El derecho a ser diferentes Cuentos y Poemas que acercan
Cuentos y Poemas escritos por alumnos de Quinto grado resaltando el derecho de las personas a ser diferentes unas de otras, y al mismo tiempo, su derecho a ser tratadas como iguales ante la ley.
Poema 1 Todos los niños tenemos derechos. Todos los niños tenemos un futuro por delante. Todos los niños tenemos derecho a un ambiente saludable. Los niños debemos ser felices. Los niños no debemos trabajar. Los niños debemos estudiar. Necesitamos que nos cuiden. Necesitamos que nos respeten. Necesitamos que nos quieran.
Nicole Yo soy Nicole ando en silla de ruedas y tengo 10 años, estoy por cumplir los once. Ya conté lo más importante. Mañana empiezan las clases, estoy muy nerviosa porque aparte de que tengo buenas notas, quería contar que mis compañeros no me tratan bien, me dicen que parezco un autito humano, que soy una nerd, se suben a mi silla y cosas así. Me acosté a las 21.25hs pensando que pasaría mañana. Me desperté a las 06:30 hs. tomé el desayuno con mi hermana Cristina (tiene 8 años) mi mamá y mi papá. -Hola Nicky ¿Cómo estás? ¿Cómo dormiste? – preguntó curiosa mi mamá. Le afirmé todo a mi mamá y estaba por irme cuando mi papá me preguntó si le había dado de comer al perro, le contesté que sí con la cabeza y me encaminé con mi sillita hacia el baño para ducharme. Luego de cambiarme, preparar los útiles y peinarme me fui con Cristina a buscar a Valeria vecina y compañera de grado. -¡Vale, Vale dale salí! Gritaba mi hermana que se llevaba bien con ella al igual que yo. -¡Valeeee! – no grites ya va a venir-dije mientras intentaba tocar el timbre. -Tocá el timbre vos, que yo no llego- dije. Salió Valeria y nos fuimos a la escuela. La directora dio un sermón y nos fuimos (yo por el ascensor) al aula. No hicimos mucho sólo dibujamos y salimos al recreo. Mayra, Gianluca, Macarena y Lucía conversaron conmigo y al fin me sentí parte del grupo. En el segundo recreo hablé con la profe. Volví a mi casa con una sonrisa y apenas llegué me fui directamente a la cama sin comer, pensando que al fin me habían prestado atención que era lo que yo quería.
Poema 2 Tengo derecho a que me respeten sin importar mi color de piel, religi贸n o idioma.
Tengo derecho a que me protejan de cualquier forma de explotaci贸n o abuso.
Tengo derecho a decir lo que pienso y lo que siento.
Tenemos derecho a recibir amor y que me traten bien.
Tengo derecho a ser amado y cuidado, a so帽ar y pensar lo que quiero ser. Tengo derecho a jugar y a divertirme en un ambiente sano.
Talento escondido Su nombre es Bautista, está en la secundaria…nadie le habla y suelen burlarse de él muy seguido. Es muy buen alumno, le gusta leer y se saca muy buenas notas. Bautista siempre le contaba a su madre lo que pasaba, pero ella lo consolaba diciéndole que tal vez actuaban así por celos. Le encanta la música por eso se inscribió a un concurso luego de escuchar la propuesta del profe de música. Bauti se sintió feliz por fin podía ser él mismo. Llegó el gran día todos se quedaron admirados de escuchar a Bautista. Al terminar todos lo felicitaron por su talento, Bau estaba súper nervioso. Desde ese día algo cambió no hubo más burlas ni cargadas. Todos fueron un mismo grupo.
Solitaria En un pueblo lejano vivía una niña llamada Priscila, a quién dejaban de lado en la escuela por ser inteligente. Un día en el recreo, todos jugaban al rancho podrido (huevo podrido). Ella se acercó para jugar y le dijeron “Vos no jugás nada”, se fue corriendo al aula llorando. Cuando salió del cole y llegó a su casa le dijo a sus padres “No quiero ir más a la escuela” Ellos le contestaron “Hija debes ir para seguir aprendiendo”. Priscila se fue triste a dormir…comenzó a soñar que estaba en un parque con todos sus compañeros se sentía importante y querida. Se despertó con ganas de ir al cole después de ese maravilloso sueño…
Poema 3 Tenemos derecho a… Jugar, ir a la escuela, recibir atención médica cuando la necesitemos. A saber quiénes somos, a que no nos maltraten, a no ser discriminados, a recibir alimento.
¡Basta de maltrato! No nos tienen que lastimar porque a nosotros nos duele y nos pueden matar.
Con pelotas y muñecas nos gusta jugar y ese derecho no nos lo pueden sacar.
Aquí ven esta estrofa que la escribí yo aprendí en la escuela y por mis derechos voy.
