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Capitulo X VACUNAS PARA EL SARS-COV2
Uno cuerpo y espíritu y soy humano
Soy fuerte y casi magistral pero soy frágil
Cuando gozo de ti de mi salud estoy regocijado
Pero nunca perderte es iluso e inverosímil
Te necesito para seguir adelante y ser amado
Cuya existencia la humanidad agradece por ser útil
Vacuna descubrimiento que la vida ha alargado
La fragilidad se recuerda pero nos permite seguir como mástil L´Gámiz
Una vacuna es una substancia que ha sido preparada para producir inmunidad contra alguna enfermedad, mediante el refuerzo del sistema inmunitario de los humanos o incluso de otros animales. Van a funcionar enseñando a algunas células y componentes de nuestro cuerpo a cómo enfrentar e incluso destruir parásitos, bacterias o virus que se introducen al organismo por diferentes circunstancias. Las vacunas son en realidad cantidades muy pequeñas de componentes, ya que el propósito es que el propio cuerpo las reproduzca en cantidad suficiente para poder enfrentar las arremetidas de los agentes dañinos. Dando como resultado una medida preventiva muy eficiente para que de manera natural se evite principalmente las enfermedades infecciosas.
Los tipos de vacuna:
• Aunque con efectos similares, pueden ser de diferentes tipos como es el caso de utilizar agentes vivos atenuados o muertos.
• Vacunas que contienen una toxina producida por los propios agentes dañinos que hacen que el organismo humano sea inmune a los efectos dañinos de la infección, en lugar de a la infección en sí.
• Vacunas biosintéticas que contienen substancias artificiales que son muy similares a fracciones de virus o bacterias.
¿Qué tipos de vacuna son para el COVID-19?
Las ARNm, que son vacunas con un nuevo tipo de función en donde lo que se pretende es que la respuesta inmunitaria sea mediante proteínas llamadas “Spike” que es la que contiene el virus y que suministrada en cantidades inocuas posteriormente producirá el propio individuo mediante el estímulo que ocasionara la vacuna. Desencadenándose una respuesta inmunitaria muy efectiva protegiendo contra la infección de virus tan poderosos como los coronavirus SARScov2 del COVID-19.
El empleo de la ingeniería genética es un avance científico de gran envergadura con impactos impresionantes en la prevención o atención de enfermedades ya que se enseña por así decirlo a las células a que se defiendan contra el ataque en este caso de virus. Pero este procedimiento ya ha sido probado y está siendo empleado en enfermedades tan graves como el cáncer con excelentes resultados.
También existen vacunas contra el Covid-19 que fueron producidas utilizando el procedimiento de la mayoría de las vacunas existentes en la actualidad mediante el empleo de virus inactivados pero que si producen los anticuerpos al ser introducidas al cuerpo humano.
La vacunas en un inicio fueron cuestionadas por realizar procesos poco conocidos pero en realidad, No modifican el ADN, es totalmente falsa esta afirmación, el ADN es una proteína que se encuentra en el núcleo de las células de nuestro cuerpo y que constituye el principal constituyente de material genético y que es por lo tanto prioritario. Las vacunas propuestas contra el COVID-19 tienen ARN mensajero que no ingresa al núcleo celular e incluso al poco tiempo también es descompuesto al terminar de dar las instrucciones.
Arnulfo L´Gámiz Matuk
Los efectos secundarios que pueden presentarse en algunas personas como: aumentos de temperatura en las horas siguientes a la administración, enrojecimiento, dolor en el la zona de aplicación o hinchazón y reacciones alérgicas
¿Es recomendable aplicarse la vacuna para el COVID-19? SI
Estas vacunas están siguiendo normas muy rigurosas de seguridad y efectividad en muchos países en el nuestro la COFEPRIS se encuentra en ese proceso y no hay porque dudar al respecto ya que personas de alto nivel y con una gran responsabilidad ética sean las que aprueben o no su uso.
Sin embargo no hay muchas dificultades por superar como es los lugares de almacenamiento y los procedimientos de aplicación ya que algunas de estas vacunas requieren ultra congelación o sea temperaturas por debajo de los 70 grados centígrados, capacitación del personal que las aplicara, y en general el procedimiento de prioridades de los diferentes grupos de edad o de riesgo.
Existen ya varias vacunas y todavía en estudio más de 140. Los tiempos de desarrollo de la vacuna se han acortado muchísimo, pero apresurarse sin probarlas con mucha cautela puede ser muy peligroso, nuestro dicho se aplica perfectamente, “no por mucho madrugar amanece más temprano”.
¿Sera inmediata la solución del COVID-19 con la vacuna? NO
Sera necesario e indispensable continuar con medidas rígidas de prevención, los niveles de efectividad no garantizan que a todos los que se les vacuna quedaran totalmente protegidos, los tiempos necesarios para vacunar a millones de personas serán largos y la disponibilidad de dosis depende de niveles de producción no realizados hasta la fecha.
En el siguiente cuadro se pueden identificar las principales.
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
Semblanza 8
El personal del área de la salud
En la antigüedad aquellos individuos que se dedicaron a la solución de los problemas de salud fueron muy valorados y tuvieron un impacto social predominante como:
Hipócrates que separo la medicina y el unionismo (unión con aspectos religiosos), preocupándose de los deberes de los médicos desarrollando el famoso juramento Hipocrático, que es hasta nuestras fechas muy valorado por sus principios éticos y de compromiso con los pacientes. Antes de él la filosofía y la teúrgia (magia mediante se pretendía entrar en comunicación con los dioses) se asociaban. Significativo también fue Galeno que además de medico era cirujano y filósofo fue tan importante que por muchísimos años a los médicos se nos denominaba como galenos, citando que todo medico debería de ser también filósofo.
