Orientación - Domingo 26 de Marzo 2023

San Patricio, obispo, Apóstol de Irlanda

En la Parroquia San Patricio perteneciente a la Vicaria Foránea Monseñor Belloso, celebró la fiesta patronal en honor a su patrono, en la celebración Eucarística fue presidida por Mons. José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador y concelebrada por el Párroco Pbro. Salvador Ulises Amaya, la Santa Misa contó con numerosos fieles.

Datos biográficos que se conocen de San Patricio. Maewyn Succat, es el nombre con el que Patricio fue bautizado. Nació en la Britania Romana entre el año 385 y el 392 en el seno de una familia cristiana. Cuando tenía quince o dieciséis años fue raptado por un puñado de piratas irlandeses que lo llevaron al norte de Irlanda y lo vendieron come esclavo. En su “Confesión”, en la que se firma “Patricius” y en la que relata la experiencia de aquellos años, escribe: “El amor por Dios y el temor a Él crecieron en mí, y así la fe. En un solo día rezaba cien oraciones, y de noche casi otras tantas. Rezaba en los bosques y sobre los montes, incluso antes de la aurora. Ni la nieve, ni el hielo, ni la lluvia parecían tocarme”. Después de seis años de prisión, Patricio tuvo en sueños la premonición de la libertad ya próxima y, obedeciendo a la visión que tuvo mientras dormía, escapó de la vigilancia y recorrió a pie los casi doscientos kilómetros que lo separaban de la costa. Allí logró que algunos marineros se apiadaran de él y lo embarcaron con ellos hasta volver a Britania, donde pudo volver a abrazar a su familia. (Cf. VaticanNews)

SEXTO MANDAMIENTO (I)

No Cometerás Adulterio

San Salvador, 26 de marzo de 2023

Con esta catequesis damos inicio al Sexto Mandamiento que si bien es cierto pone un fuerte énfasis en la relación matrimonial no por ello excluye la vocación a la virginidad; primero, porque todo bautizado es llamado a vivir la castidad desde su propio estado de vida (cf. CIC 2394); y segundo, porque virginidad y celibato por el Reino no solo no contradicen la dignidad del matrimonio, sino que la presuponen y la confirman (FC1 16). Cuestiones a tratar más adelante. La presente catequesis se ocupa en su mayoría de la fidelidad.

Nuestro Santo, Profeta y Mártir, Mons. Romero explicaba que esta Sexta Palabra hace referencia a la santidad del matrimonio ya que: solo en el matrimonio puede haber la relación sexual de un hombre con una mujer y para salvar la santidad de ese acto que colabora con el poder Creador de Dios en la fecundidad de la vida, Dios prohíbe terminantemente toda relación fuera del matrimonio2 Prohibición que, reposa sobre el profundo conocimiento de Dios sobre el amor ya que: El auténtico amor tiende por sí mismo a ser algo definitivo, no algo pasajero (CIC 1646).

En la actualidad – como en épocas pasadas – este amor caracterizado por una fidelidad inviolable parece [y ha parecido siempre] como imposible de vivirse; pero, Dios – desde el Antiguo Testamento – se ha empeñado en sostener lo contrario no solo de palabra sino con su propio testimonio. Es el Dios fiel que supera toda dificultad y perdona cuántas veces su pueblo torna a Él arrepentido. Varios son los pasajes veterotestamentarios que mencionan y describen el amor de Dios por Israel; amor que a prueba de toda infidelidad y adulterio perdona no una si no varias veces. Perdona a su pueblo para reconquistar su amor como el esposo reconquista a la mujer que arrepentida retorna a él: Voy a seducirla, la llevaré al desierto y le hablaré al corazón. Allí le daré sus viñas, y el Valle de Acor será Paso de la Esperanza. Allí me responderá como en su juventud, como cuando salió de Egipto. Aquel día –oráculo del Señor– me llamarás Esposo mío… Me casaré contigo para siempre, me casaré contigo en justicia y en derecho, en afecto y en cariño. Me casaré contigo en fidelidad, y conocerás al Señor (Os 2, 16-22).

Jesús va mucho más allá. Venido no para abolir la Ley sino para darle cumplimiento (cf. Mt 5, 17), invita a vivir este Mandamiento hasta la perfección propia del Padre (Cf. Mt 5, 48) a la vez que muestra una nueva dimensión del adulterio: Quien mira a una mujer deseándola ya ha cometido adulterio con ella no físicamente; pero si en su corazón (Cf. Mt 5, 28). Quien repudia a su mujer la induce al adulterio; y quien contrae nupcias con una divorciada comete adulterio (cf. Mt 5, 31-32). De igual forma peca todo aquel [o aquella] que no evita toda ocasión de o causa para pecar. Usando figuras literarias recomienda sacar el ojo que lleva a pecar o a cortar la mano, concluyendo: Más te vale perder una parte de tu cuerpo que terminar entero en el infierno (Mt 5, 30). En otras palabras, Jesús quiere enseñar que el amor no conoce de límites; sobre todo, si desea alcanzar la perfección cristiana. De la perfección cristiana sobre el amor esponsal es Pablo quien mejor transmite el símbolo magnifico (cf. Ef 5, 32): Mujeres amen a sus maridos como al Señor porque el marido es cabeza de la mujer como Cristo y salvador de la Iglesia que es su cuerpo (cf. Ef 5, 22-23); y maridos, amen a sus esposas Cristo amó a la Iglesia hasta entregarse por ella presentando una Iglesia gloriosa, sin mancha ni arruga ni cosa semejante sino santa e irreprochable (cf. Ef 5, 25-27). Por años, esta perícopa ha sido mal interpretada: El símbolo magnifico aplicado por San Pablo no es el amor de Cristo por su Iglesia al amor esponsal. Es lo contrario: al amor de Cristo por su Iglesia, San Pablo aplica, el símbolo magnifico del amor conyugal: Yo lo aplico a Cristo y la Iglesia. Del mismo modo ustedes: ame cada uno a su mujer como a sí mismo y la mujer respete a su marido (Ef 5, 32-33).

