Semanario Orientación domingo 10 de julio 2022 by Arzobispado de San Salvador

S•E•M•A•N•A•R•I•O Año LXIX Nº 6171

ÓRGANO OFICIOSO DEL ARZOBISPADO DE SAN SALVADOR. 10 de julio de 2022

$ 0.30

10 de julio de 2022

Arzobispado de San Salvador Apartado Postal N° 2253, Av. Dr. Emilio Álvarez y Calle Dr. Max Bloch, Colonia Médica

REALIDAD NACIONAL

San Salvador, El Salvador, C. A. PBX: (503) 2234 – 5300, Fax: (503) 2226 – 4979 www.arzobispadosansalvador.org COMUNICADO DEL ARZOBISPADO DE SAN SALVADOR 1. Felicitamos la participación en el proceso del Sínodo para la sinodalidad que las parroquias y las vicarias foráneas han realizado, dando respuesta al material de preparación del Sínodo y realizando la consulta propuesta. Ha sido un excelente trabajo de sinodalidad eclesial en ésta y en todas las diócesis de nuestro país. El próximo martes 05 de este mes, en la Parroquia San José de la Montaña celebraremos la conclusión de la etapa de síntesis a nivel arquidiocesano, habrá una Eucaristía para dar gracias a Dios, con todo el clero de la diócesis y la participación de delegados de todas las parroquias de nuestra arquidiócesis. Seguirán después las siguientes etapas y el Sínodo concluirá en Roma en el mes de octubre de 2023. 2. Nos preocupa mucho la situación de intensas lluvias en nuestro país, a causa del paso de la tormenta Bonnie. Ya tenemos graves daños sufridos, principalmente por personas pobres, que viven en lugares de riesgo, es de desear que con urgencia se tomen las medidas necesarias para proteger a las personas que viven a la orilla del Rio Acelhuate y en otros lugares de alto riesgo. Por otra parte también es necesario que todos acatemos las disposiciones de Protección Civil y las demás autoridades para prevenir cualquier desastre con ocasión del paso de la tormenta tropical. 3. Ante el alza de los casos de Covid, es importante que continuemos con las medidas de bioseguridad, el uso de la mascarilla, el alcohol gel y el distanciamiento social. También es necesario que todos nos apliquemos la 4ª dosis de vacunación. Ciertamente la vacuna es la mejor forma de erradicar una enfermedad pandémica. No nos cansemos de pedir a Dios que finalice ya la pandemia; y, de suplicar al Señor nos conceda a todos la gracia de trabajar por la justicia, la verdad y la paz, que nos posibiliten vivir como hermanos. San Salvador, 03 de julio de 2022 José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador

Diálogo con la prensa 1. Buenos días, Señor Arzobispo, un gusto saludarle. La Iglesia ha dicho algo sobre la alta vulnerabilidad del país, hay colonias que constantemente están sufriendo daños y pues no se hace nada al respecto para solucionar, solo es una reacción a todas las inundaciones, se lleva ayuda. Bueno, usted ya instó a que se haga algo, verdad, pero aquí instaría a la sociedad salvadoreña ante la alta vulnerabilidad del país, que incluso un informe del Ministerio de Medio Ambiente reconoce la alta vulnerabilidad de la nación ante pocas tormentas, falta todavía tiempo para el invierno ¿Qué recomendaría la Iglesia a la gente que hacer? (Jaime Romero, YSUCA)

Sí, muchas gracias por la pregunta. Yo creo que es una cuestión de cultura, que debemos cambiar, nuestros criterios, nuestros principios. Es que, ante todo, debe prevalecer, debe primar la seguridad de las personas y esto no se ha tenido en cuenta, nunca, de larga data, viene que la persona pobre que no tiene propiedades para hacer su casa tiene que vivir en la ladera, en el paredón de río o de la quebrada ¿Cómo es posible? Esas son zonas inhabitables por la seguridad y protección que no deben ser habitadas. Sin embargo, así ha sucedido, incluso en la ciudad, como es aquí en el gran San Salvador, a la orilla del río Acelhuate, las personas viven allí porque no tienen dónde y no es culpa de las personas, es culpa de la sociedad. Es la injusticia con que vivimos, que no les hemos dado oportunidad de superación, han perdido su

condición económica y su dignidad incluso, sometidos a un estilo de vida inhumano, eso tiene que cambiar, tenemos que valorar la persona, proteger sus esfuerzos para que tenga una vivienda digna, ya estamos en un siglo XXI, y eso se puede conseguir con el esfuerzo de todos, son nuestros hermanos, a mí, sinceramente, me parte el corazón ver los niños en un ambiente insalubre, contaminado, jugando y con el peligro, que si crece río en la noche se lleva a la casita y acaban todos, cómo es posible, pero también están los ancianos, a veces enfermos dentro de la casita, que no hay nadie que vele por el ancianito o ancianita, ¿Qué puede pasar? y las personas adultas, viviendo con zozobra, con miedo en cada tormenta, la otra vez y lo (Continúa en pág. siguiente)

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comenté aquí, visitaba la comunidad que está sobre el río Acelhuate en la comunidad de San Roque en San Jacinto, las personas estaban preocupadas porque ya se había llevado una casa el río y amenazando el puente que ya está a punto de caer y hay un paredón grande que amenaza con llevarse como 15 casas que están abajo, las personas no saben que hacer porque están abatidos y pidiendo que se les ayude. Es verdad que somos un país pobre, con muchas necesidades, pero esta debería ser una prioridad. Yo creo que, si nos esforzamos y canalizamos esfuerzo, valga la redundancia, fondos para esto, podemos sacar a las personas adelante, son nuestros hermanos. Yo agradezco su pregunta y sé que se hacen esfuerzos, pero no son suficientes, debería tenerse una política a nivel nacional de ubicar bien a estas personas y ya no permitir que alguien más tenga que vivir en ese estado, ayudarle para que viva en un estado mejor. Creo que nadie busca esos lugares porque los prefieren no, lo que pasa es que no hay, no hay donde más. Mientras el terrateniente tiene tanta tierra de sobra, ellos no tienen nada, ni siquiera dónde vivir, no es justo, no es justo. Entonces el Estado debería intervenir y ojalá que se diseñe una política en este sentido, que nunca se ha hecho.

lo que estábamos diciendo, que todavía lo estamos viviendo después de 200 años y luego, tanta injusticia los salarios injustos, esto ha llevado al pueblo a levantarse, ya en 1830, a penas a 10 años de la independencia hay el primer levantamiento de Anastasio Aquino, 100 años después, en 1932, el levantamiento de Feliciano Ama, se han ahogado en sangre esos levantamientos y la injusticia sigue y la impunidad. Bueno, hemos tenido el conflicto armado de 12 años, que es precisamente por eso, por las injusticias sociales, eso es así. Es a todas luces, es evidente, no lo digo yo, lo dicen todos los analistas. Se firman los acuerdos de paz y viene esta situación que es totalmente injusta, hubo una ley de amnistía que pretendió cubrir todos los crímenes, incluso de lesa humanidad, así no hay paz,

1.1 Gracias por ese análisis y esa respuesta Señor Arzobispo. Por otro lado, ante la realidad actual del régimen de excepción, obviamente, se lamenta la muerte de elemento de la corporación policial. Paralelo a esto, también hay denuncias de instancias nacionales e internacionales que bajo esta medida de Seguridad Pública se aplican torturas en las cárceles y otras medidas bien drásticas ¿Por qué se ha llegado a esto, Señor Arzobispo? (Jaime Romero, YSUCA) Bueno, la problemática de la violencia, la hemos tenido por desgracia desde el principio, desde la Colonia como suele llamarse, que no fue sino que una invasión extrajera, cruel e injusta, pero si un tiempo de Colonia que nos sometió en la esclavitud, maltrato, etc. Hay que decir que hubo hombres que defendieron a nuestros hermanos indígenas con su propia vida. Como fue el caso de El obispo de Nicaragua, Antonio Valdivieso, que muere acuchillado por defender a los indígenas, pero también otros como Bartolomé de las Casas, Fray Montesinos, etc. Pero, de todos modos, el sufrimiento fue muy grave cuando vino la independencia, había mucha esperanza porque entonces se supone que iba a terminar la esclavitud, aunque todavía siguió, pero los gobiernos liberales nos quitaron las tierras ejidales y sometieron a las personas dizque libres a una esclavitud peor al no tener tierras,

porque sin justicia no hay paz y después el tema de las pandillas que todos conocemos hasta la fecha. Entonces en esta situación de tanto sufrimiento para el pueblo, todos están sufriendo igual, no, no todos sufren igual, el que ha padecido este flagelo, hablemos ya de este tiempo último de las pandillas es el pueblo pobre, el que ha puesto los muertos, alta cuota de sangre y también las extorsiones no tienen cómo protegerse, no tienen seguridad, de la que otros sí tienen y entonces tienen que pagar grandemente. Ahora se busca hacer justicia, la verdad es que, si no hay justicia, si hay impunidad, no se resuelve. Pero hacer justicia es difícil, la otra vez decía, que ojalá se encontrará un camino donde no haya personas inocentes que sufran esta situación, donde no haya ninguna injusticia, pero que, sin embargo, se cumpla la ley, que