Algo a destacar es que incluso se tenía el Dios de la medicina, por un lado Asclepios para los griegos y Esculapio (Aesculapius) para los romanos. Pero casi todos los dioses tenían relación con la salud.
Florence Nightingale,
Un personal de salud muy importante que cada día demuestra su gran respecto profesional encaminado al servicio de la salud de los individuos es sin duda la enfermería quien tiene como referencia a Florence Nightingale que fue una enfermera, escritora y estadística británica, considerada precursora de la enfermería profesional moderna.
Y creadora del primer modelo conceptual de enfermería, es ubicada como precursora de la primera escuela laica de enfermería en el mundo y ubico a la practica con un sentido profesional ya que anterior a ella si existió la figura representativa pero solo como ayudante del médico y muy encaminada a las religiosas.
En la actualidad es un profesional con una formación universitaria que la propia OMS la ubica como él o las responsables de la atención autónoma y en colaboración dispensada a personas de todas las edades, familias, grupos y comunidades, enfermos o no, y en todas circunstancias. Comprende la promoción de la salud, la prevención de enfermedades y la atención dispensada a enfermos, discapacitados y personas en situación terminal.
No son los únicos representantes del personal dedicado a la atención de la salud, habría que incluir a otros profesionales como son los Odontólogos, Psicólogos, Nutriólogos, Químicos, Epidemiólogos, Trabajadoras sociales, farmacoterapeutas, fisioterapeutas, Paramédicos, personal de apoyo como son los camilleros, técnicos de varias áreas como los de radio diagnóstico y radio terapeutas, audiologos, muy importantes los del área del laboratorio, todos los auxiliares de diagnóstico y tratamiento, trabajadores comunitarios, todo y muy variado personal administrativo, personal de archivo y computación, personal de limpieza y mantenimiento, los conductores de ambulancias y vehículos de apoyo.
Ante tal situación parece inverosímil que a alguien que ha estudiado, que se ha capacitado, que ha dejado muchos años de su vida precisamente al servicio de la humanidad pudiera recibir en lugar de agradecimiento agresiones durante la Pandemia por Covid-19.
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
Fueron muchas las expresiones de hostilidad contra esos seres humanos que su compromiso por atender seres humanos implica muchísimos riesgos y sin embargo parte de la sociedad colmada de pésima información azuzada por supuestos líderes políticos ávidos de poder y falta de valores fundamentales en algunas células de la sociedad, se dedicó a agredir verbal y físicamente al personal de salud, que desconcertados ante esas muestras se sintió indefenso ya que las disque autoridades prácticamente nada hicieron en la protección de aquella enfermera, de aquel médico que ha colaborado en su vida profesional en la atención de miles y miles de personas afectadas por algún mal relacionado con la salud y sin embargo estas y estos desnaturalizados con una actitud cobarde dañaron a cientos en el mundo y en México en particular.
Ejemplos desquiciantes son muchos recuerdo como en un velorio en la alcaldía GAM de la CDMX los asistentes agredieron verbal y físicamente a una enfermera recalcando una baja expresión “lárguese esta apestada”, la golpearon y patearon sin haber tenido más que el error de ser profesional de la salud y haber ayudado a miles de pacientes. Ella pudo de alguna forma comunicarse al 911 pidiendo apoyo y saben ¿cuál fue la respuesta de los policías? nosotros no podemos hacer nada, y dejaron que a media noche la afectada buscara un taxi para salir de ese espantoso lugar. Y es entonces que recalcas en tu pensamiento que no tenemos protección porque las disque autoridades solo cuidan el orden porque cuando hay desorden se ocultan y se alejan del lugar dejando en la inseguridad total en este caso al personal de salud. Cabe recalcar que ella levanto con el apoyo de sus compañeras una demanda ante la Fiscalía General de la República y la respuesta fue nula, ningún apoyo, nada.
Muchos más ejemplos existen, personal que fue rociado por un café caliente en la cara, personal que fue bañado con cloro, que ha sido pateado y hasta mordido, ejemplo vil fue el secuestro de enfermeras y enfermeros que en un hotel de la CDMX que provenientes de Nuevo León acudían a apoyar a los servicios de salud y tuvieron que pagar el secuestro con mil dólares cada uno, otro mal ejemplo fue el de pobladores que incendio un hospital que atendía pacientes Covid-19.
¿Y las autoridades? Pues algunos dieron consejos como no usen ya su uniforme como si eso justificara que personas agresoras sean incluso protegidas mientras que el personal de salud se le exige continúe laborando mal pagado y sin protección. A mediados de mayo del 2020, senadores y diputados de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión alertaron que el 94% de las agresiones a médicos, enfermeras y a todo personal hospitalario en el país permanecia impune.
La propia Organización Mundial de la Salud, condeno las agresiones contra los profesionales de la salud en México y solicito al Gobierno que tomara medidas para garantizar su seguridad
Pues bien nadie se quebró, continuo y permanece trabajando incluso con muchísimo riesgo de su salud y de sus familiares.