San Pablo, entonces, enaltece aquella relación esponsal que vive según las enseñanzas de Jesús: formando una sola carne, amándose uno al otro como así mismo; amándose sin limites hasta hacer de su relación una relación santa e irreprochable que solo acabará con la muerte de uno de los conyugues. Eso es el matrimonio: Comunidad de vida y amor conyugal, una e indisoluble: Lo que Dios unió, no lo separe el hombre (Mc 10, 9); y en esta indisolubilidad es que la fidelidad brilla por la constancia de la pareja en cumplir con la palabra dada (cf. CIC 2365). Fidelidad como la de Dios por su pueblo Israel; o como la de Jesús por su Iglesia: Los esposos son por tanto el recuerdo permanente, para la Iglesia, de lo que acaeció en la cruz, son el uno para el otro y para los hijos, testigos de la salvación, de la que el sacramento les hace participes (FC 13).

Hermosa figura que nos lleva a concluir afirmando anticipadamente que: esta misma fidelidad es exigida a todo tipo de vocación como lo trataremos en la próxima catequesis.

José Luis Escobar Alas Arzobispo de San Salvador

1Siglas de la Exhortación Apostólica Familiaris Consortio del Papa Juan Pablo II. 2Homilía “Cuaresma, retorno a la Ley de Dios”, p. 220. En: Mons. Oscar A. Romero, Su Pensamiento VI.

Cierre del año Jubilar de las Religiosas Oblatas al Divino Amor, en la Catedral Metropolitana de San Salvador

El 18 de marzo del presente año las Religiosas Oblatas al Divino Amor de la Provincia Santísima Trinidad, con representación de Religiosas de los diferentes países que la integran: México, Guatemala, Honduras y El Salvador han clausurado el año jubilar, con una solemne Eucaristía presidida por Su Eminencia el Cardenal Gregorio Rosa Chaves, quien en su homilía expresó el cariño y la gratitud por todo el bien que realizan en el País en las diferentes obras apostólicas.

Tantas razones para agradecer y dar gloria a la Trinidad que les ha permitido en el trascurso de este año jubilar, la posibilidad de “Purificar la memoria” de volver a las fuentes de la espiritualidad y reconocer con gozo que Dios ha estado siempre presente en todo momento.

Han vivido este año jubilar como un peregrinar interior y exterior a las fuentes del Carisma de Amor y Oblación.

En este año jubilar la familia Oblata al Divino Amor ha recibido con inmenso gozo y gratitud el decreto de venerabilidad de Madre Margarita Diomira fundadora, justo el 17 de diciembre a un mes de llegar a los 100 años de fundación, es una gracia y una gran responsabilidad ante Dios y la Iglesia, al reconocer en Madre Margarita Diomira una vida digna de ser contemplada como modelo de entrega a Dios y a los hermanos.

Cardenal Gregorio Rosa Chávez, preside la Santa Misa en Honor a los 100 años de las Religiosas Oblatas al Divino Amor.

Cardenal Gregorio Rosa Chávez junto a sacerdotes concelebrantes de El Salvador, Mexico, Guatemala y Honduras.

Adorámoste cristo...

“Llegada la mañana, todos los príncipes de los sacerdotes, los ancianos del pueblo, hicieron un plan para condenar a muerte a Jesús y, atándolo, lo condujeron a Pilato, el gobernador, y se lo entregaron”. (San Mateo 27, 1-2)

Reflexión

«Cuando leemos en las lecturas de hoy, los dolores de Jesucristo: ¡Qué precio más caro! Cuando el profeta Isaías nos presenta verdaderamente al Varón de Dolores, vemos cómo ese hombre cargando con tanta ignominia, con tanto dolor, no es Él que tiene que sufrir, pero sufre en nombre de los pecadores. Él se

ha hecho responsable. Y en esto consiste la tragedia de Cristo: que siendo inocente, siendo el Hijo querido del Padre… le cobran, en su muerte dolorosa, todo lo que nosotros le debemos a Él. En Cristo descarga, la justicia divina, el castigo que todos nosotros merecíamos». (Homilía de San Romero del 13-04-1979)

Segunda Estación • JESÚS CARGA CON LA CRUZ Reflexión

Adorámoste cristo...

“Después de comer, le preguntó Jesús a Simón Pedro: Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos? Pedro respondió: Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: lleva mis corderos a pastar” (San Juan 21, 15).

«Elías, la cumbre del profetismo, en una situación quizás parecida a la nuestra… en un tono casi de pesimismo, se arrimó a una matita que apenas da un poquito de sombra, en el desierto, para morir. Pero la voz de Dios se hizo sentir y le dijo: “Levántate que todavía resta un gran camino que caminar”. Si la fidelidad de

Elías lo llevó también aun cuando pesimista pensaba en un suicidio, a levantarse y seguir trabajando, ¿qué nos lo impide a nosotros, hermanos salvadoreños, Pueblo de Dios?. Nuestro desierto se puede convertir en liberación, en luz, en consuelo y esperanza» (Homilía de San Romero del 11-03-1979).

