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LAS MANOS DE FILIPPI

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Juan Hang

Juan Hang

Hay pocas bandas con un background y contenido tan interesante como el de Las Manos de Filippi. Con 30 años de recorrido y una vigencia total, la agrupación porteña logró generar desde la independencia un camino propio que los posicionó como artistas de culto. La lucha social y su expresión en la música son marca registrada de Las Manos plasmando a lo largo de su discografía una mirada crítica al sistema y a los gobiernos de turno. El 2023 los encuentra encarando una gira europea, grabando nuevo material y tocando con distintas formaciones. Para conocer un poco más de su actualidad, pero también de su trayectoria, nos encontramos en una charla con El Cabra –cantante y fundador de la banda-, en la que nos comparte su visión de la realidad.

POR DAMIÁN LEVENSOHN

¿Creés que una banda como Las Manos podría existir en un país estable donde la crisis social no es lo habitual como en nuestro país?

Habría que ver cómo es nacer en un país como Suiza, para nosotros es inimaginable. Igual, si tenés un poquito de conciencia social más allá de tus fronteras, creo que por más que estés en Suiza, tenés que ser consciente que en un país lejano como Argentina pasan cosas terribles.

Durante los 30 años de recorrido, mayormente han elegido el camino de la independencia ¿Cómo fueron llevando ese proceso?

Nunca fuimos fundamentalistas de la independencia, siempre tratamos de trabajar de la mejor forma que se pudo en cada momento. Cuando arrancamos tuvimos ofertas para firmar con compañías, lo hicimos y fueron malas experiencias. Con el correr del tiempo fuimos armando nuestro camino desde el lado independiente, después fue todo más natural.

No es un fin para nosotros ser independientes, el fin es seguir adelante con el proyecto. En ese sentido estamos muy contentos con los logros obtenidos en este camino.

¿Cuál es la actualidad de la banda en cuanto a formación y en lo sonoro?

Estamos con un par de formaciones. La banda completa es super power, este año incorporamos dos guitarras -Karim Benegas y Gabi Kerman, que son los más jóvenes-, es un formato re contra rockero. También tenemos “Susbsiten” que es con el que vamos a Europa, sin guitarras, más electrónico. En el estudio grabando nuevo material, queremos sacar un EP de cumbia. Karim produce trap así que también queremos hacer algo de eso. Hace un tiempo trabajamos con El Doctor, es una forma de apoyar a las nuevas generaciones de músicos, nos gusta. Yo estoy más cerca de Jovanotti que del Doctor (risas). Nos gusta investigar…

Si tenés conciencia social más allá de tus fronteras podés entender que pasan cosas terribles

Están a punto de encarar una nueva gira por Europa. ¿Cómo fueron las experiencias anteriores allá?

Esta va a ser la séptima gira en Europa, cada vez se van fortaleciendo más los contactos y el público también. Es la primera que hacemos post pandemia -antes hicimos 5 giras consecutivas-, la pandemia nos paró un poco el envión, así que esta gira viene cargada de más expectativas, es como un regreso.

Alemania es donde más hemos tocado en las giras anteriores, las primeras veces teníamos nuestras dudas, pensando que nuestro público se engancha más que nada por las letras, pero era una fantasía nuestra. Nos dimos cuenta que la gente disfrutaba igual con la música y la energía de la banda.

¿Tienen público mayormente hispanohablante en los shows europeos?

En Alemania hay pocos latinos, pero los alemanes que van son gente que ya fue a vernos. También está el caso de los que vienen por primera vez, después de investigar por Internet de qué se trata la banda. Es bastante nerd…

Hace poco presencié un show de Las Manos y es muy notoria la energía que generan ¿Cómo vivís en lo personal la performance del vivo?

El escenario para mí es como cuando te paras frente al espejo del baño y haces todo lo que no harías, esa sensación me la da el escenario. Trato de expresar no solo con la palabra sino también con el cuerpo, es una especie de diálogo total, imagino que eso en un país donde no saben que estamos diciendo debe tomar más importancia.

¿Cómo van encontrando nuevas motivaciones con el paso del tiempo?

Vamos creciendo y adaptándonos. Una forma de no aburrirnos es encontrando cosas nuevas todo el tiempo. Personalmente siento que hay algo que aprendí en cada show. Además, nunca estudié música, todavía siento que tengo mucho por aprender y me tomo los shows como un momento para encontrar cosas nuevas de las que disfrutar.

Entre otras cosas, la obra de Las Manos se caracteriza por tener cierto tono de humor ¿Qué consumís vos en cuanto a humor?

Me gusta mucho Leo Masliah, de chico me gustaba Les Luthiers, Los Twist. Me gusta el humor irónico, esas cosas que algunos no se dan cuenta que son humorísticas.

Flashie cuando aparecieron Chachacha y Todo x $2, que la gente grande no los entendía muy bien.

En el año 2009 tocaron en Honduras para cien mil personas en contexto de Estado de Sitio ¿Cómo fue esa experiencia?

Fue una experiencia muy fuerte. Fuimos invitados a tocar en un festival contra el golpe de Estado en Honduras. Había estado de sitio, llegar fue toda una aventura. El festival era dentro de una universidad, por eso había esa cantidad de gente, en la calle no se podía juntar nadie. Hemos tocado en festivales con mucha gente, pero la diferencia ese día, es que las cien mil personas eran un bloque, todos unidos contra el golpe. En un festival normal cada uno está en su mundo. En la previa al viaje nos trataban de explicar lo que sucedía, pero costaba entender. Fue cuestión de llegar, hablar con un par de personas que lo estaban viviendo y entendimos a fondo la situación que nos rodeaba.

Más allá de la conexión global, pasa mucho de creer que entendemos lo que pasa en otro lado, pero no es tan así…

Uno puede hablar por lo que escucha, pero es muy diferente vivirlo, creo que te soltas, podes sacar conclusiones, intercambiar ideas. Sino dependes de lo que te contaron.

Desde tu visión ¿qué marcarías como identitario del ser argentino?

Veo algo muy positivo que sucede acá y no veo en otros países de Latinoamérica, hay una historia de lucha y organización sindical sobre los derechos de los trabajadores. Si bien muy pocos trabajadores tienen esos derechos en la actualidad, hay una conciencia de que eso es algo por lo que hay que luchar. Hay países que no tienen ni idea de eso.

Por otro lado, acá todavía no está tan naturalizada la muerte, hemos estado en países donde todos los días matan a un joven, y si bien acá pasa, la gente reacciona. Le encantaría a los que nos gobiernan que sea de otra forma, pero la experiencia acá es otra, lo dejó claro cuando asesinaron a Mariano Ferreira o la reacción hace poco con la nena en Lanús. Es algo que a la gente todavía le asombra, sale a la calle y se pronuncia.

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