haya justicia, ese es el desafío y ojalá nos empeñáramos todos. Yo también decía, y hoy lo reitero, que ojalá se diera esto como un problema nacional para resolverlo todos, más que atacarse unos al otro y acusarse uno al otro, etc. Porque si no se atiende de manera conjunta, va a ser más difícil solucionar y tal vez no se logre solucionar el problema que ciertamente tiene raíces profundas. Sin embargo, el pueblo que ha sufrido tanto tiene esperanza que no se le defraude hoy, como otras veces, que no voy a detenerme en eso, pero todos sabemos, que se le prometía, se le prometía y no se le cumplió. Hoy el pueblo ha puesto la esperanza en que sí se le va a cumplir, y eso es lo que estamos viviendo. Ahora bien, la persecución del crimen no es todo, no es que resuelve el problema, eso bien sabemos, es necesario hacerlo, es triste, pero es necesario y en todo país se hace, se reprime y se persigue el crimen. No hay otra forma, tiene que haber justicia, pero además tiene inmediatamente que buscarse solucionar las causas y aquí hay deudas desde la conquista, hasta la fecha, falta educación, si no hay educación, entonces el joven está proclive a caer en estas actitudes vandálicas, hace falta oportunidad de trabajo, dignificación de las personas. Ya hemos dicho aquí que no es por casualidad, sino causalidad, que las zonas más pobres son las que sufren más violencia. Yo nunca he dicho, y estoy en contra de un lenguaje que diga que las personas más violentas son tal Colonia, tal otra y se estigmatizan, no es cierto, esas personas son buenas, yo he visitado varias de estas comunidades, he visto a muchachos tan buenos con el deseo de salir adelante. Lo que pasa es que la pobreza les ha llevado también el problema y tienen que sufrirlo ellos primero y vaya que estos que están luchando por formarse y estudian con mil esfuerzos, pero cuando terminan sus estudios no les admiten porque viene de tal parte, qué pena, es, al contrario, esas zonas deberían privilegiarse con buena educación, salud y fuentes de trabajo, entonces vamos a salir adelante, este es un punto, yo sé que cuando se va a hacer justicia, hay ciertamente dificultades y fallas, personas inocentes que son confundidas porque estaban en el lugar equivocado en el momento equivocado, entonces decíamos la vez pasada, hay que hacerles justicia a ellos también, investigando su caso pronto para que queden en libertad, en fin, es todo un trabajo arduo, pero necesario es este el gran problema de la nación que nunca se ha resuelto, ojalá esta vez se resuelva. Este es el deseo del pueblo que me parece legítimo, yo modestamente, pido en nombre del pueblo, que se haga todo un esfuerzo (Continúa en pág. siguiente)

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4 para que haya paz y que no volvamos a una situación de violencia que el pueblo ya no aguanta, es lo que yo puedo decir sobre eso. 2. Buenos días, Arzobispo. La semana pasada 3 miembros de la corporación policial fallecieron, verdad en manos de grupos terroristas. A raíz de eso, las autoridades han intensificado todas las medidas de seguridad en esos sectores, sobre todo en Santa Ana, donde sucedió el hecho y también a nivel nacional ¿Cómo ve usted estas medidas que han implementado autoridades a raíz de la muerte de estos agentes policiales? Gracias. (Estefany Henríquez, Canal 21) Sí, gracias por su pregunta. Ante todo, yo quiero expresar nuestra solidaridad, nuestro pésame y nuestras oraciones, con las víctimas de esta situación de violencia, en este caso los señores policías y su familia. Nos apena mucho y es muy triste que personas que están en cumplimiento de su deber tengan que morir. Bueno, son consecuencias de la situación de violencia, que estamos enfrentando, ojalá no se llegue a estos niveles. Ahora bien, usted me pregunta por la reacción de las autoridades me parece que es normal, que es lo que hacen siempre las autoridades en cualquier país donde hay un crimen o una masacre, hoy lo vemos por la comunicación que hoy tenemos tan rápida, que si es en Estados Unidos, si es en Francia o en otro país la policía se moviliza y captura a los responsables del crimen entonces me parece que es normal que la policía lo haga, que esto va a causar problema porque hay que bloquear la calle, hay que molestar a los vecinos, estas son las consecuencias son las consecuencias de la violencia, pero es un derecho y un deber de la policía actuar de inmediato. Ojalá que estos crímenes no se den, que cada vez, seamos menos testigos de esta situación, que no seamos escenarios de estas escenas, pero si se dan, la policía me parece que han hecho lo propio, que tiene que actuar. Gracias por su pregunta.

la rodilla derecha, me parece que tiene dificultad allí, que constantemente se está atendiéndose de ese problema, que le afecta el nervio ciático, tengo entendido, pero el Papa va adelante, eso no es de hoy casi desde el principio, todos sabemos que cuando tomó posesión del cargo, ya era mayor de 77 años y con sus limitantes físicos como es natural. Pero él ha ido adelante, él tiene esa fuerza de voluntad para sobreponerse, que es un testimonio, es un ejemplo para nosotros, que mucho más jóvenes a veces ya nos sentimos sin ánimo, sin fuerza y que no podemos hacer las cosas, él no, él va delante. Alguien me hizo el comentario que estaba en silla de ruedas y últimamente ya está con bastón, ya se sobrepuso entonces, nosotros, naturalmente, quisiéramos que el Papa esté mucho tiempo con nosotros, le auguramos que mejore en su salud para que siga mucho tiempo con nosotros, primero Dios. Y eso es lo que yo puedo decir, no tenemos ninguna

3. Buenos días, Arzobispo. Algunos medios internacionales dicen que el Papa se encuentra enfermo y que probablemente pueda dejar el puesto que tiene. No sé si nos da su postura o si ustedes tienen alguna información al respecto. (Jonathan Pineda, Diario El Salvador)

información de que el Papa esté pensando en dimitir o algo parecido, no. Cuando le han preguntado ha dicho que posiblemente sí, pero que él no sabe cuándo sea, no está creyendo en eso, sencillamente. Pero los medios de comunicación están atentos, eso es verdad y eso tiene también un sentido positivo, que es la preocupación por el Papa, como dije al principio, a todos nos preocupa, concluyó con esto, que todos estamos orando por el Papa y él nos ha pedido muchas veces recen por mí, así termina sus discursos y todos lo hacemos. Entonces el Señor asiste al Papa y el Señor le dará salud para que conduzca a la Iglesia por el tiempo que el Señor quiera. Aprovecho para agradecer todas las oraciones por el Papa y también todo el cariño, el afecto que todos le tenemos. Bendito sea Dios, gracias.

Todos hemos visto con preocupación y con tristeza que el Papa ha pasado últimamente por momentos difíciles en su salud, su problema es la pierna, más concretamente

4. Buenos días, Señor Arzobispo. Mi consulta es sobre la semana pasada, la Asamblea Legislativa aprobó una iniciativa para que crear un nuevo registro de los

familiares de las víctimas de la masacre El Mozote, se aprobó y también se establecieron otras medidas para poder apoyar a ese tipo de personas, su valoración respecto a este tipo de iniciativas y si considera que van a solventar un poco esa deuda que se tiene con las víctimas de esta masacre. (Yesenia Aguilar, El Noticiero) Yo sinceramente aplaudo determinaciones como esa, porque como usted ha dicho es una deuda que se tiene importante con las víctimas. De las víctimas se ha hablado siempre y se sigue hablando, por no decir más cosas, hablemos del discurso, quedémonos con el discurso que se ha hecho siempre, pero nunca se les ha ayudado, esa es la verdad, es penoso decirlo, pero es la verdad por supuesto que se les debe ayudar, yo diría, no hoy, sino ayer, hace tiempo atrás y no se les ha ayudado, muchas víctimas han muerto ya, víctimas del conflicto armado, junto con la impunidad también viene esto, la injusticia de negarle resarcimiento a las víctimas y dignificación a las víctimas. Entonces este es un deber nacional, es verdad que los que cometieron los crímenes, por supuesto que están obligados a enfrentarse a la justicia, a resarcir los daños y como ha habido impunidad, pero también el Estado, tiene el deber de resarcir los daños. Ojalá que bueno, que los señores diputados están poniendo atención en este aspecto. Yo no creo que lo hagan solamente para hacer la bulla y que después no hagan nada. No, no creo, porque entonces estaríamos en la misma dimensión de siempre, de hacer un discurso que no lleva a nada, aquí las víctimas han sido olvidadas y eso no es justo y eso no cierra las heridas, no sana el tejido lesionado en tiempos pasados. Entonces, es necesario que se dignifique las víctimas, es necesario que se les dé a conocer la verdad de los hechos. En el caso del Mozote están allí los cuerpos, pero en otras partes no se conoce los cuerpos y la historia de la muerte de sus familiares y eso causa una herida que no sana en el corazón de la persona doliente. Entonces, que bueno, me parece una buena iniciativa, una buena acción que no debe ser la única, que ojalá se extienda a todas las víctimas del conflicto armado y otras víctimas también, es un tema de justicia muy importante a solucionar. Muchas gracias, buen domingo para todos.