Por otro lado ante tal situación grupos de población se sumaron a expresiones positivas, “Deben ser aplaudidos por su extraordinaria labor” fue la respuesta de muchos otros habitantes de México que consientes ante esa terrible situación se encaminaron a efectuar muestras de apoyo muy significativas, como el aplaudir a cualquier enfermera o médico que se encontraban en la calle o en algún lugar, recalcamos aquellas ceremonias en donde los vecinos que se encontraban en cautiverio siguiendo las indicaciones oficiales, a determinada hora salían a los corredores de los edificios como sucedió en el multifamiliar que se encuentra frente al centro médico nacional del ISSSTE 20 de noviembre que cada anochecer gritaban, cantaban el cielito lindo y aplaudían, manifestando su apoyo al personal de salud.
Aspecto importante a destacar fue el apoyo de varias organizaciones o hasta familias que cada mañana llevaban café, galletas, tamales y muchos apoyos más como caretas y cubrebocas, para el personal que salía de las extenuantes guardias en las mañanas temprano, recuerdo una niña que frente a la puerta del hospital provista de su cubrebocas, entregaba una flor a cada enfermera que veía salir de un hospital.
¿Cómo vas a saber lo que es la adrenalina si nunca trabajaste en un código rojo?
¿Cómo vas a saber lo que es la precisión si nunca pusiste una vía que parecía imposible?
¿Cómo vas a saber lo que es paciencia si nunca te quedaste (por más que estabas apurado) a escuchar la historia que te contaba tu paciente?
¿Cómo vas a saber lo que es la tristeza si nunca viste llorando a un familiar despidiéndose de su ser querido?
¿Cómo vas a saber lo que es la angustia si nunca entraste a ver al paciente después de que su médico le dio el peor diagnóstico?
¿Cómo vas a saber lo que es aceptación si nunca viste a un familiar con los ojos llenos de lágrimas firmar el formulario no reanimación?
¿Cómo vas a saber lo que es el miedo si nunca viste la cara de un padre cuando entra en quirófano su hijo?
¿Cómo vas a saber lo que es el orgullo si nunca te abrazó y te agradeció un familiar por salvar una vida?
¿Cómo vas a saber lo que es felicidad si nunca viste la cara de los padres de un recién nacido que trajiste al mundo?
¿Cómo vas a saber lo que se extraña a tu familia en las fiestas si nunca te tocó una guardia en Navidad o fin de año?
¿Cómo vas a comprender mis emociones si nunca te has puesto mi uniforme?
¿Cómo te atreves a juzgar a un profesional de la salud sin conocer su historia?
De esta salimos todos juntos
Para todos aquellos que aún dudan de lo que está pasando o no lo toman en serio... Orgullo de pertenecer... no son nuestras palabras, pero nos hacemos eco porque nos sentimos absolutamente identificados como muchos de ustedes.
Tomado del muro de Facebook de la Dra. Alejandra Sánchez Cabezas, Presidente del Consejo de Salud Comunitaria de la Sociedad Argentina de Medicina (SAM)
Los problemas para el personal de salud fueron muchos, uno destacable fue la falta de equipo para la protección y de insumos para la atención de los pacientes, el desconocimiento, en los inicios de la Pandemia, la falta de capacitación y pésimas actitudes de los directivos y personal administrativo, que con una conducta totalmente des humana, incluso escondían los equipos, argumentando la falta de recursos, lo que encamino a muchos contagios y fallecimientos del personal de salud que día a día se enfrentaba a este terrible mal.
Las manifestaciones no se dejaron esperar y fue una reclamación constante hasta lograr incluso destituir a subdirectores administrativos que se demostró su ineptitud e incluso actitud criminal al haber ocultado los equipos como sucedió en el Hospital Regional del ISSSTE
Li. Adolfo López Mateos, en donde el personal cerró la avenida universidad, mostrando su descontento y pruebas de la ineptitud de los responsables que fueron destituidos y de inmediato apareció el equipo necesario y así muchos fueron los ejemplos a nivel nacional.
Estos equipos, estos son de lo más incomodos pero su uso es indispensable, cualquier descuido puede ser fatal, incluso una de las fotografías premiadas en abril del 2021 por la prensa internacional fue precisamente la de una cara de una doctora después de haber empleado su equipo protector en una jornada de trabajo y aparecen las huellas del daño que los goles y el tapaboca producen después de estar utilizándolos por tanto tiempo en las áreas Covid-19 de un hospital.
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
Independientemente de los daños físicos, hay que recalcar el daño psicológico que ha tenido el personal ya que el miedo a ser contagiado, la angustia de ver tantos pacientes y la dificultad para su atención, la limitada respuesta a los tratamientos, por lo que la muerte ronda cotidianamente incluso llevándose a propios compañeros de trabajo por lo que el estrés y la depresión se sumó a los riesgos de la pandemia.
El personal de salud no ha sido el necesario para la atención de las unidades médicas, lo que ocasiono la sobre carga de trabajo. Se tomó una medida en las instituciones oficiales de que todo personal de mayores de edad o con riesgo por enfermedades concomitantes se pudiera retirar totalmente de su trabajo recibiendo todo su sueldo, medida que impacto en la problemática ya que no se contrataron suplencias, esta situación ha durado por más de un año, por lo que la desesperanza y cansancio se ha aumentado notablemente en los hospitales y en las etapas de crecimiento de contagios en donde la saturación hospitalaria fue enorme la crisis del personal fue también de esas dimensiones.
La OIT reporto que uno de cada 5 trabajadores de la salud ha presentado síntomas de depresión y ansiedad. En el mes de abril del 2021 en México se encontraba en 3 mil 471 de personal de salud fallecido a causa del contagio del Sars Cov- 2, con una confirmación de 228 mil 157 casos lo que corresponde al 3.6 % del total de casos reportados oficialmente ya que médicos o enfermeras del sector privado o que laboraban en instituciones no hospitalarias que se contagió o falleció no quedo en muchos casos registrado.