Tercera Estación • JESÚS CAE POR PRIMERA VEZ Reflexión

Adorámoste cristo...

“Entonces, al fin, se lo entregó para que lo crucificasen. Y con eso se hicieron cargo de Jesús. Él, llevando a cuesta su cruz, salió para un lugar que llamaban la Calavera (en arameo, «Gólgota»)” (San Juan 19, 16-17)

“No olvidemos la meta hacia la cual camina esta Cuaresma: es una peregrinación que con Cristo, cargando con su cruz va en busca de aquel “consumatum est” (“todo está consumado”), y más allá, la gloria de la Resurrección.

Cuarta Estación • JESÚS ENCUENTRA A SUMADRE

Todas nuestras angustias, como cruces a cuestas, como ayunos de Cuaresma, van a florecer” (Homilía de San Romero del 18-03-1979).

Oración

“Señor Jesús, plenitud de los tiempos y Señor de la historia, dispón nuestro corazón para celebrar con fe (este vía Crucis)” Amén

Oración «Danos, Señor, un corazón humilde y sencillo para que contemplemos con asombro renovado el misterio de la Encarnación».Por Jesucristo Nuestro Señor.

Oración «Jesús, poder y sabiduría de Dios, enciende en nosotros el amor por la divina Escritura, donde resuena la voz del Padre, que ilumina e inflama, alimenta y consuela». Amén.

Reflexión Adorámoste cristo...

“Simón le dijo a María: «Mira, éste está puesto para que todos en Israel caigan o se levanten; será una bandera discutida, mientras que a ti una espada te traspasará el corazón»”. (San Lucas 23, 35).

«La tercera dulcísima palabra de Cristo es la herencia de su propia Madre: “Mujer, ahí tienes a tu hijo”. Y a todos nosotros, en la persona de Juan, nos ha dicho “ahí tienes a tu Madre”. Y desde entonces, entre María y los cristianos, se establece una

relación tan dulce que el nombre de la Virgen, las Ave Marías de nuestros labios, surgen por millones cada hora hacia el trono de la ternura maternal: María» (Homilía de San Romero del 13-04-1979).

Quinta Estación • EL CIRENEO AYUDA A JESÚS A LLEVAR LA CRUZ

Adorámoste cristo...

“Mientras lo conducían, echaron mano de un tal Simón de Cirene que volvía del campo, y le cargaron la cruz para que la llevase detrás de Jesús” (San Lucas 23, 26)

Reflexión

«Quien no lleva la cruz y quien la quiere botar cae en la tentación del diablo. Afianzarse, abrazar con cariño la cruz de mi propio deber, ese es el proyecto de Dios. Vivir con amor su propia vida, eso es lo que Dios quiere para salvar a los hombres». (Homilía de San Romero. del 24-02-1980)

Oración

«Danos, Señor, vivir el misterio de la Encarnación, por el que Tú, Hijo de Altísimo, en el seno de la Virgen, Santuario del Espíritu, te hiciste Hermano nuestro». Amén.

Oración

«Jesús, principio y perfección del hombre nuevo, convierte nuestros corazones a Tí, para que abandonando las sendas del error, caminemos tras tus huellas por el sendero que conduce a la vida». Amén.

Primera Estación • JESÚS ES CONDENADO A MUERTE

Carta a Monseñor Romero con ocasión de la Asamblea Regional CAMEX en El Salvador (13 al 17 de febrero 2023) y del 43 Aniversario de su Martirio

Querido Monseñor:

Estos días han sido para mí, días de emociones y sentimientos muy variados, pero intensos. Estamos siendo anfitriones de la Asamblea Regional CAMEX en El Salvador y hemos recibido a muchos hermanos y hermanas de la región, representantes de todas las vocaciones de las que el Señor nutre a su Iglesia. Es un encuentro para ayudarnos a preparar el Sínodo de la Sinodalidad. Una de esas experiencias que requiere, no sólo de la fe en Jesucristo y su Evangelio, sino también de fidelidad a la Iglesia y la certeza de que la barca del Señor está siendo conducida por el mismo Pedro, que hoy se llama Francisco, quien guiado por las inspiraciones del Espíritu Santo nos está motivando a una verdadera “conversión pastoral”, que clama desde lo más profundo del corazón: “Caritas Christi, urgenos”.

impulsa el «caminar juntos», ayudándonos a comprender que la Iglesia no es solo de Obispos y Sacerdotes; Religiosos y Religiosas, sino una Iglesia en la que mujeres y hombres de nuestro tiempo y de los más variados estamentos, junto con nuestros pastores y el mismo Sucesor de Pedro estamos dispuestos a ‘escuchar’ al Espíritu Santo, a fin de que nos vayamos convirtiendo en una Iglesia Sinodal que camina y vive en Comunión, participación y misión.