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Cartas del Obispo − LXXI −

EL SACRAMENTO DE LA UNCIÓN DE LOS ENFERMOS (I)

San Salvador, 10 de julio de 2022

El sacramento de Curación de la unción de los enfermos, en siglos anteriores se designaba con el nombre de: Extrema unción, en referencia a los últimos momentos de la vida; y el inminente encuentro con la muerte. Ahora; en cambio, la Iglesia prefiere llamarlo Unción de los enfermos; ampliando la mirada a la experiencia de la enfermedad y del sufrimiento en el horizonte de la misericordia de Dios (Papa Francisco, Audiencia General. Plaza de San Pedro. 26 de febrero de 2014). Ciertamente, la enfermedad provoca en el ser humano un estado de postración que le hace experimentar el abandono, la soledad, la tristeza, la impotencia y el sufrimiento, muchas veces ahondado por la inhumanidad de quienes lo rodean. Durante la enfermedad, la persona – explica el Papa Francisco – siente que está comprometida no sólo su integridad física, sino también sus dimensiones relacionales, intelectiva, afectiva y espiritual; por eso, además de los tratamientos espera recibir apoyo, solicitud, atención… en definitiva, amor. Por otra parte, junto al enfermo hay una familia que sufre, y a su vez pide consuelo y cercanía (Mensaje del Santo Padre Francisco para la XXVIII Jornada Mundial del Enfermo. 11 de febrero de 2020. Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré [Mt 11,28]). Situación que no siempre se ha vivido así. Desde antiguo, Dios ha cuidado de los enfermos. En el Antiguo Testamento son innumerables los pasajes que recogen la intervención de Dios. Sanaba la esterilidad (Gn 21, 1-2); sanaba de trances de muerte (Nm 21, 8-9); sanaba de enfermedades graves (2R 5, 14); e incluso revivía muertos (1R 17, 21-22). No importaba si los enfermos eran del pueblo de Israel o extranjeros; siempre los sanaba. Acción divina que el pueblo de Israel leía de forma diferente a nosotros. Para ellos, la enfermedad era camino de conversión; y el perdón de Dios, inauguraba la curación (CIC 1502); es decir, Israel experimentaba que la enfermedad se vinculaba al pecado y al mal; mientras que, la fidelidad a Dios, según la Ley, devolvía la vida (CIC 1502). En medio de esas experiencias de curación-conversión, el profeta Isaías anunció la llegada de un tiempo donde no habría enfermedad y el pecado de las personas sería perdonado (cf. Is 33, 24). La Iglesia ha visto en estas palabras, el anuncio de los tiempos mesiánicos; y en Jesús, su cumplimiento. Es el Evangelista San Marcos quien anota que Jesús no tiene solamente el poder de curar sino también de perdonar los pecados: Para que sepan que el Hijo del hombre tiene en la tierra poder de perdonar pecados – dice al paralítico -. A ti te digo, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa (Mc 2, 10-11). En Jesús, la compasión y la misericordia por los enfermos aflora a simple vista ¿Por qué? El Papa Francisco responde: Porque él mismo se hizo débil, vivió la experiencia humana del sufrimiento y recibió a su vez consuelo del Padre. Efectivamente, sólo quien vive en primera persona esta experiencia sabrá ser consuelo para otros1. Su compasión llega a identificarse con ellos: Estuve enfermo y me visitasteis [Mt 25, 36] (CIC 1503). Compasión y cuidados por el enfermo que Jesús confió a su Iglesia, desde antes de su partida. Es Él quien instituyó el Sacramento de la Unción, lo enseñó a sus discípulos y mandó a los doce administrarlo: Expulsaban a muchos demonios y ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban (Mc 6, 12; Lc 9, 1-2). Siguiéndolo adquieren una nueva visión sobre la enfermedad y sobre los enfermos. Jesús los asocia a su vida pobre y humilde. Les hace participar de su ministerio de compasión y de curación (CIC 1506). Jesús resucitado, antes de ascender a los cielos, prometió a los Apóstoles que una de las señales que los acompañaría sería que, al imponer sus manos sobre los enfermos, se sanarían (cf. Mc 16, 18). Así, tras su partida, la unción, unida al perdón de los pecados fue práctica usual, leemos en Santiago: ¿Está enfermo alguno entre ustedes? Llame a los presbíteros de la Iglesia, que oren sobre él y le unjan óleo en el nombre del Señor. Y la oración de la fe salvará al enfermo; y el Señor hará que se levante, y si hubiera cometido pecados, le serán perdonados (St 5, 14-15). Sin embargo, frente a la alegría de la sanación, los discípulos constataron que no siempre la enfermedad sanaba. San Pablo enseñaba que ante este hecho real había que tomar el sufrimiento con un sentido redentor: Me alegro por los padecimientos que soporto por ustedes, y completo lo que falta a las tribulaciones de Cristo en mi carne, en favor de su cuerpo, que es la Iglesia (1Col 1, 24). En suma, el enfermo – y muchas veces su familia – deberá aprender a llevar la enfermedad con sentido sobre natural. Siendo importante anotar que, el Sacramento de la unción no es un rito mágico que sana al invocar a Dios. El Sacramento de la Unción de los enfermos es un signo de la cercanía de Dios a la humanidad (CIC 1505), y si en algunas ocasiones no sanara a la persona como esta quisiera, estemos ciertos que, dará fortaleza para vivir la enfermedad uniendo sus dolores a los dolores de Cristo en la Cruz. Esta es la eficacia del Sacramento.

1(Mensaje del Santo Padre Francisco para la XXVIII Jornada Mundial del Enfermo. 11 de febrero de 2020. Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré [Mt 11,28]).

José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador

10 de julio de 2022

“Que la paz reine en esta casa. Y si allí hay gente amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá; si no, no se cumplirá”. Homilía de Mons. José Luis Escobar, Arzobispo de San Salvador • Santa Misa del 14° domingo del Tiempo Ordinario • Catedral Metropolitana de San Salvador • 19 de junio de 2022

compara los pueblos con los niños, llevados en el regazo y acariciados en sus rodillas, la madre los consuela, dice, “Así lo consolaré yo, en Jerusalén ustedes serán consolados”. Es, pues, la promesa de un tiempo nuevo, un tiempo de paz, ha pasado el tormento, esclavitud, el sometimiento, la humillación a la que les llevó el pecado, la idolatría. Pero ahora el Señor consuela a su pueblo y le ofrece la paz. La paz en las Sagradas Escrituras significa la reunión de todos los bienes, por eso el saludo de los judíos es la paz “Shalom”. Ese deseo en el Nuevo Testamento, ese concepto de paz, se traducirá por la gracia del Señor, que es aún superior a la paz antigua, puesto que Cristo nos ha reconciliado con el Padre, nos ha Amadísimos hermanos y hermanas, todos hecho verdaderos hijos de Dios, entonces el los que están aquí en el templo, como don de la paz para el cristiano significa más, también todos lo que están en distintos significa la gracia misma del Señor. lugares con fe y devoción, se unen a nosotros en la celebración de la Eucaristía a En el Santo Evangelio, que nos acaba de proclamar, del capítulo 10º de San Lucas, través de los medios de comunicación tenemos el envío que el Señor hace de sus Este día celebramos el 14º domingo del 72 discípulos, puesto que el Señor no solo tiempo Ordinario, pudiéramos decir que la tenía 12 apóstoles, sino que además tenía Liturgia de la Palabra de este día tiene como otro grupo de 72 discípulos. En este pasaje tema fundamental, “La Paz”. En la primera que apunta el evangelista San Lucas, son lectura que hemos escuchado tomada del enviados a evangelizar, les da indicaciones libro del Profeta Isaías Cap. 66, 10 – 14, se concretas de cómo deben ir, lo que deben nos presenta un cántico a la paz, el profeta hacer y los constituye Misioneros de la paz. pronuncia en el nombre del Señor, se refiere Les dice: “Que la paz reine en esta casa. Y a un momento histórico muy particular, si allí hay gente amante de la paz, el deseo cuando el pueblo, ha retornado del Exilio de paz de ustedes se cumplirá; si no, no se babilónico, Dios ha sido misericordioso cumplirá”. Cristo ha venido para darnos y le ha hecho venir a tomar posesión de su paz, ya había sido anunciado como el nuevo, de la tierra prometida. Cuando príncipe de la paz, por el mismo profeta el pueblo estaba vencido, diezmado, sin Isaías, y el Señor dirá continuamente a fuerzas, totalmente sometido y esclavizado sus discípulos “La paz sea con ustedes, en Babilonia. El Señor suscita a un nuevo la paz les doy, mi paz les dejo”. Es la paz emperador en Persia, sin ser judío; sin el mensaje principal de la misión de los embargo, cumplirá la voluntad de Yahvé, apóstoles, son enviados de Cristo y, por lo al liberar el pueblo de Babilonia ordenado tanto, mensajeros de su paz. por Decreto imperial a los babilonios, a dar libertad a los judíos y devolverles las En la segunda lectura que hemos escuchado riquezas que les quitaron, para que pudieran de San Pablo a los gálatas, casi en todas sus restaurar el Templo del Señor; y es aquí cartas el Apóstol inicia deseando la paz a cuando, al volver el Pueblo, el Profeta les las comunidades que escribe, eso es algo habla en nombre del Señor, anunciándoles común en sus cartas. Y ahora, en la Carta un tiempo de paz, le dice: “Yo haré correr la a los Gálatas, capítulo 6 entre otras cosas, paz sobre Jerusalén como un río y la gloria de nos ha dicho el Apóstol: “Para todos los las naciones como un torrente desbordado”. que vivan conforme a esta norma”, está Hablando de Jerusalén y prometiéndoles hablando de la fidelidad en el amor a Cristo, la paz, el Señor ocupa figuras muy tiernas, en el seguimiento al Señor, en el camino

