Historia Lola Guerrero Masiá
de un
Ilustrado por
Laura Díez
disfraz
E
sta es una historia que empezó de repente,
como ocurren las cosas importantes de la vida… Todo parecía normal, y como casi siempre, los mayores estábamos demasiado ocupados para prestar atención a lo importante, o a lo mejor nos daba tanto miedo que no lo queríamos ver… como cuando te tapas la cara en una peli de miedo.
¿Te ha pasado alguna vez?
Ibas al cole, como siempre, jugabas con tus amigos, compartías chuches, unas veces te enfadabas y otras te abrazabas con tus amigos y amigas y compartías cromos con todos. Tus papis iban y venían del trabajo. Seguro que veías mucho a tus abuelitos o yayos, o a tus primos, y hacías fiestas de pijamas. Y seguro que alguna vez hasta te escaqueabas y no te lavabas las manos antes de comer… ¿A que sí?
Seguro que cuando protestabas porque la crema de calabacín no te gustaba, y decías eso de «pues yo no ceno», tus papás te recordaban que era una suerte tener comida, porque había nenes que no tenían comida o tenían muy poquita… Pero pasaba una cosa, ni tú ni yo conocíamos a esos nenes. «Esas son las historias de los papás, o cosas que salen en la tele», pensábamos.
Resulta que nuestra historia, la tuya y la mía era chuli, chuli, solo por salir al parque, por ir al Polifilo, por patinar, por ir a Taekwondo; chuli porque jugábamos fuera de casa (porque tenemos una casa), porque podíamos ver y abrazar a nuestros abuelitos y yayos y comer con ellos, hacer un picnic con nuestros amigos y salir a la montaña. Pero no nos dábamos cuenta de que nuestra vida era muy chuli…
Cada uno de nosotros, de esos niños muy altos que nos llamamos papás…., nos poníamos cada mañana «nuestro
DISFRAZ», que no teníamos
de pequeñitos, pero que al hacernos altos hemos
ido cosiendo poco a poco, cada día, tanto tanto lo hemos cosido que ya no nos lo podíamos quitar. ¿Te imaginas un disfraz que no se pueda quitar?
¿Y para qué sirve este disfraz? ¿Se os ocurre algo? Pues os voy a contar un secreto… Shhh, ¿me prometéis guardar el secreto? Este disfraz sirve para «parecer que somos mayores». Y es muy importante para nosotros, porque en el fondo somos igual que vosotros, pero alguien nos dijo que teníamos que saber de todo y mostrarnos seguros y fuertes (aunque no sé para qué). Así que cada noche desaparece y cada mañana amanecemos con él, como por arte de magia. Es curioso, ¿verdad?... Pero os voy a contar más.
TO CUEN S PAR
ALARGAR
¿Te atreves a descubrir de qué está hecho tu disfraz?
ISBN 978-84-18996-00-9
9 788418
996009
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