Ciertamente nos ha costado comprender que la sinodalidad representa el camino a través del cual la Iglesia puede renovarse por la acción del Espíritu Santo, escuchando juntos en el camino lo que Dios tiene que decir a su pueblo acerca de la comunión y la participación en la vida de la Iglesia, sino que también escuchar que Él nos envía a llevar adelante nuestra misión como testimonio profético que abarca a toda la familia humana, junto con nuestras denominaciones cristianas y otras tradiciones de fe. Claro, para todo esto es preciso escuchar a Jesús y los Apóstoles y a todos los hermanos y hermanas, porque el principio sinodal de ser pueblo de Dios’ es escuchar lo que dicta el Paráclito.

es tan fácil de ponerlo en práctica, cuando todos tenemos la tendencia a mandar. Sabe, en estos días me he preguntado ¿qué tal la habría ido a Monseñor con esta iniciativa del Papa Francisco? En seguida he caído en la cuenta de que Usted Monseñor ha sido el Obispo de la sinodalidad en su historia personal y como Arzobispo de San Salvador.

Se trata de una experiencia pastoral de esas que a uno le mueven el piso sobre el que siempre ha estado de parado y que se siente seguro. Una nueva experiencia pastoral que

El Papa quiere que los pastores se escuchen entre sí, y no solo. Hay que escucharse entre hermanos cristianos, escuchar a los alejados, escuchar a los más débiles y escuchar a los desheredados; y, además, comprender que el camino que Dios espera de la Iglesia del tercer milenio es “caminar juntos laicos, pastores y obispo de Roma” Yo se Monseñor, que Usted en el cielo, comprenderá todo esto y se reirá a lo mejor de nosotros viéndonos “enredados” y “desconcertados”, porque eso de dialogar las realidades en conversación espiritual no

Ha tenido, como diría la abuela, la gracia de escuchar con docilidad y conversar espiritualmente con Dios, con Jesucristo y le ha ofrecido una vida intensa, rica en matices. Fue un pastor en el que se descubre la profundidad enorme de su vida, de su interioridad, de su espíritu de unión con Dios, raíz, fuente y cumbre de toda su existencia, no solamente desde su vida Arzobispal, sino desde su vida de estudiante y joven sacerdote. Una vida que floreció hasta convertirlo en el “testigo de la fe al pie del altar” porque sus raíces estaban bien cimentadas y metidas en Dios, en El encontró la fuerza de su vitalidad, por Él, con Él y en Él fue viviendo, también, su

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Escrito por: Monseñor Rafael Urrutia Canciller del Arzobispado de San Salvador

vida Arzobispal entre las persecuciones del mundo y los consuelos de Dios. Fue Usted Monseñor un hombre humilde y tímido, que poseído por Dios logró hacer lo que siempre quiso hacer: grandes cosas, pero por los caminos que el Señor le tenía señalados, caminos que fue descubriendo en su intensa e íntima unión con Cristo, modelo y fuente de toda santidad.

Desde la época de sacerdote, Usted Monseñor tenía tres devociones principales que nutrían su fecundo ministerio: el Santísimo Sacramento, la Santísima Virgen María y a la Iglesia, la que concretaba en la persona del Papa. Más tarde añadirá en su vida arzobispal, una cuarta devoción que sentirá muy dentro del corazón: la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, a quien le había consagrado toda su vida, consagración que renovaba cada mes.

Hoy creo que vale la pena en esta carta, comentar para el Papa Francisco, los sentimientos y pensamientos suyos, Monseñor, para con la Iglesia y el Romano Pontífice, nacidos en lo más hondo de su corazón, para el Papa Pablo VI, el 2 de julio de 1978, y lo hago con sus palabras: “Cuando yo veía circular junto a la tumba de San Pedro o junto a la cátedra del Papa peregrinaciones llegadas de todas partes del mundo, me parecía algo así como el torrente sanguíneo de la humanidad que pasa por el corazón para oxigenar después a toda la Iglesia. Porque eso es el Papa: ¡El corazón de la Iglesia! Y todo aquel que oxigena su

sangre, su vida, su piedad en esa unidad con el Papa, es un miembro sano, vivo de esta Iglesia que estamos viviendo esta mañana en esta Catedral de San Salvador… El Papa; un hombre que no vive para sí, un hombre que todas las palpitaciones de su amor son para sentirse padre, conductor, guía, pastor de la humanidad. Un hombre con un corazón tan sensible que lo hacen llorar las ingratitudes de sus malos hijos, pero lo hacen sonreír el cariño de quienes lo aman y tratan de corresponderle. Un hombre bueno y santo, que sabe que el precio de amar al Señor es apacentar al mundo entero con un corazón gigante para no acobardarse ante las embestidas de tanta maldad, de tanta indiferencia de un mundo que se desacraliza, que le da la espalda a lo divino. Pero un Papa que siempre está en busca de ese mundo, para traerlo a su verdadera felicidad. El Papa es roca, es piedra, es solidez, es fundamento. Por eso, cuando uno, predicador de esta Iglesia, siente la dicha de estar en contacto directo con esa roca que es el Papa, cuando sientes al Pastor que te estrecha las manos y te fortalece el ánimo, se siente que uno está a plomo sobre una construcción inmortal que, aun cuando soplen los vientos del infierno, no prevalecerán. Porque es Cristo el que está construyendo sobre esa roca firme la santidad de su propia Iglesia. Seguramente, si Usted viviese hoy sentiría los mismos sentimientos y expresaría los mismos pensamientos para el Papa Francisco. Y viéndolo ejercer su Ministerio Petrino siempre en primera, le diría: Santidad, me basta verlo, en la Plaza San Pedro y en cada viaje apostólico que realiza, amando a Dios con todo su corazón y a su rebaño con expresiones del Pastor cercano que conoce a sus ovejas y da la vida por ellas para quererlo, pero, sobre todo, porque Usted es el Vicario de Cristo, el Papa, aquel que me confirma en la fe y me enseña a amar con su propia vida, a dar la vida por sus ovejas. Ánimo Santo Padre, Él lo constituyó la roca sobre la que edificó su Iglesia y le prometió su presencia para siempre: “Yo estaré contigo hasta el fin de los tiempos y las puertas del infierno, no prevalecerán sobre ella”. Esté seguro de que siempre rezamos en El Salvador por