de Cruz. El apóstol, el discípulo, tiene que estar crucificado con el Señor; y él mismo, el Apóstol Pablo, da testimonio, nos dice: “Para todos los que vivan conforme a esta norma y también para el verdadero Israel, la paz y la misericordia de Dios”. Es el deseo de nuevo de la paz y la misericordia y a la vez una promesa para los que vivan conforme al Evangelio de Cristo.

A manera de conclusión, les propongo dos reflexiones: En primer lugar, la misión que el Señor manda a sus discípulos, es también para nosotros, en el momento actual. El Señor quiere que su mensaje se multiplique y que llegue a todas partes, en su bondad ha querido compartirnos su misma misión, por el bautismo todo somos sus discípulos y a la vez sus misioneros. Por tanto, todos deberíamos sentirnos enviados por el Señor, para llevar el mensaje de Cristo, para invitar a todos a vivir la gracia del Señor. En segundo lugar, les invito a fijar la mirada en el versículo 20, del capítulo 10 de San Lucas, del Evangelio de hoy, en el que nos dice que los discípulos expresan al Señor su alegría porque los demonios se les sometían, le dicen: “Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre”. Y el Señor les contesta: “No se alegren de que los demonios se les someten. Alégrense más bien de que sus nombres están escritos en el cielo”. Esta es una hermosísima promesa para los que anuncian el mensaje del Señor, para los evangelizadores y misioneros, que como ya dije, debemos ser todos los bautizados. (Continúa en pág. siguiente)

10 de julio de 2022 casa, en la escuela, taller, oficina, en la misma calle e incluso en la cancha, donde sea. Si la gracia de Dios nos reviste, si en verdad somos discípulos de Cristo, si el Espíritu Santo habita en nosotros, entonces necesariamente vamos a transmitir el mensaje del Señor, que es sumamente importante y necesario, para la salvación de todos, Dios quiere que todos nos salvemos y por eso nos ha constituido a todos sus misioneros. Pues bien, amadísimos, esta promesa también es para nosotros, como fruto de la misión, debemos tomar parte activa en la evangelización, algunos lo hacen en la parroquia, participan en las actividades pastorales, en verdad todas las áreas de pastoral son misión. La Iglesia es esencialmente misionera, cada parroquia es misionera y lleva adelante una misión, que es la misma misión de Cristo, la evangelización. Pero hay que decir, también, que todos debemos ser misioneros en nuestros ambientes, en nuestra propia

Entonces, ánimo, bien, vale la pena todo esfuerzo, toda lucha e incluso hasta dar la vida como nuestros hermanos mártires con tal de predicar a Cristo y hacer el bien a nuestros hermanos. Alégrense sobre todo que sus nombres estén escritos en el Cielo, nos ha dicho el Señor. Y el mensaje de esa misión es la paz. En el mundo, lamentablemente hay mucha violencia, es escandaloso, la cantidad de sangre que se derrama constantemente, las matanzas imparables. La violencia es obra Satanás,

que se disfraza, ya sea por el ídolo del dinero, por eso por el dinero se mata, se destruye a la otra persona, se niegan sus derechos, se les niega su dignidad, es pavoroso. Es muy triste, vemos los países sometidos a la violencia de todo tipo, de todo género y nuestro país no es la excepción, hemos encabezado la lista de los países más violentos del mundo, eso contradice totalmente nuestra fe. La invitación del Señor es a trabajar por la paz, a ser misioneros de su paz, la paz que es fruto de la justicia y de la verdad. Por lo tanto, debemos trabajar por la justicia, la verdad y por el bien común, por la dignificación de las demás personas y en la manera que dignificamos al prójimo, nos dignificamos a nosotros mismos. Que el Señor nos conceda ser fieles a su mensaje, a su palabra e incansable en difundirlo para el bien de todos. ¡Así sea!

Palabras del Arzobispo Principales Compromisos del 27 junio al 03 de julio de 2022 AUDIENCIAS VARIAS REUNIÓN CON CONSEJO DE CONSULTORES ORDENACIÓN PRESBITERAL MISA DOMINICAL Y CONFERENCIA DE PRENSA EUCARISTÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS PEQUEÑOS HERMANOS DE MARÍA

El lunes 27 de junio, así como los otros días de la semana presidí la Eucaristía de las 7:00 a.m., en la Capilla San Oscar Romero del Arzobispado El martes 28 de junio, recibí la visita de hermanas religiosas y varios hermanos laicos que solicitaron hablar con este servidor, para abordar diversas temáticas El miércoles 08, lo dediqué a recibir a los sacerdotes, un buen número de ellos nos visitaron, siempre es motivo de alegría y gran satisfacción el encontrarnos para tratar diversos temas de interés pastoral o personal El viernes 01 de julio, a las 9:30 a.m. en mi despacho, me reuní con los padres del Consejo de Consultores. La reunión con ellos es muy importante para la conducción de la diócesis, agradezco mucho la generosidad de cada uno de ellos. El sábado 02 de julio, a las 10:00 a.m., en nuestra Catedral, presidí la solemne Eucaristía de Ordenación Presbiteral de

los diáconos Alfredo Josué Ayala Campos, Diego Ernesto Carranza Peña, Esteban Alfonso Girón Baldizón, Gamaliel José Martínez Molina, José Gerardo Abril López, todos ellos del Seminario Redeptoris Mater. La celebración fue muy solemne, concelebraron la santa Misa el Señor Abad de Esquipulas, Guatemala, el Excmo. Mons. Héctor Sosa; el Rector del Seminario, el Padre Jesús García; los Padre del Equipo Formador del Seminario y buen número de sacerdotes; estuvieron presentes las familias de cada uno de los ordenandos y gran cantidad de fieles. La liturgia fue de una gran participación. Felicitamos de corazón a estos cinco nuevos sacerdotes que Dios nos regala y les encomendamos al Señor.

medios de comunicación nacionales e internacionales

Por la tarde de ese mismo domingo, visité la Parroquia de Nuestra Señora de Lourdes, en Lourdes, Colón, para presidir la Eucaristía de acción de gracias por el 50 aniversario de fundación del Movimiento de los Pequeños Hermanos de María, con esta celebración clausuraron el solemne Año Jubilar, con ocasión de sus 50 años de fundación. Concelebraron conmigo, el Párroco, el Padre Santos Belisario Hernández y el Padre Pedro David Castro, Párroco del Señor de las Misericordias, en Nuevo Lourdes. Fue una celebración muy linda con la participación de los miembros de dicho Movimiento, en un ambiente de mucha alegría, fe y devoción. Felicito de El domingo 03, a las 08:00 a.m., en Catedral, corazón a los Pequeños Hermanos de María presidí la Santa Eucaristía dominical, en por sus Bodas de Oro de fundación y les que di lectura a nuestro comunicado, a encomendamos al Señor. continuación tuvimos la acostumbrada conferencia de prensa con los diferentes

10 de julio de 2022

Carta Apostólica

Desiderio Desideravi

A los Obispos, a los presbíteros y a los diáconos a las personas Consagradas y a todos los Fieles Laicos Sobre la formación Litúrgica del Pueblo de Dios - Primera Entrega

