3 minute read

I Nedgia, hacia la distribución de gas renovable

Nedgia, hacia la distribución de gas renovable

La red de gas de la compañía ya está preparada para poder distribuir gases renovables gracias a las inversiones realizadas en los últimos años y su apuesta decidida por ellos. Un vector, para la distribuidora del grupo Naturgy, clave para el cumplimiento de los objetivos de descarbonización.

En España hay un potencial de gas renovable de unos 137 TWh/año, lo que equivaldría al consumo de 27,4 millones de viviendas o a más del 39 % de la demanda total de gas natural en la actualidad.

En los últimos años, Nedgia ha apostado por la producción de gas de origen renovable a partir de residuos, con el objetivo de avanzar en la descarbonización de la red de gas.

“La mayor parte de este potencial viene del aprovechamiento de residuos agroganaderos (55 %) y de residuos sólidos urbanos (40 %). Podemos aprovechar nuestros residuos e inyectarlos en nuestra red para llegar a todos los usuarios. Es un claro ejemplo de economía circular”, explican fuentes de la compañía.

Clave para el nuevo modelo energético

La distribuidora de gas perteneciente al grupo Naturgy posee una de las infraestructuras más modernas y mejor gestionadas de Europa a día de hoy, y permite llegar a más de 5,5 millones de clientes en todo el país.

“Esto hace que seamos clave para conectar proyectos de gas renovable producido a partir de todo tipo de residuos, pero también en un modelo energético de transición,

en el que, a partir del gas, también se puede producir hidrógeno y en el que sigue siendo importante acercar la energía al punto de consumo”, argumentan desde la empresa.

De hecho, a principios de este año, Nedgia marcaba un hito en la transición energética de España, al convertirse en la primera empresa en inyectar gas renovable procedente de vertedero en la red de distribución.

Esta planta de gas renovable está situada en el Parc de l’Alba de Cerdanyola del Vallés (Barcelona), junto al vertedero de residuos Elena, y de forma anual se prevé que produzca -según datos de la compañía- 12 GWh/año de biometano”.

“Esto equivale -aclaran- al consumo anual de 3.200 hogares, y evitará la emisión a la atmósfera de 2.400 toneladas de CO2/año, una cantidad equivalente a plantar unos 5.000 árboles”.

El biometano o gas de origen renovable es intercambiable con el gas natural: “Hoy en día, ya puede inyectarse en nuestra red y distribuirse a través de toda la infraestructura gasista existente y emplearse en el punto de consumo con las mismas aplicaciones energéticas que el gas natural. Es decir, para el consumo en hogares, en industrias, comercios y también para movilidad en el transporte”, detallan estas mismas fuentes.

¿Existe una cultura de ‘biogás’ en España?

El sector gasista en España, igual que el resto de Europa, apuesta por el gas renovable como energía renovable de presente y de futuro.

“Pero -continúan detallando-, y a diferencia de nuestro país, otros países como Alemania, Francia, Inglaterra, Italia o Dinamarca, por citar algunos ejemplos, van más avanzados en la producción de gas renovable porque sus Administraciones reconocen las ventajas medioambientales, pero también económicas y sociales del biometano”.

“Sin duda, el apoyo decidido que están haciendo la Administración de estos países frente a la inacción e incluso el desincentivo en España -sostienen desde Nedgia- es la causa de la gran diferencia existente entre el desarrollo de esta energía verde y su aportación a la descarbonización de la infraestructura gasista en España frente a nuestros países vecinos”.

“¡Solo hay que mirar qué políticas tienen implantadas estos países, y qué políticas tenemos implantadas aquí!”, agregan.

Por hacernos una idea del camino que nos queda por recorrer, y tomando como ejemplo el país germano: En Alemania, existe una gran cultura de biogás y hay más de 11.300 plantas de producción en marcha. De estas, al menos, 300 han evolucionado para inyectar biometano en la red y que pueda ser consumido por cualquier cliente.

Esta tendencia tecnológica en el uso del biogás es una constante en Europa, y el número de plantas de biogás que finalmente inyectan biometano en la red está en continuo ascenso.

Para recorrer este sendero, no solo necesitamos paquetes de ayudas que incentiven el desarrollo de las plantas de biometano, sino también que, a nivel regulatorio, se marquen objetivos nacionales de producción.

“No olvidemos -subrayan desde Nedgia- que somos ya parte de la solución a la descarbonización que exige la actual transición energética”

Imagen de la planta de gas de Nedgia, ubicada en Cerdanyola del Vallés (Barcelona).

This article is from: