciatura en la ENAH; expositor en Paseos Culturales del INAH y en Actividades Mercurio y De Paseo con CESUA. Imagen de luciérnagas: KIWI CHEN en Pixabay Antilha 10 (29) 2021: 55-66 55


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CESUA Magdaleno Martínez Martínez

pero incesante brisa, mientras los visi-

apenas alcanza entre los 5 y 25 mm de

tantes impacientes del espectáculo que

longitud, de color entre gris obscuro y

nos espera, sentimos un poco de frío

café, se trata, nada menos, que de las

pero felices de estar bajo el verde folla-

increíbles luciérnagas, también conoci-

je, entre pinos y encinos que se mecen

das como bichos de luz, gusanos de luz

ondulantes con suaves movimientos

o hadas del bosque.

causados por el viento que sopla desde

Para disfrutar de este espectáculo deci-

lo alto de la congelada montaña, disper-

dimos hacer un recorrido por el Parque

sando el fresco olor a pino y a tierra mo-

Ecoturístico

jada?... ¡Maravilloso! ¿No?

Amecameca, Estado de México. Salien-

Desde tiempos remotos, durante los úl-

do el domingo por la tarde para llegar a

timos días del mes de mayo y los prime-

tiempo y poder ver las titilantes luceci-

ros del mes de agosto, en medio de los

tas del bosque.

verdes bosques de pino, encino y oya-

Las luciérnagas (Coleoptera: Lampy-

mel, que cubren las inclinadas laderas y

ridae), forman una familia con cerca de

los estrechos valles de la Sierra Neva-

2000 especies, perteneciente al orden

da, que abarca parte de los Estados de,

de los escarabajos denominados co-

Tlaxcala, Puebla y el Estado de México,

leópteros (con alas duras). La especie

se presenta este hermoso espectáculo

que habita estos bosques de la Sierra

de centelleantes luces de tonalidades

Nevada se conoce como Photinus Pala-

en blanco y verde/amarillo, mejor cono-

ciosi, y es la que se distribuye a lo largo

cido como bioluminiscencia, realizado

del eje neovolcánico.

por miles de ejemplares de un increíble

Estos pequeños insectos de apariencia

insecto de insignificante tamaño, que

insignificante, llegan para engalanar los

Antilha 10 (29) 2021: 55-66 56

Bosque

Esmeralda

en


Antilha

CESUA

El alucinante espectáculo de las luciérnagas en Bosque Esmeralda...

extensos bosques de la región en las

llos, que en un tiempo aproximado de

frescas y húmedas noches, despidiendo

dos meses más se convierten en unas

así una brillante y soleada primavera y

glotonas larvas, que con voraz apetito

recibiendo, al mismo tiempo, el caluroso

devoran, lombrices, caracoles, gallina

y húmedo verano con alegres noches

ciega y babosas que encuentran en su

de bellas luces y ondulantes vuelos. So-

entorno, hasta alcanzar su desarrollo y

lo atestiguan noches de fiesta, noches

pasar a la penúltima etapa de su vida

de apareamiento de las pequeñas lu-

en forma de pupa para luego mediante

ciérnagas para prolongar así la vida de

una metamorfosis transformarse en una

su especie. Por cierto, se sabe que el

nueva luciérnaga adulta, lista para apa-

alucinante vuelo de vistosa luz lo reali-

rearse e iniciar un nuevo ciclo de una

zan los machos, mientras las hembras

nueva generación (Guzmán Álvarez y

aguardan inmóviles, adheridas a las ra-

De Cock, 2017). ¡Ah, eso sí! si el recién

mas y troncos de árboles y arbustos o

nacido es una hembra, no desarrollará

en las piedras y la hojarasca, expectan-

el doble par de alas ni tampoco alcan-

tes para ver qué macho les atrae y res-

zará el mismo tamaño que los machos,

ponder al juego de luces (coqueteo) que

fenómeno conocido como dimorfismo

el elegido emitió, para que éste, al per-

que existe en la mayoría de las espe-

cibir la respuesta de aceptación, vaya al

cies (ídem).

romántico

En los espacios rurales todavía hoy

encuentro

(Weismann,

1994:29).

existen algunas supersticiones relacio-

Después del apareamiento, en cuestión

nadas con la presencia de las luciérna-

de dos semanas la hembra oviposita

gas como que si ves uno de estos in-

bajo la tierra, entre 50 y 150 hueveci-

sectos en tu casa, significa tres cosas:

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CESUA Magdaleno Martínez Martínez

tendrás buena suerte o visitas inespera-

mera es para encontrar pareja y realizar

das y, en el caso de ver más de una,

el apareamiento, y la segunda, es que

muy pronto habrá una boda con una

la emisión de la luz también es un me-

animada fiesta (Islas, 2020).

canismo de protección contra sus de-

En estas regiones del Valle de México

predadores.

existen leyendas y relatos que las rela-

Pasadas las 9:30 de la noche, la inten-

cionan con el «nacimiento del fuego con

sidad del espectáculo luminiscente de

las místicas “estrellas del bosque”, fruto

las luciérnagas va disminuyendo, igual

del dios del trueno que regaló al hombre

que la expectación de los visitantes; así

cientos de destellos con alas para dis-

que es hora de volver a casa. Así se

traer las pérfidas intenciones del vien-

inicia la caminata de regreso a las insta-

to» (Lizarde Sandoval, 2017:13).

laciones del Parque Ecoturístico y el

La centelleante y bella luz que emiten

abandono del bosque y la llovizna ha

las luciérnagas se sabe que se produce

desaparecido anunciando que la fiesta

por una reacción química de una sus-

de luces ha terminado.

tancia llamada luciferina que llevan en

A continuación presentamos un breve

la parte trasera del abdomen, al dejar

álbum fotográfico de ese recorrido.

pasar el oxígeno del medio ambiente, mediante una abertura que abren y cierran para generar un pequeño haz de luz palpitante (Ídem). Según especialistas de la materia, la luz que emiten las luciérnagas tiene dos funciones de igual importancia: la pri-

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El alucinante espectáculo de las luciérnagas en Bosque Esmeralda...

Robusto árbol de encino (Quercus) en forma de candelabro del bosque mesófilo de alta montaña de la región, están cubiertas sus ramas de gran variedad de plantas epífitas (helechos, hongos, musgos y líquenes). Foto Magdaleno Martínez, 2021.

Explicaciones en el autobús antes de llegar al Bosque Esmeralda. Foto Dánae López Cárdenas

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CESUA Magdaleno Martínez Martínez

Frescas y cristalinas aguas descienden impetuosas de los glaciares del Volcán Iztaccíhuatl en forma de copiosos arroyos, pequeños rápidos y frecuentes saltos y cascadas. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

Hermoso riachuelo de aguas cristalinas que se forma de arroyos y manantiales que descienden desde los glaciares que aún existen en la cima del Iztaccíhuatl. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

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El alucinante espectáculo de las luciérnagas en Bosque Esmeralda...

Vista panorámica de la Cañada de Alcalican en el Valle de Amecameca, las cabañas y el «Bosque Navidad» desde un mirador natural del Parque ecoturístico. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

Vista panorámica del bosque de árboles de navidad formado por las especies de Pino canadiense Abeto Douglas (Pseudo tsuga macrolepis), Pino (Pinus ayacahuite), Oyamel (Abies religiosa) y Cedro blanco (Cupresus lindleyi). Foto Magdaleno Martínez, 2021.

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Vista frontal del área de cabañas, el «Bosque Navidad» y al fondo el Volcán Iztaccíhuatl. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

Instalaciones del área de entrada al Parque ecoturístico «Bosque Esmeralda». Foto Magdaleno Martínez, 2021.

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El alucinante espectáculo de las luciérnagas en Bosque Esmeralda...

Veredas y senderos en medio del bosque muestran las vías de acceso al bosque mediante caminatas de una forma muy sana en el Parque ecoturístico Bosque Esmeralda. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

Bosque de árboles de navidad con pequeños espacios descubiertos, muy probablemente por el ataque de una plaga a los arbolitos faltantes. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

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Los rayos solares se han ido, la noche se acerca y las luciérnagas se preparan para iniciar su bello espectáculo nocturno de luces que los espectadores ya esperamos con impaciencia. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

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El alucinante espectáculo de las luciérnagas en Bosque Esmeralda...

Grupo De Paseo con CESUA en una caminata en torno al Bosque Navidad, previo a la caminata hacia el Santuario de las luciérnagas para poder realizar el avistamiento del bello espectáculo nocturno. Foto Magdaleno Martínez, 2021.

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Weismann, Eberhard 1994 Los rituales amorosos. Un aspecto fundamental de la comunicación de los animales, Biblioteca Científica Salvat, Barcelona, Salvat Editores.

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