1. Queridos hermanos y hermanas: con esta carta deseo llegar a todos – después de haber escrito a los obispos tras la publicación del Motu Proprio Traditionis custodes – para compartir con vosotros algunas reflexiones sobre la Liturgia, dimensión fundamental para la vida de la Iglesia. El tema es muy extenso y merece una atenta consideración en todos sus aspectos: sin embargo, con este escrito no pretendo tratar la cuestión de forma exhaustiva. Quiero ofrecer simplemente algunos elementos de reflexión para contemplar la belleza y la verdad de la celebración cristiana.

por la misericordia del Señor – el don se confía a los Apóstoles para que sea llevado a todos los hombres. 4. Nadie se ganó el puesto en esa Cena, todos fueron invitados, o, mejor dicho, atraídos por el deseo ardiente que Jesús tiene de comer esa Pascua con ellos: Él sabe que es el Cordero de esa Pascua, sabe que es la Pascua. Esta es la novedad absoluta de esa Cena, la única y verdadera novedad de la historia, que hace que esa Cena sea única y, por eso, “última”, irrepetible. Sin embargo, su infinito deseo de restablecer esa comunión con nosotros, que era y sigue siendo su proyecto original, no se podrá saciar hasta que todo hombre, de toda tribu, lengua, pueblo y nación (Ap 5,9) haya comido su Cuerpo y bebido su Sangre: por eso, esa misma Cena se hará presente en la celebración de la Eucaristía hasta su vuelta.

La Liturgia: el “hoy” de la historia de la salvación 2. “Ardientemente he deseado comer esta Pascua con vosotros, antes de padecer” (Lc 22,15) Las palabras de Jesús con las cuales inicia el relato de la última Cena son el medio por el que se nos da la asombrosa posibilidad de vislumbrar la profundidad del amor de las Personas de la Santísima Trinidad hacia nosotros. 3. Pedro y Juan habían sido enviados a preparar lo necesario para poder comer la Pascua, pero, mirándolo bien, toda la creación, toda la historia –que finalmente estaba a punto de revelarse como historia de salvación– es una gran preparación de aquella Cena. Pedro y los demás están en esa mesa, inconscientes y, sin embargo, necesarios: todo don, para ser tal, debe tener alguien dispuesto a recibirlo. En este caso, la desproporción entre la inmensidad del don y la pequeñez de quien lo recibe es infinita y no puede dejar de sorprendernos. Sin embargo –

5. El mundo todavía no lo sabe, pero todos están invitados al banquete de bodas del Cordero (Ap 19,9). Lo único que se necesita para acceder es el vestido nupcial de la fe que viene por medio de la escucha de su Palabra (cfr. Rom 10,17): la Iglesia lo confecciona a medida, con la blancura de una vestidura lavada en la Sangre del Cordero (cfr. Ap 7,14). No debemos tener ni un momento de descanso, sabiendo que no todos han recibido aún la invitación a la Cena, o que otros la han olvidado o perdido en los tortuosos caminos de la vida de los hombres. Por eso, he dicho que “sueño con una opción misionera capaz de transformarlo todo, para que las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje y toda estructura eclesial se convierta en un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual

más que para la autopreservación” (Evangelii gaudium, n. 27): para que todos puedan sentarse a la Cena del sacrificio del Cordero y vivir de Él. 6. Antes de nuestra respuesta a su invitación – mucho antes – está su deseo de nosotros: puede que ni siquiera seamos conscientes de ello, pero cada vez que vamos a Misa, el motivo principal es porque nos atrae el deseo que Él tiene de nosotros. Por nuestra parte, la respuesta posible, la ascesis más exigente es, como siempre, la de entregarnos a su amor, la de dejarnos atraer por Él. Ciertamente, nuestra comunión con el Cuerpo y la Sangre de Cristo ha sido deseada por Él en la última Cena. 7. El contenido del Pan partido es la cruz de Jesús, su sacrificio en obediencia amorosa al Padre. Si no hubiéramos tenido la última Cena, es decir, la anticipación ritual de su muerte, no habríamos podido comprender cómo la ejecución de su sentencia de muerte pudiera ser el acto de culto perfecto y agradable al Padre, el único y verdadero acto de culto. Unas horas más tarde, los Apóstoles habrían podido ver en la cruz de Jesús, si hubieran soportado su peso, lo que significaba “cuerpo entregado”, “sangre derramada”: y es de lo que hacemos memoria en cada Eucaristía. Cuando regresa, resucitado de entre los muertos, para partir el pan a los discípulos de Emaús y a los suyos, que habían vuelto a pescar peces y no hombres, en el lago de Galilea, ese gesto les abre sus ojos, los cura de la ceguera provocada por el horror de la cruz, haciéndolos capaces de “ver” al Resucitado, de creer en la Resurrección. 8. Si hubiésemos llegado a Jerusalén después de Pentecostés y hubiéramos sentido el deseo no sólo de tener noticias sobre Jesús de Nazaret, sino de volver a encontrarnos con Él, no habríamos tenido otra posibilidad que buscar a los suyos para escuchar sus palabras y ver sus gestos, más vivos que nunca. No habríamos tenido otra posibilidad (Continúa en pág. siguiente)

10 de julio de 2022 de un verdadero encuentro con Él sino en la comunidad que celebra. Por eso, la Iglesia siempre ha custodiado, como su tesoro más precioso, el mandato del Señor: “haced esto en memoria mía”. 9. Desde los inicios, la Iglesia ha sido consciente que no se trataba de una representación, ni siquiera sagrada, de la Cena del Señor: no habría tenido ningún sentido y a nadie se le habría ocurrido “escenificar” – más aún bajo la mirada de María, la Madre del Señor – ese excelso momento de la vida del Maestro. Desde los inicios, la Iglesia ha comprendido, iluminada por el Espíritu Santo, que aquello que era visible de Jesús, lo que se podía ver con los ojos y tocar con las manos, sus palabras y sus gestos, lo concreto del Verbo encarnado, ha pasado a la celebración de los sacramentos.

encuentro vivo con Él, o no es. 11. La Liturgia nos garantiza la posibilidad de tal encuentro. No nos sirve un vago recuerdo de la última Cena, necesitamos estar presentes en aquella Cena, poder escuchar su voz, comer su Cuerpo y beber su Sangre: le necesitamos a Él. En la Eucaristía y en todos los Sacramentos se nos garantiza la posibilidad de encontrarnos con el Señor Jesús y de ser alcanzados por el poder de su Pascua. El poder salvífico del sacrificio de Jesús, de cada una de sus palabras, de cada uno de sus gestos, mirada, sentimiento, nos alcanza en la celebración de los Sacramentos. Yo soy Nicodemo y la Samaritana, el endemoniado de Cafarnaún y el paralítico en casa de Pedro, la pecadora perdonada y la hemorroisa, la hija de Jairo y el ciego de Jericó, Zaqueo y Lázaro; el ladrón y Pedro, perdonados. El Señor Jesús que inmolado, ya no vuelve a morir; y sacrificado, vive para siempre, continúa perdonándonos, curándonos y salvándonos con el poder de los Sacramentos. A través de la encarnación, es el modo concreto por el que nos ama; es el modo con el que sacia esa sed de nosotros que ha declarado en la cruz(Jn 19,28).

La Liturgia: lugar del encuentro con Cristo 10. Aquí está toda la poderosa belleza de la Liturgia. Si la Resurrección fuera para nosotros un concepto, una idea, un pensamiento; si el Resucitado fuera para nosotros el recuerdo del recuerdo de otros, tan autorizados como los Apóstoles, si no se nos diera también la posibilidad de un verdadero encuentro con Él, sería como declarar concluida la novedad del Verbo hecho carne. En cambio, la Encarnación, además de ser el único y novedoso acontecimiento que la historia conozca, es también el método que la Santísima Trinidad ha elegido para abrirnos el camino de la comunión. La fe cristiana, o es un

12. Nuestro primer encuentro con su Pascua es el acontecimiento que marca la vida de todos nosotros, los creyentes en Cristo: nuestro bautismo. No es una adhesión mental a su pensamiento o la sumisión a un código de comportamiento impuesto por Él:

es la inmersión en su pasión, muerte, resurrección y ascensión. No es un gesto mágico: la magia es lo contrario a la lógica de los Sacramentos porque pretende tener poder sobre Dios y, por esa razón, viene del tentador. En perfecta continuidad con la Encarnación, se nos da la posibilidad, en virtud de la presencia y la acción del Espíritu, de morir y resucitar en Cristo. 13. El modo en que acontece es conmovedor. La plegaria de bendición del agua bautismal nos revela que Dios creó el agua precisamente en vista del bautismo. Quiere decir que mientras Dios creaba el agua pensaba en el bautismo de cada uno de nosotros, y este pensamiento le ha acompañado en su actuar a lo largo de la historia de la salvación cada vez que, con un designio concreto, ha querido servirse del agua. Es como si, después de crearla, hubiera querido perfeccionarla para llegar a ser el agua del bautismo. Y por eso la ha querido colmar del movimiento de su Espíritu que se cernía sobre ella (cfr. Gén 1,2) para que contuviera en germen el poder de santificar; la ha utilizado para regenerar a la humanidad en el diluvio (cfr. Gén 6,1-9,29); la ha dominado separándola para abrir una vía de liberación en el Mar Rojo (cfr. Ex 14); la ha consagrado en el Jordán sumergiendo la carne del Verbo, impregnada del Espíritu (cfr. Mt 3,1317; Mc 1,9-11; Lc 3,21-22). Finalmente, la ha mezclado con la sangre de su Hijo, don del Espíritu inseparablemente unido al don de la vida y la muerte del Cordero inmolado por nosotros, y desde el costado traspasado la ha derramado sobre nosotros (Jn 19,34). En esta agua fuimos sumergidos para que, por su poder, pudiéramos ser injertados en el Cuerpo de Cristo y, con Él, resucitar a la vida inmortal (cfr. Rom 6,1-11).