México lego a ser el país de todo el mundo con más defunciones en el personal de salud a causa de la Pandemia, pero a nivel mundial la cifra fue enorme superando los 7 mil.
La Dirección de Epidemiología de la Secretaría de Salud (DGE) señalo que la media de edad en los decesos fue de 57 años, de los que 69 % correspondió a masculinos. De las defunciones confirmadas, 47 % eran médicos, 29% otros trabajadores de la salud y 19% enfermeras.
La OIT reporto el gran riesgo que existía para los trabajadores de la salud en América latina y el caribe ha contagiado a más de 570 mil trabajadores, y mato a más de dos mil 500.
Vacunación una opción para poder prevenir al personal de la salud afín de evitar los contagios a ellos y sus familiares, se formuló como una opción prioritaria en todo el mundo por lo que las primeras dosis se encaminaron a los recursos que atendían directamente a los pacientes Covid, sin embargo no fue una medida bien organizada lo que ocasiono mucho descontento, en un principio tenían que trasladarse los seleccionados a zonas militares, al ver que eso era impráctico se decidió vacunar en las propias unidades hospitalarias lo que mejoro en mucho la atención y el descuido de los pacientes que ocurría al tener que destinar muchas horas para poder vacunarse. En el mes de Abril se llegó a la cifra de 16 985 391 vacunados.
Que aunque se informaba ya estaban todos cubiertos resulto que muchos no habían recibido la oportunidad principalmente los que laboran en el ámbito privado ya que se tenía la falsa idea que eran de clase económico solvente, cuando en realidad no es así la gran mayoría son los que laboran en las farmacias, o tienen modestos consultorios o el personal de enfermería o auxiliar en los hospitales y están en constante contacto con pacientes Covid.
Leamos lo que nos comunican personajes que se contaminaron siendo personal de salud y cuáles fueron sus experiencias…
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
Capitulo XI
Experiencias del personal de enfermería ante el Covid-19
Enfermera Azucena Vergel
Enfermera especialista por la Escuela Nacional de Enfermería de la UNAM ENEO Jefe en el Hospital Regional del ISSSTE
Lic Adolfo López Mateos
Descripción general de mi vida
Crecí con una niñez complicada como muchos de nosotros por la ausencia de padre, ya que vivían separados por su trabajo el radicaba en el DF y mi mamá, hermanos y yo en la Ciudad de Puebla y solo por escasos periodos nos visitaba, lo que obligo a mi madre hacerse cargo de la familia de siete hermanos por más de 15 años yo soy la menor de ellos.
Sin embargo si me gustaba estudiar y llegue a concluir la educación media pero ante la necesidad económica decidí iniciar mi vida laboral en una institución del sector salud el Hospital Regional Lic. Adolfo López Mateos del ISSSTE en el servicio de Urgencias permaneciendo ahí por 8 años y posteriormente ya con algunas posibilidades y apoyos realice la especialidad en Enfermería Quirúrgica.
En este tiempo me embarazo de mi ex esposo con quien esperamos a nuestro bebe con mucha esperanza y cariño. Pero él bebe nació con problemas de salud estando internado tres meses en la unidad de cuidados intensivos neonatales, en donde fue una desdicha el verlo día a día como se deterioraba su cuerpo, falleció y dejo en mí una angustia y tristeza difícil de explicar, agradeciendo el tiempo que estuvo con nosotros y pidiendo que descansara tranquilo “mi hijo amado”
Después de esa dolorosa experiencia reinicio mis actividades profesionales laborales, y decido hacer ejercicio y empiezo a realizar ejercicio dedicándome a correr distancias cortas, lo que efectuaba al salir de guardia, la distancia diaria era entre 5 a 6 km y ante la posibilidad de poder competir me empecé a participar en eventos con carreras de 10 km eso sucedió hasta que se presentó la Pandemia por Covid-19.
Actualmente tengo 2 hijos un varón de 7 años y una mujercita de 5 años que se han convertido en el motor de mi vida, pero los gastos también se ha aumentado por lo que fue necesario complementar mis ingresos trabajando además de en el sector público en forma privada lo que me ha permitido poder mantenerlos ya que dependen solo de mí, aunque cuento con el apoyo de mis padres y hermana que afortunadamente son mis vecinos y me ayudan en mucho. Uno de los aspectos de los que me siento muy orgullosa es el haber podido adquirir una casa con muchísimo esfuerzo u tiempo lo que me ha dado una tranquilidad para sentirme segura.
El enfrentamiento con Covid-19
¿En qué momento me contagié? lo tengo bien preciso, cabe señalar que ya vivía con una inquietud incluso miedo porque ya corrían las noticias de la peligrosidad de la Pandemia y en el Hospital escuchábamos de ya muchos pacientes que se internaban y fallecían y aunque tratábamos de cuidarnos la verdad es que el personal que laborábamos en la Institución estábamos muy desprotegidos y así fue que en la atención de una paciente que fue internada por aspecto obstétrico pero positiva de Covit 19 precisamente en la Unidad Toco Quirúrgica me toco su atención posterior a la realización de una cesárea, quien presentaba ya sintomatología acentuada de la enfermedad.
Yo inicialmente no me percate de haber sido contagiada fue hasta varios días después, en donde al acudir al trabajo como todos los días, me siento muy cansada de manera inexplicable, con fiebre por lo que acudo al servicio de Urgencias en donde me dan el diagnóstico de una simple faringitis infecciosa por lo que decido, ya más tranquila retirarme a mi casa, pero los días y el cansancio continuaron y se intensificaron por lo que regreso al Hospital precisamente al 5 día, mis síntomas se agudizaron cada vez más me otorgan incapacidad por dos semanas pero ya con algo para mi muy tenebroso porque ya se me había diagnosticado infección por el virus SARS Cov-2 o sea con Covid- 19 pero de la de tipo grave, me indican tratamiento en base a analgésicos y antibióticos (Azitromicina Acemetacina e Ivermedina) ya con el miedo presente lleve todo al pie de la letra sin embargo no tuve nada de mejoría por lo que al tercer día de estancia aislada en mi casa, y ante la dificultad respiratoria que presentaba que se agudizo en esa madrugada en forma impresionante y yo sin poder dar un paso para avisar a mi familia, estaba con taquipnea y demasiada debilidad además mi oxigenación estaba en 74 spo 2 , intente comunicarme con
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
compañeras de trabajo y como de película nadie me contestaba su teléfono, porque una no colgó bien el teléfono, otra se le descargo etc.
La crisis
Tuve que aguantarme hasta la siguiente mañana cuando por fin mis allegadas vieron mi mensaje y acudieron a mi casa y de inmediato me llevaron a un médico particular que al valorarme recomienda me llevaran de inmediato al hospital para que me atendieran de urgencia al llegar al mismo inmediatamente me trasladan directamente a Urgencias Adultos y en ese momento recuerde las palabras de una querida Psicóloga que decía que solo ese ser superior que es Dios tiene la última palabra , cerré los ojos y pensé me entrego en cuerpo y alma y confió en mi DIOS una vez que ingresada entro en un sueño y solo recuerdo que me dijeron tiene que firmar para poderme intubar. En ese sueño distingo un ángel color negro en una montaña que intenta abrazarme con una de sus alas y escuchó una voz qué me dice vas a creer en él ¿acaso no crees en DIOS?, me lleno de energía y le contesto Creo en DIOS y en nadie más y con un rayo de luz apareció un ángel blanco pero sentado del que nunca vi su rostro.
Estuve sedada e intubada aproximadamente 14 horas desperté y la Doctora que me estaba atendiendo, me pregunto ¿quieres que te quite el tubo? para ver si podía sola y yo de inmediato le dije que si lo intentara. Posteriormente estuve en Urgencias aproximadamente dos días mása continuación me ingresaron al 3er piso que es el de Medicina Interna en un aislamiento ahí me efectuaron otra prueba que dio positivo al Covid- 19 por lo que fue necesario me trasfirieran a la Unidad de Cuidados Intensivos.
Mi estancia en el Hospital fue muy dura en donde sentí la soledad como nunca en mi vida, porque en realidad es muy poca comunicación con el personal y nunca, nunca, con mi familia. La atención recibida por parte de mis compañeras fue excelente pero con todo el equipo protector que se tienen que poner es muy difícil el dialogo además no podía dialogar ya que tenía colocado un nebulizador continuo las 24 horas del día.
Reflexión
Mi estancia en el hospital como paciente siento que me fortaleció por lo que muy adentro de mí, pero muy adentro agradezco esta experiencia que me ha permitido recapacitar con respecto a mi vida de ya más de 40 años y valorar lo que tengo sobre todo en el aspecto sentimental ya que tengo a mis hijos que son mi mayor satisfacción y además amigos y compañeros del hospital familia que me apoya incondicionalmente y en lo material que tengo mi casa y mi trabajo. Cuando las cosas van mal es cuando te das cuenta quién eres y quiénes son los que te quieren. Cuando las cosas van bien todos son fantásticos.
En estos momentos agradezco estar viva situación que por mucho tiempo no valore y ahora que tuve esta experiencia de estar tan cerca de la muerte, reflexiono sobre mi Psicóloga Amanda, porque incluso en algún momento de mi vida paso por la mente el suicidio y ella me oriento mencionándome que un intento de suicidio no culminado deja muchas secuelas.
Ya a fines del 2020 posterior a reposo por mucho tiempo, y complemento de Oxigeno, me he recuperado bastante pero aún tengo algunas secuelas de esa terrible enfermedad.
Me fui recuperando pero muy lentamente día a día, estando consiente de ser una sobreviviente de esta Pandemia en donde soy consciente de ser privilegiada porque desgraciadamente son muchos los que pierden la batalla.
Esta enfermedad altera todos tus órganos y sentidos y ves como nuevamente aprendes a caminar a se te olvidan las cosas, te duelen
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
hasta los globos oculares y todavía soy dependiente del oxígeno y tus mucosa nasales están resecas en ocasiones sangran hay falta de apetito los médicos te ven por video conferencia pero siento que cada día voy progresando aunque muy lentamente.
Ya a fines del 2020 posterior a reposo por mucho tiempo, y complemento de Oxigeno, me he recuperado bastante pero aún tengo algunas secuelas de esa terrible enfermedad y hoy ya en el 2021 continuo trabajando, cuidando a mis hijos y con toda la esperanza de que pronto se pueda terminar con este mal que ha sido la Pandemia por Covid-19
“Gracias a Dios por la oportunidad de seguir adelante”
Capitulo XII
Experiencias del personal médico ante el Covid-19
Medico Paciente Infectado
Dr. Carlos Lenin Pliego Reyes
Medicina Interna & inmunoalergia Clínica Presidente del Consejo Mexicano de Medicina Interna A.C.
Especialista en el Hospital Lic. Adolfo López Mateos ISSSTE
Panorama
Al principio escuchábamos de un virus que estaba generando problemas respiratorios, escaló el problema cuando empezó a ver casos fuera del supuesto país de origen. Las consultas continuaban con normalidad y me preguntaban si creí que llegaría la enfermedad a lo que nunca dudé que pasaría, hasta que finalmente se advierte del primer caso en México. A partir de ese momento sabíamos que habría contagios y ya se especulaba de las miles de muertes y “campos de guerra” con hospitales colapsados en Europa, se advertía algo serio para México y todo el continente. Así empezamos a atender los primeros casos, ayudando a preparar la atención masiva que se vislumbraba, y ya cuidándonos en el consultorio ante la diversidad de pacientes y este “virus” que ya circulaba por todas partes.
Mi caso
Fue así que posterior a una jornada cotidiana de actividad física, que empecé a sentirme cansado y con dolor articular, nada que un analgésico no controle, hasta que el malestar abdominal y las coyunturas empezaran a molestar más allá de un día de entrenamiento, desperté y pensé: si esto no es COVID, entonces si quién sabe qué más pueda ser.
Fue como decidí realizar el ya famoso PCR para SARS-CoV2, emprender un aislamiento voluntario y dejar la atención médica presencial, como decimos los clínicos: algo no me late y parece que puedo tener COVID-19.
Debía en ese momento expresar lo que acontecía y escribí: Desde el
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
confinamiento y fuera del campo hospitalario pero activo! después de varios días de andar protegido y atendiendo pacientes, inicie con síntomas que quebrantan mi cuerpo y aprisionan mi cabeza, muero de frío y ardo en el interior! ¡pero debemos seguir apoyando! Este fue el primer pensamiento que relate, eran los inicios de los síntomas y aún no se presentaba lo más difícil.
“Es una experiencia terrible, por la incertidumbre de cómo va evolucionar la enfermedad y por ya tener experiencias de ver pacientes de tu misma edad que se encuentran debatiéndose entre la vida y la muerte, además por la angustia de pensar que pude haber contagiado a un familiar y que su única culpa, es vivir con personal de la salud” Desde que presente los primeros síntomas, considere que este virus no le iba permitir que hiciera en mi cuerpo lo que quisiera, que fuera a manejar la enfermedad y solo con el aislamiento lo vencería.
Hasta que una noche hizo de la suyas la enfermedad, y me hizo entender que era momento de guardar más por mi salud, y como no iba ser así, si me sentía fatigado, con un dolor terrible de cabeza que me hizo marear y al voltear al cielo, ver las estrellas como emitían una extraña luz, esa luz que el dolor y la enfermedad les confiere.
Evolución
Siguieron los días, aislado, confinado en un cuarto, sin salir, únicamente al baño y verificando que pudiera contaminar lo menos posible. Una paranoia y un miedo ante el riesgo de contagiar a la familia, de pensar qué tal vez ya los había contagiado, deseaba que pasaran los días y que nadie más de mis contactos tuviera la enfermedad, no me estaba sintiendo nada bien, entre el pensamiento de imaginar lo severo que pudiera ser la infección, como y cuando me contagie y quien de mis cercanos también podría ser víctima del padecimiento.
Fue una gran pelea con varios demonios; mi enfermedad, mi miedo y la fatiga. Pensé, es un padecimiento que en el mejor de los casos tendré dolores de cabeza, articular, muscular y fatiga intensa, esperando de ahí no pase, y que me permita seguir ayudando, aunque sea a la distancia, y que mis cercanos no hayan adquirido la enfermedad. De forma simultánea obteniendo fuerzas de no permitir que el padecimiento me limitara, atendí a un buen amigo a la distancia, daba consejos y consultas por llamada para orientar de qué hacer con su COVID porque yo tenía el mío.
Una tarde sentí que me molestaba el pecho, en fin como médico supervisaba mi pulsioximetria y no decía nada. Pero cayó la noche y con ella también la saturación, un número nada convincente, 85, en fin que podía pasar, era de noche, había febrícula, no debía molestar a nadie pero decidí dormir boca abajo, pensando que esa posición había ayudado a mucha gente con oxígeno y con ventilador, la última frase que exprese en ese momento haciendo gala de los genes veracruzanos que mi padre me heredó:
¡¡Chingue a su madre, voy estar bien!!
Expresión poco ortodoxa pero que al mismo tiempo requería decir para darme fuerza de algo que me tenía en la lona, que solo en ese momento me imaginaba con la necesidad de usar oxígeno y que podría evolucionar a peor, pues apenas era el día 8 de la enfermedad, solo rondaba en mi pensamiento la idea de esa “hipoxemia silenciosa”, ni modo la suerte estaba echada y tenía el optimismo de despertar mejor. Y así fue, desperté y me toque, sentía y estaba en mi cuarto, pensé, esto no se parece al infierno, estaba vivo y tomé de forma inmediata el oximetro, 89, eso es mejor que 85, respire profundo y sentí que no pasaba mucho aire, pero los números eran mejor.
Debía guardar la calma, pensar que no evolucionaría y así transcurrieron dos días más, con hipoxemia, con fatiga intensa, malestar en el pecho, sin apetito, y siempre prensaba: un día más, siempre será un día menos, para lo que sea, afortunadamente los días siguieron y no evolucionó a mayor severidad, la saturación fue cada vez mejor, el sentido del olfato y gusto también, pero sin duda el apetito y la fatiga fue lo último que recupere.
