Si no hacemos arte para la vida, entonces para lo hacemos Fernando Pertuz
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El arte, asĂ como todas las profesiones, debe estar al servicio de la humanidad
introducciรณn
Nuestras acciones y hábitos tienen consecuencias en nosotros, en los demás y en el medioambiente que habitamos. Hoy es evidente que somos responsables de los problemas ambientales que han surgido como consecuencia de nuestras acciones. Para resolverlos, debemos comenzar por establecer de otra manera nuestra relación con el mundo, por esto, algunas comunidades se han comprometido a tratar, administrar y conservar los recursos naturales de forma responsable y sostenible. Si sumamos esfuerzos para hacer de este compromiso un hábito, una cultura de todos, podremos gozar de un ambiente de convivencia, así́ como mejorar el manejo y la reutilización de los desechos, promover el uso racional del agua y la protección de nuestros recursos naturales y del medio ambiente. El arte como principal instrumento pedagógico permite la reflexión y la transformación de nuestras acciones. Es una herramienta eficaz que garantiza el aprendizaje significativo, transforma la manera de pensar y de sentir, y logra modificar el comportamiento humano. Creemos que, mediante el fortalecimiento de la cultura ambiental en las organizaciones, las instituciones educativas y la población en general, hacemos frente a los problemas ambientales. En este sentido, el programa “El arte para el fomento de la cultura ambiental” de la Dirección de Cultura Ambiental y Servicio al Ciudadano de la Corporación Autónoma Regional-CAR, apunta a generar estrategias de concientización de los efectos de nuestras acciones en la naturaleza para el fomento de hábitos responsables en el marco del desarrollo humano sostenible. Le apostamos a una pedagogía del arte porque su carácter experiencial genera espacios de reflexión, creación y transformación del mundo, y porque creemos que los artistas de nuestro territorio pueden trabajar en convivencia armónica con la naturaleza.
Lenguajes artĂsticos
y sus
especificidades
Con el fin de cumplir con nuestras responsabilidades y de acuerdo al objetivo general, cada uno de los lenguajes artísticos se encarga de hacer procesos de creación para el planteamiento, desarrollo y finalización de productos (obras teatrales, piezas plásticas, textos literarios, etcétera.), y de la posterior divulgación y promoción de dichas obras en el territorio CAR. A cada lenguaje artístico le corresponde una estrategia de intervención que deberá ejecutarse en un número determinado de municipios. Para el proceso de creación se proponen dinámicas en las que, a partir de las sensaciones, los intereses, las emociones y las habilidades de los participantes de los talleres, se construya una pieza artística que evidencie las problemáticas ambientales del territorio y promueva soluciones. Desde
la estrategia “El arte para el fomento de la cultura ambiental”, se reconocen cuatro lenguajes artísticos: el arte plástico, la literatura, las artes escénicas y las ecomanualidades, para visibilizar las relaciones entre el ser humano y los recursos naturales generando un cambio en las prácticas, actitudes de apreciación y respeto hacia la naturaleza,. Estos lenguajes, además de ser herramientas o estrategias pedagógicas para fomentar el conocimiento y la protección ambiental, posibilitan aprendizajes propios de su práctica que enriquecerán los procesos de los artistas del territorio. Se escogen estos cuatro por hacer parte de las principales manifestaciones culturales del territorio y por tener fundamentos artísticos y metodologías pedagógicas eficaces y comprobadas por la práctica educativa.
Componentes
de la Actividad
2.4.1
Artes
Plásticas
El componente de Artes Plásticas se caracteriza por el trabajo creativo con múltiples materiales y objetos. En estas obras, por un lado, se materializa la subjetividad de los individuos creadores, al tiempo que se generan objetos artísticos con materiales resignificados por medio de la transformación, reinterpretación, reconfiguración o la articulación con otros objetos, con el fin de generar un discurso ambiental. Es importante aclarar que en las obras o trabajos artísticos se debe reflejar el uso de materiales, medios y técnicas coherentes con los principios de la Corporación.
Las técnicas propias de las artes plásticas permiten una exploración amplia de los procesos que llevan a consolidar un discurso o concepto, que se va robusteciendo con el manejo coherente de la materia hasta el producto final u obra. Este proceso, parte fundamental de la creación artística, permite la incorporación del concepto ambiental para quien propone o crea la pieza artística como para quien la contempla o hace parte de ella.