10 de julio de 2022

Asamblea Presinodal Arquidiocesana Se inicio el proceso de participación en el Sínodo de la Sinodalidad, todavía en confinamiento por causa de la Pandemia Covid-19. Las primeras reuniones con el Señor Arzobispo y los Vicarios Foráneos fueron virtuales. Allí se dio a conocer el material y se hizo la invitación a los señores Vicarios a acompañar al Señor Arzobispo el domingo 17 de octubre de 2021, a concelebrar en la Santa Misa en Catedral, inaugurando el proceso diocesano del Sínodo de la Sinodalidad. Se dejaron los meses de noviembre a enero para que los Vicarios dieran a conocer el material en sus vicarías, capacitar sus equipos y preparar los materiales para la etapa de escucha en los meses de febrero a abril. Cada Vicaría integraría equipo de síntesis Vicarial para procesar los aportes de las parroquias en el mes de mayo y luego enviarlo a diócesis. El equipo de síntesis diocesano trabaja el primer borrador de síntesis en el mes de junio. Para luego el 5 de julio en Asamblea Diocesana Pre Sinodal compartir el borrador y recibir los aportes de la Asamblea proceder a la redacción final que será luego aprobada por el Señor Arzobispo y enviada a la Conferencia Episcopal.

Imagenes de la primera etapa Pre Sinodal de síntesis en el proceso del Sínodo 2021 – 2023 Llevado a cabo en el Seminario Mayor San José de la Montaña, San Salvador, El Salvador

10 de julio de 2022

Nombramientos

El señor Arzobispo Metropolitano de San Salvador, Mons. José Luis Escobar Alas, ha efectuado durante el mes de enero de 2022 los siguientes nombramientos:

Nombramiento de Párroco Nº 002/2022

• Pbro. Mario Adonay Orellana Castro Parroquia Nuestra Señora de la Luz Nº 003/2022

• Rvdo. Pbro. Héctor Abelardo Pinto Orellana

editorial

Parroquia Santa Lucía Nº 008/2022

Pasos hacia la Sinodalidad Por: Pbro. Simeón Reyes En nuestra diócesis hemos tenido recientemente un encuentro diocesano para exponer sobre los aportes de las diferentes vicarías y parroquias en torno al camino sinodal. Dicho aporte se convierte como en una autoevaluación para laicos y pastores. Sabemos que no se trata solamente de esperar un documento que vendrá después todo este proceso. El mismo camino es parte de la experiencia sinodal. Hemos dado algunos pasos hacia la sinodalidad porque el tema comienza a “sonar” entre los fieles y no solamente entre los pastores. Se ha querido comenzar desde la realidad que vive cada comunidad parroquial y cada creyente, para que desde su vivencia de fe pueda aportar sobre la temática sinodal. No se trata de escuchar solamente con los que piensan como nosotros, sino de abrirnos a la escucha y al diálogo desde la fe. Se nos invita a tomar conciencia de la realidad de nuestra comunidad eclesial, llámese pequeña comunidad, movimiento, parroquia, vicaría o diócesis. Se nos invita a mirar nuestro camino recorrido y considerar como se realiza “hoy” nuestro caminar juntos. El camino sinodal nos libra de aquella percepción intimista de la fe: “Dios y yo, y nadie más”. Se nos pide construir una mentalidad donde nos interesamos por los demás, donde enfocamos la experiencia comunitaria de la fe y estamos dispuestos a caminar juntos. A continuación, se plantea la otra gran pregunta: ¿y qué otros pasos podemos dar? De manera que escuchando al Espíritu Santo podamos abrirnos a la novedad de Dios. Es necesario descubrir el camino que la Iglesia debe recorrer: pastores y fieles. En ocasiones pensamos que es mejor no cuestionarnos porque tenemos miedo a los cambios. A todos nos cuesta cambiar. Un paso importante en este caminar juntos será cuando cada uno de los bautizados haga suyo, con seriedad y convencimiento, que está llamado a caminar junto a sus hermanos en la fe. Cuando cada bautizado haga una verdadera conversión sinodal. Entonces encontrará gusto al camino comunitario de fe, abrirá su corazón a sus hermanos y experimentará la alegría de ser pueblo de Dios. No podemos quedarnos a observar cómo cambian los demás, o cómo cambiará el párroco, o el vicario o el obispo. En primer lugar, hay que comenzar por uno mismo. Si esto lo conseguirnos, como Iglesia habremos dado un gran paso. Es un estilo de Iglesia que tenemos que aprender, que gustar y compartir. Es un nuevo espíritu que guía nuestra comunidad de fe.

• Pbro. Ramón Ernesto de la O Cortez Parroquia Santa María de Guadalupe Nº 009/2022

• Pbro. Saúl Orlando Flores Interiano Parroquia San Antonio de Padua

Nombramiento Vicario Pastoral Nº 007/2022

• Pbro. Santos Cecilios Hernández Carraza Parroquia Nuestra Señora de Lourdes

Nombramiento Vicario Parroquial Nº 010/2022

• Pbro. Carlos Humberto Mejía Parroquia San Antonio de Padua POR SU MANDATO:

Mons. Rafael Edgardo Urrutia Canciller

† Mons. José Luis Escobar Alas Arzobispo Metropolitano de San Salvador

10 de julio de 2022

Recordando al Beato Rutilio Grande en el día de su Natalicio - Ultima Entrega Por: Mons. Rafael Urrutia Ya en la vida del Seminario supe que él era el Prefecto de Estudios y de Disciplina, que tenía que lidiar con aproximadamente ciento cincuenta estudiantes del seminario menor, que llenos de energías corríamos, gritábamos e intentábamos estudiar bajo la seria tutela de San Ignacio de Loyola y de los Padres Jesuitas, quienes nos formaban con entrega generosa y cuyas vidas motivaban a desear llegar al sacerdocio. Que vidas las de aquellos Jesuitas, con solo verlos nos sentíamos retados a ser como ellos: por su vida de oración, sus penitencias, sus ayunos, sus cilicios y sus exigencias para que intentáramos volar al cielo como las águilas que en el frente del Seminario continúan estando para provocar al vuelo.

Después de terminar la educación media en el Seminario Menor tuve que salir del país y me fui a estudiar al Seminario Mayor Nuestra Señora de La Asunción en la ciudad de Guatemala y, entonces, lo perdí de vista y he terminado de conocer su historia gracias al oficio de Vice postulador Diocesano de la Causa de Canonización suya y de sus compañeros mártires Manuel y Nelson Rutilio.

Me encanta saber que la historia del Padre Rutilio Grande es muy similar a la de muchos salvadoreños que venimos de familias pobres y destruidas por conflictos familiares y que con apenas cuatro años quedó al cuidado principalmente de su abuela Francisca, quien no solo se encargó de prodigarle los cuidados necesarios, sino también las bases de su espíritu piadoso y su vocación al sacerdocio. Crecer en esas circunstancias, sin la convivencia habitual de sus padres y hermanos, le produjo una timidez e inseguridad que algunas veces llegaron a causarle momentos de angustia y de depresión. Conociendo su historia

más de cerca en el Proceso de Canonización, supe que el Padre Rutilio fue una persona débil e incluso enferma. De acuerdo con la documentación existente, padeció dos crisis nerviosas serias en sus años de formación. Probablemente, esas crisis están relacionadas con la alimentación inadecuada durante la infancia, ocasionada por la pobreza y con la desintegración del núcleo familiar, de lo cual solo hay indicios en la documentación disponible. Él mismo atribuyó su mala salud a la desnutrición, a la austeridad de su vida y a la excesiva presión espiritual. Siempre fue de constitución débil, de cuerpo delgado y frágil, pero, como San Óscar Romero, su vida floreció porque Rutilio también hundió sus raíces en Dios y supo aceptar y reconocer sus limitaciones encontrando en Él la fuerza para “tomar las cosas con mucha paz, método y oración”…, pues de todas maneras, sabía que llevaba “una pequeña cruz, por no decir grande…, para cultivar la humildad y la conformidad con la voluntad de Dios, aceptando que Él así lo ha querido y bendito sea para siempre”. Y en fe aceptó y plasmó en algunos de sus escritos que, la debilidad de su sistema nervioso: “Es mi cruz. Con eso cuento, pero confío perfectamente que triunfaré, con la ayuda de Dios, de todas las dificultades”.