Usted. Que Dios le de muchos años. Cuanto disfrutaba Usted Monseñor pasar unos días en Roma junto a Pedro, eso le daba la oportunidad de “Sentir con la Iglesia y vivir la comunión con el Romano Pontífice” muy de cerca, “porque allá donde ya saben cómo amo y soy solidario de la Sede del Sucesor de Pedro, no podrían dudar de mi fidelidad al Papa. Y he ratificado una vez más que moriré, primero Dios, fiel al Sucesor de Pedro, al Vicario de Cristo”. Y así, sucesivamente supo dialogar con el tiempo presente y leer los acontecimientos de éste a la luz de la fe, para responder a ella como Buen Pastor escuchando el sentir del Pueblo de Dios. Pero quizás la conversación espiritual más genuina y edificante para todos fue la que tuvo con los pobres frente a sus temores, a sus angustias y en las persecuciones a ellos infringidas; y desde su fe y de su vivencia del Evangelio siempre se dejó conducir por las inspiraciones del Espíritu Santo y la justicia de Dios, para con caridad pastoral darles la oportuna respuesta de ser la voz de los sin voz y, al final, como Jesús, el Buen Pastor, dar su vida por ellos. ¿Cómo no sentirnos, Monseñor, ¿orgullosos de una Iglesia bendecida y bañada con sangre de mártires? Ustedes nos han enseñado a dialogar espiritualmente con Dios y los el hombre, porque la gloria de Dios es que el hombre viva. Ustedes nos han motivado a ser siempre una Iglesia misionera, evangelizadora. Una Iglesia en salida, que va en busca de la oveja extraviada, de la que sufre, de la excluida, de la marginada. Le pido a Usted que interceda para que este tiempo de sinodalidad sea para todos una invitación a “Sentir con la Iglesia” caminando con nuestros mártires en pos de Cristo. Por favor rece por nosotros. Finalmente, solo quiero decirle cuánto lo extraño y lo recuerdo, sobre todo en momentos difíciles de la vida sacerdotal cuando se experimenta la soledad y parece que en medio del desierto no se encuentra el camino. Sé que ahí está Usted con su corazón de Padre para indicar que el camino diciendo: “no es por aquí, sino por allá”. Gracias Monseñor por ser San Óscar Arnulfo Romero, una luz que deja translucir siempre la luz de Cristo. Un abrazo.

Sexta Estación • UNA MUJER LIMPIA EL ROSTRO DE JESÚS

Adorámoste cristo...

“Acompañaban a Jesús… algunas mujeres que él había curado de malos espíritus y enfermedades: María Magdalena, de la que echó siete demonios; Juana, mujer de Cuza, intendente de Herodes; Susana, y otras muchas que le ayudaban con sus bienes”. (San Lucas 8, 2)

Reflexión

«La Iglesia, en el continente latinoamericano, tiene mucho que decir del hombre. Sobre todo, cuando mira al hombre en ese triste desfile que presentó Puebla: rostros de campesinos sin tierra, ultrajados y matados. Rostros de obreros despedidos sin causa, sin paga suficiente para sostener sus hogares. Rostros de

Septima Estación • JESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ

Adorámoste cristo...

“Jesús preguntó a Pedro por segunda vez: Simón, hijo de Juan, ¿me amas? Pedro contestó: Señor, tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: cuida mis ovejas”

(San Juan 21, 16)

Adorámoste cristo...

“Le seguía una gran multitud de pueblo y de mujeres, que se lamentaban y lloraban por él. Vuelto hacia ellas, les dijo: No lloren por mí, lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos” (San Lucas 23, 27-28).

ancianos, rostros de marginados, rostros de habitantes de tugurios, rostros de niños pobres que ya desde la infancia comienzan a sentir la mordida cruel de la injusticia social». (Homilía de San Romero del 02-03-1980)

Reflexión

«San Lucas nos presenta a ese Hijo de Dios caminando hacia Jerusalén. Caminar hacia Jerusalén significa para Cristo y para todos sus seguidores los cristianos, ir buscando la voluntad de Dios, camino que Él mismo lo anuncia, no lo desconoce,

de sufrimiento, de calvario, de humillación, de cruz; pero que después termina en una meta de triunfo, victoria de resurrección»

(Homilía de San Romero del 02-03-1980)

Reflexión

«Da lástima pensar cuántos sufren sin mérito. Cuando uno piensa en las salas de los hospitales ¿quiénes son los que están ofreciendo a Dios el dolor como obediencia a los designios del Señor? Cuando uno piensa en el mundo que sufre tanto y la rebeldía de los hombres ante la voluntad del Señor, en

Novena Estación • JESÚS CAE POR TERCERA VEZ

Adorámoste cristo...

“Jesús preguntó por tercera vez a Pedro: Simón, hijo de Juan, ¿me quieres? A Pedro le dolió que le preguntara tres veces si lo quería. Pedro contestó: «Señor, Tú sabes todo y Tú sabes que te quiero». Jesús

le dijo: «lleva mis ovejas a Pastar»” (San Juan 21, 17).