Artes
Escénicas El componente de Artes Escénicas se define principalmente por su carácter de acontecimiento convivencial. Es decir, por la relación creativa y efímera entre artistas y público en un tiempo y en un espacio determinados. Esta interacción establece un lazo comunicativo que facilita la identificación, a modo de espejo, entre la representación teatral y los problemas ambientales propios del territorio. El teatro se basa en la representación de los arraigos culturales de un pueblo, que ha permitido la recreación de sus realidades cotidianas, y al mismo tiempo logra establecer una comunicación fantasiosa y reflexiva con la misma. Se desarrolla a partir de un vínculo de experiencias entre el espectador y el actor, permitiendo la interacción de sensaciones y emociones que incite la atención de la audiencia. Lograr un trabajo consciente con la comunidad a intervenir, e incentivar un semillero pedagógico por medio de las artes escénicas, permitirá generar un impacto muy significativo en el aprendizaje artístico expresivo teatral, ayudando a construir herramientas comunicativas acertadas y cualitativas.
Literatura
La característica principal del componente de literatura es que el trabajo creativo consiste en la manipulación estética de la palabra escrita. La lengua, materia del pensamiento y la comunicación, tiene unas cualidades específicas que permiten ciertos tratamientos artísticos que le confieren capacidades pedagógicas. La construcción de ficciones que evocan nuestra propia realidad nos permite formular preguntas críticas y abrirnos a reflexiones acerca de nuestras condiciones en el mundo que habitamos. Es allí donde la escritura creativa juega un papel fundamental en el desarrollo de una cultura ambiental sostenible. Permite al escritor y al lector el tránsito por mundos similares o ajenos al nuestro; mundos donde se materializan los paraísos y los apocalipsis, las utopías y distopías; mundos cuya luz o sombra nos sirve para iluminar nuestra situación actual y tomar las acciones necesarias para garantizar el desarrollo humano y natural de manera sostenible. La multiplicidad de géneros literarios permite la experimentación de diversas estrategias creativas. Unas son propias de la introspección, como la poesía o la autobiografía; otras se construyen en el diálogo con el otro o a partir de la investigación, como la crónica, la dramaturgia, etcétera. Pero sin duda todos procesos de escritura creativa están abierto a romper las estructuras tradicionales y experimentar con el lenguaje y la forma.
Ecoarte Es una práctica que a partir de la década de 1980 propone producir artefactos útiles y/o decorativos, elaborados a mano y con materiales reciclados o reutilizados, generalmente obtenidos del lugar donde serán reconstruidos. Estos materiales se someten a procesos de manufacturación que les dan una nueva utilidad, imprimiéndoles, además, valores simbólicos e ideológicos de la cultura local, de modo que se convierten en vehículos para transmitir mensajes de protección ambiental. En el marco de estos lineamientos, la meta 2.4.1 formuló el Concurso de Arte Espeletia, cuyo proceso aborda integralmente cada uno de los procesos anteriormente enunciados:
Espeletia es un concurso de arte que tuvo como propósito potenciar la creación artística a través de procesos de formación para generar un cambio de hábitos y fortalecer la cultura ambiental entre la comunidad artística de 98 municipios del departamento de Cundinamarca, 6 del departamento de Boyacá y la zona rural del Distrito Capital de Bogotá D.C. En la primera versión del concurso participaron instituciones educativas, escuelas de formación, juntas de acción comunal, grupos, colectivos, artistas y demás personas de la comunidad que tenían interés por el arte ambiental. En correspondencia con las iniciativas locales y regionales, fue una estrategia que aportó a la mitigación de las problemáticas ambientales más sentidas en el territorio: cambio climático, manejo integral de residuos, protección de flora y fauna y protección de páramos y humedales. Los inscritos al concurso podían aproximarse a dichas problemáticas a través de uno de los siguientes lenguajes artísticos: artes plásticas, artes escénicas o literatura, quienes, además, demostraron un enfoque coherente con los temas ambientales durante el proceso. En últimas, el desarrollo de los talleres de formación puso en evidencia historias maravillosas de artistas en el territorio que a partir de su experiencia directa con la naturaleza componen canciones, escriben poesía, crean obras de arte, etc.