Es mucho lo que se ha dicho sobre cómo la pande- mia de coronavirus cambió las dinámicas del sector. Los establecimientos gastronómicos han sido lentos en temas de transformación digital, hasta que llegó la COVID-19. Algunos dicen que en nueve meses las cosas se aceleraron tanto que hubo un avance en temas de tecnología de entre tres y diez años. Las tendencias para este año muestran, precisamente, ese panorama. Entre ellas, en La Barra escogimos una como la más importante y que, seguro, dará mucho de qué hablar: las marcas o restaurantes digitales. Es la evolución del concepto de cocinas ocultas. Se trata de negocios que nacieron ocultos y que funcionan desde un mismo lugar, algo que permite agilidad: un restaurante se puede abrir en un mes y mientras funciona, se pueden hacer las pruebas del menú. Durante el cofinamiento, aparecieron marcas totalmente digitales, otras que ya existían se consolidaron y otros más encontraron la oportunidad de lanzar nuevos conceptos que siempre se habían soñado. Foodology, es