Salida
En fin, termine la cuarentena y pues había que reactivar nuestra economía, y al trabajo, ciertamente me sentía debilitado, pero había que trabajar, y la sorpresa fue: esa fatiga terrible al término de la jornada, no podía más, ese deseo de descansar era cada vez mayor conforme pasaban las horas de trabajo, entonces entendí que no debía exigirme tanto en la reincorporación de mis actividades, debía continuar guardando reposo, el cuerpo lo exigía, el apetito no era bueno y la fatiga seguía siendo presa de uno.
Al final de casi cuatro semanas empecé a sentir completamente recuperado, con la dicha de no haber entrado en esa estadística de grave-
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
dad y mejor aún de mortandad, agradecido por el acompañamiento a distancia que hizo mi familia, no podía decirles la verdad de lo mal que me sentía, soy el médico, no me podía debilitar y menos ante la posibilidad que requirieran mi atención.
Expectación
Ya recuperados con un pensamiento siempre: hay que seguir siendo empático y solidario con nuestros compañeros, el personal de la salud, tuve miedo y deseo que ningún amigo lo tenga, aunque jamás estuve solo, sentía ese aislamiento que la enfermedad te impone y por eso hoy, sigo usando cubre boca en todo momento, entro a las áreas COVID completamente protegido, simplemente porque aunque sé que no me contagiare de nuevo, o como se han dicho que tal vez si suceda, si sé que debo tener solidaridad con la gente, debo ser sensible con mis compañeros de trabajo, y debo demostrar humildad y respeto a mi salud y a mi persona.
Si, este COVID-19 existe, en todas sus presentaciones y grados de severidad, y ante un sistema de salud de México ya saturado, ahora está haciendo mayor crisis, ante una población que ha dejado a un lado el cuidado de su salud, y que no se interesa por conocer su organismo y cuidar de él.
Ante una sociedad que difícilmente puede pagar la renta de oxígeno medicinal domiciliario, y los medicamentos sintomáticos, aunado a las miles de noticias falsas y tratamientos milagro inexistente, es una batalla perdida ante esta y cualquier enfermedad.
Ahora sí puedo decir que ciertamente ¡No es guerra! es emergencia sanitaria, es evidenciar que en todo el mundo no han invertido en salud ni educación.
¡¡ Vamos y sigamos adelante en búsqueda de cuidar más de nuestro entorno, que todos esos enfermos recuperados cambiemos nuestros hábitos y protección de nuestra salud, y que todos esos muertos que ha dejado esta pandemia, tengan un objetivo, y no queden solo en un recuento de tragedias, que día a día escuchamos, y de cómo ha destrozado familias completas esta Pandemia!!
Capitulo XIII
Experiencias del personal médico ante el Covid-19
Vivencia personal ante el Covid-19
Dr. Maximiliano Martínez Valladares
Médico Cirujano por la UNAM Especialista en Medicina de Rehabilitación
CMN – IMSS
Presidente del colegio Neolaredense de Salud Pública Rehabilitologo en el ISSSTE de Nuevo Laredo Tamaulipas
Preámbulo
Recuerdo perfectamente, el año que ingresé a la facultad de Medicina de la UNAM en 1973, procedía de Cuernavaca Morelos por lo que era de provincia con costumbres diferentes a los de la capital, lo que me ocasiono algo de angustia sin embargo fui seleccionado en la licenciatura que culminaría en 1978, Posteriormente me encamine a la especialidad en Medicina de Rehabilitación, en el IMSS que me cobijó durante mi preparación y mi inicio laboral en esa institución ofrecí toda mi capacidad médico, administrativa por muchos años hasta jubilarme. Tuve varios reconocimientos a nivel estatal y dos a nivel Nacional, en el 2004 ingresé al ISSSTE como terapista físico, y en 2008 como subdirector médico, en la clínica hospital Agosto 12, en donde tuve excelente experiencias, después de 5 años regrese a lo que siempre ha sido mi pasión, a la atención médica en donde me mantengo hasta la fecha.
Laboro también en el Centro de Rehabilitación Integral y pertenezco al Colegio de Instituciones de Nuevo Laredo, hasta aquí, puedo presumir de una vida profesional exitosa, hasta el mes de Diciembre del 2020 en que me sucede lo inesperado que ha impactado en mi forma de percibir el futuro.
Antecedentes
La vida humana es tremendamente dinámica y así que en forma abrupta el día 19 de Diciembre del 2020 me aparece cefalea moderada añadida de fatiga injustificable. En esa condición esperé a disfrutar
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
la función sabatina de box ,misma que no apreciar ya que fuera de mi costumbre me quedé dormido y a la mañana siguiente al despertar continuaba con cefalea y fatiga y hasta calosfríos y lo achaque a que podría ser a una descompensación de mi diabetes.
Sin embargo ya consiente de la existencia de la Pandemia, mi pensamiento se encamino a recordar que una semana anterior había acudido a una reunión familiar y que me había enterado que un chico de 10 años había visitado a una tía con probable Covid y durante nuestra reunión se mostró muy fatigado y algo extraño en él, se apartaba de los tíos.
En mi caso transcurrieron 2 días y me había yo mismo prescrito paracetamol pero no había podido controlar la cefalea y la fatiga. Al siguiente día es mi esposa quien también empieza a presentar cansancio y dolor de cabeza intenso. Así es que yo y ella el día 21 de Diciembre acudimos a realizarnos una prueba de Covid y el día 22. ya con mucha preocupación sucedió lo que yo ya imaginaba nos entregaron el reporte, ambos positivos.
Por compromiso previo, tuve que viajar a Monterrey a 2 horas de distancia de Nuevo Laredo, el motivo fue dejar lista una camioneta en la casa de mi hijo que es médico y que vendría a visitarme desde Iguala Guerrero. Regresándome a mi domicilio en autobús, pero con la sintomatología mucho más intensa a la que se había sumado confusión mental. Al llegar a casa no encontré a mi esposa y se me dificulto entrar a mi casa ya adentro me acomode para reposar un poco empezar a planear cual sería mi conducta a seguir.
El Calvario
Unas horas después arribo mi hijo y me sentí reconfortado y de inmediato se hiso cargo de mi atención médica en forma total, instruyéndome de instalarme completamente aislado en postura de decúbito prono y asistencia en forma continua con Oxigeno. Me refiere, mi hijo que inicié con mejoría pero que la saturación de oxígeno era muy inestable con descenso de hasta 70% además, requería monitoreo de los diversos componentes sanguíneos por lo que decidió mejor hospitalizarme en la Clínica Hospital del ISSSTE precisamente que es en donde trabajo.
Me dieron de alta a los pocos días de hecho Navidad la pasé en casa con estado soporoso por el descontrol metabólico que presentaba. Sin embargo mi evolución fue muy irregular y continúe con sintomatología complicada por lo que el día 30 por la noche ingresaría nuevamente hospital al servicio de Urgencias y de inmediato en base a mi estado de salud a Terapia Intensiva en donde retomaron mi manejo.
Quiero relatar que allí fui revisado por médicos de los diferentes turnos y cada uno tuvo criterios diferentes de mi manejo, dándome cuenta que no había consenso establecido para el tratamiento de ésta patología. Así que recibí diversos tratamientos y ministración de soluciones en forma continua, por lo cual se sumó la hinchazón de manos y pies. Una vez que se tomaron exámenes de laboratorio de rutina y especiales como la procalcitonina, ferritina y dímero, así como radiografía de tórax, se mostró lo ya claro por la sintomatología que era la neumonía bilateral por Covid. Iniciándose mi manejo con dexametasona, antibióticos e insulina. Se logró así ligera mejoría de mi estado general y de mi estado de consciencia. Por lo que decidí pedir mi alta del hospital y continuar tratándome en casa bajo la vigilancia de mi hijo. Un recuerdo agradable fue que un trabajador de intendencia con vestimenta Covid cuando salía de la institución me grito Feliz año doctor, imaginando seguramente que fuese un médico de visita y me vino a la mente un pensamiento “ya logré brincar a otro año”, deseando mejorar y poder reintegrarme a la vida productiva.
Al regresar a casa ya tenía un nivel de consciencia normal sin embargo con bastantes limitaciones para mis actividades elementales de vida diaria como el parado, la marcha y el aseo corporal. Afortunadamente mi hijo había acondicionado la casa con lo necesario para continuar mi atención. Recuerdo agradablemente retorno fue muy reconfortante porque tenía los medios indicados, mi alimentación a deseo y libre demanda, a propósito yo nunca perdí el sentido del gusto y olfato, como he visto sucede con la mayoría de pacientes con esta patología.
La Recuperación
Fue lenta pero progresiva, inicié con ejercicios activos de movilidad articular, respiratorios lo que mejoró en mucho mi capacidad t y me permitió regresar a trabajar en línea, con mis alumnos de la Universidad, quiero citar que fue muy difícil la experiencia, porque no tenía control en la visión, ojo mano y mi voz era ronca y aún tenía necesidad de oxígeno.
Para el 8 de febrero me retiraron el oxígeno. Estaba hinchado desde
D.R. Arnulfo L´Gámiz Matuk
los pies a las rodillas, mis pasos titubeantes, con pérdida del equilibrio que a la fecha aún persiste. Otro evento físico a relatar es que tuve taquicardia desde el inicio de mi padecimiento, mis latidos eran de 110 por minuto y ya en recuperación, pero con una ambiente externo de mucho frio que llego a los 6 bajo cero pero acudí al cardiólogo que me diagnostico infiltrado pulmonar por líquido pero ya sin datos de neumonía, así como la cardiomegalia al realizarme un ecocardiograma concluyo que tenía esclerosis de válvulas, tricúspide y aórtica pero con buena función cardíaca. Iniciando entonces tratamiento contra la hinchazón y taquicardia con medicación específica, que incluye aplicación de insulina, ya que soy diabético de hace más de dos décadas.
Las Expectativas
Mi estado de salud mejoro y me permitió reincorporarme al trabajo institucional en el ISSSTE, Sin embargo me falta mucho que mejorar mi optimismo lo he recuperado y estoy realizando mi máximo esfuerzo, porque tengo expectativas y proyectos a mediano plazo que estuve analizando en los días de reposo, haciendo recuento de mi vida, buscando el sentido a la misma, tal como Víctor Frank en su libro el Hombre en busca de sentido y su método de logoterapia. Y ante todo tengo presente un compromiso.
Dar gracias a DIOS a CRISTO y a mi VIRGEN DE GUADALUPE
Creo que estoy fortalecido y seguiré en mi trabajo institucional como médico operativo, en la educación y en el Consejo de Instituciones de Nuevo Laredo en donde una de las actividades es iniciar la creación de un nuevo hospital General de Zona del IMSS, ya que el actual se encuentra rebasado en su estructura y funcionalidad, los más de 40 miembros de éste consejo estaremos trabajando y sumando esfuerzo lograremos nuestro objetivo.
Agradezco a mi familia, en especial a mi hijo y esposa así como a mis amigos.