Bullying no!!! En un colegio había una nena llamada Jazmín, le hacían bullying porque le gustaba mucho la ciencia. Un día en el recreo estaba leyendo un libro de Ciencia astronómica, cuando se le acercaron tres compañeras y le dijeron -¡Ah, acá está la nerd de la clase!, Jazmín se levantó y se fue corriendo hacia un rincón, mientras lloraba, las demás se reían. Volvía su casa por el camino más largo para no encontrarse con ellas. Llegó a su hogar y fue directo a cama llorando. Sus padres le preguntaban qué le pasaba y ella nada les contestó. Al día siguiente la niña se escapó de su casa para no ir a la escuela. Al irse se perdió y le pidió ayuda a un hombre para regresar él le preguntó porque se había escapado ella le pidió que se sentara que era una larga historia. Cuando el señor comprendió todo le dijo “Bueno, te voy a llevar”, ella no se dio cuenta que la estaba acompañado hasta la escuela y continuó diciéndole “todo lo que a vos te pasó yo también lo viví pero a diferencia tuya no me escapé sino que dejé todo lo que me gustaba y me hice como ellas querían. Te pido que no hagas lo mismo seguí tus propios sueños” Cuando llegaron Jazmín entendió lo que escuchó, se despidió de él y entró corriendo a la escuela. En el recreo terminó el libro que había comenzado y otra vez se le acercaron las compañeras para fastidiarla, pero ella recordó lo aprendido y les dio importancia. Se levantó y se fue sin decir nada.
Amigas… Estella tenía trece años, durante los recreos estaba sola, sólo dibujaba mientras sus compañeros se burlaban de ella. Conoció a Anabella después de un tiempo se hicieron mejores amigas, Anabella era la única que no la molestaba. El resto de los chicos y chicas reflexionaron y se dieron cuenta que no estaba bien burlarse de alguien por su apariencia. Estela aceptó su perdón. Todos disfrutaron jugando en los recreos. Los padres de Estella por suerte ya no estaban más preocupados por lo que vivía su hija y por lo triste que estaba por no tener amigos. Y hablando de amistad Estella y Anabella no dejaron de ser amigas y van a serlo seguramente por siempre.
Lección aprendida… Tres chicas llamadas Antonella, Milagros y Victoria, eran amigas y tenían once años. Anto usaba lentes y brackets, Mili era de piel morena y Vicky un poco gordita. Un día fueron a la escuela y la mayoría de los chicos comenzaron a burlarse de ellas diciéndoles cosas poco amigables. Victoria decidió hablar con la maestra contándole que ella y sus amigas ya no soportaban esa situación. La seño conversó también con la directora de la escuela y juntas se acercaron a clase para dialogar con los chicos del grado, los invitaros a realizar diferentes carteles sobre la discriminación sobre qué es el bulling. Al finalizar la actividad todos lograron darse cuenta que lastimar a alguien no está bien y es por eso que se disculparon ante las tres chicas burladas. Al día siguiente al ingresar a la escuela se saludaron… y como tiene que ser por sus nombre ¡Hola Antonella, Milagros y Victoria!
Un chico muy especial Había una vez un chico llamado Martín, él nació sin una pierna. Cuando iba al colegio lo molestaban diciéndole “Chico sin pierna o rueditas”, en especial lo cargaba una niña llamada Lucía. Siempre que salía de la escuela le contaba a su mamá quien lo conversaba con la profesora. Martín se sentía cansado de que nadie hiciera algo por él, de que su seño creyera que sus compañeros eran unos santos y que todo lo que sucedía era mentira. Martín quería una seño distinta que realmente le importara lo que a él le estaba sucediendo. Conoció a una nueva profesora quién le preguntó ¿Martín y a vos que te gustaría hacer? Él le respondió “Jugar al fútbol”. La seño hizo todo lo posible para que Martín pueda operarse hasta le dijo que probara suerte en el bingo familiar de la esquina! Martín logró juntar el dinero, se operó y pudo cumplir su sueño de jugar al fútbol con sus amigos.
Tiempo de cambios Maia tenía cinco años de edad cuando tuvo un accidente automovilístico, su columna quedó dañada es por eso que debe usar silla de ruedas. Sus compañeros de la escuela se reían de ella porque era la única en el grado que tenía esa dificultad. Brisa que era su mejor amiga, dejó de serlo. Maia siempre que contaba algo a alguien de la escuela lo usaban en su contra. La maestra veía todo lo que sucedía, conversaba con todos para que cambien sus actitudes pero no había cambios, seguían molestando. La madre de Maia también tomó medidas en principio habló con los padres.. .pero continuaban burlándose. L señora tomó una decisión terminante cambiarla de escuela. En su primer día de clases Maia estaba súper nerviosa, la recibieron bien la aceptaron tal cual es y eso la hizo feliz. Le encantó el colegio y por supuesto quiso quedarse.
¡Hacé valer tus Derechos! - Recibir alimentación, atención adecuada y una vivienda digna. - No sufrir discriminaciones. - Opinar y ser escuchados. - No ser explotado económicamente. - Que nadie haga con nuestro cuerpo cosas que no queremos. - Recibir educación. - Tener nombre, una nacionalidad y una familia. - Crecer en libertad. - Jugar, descansar y practicar deportes. - Tener libertad de pensamiento y de religión. - Participar en la vida cultural y artística.