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TU LECTURA DEL LUNES

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Para saber más

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Algún tiempo antes de la boda hay que repartir las invitaciones. El rey llama a sus criados para que vayan a todas las casas a entregar en mano las invitaciones. Es muy importante que todos reciban la invitación personalmente. ¿Qué ocurrió cuando los criados llevaron las invitaciones a los invitados? (Lee Mateo 22:3)

¿Te lo puedes creer? ¡Hay gente que no quiere ir a la boda del príncipe! ¡Hay gente que no quiere estar en la mayor fiesta que se va a celebrar en el reino! Seguramente que el rey se sentiría muy triste. Lo está preparando todo con tanta ilusión y cariño y esos invitados no quieren ir a pasárselo bien. Jesús también nos invita a su fiesta en la Tierra Nueva. Ahora tú puedes elegir entre aceptar la invitación o rechazarla. A Jesús le gustaría muchísimo que aceptaras, pero no te va a obligar a ir si tú no quieres. ¿Qué te gustaría hacer?

• Elige qué camino quieres seguir en el laberinto. Siguiendo cada flecha podrás componer una palabra distinta que describe la meta. ¿Cuál de los dos finales encontraremos en la Tierra Nueva?

Para los padres

Explicadle lo bueno y lo divertido que será vivir en la Tierra Nueva. Hay niños que no tienen ilusión de vivir allí porque creen que será muy aburrido. Reflexionad sobre como transmitís, en la vivencia del día a día, esa ilusión.

Para los padres

Comentad con vuestros hijos qué cosas de su día a día son más importantes para ellos. Intentad hacer una lista de prioridades. Por ejemplo, cuánto es de importante es ver la televisión, hacer los deberes, alimentarse, dormir, pasar tiempo con los amigos, pasar tiempo con los padres, salir al parque…

Pero el rey insiste. Los preparativos de la boda siguen adelante. Tiene preparada la comida y el salón. Ha contratado a los camareros. Es el día más importante para su hijo. El rey quiere que todos sus invitados disfruten de la fiesta. Así que envía otra vez a sus criados con otras invitaciones.

Les dice:

—Ya sé que antes me dijiste que no podías venir a mi fiesta, pero ya lo tengo todo preparado. La comida va a estar buenísima y la fiesta será muy divertida. A lo mejor has cambiado de opinión y ahora sí que quieres venir.

Jesús siempre espera que nos lo pensemos mejor y cambiemos de opinión. Dios, al igual que el rey de la parábola, nos invita una y otra vez. Él quiere que estemos con él celebrando el regreso de Jesús.

Pero los invitados de la parábola son unos desagradecidos. ¿Qué hicieron? (Lee Mateo 22:5).

En la historia, tal como la cuenta Lucas, los invitados les dicen a los mensajeros que están muy ocupados y que no pueden ir a la fiesta del rey. ¿Qué es más importante que ir a la boda del príncipe?

Para uno de los invitados, ir a ver unos campos que se ha comprado; para otro probar a ver si los bueyes que se ha comprado son buenos para labrar la tierra; para otro, es que está muy cansado porque se acaba de casar y ya ha estado de fiesta. Todas esas cosas son muy necesarias, pero ¿tú qué habrías hecho? ¿Qué es más importante para ti?

• Descubro la Biblia... y encuentro a Jesús.

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