Reflexión

«Hermanos, el Pueblo de Dios es el Pueblo que cree, como dice la Biblia hablando de Abraham: «Creyó contra toda esperanza». Qué necesario es eso ahora aquí

Décima Estación • JESÚS ES DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS

Adorámoste cristo...

“Los soldados tomaron su túnica la rompieron en cuatro partes, una para cada soldado” (San Juan 19, 23)

Reflexión

«A cada uno de nosotros nos está diciendo Cristo: “si quieres que tu

vida y tu misión fructifiquen como la mía, haz como Yo: conviértete en grano que se deja sepultar, déjate matar, no tengas miedo. El que rehuye el sufrimiento, se quedará solo. No hay gente más sola que los egoístas; pero si por amor a los otros tú das tu vida como Yo la voy a dar por todos, cosecharás muchos frutos.

Oración Señor, «haz que fieles a las promesas del Bautismo, vivamos con coherencia nuestra fe, dando testimonio constante de tu palabra, para que en la familia y en la sociedad resplandezca la luz vivificante del Evangelio». Amén.

Oración

«Señor, Tú que eres Palabra del Dios vivo, renueva en la Iglesia el ímpetu misionero para que todos los pueblos lleguen a conocerte, verdadero Hijo de Dios» Amén.

vez del respeto y la obediencia al Padre que está tratando con unos hijos,… le reclaman. ¡Ah, cuánto mérito perdido! ¡Si le diéramos, como Cristo le dio a su sufrimiento el sentido redentivo, el de obediencia del Padre a nuestro sufrimiento! (Homilía de San Romero del 13-04-1979).

Oración Señor, «Tú que nos has dado como norma de vida el mandamiento nuevo del amor, haznos constructores de un mundo solidario». Amén.

en El Salvador: ¡Creer contra toda esperanza! Aun cuando aparezcan apagadas todas las luces, cerrados todos los caminos. Si la fe de Abraham traducida en su pueblo, como pueblo creyente, llega hasta nosotros, ¡imitémoslo!» (Homilía de San Romero del 11-03-1979).

Oración «Haz, Señor, que abandonando las sendas del error, caminemos tras tus huellas por el sendero que conduce a la vida» Amén.

Tendrás las satisfacciones más hondas. No le tengas miedo a la muerte, a las amenazas, contigo va el Señor”» (Homilía de San Romero del 01-04-1979).

Oración «Haz, Señor, que todos los pueblos lleguen a conocerte, verdadero Hijo de Dios y verdadero Hijo del Hombre, único mediador ente los hombres y Dios» Amén.

Octava Estación • JESÚS Y LAS MUJERES

Undécima Estación • JESÚS ES CLAVADO EN LA CRUZ

Adorámoste cristo...

“Cuando llegaron al lugar llamado Calvario, le crucificaron con dos malhechores, a su derecha uno y a su izquierda otro. Jesús decía: «Padre perdónales porque no saben lo que hacen»” (San Lucas 23, 33).

Reflexión

«Este misterio no lo comprendemos nunca, si no tenemos en cuenta

el respeto que Cristo tenía a su Padre. ¡La voluntad de mi Padre! ¡La obediencia a mi Padre! Este es mi pan -decía Jesús- hacer lo que mi Padre quiere. El sentido de dolor, solamente recobra el valor de la redención si se hace como sufrimiento, en obediencia». (Homilía de San Romero del 1304-1979).

Duodécima Estación • JESÚS MUERE EN LA CRUZ

Adorámoste cristo...

“Después de probar vinagre, Jesús dijo: Todo está cumplido. E inclinando la cabeza entregó su espíritu” (San Juan 19,30).

Reflexión

«¡Era horrible! El crucificado no moría porque todavía podía respirar. Aún con todo el dolor de apoyar sus piernas en los clavos que estaban incrustados

en sus músculos, podía elevar un poco el tórax y respirar; y gracias a ese pequeño álido que le llegaba, podía vivir. Pero cuando los verdugos querían que ya no viviera, le quebraban las piernas. Entonces ya no podía erigirse, ya no había respiración. El crucificado moría por asfixia. Pero cuando llegó el soldado que quebraba las piernas al crucificado Jesús, vió que Él ya había muerto, que no era necesario quebrarle las

Decimotercera Estación • JESÚS ES BAJADO DE LA CRUZ

Adorámoste cristo...

“Al caer la tarde, vino un hombre rico de Arimatea llamado José, que era discípulo de Jesús… tomó el cuerpo de Jesús y le envolvió en una sábana limpia”

(San Juan 27, 57-59)

Oración

«Haz, Señor, que fieles a las promesas del Bautismo, vivamos con coherencia nuestra fe, dando testimonio constante de tu palabra, para que en la familia y en la sociedad resplandezca la luz vivificante del Evangelio». Amén.

piernas como era la costumbre. Entonces, para mayor seguridad, un soldado méte la lanza al costado y, todavía Jesucristo como en un gesto de generosidad, deja escapar las últimas gotas de su corazón: sangre y agua» (Homilía del San Romero de 13-04-1979).

Oración

«Haz, Señor, que fieles a las promesas del Bautismo, vivamos con coherencia nuestra fe, dando testimonio constante de tu palabra, para que en la familia y en la sociedad resplandezca la luz vivificante del Evangelio». Amén.

Reflexión

«El precio de nuestra redención ha sido muy caro y Dios está dispuesto a darnos su misericordia y su redención. Sólo hace falta una casa: que los redimidos tengamos fe, tengamos confianza en el Señor, sepamos apreciar con nuestra actitud cristiana, lo que

Decimocuarta Estación • JESÚS ES PUESTO EN EL SEPULCRO

Adorámoste cristo...

“Había cerca del sitio donde fue crucificado Jesús, un huerto y allí un sepulcro nuevo, en el cual nadie aún había sido depositado… y pusieron allí a Jesús” (San Juan 19, 41-42)

Dios ha pagado por nosotros: que sepamos apropiarnos los dones de la redención» (Homilía de San Romero de 13-04-1979)

Oración «Jesús, fuente de unidad y de paz, fortalece la comunión en tu Iglesia… para que con la fuerza de tu Espíritu, todos tus discípulos sean uno» Amén.

Reflexión

«Ahora que la cruz ha quedado despojada del cuerpo de Cristo, sepamos depositar con todo el amor, un beso en la cruz de Jesucristo, para decirle: Salve Cruz, eres la única esperanza de nuestra vida y de nuestra historia. Realicemos, hermanos, la redención; completemos al precio doloroso

de Cristo, el pequeño precio de nuestra contribución: nuestros dolores, nuestros sufrimientos, nuestra entrega, nuestra fe, nuestra identificación con el Redentor que solamente espera eso: que creamos en Él y esperemos en Él». (Homilía de San Romero del 13-04-1979).

Oración

«Jesús, Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad, luz que ilumina a todo hombre da a quien te busca con un corazón sincero, la abundancia de tu vida». Amén.

Solemnidad a San José Fiel protector de Jesús y María

Misa en Capilla del Seminario San José de la Montaña

El pasado 20 de marzo en la Santa Misa Patronal en honor al Patrono de la Iglesia, San José, celebrada en la Capilla del Seminario San José de la Montaña en San Salvador, presidida por Su Excelencia Mons. José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador; concelebrada por Pbro. Francisco Morán, Administrador Diocesano y sacerdotes del equipo formador del Seminario San José de la Montaña.

En la celebración Eucarística siete jóvenes recibieron el ministerio del Lectorado, los cuales fueron Edwin Arce, Edenilson Martínez, Edenilson Murcia, Amílcar Flores, Elías Escobar, Rafael Portillo y Cristóbal Joya. La importancia del ministro del Lectorado radica en que el lector sea capaz de transmitir con su vida, obra y acciones el profundo amor a las Sagradas Escrituras.

Misa en la Parroquia San José de la Montaña, San Salvador

Santa Misa patronal en Honor al Operario, artesano y carpintero de nuestra Iglesia, San josé, la Eucaristía fue presidida por Su Excelencia Mons. Luigi Roberto Cona, Nuncio Apostólico en El Salvador en la Parroquia San José de la Montaña y concelebrada por Mons. Edward Karaan Consejero de la Nunciatura Apostólica y el padre Luis Acuña.

Mons. José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador y Pbro. Francisco Morán, Administrador Diocesano junto a los siete nuevos miembros del ministerio de lectores.

Santa Misa celebrada en la Capilla del Seminario San José de la Montaña.

De Izq. A Der.: Mons. Edward Karaan, Mons. Luigi Roberto Cona, Pbro. Luis Acuña

Celebración de aniversario de los medios de comunicación de la Arquidiócesis de San Salvador

La Arquidiócesis de San Salvador cuenta con distintos medios de comunicación como herramienta evangelizadora a nivel nacional e internacional.

programa Buenos Días Familia, en donde compartieron momentos de felicidad por el aniversario con los oyentes. Dicha radio tiene como patrono a San José, celebrando así una Santa Misa en la Parroquia San José de la Montaña en San Salvador, presidida por Pbro. Fernando Villalobos, Director de Radio San José. La celebración continuó en las instalaciones de la radio compartiendo un pastel y sándwiches con los presentes.

Televisión Católica Arquidiocesana, TVCa inicia su programación cada mañana a las 5:55 am con la franja de meditación, el Santo Rosario, la coronilla a la Divina Misericordia, la Santa Misa en los horarios

7:00 am, 12:10 m, 4:00 pm, 6:10 pm y 10:20 pm, películas religiosas, predicaciones de la palabra de Dios, series, documentales, el acontecer de nuestra arquidiócesis y de nuestra Iglesia Católica en el mundo como las visitas apostólicas del Papa Francisco, mensajes del Papa y actividades del Papa

Uno de estos medios es Radio San José 930 AM quien celebro sus 11° Aniversario de fundación, es por ello que el sábado 18 marzo el staff de este medio organizo una programación especial la cual inició con la Santa Misa desde la Capilla San Óscar Arnulfo Romero en el Arzobispado de San Salvador, posteriormente se dio paso al

También Radio YSAX 800 AM “La Voz del Buen Pastor” celebro su 7° aniversario, medio que fue fundado por San Óscar Romero, la celebración inició con la Santa Misa desde la Capilla San Óscar Romero; durante la programación se conto con un segmento de alabanzas en vivo interpretada por artistas católicos salvadoreños, a las 12 del medio día se transmitió la Santa Misa desde Catedral Metropolitana de San Salvador presidida por Su Excelencia Cardenal Gregorio Rosa Chávez.