Así aprendió, el Padre Rutilio, a aceptar sus debilidades y limitaciones, y pidió a Dios “la aceptación de sí mismo tal como era porque es voluntad clarísima de Dios”. Y en consecuencia se propuso no caer en la pusilanimidad, ni en la cobardía, sino trabajar porque las cosas que tenía entre (Continúa en pág. siguiente)

10 de julio de 2022 manos resultasen lo mejor posible porque Dios así lo quiere, y por eso no debía temer el fracaso, ni a una vida en la oscuridad; y prometió no ser perfeccionista, sino aprender a nadar nadando. El abandono de sus inseguridades, de sus temores y de sus debilidades lo dejaba sin defensa ante Jesucristo, “en definitiva, lo único que queda”. Al llegar a este punto, solo podía abandonarse confiado en las manos del Padre de Jesús, aun cuando pudiera fracasar y ser criticado o reprobado. Confiando en Dios su Padre que todo lo dirige para su bien”.

En su historia es hermoso descubrir el sendero por el que el Señor lo llamó al sacerdocio. Ingresó al Seminario San José de la Montaña en 1941, con la ayuda de Dios y el apoyo del Arzobispo de San Salvador, Monseñor Luis Chávez y González, al que conoció a muy temprana edad; y por quien siempre sintió un gran aprecio. Cuatro años más tarde descubrió su vocación jesuita y pidió permiso a su querido amigo el Arzobispo Chávez y González para ingresar en las filas de la Compañía de Jesús. Pues Sentía vocación para ser misionero, de ser posible, ir a misionar a China o a tierras lejanas de infieles.

en el Seminario. Tomada la posesión de su Parroquia, pescó hombres y mujeres que se convertirían en sal y levadura del pueblo salvadoreño. ¡Pesca milagrosa que le conduciría al martirio! He comprendido que su pasión comenzó años antes de su martirio; e incluso, antes de su llegada al Paisnal. Intentando hacer la voluntad de Dios, encontraba a su paso incomprensión y rechazo. Sus homilías eran consideradas de alta peligrosidad, según sus acusadores, subvertían el orden social, político y económico…, además su trabajo pastoral despertaba muchas sospechas entre los terratenientes y los militares, y así aproximadamente a las cinco de la tarde del 12 de marzo de 1977, ocurrió su muerte en la cruz. No estaba sólo. Junto a él murieron dos mártires más: Manuel Solórzano, de setenta y dos años; y Nelson Rutilio Lemus, de quince. En el camino fueron emboscados y su carro fue ametrallado brutalmente como si se tratara de un malhechor. Cuenta el Padre Rodolfo Cardenal SJ, quien ha escrito su biografía, que poco antes de morir, en voz baja Rutilio pronunció estas palabras: “Debemos hacer lo que Dios quiere”, y que de antemano ofreció su perdón a sus asesinos con estas palabras que pronunció a sus feligreses: “El odio no cabe en un cristiano. Aunque nos apaleen y nos quiten la vida tenemos que seguir amando y perdonando. Así nos enseñó Jesús ¿verdad? ¡Padre, perdónales, sepan o no lo que hacen!

muy culminantes de mi vida él estuvo muy cerca de mí; y esos gestos jamás se olvidan.” El Padre Rutilio seguramente debió sentir gran afinidad con San Óscar Romero por sus caracteres e historias personales, un tanto afines. El Padre Rodolfo Cardenal, S. J. en varios de sus escritos afirma que: “Mons. Romero no se comprende sin Rutilio Grande”. Rutilio terminó violentamente su ministerio, en marzo de 1977, precisamente cuando Mons. Romero comenzaba el suyo como Arzobispo de San Salvador, en febrero de 1977. Incluso el día en que estuvimos en Roma, en octubre de 2015, para agradecer al Papa Francisco la Beatificación de Monseñor Romero, nos comentó Rodolfo que el Papa le preguntó si ya había algún milagro del Padre Rutilio Grande y ante su respuesta negativa, el Papa le dijo que sí había un milagro y con alegría le comento: “Es Monseñor Romero”.

Estos son un poco de mis recuerdos sobre el Padre Rutilio Grande. Mire que privilegio el mío, él me recibió en el seminario menor y Monseñor Romero me ordenó sacerdote y Dios ha querido que haya trabajado en las causas de canonización de ambos. Esto desde luego me plantea siempre un desafío para mi vida sacerdotal: “ser como Jesús”, aunque yo no sea un jesuita, porque sé “La muerte del Padre Rutilio afectó, que sí se puede. Ambos me han mostrado en primer lugar, a Monseñor Romero. el camino hacia la santidad sabiendo que Acaeció cuando apenas hacía tres semanas Jesús me invita a caminar la historia con Monseñor había tomado posesión como la misma fe de los santos y de los mártires, nuevo Arzobispo de San Salvador. Sin con el convencimiento que Él combate embargo, contra todo pronóstico humano, junto a mí mis batallas; y que, aunque Ya ordenado sacerdote, a su regreso a El él supo leer y descifrar su muerte como camine por cañadas oscuras, sé que ningún Salvador colaboró en el Seminario San verdadera interpelación de Dios. Y mal temeré porque Él va conmigo y sé que José de la Montaña en la formación de adoptó con su Iglesia tales decisiones que su vara y su callado me sostienen, como los futuros sacerdotes, que atenderían a sorprendió a todos”. En el funeral de cuerpo los sostuvo a ellos. Además, tengo muy la grey salvadoreña, concluyendo este presente, Monseñor Romero comenzó su en mi corazón tantos buenos recuerdos de ministerio en 1970. En 1972 fue nombrado predicación con estas palabras: “si fuera los padres Jesuitas que nos enseñaron a Párroco de la Parroquia El Señor de un funeral sencillo hablaría aquí, queridos dar los primeros pasos en los ideales de la las Misericordias en Aguilares. Como hermanos, de unas relaciones humanas y santidad. Ellos eran, ya viejos curtidos en pescador experimentado, pescó hombres personales con el P. Rutilio Grande a quien los senderos de caminar en pos de Jesús. para el sacerdocio, mientras permaneció siento como un hermano. En momentos Bendito sea Dios.

10 de julio de 2022

Hacia una moralidad social

Pbro. José M. Tojeira

La moral personal es fundamental en la vida cristiana. También lo es la moral social. Sin embargo en nuestros países centroamericanos tenemos la tendencia a hablar más de la moralidad personal que de la social. Eso tiene su base en la convicción de que sin una auténtica conversión personal el ser humano difícilmente puede llegar a una fe viva. En ese sentido es normal que en las primeras etapas de la vida cristiana se insista en el comportamiento personal. Pero los cristianos tenemos una vocación clara al testimonio público y a poner lo público en conformidad con valores. Ante las idolatrías actuales del poder, el dinero y el placer egoísta la Iglesia nos pide anunciar el supremo valor del ser humano y su dignidad inalienable. La moral social es, en ese sentido, indispensable para la vida y la coherencia cristiana en el mundo en que vivimos.

o inferiores, según nuestros gustos e ideologías. Despreciamos al pobre o simplemente lo utilizamos o lo ignoramos, que es otra forma de desprecio. Las desigualdades económicas y sociales, aun siendo injustas, acabamos viéndolas como naturales cuando caemos en un consumismo hedonista e individualista. Repudiamos la violencia cuando proviene de nuestros hermanos fracasados, la olvidamos cuando es fruto de nuestras débiles estructuras sociales y la ensalzamos cuando reprime con dureza a los delincuentes. La frase de Jesús en el Evangelio, “que entre ustedes no sea así”, no la escuchamos cuando preferimos el insulto al diálogo, o la frase o la amenaza autoritaria frente al debate racional y civilizado. Por supuesto que estas actitudes no están tan generalizadas como para decir que no existen personas con una conciencia moral recta en el campo de lo económico y lo social. Pero evidentemente las conductas antes mencionadas tienen demasiado peso en nuestro funcionamiento social.