Gracias a la feligresía católica que sintoniza y apoya económicamente a los medios arquidiocesanos, para seguir con esta gran obra de evangelización.

Staff de Radio San José

Programa de entrevistas en TVCa

Ser coherentes entre lo que se cree y lo que se vive, entre fe y obras

En su octava catequesis sobre la pasión de evangelizar, el Papa Francisco reflexionó a partir de la Exhortación apostólica Evangelii nuntiandi, de san Pablo VI, "obra maestra de la evangelización" que invitó a todos los fieles a leer. Afirmó que la evangelización “es más que una simple transmisión doctrinal y moral”, puesto que es, ante todo, "dar testimonio del encuentro personal con Jesucristo".

El Papa Francisco continuó este miércoles 22 de marzo con la serie de catequesis dedicada a la pasión por la evangelización. La octava catequesis de esta serie trató sobre “el primer camino de evangelización: el testimonio”, y la lectura que acompañó la audiencia fue la primera carta de San Pedro, capítulo 3, versículos 8-9.

Dar testimonio del encuentro personal con Jesucristo

El Santo Padre reflexionó sobre la Exhortación apostólica Evangelii nuntiandi, de san Pablo VI, dedicada a la evangelización en el mundo contemporáneo y afirmó que la evangelización “es más que una simple transmisión doctrinal y moral”, puesto que ante todo es "dar testimonio del encuentro personal con Jesucristo". Se trata de “un testimonio indispensable”, porque el mundo necesita “evangelizadores que le hablen de un Dios a quien ellos mismos conocen y tratan familiarmente”:

No es transmitir una ideología o una doctrina – entre comillas - sobre Dios, no. Es transmitir a Dios que se hace vida en mí. Ser “coherentes”

El Papa señaló luego que es necesario recordar que el testimonio comprende también la fe profesada, es decir la adhesión convencida y manifiesta a Dios Padre e Hijo y Espíritu Santo. Esto es muy importante porque “la gente necesita de testigos, es decir, de personas que sean coherentes entre lo que creen y lo que viven, entre la fe que profesan y las obras que realizan”.

No se es creíbles sólo pronunciando una doctrina o una ideología. Una persona es creíble si hay armonía entre aquello que cree y lo que vive. […]Muchos cristianos ‘dicen’ que creen, pero viven de otra cosa. Y esto es hipocresía. El contrario del testimonio es la hipocresía.

Aceptar el “riesgo desestabilizante” de la búsqueda

Además, el Santo Padre explicó que “cada uno de nosotros está llamado a responder a tres preguntas fundamentales” formuladas por Pablo VI: “¿Creen verdaderamente en lo que anuncian? ¿Viven lo que creen? ¿Predican verdaderamente lo que viven?”. Y puesto que “no nos podemos conformar con respuestas fáciles y preconfeccionadas”, estamos llamados a aceptar también “el riesgo también desestabilizante de la búsqueda”, confiando plenamente en la acción del Espíritu Santo que obra en cada uno de nosotros, empujándonos a ir siempre más allá.

La Iglesia debe evangelizarse a sí misma

También recordó el Papa que el testimonio de una vida cristiana conlleva un camino de santidad, que no está reservada a pocos La santidad “es don de Dios y requiere ser acogida y que fructifique para nosotros y para los demás”.

Nosotros, elegidos y amados por Dios, debemos llevar este amor a los demás.

Por otra parte, es menester tener en cuenta que los destinatarios de la evangelización no son sólo las personas que están fuera de la Iglesia —porque profesan otra religión o no profesan ninguna—; sino también nosotros mismos, que pertenecemos al Pueblo de Dios.

Esto significa que la misma Iglesia, para poder evangelizar, necesita ser evangelizada, y para ello está llamada a recorrer un camino exigente, de continua conversión y renovación.

De hecho, el Papa Francisco advirtió que “si la Iglesia no se evangeliza a sí misma se vuelve una pieza de museo”; y explicó que lo que la "actualiza" continuamente es, precisamente, la evangelización de sí misma.

Tiene necesidad de escuchar sin cesar lo que debe creer, las razones para esperar, el mandamiento nuevo del amor. La Iglesia, que es un Pueblo de Dios inmerso en el mundo y, con frecuencia, tentado por los ídolos, necesita saber proclamar las grandezas de Dios. En una palabra, esto quiere decir que la Iglesia siempre tiene necesidad de ser evangelizada, necesita tomar el Evangelio, rezar y sentir la fuerza del Espíritu que va cambiando el corazón. Siempre “con” el Espíritu Santo

Francisco afirmó también que la Iglesia debe ir adelante y crecer continuamente para permanecer joven. Y otro punto que señaló es que "debe ser una Iglesia que encuentra 'dialógicamente' el mundo contemporáneo, que teje relaciones fraternas, que genera espacios de encuentro”, pero que al mismo tiempo “encuentra cada día al Señor y dialoga con el Señor, y deja entrar al Espíritu Santo que es el protagonista de la evangelización”.

Sin el Espíritu Santo nosotros sólo podríamos hacer publicidad de la Iglesia, no evangelizar. Es el Espíritu Santo en nosotros, el que empuja hacia la evangelización, y esta es la verdadera libertad de Hijos de Dios.

Por último, concluyó invitando a leer y reflexionar la Evangelii nuntiandi, que él mismo, confesó, lee a menudo, porque es “la obra maestra” de San Pablo VI, “herencia que nos dejó para evangelizar”. (Cf. VatiacanNews.Va)

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