Presentación del logo, para el Jubileo del 2025

EN EL MUNDO

En ese contexto resulta necesario que los cristianos nos formemos con mayor exigencia en el campo de la moral social. Los Evangelios, con las palabras del Señor y su cercanía a los humildes y sencillos, nos ofrece una primera e indiscutible base para Como en muchas otras partes intuir lo justo y lo injusto, lo verdadero y del mundo, en El Salvador tendemos a lo que no es más que propaganda adornada catalogar a las personas en superiores de una felicidad vacía. El Documento de los

obispos en Aparecida tiene una amplia parte dedicada a exponer la situación de nuestros países y el sentido evangélico con el que tenemos que enfrentar situaciones de injusticia o de violencia. La Doctrina Social de la Iglesia da abundantes criterios para que los cristianos podamos hacer un juicio moral de muy diversas situaciones y desarrollar actitudes evangélicas frente a los problemas sociales. Documentos y materiales de reflexión tenemos muchos. Pero una vida apresurada y en ocasiones difícil, nos lleva a huir de la problemática social de nuestros países y refugiarnos exclusivamente en la moral personal. Aunque ser buena persona es la primera obligación de todos, los miembros de una “Iglesia en salida” deben mirar al mundo en que vivimos, discernir los signos de los tiempos y buscar e impulsar siempre el amor al prójimo y la justicia social. Cada día es más necesaria una mayor y más sistemática reflexión sobre la situación de nuestros países centroamericanos, y un mayor compromiso con nuestros santos mártires y con la Doctrina Social de la Iglesia que ellos vivieron en apretada síntesis.

Por: EWTN Español El Vaticano ha presentado el Logo para el Jubileo del 2025. El comunicado de prensa de la Santa Sede explica que en el logo se encuentran cuatro figuras que representan la humanidad proviente de los cuatro puntos cardinales. Las figuras se abrazan indicando la solidaridad y fraternidad que debe unir a los pueblos. La cruz es signo de fe y de la esperanza que nunca puede ser abandonada. Las olas agitadas indican que la peregrinación de la vida no siempre se mueve en aguas tranquilas y las dificultades requieren con mayor intensidad el llamado a la esperanza. La Cruz que se prolonga en forma de ancla se impone al movimiento de las olas. Cabe destacar que el ancla se ha utilizado a menudo como metáfora de la esperanza.

10 de julio de 2022

ÁNGELUS

Plaza de San Pedro - Domingo, 3 de julio de 2022

En el Evangelio de la Liturgia de este domingo leemos que “el Señor designó a otros setenta y dos [discípulos] y los envió de dos en dos delante de él a todas las ciudades y lugares a los que iba a ir” (Lc 10,1). Los discípulos son enviados de dos en dos, no individualmente. Ir en misión de dos en dos, desde un punto de vista práctico, pareciera tener más desventajas que ventajas. Existe el riesgo de que los dos no se lleven bien, de que tengan un ritmo diferente, de que uno se canse o enferme por el camino, obligando al otro a detenerse también. En cambio, cuando uno está solo, parece que el viaje se hace más expedito y sin obstáculos. Sin embargo, Jesús no lo piensa así: no envía solitarios delante de él, sino discípulos que van de dos en dos. Preguntémonos: ¿cuál es la razón de esta elección del Señor? La tarea de los discípulos es ir por delante a las aldeas y preparar a la gente para recibir

Se pueden hacer planes pastorales perfectos, poner en marcha proyectos bien elaborados, organizarse hasta el más mínimo detalle; se pueden convocar multitudes y disponer de muchos medios; pero si no hay disponibilidad para la fraternidad, la misión evangélica no avanza. Una vez, un misionero contó que se había ido a África junto con un hermano de comunidad. Sin embargo, al cabo de un tiempo se separó de él, quedándose en una aldea donde llevó a cabo con éxito una serie de actividades de construcción para el bien de la comunidad. Todo funcionaba bien. Pero un día tuvo un sobresalto: se dio cuenta de que su vida era la de un buen empresario,

¡siempre entre obras y papeleo! Pero… y el “pero” se quedó allí. Entonces, dejó la gestión en manos de otros, a los laicos, y volvió con su hermano. Así comprendió por qué el Señor había enviado a los discípulos “de dos en dos”: la misión evangelizadora no se basa en el activismo personal, es decir, en el “hacer”, sino sobre el testimonio de amor fraterno, incluso a través de las dificultades que conlleva convivir con otro.

V OZ DEL P APA

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

a Jesús; y las instrucciones que Él les da no se refieren tanto a lo que deben decir, sino a cómo deben ser, es decir, no acerca del “guion” che deben decir, no, sobre al testimonio de vida, el testimonio que han de dar más que a las palabras que han de decir. De hecho, los llama obreros: es decir, están llamados a trabajar, a evangelizar por medio de su comportamiento. Y la primera acción concreta con la que los discípulos llevan a cabo su misión es precisamente la de ir de dos en dos. Los discípulos no son ‘francotiradores’, predicadores que no saben ceder la palabra a otro. Es ante todo la vida misma de los discípulos la que anuncia el Evangelio: su saber estar juntos, su respeto mutuo, su no querer demostrar que son más capaces que el otro, su referencia unánime al único Maestro.

Así que podemos preguntarnos: ¿cómo llevamos la buena noticia del Evangelio a los demás? ¿Lo hacemos con espíritu y estilo fraterno, o a la manera del mundo, con protagonismo, competitividad y centralidad en la eficacia? Preguntémonos si tenemos la capacidad de colaborar, si sabemos tomar decisiones juntos, respetando sinceramente a los que nos rodean y teniendo en cuenta su punto de vista, si lo hacemos en comunidad, no solos. En efecto, es sobre todo así como la vida del discípulo deja traslucir la del Maestro, anunciándolo verdaderamente a los demás. Que la Virgen María, Madre de la Iglesia, nos enseñe a preparar el camino del Señor con el testimonio de la fraternidad.

Francisco en podcast reflexiona sobre su vida personal “Mi corazón es un depósito, está lleno de cosas que guardo. Tengo que ampliar las estanterías a cada rato. En eso soy medio ‘coleccionista’ en el buen sentido de la palabra, no quiero perder nada de lo bueno que la gente me da. La gente te gratifica tanto, con ejemplos, con palabras, con uno o dos hechos. El cura está para enseñar a la gente, pero yo creo que es mucho lo que aprendemos de la gente si los miramos”. Así comienza la entrevista que el Papa Francisco concedió al presbítero argentino Guillermo Marcó, quien fuera el encargado de la Oficina de Prensa del Arzobispado bonaerense mientras Bergoglio era arzobispo. 22 minutos de la charla, que duró una hora y media en total y tuvo lugar el 9 de junio, fueron publicados el domingo 3 de julio en “Marcó tu semana, de la tele a las redes”, el podcast producido por Marcó. El coloquio se centró en cuestiones más personales del Pontífice: su vida espiritual, su etapa fuera de la Argentina natal; no se abordan asuntos coyunturales. Al ver que todos estos temas eran tratados en otros medios, prefirió hablar sobre tópicos “de la vida más simple”, planteándole “preguntas que yo muchas veces me hago, porque cuando conocés a alguien, sabés cómo vivía, sabés cómo rezaba”, puntualizó el exportavoz en la presentación de su podcast.

Por: VaticanNews

DIRECTORIO

Pbro. Edwin Henríquez Director

Pbro. Carlos Chavarría Colaborador

Pbro. Simeón Reyes Editor

Daniel González

Diseño y Corrección

10 de julio de 2022

Santo Evangelio según San Lucas 10, 25-37 del Domingo 15º del Tiempo Ordinario En aquel tiempo, se presentó ante Jesús un doctor de la ley para ponerlo a prueba y le preguntó: “Maestro, ¿qué debo hacer para conseguir la vida eterna?” Jesús le dijo: “¿Qué es lo que está escrito en la ley? ¿Qué lees en ella?” El doctor de la ley contestó: “Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu ser, y a tu prójimo como a ti mismo”. Jesús le dijo: “Has contestado bien; si haces eso, vivirás”. El doctor de la ley, para justificarse, le preguntó a Jesús: “¿Y quién es mi prójimo?” Jesús le dijo: “Un hombre que bajaba por el camino de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos ladrones, los cuales lo robaron, lo hirieron y lo dejaron medio muerto. Sucedió que por el mismo camino bajaba un sacerdote, el cual lo vio y pasó de largo. De igual modo, un levita que pasó por ahí, lo vio y siguió adelante. Pero un samaritano que iba de viaje, al verlo, se compadeció de él, se le acercó, ungió sus heridas con aceite y vino y se las vendó; luego lo puso sobre su cabalgadura, lo llevó a un mesón y cuidó de él. Al día siguiente sacó dos denarios, se los dio al dueño del mesón y le dijo: ‘Cuida de él y lo que gastes de más, te lo pagaré a mi regreso’. ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del hombre que fue asaltado por los ladrones?’’ El doctor de la ley le respondió: “El que tuvo compasión de él”. Entonces Jesús le dijo: “Anda y haz tú lo mismo”.

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